MI HIJO Y LA POSVIDA. La Física de la Muerte

 

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Capítulo 12. MATERIA, Y REALIDAD.

Capítulo 12. 2. La naturaleza física de la muerte

Una vez que comprendí el proceso del antes y del después de la muerte, (que ya vimos en el capítulo cinco, el cual recomiendo releer o escuchar) anhelaba saber más del la muerte desde un punto de vista científico, y ello tanto desde una perspectiva amplia como de detalle. Así que inicié preguntas a Erik en este sentido.

 Elisa: Nassim Haramein, un físico que ayudó a desarrollar la teoría del campo unificado, define la realidad de una manera que realmente tiene sentido para mí. Dijo algo que, en particular, despertó mi interés: que hay agujeros negros en los átomos, y hay agujeros negros en casi todo, desde lo infinitamente pequeño hasta lo infinitamente grande. Es decir, esencialmente, vivimos en un agujero negro, y por eso todo lo que vemos en el espacio es negro. Pero si fuéramos al otro lado del horizonte de sucesos, veríamos esa hermosa luz blanca. Por esto, me pregunto si la muerte es solo una cuestión de cruzar el horizonte de sucesos para ir de un agujero negro, a un agujero blanco.

 Erik: Tengo experiencia de primera mano aquí, mamá. Es exactamente así. Permaneces con el cuerpo físico por un tiempo; es como un momento de adaptación. Por así decirlo, no te "succionan" inmediatamente, y eso es exactamente lo que se siente, una succión. Pero puedes ver. Puedes ver. Todavía estás en el plano de la Tierra, y puedes ver a familiares y amigos. Puedes mirar tu cuerpo, y luego hay una sensación de libertad. Sin gravedad. Es una ligereza difícil de explicar. Es como si te absorbiera ese túnel de luz brillante que atraviesa la densidad de la Tierra. Y sales en otro lado, el otro lado. Es bonito. Es, luz.

 Elisa: Así que creo que este tipo tiene razón. Cruzas un horizonte de eventos.

 Erik: Sí, exactamente. Eso es lo que dicen cuando "cruzas el velo". Es un velo muy fino. Es solo un velo delgado que separa esos lados, pero es denso, particularmente hacia la Tierra.


La física de la muerte.

 Elisa: Energéticamente, ¿qué pasa en el momento de la muerte? ¿Le sucede algo al patrón de onda o la frecuencia de nuestra energía? ¿Nuestra energía pasa a un agujero blanco? ¿Qué sucede desde una especie de perspectiva física?

 [Pausa]

 Jamie: (para sí misma): Desde la perspectiva de la física.

 Erik: Bueno, veamos...

 Elisa: Explícalo en términos simples. No tienes que ser más sofisticado en la explicación porque es posible que ni siquiera tú lo sepas, o nosotros no lo entenderíamos aunque tú lo supieras. Así que, ¿qué sucede, energéticamente, al morir?

 Jamie: Erik me muestra un cuerpo que acaba de fallecer, y se ve que la energía se está separando de la materia.

 Erik: La energía se separa de la materia que creó.

 Jamie: La forma en que lo veo en mi cabeza es como l nivel celular, y hay chispas. Casi parece como cuando frotas tus pies en la alfombra, y luego tocas a alguien. y ¡zas!

 Elisa: ¿Y las chispas están en cada célula? ¿Vienen de cada célula?

 Erik: Sí. Escupe, escupe, escupe. Para que así la energía pueda escapar de la materia que creó, y así es como la materia queda atrás. No hay nada como este espontáneo éxodo masivo de, um, como ...

 Jamie: Lo que está diciendo Eric es, casi, más una pregunta. Dice, si la energía abandona el cuerpo, si el alma abandona el cuerpo, ¿por qué el cuerpo no desaparece por completo?

 Elisa: Sí que es interesante la pregunta.

 Jamie: ¿A que sí? Porque era la energía del alma.

 Erik: ¡Bueno, esa es la diferencia! Eso es lo que intento decirte. Existe ese tipo de chispa, ese tipo de separación, y la energía que creó el cuerpo, creó las células, los músculos, los huesos, está dejando todo eso atrás. Esa es toda la idea de la muerte: [la energía creativa] ya no quiere el cuerpo que armó, y en el que prosperó. Por eso se convierte en un caparazón.

 Elisa: ¡Ah, mudando!

 Erik: Porque cuando estás vivo, estás muy conectado en todos los niveles. Eso es prácticamente lo primero que ocurre. Separación instantánea. ¡Zas, rápido! Creo que aquí radica la respuesta a la conocida como combustión espontánea que ocurre a personas cuya energía no pudo dejar atrás sus componentes materiales, por lo que creó chispas tan violentas y tan fuertes que en realidad explotan y se incendian. Estas, son personas que tienen problemas para dejarlo todo. Incluso su cuerpo. Después de esto, la energía se acumula; esta es la energía del alma. Y cuando la energía del alma puede separarse completamente del cuerpo, puede identificarse como espíritu. Y todavía utiliza los recuerdos y la colección de características que creó a lo largo de esa vida que deja, para viajar de regreso a casa.  Y entonces, si crees en el túnel, si crees en el espíritu, los demonios o lo que sea, eso es lo que tienes que atravesar hasta llegar a Casa. Es un proceso que se auto alimenta hasta que llegas a casa, y luego se te puede entregar cierto tipo de verdad.

 Elisa: ¿Qué quieres decir con, "entregar cierto tipo de verdad"?

 Erik: Me refiero a proporcionar al alma que llega una verdad que coincidiría con la comprensión de ese espíritu. En otras palabras, cuando llega el alma, todavía está tan conectada con la comprensión humana que tenemos que plantear conceptos de cierta manera para que se puedan entender. Pero luego, una vez que el espíritu comprende dónde está, y tiene una aceptación más amplia del conocimiento, nosotros podemos alimentarlo con verdades más profundas, verdades y conceptos más amplios, que son más grandes que el cuerpo mismo. Por eso decimos que, cuando mueres, no solo obtienes las llaves de la ciudad. No solo sabes todo instantáneamente, sino que esa velocidad [de conocimiento] depende de tu voluntad. De tu libre albedrío. En términos de tiempo terrenal, a algunas personas les toma años [mientras que] a [otras] les lleva tres minutos. En realidad, no hay nada correcto o incorrecto aquí.

 Elisa: Cuando dices: "nosotros podemos alimentarlo con verdades más profundas", ¿quiénes son esos, "nosotros"?

 Erik: ¡Somos nosotros! Solo intento decir, en general, que son los guías (o maestros) que aparecen, y ayudan. En ese sentido, serían los ángeles, o guías personales de esa alma, o si hubiera un consejero espiritual dedicado a esa persona, ese sería el que aparecería. También pueden ser miembros de la familia del fallecido.

 Lo que Erik compartió sobre la naturaleza de la muerte desde un punto de vista científico y energético fue difícil de comprender inicialmente para mí. En una palabra, fue alucinante, pero siento su verdad. Además, ¡la explicación del "mito" de la combustión espontánea fue asombroso!


MI HIJO Y LA POSVIDA. Sobre la Materia y la Realidad

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Capítulo 12. MATERIA Y REALIDAD.

 A medida que nos aventuramos más en nuestra exploración de los misterios que definen la vida y nuestra existencia, profundizamos en la naturaleza de la realidad misma. Se podría decir que esta materia es, de hecho. el Santo Grial en nuestra búsqueda porque la materia a la que estamos acostumbrados en nuestra realidad tridimensional no es más que luz congelada, y la realidad lo es todo: todo, aunque algo elegantemente simple.

 En ese capítulo dará lugar a dos sub temas. Por un lado la materia, y por otro la naturaleza y la física de la muerte. Recordemos que la doctora Elisa Médhus está preguntando a su hijo fallecido, Erik, por medio de la medium Jamie.

 Capítulo 12. 1  La realidad material.

 Antes de meternos en harina, quiero decir que hay excelentes libros, canalizados por la fallecida escritora norteamericana, Jane Roberts, en la que un ente llamado Seth explica la realidad de la materia, además de muchas otras cosas relacionadas con la posvida. En realidad podemos encontrar que los escritos de Jane Roberts, que empieza a publicar en 1966, son el antecedente de toda la llamada “Nueva Era”, adelantándose a su tiempo en muchos años. De su trabajo beben muchos autores célebres y, en ese sentido, las enseñanzas del espíritu canalizado llamado Seth, fueron revolucionarias y poco entendidas en aquel tiempo, siendo casi totalmente desconocidas actualmente. En este link  de A ESCURES LLITERARIU podréis leer en español (por traducción automática del original en inglés) sobre Jane Roberts y Seth, con interesantes ejemplos, ejercicios y bibliografía. Ttambién podeis consultar la información original en inglés en este otro enlace de TheOfficeTM.

 Volvamos al capítulo 12. Recordemos que en el verano del año 2010, la médium norteamericana Jamie Butler se prestó a empezar a canalizar información de un muchacho fallecido por suicidio a ruegos de la madre de éste, Elisa Medhus. Con el material de las sesiones Elisa publicó el libro  “Mi hijo y la posvída” (también se podría traducir como “Mi hijo y el más alla”).  

Dicho esto, la sesión mediúnica empieza con la madre preguntando a su hijo sobre la materia y la realidad.

Elisa: He leído mucho sobre cómo se crea la materia, cómo se crea la realidad, y hay un par de teorías sobre las que he meditado. Una es la estructura de ondas de la teoría de la materia, que tiene que ver con la interacción de ondas esféricas; y la otra es la teoría del vórtice, que afirma que los electrones, protones y neutrones son huecos en el espacio, y los vórtices los conectan en el espacio 3-D y 4-D. Para mí comprenderlo es muy complicado.  ¿Hay algo de verdad en estas dos teorías?

  Erik: Es una idea brillante, pero nunca se podrá probar.

 Elisa: ¿en serio?

 Erik: Sí, y verás que en los próximos cinco o seis años, la ciencia podrá identificar mucho de lo que experimentamos. La [teoría] de la estructura ondulatoria de la materia tiene más validez, pero ninguna hipótesis captura la imagen total con precisión.

 Elisa: si.

 Erik: Tengo un idea, y es que es muy salvaje que porque la gente "juegue" a la ciencia, o  haga cosas o las junte, ¡se crea que las crea!

