MÁS ALLÁ DE LAS VIDAS PASADAS, por Mira Kelley

MÁS ALLÁ DE LAS VIDAS PASADAS

por Dobromira Kelley


Traducción ARS GRATIA por KOS D'ASTUIRES  (2025)


Puede escuchar LA MEDITACIÓN DE LA CONFIANZA que proporciona la autora en este ENLACE

 

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CONTENIDO

 

 Prólogo del Dr. Wayne W. Dyer

Un nuevo comienzo  

Introducción

Capítulo 1: Explorar tu pasado te permite sanar tu presente

Capítulo 2: Todas las vidas son simultáneas

Capítulo 3: Cada elección crea una nueva realidad

Capítulo 4: Puedes conversar con tu yo superior

Capítulo 5: Todo te refleja

Capítulo 6: Perdónate a ti mismo y a los demás

Capítulo 7: Puedes jugar con el tiempo

Capítulo 8: Puedes sanar tu cuerpo

Capítulo 9: Tienes derecho a amarte a ti mismo

Capítulo 10: Confía en ti mismo y sigue tu emoción

Epílogo: Una vida de expansión gloriosa

Apéndice A: Transcripción de regresión de vidas pasadas

Apéndice B: Preguntas frecuentes sobre la regresión a vidas pasadas

Más recursos

Expresiones de gratitud

Sobre el Autor

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PRÓLOGO

 Hace varios años escribí un libro titulado 10 secretos para el éxito y la paz interior. El primer principio es "Tener una mente abierta a todo y apegada a nada", y no puedo enfatizar lo suficiente lo importante que ha sido esto en mi vida. Durante mucho tiempo he creído que estar abierto hace que los sucesos milagrosos se conviertan en la norma. Las fuerzas benévolas del universo comienzan a venir en nuestra ayuda, y la sincronicidad Divina “mueve las piezas”, mostrando al ego quién está realmente a cargo.

Mi esposa y yo siempre criamos a nuestros hijos para que también tuvieran mentes abiertas, y alentamos la discusión sobre una variedad de temas, incluida la reencarnación y los recuerdos de vidas pasadas. Sin embargo, aunque había leído Muchas vidas, muchos maestros de mi buen amigo Brian Weiss y compartido escenarios con él por todo el mundo, rara vez tuve experiencia de primera mano con la regresión a vidas pasadas. Entonces conocí a Dobromira Kelley.

Mira, que había trabajado con la Dra. Weiss, me contactó hace unos años con la invitación de participar en una regresión con ella. Dijo que intuitivamente sentía que me beneficiaría de la sesión y que no quería nada de mí más que ofrecerme esta oportunidad. Estaba tan intrigado por su sincera carta que decidí aceptar su oferta.

Cuando llamé a Dobromira para establecer un tiempo para hacer la regresión, de repente me habló de una mujer llamada Anita Moorjani, que había escrito una descripción increíble de la experiencia cercana a la muerte (ECM) que había experimentado. Dobromira me envió lo que Anita había escrito, y me conmovió hasta el punto de que regalé numerosas copias y finalmente alenté a Hay House a publicar un libro de esta increíble mujer. Anita y yo nos hicimos amigos cercanos, y su libro, Morir para ser yo, se convirtió en un éxito de ventas e inspiró a innumerables personas. Y la decisión de Dobromira Kelley de enviarme el informe de la ECM de Anita provocó esta estupenda cadena de sucesos.

Pasó algún tiempo después de conocer a Mira, durante el cual tuvimos varias conversaciones más. Finalmente, vino a verme a Maui para la regresión. No tenía expectativas para nuestra sesión, pero una hora después de su llegada, entré en una de las experiencias más fascinantes de viajes en el tiempo hipnóticos que se puedan imaginar. Dobromira grabó toda la sesión y transcribió cada palabra, algunas de las cuales reproduje en mi libro Wishes Fulfilled (y Dobromira lo menciona aquí en Beyond Past Lives).

Si bien casi no recordaba exactamente lo que dije durante nuestra sesión, las imágenes visuales eran muy claras. Todavía estoy muy intrigado por todo lo que sucedió mientras estaba en ese estado semihipnótico con Mira, y por todos los sucesos sincrónicos que siguieron después de conocerla. Era solo otro ejemplo de lo que sucede cuando mantenemos una mente abierta a todo y apegada a nada. Como nos recuerda una de mis citas favoritas de Mark Twain: “No son tanto las cosas que no sabemos las que nos meten en problemas. Son las cosas que sabemos que simplemente no son así”.

Sé que disfrutarás este libro y las ideas que Dobromira presenta aquí tanto como yo.

— YO SOY,
Wayne W. Dyer

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UN NUEVO COMIENZO

Quiero comenzar este libro con un antiguo ritual búlgaro. Esto es algo que mi amada madre, Liliana Paslieva, y yo hemos hecho en numerosas ocasiones cuando he estado al borde de un nuevo comienzo:

Mi madre toma un recipiente con agua y le pone algunas flores frescas. Lo sostiene en sus manos y, cerrando los ojos, infunde el agua con su amor maternal. Ella ora para que sea protegida y guiada en mi viaje.

Mi madre y yo nos paramos justo dentro de la entrada de nuestra casa. Ella abre la puerta principal, vierte el agua en el suelo y dice: "Dios delante de ti, y tú sígueme".

Cruzo el umbral, lleno de la euforia de un nuevo comienzo. Pongo un pie en el charco en el suelo y digo: "Dios delante de mí, y yo lo sigo".

Doy este primer paso sabiendo que estoy listo. Salto con fe a lo desconocido. El cruce del umbral simboliza cómo estoy entrando en mi ser más grande, física, emocional y espiritualmente.

Pongo mi otro pie en el charco de agua. Una vez más digo: “Dios delante de mí, y yo lo sigo”.

Siento la estabilidad y la seguridad presentes en mis pies. Ahora estoy firmemente arraigado en mi camino: el camino de servir a la expansión de la humanidad al compartir lo que me ha sido revelado a través de mi trabajo.

Me embarco en este viaje con confianza. Sé que seré guiado. Sé que en cada paso del camino, todo lo que necesito llegará para apoyar mi viaje. Estoy agradecido por todos los regalos y oportunidades que ya sé que se me presentarán. Estoy agradecido por las formas en que la información que comparto en este libro ya ha cambiado mi vida. Sé que también tendrá un impacto en la vida de otros, y que los ayudará a crear una vida de milagros y expansión.

Así que crucemos el umbral juntas, ¿de acuerdo? Únase a mí en una aventura de regresión a vidas pasadas, tiempo, transformación y sanación.

Dios delante de nosotros, y nosotros lo seguimos.


INTRODUCCIÓN

Mi camino hacia la curación y el crecimiento a través de la regresión

Tenía 13 años cuando retrocedí por primera vez. Acababa de leer el libro de Brian Weiss A través del tiempo hacia la curación y estaba fascinado por la forma en que sus clientes podían resolver problemas complicados después de ver que sus desafíos actuales se desarrollaron en vidas pasadas. No tenía creencias preconcebidas sobre la reencarnación porque crecí en la Bulgaria comunista, por lo que la religión y la espiritualidad no eran temas que se discutieran durante mi infancia. Sin embargo, las posibilidades me intrigaron, así que seguí las instrucciones del libro para intentar una regresión a vidas pasadas por mí mismo. En esa primera regresión, reviví una vida como espía soviético durante la Segunda Guerra Mundial. (Cuento la historia completa de esta vida en el Capítulo 3.) La experiencia fue muy vívida y emotiva, y afectó mucho mis años formativos.

Mi vida continuó de la misma manera que la de cualquier niño. Luego fui a la universidad y a la facultad de derecho, y trabajaba como abogado en la ciudad de Nueva York cuando la regresión volvió a tocar mi vida. Después de sufrir más de un año de dolor debilitante sin alivio de ninguno de los profesionales médicos que había consultado, de repente recordé la regresión que había tenido cuando era niño. Desesperado, llamé a un practicante local y experimenté una curación espontánea después de solo dos sesiones. El dolor nunca volvió.

En ese momento se convirtió en mi mayor alegría compartir mi historia y las increíbles posibilidades que ofrece la regresión a vidas pasadas. Su estudio se convirtió en mi pasión. Empecé a asistir a conferencias y a leer todos los libros que pude encontrar sobre la regresión a vidas pasadas y la reencarnación. Les conté a mis amigos todo lo que había aprendido. Sabía que la regresión funcionaba, así que para cada problema que surgía, mi sugerencia era siempre la misma: "Vamos a curarlo a través de una sesión". Hice retroceder a todos mis seres queridos que estarían de acuerdo en intentarlo, con mayor frecuencia mi amada pareja.

No importaba que no me hubieran enseñado cómo hacer retroceder a otros; me sentí cómodo y fácil, como si tuviera una comprensión innata de cómo hacerlo. Sin embargo, el siguiente paso lógico en mi camino parecía ser tomar clases, así que estudié con algunos de los profesionales más destacados en el campo: el Dr. Brian Weiss y Dolores Cannon. Con el tiempo, comencé mi práctica y comencé a ver clientes los fines de semana. El punto de inflexión fue cuando tuve la oportunidad de hacer una regresión con el Dr. Wayne W. Dyer: Esa experiencia me abrió puertas para que me haya podido dedicar de lleno a ayudar a las personas a mejorar su vida actual experimentando sus vidas pasadas.

Cuando trabajo con clientes, se transforman ante mis ojos. Sus vidas nunca son las mismas después del trabajo que hacemos juntos, y esto me da una tremenda sensación de realización y satisfacción. Pero lo más interesante del trabajo es cuánto he aprendido sobre la vida a través de mis clientes. Mis mayores lecciones espirituales me han llegado a través de sus exploraciones, y fue mi deseo de compartir estas lecciones lo que me impulsó a escribir este libro. He profundizado mi comprensión de cosas de las que había oído hablar durante mucho tiempo pero que aún no había internalizado, y también descubrí verdades que nunca antes había escuchado en ningún otro lugar. De esta manera, me siento como un verdadero aventurero explorando dimensiones desconocidas de la conciencia.


EXORDIO

Antes de comenzar el libro en serio, me gustaría hablar sobre algunas cosas para ayudarle a maximizar la experiencia de este libro titulado Más allá de vidas pasadas. Tenga en cuenta lo siguiente mientras lo lee:

Los capítulos son lecciones

Cada uno de los diez capítulos de este libro está dedicado a una lección que me ha sido revelada a través de la regresión a vidas pasadas. La lección más básica es que es posible sanar tu presente trabajando con tu pasado. Entraré en más detalles sobre esto en el Capítulo 1, y también explicaré cómo guío a los clientes a través de una regresión a vidas pasadas. En el Capítulo 2, comparto mi impactante descubrimiento de que, desde el punto de vista del alma, todas nuestras vidas pasadas, presentes y futuras existen simultáneamente en el mismo momento del "ahora". Me baso en esta lección del Capítulo 3 y explico cómo cada elección que hacemos crea una nueva realidad. En el Capítulo 4, explico la diferencia entre tu “yo” cotidiano y tu “yo superior”, y te enseño cómo conectarte con tu yo superior en cualquier momento para recibir orientación. El Capítulo 5 está dedicado a la lección de que todo lo que nos rodea nos refleja a nosotros mismos, mientras que el Capítulo 6 cubre la importancia del perdón. En el Capítulo 7 exploramos cómo jugar con el tiempo, antes de entrar en el tema de la autocuración en el Capítulo 8. La lección central del Capítulo 9 puede ayudarte a comprender por qué tienes derecho a amarte a ti mismo y cómo el Universo te apoya con amor e incondicionalmente. Finalmente, en el Capítulo 10, comparto con ustedes lo que mis clientes me han enseñado sobre el karma, el destino y el libre albedrío.

Algunas definiciones útiles

En este libro utilizo bastantes términos especializados, algunos de los cuales pueden resultarle familiares y otros no. Permítanme proporcionar algunas definiciones útiles antes de comenzar.

La principal fuente de energía de la que se origina toda la creación no tiene un nombre correcto o incorrecto. Todos los nombres que se nos ocurren se originan dentro de él, por lo que todos son correctos. Por lo tanto, me referiré a él indistintamente como Dios, Todo-Lo-Que-Es, el Uno, la Fuente, la Creación, el Espíritu, el Infinito y la Luz.

Uso la palabra alma para referirme a tu esencia, tu ser, tu espíritu o la energía de tu conciencia. Tu alma proyecta aspectos de sí misma en la realidad física, y conoces esos aspectos de ti mismo como tu cuerpo y tu ego, y tus mentes consciente y subconsciente.

Cada alma se origina de una Superalma, un compuesto de diferentes almas. El Alma Suprema quiere experimentar la creación en diferentes dimensiones y entornos, y para hacerlo “divide” su energía, y cada división es una vida diferente. Cada uno de estos fragmentos es un alma total y completa en sí misma.

Otra persona cuya alma se origina en la misma Superalma que la tuya es tu complemento, equivalente u homólogo. En inglés se nombra como “counterpart (alma complementaria)”. En español “almas complementaria“ designa algo contrario u opuesto a alguien o algo por lo que no se debe traducir literalmente.

Un grupo de almas es un número de Almas Supremas que han creado lazos estrechos entre sí a través de sus diferentes encarnaciones. Los miembros de un grupo de almas tienen un acuerdo para ayudarse unos a otros a experimentar las lecciones que nuestros espíritus encarnan para aprender.

Los niveles de existencia comienzan desde abajo con el alma individual y van hasta la conciencia de Dios.. A medida que asciendes por los niveles, cada uno resuena con una vibración más alta que el anterior, y la naturaleza individual de la energía consciente se vuelve cada vez menos y la fusión de la conciencia se vuelve cada vez más grande, hasta que alcanzas el Uno. La conciencia angelical es el primer nivel, o división, por debajo de la energía de Dios, y la primera en conocerse a sí mismos como seres separados e individualizados de la única conciencia de la Fuente. Al dividirse cada vez más en las realidades vibratorias más densas, la conciencia angélica desciende al nivel del Alma Suprema, que se divide aún más en almas individuales. Para imaginar esta estructura visualmente, simplemente piense en un triángulo. La base representa las encarnaciones físicas de un alma como personas, y la parte superior representa la Fuente. En el medio se encuentra el Alma Suprema y la conciencia angelical por encima de eso.

Durante las regresiones a vidas pasadas, ayudo a las personas a conectarse con su Ser Superior para recibir orientación y respuestas. Tu Ser Superior es una extensión de tu alma que existe en las dimensiones superiores; no está orientado en la realidad física como lo está tu mente. Tu Ser Superior contiene los temas, las metas y la visión general de tu vida actual. Lleva la vibración energética de tu alma, lo que te permite conectarte y alinearte con tu esencia y propósito vibratorio.

A lo largo de este libro utilizo indistintamente los términos vidas pasadas, vidas simultáneas, otras vidas y vidas paralelas. Esto se debe a que, desde el punto de vista del Alma Suprema, todas las vidas tienen lugar simultáneamente en este momento actual, paralelas entre sí. Sin embargo, el tiempo es lineal desde nuestro punto de vista, por lo que las vidas que tienen lugar antes del día de hoy parecen ser una vida “pasada”. Para los propósitos de este libro, uso todos estos términos para describir lo que es, en verdad, la misma experiencia.

Lo que acabo de enumerar son definiciones básicas. Su comprensión se profundizará a lo largo del libro a medida que se analice cada palabra en su contexto, así que no se preocupe si no tiene completamente clara una o dos; al final del libro, serán parte de su vocabulario.

Ejercicios

A lo largo de Más allá de las vidas pasadas, ofrezco ejercicios para acceder a la poderosa sanación disponible para usted, con o sin regresión. Para aprovechar al máximo los ejercicios, tenga a mano un diario y un bolígrafo mientras lee. Tome notas, pero también haga suyo este libro: siéntase libre de subrayar las secciones que le hablan o resaltar las oraciones que lo conmueven. Escriba en los márgenes o en su diario y exprese sus momentos "ajá". Luego, comparta lo que aprenda aquí con otros. Esto te permitirá combinar completamente la energía de tu conciencia con la energía de este libro y crear un mayor plano de conciencia, transformación y crecimiento para ti.

También lo animo a que pruebe la regresión a vidas pasadas, tanto para que pueda comprender el proceso de adentro hacia afuera como porque sé que encontrará un inmenso valor en volver a visitar otras vidas que ha experimentado. He incluido un Apéndice con un guión que puede usar para retroceder; por favor consúltelo cuando quiera. Si prefiere que su regresión sea guiada por mí, incluyo información sobre dónde encontrar mi audio, Sanación a través de la regresión a vidas pasadas... y más allá, en la sección Recursos adicionales.

Mi meta

La vida es un ciclo de aprendizaje y enseñanza. Mi objetivo al escribir Más allá de vidas pasadas es compartir cómo la regresión ha ayudado a mis clientes a cambiar a una realidad de salud y bienestar para que puedan lograr lo mismo por sí mismos.

Este libro no busca profundizar en la validez de la encarnación y la regresión. Hay tantas fuentes maravillosas que ya han explorado estos temas. La eficacia de este trabajo se ha establecido en mi mente desde mi primera regresión. Mis clientes y yo hemos obtenido enormes beneficios que les cambiaron la vida, y ese es el valor que quiero enfatizar. Presentaré los casos milagrosos de cambios emocionales, alineación física y transformación por los que han pasado mis clientes.

Cada historia contada en estas páginas ha sido poderosa y conmovedora para mí. Cuando comencé a escribir, noté que algo más grande estaba pasando. Se sentía como si este libro fuera un proyecto del Espíritu, y yo fuera simplemente un nodo en la gran red de la Creación a través de la cual fluía la información. El espíritu estaba orquestando todo. Todo lo que tenía que hacer era simplemente estar presente con cada uno de mis clientes y hacer la pregunta simple: "¿Puedo compartir su historia con otros?" (Nota: a excepción de Wayne y Serena Dyer, he cambiado los nombres de mis clientes para proteger su privacidad).

Es mi esperanza que al compartir estas historias pueda mostrarles las lecciones que he aprendido a través de la regresión a vidas pasadas, porque estas lecciones no son simplemente mías; son las lecciones que todos estamos aprendiendo. Hablan de los desafíos que todos enfrentamos.

También espero que encuentre apoyo, tranquilidad y nuevas perspectivas, así como nuevas oportunidades y nuevas formas de estar en el mundo. Que este libro lo nutra, aumente su comprensión y lo empodere en su crecimiento. Pero, sobre todo, que te ofrezca la sensación de ser bienvenido a casa: la reconexión con la divinidad que ya está dentro de ti.


CAPÍTULO 1. EXPLORAR TU PASADO TE PERMITE SANAR TU PRESENTE

Todo comenzó bastante modestamente. Un viejo empaste de diente se había roto por lo que necesitaba obtener uno nuevo. El dentista que vi me lo recomendaron mucho, pero el trabajo que hizo me dejó la boca completamente desequilibrada. El nuevo empaste no encajaba bien con el resto de dientes y no se sentía bien cuando masticaba por lo que hizo un ajuste tras otro, tanto en el empaste como en el área circundante. Las numerosas "soluciones" me dejaron con un dolor tremendo, una afección llamada trastorno de la articulación y afección de los músculos temporomandibulares. No había nada estructuralmente malo en mi mandíbula, pero sus músculos se habían desalineado. No podía abrir la boca sin una incomodidad terrible por lo que comer se volvió difícil. El dolor punzante hizo que los músculos de cuello y hombros me dolieran constantemente. Incluso hablar y dormir era difícil.

Hice todo lo que se me ocurrió para remediar la situación. Empecé a ver a un nuevo dentista semanalmente para más sesiones de ajustes que aliviaran la tensión de mis músculos y permitir que la mandíbula se relajara. Empecé a dormir con un protector bucal. Cambié de almohada, y luego de cama. Veía a un fisioterapeuta tres veces por semana. Para facilitar la masticación y la alimentación cambié por completo mi dieta. Constantemente tomaba pastillas para minimizar el dolor y prevenir infecciones. La lista sigue y sigue. Toda la situación estaba poniendo a prueba mi vida, y mi cuenta bancaria.

Pasó un año y el dolor aún no se había ido. Un día, el dentista me sentó y dijo: “Mira, tenemos que ser realistas”. No tenía sentido continuar con lo que estábamos haciendo, y era hora de que tomara una decisión. Me sugirió que me sometiera a cirugía o que aprendiera a vivir con el dolor por el resto de la vida. La cirugía implicaba romperme la mandíbula y volver a unirla con alambres, y no había garantía de que eso aliviaría el dolor. No veía el sentido de romper algo que no estaba roto, especialmente cuando me habían dicho que el problema no estaba en huesos y articulaciones sino en los músculos. Sin embargo, la posibilidad de vivir una vida con dolor crónico también me asustaba. Ninguna opción parecía aceptable.

Las sincronicidades de la vida siempre se arreglan solas. A principios de semana programé una cita con el fisioterapeuta justo después de visitar al dentista. Cuando comenzó el tratamiento de fisioterapia, surgieron preguntas en mi mente. ¿Ahora qué hago? He explorado todas las vías posibles. He hecho todo lo que podía hacer... ¿o sí? En ese momento, fue como si una bombilla se encendiera en mi mente. Recordé la regresión que había hecho de niña y leído acerca de personas que tenían curaciones físicas milagrosas después de experimentar sus vidas pasadas. Sin saber a quién más acudir, rápidamente encontré un regresionista en la ciudad de Nueva York y programé una cita.

Mi primera sesión estaba programada para una hora, pero solo teníamos unos 15 minutos para la regresión real debido al tiempo necesario para familiarizarme con la practicante, compartir mi problema y sentirme cómodo antes de que ella me hiciera retroceder a alguna vida para luego revisar lo que conseguido antes de finalizar la consulta. (Las sesiones que dirijo hoy en día a menudo duran hasta cuatro horas). Debido a que me sentí muy apurada y aún no habíamos establecido un nivel de confianza, no experimenté una vida pasada en ese momento. Sin embargo estaba desesperado por recibir ayuda, así que programé una cita para volver a verla unos días después.

En mi segunda sesión tuve una breve experiencia de vida pasada. Vi la imagen de mí misma como hombre negro, alto y fuerte. Tenía un collar de metal muy pesado y grueso alrededor del cuello, y cuatro grilletes alrededor de muñecas y tobillos. Las cadenas estaban unidas al collar y continuaban hasta las esposas en muñecas y pies. El collar de metal siempre estaba allí y era increíblemente incómodo, rozándome la mandíbula. Tenía una herida permanente en el mismo lugar donde, en esta vida, sentía el dolor temporomandibular. En esa vida como esclavo yo era bastante fuerte físicamente, pero el trato inhumano había quebrantado mi espíritu. La dicotomía entre mi cuerpo poderoso y el espíritu impotente que lo ocupaba era fuerte. Me sentía completamente impotente. No tenía odio hacia mis dueños; de hecho, les estaba agradecido. Aunque no me trataban bien, me daban de comer, y lo percibía como una gran bondad. Estaba muy agradecido por ello.

Allí, en la oficina del practicante, las lágrimas corrieron por mi rostro. Me sentí tan triste por mí misma como este hombre esclavizado. Sentí su dolor y su alma rota. ¿Cómo podría alguien tratar a otro ser de esa manera? ¿Cómo podría alguien encadenar a otro con un collar de metal? ¿Cómo podía estar tan agradecido con las personas que, claramente, me estaban maltratando solo porque me alimentaban? ¿Cómo podía tener un cuerpo tan fuerte y, sin embargo, sentirme completamente impotente? ¿Por qué no hablé? ¿Por qué no intenté cambiar mis condiciones, rebelarme o incluso escapar?

El principal mensaje que traje de la experiencia fue la falta de poder personal que había sentido. Cuando salí del trance y me senté en el sofá de la practicante, le pregunté: "¿Qué significa ser poderoso?" Ella no tenía respuesta para eso. (Hoy uso preguntas para guiar a mis clientes hacia niveles más altos de comprensión, pero aquella terapeuta no funcionaba de esa manera). Su respuesta a mi pregunta fue simplemente: "Tendrás que descubrir eso por tu cuenta".

Esta fue la única visión que tuve en esa segunda sesión y la experiencia fue muy catártica para mí. Pasé el resto del día preguntándome: "¿Qué significa ser poderoso?" No recibí respuestas claras, pero recibí liberación emocional junto con lágrimas que fluían libremente.

Mirando hacia atrás ahora puedo ver que esta pregunta fue fundamental para mi experiencia profesional en ese momento. Yo era una joven abogada, considerada una de los miembros más valiosos de mi grupo de práctica en derecho corporativo. Durante cada evaluación, mis superiores elogiaron mi ética de trabajo, mis habilidades legales y capacidad para gestionar clientes y negocios. Sin embargo no quisieron aumentar mi salario para igualarlo al de mis compañeros, y me negaron mi solicitud de cambiar de oficina a pesar de que había varias disponibles. En lugar de sentirme nutrida por mi lealtad hacia la empresa me sentí impotente, al igual que el esclavo. Apreciaba a mis compañeros y no quería perder la comodidad y seguridad que tenía en la firma de abogados pero no estaba consiguiendo lo que quería. Hablar no había ayudado, y la persistencia podría potencialmente lastimarme,

Estos eran los problemas emocionales que masticaba día tras día, mientras mi mandíbula buscaba encontrar alivio al dolor. Como más tarde me di cuenta (y discutiré extensamente en este libro), todas nuestras dolencias físicas comienzan a nivel emocional. Cuando hay malestar en el cuerpo está apuntando hacia una idea que necesitamos procesar y resolver dentro de nosotros. Cuando no enfrentamos nuestros desafíos conscientemente, nuestros cuerpos los reflejan en forma de problemas de salud. Las correlaciones entre mis luchas como esclavo y mis luchas en la actualidad son obvias ahora.

