Conclusión
La Tierra tiene muchos placeres y es lugar hermoso en el que
estar, pero no es por eso por lo que nosotros, como almas, elegimos encarnar
aquí. Venimos para aprender y experimentar. Es una escuela donde podemos crecer y desarrollarnos bajo la
protección y tutela de seres sabios y benevolentes. Con la ayuda de estos seres sabios, y de nuestros compañeros
del alma, hacemos planes cuidadosos para cada vida que vivimos en la Tierra. Existe todo un completo sistema de apoyo y orientación para
permitirnos hacer esto, y un conjunto explícito de principios rige las
actividades dentro de la esfera terrestre.
Cuando encarnamos en la Tierra, se establece una amnesia que
nos permite creer que somos el personaje que hemos elegido ser en cualquier
vida, y que nuestra experiencia actual es todo lo que hay. Nos sumergimos en el drama que se desarrolla ante nosotros,
un drama que elegimos para poder tener ciertas experiencias, y aprender de
ellas lecciones específicas. También hay desafíos especiales, integrados en una
encarnación en la Tierra, que ayudan a nuestro desarrollo.
La escuela de la Tierra requiere que nos adaptemos a estar
en un cuerpo humano y negociar con un ego que creemos que es nuestro verdadero
ser. Afrontamos el desafío de cuidarnos y brindarnos apoyo,
conectarnos y cooperar con los demás, y vivir nuestras vidas con pleno sentido.
Se nos da libre albedrío y la capacidad de crear nuestras propias experiencias.
Hay un tremendo potencial para el amor, la alegría, la paz, la realización, la
creatividad y el logro. Sin embargo, todo esto se desarrolla en un entorno donde
somos vulnerables a enfermedades, lesiones, desastres naturales, aislamiento,
conflictos y violencia. Experimentamos miedo, ira y otras emociones fuertes. Ocurren
situaciones desafiantes, y observamos al bien y al mal en acción. Es en estas
condiciones en las que tenemos el potencial de hacer un rápido avance
espiritual. Al enfrentar las situaciones difíciles y dolorosas en
nuestras vidas, podemos encontrar el don de la sabiduría contenido en ellas. Las sesiones de Vida entre Vidas ofrecen una manera de
conectarse con nuestro verdadero yo mientras estamos inmersos en la experiencia
humana.
Los casos vistos nos han mostrado cómo recibir orientación
de nuestro ser superior, guías y seres sabios, y cómo obtener una perspectiva
única de nuestras vidas. Si bien los casos que hemos visto son, evidentemente,
personales, las situaciones de la vida que se han representado, no lo son.
Hemos explorado problemas que muchos de nosotros hemos enfrentado o que podríamos
enfrentar en el futuro.
Toda esta información que puede servir de guía u orientación,
ha pasado por muchas manos antes de llegar a usted. Ha sido transmitida por
almas y espíritus, recibida por clientes generosos, y comunicada por los
profesionales del Instituto Michael Newton. Todos estos intermediarios tienen
un solo objetivo: ayudarle en los desafíos que enfrente como alma encarnada en
este exigente planeta.
Esperamos que alguno de los casos presentados le haya sido útil,
que haya recibido conocimiento y sabiduría que alivie su carga y le aliente a
conectarse con su propia sabiduría interna.
Le deseamos una existencia gozosa y plena mientras continúe
viviendo su vida en la Tierra y que, a su debido tiempo, regrese a su hogar
espiritual.
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