 Elisa: ¡Sí!

 Erik: (con fingida importancia y pomposidad): ¡HOMBRE, EL CREADOR! Cuanto más me siento y miro a ese HOMBRE, EL CREADOR, simplemente más me sorprende, porque [una vez] pensé: "Puedo destruir eso, y puedo crear esto", pero no es absolutamente cierto. Es una falsedad, peor que llevar gafas de color rosa. Los humanos piensan que, de alguna manera, son el centro de la creación, pero la energía no se puede crear ni destruir, ¿recuerdas?

 Elisa: Sí, pura física elemenal. Así que realmente son nuestras percepciones las que crean y destruyen.

 Erik: También puedes destruir y crear tus percepciones.

 Elisa: ¡Ah!

 Erik: El único poder que tenéis, como humanos, es manipular, mover, dar forma.

 Elisa: ¿Y nuestra conciencia, nuestros pensamientos y nuestro libre albedrío hacen eso?

 Erik: Sí. Nuestra intención hacia algo lo manipula. Realmente no lo crea ni lo destruye; simplemente le da forma. La realidad da forma a nuestras intenciones, y nuestras intenciones dan forma a nuestra percepción de esa realidad; es una cosa de ida y vuelta. Existe una comunicación entre la naturaleza y el ser humano, la realidad y el ser humano.

 Elisa: ¡Oh!

 Erik: Piénsalo, mamá: cuando das un paseo por un bosque y miras hacia arriba y ves estos magníficos árboles, te quita el aliento. Solo esa vista, ese olor, ese sentimiento, esa experiencia, te cambia. Cambia la forma en que respetas el lugar: cambia la forma en que se lo cuentas a los demás. En el mismo lance, ese asombro, esa experiencia que tienes sobre árboles, las plantas o suelo, la Tierra lo siente y lo absorbe. Nuestras plantas y nuestra naturaleza son los mejores recicladores de energía. Basta pensar en toda la negatividad y todas las guerras que existen; y también la contaminación: ¿Cómo, de bien, crees que la naturaleza recicla todo eso ahora?

 Elisa: (sombría): Sí, qué lástima. Un lector hace estas preguntas: “Entonces, ¿la naturaleza de la realidad es básicamente como ondas? ¿Se encienden y apagan en una secuencia particular? ¿Es la realidad como un río que fluye y se dobla, girando y girando siguiendo los contornos de las orillas? ¿Responden las ondas energéticas a lo que se introduce en el sistema?". Sabemos que las ondas responden a lo que entra, que nuestros pensamientos, nuestra intención y  atención las manipulan, ¿verdad?

 Erik: Correcto.

 Elisa: Entonces, ¿qué es esa "cosa" que estamos manipulando?

 Erik: Olas. Olas, u ondas, de energía. Vibraciones energéticas. Ondas de alta frecuencia, ondas de baja frecuencia: esto es lo que formamos, igual que la arcilla que un escultor moldea en una estatua. Es nuestra comida. Puede afectar al crecimiento, a la vida, al aire. Puede afectar a las emociones de una persona. Un pensamiento, nuestro mero pensamiento interno, la cosa más simple que hagamos, crea un cambio y manipula las vibraciones de energía que nos rodean.

 Elisa: ¡Fascinante!

 Erik: Lo único que nos une es nuestro sistema de creencias.

 Elisa: Sí, nuestras percepciones.

 Erik: Exactamente. Percepciones. Nos enseñaron la percepción de que la mesa es sólida. Dejas el vaso en la mesa; el vaso se detendrá sobre la mesa. Ese es un concepto fijo dentro de los humanos, y es muy difícil para un padre no enseñar estas cosas a un niño.

 Elisa: Sí.  Y la conciencia colectiva también moldea estas percepciones y sistemas de creencias, probablemente.

 Erik: ¡Sí!

 Elisa: Entonces, sabemos que el pensamiento crea la realidad y [el proceso es] inmediato en su dimensión. El pensamiento manifiesta las cosas instantáneamente.

 Erik: Correcto.

 Elisa: ¿Tienes que sentarte y concentrarte, constantemente, para mantener una creación como, digamos, una casa o un prado con hierba morada? ¿Cómo puede la casa, por ejemplo, permanecer real durante tanto tiempo? Sería agotador pensar constantemente en la para mantener su existencia. ¿Tienes que hacer eso para que permanezca esa manifestación?

 Erik: Mirándolo de manera opuesta: si dejo de pensar en la casa, ¿la casa dejará de existir? ¿Es eso lo que quieres decir?

 Elisa: si. Eso es exactamente lo que pregunto. Eso requeriría mucha concentración.

 Erik: No. Tu piensas que sería así porque es mucho más difícil allí, en el plano terrenal, que se manifieste la cosa. Por eso crees que tomaría mucho tiempo de reflexión y diseño crear la cosa, pero no es así. Mientras  usemos, en este caso [la casa], y pensemos en ella, seguirá existiendo.

 Elisa: De acuerdo.

 Erik: Pero si no pensamos o usamos la cosa, si nadie la piensa o usa no será necesaria y no existirá. Más tare, tan pronto como se vuelva a recordar la cosa, estará allí. Vuelve a aparecer. Cuando no existe, no se destruye; simplemente no ocupa espacio. El pensamiento crea la realidad a través de la energía. Uno mas uno es igual a dos. En ese sentido, tienes pensamientos, más energía, para hacer una nueva realidad.

 Elisa: ¿Puedes explicarme más?

 Erik: Los pensamientos son proyecciones de tu energía eléctrica, así que cuando estás pensando, también estás comunicando. Estás construyendo tu reserva de energía eléctrica y determinando cuánta de ella puedes mover por tu cuerpo.

 [Deduzco que quiere decir que los pensamientos, proyectados como intenciones, son formas de energía que crean materia y, por lo tanto, realidad, de acuerdo con la famosa ecuación de Einstein].

 Elisa: Está bien, digamos que estoy caminando por un sendero. Esto es una ilusión, ¿verdad? ¿Estoy constantemente manifestando el camino frente a mí como una forma de avanzar? ¿Manifiesto, constante e instantáneamente, cada momento cuando doy un paso?

 [Pausa larga]

 Jamie (riendo): Está haciendo la pose de "frotarse la barbilla y hacer que piensa".

 Elisa: Veamos. Digamos que hay un camino de un kilómetro de largo, pero no veo la última mitad de esa distancia porque realmente no la he creado para mí. ¿Ese último kilómetros no existirá hasta que lo cree durante futuros paseos? ¿Estoy actualizando constantemente la longitud de ese camino a medida que avanzo?

 Erik: Sí. Estás actualizando constantemente el camino, pero si compartes espacio con otras personas que tienen la misma visión, están en la misma caminata de un kilómetro. Es como si  hubiera alguien a cinco metros frente a ti, y eso es algo que habéis creado los dos. Como ambos estáis en la misma dimensión, podéis ver lo que habéis creado. Entonces, eso es un universal, un punto de unidad. No es solo un haz de luz individual.

 Elisa: ¿Cómo creas realidades junto con otras almas? Debe haber algún tipo de cooperación. Por ejemplo, debe haber muchas almas viviendo en el mismo ambiente, creado con el pensamiento,.

 Erik: Aceptamos cooperar telepáticamente, pero hay una advertencia. Solo puedes convertir en realidad aquello que encaja con tu destino. Si no está de acuerdo con tu destino, no puedes crearlo.

 Elisa: No puedo imaginar que la gente quiera crear algo que no forme parte de su destino.

 Erik: ¡Oh, mucha gente lo hace!

 Elisa: Bueno, ¿por qué no funcionaría? ¿Por qué no puedes crear tu realidad independientemente de tu destino?

 Erik: Cuando llegamos al plano terrenal tenemos un plan espiritual. Nuestros pensamientos y nuestras acciones deben trabajar para lograr lo que está en ese plan espiritual, en esa misión se podría decir. Si terminamos ese plan, esa misión, podremos lograr más. Digamos, por ejemplo, que una mujer está casada con un tipo rico pero se siente miserable y quiere salir de esa experiencia matrimonial. No obstante, sabe que de hacerlo tendría que trabajar a tiempo completo si se divorcia de él. Ella podría pensar: "No quiero estar con él. ¿No podría, simplemente, ganar la lotería?". Eso no va a suceder, porque no importa cuánto tiempo de energía y pasión dedique a ganar la lotería, no ocurrirá porque, de suceder, descarrilaría su avance espiritual que incluye el desarrollo de su independencia y el empoderamiento al conseguir un trabajo de tiempo completo que permita a esa mujer dejar la señor Don Importante.

 Elisa: Está bien, lo entiendo. Pero seguramente las reglas del juego son diferentes en la otra vida. ¿Qué pasa con las personas que están del otro lado, como tú? Tú puedes crear, prácticamente, cualquier realidad que quieras, ¿verdad?

 Erik: Sí. No hay impedimento alguno.

 Elisa: Eso es bastante útil. Bien, y cambiando de tema, ¿qué es la materia oscura?

 Jamie: Erik necesita aclarar si hablas de la materia oscura, o la materia gris

 Elisa: De la materia oscura. Ya sabes, como si hubiera energía oscura y materia oscura. Es una cuestión de física.

 Jamie: Me dice que está tratando de averiguar en qué contexto quieres la respuesta, porque puedes ver la materia oscura como una entidad, como en un espíritu, o como materia oscura en el caso de que no sea una entidad.

 Elisa: No es una entidad. Es algo en el universo, algo que constituye una gran parte del universo tal como lo conocemos.

 Erik: Es una fuerza compacta, casi como un campo de vacío.

 Jamie: La forma en que Erik me lo muestra es que hay tanta energía en el universo que parece estar vacío, u oscuro.

 Elisa: NOTA. [Me sorprende lo mucho que se alinea esta idea del vacío infinitamente denso con la teoría del campo unificado del físico Nassim Haramein, algo que aprendí meses después de esta sesión]

 Erik: Es como una fuerza magnética. Se siente atraído por sí misma, por lo que se reproduce. Atrae cosas, las succiona y las sujeta.

 Elisa: Está bien. Leí en alguna parte que realmente no existe una "partícula de Dios", y que debemos dejar de intentar encontrar la unidad más pequeña. En cambio, necesitamos ver que hay un patrón de división infinita: infinitamente grande e infinitamente pequeño. La mayor parte de la realidad es el espacio. La materia no define el espacio; el espacio define la materia. ¿Es eso cierto?