Aunque la terapeuta no pidió que me curara la mandíbula, la sesión me permitió ver que soy poderosa y que tengo opciones. Al día siguiente me desperté sin dolor en la mandíbula por primera vez en más de un año.

Muy pronto mi vida volvió a la normalidad. Dejé de tomar las pastillas para el dolor y de dormir con un protector bucal, y nunca más volví al fisioterapeuta. La próxima vez que fui a ver al dentista este no sabía qué hacer con mi recuperación. La llamó un milagro.

Me di cuenta de que era libre de cambiar a otra empresa en cualquier momento; No necesitaba repetir el patrón de impotencia que había experimentado como esclavo. En cambio, podía elegir verme a mí misma como un igual y poderoso en relación con el trabajo. Esto trajo resolución emocional y física al problema, permitiéndome seguir adelante.

¿Se podría decir que obtuve una respuesta a mi pregunta sobre lo que significa ser poderoso? Mi experiencia de la vida del esclavo, y la situación con mi patrón, me hizo darme cuenta de que el verdadero poder es muy diferente del poder que había aprendido en mis clases de ciencias políticas en la escuela. Ahora sé que ser poderoso significa ser fiel a quien eres, en lugar de dominar a los demás. Las personas que controlan y manipulan a otros lo hacen sólo porque de hecho se sienten impotentes. No creen que les sea posible lograr lo que quieren sin lastimarse a sí, o a los demás. Sin embargo, el verdadero poder solo requiere deseo, concesión y confianza. El verdadero poder requiere solo la alineación con la majestuosidad creativa de la Fuente. Para un verdadero líder ser poderoso significa liderar desde un lugar de integridad y el deseo de empoderar a otros.

Mi dolorosa condición física me enseñó esta simple, pero profunda, lección. Aprendí que el poder proviene de reconocer mi verdadera naturaleza, y solo yo puedo otorgarme el conocimiento de mi esencia poderosa.

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Esa historia tuvo lugar hace siete años. Hasta el día de hoy, sigo sin dolor.

 A lo largo de todos esos años, nunca le dije a mi dentista cómo curé la mandíbula. En ese entonces me sentía incómoda hablando abiertamente de mis actividades espirituales. Me bastó que me curara; No sentí que se necesitaran explicaciones. Pero mientras estaba en el proceso de escribir este libro, volví a ver a mi dentista. Hacía tiempo que no nos veíamos así que, mientras nos poníamos al día, le conté sobre mi nueva carrera profesional. Escuchó con interés y compartió que tiene una extraña sensación de familiaridad cada vez que visita la Ciudad Vieja de Jerusalén. Se preguntó en voz alta si habría vivido allí en una vida diferente.

Su comentario me asombró. ¿Era posible que todo el tiempo mi dentista hubiera estado abierto a discusiones espirituales? Tal vez yo había proyectado mis inseguridades sobre él todos esos años. Animado por su franqueza metí la mano en mi bolso y saqué una copia de mi CD titulado: Sanación a través de la regresión a vidas pasadas... y más allá, y se lo di.

“Nunca te dije cómo curé mi mandíbula”, le dije. Escuchó atentamente mientras le contaba la historia.

“Estoy abriendo un centro para especializarme en la curación de afecciones temporomandibulares”. Haciendo una pausa me miró a los ojos y dijo: "Deberíamos hablar".

No hace falta decir que salí de su oficina sintiéndome eufórica por el milagro que la regresión ha sido en mi vida. Sé que también puede ayudarte. Entonces comencemos respondiendo la pregunta más básica que pueda tener: ¿Qué es la regresión a vidas pasadas?

Regresión a vidas pasadas 101

La regresión es una herramienta suave pero poderosa. En las sesiones guío a mis clientes a un estado de profunda relajación física y mental. Con sus cuerpos relajados, su enfoque natural va hacia el interior y pueden acceder a estados más profundos de los que pueden acceder en el período de vigilia.

Siempre estamos conectados a todas las vidas que hemos vivido y viviremos. Son parte de nuestro camino, de nuestra naturaleza y patrimonio. Al dejar que los estímulos del mundo externo pasen a un segundo plano, podemos conectarnos fácilmente con las experiencias que nos han creado. Las historias, imágenes y sentimientos de esas otras vidas están inmediatamente presentes para mis clientes durante las sesiones, fluyendo vívidamente en sus mentes. Les pido que me digan lo que perciben y, simplemente, me cuentan su historia.

Cada sesión es única, sin embargo la experiencia de los clientes siempre se adapta perfectamente para brindarles lo que sea que les sirva en su máxima capacidad. Las vidas nunca se seleccionan al azar; no son solo historias divertidas para contar en una cena. Revivir otras encarnaciones nos ayuda a comprender quiénes somos y nos brinda orientación sobre nuestros desafíos emocionales y físicos más apremiantes. A través de este sencillo proceso las personas experimentan otras vidas que han vivido con muchos resultados diferentes. Siempre, sin embargo, mis clientes se van asombrados. El trabajo que hago también les permite comunicarse con sus Seres Superiores, guías espirituales y ángeles; recibir orientación sobre decisiones importantes; y respuestas a preguntas de toda la vida.

La regresión puede ayudarnos a resolver problemas emocionales y físicos. Es útil para comprender y liberar fobias y traumas. A través de la regresión podemos aprender sobre nuestras relaciones con los demás y qué roles han jugado esas personas en las vidas que hemos compartido. Ver los hilos entre nosotros, las conexiones creadas a lo largo del tiempo, nos da una comprensión de nuestras circunstancias actuales; podemos empezar a ver con más compasión, perdón y amor.

Las historias de regresión en estas páginas, las mías y las de mis clientes, me han revelado lecciones sobre lo que significa ser humano, cómo funciona el tiempo, las infinitas posibilidades del Universo y cómo sanar nuestros desafíos emocionales y físicos más persistentes.

No necesitamos ninguna circunstancia especial para experimentar otras vidas. Puede ocurrir espontáneamente cuando nos encontramos en un lugar o situación que nos recuerda otra vida, y también puede ocurrir en nuestros sueños. Dicho esto, cuando nos conectamos intencionalmente a través de la regresión podemos usar información de nuestras vidas pasadas para recibir respuestas y orientación.

Para la mente, el proceso es casi continuo. Solo requiere un cambio sutil en la actividad de las ondas cerebrales. Durante una regresión, pasamos de un estado de ondas cerebrales beta, el estado característico de la conciencia de vigilia normal, al estado alfa, el estado de relajación. A partir de ahí, y bajo mi guía, los clientes pasan a un estado theta o gamma.

Theta es el estado de estar consciente pero somnoliento; con mayor frecuencia se experimenta justo antes de quedarse dormido y nuevamente justo antes de despertar. Theta es el estado fronterizo entre el consciente y el inconsciente. Cuando se usa con intención, es un estado en el que puede tener lugar un profundo aprendizaje, sanación y crecimiento. En el estado gamma, uno experimenta un mayor sentido de percepción y conciencia, lo que resulta en un sentimiento de Unidad con todo, dicha y una comprensión innata de la naturaleza de la existencia. Es en los estados theta y gamma donde tiene lugar el poderoso trabajo de regresión.

Para llevar a un cliente a ese nivel profundo de trance uso la hipnosis. ¡La hipnosis es un proceso tan incomprendido y temido! Debido a lo que hemos visto en la llamada hipnosis escénica o de espectáculo, y a las afirmaciones de "dominación de la mente" a través de la sugestión hipnótica, nuestros egos tienen un miedo natural a ceder el control. Lo que no entendemos es que llegar a un nivel profundo de trance no tiene por qué implicar la liberación del control sobre nuestra persona. Durante la regresión tendrás el control total. De hecho, es importante que tu ego, tu mente, esté presente durante toda la sesión. Tu mente se convierte en parte del proceso; es la parte de ti que aprende y entiende. La nueva información descubierta durante una regresión permite que toda tu personalidad, incluido tu ego, cambie a un lugar expandido de ser y crear vida.

Toda hipnosis es realmente una autohipnosis. En el proceso de relajación la mente del ego determina que el cuerpo de mi cliente, la persona, está a salvo en su entorno físico; que es seguro relajarse en la serenidad y la comodidad de mi oficina y mi presencia porque soy alguien en quien se puede confiar para guiarla y cuidarla bien. En el momento en que el ego determina que estará a salvo durante sus exploraciones, la mente es capaz de orientarse.

La hipnosis es la capacidad de concentrarse en el interior. Al relajar el cuerpo, nuestro enfoque puede cambiar de la entrada de los sentidos externos a la entrada de los sentidos internos. La mente se desenreda de la realidad física y da libertad a los sentidos internos para ir más allá y explorar. Luego, los sentidos internos se orientan naturalmente y viajan hacia arriba a través de las diferentes capas de la conciencia: a través de las emociones, creencias personales, creencias y construcciones sociales compartidas y el Yo Superior. Cuanto más se eleva nuestra energía psíquica, más libres estamos de nuestra personalidad y de la historia de nuestra vida. Cuanto más se eleve nuestra vibración, más cerca estaremos de fusionarnos con la conciencia de nuestra Superalma.

Como ya mencioné, el Alma Suprema, o Superalma, es la “madre” de todas las almas que han habitado nuestras vidas presentes, pasadas y futuras. Existe en una dimensión donde todo el tiempo se experimenta como ahora. Para el Alma Suprema, lo que tú y yo llamamos “pasado”, “presente” y “futuro” está sucediendo en el mismo instante. Durante una regresión, permitimos que nuestros sentidos internos alcancen la dimensión del Alma Suprema; fusionamos nuestra conciencia con su conciencia. Desde esa dimensión, podemos volver a sumergirnos y experimentar la realidad física de cualquier vida que elijamos. Por eso, cuando revivimos una vida, nos identificamos plenamente como esa persona. Estamos percibiendo esa vida desde la posición de nuestra Alma Suprema, que es una con todas las almas que crea. Durante una regresión, nos conocemos como esa “otra” vida, así como también como “esta” vida porque ambas vidas están ocurriendo simultáneamente en dos pistas separadas de la energía y actividad de nuestra Alma Suprema. Todas nuestras vidas aparecen como "ahora" para el Alma Suprema; en consecuencia, así es como las experimentamos en la regresión.

Por tanto, la regresión no es realmente la experiencia de un recuerdo. Claro, podemos llamarlo así por conveniencia; eso es lo que estamos haciendo cuando nos referimos a nuestras otras vidas como vidas “pasadas”. Pero si realmente queremos entender lo que ocurre durante la regresión, debemos reconocer que estamos conectando nuestra energía vibratoria con la de nuestra Superalma, y ​​desde allí nos fusionamos con otras vidas que se están desarrollando en el momento presente, ahora. Esta es una comprensión muy novedosa del proceso de regresión y la naturaleza de la existencia. Las lecciones sobre el tiempo en el Capítulo 6 te permitirán comprender mejor esta verdad y apreciar el poder de estas exploraciones que llamamos “regresiones a vidas pasadas”.

Lecciones de vida

La regresión es uno de los caminos más efectivos para aprender nuestras lecciones de vida. Cuando nos conectamos con otras vidas que hemos vivido podemos experimentar por nosotros mismos las luchas, alegrías, emociones y detalles de nuestra historia. A las almas les gusta encarnar con otras almas, con las que han creado vínculos en vidas anteriores, para poder seguir creciendo y explorando juntas. Debido a esto, durante la regresión a menudo nos encontramos con seres queridos y amigos, así como con personas con las que tenemos relaciones difíciles.

La vida que experimentamos durante una regresión siempre compartirá un tema común con la vida que estamos viviendo ahora. Al revivir otra vida, obtenemos el beneficio de una perspectiva diferente sobre cómo manejar una lección con la que podemos estar luchando. Ese es el poder de este proceso: vemos el panorama general, el tapiz que se ha tejido a lo largo de diferentes vidas. Al hacerlo, obtenemos una comprensión profunda del camino de nuestra alma. Cuando vemos cómo manejamos los mismos desafíos en nuestras otras vidas, tenemos la capacidad de hacer las cosas de manera diferente ahora. Nos liberamos. Nos empoderamos. Es así cómo explorar vidas pasadas nos permite sanar nuestro presente, tanto física como emocionalmente.

Ahora echemos un vistazo a las lecciones de vida que mis clientes me han enseñado y las posibilidades que estas lecciones ofrecen para transformar TU vida.

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CAPITULO 2. TODAS LAS VIDAS SON SIMULTÁNEAS

Un día, hace algunos años, cuando todavía trabajaba como abogada corporativa, decidí pasarme por una librería cercana a mi oficina. Era la hora del almuerzo y quería ver si había algún libro que me pudiera llamar la atención antes de regresar al trabajo. Mientras inspeccionaba los estantes de la sección Nueva Era, vi uno de mis favoritos, La naturaleza de la realidad personal de Jane Roberts. El libro lo sentí bien en mis manos cuando lo saqué del estante; entonces, justo cuando comenzaba a abrirlo, un pensamiento apareció en mi mente.

Pon tu tarjeta personal en el libro.

Había aprendido a no cuestionar esos momentos de intuición, a seguirlos con curiosidad juguetona. Sin embargo, tuve que admitir que este pensamiento no tenía sentido. Aún así metí la mano en mi bolso, saqué una tarjeta y la puse entre las páginas. Mientras volvía a colocar el libro en el estante, surgió otro pensamiento.

Quien compre este libro y encuentre tu tarjeta será una persona muy especial.

Este pensamiento se sentía extraño, como si viniera de otra persona, alguien que sabía mucho más que yo. Había una sensación de algo místico en torno a las palabras persona muy especial. Mi alma reconoció el sentimiento, pero mi mente no podía explicarlo.

Meses después, cuando me había olvidado del incidente, recibí el correo electrónico de un hombre llamado John. Explicaba que había tenido la sensación de que era hora de leer de nuevo La naturaleza de la realidad personal. Así que fue a la misma librería a la que yo había ido, que estaba al otro lado de la calle de su lugar de trabajo. Cogió el mismo ejemplar del libro que yo tuve en mis manos y se le cayó la tarjeta que yo había dejado.

¿A quien le importa? se dijo John. Pero por razones desconocidas para él, se quedó con la tarjeta de todos modos. Cuando llegó a casa esa noche visitó mi sitio web. Después de leer durante unos minutos me envió el correo electrónico. Algo lo empujaba a hacerlo, dijo; fue casi automático.

Entre las miles y miles de palabras en mi sitio web, una frase impresionó a John. En una entrada de blog que había escrito seis meses antes, mencioné que en el trabajo me sentía como “un espíritu encubierto”. En ese momento todavía trabajaba como abogada corporativa en una gran firma de Park Avenue. Era buena en mi trabajo, pero como “buena abogada” sentía que no podía compartir mis intereses espirituales privados —y por lo tanto, mi verdadera personalidad—, con mis colegas. Tenía miedo de ser juzgada, incomprendida, condenada al ostracismo, o a algo peor. Fue ese sentimiento de estar sola lo que me hizo sentir como un espíritu oculto, enmascarado: estaba trabajando de forma encubierta para traer energía positiva, cooperación, equilibrio y luz a la oficina, lugar en el que tales cualidades no tenían prioridad. John reconoció los mismos sentimientos en sí mismo, así que se acercó a mí. Quería encontrar un alma con quien compartir, alguien que le entendiera. ¡Definitivamente lo hice!

John me dijo que era hombre soltero de unos 20 años que se había embarcado en un camino espiritual unos años antes pero que se sentía muy solo, sin familia ni amigos caminando a su lado. Luego compartí mis experiencias con la regresión a vidas pasadas y expliqué que lo que las personas aprenden durante la regresión siempre está perfectamente alineado con el lugar en el que se encuentran y brinda sanación de la manera más inesperada. En mi emoción, me ofrecí a hacerle una regresión, y tuvo suficiente curiosidad como para decir que sí.

Había hablado apasionadamente sobre la regresión a todos los miembros de mi familia y amigos que pude, y hecho retroceder a muchos de ellos. Pero con John fue diferente. Después de todo lo acababa de conocer. Cuando llegó a nuestra cita, estaba nerviosa. Mi voz era temblorosa cuando comencé a guiarlo para que calmara su cuerpo. Afortunadamente, mientras lo relajaba, yo también comencé a relajarme. No tenía idea de que estaba a punto de encontrarme con la primera lección, y quizás la más sorprendente, que aprendería en la regresión a vidas pasadas.

¡¿Él dijo qué?!

Después de ayudar a John a entrar en sí mismo le pedí que dijera lo que veía, sentía y escuchaba. Describió estar parado frente a una barbería en una calle adoquinada. Comentó que las farolas de la calle tenían pantallas. Llevaba traje consistente en pantalones marrones, chaleco, camisa a rayas y chaqueta marrón. Para completar el conjunto, zapatos de vestir y un sombrero que describió como una "gorra de chico de periódico". Tenía poco más de 30 años y su nombre en esa vida también era John. (Aunque tuvo diferentes nombres en las vidas que pasamos, continuaré refiriéndose a él simplemente como John para que sea más fácil de seguir el relato).

La sesión continuó haciendo varias preguntas más. Al contarme sobre el desarrollo de su vida, John fue muy específico con nombres y fechas. Era un banquero exitoso que vivía en Brooklyn, Nueva York, y tenía un hijo y una hija con su esposa, llamada Katherine. Vimos el nacimiento de su hijo, en 1940, y escenas de la boda de su hija, en 1963. Descubrimos que su hijo murió en un accidente automovilístico en 1957. John recordó haber pensado el día de la boda de su hija que podría haber encontrado un mejor marido. A lo largo de los años, él y su hija perdieron el contacto y la vida se volvió muy solitaria cuando su esposa murió en 1971. Después de años de sentirse aislado del mundo, y luego de perder su fortuna debido a malas decisiones de inversión, John se suicidó en 1978.

La lección principal que John debía aprender en esa vida era sobre la soledad y las consecuencias del suicidio, (que discutiremos con más detalle en el Capítulo 6). Después de que el alma de John se elevó de su cuerpo fue al mundo de los espíritus y se encontró con su guía espiritual. Junto con su guía discutieron la necesidad de que él renaciera y confrontara los problemas de soledad que no pudo soportar en la vida que acababa de terminar abruptamente. Se experimentó a sí mismo renaciendo muy rápido, y me dijo que era el año 1950.

¡¿Él dijo qué?! Esta pregunta resonó en mi mente. ¡Ay dios mío!

Me invadió una ola de pánico e incredulidad. John estaba acostado en la cama frente a mí y yo estaba sentada en una silla cercana, tratando de ocultar mi sorpresa. Acabábamos de revivir la vida en la que nació a principios del siglo XX y murió en 1978, ¡y ahora decía que en su próxima vida nacía en 1950!

Mi mente protestó. ¡No no no! ¡Esto es imposible! Así no es como funciona el tiempo. ¡Así no es como funciona la reencarnación! El tiempo es lineal. Solo después de que un alma completa una vida, pasa a otra. ¡Nada de esto tiene sentido!

Estaba conmocionada. Intenté dejar de respirar y desaparecer en la silla. Tenía miedo de que mi aliento me traicionara y él sintiera mi pánico. Me preocupaba que mis pensamientos acelerados lo influenciaran e interrumpieran las escenas que fluían a través de su mente.

El silencio pareció durar una eternidad. Mi corazón martilleaba mi pecho.

Las palabras de John continuaron resonando en mi mente y pensé: ¿Qué hago? ¿Qué debería decir?

Solo espera, dijo una voz desde lo más profundo de mí. Que primero hable.

Esperé. La falta de aire me estaba lastimando los pulmones. Traté de tomar el aliento más silencioso que jamás había inhalado. Afortunadamente, John rompió el silencio.

“Ella me está mostrando a sus amigas”, dijo. “Tantas mujeres, demasiado perfume, demasiado maquillaje. Estoy llorando. No me gusta esto en absoluto”.

Respiré hondo, aliviada porque continuaba narrando lo que veía. John me dijo que en esta segunda vida era un niño mestizo del sur adoptado por una familia blanca rica. Los padres de John habían estado tratando de tener un hijo durante un tiempo antes de decidirse por la adopción, pero su padre no podía aceptar que su hijo fuera de piel más oscura. Nunca congeniaron y John siempre le tuvo miedo.

Un día, cuando John tenía cuatro años, llegó a casa con un ojo morado. Había sido golpeado en la escuela por niños que se burlaban de él por ser adoptado. Sus padres comenzaron a pelear por eso, su padre insistió en que nunca debieron haberlo adoptado. Esto se convirtió en un punto de discordia, y cuando John tenía 13 años sus padres se divorciaron.

John y su madre se mudaron a la ciudad de Nueva York. Se hizo amigo de otros chicos de piel más oscura, como él; formaron un grupo de música duduá, y cantaban en la esquina frente a la tienda de dulces local. John no estaba interesado en estudiar, por lo que se convirtió en trabajador de la edificación y se integró en un equipo de construcción compuesto exclusivamente por blancos. Le gustaba mucho una chica llamada Suzanne, que quería casarse con él y formar una familia. Pero John sintió que, dado que solo tenía 20 años, era demasiado joven para casarse. Viajó a Los Ángeles y nunca volvió a Nueva York.

Hubo muchos sucesos increíbles en la segunda vida de John, pero ninguno de ellos pareció afectarlo emocionalmente. De hecho, no parecía interesado en muchas cosas. Me di cuenta de que no estaba demasiado preocupado por los derechos civiles, por ser adoptado, las peleas de sus padres, o ir a la escuela.

En California, John llevó una vida muy sencilla. Trabajaba, comía y dormía y, en general, estaba contento. Pero la idea de no casarse con Suzanne le dolía todos los días. Mirando los últimos días de su vida, John me dijo: “Soy muy viejo. Estoy en mis 90. Vivo en un asilo de ancianos, en California. Paso la mayor parte del tiempo sentado allí, mirando la ventana. Tiempo perdido".

Desde nuestro punto de vista actual, John estaba experimentando tanto una vida pasada como una vida futura. Dado que en esta vida nació en 1950 y se veía a sí mismo en la década de los 90, estaba claro que la escena de los hogares de ancianos era en algún momento de la década de 2040. Para hacer las cosas aún más desconcertantes, John, como la persona que es hoy, nació a mediados de la década de 1980. Esta aventura en la atemporalidad continuó a lo largo de cuatro vidas más, todas las cuales tuvieron lugar aproximadamente en el mismo período de 130 años, entre las décadas de 1910 y 2040.

Los otros planes de vida de John

Después de la segunda vida de John, se dio cuenta de que, al vivir su vida con tanta sencillez, no había aprendido nada. El tiempo que pasó en esa encarnación se sintió como una pérdida de tiempo, y luego decidió experimentar una vida que le enseñaría a amar.

En esta tercera vida nació en Tennessee el 3 de julio de 1946. (Anoté la fecha en mi mente, todavía preguntándome cómo estaba teniendo todas estas vidas superpuestas). John tenía una familia numerosa, pero estaba más cerca de su hermana gemela llamada, Jan. Ella era una marimacho mientras que él era tímido, emocional y muy estudioso. Al crecer, Jan fue una de las chicas bonitas de la escuela. John se describió a sí mismo como un idiota, pero nadie se metía con él por su hermana. A la mitad de los chicos les gustaba y la otra mitad le tenía miedo.

La primera vez que John y Jan vivieron separados fue cuando iban a la universidad. Él fue al Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) y ella a la Universidad de California, Los Ángeles (UCLA). En su segundo año de escuela, John se enteró de que su hermana había sido violada por un hombre de su universidad. John no tenía dudas sobre lo que tenía que hacer, así que abandonó el MIT y se mudó a Los Ángeles para cuidarla. Estaba feliz de poder estar allí para ella.

Un día, poco después de llegar a California en 1967, corría a casa para llevarle algo a Jan de la panadería y fue atropellado fatalmente por un automóvil cuando cruzaba la calle. Su hermana no pudo soportar perderlo tan pronto, después de sufrir el trauma de la violación, por lo que se tragó un puñado de pastillas y se suicidó.

Después de que el alma de John pasó al lado espiritual, no reencarnó de inmediato, sino que esperó a Jan. Ella creó un nuevo plan de vida que le permitió integrar los problemas emocionales que había causado su suicidio. Después de que ella completó con éxito esa vida, estaban listos para nacer de nuevo juntos. Lo que siguió es una historia que siempre derrite mi corazón.

En esta cuarta vida, John era joven músico en la ciudad de Nueva York. Era soltero, sus padres habían fallecido y no tenía hermanos. Todas las noches, después de practicar con su banda de jazz, pasaba por un restaurante cercano a su casa para comer algo y, con suerte, echar un vistazo a la camarera que le gustaba. Era tímido y nervioso por naturaleza, así que aunque la camarera siempre le sonreía, en realidad nunca hablaba con ella.

Un día, finalmente John reunió el coraje para presentarse y ella dijo que se llamaba Lauren. Le preguntó si le gustaría tomar una taza de café con él y ella dijo que sí. Ella le pidió que regresara a medianoche, cuando terminara su turno, pero él se durmió mientras esperaba que llegara la hora señalada. Cuando se despertó, a las 3 de la mañana, entró en pánico, preocupado. Se apresuró a ir al restaurante para encontrar que ella todavía lo esperaba. Ella fingió regañarlo pero en verdad estaba muy feliz de verlo. Su relación se desarrolló rápidamente y en seis meses estaban casados.