 Erik: Absolutamente. Estás en lo cierto.

 Elisa: Sabes, dicen que todos los universos son membranas diferentes con forma de láminas, rosquillas y cilindros, y así sucesivamente, y que quizás a veces estas membranas chocan y los puntos de colisión crean materia. ¿Es eso algo posible?

 Jamie: (riendo fuerte): Erik se ríe.

 Erik: Absolutamente posible, mamá, pero saber cómo se construyen las cosas no te dará una mayor comprensión de lo que estás haciendo.

 Elisa: Oh, sí, lo sé. Pero encuentro esas cosas interesantes.

 Erik: ¿Por qué la gente trata de concentrar toda su energía en desentrañar misterios como ese en lugar de entender por qué están en eso? Tenemos que contemplar eso.

 Elisa: Oh, está bien, entonces, ¿Quieres que deje todo eso a los físicos?

 Erik: Sí, perfecto.

 Elisa: Bien, aquí hay asunto: la inconsciencia, es decir, la conciencia no sensible, o sea, la conciencia no pensante, incluyendo los electrones, ¿ también crea materia, o realidad? Quiero decir, es una conciencia después de todo, incluso si es conciencia inconsciente.

 Erik: ¡Hago la primera pregunta! ¿Qué te hace pensar que no es un pensamiento consciente?

 Elisa: Bueno, tal vez lo sea, ¡no lo sé! ¿Pueden los electrones pensar?

 Erik: Lo triste es que intentamos que todo piense como lo hacemos nosotros.

 Elisa: (riendo): Oh, maldita sea. ¿no podemos los humanos hacer algo bien?

 Erik: Inténtalo de nuevo. [Los electrones] piensan; ellos comprenden; tienen acciones y reacciones, y…

 Elisa: Bueno, ¿Los electrones son conscientes de sí mismos, o se parecen más a la forma en que tú describe las rocas como seres con "una conciencia primitiva e inconsciente"?

 Erik: Son conscientes de sí mismos solo cuando están cerca de otra cosa, pero no de la forma en que tu piensas. Es difícil para mí explicarlo de una manera que lo entiendas.

 Elisa: ¿Es por eso por lo que funciona el entrelazamiento?

 Jamie: No he leído nada sobre eso. ¿Qué es eso del entrelazamiento?

 Elisa: Una vez que dos electrones interactúan, seguirán influyendo entre sí, incluso si están a años luz de distancia. Al menos así es como lo entiendo.

 Jamie: (sorprendida): ¿De verdad?

 Elisa: Sí, creo que Einstein lo llamó "espeluznante acción a distancia". No entendía completamente por qué se comportaban de esa manera. Así que te pregunto: ¿pueden los electrones resolver problemas?

 Erik: Sí.

 Elisa: ¿En serio? Pero, ¿pueden crear materia como nosotros con nuestros pensamientos? ¿Pueden los electrones, y otras partículas, crear su propia realidad?

 Erik: Bueno, pueden resolver problemas conscientemente, así que si resuelven un problema, entonces sí, crean materia. Pero debes pensar en ello como, ya sabes, materia que puedes tocar con tu mano.

 Elisa: Sí.

 Erik: Esto no importa, mamá, y su capacidad para resolver problemas no es la misma que la de los seres humanos.

 Elisa:. ¡Apuesto a que sería difícil explicarme más sobre eso!

 Erik: Sí, porque realmente no tienes  lenguaje, es decir conceptos, para eso.

 Elisa: Bueno, digamos que hay un vaso encima de una mesa y lo ven tres observadores. ¿Cada observador crea su propio espacio tridimensional con un vidrio completamente diferente? ¿Cada conciencia sensible, y no sensible incluidos los átomos o electrones de la mesa, las sillas, etc., crea esto también, de modo que la realidad del vidrio existe realmente en un espacio multidimensional, ya sabes, en un número infinito de dimensiones, de cada espacio, de cada conciencia, de cada observador?

 Jamie: Erik, se está riendo.

 Elisa: Oh, Dios, estoy tan confundida. La pregunta sería así, ¿se define como un vaso en una mesa solo por el mutuo acuerdo, porque lo comunicamos como tal entre todos nosotros?

 Erik: Está bien, esto podría reventar tu burbuja. El foco y la conciencia deben estar en el vidrio cuando se fabrica el vaso, como ocurre en una fábrica. Luego, se crea y se lleva al plano tridimensional. Y solo porque un vaso se coloque en un mostrador, en una mesa o en un gabinete detrás de puertas cerradas, no significa que desaparezca, porque ya ha sido creado. Por lo tanto, no se necesita un enfoque para que exista.

 Elisa: Oh, está bien. Así que no tienes que seguir pensando en algo para que persista.

 Erik: Correcto. Todo lo que tienes que hacer es saber que existe.

 Elisa: De acuerdo. Vaya, eso requeriría mucho más trabajo del que yo sería capaz de hacer.

 Erik: Ahora, da un paso atrás y míralo de esta manera: creo que eso es en lo que quería enfocarse quien trajo todo este asunto del "vaso sobre la mesa". No quería concentrarse en las cosas pequeñas como las cortinas, las paredes y el suelo. Quería centrarse en toda la ilusión de la realidad.

 Elisa: Oh, ya veo.

 Erik: Por tanto, eso requiere que todos en el juego se concentren, y co-creen la realidad que conocen como plano terrestre. Y una vez que estás en ello, tienes una parte del control; y dentro de ese control podemos crear y destruir, mover y cambiar. Creamos un banco de hormigón, podemos destruir el banco de hormigón. Pero no se necesita un esfuerzo de pensamiento consciente para que ese banco de hormigón sea real. Ya lo hemos hecho, porque creemos en todo el sistema formateado, es decir, en el sistema conformado que permite esa reaidad. ¿Lo entiendes?

 Elisa: No, estoy tan confundida.

 Erik: No conozco otra forma de explicarlo. Todo tiene conciencia. Es por eso por lo que la gente se cura con cristales y ciertas piedras transportan energía. También las plantas. Todo en la Tierra tiene conciencia. Cuando entras en una casa puedes sentir una energía única, porque la casa absorbe la energía de todos los que han vivido allí. En ese sentido, incluso los hogares tienen conciencia. Pues bien, en estos términos y refiriéndonos a los electrones y átomos, sí pueden crear materia, pero necesitan que ayuda, o asistencia, del alma humana.

 Elisa: ¿Dices que pueden crear materia, pero que necesitan la conciencia de un alma para ayudarles?

 Erik: Sí.

 Elisa: Es como la teoría de la física que dice que se necesita un observador, (supongo que en este caso es la conciencia), para convertir una onda en una partícula. Eso es paralelo a convertir un pensamiento en realidad. Masa y Energía como en la ecuación de Einstein que dice que la energía es igual a la masa multiplicada por el cuadrado de la velocidad de la luz. Todo se está conectado.

 Erik: Y, además, cada observador lo ve de manera diferente. Recuerda, todo fluye. Todo es energía, y fluye y se ralentiza para crear materia; y esa materia parpadea dentro y fuera de la existencia, como una ondulación o una ola en la parte superior del océano. Está ahí, y no está ahí; siempre está cambiando. El vaso nunca es el mismo, de momento en momento.

 Elisa: Déjame ver si hemos aprendido algo más sobre la pregunta que te hice hace un rato. Cuál es nuestra "verdadera realidad", ¿esta de aquí, o la del sitio en donde tú estás? ¿Dónde estamos vivos y dónde estamos soñando?

 Erik: No hay diferenciación, mamá. Estás vivo en la Tierra, y estás vivo en la otra vida. Dondequiera que viaje el alma, donde sea que esté, está vivita y coleando. El alma puede viajar a diferentes planetas; no solo tiene que venir a la Tierra. Demonios, podemos viajar por el universo con extraterrestres si queremos.

 Elisa: Entonces, la "verdadera realidad" es, dímelo tú

 Erik: Es, dondequiera que esté el alma en ese momento. Y cuando un alma está aquí, en la otra vida, eso no significa que el plano terrenal no exista. Sigue siendo una realidad de otra dimensión; es solo una cuestión de perspectiva. Nuestra "verdadera realidad", sea la que sea, es aquella en la que estemos en ese momento.

 Elisa: ¿Pero entonces, dónde está nuestro verdadero hogar,?

 Erik: Aquí. Vamos al plano terrenal cuando nos vamos de vacaciones.

 Elisa: Maldita sea, Erik. ¡Así que de vacaciones! ¡Quiero que me devuelvan el dinero. ¡Necesito un nuevo agente de viajes!

 Erik: ¿Sabes mamá?: ¡ tú eres tu propio agente de viajes! Somos nuestros propios agentes de viajes. ¡Decidimos lo que vamos a experimentar!

 Fin de la primera parta del capítulo 12.

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RELACIONADO: https://aescures-llitera.blogspot.com/2020/12/seth-la-naturaleza-de-la-realidad.html


MI HIJO Y LA POSVIDA. Erik revisa su vida y otras cosas


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Capítulo 4. NUESTRA NUEVA RELACIÓN A TRAVÉS DEL VELO. 

Segunda parte. En esta parte del capítulo interviene como canalizadora Kim, pero no aparece con voz propia.

Capítulo 4.2 Revisión de la vida de Erik, y algunas nuevas experiencias como alma.

Como Erik mencionó anteriormente, en la sesión sobre sus experiencias directas tras su muerte, pasó por lo que llamó una "revisión de vida" poco después de dejar su cuerpo. A continuación me cuenta un poco más sobre lo que eso significa, y cómo fue para él. Empieza preguntando su madre lo siguiente:

Elisa: Erik, ¿puedes compartir con nosotros algunos detalles de tu revisión de vida?


Erik: Bueno, había una gran mesa donde todos se sentarían
, como en una cena familiar. Había mucha música; hubo muchas risas. Y, mamá, pregunté a cuatro almas de tu grupo de almas, que no son parte de tu vida ahora, si podrían ayudarte con todo esto. Quiero hacer algo para ayudar a la familia. Quiero poder hacer algo por vosotros. Si hay algo que pueda hacer para ayudar a alguien de la familia, hacedmelo saber y haré todo lo que esté en mi mano. Quiero sentir que sigo siendo parte de la familia. Pídeme que haga cosas. No puedo, exactamente, sacar la basura, pero ...

Elisa: (riendo). ¡Te prepararé una lista de tareas!

Erik: Mamá, vas a notar que se han hecho cosas y preguntarás a otras personas: "¿Hiciste tú eso?" o, "¿Tú hiciste aquello?" ¡Te dirán, "no", y sabrás entonces que fui yo!

[Nota. Encontré esto tan reconfortante. La prueba de la presencia de Erik fue crucial para mí mientras me adaptaba a nuestra nueva relación].

Elisa: Bien, volvamos a lo que te sucedió a continuación.

Erik: Oh, sí, claro. Bueno, estaba en esta gran y larga mesa, y me sentí aturdido. Estaba eufórico, pero aturdido. Era como si en un minuto estuviera en mi cuerpo físico, y al minuto siguiente era un espíritu libre, sin limitaciones físicas, y seguía pregunténdome: "Realmente soy un espíritu, ¿verdad? Quiero decir, que no puedo volver a esa vida; que dejé pasarla ¿verdad?". Y me aseguraron que sí.

A continuación comencé "la revisión". Nadie hizo la revisión por mi, la hice yo mismo.

Allí estaba sentado a la mesa, solo, y todos hablaban de lo felices que estaban de haber regresado. No importa cómo pasamos, cómo muramos: siempre nos reciben con los brazos abiertos. Todo el mundo está siempre encantado de volver a verte. De todos modos, en ese momento estoy sentado a la mesa, y tengo los codos encima. Con la cabeza entre las manos reviso mi vida. Comencé a sollozar cuando recordé ser el niño pequeño al que tú llamaste, tu "hombrecito", hacias cosas conmigo y me decías que iba a ser un gran hombre. Me he llevado todo eso por delante. Fueron los peores momentos de la revisión. Quiero agradecer a Papá por tratarme como a un adulto. Pappa, me trataste como a un adulto desde que tengo uso de razón. Eso significó mucho para mí.

Así que terminé mi revisión y consideré lo que podría haber hecho, pero no hice, y lo que hice pero no debería haber hecho. No sé cuánto tiempo duró la revisión. No marqué el tiempo. Aquí nadie marca el tiempo, pero no duró mucho porque las velas aún estaban encendidas en el pastel, mi pastel de "bienvenida a casa". A continuación sentí pesadez, una pesadez realmente emocional. Se me acercó un alma femenina que se ofreció a aconsejarme; ella me ofreció terapia. Así que he ido a lo que supongo que tu llamarías terapia. Ella no solo me está ayudando a comprender por qué lo hice, por qué me quité la vida, sino cómo puedo volver al plano terrenal con la curación que se suponía que debía hacer en esta vida, sin volver a matarme. Vaya, mamá, si hubiera podido ver de qué me estaba yo curando en vidas pasadas, no me extraña que estuviera en mi anterior vida tan jodidamente deprimido y enojado. ¡No es de extrañar, mamá!

Elisa: ¿Y qué mas quiere decir sobre esto?

Erik: Quiero que digas a otras personas que aquí tenemos mucha compañía. A muchos padres que han perdido hijos les preocupa que su hijo esté solo, pero no es así. Además, podemos manifestar lo que queramos. Por ejemplo, imaginamos lo que queremos comer, y ahí está. Vivimos donde queremos; vivimos como queremos. No sentimos frío ni calor. Aquím en la posvida, el pensamiento crea la realidad mucho más rápido: sucede en un instante.

Elisa: Erik, me gustaría saber cómo es que tienes un control tan poderoso sobre tu energía espiritual teniendo en cuenta que moriste hace muy poco.

Erik: No lo sé. Realmente, no lo sé. Supongo que se debe a mi nivel de iluminación. Tengo un nivel muy alto de iluminación y tú, especialmente, lo sabes. Eres la mejor madre que alguien podría tener. Hemos hablado más después de mi muerte que en los últimos años de estar vivo, ¿no es así?. Por aquí, todo el mundo se ha sorprendido un poco de que hice, pero luego no tenía mucho que curar. Realmente no tenía mucho que curar. Nunca volveré a pasar por todo esto. Dejé ir la pérdida. La depresión era un tema secundario para mí. Sobre todo se trataba de confusión y la sensación de pérdida,sensación de desesperanza, pero ahora todo se ha ido. Toda la curación se ha realizado en vidas pasadas. Supongo que me queda una vida más, eso es todo. Una mas.

Elisa: Siempre he tratado de enseñarte, Erik, que hacer cosas por otras personas se siente tan bien, y estoy muy orgullosa de que hayas aprendido eso, o de que te estés dando cuenta de eso en el plano espiritual. Has logrado tanto, en tan poco tiempo. El hecho de que sientas que no lograste mucho aquí, en la Tierra, realmente no importa cuando estás logrando tanto donde estás ahora. Además, Erik, mientras estabas aquí, en el plano terrenal lograste, lograste mucho más de lo que crees porque diste mucho amor a muchos. Enseñaste a gente a amar; enseñaste, enseñaste a la gente a vivir el momento. Por eso estoy, realmente, orgullosa de ti, Erik.

Erik: ¡Gracias, mamá! Ahora me doy cuenta de cuánto contribuí y cuánto hice. Todavía estoy tratando de llegar al fondo de por qué me sentí tan inútil. Sé que parte de ello proviene de vidas pasadas. Lo sé, lo sé. Pero no entiendo por qué no pude salir de ese agujero negro; por qué elegí terminar mi vida terrenal sin tener pensamientos más positivos u optimistas sobre el próximo momento,la próxima o el día siguiente. Y tampoco comprendo por qué no me acerqué a ti y te dije: "Mamá, estoy muy, muy, jodido; Necesito tu ayuda." Sé que me habrías ayudado.

Elisa: Erik, tal vez sabías, en el fondo, que lograrías más en el plano espiritual.

Erik: Bueno, eso es lo que hay, exactamente. Estoy seguro de que si me hubiera quedado allí, habría seguido cuestionando mi valor y lo que estaba aportando, y eso me hubiera vuelto inútil. Mamá, tienes toda la razón, como siempre. ¡Ves lo que nadie más ve.

Ah, y en otro orden de cosas, ¿sabes que acabo de comprar un barco? Y también conseguí mi propio lugar aquí, mamá. Es como un condominio. Es mi piso de soltero.

Elisa: Por lo que dices, ¿tu nueva vida es similar a la que tenías aquí, en la Tierra?

Erik: Sí, podemos tener todo lo que tenemos en la Tierra. Podemos salir a comer pizza, tener relaciones, casarnos; es lo mismo, pero podemos manifestar todo mucho más rápido. Además, no tenemos los problemas que tuvimos en el plano terrenal. Tenemos el trabajo de nuestra vida como almas, viajamos y podemos tener hijos. Tengo mi propio piso de soltero. Está en la playa, pero junto a la playa hay un lago o fiordo donde tomo mi bote. He creado un lugar para mí que se parece mucho a Noruega, ¡y me encanta!

[La medium dice que le muestra el lugar, y comienza a reír.] Dice, también, que tiene un sofá de cuero y una gran televisión de pantalla plana; una mesa auxiliar con una lámpara; una cama; y una lámpara más grande al lado del sofá. Ve que no hay mesa y pregunta a Erik que en dónde come.

Erik: ¿Qué dónde como? En el sofá, frente al televisor, por supuesto.

Elisa: Tengo curiosidad. ¿Puedes comunicarse con nosotros incluso cuando no estés en el mismo lugar que nosotros? En otras palabras, ¿Puedo hablarte incluso cuando yo estoy en casa y tú en otro lugar?

Erik: ¡Por supuesto!

Elisa: ¿Puedes oírme cuando te llamo? ¿Puedes oírme hablar contigo en mi cabeza?

Erik: ¡Por supuesto! Escucho todo lo que dices y piensas. Mamá, es como si todavía estuviera en el plano terrenal, cuando nos comunicábamos incluso si no hablábamos. Es exactamente lo mismo. Digamos que estaba en la escuela, en la tienda o montando en bicicleta. A menudo nos comunicábamos sin decir nada, y cuando estábamos juntos, terminamos las oraciones del otro. Es exactamente lo mismo. Escucho todo lo que dices, ¡y ahora escucho!

Elisa: ¿Nos escuchas a escondidas algunas veces?

Erik: ¡Por supuesto que escucho a escondidas! Cualquiera en forma espiritual sabe lo que dices en el plano terrenal. ¡No solo escuchamos a escondidas lo que se dice, sino también lo que se piensa y se siente!

Elisa: Bien, ¿alguna vez te has sentido frustrado con nosotros cuando no te percibimos? A veces debe ser muy difícil.

Erik: No, no estoy frustrado, solo estoy resignado. Sé que si hablo más alto y me hago más tangible con mi nueva energía sabrás que estoy allí. He hablado de esto con mis nuevos amigos aquí, en el plano espiritual, y me dicen: "Esta persona no me capta y yo hablo y hablo para nada". Entonces, me dicen: “Bueno, creo que lo que tienes que hacer es tratar de hacerte más tangible; haz que te vean y te escuchen de manera más tangible, y eso cambiará las cosas ". Depende principalmente de nosotros, aquí, dar a conocer nuestra presencia.

Elisa: Y nosotros, aquí, para ser más receptivos.

Erik: Mamá, ese es un buen punto; es verdad. Tengo algunos amigos aquí, en espíritu, que se materializan y realmente dan a conocer su presencia, y los miembros de la familia están sufriendo demasiado por poder notarlos. Tienes razón, mamá; tienes toda la razón. Así que se necesita fuerza aquí para que nos materialicemos, y se necesita valor para que vosotros nos captéis.

Elisa: ¿Tú y otros espíritus experimentan emociones?

Erik: ¡Mierda, sí! Ya no tenemos los mismos problemas, pero todos tenemos personalidades y emociones.

Elisa: Entonces, ¿todavía puedes ponerte triste?

Erik: Oh, sí. ¡También puedes joderte aquí!

Elisa: ¿Te hace infeliz vernos tristes, o cuando escuchas nuestros pensamientos de dolor?

Erik: Sí.