Lauren volvió a la escuela y se convirtió en maestra. Ella y John nunca tuvieron hijos, pero hacían todo juntos y realmente disfrutaban el uno del otro. Fueron a París de luna de miel y se lo pasaron genial. Para su 25 aniversario regresaron a la “Ciudad de la Luz”, y aunque eran muy mayores, no fue diferente. Lauren siempre había sido un tanto simple y como nunca le importó lo que pensaran los demás, John pudo dejarse llevar y divertirse. Más tarde ella falleció de cáncer de mama y John se quedó solo. Le pregunté si era difícil para él esto, y dijo: “No fue tan malo como crees. Teníamos tantos recuerdos. Hicimos tantas cosas”. Un año después John moría de infarto.

Mientras se alejaba de las escenas de esa vida, John dijo: “Su nombre era Lauren, ¿verdad? Siempre supe que había algo más, pero nunca pude identificarlo. Ella era realmente Jan. Nuestros nombres y relaciones pueden cambiar, pero el amor que nos tenemos siempre nos une, vida tras vida.

Cuando fue al lado de los espíritus, John se encontró con su guía, que siempre esperaba su regreso. Esta vez, su guía espiritual le mostró que era hora de que enseñara. John dudó, pero aprovechó la oportunidad para hacer precisamente eso en su quinta vida.

Nació en una base militar en Texas, durante la Guerra de Vietnam. Su madre siempre estuvo preocupada por que su hijo creciera sin padre y, efectivamente, el padre de John terminó siendo muerto en la guerra. Aquí, nuevamente, John dio otro marcador de tiempo con la Guerra de Vietnam, lo que significa que su quinta vida también se superpuso en el tiempo con sus otras vidas.

Tras el fallecimiento de su padre, John y su madre se mudaron a la ciudad de Nueva York. John comentó que aunque era cercano a su madre, ella estaba más concentrada en sus miedos que en la calidad de su relación. Era un buen hijo, un chico completamente estadounidense: bueno en la escuela, bueno en los deportes, bien parecido y popular. A medida que creció tuvo mucho éxito en el mundo financiero, pero su amor era el arte. Le encantaba dibujar y escribir poemas e historias.

A la madre de John nunca le gustó ninguna de las chicas con las que salía. Él dijo: “Dios me libre si tuviera que salir con alguien, me sentiría mal Siempre parece tan preocupada, así que no quiero preocuparla más”. John pasó los últimos dos años de su vida con una dulce mujer llamada Nancy, y su madre tuvo que aceptar que Nancy tendría que conformarse. John falleció mientras dormía cuando tenía poco más de 40 años y su madre abrió un fondo escolar con su dinero. Como ya no tenía que preocuparse por él después de su muerte, John comentó que estaba mejor.

Una vez que John hizo la transición a la posvida reconoció que, en realidad, no enseñó nada a nadie. Decidido a hacerlo mejor, para su sexta vida su alma eligió una vida en Japón, en la que era una niña llamada Kiyomi. Los padres de Kiyomi fallecieron durante un accidente automovilístico y ella quedó a cargo de su hermana menor. Kiyomi tuvo bastante éxito, una conocida productora musical que también era propietaria de una cadena de restaurantes y continuamente donaba dinero porque creía que no era bueno tener demasiado. John revivió la sexta vida muy rapido. Las escenas avanzaban rápidamente por su mente y por eso no me dio ninguna fecha durante esta regresión. Más tarde le pedí que determinara el período de tiempo de lo que había visto y dijo que la vida había tenido lugar entre 1980 y 2010.

Una vez en la posvida, John fue recibido nuevamente por su guía quien le dijo: “Qué bueno que regalaste tu dinero, pero ¿qué enseñaste? Regalar el dinero no enseñó nada a nadie”. John reconoció que faltaba algo porque no había hecho un buen trabajo de enseñanza.

John había revivido seis vidas y supe que era hora de que invitáramos a su Yo Superior para que nos hablara. ¡Estaba ansiosa por preguntar cómo era posible que las seis vidas hubieran tenido lugar en el mismo período de 130 años!

Vidas paralelas

Una vez que los clientes ven sus otras vidas, les ayudo a expandir su conciencia y a conectarse a los niveles más altos de amor, luz y sanación. Luego converso con el Yo Superior sobre todos los problemas y desafíos que la persona enfrenta en su vida actual.

El Yo Superior es la extensión no física de nosotros, la parte que conoce el panorama general y siempre está ahí para guiarnos hacia nuestra vida más grandiosa y plena. Al fusionar la energía de la mente con las vibraciones del Yo Superior, nos convertimos en nuestro Yo Superior.

Cuando conecté a John con la energía de su Yo Superior, quise saber cómo era que las seis vidas que experimentó estaban ocurriendo simultáneamente. Aquí hay una transcripción editada de lo que escuché:

Dobromira: En las vidas que exploramos hoy, las vidas se superponían en el tiempo. Realmente no coincide con la forma en que las personas pensamos sobre el tiempo. ¿Cómo se supone que John debe pensar en ellos?

John: Realmente es solo una cuestión de aceptar. Está mitad dentro y mitad fuera. Mitad-aferrarse-a-lo-que-es-normal y mitad-no. Eso es lo que está causando la división entre el pensamiento de que el tiempo es lineal y el tiempo como nada.

Dobromira: ¿Qué es el tiempo, entonces?

Juan: El tiempo es infinito.

Dobromira: Entonces, ¿sirve para algo que las personas pensemos en términos de tiempo?

John: Funciona para la Tierra. Es necesario para ustedes.

Dobromira: ¿Puedes explicarme las vidas paralelas, porque me gustaría profundizar mi comprensión? ¿Se divide un alma en estas diferentes vidas simultáneamente? ¿El alma principal se queda donde está?

Juan: Sí. Un fragmento de alma va a cada una de esas experiencias.

Dobromira: ¿Fueron todas estas experiencias reales?

John: Todas fueron reales porque el alma principal las experimenta todas.

Aunque nunca había escuchado esto antes, me resultaba familiar, como algo que había olvidado hace mucho tiempo. Sentí como si hubiera recordado una gran verdad que se había perdido a través de los siglos. El Yo Superior de John explicó que el tiempo es un concepto que funciona para las personas en la Tierra, pero más allá de nuestro reino el tiempo es infinito. Para nosotros puede parecer que las vidas son consecutivas pero, en verdad, todas las vidas que experimenta una Superalma ocurren simultáneamente.

Somos multidimensionales. Hay mucho más en nosotros de lo que nos dicen nuestros cinco sentidos. Es a través de la aventura de vivir y abrirnos a todos los demás reinos de nuestro ser como nos hacemos cada vez más conscientes de la magnífica creación que somos.

El Yo Superior de John explicó que cada encarnación es un fragmento del Alma Suprema. Como mencioné en el Capítulo 1, la Superalma es una conciencia de energía que se compone de todas las almas que alguna vez has sido y alguna vez serás. Crea fragmentos de sí mismo porque desea conocerse experimentando la vida desde muchas perspectivas diferentes. Cuando el Alma Suprema elige aprender sobre un tema específico, digamos la lección del amor, crea divisiones de energía de sí misma, o vidas diferentes, cada una de las cuales explora y experimenta el amor.

Ningún aprendizaje de una lección está completo si es unilateral. Uno nunca podría saber sobre el amor sin aprender sobre el abandono y la soledad, por ejemplo. El Alma Suprema aprende tanto sobre el tema del amor al experimentar una vida llena de relaciones amorosas y enriquecedoras como al experimentar una relación llena de disfunción. Sólo mediante el estudio de cada perspectiva el Alma Suprema obtiene el conocimiento y la experiencia completos de un sujeto.

Esta es la naturaleza del Alma Suprema. Esta también es la naturaleza de Todo-Lo-Que-Es: crear y expandir su conciencia a través de sus creaciones. Cada fragmento formado por el Alma Suprema es un alma en sí misma.

Aunque hablamos de almas individuales como fragmentos de la Superalma, es importante señalar que cada alma es completa en sí misma. Este punto se hizo evidente para mí durante una posterior regresión que tuve con una clienta llamada Lisa, (leerás más sobre ella más adelante en el libro). Lisa también experimentó vidas que se superpusieron en el tiempo, y su Yo Superior explicó que aunque cada alma es un fragmento, no les falta nada. Cada alma en sí misma tiene conciencia y la capacidad de ejercer su libre albedrío, eligiendo sus experiencias en las diferentes dimensiones de la existencia. A pesar de fragmentarse, el Alma Suprema es total y completa. Así como cada gota en el océano tiene las propiedades de todo el océano, también las tiene el alma en su relación con la Superalma.

Esta comprensión también proporciona una explicación de la estructura de la existencia. Los fragmentos que componen una Superalma se denominan "almas complementarias" porque son homólogas, equivalentes entre sí y comparten la misma vibración característica de la Superalma.

 

Nota del Traductor. El texto original en inglés las denomina ““counterpart souls” lo que llevaría a una traducción directa como “almas almas complementaria” que sería traducción errónea pues en español “almas complementaria” implica oposición, opuesto o contrario a alguien o algo cuando aquí lo que se indica es que esas almas son parte de lo mismo, la Superalma, y tienen la misma vibración. Por eso la traducción como almas complementarias, equivalentes u homólogas es más acertada.

 

Un grupo de Superalmas comprende un grupo de almas. Durante cada uno de los siguientes niveles de existencia, el Alma Suprema resuena con una vibración más alta que durante el nivel anterior de existencia, y la naturaleza individual de las almas complemtarias disminuye. Simultáneamente, la fusión de la conciencia se vuelve más y más grande hasta llegar al Uno.

Por lo tanto, en el nivel vibratorio más alto, tú y yo, y todos los seres humanos que viven y han vivido en el planeta, somos parte de la misma Superalma, la misma energía única que llamamos Dios. Desde esa perspectiva, las personas compartimos un Alma Suprema con rocas, plantas, animales y agua. Todos venimos del mismo amor profundo. Todos somos hermanos.

Todas las encarnaciones existen simultáneamente

Una Superalma crea sus almas fragmentarias para crecer a través de ellas, y todas estas almas diferentes existen simultáneamente. Para poner esto en una analogía simple, puedes pensar en las almas como los dedos de una mano que existen y funcionan al mismo tiempo, mientras que la mano en sí misma es la Superalma. Otra imagen es la de un tren y sus vagones. Todos los vagones del tren viajan por la vía simultáneamente, cada uno con sus pasajeros, actividades y conversaciones, al igual que las vidas separadas. Juntos forman el tren, o la conciencia que comprende el Alma Suprema.

Para explorar temas específicos y desarrollar su máximo potencial, una Alma Suprema puede elegir un lapso de tiempo muy largo como patio de recreo; la vida de su alma podría tener lugar durante cientos de años. Cuando se revisan durante una regresión, estas vidas tienden a estar ordenadas consecutivamente, sin superposición en el tiempo, por lo que sentimos que estamos experimentando puramente vidas “pasadas”. La progresión de las vidas parece encajar así en nuestra comprensión lineal del tiempo. Sin embargo, como fue el caso de John, puede ser más útil para el Alma Suprema explorar sus temas y crear todas sus vidas en un breve espacio de tiempo en la Tierra. Cuando se revisan esas vidas durante una sesión de regresión, experimentamos algunas o todas estas vidas superpuestas en el tiempo, tal como John experimentó sus vidas paralelas. Este es el profundo aprendizaje que me dejó la sesión de John: las vidas que crean las almas existen todas en el mismo momento concurrente. Desde el punto de vista del Alma Suprema, ¡todas las encarnaciones están ocurriendo simultáneamente, en este mismo momento! Las vidas no son pasadas, presentes o futuras, son simultáneas.

La gente antes pensaba que el ciclo de la reencarnación operaba de la siguiente manera: un alma nace y se encarna. Su cuerpo muere y el alma regresa a la dimensión entre vidas. Allí determina qué tan bien le fue en la vida y luego elige nacer de nuevo para trabajar en las mismas o diferentes lecciones. El ciclo continúa desde allí hasta que el alma se perfecciona y se fusiona con la conciencia de Dios. En otras palabras, vimos la reencarnación como la progresión lineal de un alma singular. Solíamos pensar en cualquier "otra" vida como "vidas pasadas" de la misma persona. Las vidas futuras casi nunca fueron investigadas porque, según nuestro entendimiento, el futuro aún no había sucedido.

Pero debido a que nuestras mentes ahora pueden procesar mejor el pensamiento multidimensional en el espacio y el tiempo, estamos listos para trascender estas explicaciones más simples ofrecidas por tantas generaciones de nuestros predecesores. Fuera de la dimensión de nuestra realidad terrestre, el tiempo opera con un patrón diferente. No es lineal es, simplemente y siempre, ahora. Por tanto, cada vida aún se está desarrollando y ya se ha completado en el momento presente.

La sesión de John fue una verdadera educación espiritual para mí. El concepto de vidas paralelas es novedoso dentro del mundo de la regresión a vidas pasadas; de hecho, está a la vanguardia de nuestra conciencia espiritual como un todo. Durante mi sesión con John me sentí como una exploradora, aventurándome en dimensiones desconocidas del conocimiento. En ese momento no sabía de ningún otro regresionista que hubiera encontrado esta información en su trabajo. Hasta ese momento, no había leído ningún libro que hablara sobre la simultaneidad de la existencia. Si lo hubiera encontrado en alguna parte habría volado sobre mi cabeza sin que yo entendiera el concepto o lo procesara conscientemente. ¡Sin mencionar que John fue mi primer cliente fuera de mi querida familia y amigos! Sentí una inmensa gratitud de que el Espíritu me hubiera considerado lista para facilitar una sesión de tanta importancia.

Después de mi sesión con él, quería contar a todo el mundo sobre vidas paralelas, pero estaba indecisa. ¿Quién era yo para revolucionar nuestra comprensión de la reencarnación? Después de todo, yo era una abogada corporativa que representaba a empresas que cotizan en bolsa, ¡no un gurú espiritual!

Sin embargo, en cada oportunidad que tuve, compartí mis hallazgos. Podías escuchar el entusiasmo en mi voz cada vez que hablaba de la simultaneidad de la existencia. Mis revelaciones provocaron conversaciones inspiradas dondequiera que iba. Hablar sobre las regresiones de John, y la verdad sobre cómo funcionan nuestras vidas, me llenó de gran entusiasmo. En esos momentos, sentí que me estaba encerrando en la energía de mi verdadero yo, que estaba cumpliendo mi propósito de inspirar a las personas y traer luz a sus vidas.

Con el tiempo, me di cuenta de que tanto el mundo como yo estábamos listos para compartir esta información. Ahora sé que siempre se me da aquello para lo que estoy preparada, y solo cuando estoy apta para ello. Al permitirme compartir mis descubrimientos, me he convertido en la persona que soy hoy, una persona que puede ponerse de pie y presentar nuevas ideas al mundo. El Espíritu nunca dudó de mí, y solo esperaba amorosamente que ganara confianza para compartir lo que había aprendido.

Para mí está claro que el Universo anhela este nuevo cambio de pensamiento. En todas partes, la gente está dando pasos en la dirección de la Luz. Estamos haciendo grandes progresos en la asimilación y aplicación del conocimiento metafísico sutil. Y, lo que es más importante, estamos saliendo de nuestra zona cómoda para redescubrir la vida de maneras nuevas y emocionantes. La comprensión de que el tiempo es simultáneo puede ayudar a todos en nuestro progreso espiritual y expandir nuestra conciencia de cómo creamos nuestras realidades.

Conciencia Consciente de Vidas Concurrentes

Puedes preguntarte por qué no eres consciente de otras vidas concurrentes que está viviendo. La explicación radica en la capacidad de nuestro cerebro para procesar información. Neurológicamente solo somos capaces de sintonizarnos con la vida presente que conocemos; nos ayuda a mantener un sentido coherente de nosotros mismos. ¡Cuán confusos estarían nuestros egos si pudieran recibir información de todas nuestras almas complementarias simultáneamente! Nuestros cerebros filtran una gran cantidad de información que nos rodea en la vida diaria, tal como es: de los 400 mil millones de bits de información que nuestro cerebro procesa cada segundo, somos conscientes de solo 2.000.

¡Imagínate cómo sería tener una entrada de unas pocas veces eso! La información nos abrumaría, dejándonos incapacitados. Uno podría preguntarse: ¿Soy un trabajador de una fábrica en Harbin, China? ¿Un beduino montado en camello? ¿Un antiguo kahuna hawaiano? ¿Quién soy? Raros son los casos en los que las personas son conscientes de los otros campos de existencia donde habitan. Los niños a veces pueden conectarse espontáneamente con otras vidas, pero incluso en esas circunstancias la entrada es breve. Pueden recibir una ráfaga de información en un momento y, al momento siguiente, reorientarse hacia la realidad que conocen como propia. Las personas también pueden conectarse con otras vidas en los sueños, porque el estado de sueño proporciona un contenedor seguro para que el ego explore.

Aunque no somos conscientes de ello, nos comunicamos constantemente con nuestras almas complementarias y nuestra Alma Suprema. Subconscientemente estamos siempre en contacto y nos comunicamos en nuestros sueños. Y aunque no lo reconozcamos conscientemente, siempre estamos siendo influenciados por las vidas de nuestras almas complementarias. Sus preferencias, experiencias, pensamientos y conclusiones nos afectan. Aprendemos de las formas en que exploran sus temas y ellos aprenden de nosotros. Nos ayudamos unas a otras. Puede manifestarse como atracciones inexplicables hacia determinados tipos de música, países extranjeros o alimentos. Para mí, es el amor por la sopa de miso. Podría comer sopa de miso para el desayuno, el almuerzo y la cena, día tras día, y nunca cansarme de ella. No fue una sorpresa descubrir que mi Alma Suprema ha creado una vida en Japón con la que me conecto fuertemente.


Ejercicio: La influencia de tus almas complementarias

Una vez que comprendes las vidas simultáneas de las almas almas complementarias, es muy fácil reconocer sus influencias. Ciertos sentimientos, ideas, momentos de inspiración y diferentes puntos de vista comienzan a destacarse como conexiones con tus otras vidas.

En este ejercicio, explorarás dichas influencias a través de un diario, así que asegúrate de tener a mano papel y bolígrafo. Comienza por encontrar un lugar tranquilo donde puedas sentarte cómodamente durante al menos 20 minutos. Toma algunas respiraciones profundas y conéctate con tu cuerpo. Date cuenta de lo que estás sintiendo en este momento. Si hay muchos pensamientos y emociones dando vueltas, obsérvalos y suéltalos. Luego, una vez que te sientas listo, toma tu diario y responde las siguientes preguntas por escrito:

·                     ¿Cuáles son algunos gustos y disgustos inexplicables que tienes? ¿Cosas que tus padres encontraron interesantes sobre ti, que ninguno de tus hermanos o amigos compartió?

·                     ¿Tienes habilidades o capacidades que son inexplicables en base a la historia de tu vida?

·                     ¿Tienes afinidad por algún idioma o cultura en particular? ¿Un alimento? ¿Un tipo de música?

·                     ¿Te sientes atraído hacia un lugar en particular? Una vez que estás allí, ¿te resulta familiar, como si supieras cómo moverte por él?

·                     ¿Estás fascinado con un momento particular de la historia?

·                     ¿Hay causas que te apasionen fervientemente?

·                     ¿Qué tipo de libros te encantaba leer cuando eras niño?

·                     Cuando eras joven, ¿hablaste con tus padres sobre tus otras familias y otras vidas?

·                     ¿Tienes fobias y miedos intensos sin explicación razonable?

·                     ¿Tienes algún sueño recurrente?

Una vez que hayas respondido estas preguntas, deja volar tu imaginación. ¿Hacia dónde podría estar apuntando cada una de estas influencias? ¿Qué vidas podrían estar viviendo tus almas complementarias del Alma Suprema en este momento? ¿En qué periodos de tiempo? ¿En qué países? No te censures; esto es simplemente una exploración abierta de la posibilidad. Diviértete imaginando cuán diferentes pueden ser tus vidas.

Finalmente, escribe durante unos minutos sobre qué pensamientos y emociones surgen cuando consideras que estas influencias podrían provenir de tus almas complementarias del Superalma. ¿Te sientes emocionado? ¿Aliviado? ¿Atemorizado? ¿Inseguro? Lo que sea que estés sintiendo, escríbelo.


Solo hay una vida

Durante una regresión, a medida que las imágenes, sentimientos e impresiones comienzan a fluir, identificamos intuitivamente quiénes somos en la vida paralela que estamos experimentando. Nos convertimos en esa “otra” versión de nosotros mismos. Vemos, oímos, olemos, percibimos, conocemos y sentimos desde la perspectiva de esa persona; hablamos desde la primera persona “yo”. Somos capaces de reconocer instantáneamente a nuestras almas complementarias e identificarnos con ellas porque las almas que se originan en la misma Superalma vibran con la misma frecuencia de identificación única.

Cuando regresamos a otra vida, nos sintonizamos con la energía y las experiencias de ese ser. Esencialmente nos convertimos en esa otra persona. Nos conectamos con otra extensión de nuestra alma, que tiene vibraciones similares y está explorando temas similares. La experiencia se siente profundamente personal, como si también sintiéramos toda esa alegría y todo ese dolor. Esto tiene sentido, porque la vida se experimenta a través de la Superalma y pertenece a ella, y por lo tanto nos pertenece. En realidad, todos somos uno, así que cuando proyectamos nuestra conciencia en una situación y nos sintonizamos con una persona en particular, literalmente nos convertimos en esa persona.

Es común que alguien que está describiendo una experiencia de regresión diga: “En mi vida pasada, yo era…”. Este es un atajo conveniente y, desde cierto punto de vista, es correcto. Todos estamos compuestos de la energía de nuestra Superalma. Como resultado, cualquier vida creada por el Alma Suprema también es parte de nosotros.

Sin embargo, también es importante entender que tu vida presente es tu única vida. Esta vida es la única vida que el Alma Suprema ha creado a través de tu alma única. En verdad, no tienes vidas pasadas. No tienes vidas futuras. Eres una expresión única de conciencia que solo está apareciendo ahora. Ningún otro ser, jamás, serás tú, ni tú serás, jamás, ningún otro ser. Estas dos perspectivas pueden parecer paradójicas al principio, pero si dejas que se asiente un poco, verás que pueden coexistir.

Quizás te preguntes por qué una persona experimenta una vida en particular durante una regresión. Para los clientes y para mí, el proceso parece automático. Aconsejo a los clientes que confíen en la inteligencia de su ser expandido y en la fuerza organizadora del Universo. Su alma ya se está comunicando con sus almas complementarias del alma; sabe lo que será, para un cliente, más beneficioso e importante ver en ese momento. Como resultado, las vidas con las que la persona sintoniza son siempre relevantes. La comida del cliente para llevar siempre es apropiada, siempre curativa y siempre orienta.

Las otras vidas simultáneas de tu Alma Suprema no son estáticas ni están congeladas en el tiempo. Aunque pensamos que esas vidas que tuvieron lugar antes de este momento han pasado en un tiempo lineal, esas vidas no están “terminadas”. Existen y se están desarrollando actualmente. Por lo tanto, es muy natural y normal que sus almas complementarias compartan ideas y experiencias fuera de su conocimiento consciente. Sin embargo, tu mente consciente es capaz de reconocer los pensamientos y sentimientos que surgen como resultado de compartir. Esto es muy parecido a hablar con un amigo o un hermano por teléfono. Cuando hablan, se cuentan historias y se dan apoyo y consejos. Y cuando cuelgas reconoces que la energía de la otra persona te ha afectado. Te sientes un poco diferente y piensas un poco diferente por haber hablado con él o ella.

Estos momentos de reconocimiento son una forma maravillosa de recordarte, a sí mismo, que siempre cuentas con el apoyo y la guía en tu viaje. Es poderoso recordarte a ti mismo que existes y funcionas en muchos niveles de la realidad, que verdaderamente eres multidimensional.

Toda la conciencia existe a la vez. Todas las vidas creadas por un Alma Suprema existen en el mismo momento eterno. Puedes pensar en el tiempo como un filtro a través del cual la conciencia se expresa en nuestro planeta. Como tal, algunas vidas se crean en lo que percibimos como diferentes momentos o períodos históricos. Un Alma Suprema puede crear vidas en la época de Cristo, durante las Cruzadas o durante la Revolución Industrial, dependiendo de sus objetivos. Por lo tanto, las personas que tienen una regresión pueden experimentar estas otras vidas como si tuvieran lugar en un momento histórico diferente al de su encarnación. Esta elección la hace el Alma Suprema según los temas que busca explorar y lo que mejor sirve para su crecimiento.

¿Hay almas complementarias en la Tierra?

Si un Alma Suprema puede elegir crear varias vidas separadas en el mismo marco de tiempo histórico, es posible que te preguntes si tienes almas equivalentes viviendo en la Tierra en este momento. La respuesta a esa pregunta es: ¡tal vez! Tales almas complementarias son dos o más personas que tienen la misma vibración del alma y se originan en la misma Superalma. Incluso puedes conocer a tus almas complementarias: podrían ser tus amantes, amigos o enemigos.