Elisa: ¿Nos véis en el duelo y pensáis que estamos ciegos, y que cuando vayamos allí veremos que no existe la verdadera pérdida"?

Erik: No. Eso no es todo, mamá. Hay una verdadera pérdida. Hay pérdida cuando un ser humano de que te sientes cercano, muere, y hay pérdida cuando estás aquí, donde yo estoy, y tus seres queridos regresan a la Tierra.

Elisa: Nunca pensé en eso. Pero la pérdida nunca es permanente, ¿verdad?

Erik: Por supuesto que no. Los extrañamos hasta que estemos juntos de nuevo. Cuando te veo expresar tristeza y dolor, lo entiendo perfectamente. Asumo total responsabilidad por ello. Sé que, si no me hubiera suicidado, todavía estaría allí, en el peor de los casos frustrándote en lugar de crear el gran dolor de mi muerte. Cada vez que alguien expresa dolor por haberme perdido me siento totalmente responsable, y lo entiendo perfectamente. Todos tienen derecho [a su dolor].

Elisa: Bueno, ¡no quiero que te sientas tan incómodo como para que te alejes porque sea demasiado doloroso para ti!

Erik: ¡Mamá, no seas tonta!

Elisa: Erik, quiero que sepas que estoy feliz por ti, porque siento que eres más feliz donde estás ahora.

Erik: Lo soy, mamá. Nunca he sido más feliz.

Elisa: Puede que me duela, porque anhelo tenerte, siempre serás mi bebé, en mis brazos pero estoy feliz de que hayas encontrado paz y alegría, y sé que volveremos a estar juntos algún día.

Erik: Gracias, mamá.

Elisa: Erik, déjame preguntarte sobre esto. Cuando saliste de tu cuerpo dijiste que sentiste conocimiento expandido, una perspectiva más amplia, y viste a las personas por lo que realmente son? ¿Que quieres decir con eso? Por ejemplo, ¿qué vistes cuando me percibistes por lo que realmente soy?

Erik: Escuché un par de preguntas ahí, mamá. En primer lugar, cuando un alma sale de un cuerpo humano, puede ver inmediatamente a las personas por quiénes y qué son, lo que significa que puede ver su nivel exacto de iluminación, cuál es su potencial, qué han hecho en vidas pasadas, quiénes han sido, qué han logrado, qué han contribuido. Tienes una comprensión perfecta de su personalidad y de la vida que compartiste con ellos. Entonces, mamá, cuando mi alma salió del cuerpo y te miré, vi un alma que estaba en el pináculo de la iluminación. Vi a alguien que es totalmente cariñosa, comprensiva, inspiradora, motivadora, solidaria, alentadora, generosa y divertida. Podría recordar todas tus vidas pasadas, todas las vidas que compartimos juntos. Oye, mamá, ¿sabes lo que hemos hecho? Cuando nos conocimos aquí [antes], ¡tú y yo a veces íbamos juntos a visitar otros planetas!

Elisa: ¡Genial! Lo haremos de nuevo, lo prometo.

Erik: Te estoy esperando, pero sé que será para dentro de mucho, mucho tiempo desde tu perspectiva. Pero eso es bueno; esta bien.

Elisa: Sí, lo entiendo. ¿Crees que, normalmente, te sientes más cómodo en el plano espiritual que en el físico? Al menos a mi me pasa así.

Erik: Sí, estar en el plano físico era como tener dolor todo el tiempo, como sufrir una migraña o un absceso. Encontré algo de paz en Noruega, pero la paz fue fugaz. Por eso siempre saltaba de una cosa a otra. Por eso no me quedé con nada a largo plazo. El placer, el disfrute o la estimulación que me dieron las cosas siempre fue tan fugaz. Empezaba a sentir dolor de nuevo, y luego saltaba a otra cosa.

Elisa: Bueno, me alegro de que lo estés pasando bien allí, cariño. Estoy tan contenao de que estés feliz. Eso es todo lo que sueña una madre: que su hijo encuentre alegría y satisfacción en la vida.

Las visitas de Erik, especialmente sus travesuras, y estas primeras conversaciones preciosas que tuvimos entre nosotros, a través de Kim y Jamie, comenzaron a traerme algo de paz mental y esperanza como madre que acababa de perder a un hijo. Aunque la descripción de Erik de su propia muerte me dejó tambaleante, me sentí aliviada y feliz de ver que su humor no había cambiado. Sentí que de hecho era "mi Erik". No solo eso, él era el Erik que recordaba antes de sumergirse en esa oscura depresión cuando era adolescente, lo que lo llevó a las desesperadas medidas que tomó para poner fin a su dolor. Realmente parecía feliz. Mientras me adaptaba a todas las formas en que Erik había comenzado a comunicarse con nosotros, desarrollé una hipótesis sobre la existencia de mi hijo como alma sin ataduras. Es decir, me di cuenta de que mi hijo tenía que "vivir" en algún lugar de la otra vida, pero todavía no podía expresar con palabras lo que esto podría significar.



Seguí pisando este territorio desconocido del más allá con la ayuda de comunicadores espirituales de confianza, mi familia y amigos y, por supuesto, el propio Erik. Mis primeros kilómetros por este camino estuvieron llenos de precaución y vacilación, pero había tanto que quería saber, especialmente sobre cómo era realmente existir en el más allá y lo que realmente significaba “la posvida”. ¿Cómo era realmente ese "lugar"? ¿Cómo estaba emocionalmente? ¿Cómo pasó su tiempo? ¿En qué se diferencia su "vida" desde su muerte? Sobre todo, tenía una poderosa necesidad de continuar algún tipo de relación con Erik, si tal cosa era posible. En nuestras siguientes conversaciones, mis preguntas fueron respondidas.






MI HIJO Y LA POSVIDA. Erik cuenta su suicidio


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Capítulo 4. NUESTRA NUEVA RELACIÓN A TRAVÉS DEL VELO. 

Advertencia para oídos delicados. Antes de nada, si tiene oidos sensibleros, tenga en cuenta que quien habla es el espíritu canalizado de un muchacho bastante desinhibido, con habla directa y sin tapujos, y se transcribe lo que dice sin censura ni componenda. Así que no espere delicados circunloquios en lo que a lo escatológico se refiere. Advertido queda el lector u oyente.

En el verano del año 2010 la médium norteamericana Jamie Butler se prestó a empezar a canalizar información de un muchacho, fallecido por suicidio, a ruegos de la madre de éste, Elisa Medhus. Con el material de las sesiones, Elisa publicó el libro “Mi hijo y la posvida” (también se podría traducir como, “Mi hijo y el más alla”). En el capítulo 4 se describe el suicidio de Erik y la revisión de su vida. Aquí abordaremos la parte primera del capítulo, que cuenta cómo refiere Erik su suicidio.


Capítulo 4.1. Erik describe su muerte.

Elisa: Erik, ¿puedes describir la muerte y lo que sucede inmediatamente después, con el mayor detalle que puedas, al menos en términos generales? Sé que la muerte es diferente para cada uno, pero dime lo que sea general para todos.

Erik: Para explicar la muerte, en general, creo que es una injusticia, mamá. Por lo tanto, recuerda a todos los lectores que la muerte se adapta al sistema de creencias que vivm e cada persona. Sea lo que sea en lo que crea activamente, bien en nada, en Dios, que enfrente a sus demonios antes de tener lo gozoso, que se convierta en un fantasma, sea lo que sea, eso es lo que se presentará.

Elisa: Está bien, entonces hablemos de tu muerte. Estás muerto, así que hablemos de eso. ¿Cuáles fueron tus creencias? Yo nunca realmente…

Erik: habla de Dios, que no eres grosera

Elisa: Vale, lo siento, pero hablemos de ...

Erik: Deja eso aparte, porque la gente se va a preguntar, "¿Por qué lo que se experimenta al morir se basa en tus sistemas de creencias individuales?" Y debe hacérseles saber que ellos son la herramienta de esa experiencia. El cuerpo físico es el equipaje. Contiene el espíritu. Cuando el cuerpo muere se convierte en alma. Deja el cuerpo, y esa alma queda entonces contenida en la conciencia. Ese personaje que construiste, todos esos intangibles, lo que te hizo reír ...


Jamie (a Erik): Sí, tu personalidad. Entendido.

Erik: Pues bien, para moverse a través de estas dimensiones para llegar al Hogar, al Cielo, o como sea que quieras llamarlo, tienes que hacerlo a través de ese elemento consciente que construyes, ese sistema de creencias que estableces. Se te dirá que vayas allí. Esa es la base. Ahora, me preguntas que en qué creía. Realmente no lo sé. ¡Definitivamente no era en todo esto! Aprendí mucho más sobre la estructura de la otra vida estando aquí.

Elisa: Bueno, cuando apretaste el gatillo del arma, ¿pensaste que iba a haber nada, o acaso pensaste otra cosa ...

Erik: Lo estaba esperando. Quiero decir, de verdad, estaba tan desesperado por salir de mi piel que solo esperaba poder hacerlo. Era algo así como cuando una persona tiene un niño o una mascota que le roba el sueño y solo quiere descansar teniendo un buen sueño, pasar una buena noche. Solo quería una buena y duradera paz.

Elisa: Entonces, ¿esperabas que hubiera algo, o ni siquiera pensaste en eso?

Erik: Ni siquiera pensé en eso.

Elisa: ¿Alguna vez pensaste, en tu vida, si podría existir algo después de la muerte?

Erik: ¡Sí! Porque escuchas esas historias de fantasmas. Para mí, no se trataba de Dios ni de milagros. Con lo que me conecté más, lo que pensé que era mucho más jodidamente creíble eran los fantasmas.

Elisa: si.

Erik: Porque no es como si Dios descendiera ...

Erik: ¡No es como si Dios viniera a tu casa y joder tu basura y tirar las cosas! No, se trata del tipo muerto. Entonces, sabes que puede haber vida después de la que estás viviendo, pero mierda, no tiene por qué estar basada en un sistema de creencias religiosas. Tenía la sospecha de que habría una vida después de la muerte, pero no tenía ni puta idea de lo que contendría.

Elisa: De acuerdo. Cuando apretaste el gatillo, ¿qué pasó justo después? En primer lugar, ¿te dolió?

Erik: No, no recuerdo ningún dolor. Recuerdo el sonido, pero no recuerdo que nada me tocara. Solo el sonido. Pensé preguntándome, y así te lo digo: ¿cómo te sacan de tu cuerpo?

Elisa: ¿sentiste una sensación de tirón?

Erik: No. Fue extraño. Fue como si las luces se apagaran. Tenía los ojos cerrados. Recuerdo apretar el gatillo. Recuerdo que fui rápido al respecto. No lo dudé. Sabía que iba a hacer esto. Este era el momento. Eso fue todo. No tenía ninguna duda sobre lo que estaba haciendo. No estaba en conflicto. ¿Sería como tener esa disposición mental?

Jamie (a Erik): ¿Qué quieres decir con, "disposición mental"?

Erik: Como esa predisposición mental que tienes cuando corres una carrera muy larga y ves la línea de meta.

Elisa: Ah, sí.

Erik: No te das cuenta de lo exhausto que estás, o de las emociones que sientes. Solo tienes el ojo puesto en la meta, y lo lograrás. En mi caso, tenía la mirada puesta en el objetivo. Tenía que salir. Recuerdo la sensación de la pistola, apretar el gatillo, escuchar el sonido. Hubo oscuridad, y luego estaba mirando a mi cuerpo.

Elisa: Hmm. Eso debe haber sido extraño.

Erik: Sí. No tenía ni idea. No sabía que podría verme a mí mismo. Eso ni siquiera se me pasó por la cabeza. Realmente tuve el tipo de pensamiento de que iría a la nada. Quería que todo se desmoronara. Que se fuera. Que se apagara.

Elisa: ¿Qué emociones tuviste cuando viste tu cuerpo? ¿Qué sentiste?

[Pausa]

Jamie: Erik se quedó en blanco, con la boca colgando ligeramente abierta. Dijo que eso es lo que sentía.

Elisa: ¿Su mandíbula cayó? Como diciendo algo así como un, "¿Qué carajo pasa"?

Erik: ¡No, mamá! Fue algo salvaje. No sabía qué diablos hacer. Fue más como un, “Oh Oh." No quería quedarme allí. No quería verlo todo, pero no podía irme. Fue como ver un mal accidente automovilístico.

Elisa: Oh, sí.

Erik: Pero no estaba ligado al suceso, en absoluto. Fue extraño.

Elisa: ¿Te refieres a estar atado emocionalmente?

Erik: Sí.

Elisa: ¿Qué más sentiste?

Erik: Supongo que fue un shock, más que nada.

Elisa: ¿Sentiste euforia en ese momento?

Erik: Silencio. Estaba todo tranquilo. No tuve dolor. No tenía preocupación alguna, y eso era inquietante, porque no había sentido eso en mucho tiempo. Era como si todo estuviera en su lugar correcto.

Elisa: Vaya.

Erik: Creo que fue mucho más inquietante, que festivo.

Elisa: ¿Pensaste que era genial dar una vuelta volando? ¿Sentiste ese amor incondicional del que mucha gente habla?

Erik: No.

Elisa: ¿O lo sentiste cuando cruzaste?

Erik: Sí. Cuando crucé.

Elisa: Está bien. Entonces, mientras mirabas a [tu cuerpo], un tanto asombrado y tal vezconmocionado, ¿Te sentiste un poco como, “Oh, mierda? ¿Qué van a pensar cuando me encuentren?".

Jamie: Está muy callado. Puedo decir que lo está pasando.

Jamie: Le digo que se tome su tiempo.

Erik: Sabes, no me detengo para pensar demasiado en mi muerte.

Erik: Para mí, fue una salida. Tiene mucho dolor asociado.

Elisa: (llorando): Ya.

Erik: No es solo mi dolor, sino el dolor de mi familia, y el dolor de mis amigos.

Elisa: Sí.

Elisa: (sintiendo su malestar y deseando evitarle más dolor): Bueno, no nos detengamos en eso. Vayamos a lo que sucedió, y cómo te sentiste cuando comenzaste a salir de la habitación. Cuéntame sobre eso.

Erik: Recuerdo haber visto mi cuerpo, irse.

Elisa: ¿Qué tu cuerpo se fue? ¿No será que viste cuando se lo llevaron?

Erik: Sí. Metido en la bolsa.

Elisa: De acuerdo. Correcto.

Erik: Entonces recuerdo que pensé que necesitaba despedirme.

Elisa: si.

Erik: Y si recuerdo bien, fue entonces cuando comencé a hablar con los miembros de la familia.

Elisa: Eso debe haber sido doloroso, porque no éramos felices.

Jamie: Tiene los codos sobre las rodillas; tiene las manos entrelazadas frente a él. Muy informal, pero solemne. Más solemne.

Erik: Recuerdo haber encontrado ...

[Pausa larga]

Jamie: Erik está llorando.

Elisa: Oh. No tenemos que hacer esto, cariño.

Erik: Cállate, mamá.

Jamie: Llorando, pero no tengo miedo de decirte que te calles.

Erik: Cuando disminuyes la velocidad, para repasar tus recuerdos, ves más. Te pierdes mucho cuando estás en el momento, es como si tus ojos no fueran lo suficientemente grandes para captar todo. Sé que te lo he dicho antes. Lo siento mucho por ti. Lo siento mucho por Papá y por todos los demás de la familia.

Elisa: Sí.

Erik: Pero también sé que no puedo disculparme por mi felicidad.

Elisa: Lo sé. Estoy feliz por ti. No lo diría de otra manera. Si tuviera que elegir entre que estuvieras aquí, de forma infelíz o miserable, por supuesto. . .

Erik: ¿Cuán jodido estaba mamá, para que esa fuera mi única opción?

Elisa: Sí. No habría querido que eso sucediera.

Erik: Lo que parece que no puedo entender, cuando vuelvo a recordar todo esto, es: ¿por qué duele tanto cuando el resultado obtenido es, exactamente, el que yo buscaba?

Elisa: Y eres feliz. Quiero decir, ¿cómo podría doler cuando estás feliz? Solo miro el momento. El momento es triste, pero el resultado fue feliz. Por tanto pasaremos de ese momento. Háblame de tu cruce al otro lado. Recuerdo que dijiste que sentías como si te tiraran de los hombros. No lo recuerdo exactamente.

Erik: Sí. Sentí que me estaban apartando. Supongo que realmente no estaba prestando atención. Suena a mi, de todos modos. Es como si estuviera mirando algo a lo que se suponía que no debería mirar.

Elisa: ¿Estabas mirando algo que se suponía que no debías estar mirando?

Jamie: Erik habla en general.

Elisa: Oh, está bien.

Erik: Probablemente por eso no vi esta gran luz blanca y hermosa o, ya sabes, ¡no escuché cantar a los ángeles!

Jamie: Está riendo.

Erik: No, probablemente estaba haciendo algo mal. Probablemente me dieron una sacudida.

Elisa: Oh, ya veo.

Erik: Sí. Ese sentimiento fue indescriptible. Eso es como tomar un cuerpo y pasarlo por un colador y que todas las piezas salgan por el otro extremo, pero diferentes. Limpias. Supongo que sería como la sensación que [la gente tenía] en los viejos tiempos cuando pensaba que, si eran bautizados por Jesús, todo desaparecería y ya solo serían buenos. Eso es lo que, realmente, es la muerte.

Elisa: Vaya.

Erik: Tú, como alma, eres realmente bueno. No te faltan otras partes. Todavía están contigo, pero ellas no tocan gran parte de la canción. No pierdes nada de ti mismo, pero lo que surge es esta abrumadora sensación de perfección, la de estar en el lugar correcto, ser amado y ser capaz de sentirlo. Por ejemplo, no hay ni la más mínima duda sobre lo que se avecina en tu camino, o si hay algo pendiente, o simplemente están tratando de engañarte y realmente es el Infierno. (Erik se ríe). Nada de eso. Es demasiado, ni siquiera lloras por eso. Ahí es cuando aparecen tu familia y tus amigos. Cuando te das cuenta de que no estás solo.

Elisa: ¿Quién fue el primero en recibirte?

Erik: Bueno, diablos, ni siquiera puedo recordarlo.

Elisa: ¿No sería Denise, [mi hermana]? La Tía Denise. Creo que ella estaba ahí para saludarte, ¿verdad?

Erik: Sí. Recuerdo haber visto un montón de caras. Ahora es diferente. Mirando hacia atrás, puedo sentir la sensación mucho más claramente, en lugar de confiar en lo que vi o dije.

Elisa: Sí, porque, en espíritu, se trata más de sentimientos que de recordar detalles mentales basados en el cerebro. Creo que es por eso por lo que la gente se decepciona cuando van a un medium y hacen preguntas de validación del estilo de, "¿Qué pusimos en tu bolsillo cuando te enterramos?" Tu no recuerdas cosas así. No es importante después de cruzar. Todo se trata de sentimientos.

Erik: Tienes razón. Y créeme, tampoco revisamos los malditos bolsillos.

Elisa: Exactamente, muy bien. Pasemos a la revisión de la vida. ¿Cómo es la revisión? Quiero decir, tal vez todas sean diferentes, pero dame una idea general de lo que implica la revisión de la vida.

Erik: Bueno, a veces sientes que entras en esta sala, que es como un cine IMAX, y es casi una vista de 360 [grados], pero puedes sentir las emociones e impresiones que otras personas percibieron de ti. La revisión es pasar por tu vida pudiendo ver por ti mismo lo que has hecho, y verte a través de otras personas.

Elisa: Por tanto eres como [otra] persona. ¿Ves a través de sus ojos, y sientes lo que sintieron?

Erik: Sí.

Elisa: Chico, eso no es divertido. Si en la Tierra, resolviste los problemas, si hiciste las paces con esa persona, ¿todavía tienes que pasar por eso con esa persona?

Erik: ¡No, no.

Elisa: Está bien.

Erik: Si está realmente resuelto, ya no está en tu plato esa comida.

Elisa: ¡Oh, voy a andar disculpándome con mucha gente!

Erik: La revisión de la vida no es como si alguien entrara y dijera: “Disculpe. Es hora de revisar tu vida. Son las 2 y media. Por favor, entre en esta habitación, y tome asiento ".

Erik: Es algo que, simplemente, te sobrepasa, y es extraño. Sucede realmente rápido, pero sentirás que has estado ahí desde siempre.