Una cliente mía vio una vida en la que era hombre, administrador de establo de una gran propiedad. El hombre estaba muy orgulloso de su puesto y de lo bien que funcionaba todo. Un día la señora de la casa y su esposo querían salir a dar un paseo, así que el encargado preparó los caballos. Sin que él lo supiera, el caballo que eligió para la señora de la casa tenía una inflamación en la pata y no se sentía bien. El gerente sintió que algo no estaba del todo bien, pero optó por enviar el caballo de todos modos para mantener su reputación. Mientras cabalgaba, el caballo tropezó, cayó y mató a la señora de la mansión. El encargado del establo fue ejecutado por este accidente. A medida que se desarrollaba la historia de la vida, mi cliente se dio cuenta de que ella era tanto la administradora del establo como la dama que murió. Su Alma Suprema creó dos vidas que interactuaron para que pudiera aprender simultáneamente las lecciones de sintonizar, prestar atención y ser responsable de uno mismo y de los demás, desde dos puntos de vista diferentes.

Otro cliente de regresión compartió una sesión con un hombre que experimentó una vida en la que era una persona corrupta, violenta y generalmente desagradable. En esa vida el hombre estaba casado con una esposa que, a pesar de todos sus defectos, lo amaba y siempre lo cuidaba. Durante la regresión se reveló que tanto el esposo como la esposa eran fragmentos de la misma Alma Suprema. El Superalma había elegido crear esas dos vidas, en lados opuestos del matrimonio, para experimentar simultáneamente la dinámica familiar desde ambas perspectivas. Y Seth, una entidad canalizada por la autora Jane Roberts, identificó a Jane y su esposo, Robert Butts, como almas complementarias. En La realidad "desconocida", Seth revela que Jane y Robert están "representando aspectos 'opuestos' el uno del otro, pero fusionándose para propósitos y objetivos comunes".

En Conversaciones con Seth, Susan Watkins detalla las aventuras de la conciencia que ella y otros miembros de la clase Percepción Extrasensorial tuvieron bajo la dirección de Jane Roberts. En la clase se examinó la idea de almas complementarias de vida concurrente y Seth compartió con algunos de los participantes quiénes eran sus almas complementarias. Susan se enteró de que Jane Roberts, Zelda Graydon y Richard Bach, el autor de Jonathan Livingston Seagull, eran sus almas complementarias u homólogos. Para comprender mejor su interconexión, y cómo sus experiencias contribuyeron al crecimiento de su Alma Suprema, Susan pasó a examinar las similitudes y diferencias que compartían los cuatro.

Nuestras almas complementarias pueden ser de edad, género, origen étnico, sistema religioso o nivel socioeconómico similares o diferentes. Las similitudes y diferencias entre las almas complementarias reflejan el enfoque elegido por el alma para el tema de su Alma Suprema. Nuestras almas complementarias pueden compartir un camino muy similar al nuestro y podemos llamarlos amigos y amantes. Podemos encontrarnos con otras almas complementarias por coincidencia, podemos cruzarnos con ellas en la calle sin siquiera darnos cuenta, o puede que nunca tengamos contacto en absoluto. Es posible que no nos gusten, o nos sintamos críticos con las personalidades y elecciones de nuestras almas complementarias. Podemos tener almas complementarias con antecedentes étnicos, culturales o políticos a los que nos oponemos con vehemencia. Nada de esto nos hace menos conectados. En verdad, todos estamos interrelacionados; no hay extraños en la Tierra.


Ejercicio: Cómo identificar a tus homólogos o almas complementarias

A estas alturas, estoy seguro de que te estarás preguntando cuáles de las personas en tu vida pueden ser realmente tus almas complementarias. Cuando hagas este ejercicio te advierto de que no permitas que ninguna noción romántica, (tener un alma complementaria que te complete en una relación íntima, por ejemplo), afecte tu conocimiento intuitivo. Por impresionante que sea el cuento de hadas de que tu pareja sea tu almas complementaria, tales ideas pueden impedirte ver las verdaderas conexiones del alma con tus amantes y las personas que te rodean.

En La Realidad “Desconocida”, Seth da consejos sobre cómo identificar a tus almas complementarias:

He hablado de almas complementarias en la clase [de Jane Roberts]. Muchos de los estudiantes se pusieron muy serios mientras trataban de entender el concepto. Algunos querían que identificara sus almas complementarias para ellos. Un estudiante... dijo poco. Dejó que su imaginación creativa fuera a donde tuviera que ir mientras tenía en mente la idea general. Jugó con el concepto. En cierto modo, sus experiencias fueron como las de un niño: abierto, curioso, lleno de entusiasmo. Como resultado, él mismo descubrió algunos de sus almas complementarias. La mayoría de las personas, sin embargo, son tan absolutamente serias que sospechan de su creatividad.

Cuando estés listo para conectarte con tus almas complementarias hazlo con espíritu de diversión y curiosidad. Reserva 20 minutos cuando sepas que nadie te molestará. Siéntate en una postura cómoda, con un diario cerca. Toma una respiración profunda, contenla y luego déjala salir lentamente. Haz esto dos veces más y toma conciencia de cómo tu cuerpo se vuelve cada vez más relajado. Luego, establece la intención de conectarte con tus almas complementarias del alma. Suelta cualquier expectativa sobre cómo será, e incluso la necesidad de saber la respuesta. En su lugar, observa qué imágenes y pensamientos surgen. ¿Te atraen lugares o personas en particular?

Como sugiere Seth, aborda este ejercicio con la alegría de un niño. Recuerda, la necesidad de tener razón no es importante. Usa tu imaginación libremente. Si tuvieras que imaginar quiénes son tus almas complementarias, ¿quiénes te imaginas que son? Confia en ti mismo; muy dentro de ti, ya lo sabes. Ya tienes toda esta información. Continúa dejando flotar libremente, en tu mente, la pregunta ¿Quiénes son mis almas complementarias?, notando qué pensamientos e imágenes surgen. Luego, cuando te sientas listo, lleva lentamente tu conciencia al momento presente.

Escribe cualquier pensamiento, sentimiento, imagen e idea que se te haya ocurrido. Si alguien que conoces se acercó como una posible almas complementaria, dedica un poco de tiempo a escribir un diario sobre las similitudes o diferencias entre vosotros. ¿Cómo fueron vuestras infancias? ¿Eres del mismo género o nivel socioeconómico? ¿Tuviste una educación religiosa similar? ¿Tenéis intereses o desafíos comunes? ¿Estáis trabajando en lecciones similares, cada uno a su manera?

Si las imágenes que te llegaron eran las de un extraño, reconoce cuán conectados en la Unidad estamos todos realmente.

Completa este proceso enviando a través de tu corazón una bola energética de amor a esas personas, agradeciéndoles ser parte de la expansión de tu alma.

Tener esta experiencia te dará otro vistazo del ser maravilloso y multifacético que eres.


Ya he compartido contigo algunas ideas que expanden la mente. La comprensión de que las experiencias de vida de nuestras almas son "vidas simultáneas" y no "vidas pasadas" es novedosa. Permíteme ahora llevarte aún más lejos en nuestra exploración de la conciencia y presentarte la idea de realidades paralelas de tus posibles yoes. En el próximo capítulo, presentaré esta idea a través de una de mis experiencias de regresión personal más intensas y conmovedoras. Como todas las aventuras, esta es una historia de desafíos, peligros, amor apasionado y grandes aprendizajes.

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CAPÍTULO 3. CADA ELECCIÓN CREA UNA NUEVA REALIDAD

Crecí en la Bulgaria comunista. Debido a que el ateísmo es un valor fundamental de la ideología comunista, se hizo todo lo posible para marginar y erradicar la presencia de la Iglesia ortodoxa búlgara en la vida cotidiana. Como resultado, la religión y el misticismo no formaron parte de mis primeros años de infancia. Nunca me hablaron de Dios, de los ángeles o de la eternidad de mi alma.

A fines de la década de 1980 la revolución democrática barrió Europa del Este como una ola. Recuerdo vívidamente la noche del 10 de noviembre de 1989. Estaba sentada en el sofá viendo la televisión con mis padres, pocas horas después de la caída del Muro de Berlín. Durante una transmisión en vivo de la reunión del Comité Central del Partido Comunista Búlgaro, el presidente de nuestro país, quien había ocupado el cargo durante 35 años, fue obligado a renunciar. La cámara de televisión mostró claramente la conmoción en el rostro del presidente. Mi papá, que estaba sentado a mi derecha, saltó y gritó incrédulo. Mi mamá, que sentada a mi izquierda, también expresó su sorpresa. Se miraron el uno al otro y luego a la televisión. Solo tenía nueve años y realmente no podía entender lo que estaba pasando. Aun así, sabía que era importante, muy, muy importante.

Muchos cambios sociales y económicos resultaron de ese golpe interno. Uno de ellos fue la afluencia de ideas religiosas y metafísicas. Debido a que se les había negado durante tanto tiempo, la gente estaba sedienta de este tipo de conocimiento. La información espiritual de todo tipo se hizo fácilmente disponible. Ir a la iglesia en Semana Santa se volvió aceptable, al igual que hablar sobre sanación energética y los poltergeists.

Tenía 13 años cuando me encontré por primera vez con mi propósito y pasión: la regresión a vidas pasadas. Mi tío Veselin Pasliev estaba leyendo A través del tiempo hacia la curación de Brian Weiss, y mi interés despertó de inmediato. No podía esperar a que terminara para poder reclamarlo para mí. Mis ansias parecían inexplicables en ese entonces, pero ahora veo que el libro fue una señal temprana que marcó mi camino en esta vida. Aunque el concepto de reencarnación para mí era nuevo, no cuestioné la posibilidad. Parecía tan natural, tan normal. Como dijo Voltaire, “No es más sorprendente nacer dos veces que una; todo en la naturaleza es resurrección.”

Me encantaron las historias y la sabiduría del libro de Brian, y las posibilidades que se ofrecían. Me encantó tanto que al leer las últimas páginas decidí grabarme leyendo su guión de muestra y experimentar una regresión por mí mismo. Recuerdo haber pensado, solo tengo 13 años. Realmente no hay nada malo en mí. No tengo fobias. No tengo dolencias físicas. ¿Por qué haría esto? Pero el tirón era demasiado fuerte para resistir.

Hice la grabación, rebobiné la cinta hasta el principio y, aunque no sabía qué esperar, presioné PLAY. La grabación me guió a través de una hermosa relajación, y me sentí muy tranquila y cómoda. En ese momento crucé a través del tiempo hacia otra vida, sin embargo, todo eso cambió.

Inmediatamente caí en el cuerpo de una mujer que corría por su vida. Me convertí en ella, y mi corazón latía con miedo. Mi respiración se volvió corta, abrupta y desesperada. Estaba aterrada. Iba corriendo por un pasillo poco iluminado porque me perseguían hombres que me matarían si me atrapaban. Estaba vestida con una chaqueta y una falda de lana gris gruesa, junto con medias negras y zapatos negros con tacones pequeños. Mi cabello oscuro estaba cuidadosamente recogido en un moño en la parte de atrás.

El sonido de mis pasos reverberaba contra paredes de ladrillo mientras corría. Había filas de puertas a ambos lados, y trataba de abrirlas apresuradamente, una tras otra. Todas estaban cerradas. Al final del pasillo finalmente encontré la manija de una puerta que cedió. Cuando entré en la habitación vi que estaba vacía. Solo había una pequeña ventana con barrotes y estaba en lo alto de la pared, cerca del techo. No había salida. Sabía que estaba presa. Sabía que me atraparían.

También sabía las circunstancias que me habían llevado allí. Era la época de la Segunda Guerra Mundial, y yo era médico. En lugar de curar a un general nazi, como se suponía que debía hacer, lo había envenenado y matado. Por eso estos hombres me perseguían: buscaban venganza.

En la siguiente escena miraba hacia abajo desde arriba. Me vi siendo atada a una silla eléctrica y vi cómo me ejecutaban. No sentí dolor; Simplemente estaba observando.

Entonces sucedió algo verdaderamente hermoso. Observé cómo mi espíritu se elevaba de mi cuerpo y se deslizaba lentamente hacia arriba. Parecía estar siguiendo un rastro de luz blanca. Al final de ese camino había una puerta abierta, a través de la cual fluía la magnífica luz blanca. En la puerta había un ser que brillaba con amor y luz, y estaba esperando para saludar a mi espíritu. Sentí tanta paz y amor. Tuve la sensación de ser eterna.

“¿Qué lecciones tuviste que aprender?” Escuché mi voz preguntar en la grabación. Empecé a llorar al sentir la sencillez y la profunda verdad de la lección: sé bueno; ser amoroso

Esa noche, esperé ansiosamente a que mi madre regresara a casa del trabajo. Le conté lo que había experimentado. Siendo tan joven, sentí que la década de 1940 eran tiempos de antigüedad, así que le pregunté si realmente existieron las sillas eléctricas durante la Segunda Guerra Mundial. Ella dijo que sí. Nunca sentí la necesidad de investigar más la validez de la historia. Se sintió tan emotivo, tan real, que nunca la cuestioné. No necesitaba pruebas para confiar en lo que había experimentado.

Me parece interesante que esta regresión haya tenido lugar cuando tenía 13 años. Los místicos creen que el número 13 es el número del cambio y la transformación. El número requiere un estudio de las creencias fundamentales de uno y permite cambios en la forma en que una persona define todo en la vida, lo que se dice que conduce a cambios en la visión del mundo de una persona y en toda su existencia.

No hay duda de que mi primera regresión tuvo un impacto tremendo en mi vida. La necesidad de ser bueno y amoroso se volvió de suma importancia para mí. Coloreaba cada paso, cada elección y cada conversación. Incluso hizo darme cuenta de cuán apropiado era el nombre que me habían puesto padres. Mi primer nombre completo es Dobromira, que es palabra eslava compuesto por dos: dobro, que significa “bueno”, y mir, que significa “paz, mundo”. Después de mi regresión, elegí ser alguien que trae el bien al mundo.

La Historia Continúa…

La historia de mi vida en tiempo del nacional socialismo se desarrolló aún más muchos años después, cuando estaba en un taller dirigido por Brian Weiss. Durante una de las regresiones grupales que hicimos, me vino a la mente la imagen de un largo camino bordeado de abedules. Me vi como una mujer joven, caminando por este tranquilo camino de tierra, en el campo. En mi mano llevaba una pequeña maleta, y en mi cabeza tenía un pañuelo. Estaba dejando mi pueblo para mudarme a San Petersburgo para estudiar medicina. La última parada que hice en mi camino fue en el cementerio, donde presenté mis respetos en las tumbas de mis parientes muertos. Mi corazón estaba pesado. Sabía que podrían pasar muchos años antes de que regresara a casa, si es que alguna vez lo hacía.

Mientras estudiaba en la universidad, fui reclutada por el servicio secreto de la Unión Soviética. Se estaban gestando problemas en Europa, e incluso se hablaba de una posible guerra. Me enviaron a Europa a espiar para mi país. Como mujer atractiva que sabía cómo usar sus encantos, me resultó muy fácil recopilar información. Vi una escena vívida de mí sentada frente a un pequeño dispositivo, ingresando mensajes codificados para enviarlos a la Unión Soviética.

Había un club nocturno que era frecuentado por muchos estadounidenses, y me encontré yendo allí tan a menudo como podía, con la esperanza de conocer a un hombre en particular que había llegado a conocer. Me sorprendió descubrir que no estaba interesada en él por trabajo, sino porque me estaba enamorando de él. Él también se enamoró de mí.

La siguiente escena se desarrolló en un gran tramo de escaleras, frente a un gran edificio administrativo. Recibí órdenes de que me mudaría a un lugar diferente en Europa, así que vine a despedirme de este hombre que amaba. Me rogó que no me fuera y me pidió que me casara con él. Aunque tenía muchas ganas, no podía quedarme. Ya había dado mi palabra y comprometido mi vida, mi amor y mi corazón a mi país. Le aseguré que cuando regresara a la granja de su familia, en Estados Unidos, se casaría con una buena mujer, tendría hijos y sería muy feliz. Pero mi corazón se estaba rompiendo. Me despedí y con lágrimas en los ojos bajé corriendo las escaleras hacia el auto que me esperaba.

Más tarde me casé con un importante oficial nacional socialista, lo que facilitó mucho mi trabajo y me brindó protección. Había comenzado la Segunda Guerra Mundial y yo había estado practicando la medicina, principalmente tratando a militares alemanes. Recibí órdenes de eliminar a un general de alto rango al que estaba tratando por una enfermedad. Me vi de pie, frente a una mesa con un vaso de agua encima y sostenía un pequeño recipiente de polvo. El general estaba sentado en una silla a mi lado. Miré hacia el techo y, por un segundo que me pareció una eternidad, experimenté una intensa incertidumbre sobre lo que me estaba a punto de hacer. Sin embargo, pensando que no tenía otra opción, vertí el polvo en el vaso. En lugar de darle al general su medicación le di veneno.

Aquí es donde encajó mi primera regresión cuando era niña. Me vi una vez más corriendo por ese pasillo y, al fin, siendo atrapado. Debido a que yo era mucho mayor y estaba mucho mejor equipado para manejar las escenas dolorosas de la historia, mi Yo Superior me permitió ver los detalles espantosos de los interrogatorios a los que fui sometido. ¿Traicioné a mi red? No. Sostuve hasta el final que había actuado sola. Una y otra vez fui golpeada, torturada, interrogada y luego de nuevo golpeada, torturada e interrogada. La único que mis interrogadores me perdonaron fue no violarme. Debido a que estaba casada con un oficial alemán sintieron que era una línea que no podían cruzar. Al final, como había visto cuando niña, me colocaron en una silla eléctrica y ejecutaron.

A medida que mi espíritu se elevaba por encima de la escena, una vez más supe que la lección de esa vida era el amor: la necesidad de abordar cada situación con amor y dejarme amar también. Sabía que toda la vida había sido orquestada para que yo pudiera tener la oportunidad de elegir el amor al estar parada en esas escaleras, para decir que sí cuando el soldado estadounidense me pidió que me casara con él. En cambio, elegí permanecer fiel a la promesa de servir a mi país. Después de que me fui, el soldado sintió que no tenía nada por lo que vivir; mi partida había quebrantado su espíritu. Vi que murió en una trinchera tras haber recibido un disparo en la frente durante un combate con el ejército alemán.

En las horas que siguieron a esta regresión me estremecí hasta la médula. Me llenó una enorme sensación de arrepentimiento de que mi alma complementaria, la médico, hubiera dañado a otro ser humano. Sabía que envenenar al general estaba mal, pero estaba atrapada en su percepción limitada del deber y la obligación. Se sintió acorralada por las circunstancias y, como resultado, hizo algo que iba en contra de sus instintos. Sin embargo, sabiendo que somos eternos, me recordé que cada vida enriquece nuestra alma con lecciones valiosas. Saber que puedo, —y que prefiero—, actuar con integridad, que prefiero no hacer daño a los demás, es sin duda una lección muy valiosa.

Aun así, lamenté profundamente que mi alma complementaria no hubiera conocido el amor. Estaba claro para mí que todos los sucesos que habían ocurrido desde que había llegado a Europa estaban destinados a conducir a ese momento en las escaleras, donde podría elegir el amor. Sentí que había desperdiciado toda una vida. Mi alma huyó del amor y de sí misma, porque se había comprometido a servir a su país desinteresadamente.

Reflexionando sobre la experiencia sentí una inmensa gratitud por el amor que conozco como la persona que soy hoy. Mi alma debe haber elegido experimentar y aprender la lección del amor en mi vida actual, porque nada me da mayor sentido de significado y realización que crear situaciones llenas de amor, luz e inspiración. Una de las formas en que más disfruto hacer esto es ayudar a otros a experimentar sus otras vidas y comprender mejor a las personas y circunstancias que los rodean. Y en mi vida personal he sido bendecida con una relación amorosa con un hombre que tiene dos miedos profundamente arraigados e irracionales. El primero es el miedo a perderme, y el segundo es el de que me disparen a quemarropa en la frente.

Justo el otro día mi pareja me preguntó: "¿Me has visto en alguna de tus vidas pasadas?" Dije que sí y le recordé la vida de la espía rusa. Me di cuenta de que nunca le había contado la visión que había tenido de su muerte, de cómo, durante la regresión, lo había visto agazapado en una trinchera. Se asomó para disparar al enemigo y recibió un disparo en la frente. Después de escucharme contar esta historia me habló de un sueño recurrente que había tenido muchos años antes de conocerme.

“Fue un sueño muy vívido que recuerdo claramente hasta el día de hoy. Estaba en una pelea y me disparaban. Estaba tirado en una zanja. Hubo otros a mi alrededor que fueron asesinados, algunos de ellos se amontonaban sobre mí. Los soldados enemigos caminaban buscando personas aún vivas y les disparaban. Traté de fingir que estaba muerto para que no me dispararan. Pero me encontraron, sintieron que estaba vivo y me dispararon”.

Ambos nos miramos sintiendo la profunda conexión entre nosotros. La mujer rusa que soy en otra vida se había dado una segunda oportunidad de amor con el soldado estadounidense que una vez conoció.

Realidades paralelas de posibles yoes

De vuelta en el taller de Brian Weiss, cuando condujo a nuestro grupo a otra regresión, entré fácilmente en la experiencia. Me vi como la misma mujer rusa que había estudiado para médico y reclutada para convertirse en espía. Estaba sentada en una sala de espera de un pequeño aeropuerto. Sabía que era azafata. ¿Cómo podría ser esto? protestó mi mente. ¡Pensé que había establecido de qué se trataba esta vida!

Iba vestido con un uniforme azul. Mis compañeras azafatas estaban paradas cerca, hablando en ruso entre ellas. En mi mente escuchaba y entendía la conversación mundana que tenía. Subimos al plano y comenzamos a realizar nuestras funciones. Los pasajeros eran todos funcionarios de nivel gubernamental. Estaba sirviendo bebidas, entregué un vaso con vodka a Joseph Stalin y sentí repulsión hacia él. Era un hombre bruto, tosco, con dedos gruesos. Fui a la cabina para ofrecer una bebida a los pilotos. El piloto, que era el segundo al mando, tenía cabello rubio y ojos azules. Su nombre era Serioja, y era mi prometido. Lo amaba profundamente y estaba emocionada por esposarlo, tener hijos y compartir mi vida con él.

Mi mente no podía entender lo que estaba pasando. Pregunté, ¿no era yo, como esta mujer, una espía? ¿Qué sucedió? Inmediatamente supe que cuando a la mujer se le ofreció la oportunidad de ser enviada en una misión a Europa, ella la rechazó. Como resultado, más tarde fue asignada para formar parte del personal de la tripulación de vuelo de Stalin. Un sentimiento de insatisfacción persistió durante toda su vida. Siempre se preguntó si habría podido servir mejor a su amada patria si hubiera tomado la misión de ir a Europa.

Salí de esta regresión sintiéndome completamente confundida. No tenía ni idea de lo que había sucedido. De hecho, durante muchos años opté por ignorar esta variación de la historia. Al compartir con otros la vida de la mujer rusa solo contaría sobre el camino de espía de su vida. El rompecabezas de la azafata estaba apartado, cubierto de polvo, en el fondo de mi mente, esperando ser desenvuelto para entregar su regalo.

Lo que había experimentado eran dos posibles vidas de la misma persona, existiendo simultáneamente. En el momento en el que a la mujer rusa se le presentó la opción de ir a una misión a Europa su realidad se dividió en, al menos, dos caminos diferentes: el primero fue la vida en la que aceptó la misión, y el segundo fue la vida en la que rechazó aquella misión. Puedes ver cómo esta división creaba dos vidas completamente diferentes, y estas realidades divididas me permitían experimentar dos versiones completamente diferentes de vida durante las regresiones. Imagino también que existen realidades paralelas simultáneas a las dos ya mencionadas, en las que nunca se le da esta oportunidad y la vida se desarrolla por otro camino más.

Cada uno de nosotros tiene múltiples "yoes posibles" que existen en este momento. Es fácil imaginarse potenciales implicaciones que podrían explorarse en el futuro. Pero también hay caminos que aún no has tomado en tu pasado. Hay posibles yoes en tu pasado que esperan emerger ahora mismo. Recuerda, el pasado no está hecho y completado. Es solo otra corriente de tiempo. Se está creando ahora mismo.

Puedes visualizar esto imaginando un árbol de decisiones. Cada vez que se presenta una elección, nuestra conciencia se divide y experimenta todas las variaciones posibles de cada situación. Cada yo paralelo continúa creando experiencias y ramificándose en múltiples posibilidades. Esto se aplica a decisiones importantes, como la de ir a una universidad específica o casarse con la persona con la que estás saliendo. También se aplica a elecciones simples y cotidianas, como tomar una taza de café por la mañana o elegir una ruta diferente de camino al trabajo.

La primera vez que me encontré con la idea de la existencia paralela de posibles yoes, tuve una comprensión profunda e intuitiva de la misma. Estaba claro para mí que un creador, ya sea Dios o un Alma Suprema, no querría limitarse a experimentar la vida en una vía singular. Si fuera así, este poderoso poder estaría subutilizando severamente sus habilidades; no cumpliría su impulso creativo de estar en un estado constante de convertirse en más. Sé que tú también comprenderás, fácil e intuitivamente, la idea de cómo el explorar diferentes posibilidades crea realidades paralelas.

Una explicación científica

Permíteme ahora hablar a tu mente, lógica y racional, y ofrecerte una explicación científica para la existencia paralela de tus posibles vidas. En 1954, un hombre brillante llamado Hugh Everett III formuló una teoría de física cuántica que describe el concepto de universos paralelos. En el momento de su introducción esta teoría se consideró radical y fue rechazada con bastante fervor por los físicos consagrados. Hoy en día está muy en uso en diferentes campos de la ciencia y la tecnología, y es ampliamente reconocida.

En pocas palabras, la teoría de los "muchos mundos" establece que Todo-Lo-Que-Es posible, sucede. Cada suceso se divide en diferentes realidades y el observador, o la persona que existe dentro del suceso, también se divide como lo hace su mundo. En el momento en que se observa un suceso, el acto de observación crea el suceso y crea una división en la que todas las variaciones posibles del suceso se forman en una realidad paralela, cada una con su versión del observador.

Recientemente, los científicos han demostrado que las reglas que rigen el mundo de las partículas cuánticas también se aplican a los objetos de tamaño humano. El físico cuántico Aaron O'Connell creó un objeto visible a simple vista que se puede demostrar que vibra y no vibra al mismo tiempo. Esto significa que el objeto está en dos lugares diferentes al mismo tiempo. Tal estado de existencia dual se había probado previamente solo con partículas cuánticas.

Tu alma está creando con cada elección que haces. Constantemente te enfrentas a nuevas realidades, nuevos “tú” que están explorando todas las posibilidades. Tu alma no está limitada por el tiempo, y por eso una nueva posibilidad puede nacer en cualquier momento, en tu pasado, presente o futuro.

Las versiones de tu realidad, de las que no eres consciente, que no están "observando" en este momento, existen en un nivel vibratorio diferente. Cada una contiene su versión de "ti / usted". Esas otras versiones de ti experimentan sus mundos de una manera tan real como tú experimentas tu realidad. Comparten la misma historia personal que el yo del que eres consciente, hasta el momento de la división de la conciencia. En ese momento, tu y tu otro yo asumieron cada uno un conjunto diferente de posibilidades en función de la elección que hicieron.

Sin embargo, un nuevo pasado también puede nacer en cualquier momento, y tu experiencia con ese pasado será tan natural y perfecta que es posible que ni siquiera lo notes. Sin darte cuenta, cambiarás a una realidad diferente en la que siempre tuviste ese [nuevo] pasado como parte de tu historia.

La historia de Kalila

Quiero compartir un ejemplo de cómo, en cada momento, podemos permitir una nueva posibilidad. Siempre podemos elegir, de manera diferente, para crear nuestra mejor vida posible. La historia de Kalila ejemplifica claramente cómo un solo momento de elección crea una división en nuestra realidad.

Los padres de Kalila la tuvieron cuando eran muy jóvenes. Pensaron que no podrían criarla adecuadamente, por lo que la enviaron a un internado. Era una buena estudiante y tenía muchos amigos, pero no le gustaban todas las reglas que tenía que seguir en la escuela. Con el tiempo, se convirtió en abogada de éxito. Trabajó mucho, una vez más siguiendo las reglas. Más tarde se casó y tuvo hijos, y era relativamente feliz. Pero todavía sentía una sensación de arrepentimiento. Cuando le pregunté por qué, ella respondió:

Kalila: Quería hacer algo más expresivo, más elocuente, sin tiempo ni reglas. Como bailar. Quería bailar, estar en el escenario. Pero ni siquiera supe eso hasta más tarde. Para entonces estaba casada, con hijos, y tenía que seguir aún más reglas porque había que darles de comer y llevarlos a la escuela…. Viví una vida feliz y tuve una gran familia. Es que siempre hubo algo, dentro de mí, una pequeña chispa de algo que deseaba poder expresarse un poco más. Pero, aún así, fui bastante feliz.

Me siento muy orientada durante el trabajo con los clientes, y con Kalila mis instintos me dijeron que le serviría para explorar una versión diferente de su vida. La hice retroceder al momento en que sentía en su interior que había algo más que podría haberla hecho más feliz. Quería que viera cómo se habría desarrollado una vida en la que hubiera cumplido con esa vocación creativa:

Kalila: Empiezo a tomar clases de baile. Tengo un entrenador de canto.

Dobromira: ¿Sigues siendo abogada o decidiste no estudiar derecho?

Kalila: Decidí no ir a la facultad de Derecho. Hay un lapso de tiempo en el que elegí no ir, aunque tuve la oportunidad de hacerlo. Decidí tomar la otra bifurcación del camino. Practico mucho. Tomé las lecciones que quería tomar. Tuve que hacer espectáculos en los que subía al escenario y realizaba todas las cosas que practicaba y con las que expresaba mi yo. Se sintió tan bien porque no planeé todo, simplemente me expresaba. Se sintió bien. No tuve que averiguar nada. Solo sabía que esta era la forma en que se suponía que debía ir mi cuerpo o eran las palabras que iba a cantar. Se sintió tan bien saber que podía subir al escenario y confiar. Disfruté la actuar en público porque era una forma de expresar mi yo interior y mi alegría por la vida. Cuando llegaba el momento de actuar, sentía lo mismo. Era agradable porque la gente disfrutaba mis actuaciones. Les gustaba que pudiera ser yo misma. Estaban felices de que yo estuviera dispuesta a expresar lo que estaba sintiendo en ese momento.

Dobromira: Maravilloso. ¿Conoces a alguien y tienes una familia?

Kalila: Conozco a alguien. Eso sí, viajamos mucho. Vamos y exploramos otros lugares. Él es muy expresivo, también. Sabe cómo expresarse. Y es tan gentil. Con el tiempo formamos una familia, pero primero vamos y experimentamos cosas nuevas. Cosas que siempre quise hacer.

Dobromira: ¿Así que esta es una buena relación para ti?

kaila: Sí.  No pensé que podría haber una así. Siento que no tenía idea de qué,. es como si fuera la primera vez que tengo una relación. No sabía que una relación podía ser así.

Pedí a Kalila que mirara las dos versiones de esa vida y me dijera si tenía la misma pareja o si eran dos personas diferentes. Dijo que sus maridos eran dos personas diferentes. Uno era más restrictivo, como la forma en que ella era con su vida. El otro era mucho más abierto, fluido y tolerante. Pero eso fue solo porque eligió un camino diferente, dijo. Cuando tomaba la decisión obtenía a alguien compatible con ella. Continuamos:

Dobromira: ¿Para qué te sirvieron las dos versiones de una misma vida?

Kalila: Lo más importante es que me sirvió para entender que me lo permito. Soy una pieza de permitir. El propósito era caminar por la vida y permitir, y escuchar. Todas las posibilidades están ahí. Están disponibles. Experimentar cada momento y, simplemente, ser. En la otra versión recogí todas estas cosas sobre las reglas, así que seguí las reglas. Atraí a alguien más que estaba haciendo lo que le habían enseñado, y se lo transmitimos a nuestros hijos. La lección de permitir crea toda la diferencia en el mundo. Primero hice el cambio porque estaba escuchando, y permití que un consejo me llevara a un lugar diferente.

Dobromira: ¿Qué fue diferente en el momento en que te escuchaste?

Kalila: Fue solo un espacio para dejarse llevar y escuchar. En la otra versión, estaba haciendo lo que se suponía que debía hacer, pero todo lo que hacía se interponía en mi camino. Si hubiera dejado de hacer y permitido más, habría escuchado lo que estaba destinado a suceder a continuación.

En ese momento de escuchar y permitir, Kalila se convirtió en una persona diferente. Percibió nuevas posibilidades para sí misma y amplió sus creencias sobre lo que era posible para ella. Simplemente haciendo eso, se embarcó en una nueva vida posible.

Convertirse en una persona diferente

La física cuántica nos dice que cada momento es un nuevo momento. Nos enseña que no hay continuidad entre los sucesos, que cada suceso es una ocurrencia separada. Sin embargo, nuestras mentes son magistrales en la creación de flujo, en la fabricación de causalidad y continuidad entre sucesos. Debido a que no estamos equipados para experimentar múltiples realidades, sentimos que nuestra vida progresa naturalmente en un camino singular.

La capacidad de cambiar entre posibilidades, de permitir constantemente cambios en nuestras vidas, es tan innata que normalmente no nos damos cuenta de que nos hemos convertido en una nueva persona. Cuando cambiamos a una nueva realidad posible, por lo general parece que simplemente hicimos una elección. Parece que siempre hemos sido la persona que habría hecho esa elección. Miramos hacia atrás, a nuestro pasado, y podemos señalar sucesos que aparentemente nos han convertido exactamente en quienes somos en este momento. Pero en realidad, nuestras creencias, pensamientos y expectativas de lo que era posible nos llevaron a donde estamos hoy. Nos alinean con la realidad de la posibilidad de emparejamiento vibratorio.

Recuerdo claramente una noche cenando con amigos y hablando de realidades paralelas. Había pasado un año desde que decidí dejar de seguir mi carrera legal y, en cambio, dedicarme a mi amor por la espiritualidad. Sentada en la mesa de la cena, me observé. Reconocí que mi identidad como regresionista se sentía muy fuerte. No solo eso, sino que sentí como si mi vida anterior de abogada nunca hubiera existido. Yo, como regresionista, sentí como si nunca hubiera sido abogada corporativa. Incluso miré hacia atrás, a mi infancia, y pude hacer una lista de todos los sucesos que habían apuntado en la dirección de mi nueva carrera. Parecía que, inevitablemente, algún día sería regresionista.

Fluimos con gracia de una posibilidad a otra, mezclándolas a la perfección. Cada posibilidad que elegimos crea un pasado del que lógicamente parece haber seguido el presente. Entonces me parece que siempre he sido una regresionista, tanto que me parece irreal pensar que alguna vez fui abogada.

El cambio entre diferentes posibilidades suele ser sutil para quien lo experimenta. Sin embargo, los que rodean a esa persona siempre notan el cambio. Todos hemos tenido esos momentos en los que nos hemos encontrado con personas que solíamos conocer y algo en ellos parece diferente. No sabemos qué es exactamente, pero inmediatamente captamos una nueva energía. Recientemente, vi a un amigo que no había visto en unos meses. Ella, casualmente, me preguntó: “Algo es diferente en ti. ¿Es tu pelo? Sí, mi cabello había crecido un poco desde la última vez que me vio, pero lo que en realidad estaba captando era una gran cantidad de sanación emocional y liberación por la que acababa de pasar. Ese trabajo interno me había permitido cambiar a un mayor nivel de expansión y nuevas realidades posibles, y ella podía sentirlo.

También hay momentos en los que experimentamos cambios importantes, (un nuevo trabajo, el final de una relación, etc.), y atribuimos esos cambios a bifurcaciones en el camino de la vida, cuando en realidad son cambios de realidad. Sin embargo, tales sucesos son pocos y distantes entre sí. Más a menudo, los cambios entre las realidades son sutiles, tan sutiles que ni siquiera los notamos.

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Tu alma desea nuevas oportunidades de crecimiento, por lo que busca crear nuevas vías para la expresión de su energía creativa. Los innumerables “yos” posibles permiten que este deseo se haga realidad.

Todas tus experiencias presentes provienen de lo que alguna vez fue una posible realidad. Existe una variedad inagotable de posibilidades entre las que puedes elegir para cambiar en la dirección del crecimiento y la expansión. Entonces, ¿cómo es que eliges una posibilidad específica en lugar de otra? La respuesta es simple: las creencias crean la realidad.

Tus creencias sobre quién eres definen lo que es posible y lo que no es posible para ti. Tus creencias actúan como un filtro que permite que entren en la conciencia solo las posibilidades que están en línea con tu autoimagen. Como dije antes, nuestro cerebro procesa 400 mil millones de bits de información por segundo, pero solo 2.000 bits se registran en la conciencia.

Hay un sinfín de realidades posibles. Cada situación tiene innumerables formas posibles de manifestarse. En una u otra realidad se experimentan todas estas posibilidades. Pero tu conciencia elegirá de este campo infinito de potencial solo los caminos que estén de acuerdo con quien crees que eres. Como resultado, cuando cambias la idea de quién eres, tu experiencia de vida también cambia. El espacio se abre para nuevas posibilidades.

El estado físico de tu cuerpo también sigue tus creencias. En su libro The Biology of Belief, el Dr. Bruce Lipton analiza la conexión entre la biología celular y la física cuántica. Muestra que la forma en que se expresa nuestro ADN está controlada por los mensajes energéticos positivos y negativos de nuestros pensamientos. En el momento en que alteramos los mensajes que enviamos a nuestras células, nuestro ADN se ajusta en consecuencia.

Uno de los aspectos más valiosos de la regresión es que permite a las personas transformar sus creencias. Cuando las personas transforman las creencias sobre su personalidad, habilidades, cuerpo y relaciones, su experiencia de vida cambia. Por ejemplo, tuve una sesión con una mujer cuyos hijos adultos arreglaron que nos conociéramos. Ella vino a mi oficina y muy cortésmente me dijo que no creía que lo que yo hiciera pudiera ayudarla, pero se presentó a la sesión para contentar a sus hijos. Después de todo, los años de terapia no habían cambiado las cosas. ¿Cómo podría ayudar una sola sesión conmigo? Dieciocho años después del final de su matrimonio, todavía estaba llena de emociones negativas que obstaculizaban su vida, su capacidad para tener nuevas relaciones, y su salud.

No hace falta decir que tuvimos una sesión muy profunda y conmovedora. Al final de la sesión, después de que le devolví a la conciencia normal, le pregunté cómo se sentía. Abrió los ojos y me miró con la mirada de una persona para la que todo ha cambiado en un momento. “Me siento transformada”, dijo. "Me siento como una persona nueva."

Ella tenía razón. Ya no era la misma persona que había sido antes de la sesión. Su experiencia de otras vidas había alterado las creencias sobre sí misma, su vida amorosa y su salud. El mundo para ella había cambiado. La animé a confiar en que el cambio sería permanente y a comportarse plenamente como la persona que ahora era.

Cómo elegir conscientemente nuevas posibilidades

Cada uno de los acontecimientos de nuestra vida fue alguna vez sólo una posibilidad. Nuestras elecciones trajeron los sucesos, del campo infinito de posibilidades, a la materialización física. Es fácil pensar en las posibilidades como potenciales a desarrollar en el futuro. Es mucho más difícil considerar que podríamos tener potenciales, disponibles en el pasado, esperando ser expresados. ¡Pero es verdad! Debido a que el pasado, el presente y el futuro existen simultáneamente, existen potenciales latentes disponibles en el pasado que esperan ser expresados. Se pueden crear nuevas situaciones, habilidades y estados de salud en el presente, lo que da como resultado un nuevo pasado ahora mismo. Debido a la forma en que nuestra conciencia fluye a través de las posibilidades y crea continuidad, rara vez somos capaces de percibir la creación de nuevas posibilidades en el pasado. Sin embargo, este mecanismo de creación de la realidad es parte de la naturaleza de la existencia. Quiero familiarizarte con él para que lo uses en la creación de una mejor vida presente.

El momento presente es el único momento a través del cual creas tu vida. Es en el presente donde tienes el poder de alcanzar tanto el pasado como el futuro, creando el cambio que deseas. Cuando una creencia que tienes se altera en el presente, eres capaz de crear cambios en tu estructura celular y tu campo de energía tal como existían en el pasado. La liberación de problemas emocionales y creencias negativas en el presente afectará el pasado. Tu antigua esencia psicológica y estructura biológica, tal como existían en un punto específico del pasado, se alteran. Como resultado, las condiciones se liberan en el presente, pero también se crea un nuevo pasado. En el momento presente eliges un nuevo pasado. En este nuevo pasado, nunca experimentaste esas condiciones, o las experimentaste de una forma mucho más leve.

Si estas ideas son nuevas y difíciles de asimilar, permíteme presentarlas a través de la comprensión de causa y efecto. Si algo es diferente en ti en el momento presente, la causa solo podría ser un cambio que ocurrió en el pasado. Sólo un pasado específico podría causar un cierto presente. Cuando cambias en el presente, ese cambio viene automáticamente con un nuevo pasado porque solo ese pasado podría haber traído el nuevo presente.

Un ejemplo es una creencia nueva e intensa en la salud y el bienestar. Tal creencia crearía nuevas ideas de salud y vitalidad que serían absorbidas por las células en el pasado. Debido a que todo sucede simultáneamente, cualquier cambio en el presente afectará necesariamente tanto al pasado como al futuro. Es como si se sacaran los viejos recuerdos celulares y se insertaran otros nuevos. Una nueva posibilidad de bienestar nace en el pasado y se convierte en nuestra historia. Nuestras células en el presente comienzan a reflejar nuestra actitud sobre la salud y la vitalidad. Respondemos a este entorno de creencias eligiendo una nueva realidad de salud, en lugar de enfermedad. Rara vez somos conscientes de tal cambio, por lo que cuando experimentamos un resurgimiento de la salud en el momento presente, a menudo llamamos a la curación un "milagro". Pero, de hecho, es un testimonio del poder que tenemos para crear nuestras vidas en el momento presente

El mismo enfoque se puede aplicar a las habilidades que puedes considerar inactivas. Piensa en todas las habilidades y talentos que tienes y que no están bien desarrollados; cada uno representa una posibilidad para actualizarte. Cuando se activan, estas nuevas vías de expresión y creatividad pueden enriquecer tu vida de manera satisfactoria. Para traerlas a tu experiencia, simplemente elije que esos talentos se conviertan en parte de tu vida e identidad. Piensa en estas habilidades en tu vida diaria, usa su imaginación y concéntrate en las formas en que te brindan alegría. Tu atención e intención actualizan un pasado donde esas experiencias se vuelven parte de tu vida. Como resultado, respondes de manera diferente a los recuerdos del pasado. Creas un futuro en el que te conviertes en una persona que tiene ese nuevo pasado como parte de tu identidad.

La forma en que recordamos los nuevos momentos de nuestro pasado difiere para todos. Algunos de nosotros lo experimentamos tan perfectamente que es como si nuestras nuevas actitudes siempre hubieran estado ahí. Otros crean un reconocimiento más discordante, en realidad recuerdan dos versiones diferentes del pasado, o construyen nuevos recuerdos del pasado que sabemos que son nuevos. Cada uno de nosotros tiene sus razones para las diferentes formas en que somos conscientes de nuestro poder de crear.

Reprogramando el pasado

Durante el proceso de escribir este libro me quedó muy claro que las palabras escritas se reflejaban o actualizaban constantemente, de una u otra forma, en mi realidad diaria. Por eso no fue sorprendente que mientras escribía sobre el despertar de talentos latentes pudiera aplicar el proceso en sí. Esta es una historia sobre el agua.

Mientras crecía, cuando tenía siete años mi experiencia con el agua incluía ocasionales vacaciones junto al mar y una clase de natación de tres meses. Aprendí la técnica de natación, pero nunca sobresalí. Disfrutaba meterme en el agua cuando se presentaba la rara oportunidad pero nadar nunca me pareció algo atractivo, especialmente cuando se trataba del océano. El poder destructivo y la fuerza de las olas me asustaban. También que, a diferencia de una piscina, no podía ver lo que me rodeaba cuando estaba en el mar abierto. Estos dos miedos se combinaron para crear la sensación de que el océano no era un entorno natural para mí.

Todo esto iba a salir a la superficie cuando fui a vivir a Maui. Debido a mis miedos "saludables" y a mi falta de entusiasmo por el océano, me tomó dos semanas decidirme a meterme al agua. Mientras entraba, hice mi baile acostumbrado de moverme lentamente y temblar de frío. Mientras caminaba en el agua, envié la conciencia en todas las direcciones para que actuara como un radar. Tenía miedo de que alguna criatura marina se me acercara, me asustara o incluso mordiera. Justo cuando comencé a animarme porque me estaba yendo muy bien, y me sentía a salvo, percibí que algo entraba en mi espacio personal. No podía ver nada, así que de nuevo me recordé que estaba a salvo. Un momento después, una mujer que buceaba detrás de mí salió del agua y con gran entusiasmo gritó: “¡Hay una tortuga grande justo debajo de ti!”. Inmediatamente me dirigí hacia la orilla en estado de puro pánico. Al no ser una gran nadadora no podía moverme particularmente rápido, lo que me asustó aún más. Una parte de mí decía: “Mira, es solo una tortuga. No te va a hacer daño”. Sin embargo, todo lo que quería era llegar a la playa.

Cuando llegué a la orilla respiré aliviada. ¿Adivinas qué hice después? ¡Volví a la orilla para mirar a la tortuga! Nunca antes había visto una y ahora que estaba a salvo, en tierra firme, ¡tenía curiosidad! No pude evitar reírme de mí misma. Literalmente, reí a carcajadas. En ese momento decidí que mi actitud hacia el océano necesitaba cambiar.

Pensé en las habilidades de natación que yacen latentes en mi campo de potencialidad. Elegí permitir que mi potencial como nadadora se expandiera y se afianzara. Porque la imaginación unida a un deseo intenso crea nuevas realidades, imaginé cómo habría sido si hubiera seguido nadando regularmente después de aquellas clases de natación que tomé cuando era pequeña. Me permití pensar en mí misma como persona que tenía un pasado diferente, uno en el que nadaba bien y lo hacía con frecuencia. Empecé a actuar como alguien que es el resultado de ese pasado diferente. Me imaginé como niña pequeña continuando nadando en cada oportunidad que tenía. Imaginé cómo mi pasado podría haber sido diferente si la natación hubiera sido parte de ese pasado. Imaginaba unirme a un equipo de natación e ir a competiciones. Me imaginaba haber amado siempre estar en el agua.

Cada vez que regresaba al océano enviaba amor y pensamientos de coexistencia armoniosa a todas las criaturas. En mi mente hablé al océano y le agradecí por amarme y cuidarme siempre; esto me permitió sentirme segura y protegida. De repente no podía esperar para entrar al agua. Me sumergiría de lleno en lugar de convertirlo en una entrada lenta y dolorosa. Compré un equipo de esnórquel para poder ver lo hermoso que era el entorno del océano. Empecé a pensar en mí misma como alguien que sabe nadar bien. Al mover mis brazos y piernas, imaginé que tenía buena forma. Empecé a sintonizar sucesos de natación que se transmitían por televisión. De todas las formas posibles, mi imaginación y mis pensamientos se centraron en mi imagen como persona a la que le encantaba nadar.

Todo esto permitió verme bajo una nueva luz. Creé tal estado de alegría y expansión que esperaba con ansias mi tiempo en el agua. El poder de las olas ya no me intimidaba. En cambio, las vi como una fuerza creativa con la que podía fusionar mi energía y esencia creativa. En esos momentos experimentaba un júbilo exaltante, exuberante y la conciencia de mi poder. Ya no me preocupaba no poder ver lo que me rodeaba; sabía que en el agua estaba a salvo y en casa. Empecé a pensar en mi pasado nadador bajo una luz diferente y experimenté un efecto diferente en el presente. Mi nueva creencia sobre ser nadadora reprogramó mi pasado y me proporcionó una experiencia que ha enriquecido mi presente.

Recuerda que las creencias no son más que suposiciones que has aceptado como verdades. Una vez que hayas traído esas creencias a la superficie y visto, simplemente, como pensamientos que pueden cambiarse fácilmente, ya estás en camino de cambiar tu realidad.

Tu camino en la vida no está resuelto. Tu experiencia es simplemente un reflejo de las creencias que tienes sobre lo que es posible para ti. Hay infinitas acciones posibles y disponibles, infinitas realidades posibles que puedes cambiar. Independientemente de lo que desees, existe una realidad posible en la que obtienes, exactamente, lo que deseas: riqueza, amigos cercanos, buena salud, hogar cómodo, relaciones amorosas, etc. Hay un posible “tú” que experimenta todas esas bendiciones; es simplemente una cuestión de fusionar tu conciencia con esa posibilidad.


Ejercicio: Cómo cambiar a la realidad que prefieras

Este ejercicio está destinado a trasladarte a una realidad paralela donde puedes experimentar una vida de posibilidades deseables. Hay dos partes en este ejercicio. La primera te pide que reserves un momento de tranquilidad y explorar a través de llevar un diario. La segunda es una práctica continua.

Parte 1. Reserva 30 minutos y siéntate en un lugar tranquilo con tu diario a mano. Comience dedicando los próximos momentos a sumergirte en tu interior. Piensa en una situación de tu vida que quieras transformar. Sabiendo que las creencias son el plan maestro utilizado para crear tu realidad, mira los pensamientos centrales que son los núcleos de tu situación actual. Recuerda, una creencia es simplemente un pensamiento, un punto de vista que sostienes como la verdad. Pregúntate qué pensamientos tendrías que tener como verdades para que esta situación sea como es. Anota las creencias que tienes sobre tus circunstancias. Notarás que una, o un par de ellas, se destacarán como tus creencias centrales, como pensamientos repetitivos y más emocionales sobre el asunto. Parecerá como si todas las demás creencias pudieran explicarse a través de estas creencias centrales.

Veamos un ejemplo. Hay un hombre que está solo. Tiene éxito en su carrera, pero en su vida personal se siente completamente solo. Tuvo una infancia traumática y sus relaciones íntimas han sido difíciles. En un principio su lista estará centrada en lo externo. Puede decir: Es difícil hacer amigos; todos están ocupados con sus vidas. Entonces puede entrar en su historia: nunca fui amado de niño; de niño era inocente y abierto, y me lastimaban, tengo miedo de confiar; Las experiencias de la vida me siguen confirmando que no es seguro dejar entrar a la gente. Las emociones aumentarán, pero si se queda con eso, inevitablemente llegará al meollo de todo: no soy amable; si yo fuera amable mi mamá me habría amado. Tengo miedo de dejar entrar a la gente porque si realmente saben quién soy, también se irán. En esencia, el problema de soledad de este hombre no tiene nada que ver con sus amigos o su capacidad para ser social, sino con su sentimiento de indignidad y de no merecer amor.

Una vez que hayas identificado tu suposición central, pregúntate qué creencias tendrías que tener para conseguir una experiencia preferiblemente mejor. Transforma cada una de las creencias limitantes que escribiste en una creencia que apoye lo que deseas. Escribe esas nuevas creencias positivas.