Elisa: Bueno, ¿qué causa la revisión de vida? No entiendo. ¿Cuáles son sus orígenes? ¿Quién decide eso? ¿Quién crea esto?

Erik: La mayoría de las veces es, en realidad, la conciencia, la experiencia humana, la necesidad del ser humano de hacer una lista de verificación. Energética, y espiritualmente, no es realmente necesario. No necesitas pasar por esos puntos de control porque, si entraste conectado espiritual y energéticamente, ya sabes cuáles son esos puntos de control. Ya sabes, esto es prácticamente para todas las personas vivas, ya que funcionamos más desde nuestro cerebro que desde cualquier otra parte.

Elisa: Ajá.

Erik: Entonces, es casi como si el cerebro se descomprimiera pasando a través de todo, pero en sentido inverso, al revés. Llegas a entender, por ti mismo cómo te perciben otras personas. Y tus respuestas te son dadas. Algo así como, "¡Oh! ¡Es por eso por lo que sucedió eso de essa manera!". Con la revisión, pones las cosas en su sitio de una manera muy rápida.

Elisa: Entonces, ¿es doloroso emocionalmente?

Erik: No. Definitivamente es algo jodido, pero no es doloroso. No naufragas como en el Titanic, ¿de acuerdo, mamá?

[Jamie y yo nos reímos]

Elisa: Y dime, ¿tu revisión fue larga? ¿Tuviste que pasar por mucho?

Erik: No, no fue mucho. La mía eran principalmente las voces en mi cabeza. Ya sabes, mi jodida basura.

Elisa: ¿Qué quieres decir con eso?

Erik: Que tuve que tener bastante conversaciones conmigo mismo, ya sabes, para convencerme de la mierda y tratar de entenderme. Eso es principalmente lo que encontré.

Elisa: ¿Con quién tuviste que tratar más, en lo que respecta a la revisión de tu vida?

Erik: Sobre todo con mi familia

Elisa: Sí, por supuesto. Bueno. ¿Algo más sobre la revisión de la vida?

Erik: No. Probablemente sea eso todo.

Elisa: ¿Alguna vez has tenido que pasar por revisiones de vidas pasadas al mismo tiempo, o es solo para esta vida actual?

Erik: Ya es bastante descomprimir la vida de la que has salido.

Elisa: De acuerdo. Ahora, hablemos de ese túnel blanco. Esa luz blanca de la que escuchaste. Por supuesto, algunas personas la experimentan; y otras no. ¿Por qué unos lo experimentan y otros no, y qué diablos es?

Erik: Bromeando, solo los buenos pueden bajar por el túnel. No, realmente no. Eso es una mierda.

Elisa: Me recuerda a ese antiguo programa de televisión norteamericano que se llamaba “los límites exteriores”, [The Outer Limits], en el que los actores saltaban a un gran círculo de remolinos.

[Jamie se ríe]

Erik: No, realmente se basa en un sistema de creencias.

Elisa: ¿Qué es ese túnel? ¿Acaso existe?

Erik: ¿Te refieres al túnel de luz blanca?

Elisa: Sí.

Erik: Esta es mi humilde opinión al respecto. Que cuando mueras, si eso es en lo que crees, verás la luz blanca brillante y demás chorradas, pues eso es lo que obtendrás.

Elisa: De acuerdo.

Erik: Pero también, que la muerte real del cerebro, la falta de oxígeno y todo lo demás, crea una visión de túnel. ¿Es esa la luz a la que entras cuando cruzas a la muerte? No. Ese es tu cerebro muriendo.

Elisa: Bueno, el sistema de creencias tenía que empezar en algún lugar.

Erik: Comenzó por personas que tuvieron experiencias cercanas a la muerte, o lo que sea, y sus cerebros se morían. Y cuando se levantaron hablaron sobre eso, que vieron a Dios y ángeles, y todo esto. Conscientemente…

Jamie: Gracias por decir eso. Esto tiene sentido.

Erik: Conscientemente, tratas de mirar a través de los ojos de tu cabeza, y cuando el cerebro está muriendo, eso es lo que ves. Intuitivamente, si miraras con el tercer ojo, no tendrías por qué ver un túnel de luz blanca para cruzar al Más Allá.

Elisa: Perfecto.

Erik: En este sentido, si miraras con tu tercer ojo, el ojo intuitivo, lo más probable es que pasar al otro lado sea como ir a otra habitación.

Elisa: Sí, mucha gente lo describe de esa manera, como ir a otra habitación. Cuando te empujaron hacia atrás por los hombros, ¿dónde terminaste?

Erik: ¡En otra habitación!

Elisa: Está bien, ¿y qué mas?.

Erik: Es algo loco. La habitación a mi alrededor simplemente desapareció. Allí mismo me disolví. Creo que es la única forma en que sé cómo decirlo. Se apagan las luces. Se encienden las luces y estás en un espacio diferente. No tiene nada de rápido. No fue como un tirón rápido ni nada parecido. Se trataba más de cómo cuando sientes que tu cuerpo se va a dormir. Es más así.

Elisa: Recuerdo que cuando estabas haciendo el repaso de tu vida, hablaste de cómo te sentabas en una larga mesa y tenías la cabeza entre las manos.

Erik: Ajá.

Elisa: Está bien. Retrocedamos a ese momento. ¿Cuáles fueron algunos de los ajustes que tuviste que hacer cuando cruzaste? ¿Cuáles fueron algunos de los más, no diré "difíciles" sino más interesantes, o más intensos?

Erik: el cómo moverse.

Elisa: ¡Cómo moverse! ¿Quieres decir un "¡No puedo sentir las piernas!" como en la película Mayor Payne.

Erik: Después de reirse con la ocurrencia de su madre sigue diciendo: Ya sabes, se trata de saber cómo ir de aquí para allá. Y es extraño, porque sigues moviéndote y viajando, pero no puedes explicarte cómo lo haces. Es como, "¿Qué está pasando? ¡Oh, mierda, está sucediendo! " No sabes el cómo.

Elisa: ¿Fue aterrador?

Erik: No. No tuve miedo pero, definitivamente, no obtuve pronto todas las respuestas que necesitaba, así que eso fue extraño.

Elisa: ¿Hubo algún tipo de guía o presencia que estuviera ahí durante tu muerte, la revisión de la vida o lo que vino después? ¿No había nadie para ayudarte?

Erik: Riendo dice: Sí lo había. Ese idiota debió estar escondido detrás de una cortina, ¡porque no vi a nadie!

Elisa: ¡Oh, Dios mío! Eso es horrible. ¿Cómo? ¿Fue porque no pediste ayuda?

Erik: Oh, no pedí ayuda.

Erik: Y pienso que es que yo quería estar solo.

Elisa: ¿Crees que si hubieras pedido ayuda alguien habría acudido?

Erik: Oh, sí, con las campanas sonando.

Elisa: ¿Por qué querías estar solo?

Erik: Porque quería descansar.

Elisa: ¿Fue parte de la vergüenza de hacer lo que hiciste? ¿Pensaste que te meterías en problemas por suicidarte?

Erik: Vaya. Eso es interesante.

Elisa: ¿Sería como decirse algo así como un, “vaya, me pillaron, ¡no me llevéis al infierno!"?

Erik: No.

Elisa: De acuerdo. Eso es bueno.

Erik: Erik, asombrado, contesta: ¡No, nunca me sentí así! ¿No es genial eso?

Elisa: Eso es genial. Entonces, dices que no podías moverte. Cuéntame toda la experiencia de aprender a moverte.

Erik: Bueno, es como si conscientemente no pudieras obligarte a ir a un sitio, pero si piensas en estar en algún lugar, terminas allí. Siguió sucediendo eso, pero no pude entender, exactamente, cómo sucedía.

Elisa: ¿Podías ver tus brazos y piernas, o solo eras una conciencia? ¿Podías ver tu cuerpo espiritual?

Erik: Sí. Eso es principalmente lo que ves. No te ves como si fueras un ser humano.

Elisa: Entonces, ¿no era como si solo vieras tu entorno, como si solo fueras una conciencia de ti mismo, sin un cuerpo?

Erik: Sí, sin cuerpo humano. Tenía una forma enérgica, ya sabes, como la luz, y me sentía como yo mismo. Sabía dónde estaba. Sabía lo que había pasado. No es como si me hubieran arrojado a un mundo extraño sin un mapa. Sentí que pertenecía a aquel lugar, y estaba a salvo. Nunca tuve miedo, pero eran las cosas más pequeñas, como esa, las que te joden un poco en la cabeza.

Elisa: ¿Pero cuando mirabas hacia abajo, podías ver piernas, pies y todo eso? No eras un cuerpo humano, pero tampoco como una bola de luz, ¿verdad?

Erik: Correcto. Sí, claro. Tenía una forma enérgica como mi cuerpo humano.

Elisa: ¿Y podías moverte? ¿Podías mirar tu mano y cerrar el puño, mover las piernas y cosas así?

Erik: ¡Oh, sí!

Elisa: Entonces, en realidad se trató más bien como mudarse de un lugar a otro.

Erik: Sí.

Elisa: Por lo que dices, ¿aprendiste a pensar en un lugar y a aparecer allí?

Erik: Sí.

Elisa: ¿Qué otros ajustes tuviste que hacer cuando cruzaste?

Erik: Bueno, estaba acostumbrado a discutir conmigo mismo, en mi cabeza, o tener pensamientos y emociones contradictorios, pero esa mierda, simplemente, aquí no sucede. Eso fue raro.

Elisa: Hmm. ¿Qué ocurre en vez de eso que cuentas?

Erik: Erik dice, un poco frustrado: Realmente no sé cómo explicarlo. Simplemente no los tienes. No puedes estar enojado y feliz a la vez.

Elisa: Eso significa tener más paz. No más conflictos en tu cabeza.

Erik: Sí.

Elisa: ¿Qué edad tenías cuando no tenías conflictos en tu cabeza?

Erik: Tuve momentos de esos, pero nunca de manera consistente.

Elisa: Bueno, no creo que nadie los tenga consistentemente.

Erik: ¿De verdad?

Elisa: ¿Dónde están aquellos que siempre, siempre, pero siempre, están en paz, sin conflicto en su cabeza? Por supuesto, no hay nadie así.

Erik: Vamos. Tiene que haber gente. ¿No es eso lo que es ser feliz?