En nuestro ejemplo sería así: Yo soy digno. Hay tantas cosas maravillosas sobre mí. Mi venida al mundo no es un accidente de procreación. Mi misma existencia es prueba de que soy digno; de lo contrario, Dios no me habría creado. La incapacidad de mi madre para amarme y cuidarme no fue causada por mí. Ella tenía sus desafíos y problemas que no tenían nada que ver conmigo. Los socios que se fueron no lo hicieron porque yo no fuera querible sino porque estaba bien que nos separáramos; nuestros caminos se estaban separando. Mantenía a la gente a distancia, así que atraía amigos que se sentían cómodos con eso. Soy una persona buena, leal y confiable; es seguro dejar que la gente vea eso sobre mí. Es seguro comunicarse y abrirse a la gente. Soy digno de sentir la unidad con los demás. Soy digno de sentirme amado.

Parte 2. La siguiente parte es la práctica continua que repetirás en los próximos días. Deja tu cuaderno a un lado. Cierra los ojos y respira hondo. Antes de comenzar esta sesión de reprogramación de tu pasado, presente y futuro, recuerda que, en este momento, tienes el poder de cambiar y crear una nueva realidad para ti. A continuación, imagina los sucesos que deseas. Imagínalos en imágenes vívidas. Recurre a todos tus sentidos: ¿cómo se sentiría, sonaría, olería, saborearías y buscarías obtener exactamente lo que deseas? En tu mente repite las nuevas creencias que estás adoptando. Y lo más importante, siente, profunda e intensamente, la alegría, el amor, la plenitud y la satisfacción que obtendrás de esta nueva vida.

En nuestro ejemplo, el hombre pensaría en maneras de comunicarse más con el mundo. Se imaginaría cómo se sentiría sentir la conexión con todos. Se imaginaría tener muchos amigos y las formas en que interactuarían y pasarían tiempo juntos. Se imaginaría sintiéndose apreciado y amado, abriéndose a una pareja perfecta y cómo sería su relación.

Dedica de cinco a diez minutos, una o dos veces al día, a imaginar los nuevos sucesos posibles que sucederán en tu vida. Conviértelo en tu momento especial y agradable de cada día. Pronto comenzarás a notar que el mundo que te rodea muestra signos de cambio. La situación cambiará, porque tú has cambiado.


Anclando tu nueva realidad

Solo somos capaces de imaginar nuevas posibilidades porque ya existen como una realidad en alguna parte. Nuestra intención, y la intensidad de nuestro deseo, alimentan el cambio hacia esa realidad. Cada uno de nosotros es solo una posible versión de nosotros mismos; hay muchas otras versiones posibles. Al cambiar nuestras creencias nos reenfocamos y convertimos en la versión que deseamos.

Hay una idea muy importante para recordar, así que toma nota: lo que deseas y lo que tienes actualmente son dos realidades separadas. No luches contra lo que tienes ni intentes cambiarlo. Ni siquiera necesitas fingir que lo ignoras: estate en paz con eso. Velo, contémplalo como una confirmación de tu capacidad para alinearse, perfectamente, con las realidades que reflejan tus creencias.

No hay conflicto entre los sucesos preferidos y los no preferidos. El aspecto no deseado es simplemente una posible realidad que has materializado. Toda realidad posible es el reflejo de una idea o creencia específica. Puedes pensar en ello como una instantánea estática. En cada realidad específica no hay lugar para la expresión de ninguna otra creencia. Cada realidad es un solo cuadro que captura una sola idea. El cambio viene porque te cambias a ti mismo. Cambias tu perspectiva y tus pensamientos sobre un tema dado. Al hacerlo, cambias a una nueva realidad.

En las realidades preferidas y no deseadas, hay dos versiones diferentes de ti. Pregúntate: "¿Cómo soy diferente en la realidad en la que tengo lo que quiero?" Contempla esa versión de ti en tu vida diaria. ¿Cómo te sientes al hacerlo? ¿Cómo te relacionas con las personas que te rodean? ¿Cómo estás haciendo las tareas de la vida diaria? Luego, comienza a actuar como eres en esa versión tuya. Este paso final ancla el proceso de creación de la realidad. Al actuar sobre las nuevas creencias como el tú preferido, te estás diciendo a ti mismo y al Universo que estás al timón de tu vida y que tienes la confianza, el conocimiento, la fe, la visión y el poder

Al actuar, según las nuevas creencias, como lo que prefieres dices a ti mismo y al Universo que estás al mando de tu vida y que tienes la confianza, el conocimiento, la fe, la visión y el poder para llamar y obtener, desde el campo infinito del potencial, la vida que más deseas.

¿Qué tan rápido se manifestará la vida que deseas? La velocidad de la transformación de la realidad depende de cuán rápido puedas cambiar tus creencias. Como se verá en la historia de Anita Moorjani en el Capítulo 7, cuando las creencias cambian instantáneamente se requiere muy poco tiempo para que la estructura de la realidad se transforme adaptándose a la nueva situación. Cualquier retraso en el tiempo es el resultado de la estructura física del mundo y la estructura neurológica de nuestros cuerpos. Un automóvil pequeño no necesita mucho tiempo para acelerar desde una parada completa a una velocidad muy alta, o para pasar de una velocidad rápida a una parada completa. De manera similar, en el reino del Espíritu, donde la fisicalidad es de menor densidad, la manifestación es inmediata. Pero en la Tierra es como si estuviéramos conduciendo un camión grande y pesado. Debido a que aquí las cosas son mucho más densas hay un retraso entre un cambio en la creencia y su actualización en la materia.

Primero debemos detener el impulso que han creado nuestros pensamientos anteriores. Luego, debemos darle tiempo a nuestras neuronas para que se adapten a la forma en que recogen datos del entorno. Se deben despertar nuevas posibilidades en el pasado antes de que podamos experimentar los beneficios y resultados de ellas en el hoy. Sabiendo esto, todo lo que tienes que hacer es confiar en el proceso. El mundo reflejará tus convicciones cambiadas.

Nada en tu personalidad es una construcción permanente. Estás cambiando constantemente; con cada nueva elección que haces te experimentas como una nueva persona. Estás cambiando constantemente entre universos paralelos. Estos universos, estas instantáneas de ciertas circunstancias, todo existe en el momento presente. Es a través de tus elecciones en cada situación como te conviertes en la vibración de una u otra vida paralela que experimentas como tu realidad.

Creamos el pasado recordando sucesos e interpretándolos de manera que nos da el efecto que buscamos en el presente. Ahora que esta perspectiva expandida ha sido plantada en ti, puedes comenzar a jugar con ella. Cuanto más veas las situaciones de tu vida a través de este nuevo prisma, más te encontrarás viviendo una vida en constante expansión, llena de asombro, sincronicidades y magia. Sé que es verdad porque eso es lo que me ha pasado a mí.

Me encanta decir que mi vida es una explosión extática de sincronicidades. Una parte importante de ese amor por mi vida ha sido mi conexión con mi Yo Superior. Tomar conciencia de mi Ser Superior y fortalecer mi comunicación con esa parte de mí me ha permitido encontrar un sentido más profundo de confianza en mí misma y en el desarrollo de mi vida. En el capítulo siguiente, compartiré contigo cómo guío a las personas para que se conecten con su Ser Superior durante la regresión, y cómo puedes hacer lo mismo para recibir orientación, nutrición, sanación y seguridad.

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CAPÍTULO 4. PUEDES CONVERSAR CON TU YO SUPERIOR

Cada uno de nosotros tiene un Yo Superior, que es un término que me gusta usar para referirme a la parte sabia y amorosa incondicional de nosotros mismos. El Yo Superior sostiene la plantilla de nuestro mayor potencial. Representa la mayor manifestación posible de ciertos temas y metas que a nuestra alma le gustaría explorar en esta vida. Es la evolución más alta posible que nuestra alma querría crear a través de nuestra vida humana. Es parte nuestra, es la vibración de nuestro verdadero yo. Y siempre está aquí, lista para conectarse con nosotros.

Cuando no somos conscientes de nuestra unidad con todo y nuestra conexión con lo Divino, nuestro ego se siente solo. Se siente como si estuviera cargando el mundo sobre sus hombros y que necesita resolverlo todo. Entramos en esos estados mentales frenéticos, con la necesidad desesperada de encontrar una solución. Debido a que estamos desconectados de nuestro Ser Superior, de nuestro sistema de guía, realmente nos sentimos perdidos. Nos sentimos sin apoyo en las decisiones cotidianas e incapaces de ver el panorama general y el significado de nuestras vidas.

Casi todos los clientes que acuden a mí tienen la misma pregunta: "¿Cuál es mi propósito?" Es la misión misma de nuestro Ser Superior guiarnos hacia la realización de ese potencial. Por eso, nuestro Ser Superior orquesta incansablemente las circunstancias para nosotros, mientras se comunica con nosotros y nos guía. Nuestra mente puede elegir confiar en el Yo Superior, verificar y escuchar, o puede elegir ignorar las señales. El Yo Superior hará todo lo posible para que cumplamos nuestro plan para esta vida. Entonces, ¿por qué nos resistimos? ¿Por qué lo ignoramos al punto que tiene que usar accidentes y cambios abruptos para regresarnos al camino de nuestra alma?

Mi trabajo de regresión me ha enseñado que el ego y el Yo Superior están destinados a trabajar juntos como uno solo. Esta es una de las razones por las que las sesiones de regresión son tan transformadoras y mis clientes se van profundamente afectados por la experiencia, porque acogen en casa todo lo que son. Se sienten enteros y completos. Se sienten conectados, guiados y apoyados, con una dirección clara sobre cómo proceder. Reciben sanación emocional y física. Permiten que sus creencias y limitaciones mentales se transformen. Pero lo mejor de todo es que sienten amor, el amor incondicional de la Fuente, por quienes son.

A menudo, la gente se pregunta cómo se siente la presencia del Yo Superior para la persona que hace la regresión. Esto es lo que dice John: “Cuando pienso en nuestra sesión, siempre me costaba explicar cómo me sentía cuando hablabas con mi yo 'superior'. En el prefacio del libro titulado “Seth, Dreams and Projections of Consciousness” (Seth, sueños y proyecciones de consciencia), Jane Roberts habla sobre cómo se siente cuando aparece la entidad que canaliza y se hace llamar Seth. Ella no podría haberlo explicado mejor. Dice: 'No es una energía neutra, sino una de fuerte impacto emocional, tranquilizadora y, de manera extraña, personificada: cálida y sorprendentemente inmediata. Quizás me envuelve, pero no me duermo ni me pierdo en la nada. Soy yo misma, pero muy pequeña. Parezco desvanecerme en una distancia que no tiene nada que ver con el espacio sino más bien con el enfoque psicológico. Sin embargo, me sostiene, sostiene y protege en medio de esta energía penetrante que parece formarse a mi alrededor y dentro de mí. La parte de sentirme pequeño, y desaparecer en el espacio, es exactamente como me sentí durante la sesión”.

Así es como John experimentó la conexión con su Yo Superior, pero todos lo experimentan de manera diferente. Algunas personas describen la experiencia como lo que dice John y Jane Roberts. Otras sienten como si se hicieran a un lado, como si alguien más estuviera hablando a través de ellos, aunque todavía están completamente conscientes. No asignan valor a lo que se habla; simplemente dan voz al impulso dentro de ellos. Y solo después de escuchar la grabación de la sesión, escuchan y entienden las palabras que pronuncian.

Hay personas que lo sienten como si nada raro sucediera. Los cielos no se abren, y Dios no les habla con voz retumbante. Se sienten como ellas mismas. Cuando hago preguntas, sienten que están respondiendo ellas mismas desde un lugar profundo de conocimiento interior. Sin embargo, se sienten expandidas en su conciencia, como si estuvieran paradas en la cima de una montaña y absorbieran la vista completa, viendo el panorama general y comprendiendo todas las conexiones. A menudo, después de escuchar la grabación de nuestra sesión, los clientes me envían un correo electrónico y me preguntan: “¿De dónde salió esto? En ese momento pensé que solo era yo respondiendo a tus preguntas, ¡pero no soy tan sabio! Yo no hablo así; Ni siquiera pienso así. Mi voz, mi elección de palabras, mi entonación y mi energía, todo era diferente”.

Esta forma de experimentar el Yo Superior me parece completamente natural, porque el Yo Superior es parte de nosotros, la parte que no está enfocada en la realidad física. Aseguro a cada cliente que estamos constantemente guiados y podemos confiar en cómo se desarrolla [la sesión]. Así es como se les transmite la información. El Yo Superior siempre se conecta en formas que son apropiadas para el cliente, y la orientación que se ofrece está en perfecta sintonía con lo que la persona necesita para crecer y cambiar en ese momento.

La Sugerencia del Yo Superior: Meditación

Durante su regresión, John descubrió que había renacido una y otra vez en un intento por aprender la misma lección. Para cuando investigamos seis vidas diferentes, se sentía frustrado porque no estaba entendiendo completamente la lección que debía asimilar. Sabía que era hora de guiarlo para que se conectara con la energía de su Yo Superior.

Le indiqué que permitiera que su energía se expandiera. Una vez que el Yo Superior indicó que estaba presente, le pregunté por qué a John se le habían presentado estas seis vidas a diferencia de cualquier otra que pudiera haber visto. El Yo Superior respondió que esas vidas fueron elegidas para que pudiera ver lo que aún faltaba: la lección de comprensión.

El Yo Superior agregó: “Él lo está haciendo muy bien esta vez. Casi siempre se centra en la comprensión. Entiende muy bien las situaciones de otras personas”. Le pregunté qué necesitaba entender sobre su situación. La respuesta fue simple: “Relajarse. Siempre está preocupado, pensando: ¿Qué hay de esto, qué de aquello? Todo lo que se necesita es un poco de meditación”. El Yo Superior de John le recomendó que meditara antes de acostarse cada noche.

La meditación es una recomendación común que escucho del Yo Superior, pero cada vez la sugerencia se adapta a las particulares necesidades del cliente. Aquí, por ejemplo, la hora de acostarse se indicó como la mejor de cualquier otra hora del día. Pero independientemente de las sugerencias específicas, la meditación es una herramienta valiosa para despejar la mente de la energía confusa y ocupada, y para controlar la orientación y la intuición. Recientemente, una cliente me dijo que realmente necesitaba aprender a meditar. Mi respuesta fue que la meditación no es algo que se aprende o una habilidad que se adquiere. La meditación es algo que ya sabes; es algo que ya eres.

Dentro de ti hay un hermoso reino de paz, tranquilidad, confianza y comprensión y, naturalmente, sabes cómo sintonizarte con él. Cierra los ojos, respira profundo y lento, y exhala lentamente. En el momento en que haces eso una sensación de calma se apodera instantáneamente de ti. Tú estás ahí. Es importante cambiar el pensamiento de necesito aprender a, ya sé cómo. Así, meditar ya no será algo extraño de lo que avergonzarse, se sentirá como volver a casa. Meditar se sentirá renovador, como beber de un pozo de puro amor y luz.

Hay muchas técnicas de meditación. Recomiendo la meditación guiada que forma parte de mi CD, “Sanación a través de la regresión a vidas pasadas... y más allá”, pero cualquier técnica servirá. Confía en tus instintos para seleccionar un enfoque que sea adecuado para ti. La magia de la meditación no está en la técnica; viene de ti, de tu voluntad de estar abierto, de confiar y explorar. Lo que descubrirás es siempre más de lo que eres.

Ayuda del Grupo del Alma

Un grupo de almas es una comunidad de almas que crean relaciones cercanas entre sí a través de diferentes encarnaciones. Siempre están ahí, el uno para el otro, dispuestas a desempeñar cualquier papel que sea necesario para apoyarse mutuamente en el crecimiento mutuo.

John siempre se había sentido muy conectado con su abuelo, y le pregunté a su Yo Superior por qué era así. En la respuesta, John reconoció la profunda conexión que tenía con los miembros de su familia, cómo todos le ayudaron a obtener comprensión, que era la mayor lección de su vida:

El yo superior de John: [el abuelo de John] es otra parte de su grupo de almas. Lo enviamos de regreso [a la Tierra] porque John estaba teniendo muchos problemas con la parte de comprensión.

Dobromira: ¿Entonces su abuelo vino a ayudarlo?

Yo Superior de John: Como maestro, sí.

Dobromira: ¿Cómo le ayuda?

Yo Superior de John: Aprendiendo a enseñar. Enseñar a enseñar.

Dobromira: ¿Cómo hace eso el abuelo?

Superior de John: No está haciendo nada. Solo está siendo él mismo.

Esta fue una lección importante para John y para mí. Simplemente siendo quienes somos afectamos al mundo de maneras que ninguna cantidad de "hacer" podría lograr. Podemos ser fieles a nosotros mismos, sabiendo que ya estamos impactando a quienes nos rodean al hacer brillar nuestra luz con amor, bondad y comprensión. Esto es lo que podemos hacer para ayudar mejor a aquellos en nuestro grupo de almas: simplemente podemos ser nosotros mismos.

El Yo Superior de John informó que lo que se interponía en su camino era toda su preocupación. Como todos nosotros, John se preocupaba demasiado. Cuando pasamos todo nuestro tiempo preocupados olvidamos lo que vinimos a hacer aquí.

Como explicó el yo superior de John, la lección de John era estar aquí para enseñar a otros cómo llegar a ser quienes realmente somos. Sin embargo, John no necesitaba dominar la habilidad antes de comenzar a enseñar. Su Yo Superior dijo: “Hay que enseñar a entender”. Me encanta la sabiduría en estas palabras. Yo también he encontrado que esto es cierto. Cuanto más comparto con la gente y cuanto más escribo sobre una determinada idea, más profunda se vuelve mi comprensión.

Adoptar el enfoque de "enseñar a comprender", como una herramienta consciente, puede ayudarnos a promover nuestro aprendizaje y crecimiento, así como el de nuestro grupo de almas. Cuando nos enfrentamos a los cambios, podemos meditar en las lecciones. Cada situación está ahí para servirnos. Podemos tratar de comprender los beneficios que brindan nuestros desafíos. Entonces, depende de nosotros compartir esas ideas con otros. Cuanto más compartimos, mayor será nuestra percepción. Tener que explicar estos conceptos a otros nos hace profundizar, interiorizando el significado de las ideas. ¿Importa el método de compartir? No. Puede ser a través de un cuento, una canción, un poema, un dibujo o incluso un simple comentario hecho a un extraño. Lo que importa es que demos voz a la sabiduría que brota dentro de nosotros. Todos estamos aquí para inspirarnos constantemente unos a otros y, al hacerlo, para elevarnos a nosotros mismos.

Esto es lo que el abuelo de John estaba haciendo por él. Le pregunté al Yo Superior de John quién más era parte del grupo de almas de John. Su Yo Superior nombró a un par de sus amigos cercanos y a todos los miembros de su familia inmediata. Cuando dije en broma que esta era una familia a la que le gusta viajar junta, el Yo Superior estuvo de acuerdo en que “no se separan muy a menudo”. A través de mis regresiones personales, y trabajando con clientes, he aprendido que, a menudo, reencarnamos con personas que hemos conocido en otras vidas. Creamos patrones al interactuar unos con otros en la vida, y luego elegimos cambiar un poco las piezas del patrón para que podamos aprender desde diferentes perspectivas. ¿Y quién mejor para ayudarnos que las personas con las que inicialmente creamos esos patrones?

Nuestro compromiso con nuestro grupo de almas a menudo también determina nuestra ubicación geográfica. Le pregunté al Yo Superior de John si pensaba que John debería considerar mudarse, y dijo que no. “El enfoque de su lección está aquí y todos se basan aquí”, explicó el Yo Superior. “Si se va a otro lado, no podría enseñar la lección de comprensión a las personas que necesita”. El grupo de almas de John estaba ubicado principalmente en Nueva York y sus alrededores, así que allí era donde necesitaba quedarse.

Le pregunté al Yo Superior de John por qué sus amigos y familiares no estaban tan interesados ​​en temas espirituales como John. La respuesta me sorprendió, pero tenía sentido. Debido a que la lección de John en esta vida fue aprender y enseñar a comprender, no sería apropiado que sus amigos y familiares estuvieran tan involucrados en las ideas metafísicas como él. Si lo estuvieran no sería capaz de enseñarles y aprender a través de la interacción con ellos.

“Se supone que ellos no deben apoyarlo”, explicó el Yo Superior. “Se supone que es él quien debe apoyarlos. John simplemente necesitaba sentirse cómodo con sus creencias y dejar de lado la necesidad de afirmación o permiso.

Esta es una buena lección para todos nosotros. Si tienes pareja, hijos o amigos que no comparten tu pasión por lo espiritual no te desesperes; quizás hayan dominado ese área en otra vida. Si es así, no es de extrañar que no tengan la necesidad de devorar cada libro de Nueva Era que hagas en búsqueda constante de respuestas. Siéntete cómodo con lo que crees; permíteles ser solidarios pero no interesados. Siempre hay muchas otras personas de ideas afines con las que puedes tener conversaciones tentadoras sobre principios espirituales. No puedes cambiar a nadie. Mantente en tu energía y da, a los que te rodean, tu amor incondicional. ¿Quién sabe? Tal vez sean miembros de tu grupo de almas que están aquí para ayudarte a aprender lecciones de amor y comprensión.

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Una cosa más sobre John. Cuando le pregunté a su Yo Superior si necesitaba concentrarse en algo al meditar, la respuesta fue: "Solo él mismo". La respuesta parecía un poco críptica, así que pedí un poco de ayuda. La respuesta me sorprendió:

Yo Superior de John: Solo le voy a dar una pista.

Dobromira: ¿Cuál?

Yo superior de John: Jan estará allí. Muy pronto. Más pronto de lo que piensa. No debería preocuparse demasiado.

Dobromira: ¿Cómo la reconocerá?

Yo Superior de John: Él lo sabrá.

Dobromira: ¿Van a ser compañeros de nuevo?

Yo superior de John: Sí. Se casará con ella.

"Muy pronto" resultó ser un eufemismo. No más de una semana después de nuestra sesión John conoció a Jan. (En esta vida ella tiene un nombre diferente, pero para simplificar las cosas seguiré refiriéndose a ella como Jan). Me envió una breve nota por correo electrónico diciendo: “Para tu información, estoy cien por cien seguro de haber conocido a Jan; resulta que trabajamos juntos”. Ella se sentaba a menos de 20 metros de distancia de él. En la fecha de la sesión, John era nuevo en la empresa y aún no conocía a la mayoría de las personas con las que trabajaba. Diez meses después, él le propuso matrimonio. Algunos de sus amigos expresaron la preocupación de que podría ser demasiado pronto, pero John y yo lo sabíamos más. Durante nuestra sesión John vio cómo sus almas fueron creadas juntas.

Así es como lo describió: “Puedo ver esta esfera de luz blanca cayendo de la nada y se rompe. Estamos pegados. No es como dos piezas separadas. Las cosas de adentro ni siquiera tienen forma. No tenemos una banda que nos conecte. Estamos conectados de manera diferente”.

La conexión que tienen John y Jan es muy especial. Han estado juntos desde el momento de la creación de sus almas. Se han amado por toda la eternidad. Han pasado vidas juntos. Y en esta vida han elegido volver a estar juntos. ¿Significa eso que su relación es perfecta? Por supuesto que no. Como cualquier otra pareja, tienen desafíos. Pero John entiende su conexión, y su amor y dedicación a Jan es impresionante.

John se casó con Jan un año después de que se conocieran, y ahora tienen su primer hijo juntos, un precioso pequeñín que probablemente esté aquí para enseñar a John sobre la comprensión. John y Jan aún no han visitado París juntos, pero sé que cuando lo hagan lo pasarán genial.

La historia de Iván

Aunque busco comunicarme con el Yo Superior de un cliente durante las sesiones, sé que la conciencia a la que accedo es aún mayor. Nuestro ser proviene del Uno, la única fuente de toda existencia. Todos somos parte del único campo de información. Por lo tanto, la orientación y sanación que recibe un cliente proviene del más alto nivel de amor y bienestar que es apropiado para la persona. Puede originarse en las almas que sirven para guiar a la persona mientras está en la Tierra, en el grupo de almas de la persona, en la conciencia energética de una hermandad espiritual, en el reino angélico, o en cualquier otra dimensión de la existencia a la que la persona está conectada. No importa la fuente, la ayuda siempre se brinda con amor y aceptación incondicionales, y con el deseo de avanzar en el camino de la persona hacia la Luz.

Debido a la mayor densidad de nuestro entorno terrestre, estamos acostumbrados a una frecuencia de energía relativamente lenta. La frecuencia de la información y la curación que se ofrece a un cliente a menudo está fuera del rango compatible con la frecuencia de energía de esa persona. Para que la orientación pueda entenderse, la sanación y las respuestas se traducen a través de la vibración del Yo Superior de la persona. Al igual que un físico cuántico necesitaría enseñar a un niño de cinco años de manera diferente a cómo enseñaría a sus estudiantes graduados, Todo-Lo-Que-Es, (o La Fuente), pone su orientación en un lenguaje y energía que es comprensible y está dentro del alcance de la persona.

Un ejemplo de esto ocurrió durante mi sesión con un cliente llamado Iván. Antes de que comenzara nuestra regresión hablamos sobre las preguntas que quería que su Yo Superior respondiera. Quería saber quién era su ángel de la guarda y cómo comunicarse con él o ella. Diligentemente escribí la pregunta. En un momento, durante la conversación con el Yo Superior, miré mis notas y vi la pregunta sobre el ángel guardián. Un estallido de intuición me dijo que necesitaba pedirle a Ivan que viera al ángel, en lugar de solo recibir un nombre. Confié en mi impulso sin cuestionarlo y me dirigí al Yo Superior, pidiendo que el ángel se revelara a Iván. Para mi sorpresa, el ángel comenzó a hablar a través de Iván, presentándose directamente como el ángel Damián.