Elisa: ¿El cien por ciento del tiempo? Veamos. ¿Qué pasa si alguien está muy estreñido y está sentado en el inodoro sin poder cagar? ¡Esa no es una situación feliz!

Erik: se ríe y dice: Sí, pero eso es un conflicto físico.

Elisa: No importa. Va a crear un conflicto emocional. Nadie está totalmente en paz todo el tiempo, a menos que seas el Dalai Lama.

Erik: Debes tener un problema con la mierda, mamá.

Elisa: ¡Mírate a ti, y a tu humor escatológico! ¡No hablaría así! Bueno, en fin. Vayámonos. ¿Qué otros ajustes tuviste que hacer?

Erik: Esos dos fueron los principales. Me refiero al moverse, y a la quietud de mente.

Elisa: ¿En qué momento pediste ayuda? ¿Cuándo fue cuando, finalmente dijiste, "necesito ayuda"?

Erik: Cuando quise volver con mi familia, y no sabía cómo.

Elisa: Ah. ¿Nos extrañaste?

Erik: ¡Sí!

Elisa: ¿Y quién apareció?

Jamie: Se manifestó una guía femenina. No fue su tía. Era alguien que le estaba diciendo cómo cruzar dimensiones, y cómo comunicarse.

Erik: Por esa época, fue cuando estabas haciendo la investigación y tratando de encontrar médiums, ya sabes, yo trataba de aprender cómo hablar a través de ellos y adentrarme en ese mundillo. Para entonces yo ya no tenía ningún conflicto con mis emociones. Estaba perfectamente bien y sabía cómo viajar e, inmediatamente, comencé a aprender a comunicarme con los humanos. Comunicación dimensional transversal.

Elisa: ¿Cómo lo pediste? ¿Pensaste, simplemente, "¡Necesito ayuda!"?

Erik: Sí.

Elisa: ¿O te subiste al altavoz y gritaste: "¡Un poco de ayuda!"

Erik: No. Yo lo pensé. Necesitaría que alguien viniera a enseñarme, y eso es todo lo que haces. Solo piensas en eso.

Elisa: ¿Tuviste que pasar por algún tipo de terapia? Dicen que algunas personas tienen que pasar por terapia para recuperarse energéticamente, y así sucesivamente. ¿Pasaste por ese proceso también?

Erik: Hice algo de eso, sí.

Elisa: Un médium me dijo que tenías que pasar por mucha menos terapia que la mayoría de los suicidas.

Erik: Sí.

Elisa: ¿Por qué es así?

Erik: Debido a que mi suicidio era parte del contrato espiritual que firmé para esa vida: era el final de mi línea. Por el contrario, en la mayoría de casos de personas que se quitan la vida, ese suicidio no es el final natural de su línea de vida, solo lo hacen por venganza, o porque vuscan una salida, o un escape.

Elisa: De acuerdo. No es un punto de salida pactado con anterioridad, para ellos.

Erik: Sí.

Elisa: Está bien. Ahora te pregunto, ¿qué es lo que la mayoría de los espíritus extrañan del plano terrestre? Sé que tienes a todos tus amigos allí, y ellos dicen: "Dios mío, realmente extraño la tortilla de patata española, o la paella, o el sancocho, o los tamales". Sea lo que sea ¿qué es lo que la mayoría, si fueras a hacer una encuesta, extrañaría del plano terrenal?

Erik: La comida, es lo primero. El sexo, es lo segundo.

Elisa: Pero pensé que el sexo era mejor allá.

Erik: Lo es, pero no es así de físico. Es diferente. Tan diferente.

Elisa: ¿Y por qué extrañas la comida? ¿No puedes evocar el sabor y la textura, o es diferente?

Erik: Es totalmente diferente.

Elisa: ¿Pero no puedes crear ese sabor, la textura y la plenitud en el vientre?

Erik: Es todo masticarlo, olerlo, esperar a que se haga. Quiero decir, realmente no tenemos ese tipo de proceso. No lo necesitamos.

Elisa: Sí, pero ¿no puedes crear todos los aspectos tal y como los describes?

Erik: No es lo mismo, mamá.

Elisa: No es lo mismo.

Erik: Es como si el sabor artificial no fuera lo mismo que el sabor real.

Elisa: ya veo. Y el sexo no es del todo, ya sabes. No tienes el físico, el cuerpo físico quiero decir.

[Jamie se echa a reír.]

Jamie: Ajá. Erik está hablando del "bang bang".

Elisa: Oh, Dios, Erik. Bueno, no tenías mucho sexo cuando estuviste aquí, pobre chico. Supongo que tendrás que volver a reencarnarte como prostituta.

[Jamie se ríe mucho.]

Elisa: O, ¿cómo lo llamas? Un gigoló. Vuelve como prostituto.

Erik: Si regreso, definitivamente regresaré con una polla.

Elisa: Entonces, vuelve como gigoló, y luego podrás conseguir algo, de forma adecuada.

[Jamie todavía no ha dejado de reír.]

Erik: Erik dice: Jamie acaba de morirse, y [Todos no podemos evitar reírnos de eso].

Elisa: De acuerdo. Hablemos de esto: cuando los espíritus vuelven a cruzar [para reencarnar], ¿qué extrañan del cielo?

Erik: ¿Eh?

Elisa: Digo, que cuando regresan al cielo y dicen: "Estoy muy contento de estar de regreso porque me perdí", ¿Qué es lo que extrañan del cielo?

Erik: La mierda.

Elisa: ¿Extrañas alejarte de la mierda?.

Erik: Sí. Me refiero al conflicto emocional. Es por eso por lo que a muchos espíritus les gusta venir a la Tierra, para sentir las emociones de vibración más baja. La privación. El conflicto.

Elisa: Pero me dices que cuando regresan al cielo, dicen: "Uf, extraño esos conflictos emocionales".

Jamie: ¿Eso tiene sentido? Porque la forma en que lo está explicando Erik es que las almas se sienten atraídos por esos conflictos, y que por ellos por lo que reencarnan. Ahí, con esos conflictos, es donde se aprenden algunas de las lecciones más profundas.

Elisa: Ya veo.

Erik: Se crece a través del conflicto. No hay conflicto en el cielo ni en el hogar. Cuando el humano muere y se vuelve espíritu nuevamente, la facilidad de la vida es a veces impactante y es difícil adaptarse.

Elisa: si.

Erik: Porque pasaron todo ese tiempo adaptándose al conflicto.

Jamie: Oh. Entonces lo que dice Erik no es que eso sea lo que más estrañan sino que es lo más difícil para adaptarse.

Elisa: ¿Es difícil adaptarse para no tener más conflictos? Te gusta la dimensión libre de conflictos, pero es difícil adaptarse a ella. Mas, yo quiero saber qué extrañan del cielo cuando regresan a la Tierra. Quiero saber cómo acabaría la frase, "Oh, Dios mío, estoy muy contento de estar de regreso, porque hecho de menos …"

Jamie: Una aclaración Lo que preguntas es, ¿me alegro de estar de regreso en la Tierra, o de estar de regreso en el cielo?

Elisa: En el cielo

[¿Por qué esto es tan difícil?]

Erik: Oh, la simplicidad de la vida. Paz. Amor. El amor incondicional.

Elisa: Está bien. [¡finalmente!] ¿Cuáles son las nuevas habilidades más geniales que obtuviste y que no tenías en la Tierra?

Jamie: Nuevas habilidades geniales.

Elisa: si.

Jamie (a Erik): ¡Eso no es obsceno!

Elisa: ¡De veras!

[Jamie se ríe.]

Elisa: No esperaba que pudiéramos ir allí sobre esta cuestión, pero déjelo en manos de Erik.

Erik: Ente las habilidades está la Telepatía. Me encanta. Es un procedimiento exacto. Es mejor que los mensajes instantáneos. Mejor que los mensajes de texto telefónicos. Mejor que el correo electrónico.

[¿Sin fax?]

Elisa: De acuerdo. ¿Qué más?

Erik: No estar atrapado en el planeta Tierra. Puedes ir a donde jodidamente quieras ir.

Elisa: ¿Qué más? Nombra un par de esas cosas geniales que no tienes en la Tierra.

Erik: Un par más. Por ejemplo, trascender el espacio y el tiempo. Viaje en el tiempo. Volver a tus vidas pasadas. Oh, ¿Y qué hay de ir a la maldita biblioteca?

Elisa: ¿Te refieres a los Registros Akáshicos?

Erik: Sí. Esa mierda te deja boquiabierto.

Elisa: Cuéntame sobre eso.

Erik: Ni siquiera puedo planear cómo llegar a la tienda y comprar todo lo que necesito, y entro [en la biblioteca] y todas mis vidas pasadas, mis vidas futuras, mis vidas ahora, mis vidas después de la muerte están muy bien sintonizado. ¿Cómo diablos pasa eso?

Elisa: ¿Entras en una biblioteca y abres un libro? Quiero decir, ¿cómo es?

Erik: No, no es realmente como un libro. Es más como una página sin fin. No es como un libro de "chuparte el dedo, y pasar página".

Erik: Es como una especie de pergamino, en cierto modo, como una página sin fin que no tienes que ir desenrollando manualmente. La información, simplemente, te llega.

Elisa: ¿Sería como una pantalla holográfica?

Erik: Algo así. Si, si, si. Es tecnológicamente avanzado.

Elisa: ¿Simplemente tomas el pulgar y lo recorres como se hace sobre la pantalla de uno de esos “listófonos”, ya sabes, teléfonos móviles inteligentes? ¿O acaso piensas en ir a la próxima vida, o a lo que sea?

Erik: Sí. Te muestra lo que quieres que te muestre.

Elisa: Interesante. ¿Tiene colores atractivos? ¿Brillantes? ¿A lo mejor, vívidos?

Erik: Sí. Yo lo veo en una especie de color azul brillante.

Elisa: Hmm. Casi lo puedo ver. Probablemente ya lo haya visto.

Después de esta sesión con Jamie, sentí que ella y Erik tenían una conexión definida. En esta y futuras sesiones, disfrutan de una bromas contagiosas y cariñosas. Erik ha dicho que le gusta la forma en que Jamie se comunica porque ella no "se lo toma tan a pecho". Los dos, a menudo, se comportan como hermanos, molestos y cariñosos a partes iguales.