Fue impresionante notar lo diferente que fue la entrega cuando las palabras venían del ángel en lugar del propio Iván. Su voz cambió, y las palabras fueron pronunciadas con autoridad e intensidad. La energía que venía a través de Iván cambió por completo en ese momento, porque un ser diferente estaba hablando. Con la misma rapidez, el ángel se fue y la voz de Ivan volvió a ser suave y relajada. Sin embargo, quería saber más sobre el ángel, así que continué la conversación:

Dobromira: Dame una descripción de lo que viste cuando el Ángel Damián se presentó.

Yo superior de Iván: De la luz salió esta persona con una túnica blanca, halo de luz alrededor de su cabeza, y alas, sosteniendo una especie de palo.

Dobromira: Pregúntale a Ángel Damián cómo comunicarse con él.

Yo superior de Iván: Dice: “Ya te comunicas conmigo”.

Dobromira: ¿como?

Yo Superior de Iván: Solo siguiendo mi voz interior.

Dobromira: ¿Con qué [misión] está e Ángel Damián aquí para ayudar?

Yo Superior de Iván: Proteger de la energía negativa.

Dobromira: Pregúntale si tienes otros ángeles que trabajen contigo y pídeles que se presenten.

Yo Superior de Iván: Está el Ángel Miguel, y eso es todo.

Dobromira: ¿Para qué sirve Ángel Miguel? ¿Cómo te ayuda?

Yo Superior de Iván: Él es quien abre sus alas y simplemente me cubre de amor. Llena mi corazón y mi cuerpo de amor.

Dobromira: Ahora quiero pedirle al Ángel Damián y al Ángel Miguel algún mensaje que les gustaría dar a Iván.

Yo Superior de Iván: “Conoce que siempre estamos ahí contigo. No tienes que preocuparte por no lograrlo, porque lo lograrás en todas las situaciones. Siempre va a ir como se supone que debe ir”. Eso es todo. Se dieron la vuelta y ahora se alejan.

Me encanta esta historia. Ejemplifica muy bien que el Yo Superior es solo el conducto a través del cual nos llega el amor, la luz y la curación de Todo-Lo-Que-Es. Al abordar las preguntas de Iván, aparentemente solo estaba conversando con su Yo Superior. Sin embargo, en el momento en que hablé con sus ángeles, salieron de la energía común y se identificaron. Su presencia enérgica fue notablemente diferente, ya que la entrega y el tono de voz de Iván cambiaron mientras hablaban a través de él. Los ángeles de la guarda de Iván habían estado allí todo el tiempo que hablaba con el Yo Superior, apoyando el proceso como parte del todo.

El Espíritu, en todos sus niveles de conciencia, siempre está ahí para guiarnos y apoyarnos, no solo durante las regresiones sino también en cada momento de la vida. A menudo nos enfocamos tanto en el mundo externo y en la entrada de nuestra mente pensante que olvidamos cuán apoyados estamos. Con la mayor frecuencia posible, recuérdate a ti mismo que estás acunado con amor y luz. Conócelo, confía en él y vive desde ese lugar.

La historia de Lisa

Lisa conoció la vibración de su Yo Superior de una manera divertida y gentil, pero memorable para ambas.

Al comienzo de nuestra primera sesión, llevé a Lisa a un estado de relajación. Una vez que estuvo enfocada en su interior le pedí que describiera lo que veía en su mente. Se vio a sí misma como niña que vestía un cálido suéter de lana pero tenía las piernas desnudas y los pies descalzos. No le gustaba mucho usar zapatos. Estaba escondida en el ático, pero nadie la buscaba. Bajó un par de pisos y vio a la pareja propietaria de la casa y a sus seis hijos cenando. No sabían que ella estaba allí. La casa en la que se encontraba era la mansión de la finca. Su familia era sirviente. Su madre, mujer grande y tierna, cuya ropa siempre olía a pan, era la cocinera de la mansión. La pequeña se sentía realmente amada.

Mientras Lisa me describía lo amorosa que era su mamá, comenzó a sentir una sensación de vértigo. Ella dijo: “Siento que alguien me levantó y me está dando vueltas. Fue divertido al principio, pero ahora siento que voy a vomitar”. Mi objetivo siempre es que los clientes estén seguros y cómodos durante sus regresiones, así que le di instrucciones para que relajara su cuerpo y permitiera que se disipara la sensación de dar vueltas. Después de unos minutos, Lisa dijo que su papá la estaba haciendo girar y que finalmente la había bajado al suelo.

Su papá era grande y prudente, y trabajaba la tierra. Sus primos, tías y tíos también vivían allí. Después de la abolición de la esclavitud, sus antepasados ​​se habían quedado allí en la tierra rural de Alabama porque no tenían adónde ir. Sus padres trabajaron duro y ella quería ayudar pero no sabía qué hacer. No se le permitía estar en la cocina, ni ayudar a su padre con la agricultura. A la pequeña le gustaba frotar los pies de su papá por la noche. Con gran afecto en su voz, dijo que él era quisquilloso. Al frotar sus pies se sentía útil y podía demostrarle cuánto lo amaba.

Lisa estaba triste por dejar a sus padres cuando llegó el momento de ir a la universidad. Luego se convirtió en una abogada que trabajó en casos de derechos civiles. Aunque renuente, tomó un trabajo en un bufete de abogados en Birmingham, Alabama, representando a familias negras, personas que nadie más representaría y que no podían pagarle mucho. Ella dijo: “No me gusta, pero lo voy a hacer. Es muy importante porque soy negra y mujer, y soy muy buena en mi trabajo. Hay mucha gente que no quiere que me vaya bien. No me encanta, pero sé que es importante, así que lo seguiré haciendo”.

Se casó con un hombre llamado Charlie que estaba trabajando en un gran caso de derechos civiles. Decidieron no tener hijos porque su trabajo era muy importante. Un día, mientras caminaban por la calle, un hombre se les acercó, sacó un arma y disparó a Charlie en el pecho. Charlie y Lisa estaban tomados de la mano; mientras él caía Charlie la arrastró consigo y ella cayó encima de él. Se quedó así hasta que llegó la ambulancia. Ella lloraba, lo besaba y lo llamaba por su nombre. Después de su muerte, Lisa continuó trabajando en los casos de Charlie. Le permitió sentirse cerca de él, pero también le recordó cuánto lo extrañaba.

Los padres de Lisa habían muerto hacía mucho tiempo y ella no se había mantenido en contacto con sus primos. No tenía a nadie y lamentaba no haber tenido hijos. Vivió hasta bien entrada la década de los 90. La mañana de su muerte se estaba preparando un huevo frito para desayunar cuando sufrió un infarto. Su espíritu salió fácilmente de su cuerpo y se sentó en una silla en la cocina, esperando ver cuánto tiempo pasaría antes de que alguien encontrara su cuerpo.

Pasó algún tiempo antes de que una niña, una vecina a la que Lisa le leía, viniera a visitarla y la encontrara muerta. El espíritu de Lisa se sintió mal por la niña e intentó calmarla enviando amor al corazón de la chiquilla y diciéndole, mentalmente, que todo estaba bien. La niña entendió el mensaje.

La lección que aprendió el Alma Suprema de Lisa en esa vida fue que el trabajo es muy importante, pero nunca debería ser más importante que la familia. Tener gente a quien amar y, con quien compartir tu vida, es primordial.

Después de la sesión, Lisa me dijo que la sensación de dar vueltas que había tenido al comienzo de la regresión había regresado poco después de que su padre la dejara en el suelo. ¡No solo eso, sino que se había quedado con ella por el resto de la sesión! Deseé que me lo hubiera dicho, ya que podría haberle dado instrucciones para centrar la energía.

Como con todos los clientes, envié a Lisa una grabación de nuestra sesión. Ella me envió un correo electrónico poco después y me dijo que había un problema con la grabación. Veintisiete minutos después de la sesión, Lisa había dicho: "Hay algo..." A partir de ahí, la grabación repetía la palabra algo una y otra vez. ¡No se grabó nada más! La sesión duró casi cuatro horas, ¡así que tuvimos una grabación de tres horas y media de “algo, algo, algo”!

Cuando Lisa escuchó la grabación por primera vez, se rió. Recordó la sensación de dar vueltas y tuvo la impresión de que había provocado que la grabación saltara. Yo misma estaba impactada. Grabo todas mis sesiones directamente en mi ordenador portátil usando un micrófono profesional. A lo largo de cada sesión vigilo la pantalla del portátil para asegurarme de que los datos de grabación del software funcionan correctamente. Al probar nuevamente el micrófono y el software, la reproducción fue normal. ¡No tenía absolutamente ningún sentido!

Trece días después de nuestra reunión inicial, Lisa estaba de visita en la ciudad de Nueva York y acordamos reunirnos para otra sesión. Esta vez estaba preparada para grabar con dos dispositivos: mi portátil y otra grabadora. Anticipándome a su llegada, traje la energía giratoria a mi mente. Le pedí que no perturbara la electrónica sino que ayudara a proporcionar una sesión beneficiosa para Lisa. Estaba decidida a tener una buena grabación que pudiera escuchar en el futuro.

Una vez que estuvo relajada, las escenas comenzaron a fluir a través de su mente. Esta vez, Lisa se vio como una bailarina. Describió su atuendo, cómo se veía el teatro y cómo el director criticaba su actuación. Unos breves momentos después de la regresión, volvió la sensación de dar vueltas.

“Vuelvo a tener en el pecho esa sensación de dar vueltas”, dijo. “Es difícil recuperar el aliento”. Le di instrucciones para que se relajara, pero el giro continuó.

“No es una energía negativa”, señaló. “Es divertido. Está bromeando conmigo. Logré calmar la energía, pero tuve que repetir el proceso varias veces porque los giros seguían regresando. Le pedí al Yo Superior de Lisa que me explicara el giro. Esta es la respuesta que recibí:

Yo Superior de Lisa: Estoy intentando averiguar cómo explicarlo. Es la energía de su alma. La gente siempre habla de lo que le ocurre al alma cuando abandona el cuerpo o de lo que ocurre realmente en un cuerpo que hace que esté vivo o no. Es el espíritu... es energía real. Es el despertar de esa energía que gira. Cuando la agitas y empieza a moverse, es una sensación física de que hay un espíritu real. Es un pedazo mayor de todo el alma Es la pieza que está en este cuerpo ahora mismo. Es el giro que está despertando. Siempre está despierto, pero se está potenciando.

Dobromira: Entonces, ¿el girar es un sentimiento que puede evocar dentro de sí misma para poder sentir su alma y sentir una conexión más fuerte con su Ser Superior? ¿Puede concentrarse en eso cuando quiera?

Yo superior de Lisa: Sí, pero no si está haciendo siete cosas diferentes. Tienes que estar concentrado. El enfoque humano es limitado al igual que la vida es limitada, por lo que necesitas tu concentración total o casi total, al menos al principio. Se vuelve más fácil. Requiere tu total concentración. Esa energía es lo que interrumpió las frecuencias electromagnéticas de la grabación anterior.

Pregunté al Yo Superior si el cuerpo de Lisa podía retener esta energía de forma permanente. La respuesta que recibí fue que los cuerpos humanos no pueden contener la enorme energía de su alma por tiempo ilimitado. Por eso el alma nunca desaparece, pero los cuerpos sí.

Como prometí, la grabación de nuestra segunda sesión juntas no tuvo interrupciones.

Cómo conectarse con su yo superior

Puedes conectarte con tu Ser Superior en cualquier momento, porque tu Ser Superior es realmente una parte de ti. Está disponible para ofrecerle comodidad y orientación en todo momento. Pedir ayuda refuerza el sentimiento de conexión, permitiéndote sentirte abrazado por el amor y el apoyo. La forma más sencilla y poderosa de conectarte instantáneamente con tu Ser Superior es tener un diálogo en tercera persona contigo mismo, fingiendo que eres tu el Ser Superior. Aquí hay un ejemplo:

Pregunta: Dobromira está preocupada por su viaje y la reunión con su nuevo cliente. ¿Qué consejo podrías darle?

Permite que las palabras fluyan sin censurarlas.

Respuesta: Dobromira está preocupada porque cree que cuando conozca a ese cliente, él la mirará con ojos humanos. Sí, eso inevitablemente estará ahí. Pero esta persona experimentará una percepción mayor que la que el ojo humano puede ver. Esta reunión es una reunión del alma, y ​​se ha trabajado mucho en el estado de sueño para permitir esta reunión. El reconocimiento del alma será instantáneo. Ella no necesita preocuparse. Ella solo necesita mirarlo a los ojos y permitir que las energías del corazón se sincronicen. Todo ya ha sido orquestado, y la comodidad se establecerá rápidamente.

Este es un ejemplo real. En ese momento estaba trabajando en un proyecto que requería que volara a Los Ángeles para reunirme con un cliente. Nunca lo había conocido y, sin embargo, el proyecto requería que nos conectáramos y confiáramos el uno en el otro. Estaba esperando ansiosamente la reunión. Afortunadamente, la orientación que recibí a través de este ejercicio calmó mi ansiedad. Varias veces antes de la reunión designada me comuniqué con mi Ser Superior en busca de apoyo. Las palabras que imaginaba que decía mi Yo Superior siempre eran amorosas y alentadoras. La reunión salió bien, tal como mi Yo Superior había asegurado que sucedería. Hubo un sentimiento instantáneo de comodidad y confianza entre nosotros, y desde entonces nuestro trabajo ha estado fluyendo maravillosamente.

Puedes hacer este ejercicio por escrito, o puedes tener la conversación en tu cabeza tan a menudo como puedas durante el día. Haz ambos. Hay momentos en los que mis instintos me guían a sentarme y conectarme con mi Yo Superior a través de la escritura. Sin embargo, muchas más veces durante el día permito que estos diálogos en tercera persona se desarrollen en la mente. La belleza de jugar este juego es que cuanto más lo hagas, más fácil y claras serán las instrucciones. Siempre somos guiados; rara vez le prestamos atención. Nos hemos vuelto muy buenos filtrando el amor que la Fuente tiene por nosotros, centrándonos en cambio en nuestra soledad. De esa manera, nos hemos autohipnotizado para sentirnos aislados y sin apoyo.


Ejercicio: Diálogo con tu Ser Superior

Sugiero abordar este proceso como un juego a ejecutar. Cuanto más juguetón puedas ser, mejor. No hay una forma correcta o incorrecta de hablar con tu Ser Superior. Solo juega, experimenta y permítete hacer el tonto.

Hay dos formas de hacer este proceso: en tu mente, o en papel. Realiza el proceso en tu mente cuando estés buscando una comunicación rápida con tu Ser Superior durante todo el día. Cuando desees una guía más detallada, reserva diez minutos de tiempo en silencio. Ten tu diario a mano. Comienza por inspirar profundamente y exhalar lentamente. Establece la intención de conectarte con tu Ser Superior y recibe orientación sobre la pregunta que estás enfrentando. Realiza los pasos enumerados a continuación, escribiendo tanto tu pregunta como la respuesta:

1.                  Haz una pregunta o piensa en una situación en la que quieras apoyo. Al hacer la pregunta, habla de ti mismo en tercera persona.

2.                  Usa tu imaginación y adopta la perspectiva de alguien que te ama incondicionalmente, que tiene en mente lo mejor para ti y que comprende el panorama general del camino de tu alma. Puedes imaginarlo como tu Ser Superior, un ser de luz, un ángel, un santo o cualquier ser que sepas que te proporcionará amor, luz y energía curativa. Imagina que eres ese ser.

3.                  Comienza a darte consejos, análisis o apoyo desde la perspectiva de este ser que te lleva con el más profundo, hondo amor.

Jugar este juego permite que tus guías, ángeles y el Yo Superior inserten con gracia su sabiduría y apoyo en tu flujo de conciencia. A veces, las palabras que imaginas te sonarán familiares; puede parecer que solo hablas tú. Otras veces parecerá obvio que estas palabras provienen de más allá de tu conciencia. Es tu Ser Superior, o un ser de luz, que te empuja una y otra vez en la dirección de tu mayor bien.

Me sorprende repetidamente lo funcional y poderosa que puede ser esta simple técnica.


Ahora construyamos sobre este sentimiento de ser uno con nuestro Ser Superior. En el próximo capítulo vamos a examinar cómo todo nos refleja, porque somos nosotros.

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CAPÍTULO 5. TODO TE REFLEJA

Como vimos en el capítulo anterior, a nivel del alma a menudo elegimos encarnar con el mismo grupo de almas vida tras vida. Nos gusta viajar y crecer compartiendo experiencias con personas con las que hemos estado en otras vidas. Como resultado, los grupos de almas generalmente avanzan juntos a través de los niveles de conciencia. El todo es tan fuerte como su parte más débil.

Puedes recordar que en la primera vida que John y yo exploramos juntos, él fue un banquero que se suicidó al atardecer de la vida debido a la soledad. Tras su muerte ascendió a un plano diferente donde amigos y familiares lo esperaban: su grupo de almas. John descubrió que su grupo estaba listo para pasar a un nivel diferente de conciencia, pero John no lo estaba. Necesitaba integrar los problemas causados ​​por la soledad en su vida de banquero. Debido a que no estaba listo para seguir adelante su grupo de almas tampoco pudo continuar adelante.

El compromiso con el desarrollo de los demás existe tanto a nivel global como a nivel del grupo del alma. Las almas a menudo regresan a la Tierra para servir y elevar la conciencia de nuestro planeta. Esto puede ocurrir incluso si nuestro ciclo de renacimiento en en la Tierra está completo. Por supuesto, un alma siempre puede continuar su desarrollo en un plano diferente de existencia una vez que completa su tiempo terrestre pero muchos deciden quedarse atrás y permanecer al servicio.

La razón por la que progresamos juntos es porque todos somos uno, cada uno de nosotros es parte de Todo-Lo-Que-Es. En cada nivel subsiguiente de existencia, la individualización de la conciencia decrece. La unidad se vuelve mayor, y las fracciones menor, a medida que nos acercamos al Uno.

El Universo está estructurado holográficamente. Cada parte del holograma contiene la información del todo. La palabra holograma proviene de la palabra griega holos, “totalidad”. El autor Gregg Braden explica que “un holograma es un patrón que es total y completo en sí mismo y, al mismo tiempo, es parte de un patrón aún mayor que es total y completo en sí mismo, que a su vez es parte de un patrón aún mayor. Este patrón puede ser energía no física o puede ser materia muy física”.

Cada uno de nosotros es una faceta de un holograma multidimensional. Lo que esto significa es que dentro de nosotros contenemos todo lo que percibimos que está “ahí fuera”. ¡Pero todos y Todo-Lo-Que-Está “allá afuera” también nos contiene a nosotros! Debido a que todo está contenido en todo, realmente no hay un “allá afuera”. Realmente solo estoy yo. Yo estoy en todo, y todo está en mí. Cada flor, cada árbol, cada nube, cada bebé que se ríe, cada persona, cada situación... todas estas son formas diferentes en las que me conozco a mí mismo. El poeta sufí Rumi resumió esto muy bellamente cuando dijo que cada uno de nosotros no es solo una gota en el océano, sino que también somos el vasto y poderoso océano que se encuentra en cada gota.

Mis clientes a menudo experimentan un retorno a la Unidad durante sus regresiones. Recordar que la persona es UNO con Todo-Lo-Que-Es crea una profunda sensación de amor incondicional. Uno tras otro, los clientes salen de sus profundos estados de regresión y dicen que se sienten diferentes, se sienten cambiados, se han convertido en una nueva y mejor persona. Escuchar esto crea fuegos artificiales de satisfacción, alegría y gratitud en mí. Al hacer o dejar espacio para que otros se vuelvan a conectar con el amor Divino del que provienen, del amor que son, me conecto con mi espíritu y vivo mi propósito.

Estar en la naturaleza y maravillarnos de la perfección que nos rodea también nos permite reconectar con nuestra esencia y recordar que estamos en unidad con Todo-Lo-Que-Es. El canto melódico de los pájaros está ahí para nutrirnos y aligerar nuestras vibraciones. Al presenciar la exuberancia con la que todo crece y cómo la naturaleza sigue, sin esfuerzo, sus impulsos naturales recordamos que nosotros también nos revelamos, constantemente, más de lo que somos. Conocemos nuestro valor y bondad más allá de toda duda porque impregna cada célula de nuestro ser. A través del mundo que nos rodea podemos saber, profundamente, que somos uno con el Universo.

Elige el amor sobre el juicio

La sensación de estar en armonía con nuestro entorno es más difícil de sostener cuando estamos entre personas, viviendo la vida cotidiana. A medida que desaparece el polvo mágico de un agradable paseo por la naturaleza, nos encontramos de nuevo en ese estado, demasiado familiar, de sentirnos separados, frustrados, ansiosos, diferentes y solos. Nuestras mentes son rápidas para analizar, agrupar y etiquetar todo lo que nos llega. Nos comparamos no solo con las personas y los sucesos que encontramos, sino también con nuestros archivos mentales: los "debería", "podría", y "debería". Aunque el juego de la comparación nos coloca fuera de la corriente del bienestar, también tiene un propósito muy constructivo. Al comparar cosas, llegamos a conocer nuestras preferencias. Estas nuevas preferencias crean nuevos deseos en nosotros, y los nuevos deseos nos llenan de entusiasmo. Nos impulsan a crear nuestras vidas y realidades. Siempre habrá contrastes en el mundo. Lo que es importante saber es cómo mantener nuestra conexión con la Fuente y no dejarnos influir por emociones y juicios negativos.

Cuando juzgamos un suceso o una persona, en realidad juzgamos a nosotros mismos. Debido a nuestra naturaleza holográfica, cualquier juicio es un juicio propio. Seríamos incapaces de percibir lo que nos preocupa en los demás si no contuviéramos el equivalente vibratorio de su energía dentro de nosotros. El juicio que proyectamos exteriormente actúa sobre nosotros interiormente. Es natural sentir disgusto cuando nos encontramos con una persona o un suceso que no coincide con nuestras preferencias. Sin embargo, conocer nuestra preferencia sobre un tema no significa que tengamos que etiquetarlo como "incorrecto".

Te animo a cambiar tu enfoque de lo que es problemático en el exterior para examinar cuál es el desafío dentro de ti. Esa persona o suceso es, simplemente, un regalo de tu Ser Superior, un esfuerzo para hacerte integrar las creencias opuestas sobre cómo debería ser tu realidad y alinear tus pensamientos y emociones con la verdadera esencia de tu alma. Al adoptar este enfoque de juicio, te permites permanecer anclado en la esencia del amor incondicional. Al separarte de la negatividad arremolinada, te quedas en paz. Puedes mirar a los demás, y a ti mismo, con una comprensión muy profunda. Te permites recuperar tu capacidad de elegir si caer en una espiral de pensamientos negativos o sentirte elevado por la posibilidad de conocerte de una manera más grande y más alegre.

La negatividad no es un hecho. Tenemos el derecho y la capacidad de elegir cómo respondemos a las circunstancias. Recuerda, no hay hábitos, solo elecciones. En el momento en que te das cuenta de algo dentro de ti que no te agrada, ya no está oculto. Eres consciente de ello, y por eso puedes elegir mejor. Es tan simple como eso.

Con esa comprensión en nuestro corazón es natural elegir el amor. Porque somos amor. Todo se crea a partir de la vibración vivificante del amor incondicional. Es por eso que la mejor manera de expresar quiénes somos, y servir a Todo-Lo-Que-Es, es infundir amor a cualquier situación angustiosa. Hacemos esto al tomar la decisión de permanecer enamorados y proyectar pensamientos de amor a los involucrados. Para permanecer enamorado, afirma: Soy la energía cálida, acogedora y permisiva del amor. Al hacer esto, ayudas a limpiar la energía densa que rodea cualquier suceso negativo y ayudas a elevar la conciencia del todo. También facilitas que todos los demás sigan el mismo camino, porque el plan energético ya existe.

Ponerse en este estado mental crea un sentido muy profundo de compasión y conexión. Intuitivamente sabrás que cada uno de nosotros está haciendo lo mejor que puede en cada situación. Al permanecer en la esencia del amor, mantenemos la luz para todos los demás, mostrándoles formas positivas de crear y experimentar sus realidades. Si te sientes obligado a actuar y generar cambios en el mundo, actúa desde ese terreno más sabio y elevado que existe en ti. Cuando actúas desde un lugar de amor e integridad, tu energía positiva atraerá a visionarios de ideas afines. Juntos, los cambios por los que trabajas harán del mundo un lugar mejor.

11 de septiembre de 2001

Estaba en casa la mañana del 11 de septiembre de 2001. Era un día cálido y soleado, sin señales de lo que estaba por venir. En ese momento, vivía a pocas cuadras del World Trade Center y podía ver las Torres Gemelas desde mi ventana. El impacto me sacudió físicamente y conmocionó mentalmente cuando los aviones se estrellaron contra los edificios. Más tarde, observé horrorizada, desde mi ventana, cómo las Torres se derrumbaban con estruendo ensordecedor. Una ominosa nube de polvo gris llenó el aire y, de repente, todo fue invisible.

Era como si el tiempo se hubiera detenido. Mi realidad se transformó en un momento de eterno vacío. La vista del polvo gris que lo cubría todo, la dificultad para respirar, la sensación de confusión, el miedo y el instinto de supervivencia, los sonidos de las sirenas y las imágenes surrealistas de ríos de personas corriendo hacia lugar seguro: todas estas escenas continúan repitiéndose en mi mente hasta el día de hoy.

Las horas y días que siguieron fueron difíciles. No se me permitió regresar a mi apartamento durante tres semanas, y lo único que tenía era la ropa que llevaba puesta. Sin embargo, nunca me he sentido más protegido o cuidado en mi vida. La efusión de amor y apoyo que recibí fue abrumadora.

Todos crecimos mucho debido a los sucesos de ese día. Aprendimos que, como humanos, tenemos la capacidad de crear y destruir, pero también tenemos la de superar cualquier desafío. Aprendimos las lecciones importantes de desinterés, compasión, fe y, sobre todo, amor. La cascada de cambios políticos y culturales que siguió al 11 de septiembre continúa brindándonos oportunidades para aprender que no hay división entre "nosotros" y "ellos", y que todos somos solo personas que buscan realización.

La noche del 11 de septiembre me quedé dormida en el suelo de un gimnasio dando gracias a Dios. Es con gratitud de corazón como recuerdo ese día. Estoy agradecida con las almas valientes que se sacrificaron por nosotros para ampliar nuestra comprensión del amor, la compasión y el poder. Agradecida con las personas que abrieron sus corazones y encontraron millones de maneras de servir a sus hermanos y hermanas en los días siguientes. Agradecida con nuestra Fuente por nutrirnos y darnos la fuerza para continuar en la luz y el amor. No tengo miedo ni odio por estos sucesos. Extiendo amor y compasión a todos. Elijo ser la luz que eleva, en lugar de ahogarme en el lodo del miedo y la negatividad.

Encontrar la oportunidad en situaciones difíciles

Es importante no juzgar y aceptar nuestras interacciones cotidianas, ya sea con novios, niños, compañeros de trabajo o extraños al azar con los que nos cruzamos. Sin embargo, piensa en todas las pequeñas formas en que criticamos y juzgamos, aunque solo sea mentalmente. Juzgamos cómo se viste la gente, se peina, lo que dice, cómo gana y gasta su dinero; y la lista sigue y sigue. ¡ Pero qué aburrido sería este mundo si todo se hiciera de acuerdo con lo que crees que es correcto! No habría diversidad. Todo el mundo sería un clon tuyo y la situación sería terriblemente monótona. Ni siquiera valdría la pena interactuar con el mundo porque todo sería igual a ti.

Al validar la diversidad que vemos en los demás, podemos conocer la unidad. La belleza de la Unidad está en su multiplicidad. Similar a un rompecabezas, cada uno de nosotros encaja perfectamente en el todo. Al ser fieles a nosotros mismos, e interactuar con el mundo de esa manera, apoyamos a Todo-Lo-Que-Es. Cuando hacemos esto, se vuelve más fácil permitir que los demás también sean quienes realmente son. Cuando me encuentro juzgando a otro, todo lo que digo es: "Qué interesante". Esa persona simplemente está reflejando que hay otras posibilidades entre las que podría elegir. Silenciosamente agradezco a la persona por mostrarme otra forma en la que he sido testigo de Todo-Lo-Que-Es. Luego sigo adelante con gracia, enfocándome en pensamientos que me emocionan y creando la vida que elijo vivir.

Siempre habrá sucesos en nuestra vida personal que nos pongan nerviosos. Nuestros padres divorciándose o vendiendo la casa familiar; nuestro hermano casándose con alguien que no aprobamos; nuestro mejor amigo haciéndose una cirugía plástica que no creemos necesaria; o peor aún, un ser querido que desarrolla una enfermedad debilitante. Sucesos como estos tienden a empujarnos a sentimientos extremos, creando noches de insomnio, de preocupación, que nos aíslan de la experiencia del bienestar y la Unidad. Cuando te enfrentes a desafíos como estos, te invito a recordar que están ahí por una razón. Reconócete como el co-creador magistral de tus circunstancias y asume la propiedad de la situación, incluso si aún no está claro por qué están ocurriendo tales sucesos, o cómo te están ayudando a crecer.

Atraemos las situaciones difíciles porque hay algo valioso que aprender; nos dan la oportunidad de estar al servicio de los demás. Tales situaciones crean ansiedad porque reflejan problemas no resueltos que llevamos dentro. Porque todos somos uno, porque el Universo es un holograma, a lo que nos enfrentamos es a nosotros mismos. Las experiencias llegan a nuestra vida para servir como reflejo de lo que somos; nos permiten integrar los desafíos que quedan por resolver. Por lo tanto, podemos usar esos sucesos como una oportunidad para conocernos mejor, comprender nuestras creencias, asimilarlas y reemplazarlas con nuevas ideas que apoyen mejor lo que queremos ser.

Si no abordamos tales situaciones problemáticas en su núcleo, al nivel de las creencias que definen nuestras vidas, continuaremos recreando los mismos sucesos sin importar cuántas veces intentemos adaptar las cosas de nuevo. Un ejemplo común son las relaciones románticas. Para algunos de nosotros se siente como si siguiéramos atrayendo al mismo tipo de persona una y otra vez, y los problemas de la relación inevitablemente resultan ser los mismos. La única solución que muchos vemos es encontrar una nueva pareja; ¡quizás salga mejor esta vez! Pero en lugar de pasar por otra ruptura dolorosa, podemos reconocer que el gran amor que deseamos se encuentra dentro de nosotros. La respuesta no está en encontrar a alguien nuevo y brillante. Debemos trabajar en nuestras creencias y comprender lo que nos motiva en nuestro núcleo. Debemos resolver nuestras limitaciones, sanarnos a nosotros mismos y luego decidir si nos gustaría permanecer en nuestra relación actual. Tal vez se hayan solucionado los viejos problemas, o tal vez nos demos cuenta de que estamos listos para algo diferente, sabiendo que ahora somos diferentes nosotros mismos.

Cuando ocurre un cambio en una parte del holograma, se refleja en todo el holograma. Todas sus partes individualizadas se ven afectadas. Por lo tanto, en el momento en que cambies tu postura, pensamientos y creencias, ese cambio se reflejará en la situación misma. Parecerá como si las cosas hubieran cambiado milagrosamente. En verdad, lo único que ha cambiado eres tú. Cuando nos encontramos en lugares que no son de nuestro agrado, la respuesta no es cambiar a los demás, predicar nuestra versión de lo que es correcto o intentar reparar lo que parece estar roto. En lugar de eso, debemos reconocer que la situación refleja algo sobre nosotros e ir hacia adentro. Allí podemos limpiar las telarañas e iluminar los rincones polvorientos de nuestras historias. Podemos estudiar nuestras creencias e intencionalmente transformarlas en lo que preferiríamos vivir.


Ejercicio: Cómo descubrir tus creencias limitantes y transformarlas

Es fundamental conocer nuestras creencias porque son las piedras con las que construimos nuestro camino en la vida. Son la base sobre la que edificamos cada experiencia, determinando la dirección de los pequeños sucesos, así como la totalidad de la obra maestra definitiva, a saber: esta vida. Las creencias no son más que pensamientos, pero las asumimos como verdades absolutas. Algunas de ellos son positivas y de apoyo, como Mi madre me ama, o, La Fuente me apoya abundantemente en todo lo que necesito. Otras creencias son contraproducentes, actúan como muros invisibles que aprisionan.

Para este ejercicio de transformación de tus creencias, reserva un momento de tranquilidad en el que puedas sumergirse en tu interior. Planifica un mínimo de 30 minutos. Cuanto más tiempo te des a ti mismo, mejor. Realiza cualquier ritual que afirme tu compromiso con el cambio y anuncie a la Fuente que estás presente y listo para conocerte a ti mismo, como encender una vela o tocar música suave. Siéntate cómodamente y ten tu diario a mano. Céntrate haciendo una respiración profunda, conteniendo la respiración por un momento y luego soltando el aire lentamente.

Piensa en los desafíos que buscas resolver. Di: “Voy a explorar todos los aspectos de mis creencias limitantes sobre este tema. Reconozco que son solo suposiciones”. Para descubrir tus creencias limitantes sobre el tema, pregúntate: “¿Cuáles son mis pensamientos sobre este tema? ¿Qué creo que es cierto acerca de esta situación? ¿Qué creo que es verdad para sentirme así?” Luego, haz una lista de tus pensamientos sobre el tema en una hoja de papel. Escribe todo lo que puedas hasta que sientas que has puesto todo.

Lo has hecho bien, así que respira hondo. Siente cómo liberas el apego a estas ideas mientras exhalas el aire. Luego, dirígete diciendo: “Mi conciencia está cambiando ahora. Soy capaz de ver las ideas, pensamientos y patrones que me limitan”. A través de esta perspectiva ampliada, ahora vuelve a lo que has escrito y léelo lentamente. Examina, conscientemente, las palabras para descubrir las creencias que ya no te sirven. Subráyalas o escríbelas en una hoja de papel aparte.

Luego, respira hondo unas cuantas veces y con intención, amor y gratitud por la sabiduría que se te dará, invita a tu Ser Superior a unirse al proceso. Usa libremente tu imaginación con esta parte del proceso; inventa tantas cosas como quieras. No esperes que las nubes se abran con un relámpago y que la voz de Dios hable. Puede pasar, pero no es necesario. Todas las respuestas ya existen dentro de ti.

Imagina cómo tu Ser Superior se comunicaría contigo. ¿Te pondría en su regazo? ¿Pondría su mano en la tuya o su brazo sobre tu hombro? ¿Cuál es su tono de voz? ¿Cómo se ve? ¿Cómo está vestido?

Imagina que tu Ser Superior te aconseja sobre qué nuevas creencias adoptar y qué viejas abandonar. Escribe esas ideas. ¿Qué querría tu Yo Superior para ti? Después de escribir estas nuevas formas de ser, léelas en voz alta. Hay un gran poder en escuchar estas declaraciones pronunciadas con tu voz. Para completar el proceso di, con convicción y confianza: “Con facilidad transformo mis creencias. Soy la persona que tiene estos nuevos pensamientos y creencias. Mi vida es el producto de estas nuevas creencias, y dondequiera que miro veo los resultados que estos pensamientos han creado”.

Finalmente, confía en este cambio dentro de ti. Recuerda, la confianza es la puerta que dirige el flujo de la capacidad que Dios le ha dado para crear tu vida. En lo que confías es lo que creas. Refuerza tu confianza repitiendo intencionalmente esos nuevos pensamientos. Cuando tengas estos pensamientos te sentirás bien. Te sentirás optimista y expandido. Estos sentimientos de alegría son confirmación de que cuando permites que la energía del pensamiento elegido fluya a través de ti estás en alineación vibratoria con tu Ser Superior, con tu verdadera esencia.

Lo más importante, actúa de acuerdo con tus nuevas creencias. Actúa como si fueras una persona que siempre ha tenido esas creencias. Actúa como la persona que ya está viviendo la vida que prefiere.

Al decirte a ti mismo que es fácil para ti cambiar tus creencias, estás estableciendo la creencia definitiva: la creencia de que estás a cargo de tu realidad. Que eres tú quien elige. Al transformar tus creencias, no necesitas pasar por un proceso complicado más allá de estos pocos simples pasos. Si crees que la transformación debe ser un proceso largo y riguroso, seguramente lo vivirá de esa manera. Pero estoy aquí para asegurarte que no tiene por qué ser así. En el momento en que has visto las cosas a través de una nueva perspectiva, tu conciencia se ha expandido. ¿Por qué volver? Has entrado en una nueva realidad paralela y literalmente te has convertido en una nueva persona. Confía en eso y actúa como tal. El único permiso que necesitas para cambiar es el tuyo. Sabes que eres tus nuevas creencias, y comienzas a tomar decisiones desde ese lugar de conocimiento. Y recuerda: el Universo es un holograma. En el momento en que decidas que has cambiado, todo lo que te rodea felizmente te lo confirmará.


La historia de Judy

A veces somos testigos de circunstancias que generan ansiedad y miedo en quienes nos rodean. Es útil asumir que hemos atraído estas situaciones para estar al servicio. Es una respuesta socialmente aceptable ofrecer simpatía a los demás o sentirse culpable por tener más de lo que ellos tienen. Sin embargo, tales ofrecimientos solo refuerzan la negatividad de la situación. En cambio, podemos permanecer enraizados en nuestra conexión con el Infinito. Si lo haces, nos pone en la mejor posición posible para ser de ayuda.

No necesitamos buscar salvar a alguien, o sentirnos responsables. Tampoco necesitamos sentirnos culpables por estar mejor sintonizados con la abundancia y el apoyo. En cambio, podemos encontrar la posibilidad de ser verdaderamente compasivos. Ser compasivo significa poder ver la belleza, la grandeza y el potencial donde todos los demás ven carencias y limitaciones. Podemos ver detrás de las máscaras del fracaso, la enfermedad y la insuficiencia, la verdadera fuerza que hay debajo. Todas nuestras elecciones, sí, incluso la elección de experimentar la enfermedad y la falta de armonía, se hacen desde una posición de fortaleza porque somos eternos. Nada podría, jamás, quebrarnos o erradicarnos. Sabiendo esto, podemos confiar en que por más asfixiante que sea la situación, esa circunstancia está sirviendo a los involucrados en ella.

A nivel del alma, cada uno de nosotros es profundamente consciente de su fuerza. Sabemos que los desafíos no son más que oportunidades de crecimiento. El nivel en el que nos permitimos sumergirnos en la negatividad es proporcional al nivel en el que podemos experimentar la iluminación, la ascensión y la expansión. La historia de Judy es un ejemplo de esta profunda verdad.

Judy era mujer joven, con una carrera profesional impresionante (y estresante) en el campo de la aplicación de la ley, cuando le diagnosticaron un aneurisma cerebral. Un vaso sanguíneo de su cerebro se había expandido drásticamente y sus paredes se habían vuelto muy delgadas. Cuando el médico le dio la noticia, Judy no supo si llorar, preocuparse o, simplemente, aceptar que su próximo aliento podría ser el último. En un par de semanas, lo que pareció una eternidad para ella y su familia, el mejor neurocirujano del país la operó. La operación fue un éxito ya que se eliminó el aneurisma. Pero en un giro infrecuente, tuvo un derrame cerebral durante la cirugía. Cuando despertó del procedimiento Judy estaba completamente paralizada. Ahora, varios años después, la parálisis solo persiste en el lado izquierdo de su cuerpo. A través del ejercicio de la constancia y el poder de su espíritu, pudo caminar.

Durante nuestra sesión, Judy se vio a sí misma como mujer joven que vivía en una granja en las afueras de un pequeño pueblo de Montana, en el siglo XIX. Describió con gran detalle la vida sencilla que llevaba: sus hijos, su esposo, el jardín, el pueblo cercano y cómo todo estaba seco y cubierto de polvo. Le pregunté a su Ser Superior por qué accedió a esta vida y no a otra. La respuesta fue simple pero muy importante para Judy: su Yo Superior dijo que quería mostrarle lo fuerte que era. Le dijo que había elegido experimentar sus desafíos físicos actuales para poder crecer espiritualmente. Su aneurisma y derrame cerebral no fueron causados ​​por karma pasado, ni tampoco fueron el resultado de que Dios la castigó por sus pecados. Eran la creación confiada de una estrella que buscaba brillar aún más. Su Yo Superior le dijo que ella es muy fuerte emocional, mental y físicamente. Le aseguró que todo estaba bien y que la amaban incondicionalmente.

Debido a su historial médico, y su dedicación a vivir desde su espíritu, Judy ha crecido tanto que su Yo Superior la ha alentado a inspirar y animar a otros. No hace falta decir que la sesión de Judy le fue profundamente sanadora. Yo misma me sentí honrada por haber sido testigo de un alma tan valiente y hermosa.

Todos somos vibraciones

Cuando somos amorosos y compasivos sabemos que en el gran esquema de las cosas todos y todo es correcto y perfecto. Nuestra vibración se convierte en la de la Unidad y el amor incondicional. Al sumergirnos en la corriente del bienestar y la conexión, no solo afectamos a quienes nos rodean, sino también a la totalidad de Todo-Lo-Que-Es.

Incluso sin palabras, nos comunicamos constantemente unos con otros. De hecho, la mayoría de la información que intercambiamos es a través de nuestro campo de energía: un estudio realizado en UCLA mostró que el 93 por ciento de nuestra comunicación se basa en intercambios no verbales. Por supuesto, esto tiene sentido. Cuando estamos en presencia de alguien cálido y amable, nos sentimos bienvenidos. En unos breves momentos nos sentimos elevados, ya que nuestra energía comienza a igualar a la de él. Cuando, por el contrario, estamos en presencia de alguien crítico, cínico y negativo, nos sentimos como si hubiéramos sido absorbidos por su densa vibración. ¡Todo lo que queremos es huir! Una actitud positiva unifica y eleva los niveles de energía de los demás. Nos convertimos en mejores versiones de nosotros mismos, simplemente estando en presencia de la positividad.

Hay formas constructivas, de apoyo y satisfactorias de estar en cualquier situación. Cuando modelamos esas formas para otros, los ayudamos a darse cuenta de que también prefieren operar en un nivel de resonancia más alto. A partir de ahí, pueden usar conscientemente su poder para crear circunstancias que los apoyen.

Como ya sabrás, el cambio debe venir desde adentro. Ningún cambio en la personalidad o la vida de uno puede ser impuesto desde el exterior. La regañina casi nunca funciona como estrategia para transmitir posibilidades de cambio o para mantener una buena relación. Puede traer el resultado deseado, pero a un alto precio porque puede dañar el sentido de identidad de la otra persona. Pero al conectarse con otro desde un lugar de amor y compasión, puedes alentar una transformación genuina. No importa si esa persona está lista para dar el salto; Mientras te mantengas enraizado en tu esencia amorosa, sin juzgar ni forzar, traerás gracia y tranquilidad. No hay prisa. Después de todo, tenemos una eternidad para llegar a donde vamos.

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Debido a que todos somos uno, siempre estamos inmersos en la corriente del conocimiento, un campo compartido de conciencia que nos conecta a todos. Esta red de información está siendo constantemente creada y experimentada por todas las expresiones individualizadas de la conciencia de Dios, del Todo. Como uno con este todo, tú también puedes elegir ser apoyado y nutrido por esta inmensidad.

Durante una serie de experimentos que dieron como resultado uno de los descubrimientos más importantes del siglo XX, el físico Alain Aspect se propuso probar científicamente algo que hemos entendido intuitivamente durante siglos. En 1982, el experimento de Aspect demostró el teorema de desigualdad de Bell, mostrando que, bajo ciertas condiciones, las partículas pueden "comunicarse" instantáneamente entre sí, independientemente de la distancia que las separe, ¡sin preocuparse por ninguna noción de espacio y tiempo! Esto significó que el principio físico de localización, aceptado durante mucho tiempo, que establecía que un objeto estaba influenciado directamente solo por su entorno inmediato, ya no era válido. El descubrimiento de Aspect prestó apoyo a las teorías conocidas como no localización cuántica y entrelazamiento cuántico.

Además, estos experimentos hicieron añicos la validez de la teoría de la relatividad especial de Alberto Einstein, que afirma que ningún material o energía podría viajar más rápido que la velocidad de la luz. No mostraron que la energía pudiera viajar tan rápido; se demostró que la velocidad y el tiempo, como factores limitantes, son irrelevantes. Los objetos se conectan instantáneamente, independientemente del espacio y el tiempo entre ellos.

“¿Cómo se comunican estas partículas?” se preguntaron todos. La pregunta hizo vibrar a la comunidad científica. David Bohm, otro físico, ofreció una explicación. Las partículas responden entre sí de esta manera no porque de alguna forma se envíen señales misteriosamente sino porque son extensiones de la misma cosa. Según él, en un nivel más profundo, todos los objetos aparentemente separados están interconectados. En un nivel fundamental, humanos, ballenas, árboles y luciérnagas son vibraciones en el mismo campo cuántico: una vasta e inagotable reserva de energía. Como vibraciones, nos comunicamos constantemente con este campo y todas sus representaciones vivas y no vivas. El campo conecta todo con todo lo demás, como una vasta red. Al mismo tiempo, todo se origina en el campo y es alimentado por las interacciones entre partículas en el campo. Es fácil ver por qué, cuando los científicos hablan sobre el campo, podrían describirlo como Dios, el Uno, que se conoce a sí mismo como Todo-Lo-Que-Es.

Permitiendo nuestra naturaleza intuitiva

Tú y yo estamos conectados a esta misma vasta red. Como tal, somos infinitamente intuitivos. Sí, ¡eres intuitivo! Ser psíquico no es algo extraordinario; no es raro que le suceda a unas pocas personas. Todos somos intuitivos, lo sepamos o no. Ya es parte de nuestro proyecto. Es nuestra naturaleza y nuestro patrimonio.

Hemos tenido mucho éxito en poner una camisa de fuerza a esta conexión natural, bloqueándola con todo tipo de creencias, miedos e historias limitantes. Sin embargo, si está interesado en permitir una mayor conciencia intuitiva, hay pasos que puedes seguir. Primero, explora otras vidas en las que puedes haber sido lastimado o cerrado por conocer lo invisible. Puedo pensar en varios clientes que se vieron perseguidos por sus habilidades psíquicas en vidas pasadas. Después de liberar los miedos de sobresalir y hablar, han entrado en su verdadero potencial intuitivo y han dejado que lo Divino regrese.

Yo, personalmente, experimenté tal regresión, que me liberó de un miedo tremendo de ser dañada por ser yo misma. Visité toda una vida en la que, como mujer blanca, estudiaba hierbas medicinales con una curandera de una tribu nativa americana. Estaba enamorada de un hombre de esa tribu, y por eso rechacé las insinuaciones de un pretendiente blanco que quería casarse conmigo. En su ira y dolor, se vengó pintándome como una bruja, y mi fin llegó rápidamente. Limpiar ese bloqueo me ayudó a sentirme cómoda con mi lado intuitivo.

Otra historia que quiero compartir contigo proviene de Bianca, una hermosa mujer italiana. Al comienzo de nuestra sesión compartió con horror cómo se le había estado cayendo el cabello. Durante la regresión, mi cliente experimentó una vida en la que ella y un amigo pudieron ver el futuro y ayudar a sanar a las personas. En lugar de ser apreciados y atesorados por su comunidad fueron quemados en la hoguera. Justo antes de prenderles fuego los ejecutores les cortaron el pelo. En ese punto de la regresión, Bianca agonizaba porque al cortarle el cabello le estaban quitando sus poderes. Los momentos finales de esa vida fueron espantosos y la sesión fue una experiencia muy emotiva para Bianca. El Yo Superior luego explicó que el cabello humano es una representación física de las antenas a través de las cuales nos conectamos con Todo-Lo-Que-Es.

Antes de nuestra sesión, Bianca me había dicho que era consciente de su capacidad para curar a las personas, pero que algo la detenía. Después de presenciar esta vida, se dio cuenta de que inconscientemente había estado aterrorizada por que la pudieran matar de nuevo. La pérdida de cabello era una forma de protegerse, porque cortaba su capacidad de conectarse con lo Divino. Trabajamos para liberar estas creencias y guiarla a encontrar seguridad en su conexión con Dios.

Por lo tanto, el primer paso para desarrollar nuestros poderes intuitivos es liberar cualquier temor que se haya acumulado debido a experiencias pasadas del alma. El segundo paso es identificar y liberar cualquier miedo y creencia negativa que tengamos actualmente sobre nuestras habilidades psíquicas. Comienza repitiendo el ejercicio que se encuentra anteriormente en este capítulo (Ejercicio: Cómo descubrir tus creencias limitantes y transformarlas). Este ejercicio me permitió liberar historias emocionales de mi infancia, junto con creencias que me han impedido confiar en lo Divino para moverse libremente a través de mí. La combinación de aclaraciones de vidas pasadas y encarnaciones presentes liberará, poderosa y efectivamente, cualquier necesidad de buscar seguridad en la separación u ocultación de poderes intuitivos.

Cada molécula en tu cuerpo está conectada a toda la existencia. Te originas en el mismo campo de energía que toda la creación y, por tanto, estás inseparablemente conectado para siempre con el todo. Como resultado, sabes todo y sientes todo. Afirma por ti mismo que estás conectado y que tienes dentro de ti un conocimiento que puede ayudarte y guiarte. Confía en tus instintos. Sé espontáneo: juega con él, nútrelo, disfrútalo y diviértete con él. Al hacerlo, das expresión libre a tu conocimiento, al campo de energía de Todo-Lo-Que-Es. Das permiso para moverse a través de ti y encontrar formas que te sirvan. Todos somos parte del mismo campo de conciencia en constante expansión y en constante cambio. Eres uno con Todo-Lo-Que-Es, y Todo-Lo-Que-Es te conoce como una parte valiosa, atesorada y amada de Él. Por eso, Todo Lo Que Es busca servirte y apoyarte para que te conviertas en lo que estás destinado a ser.

Tu unidad

Mientras aprendes a fusionar tu Unidad con Todo-Lo-Que-Es, te invito a que también te concentres en tu Unidad. Eres la hermosa danza de la mente, el cuerpo y el espíritu. Tu mente es lógica. Te sirve de maneras muy prácticas, permitiéndote navegar a través de la fisicalidad de tu existencia. Tu cuerpo es el vehículo a través del cual lo Divino llega a jugar en el mundo, para moldear y experimentar lo material. Y tu espíritu insufla vida, propósito, amor y guía en el desarrollo de estos tres componentes. Si bien pueden parecer separados, estos tres aspectos son parte de la Unidad que eres tú.

Algunos de nosotros marchamos por la vida bajo la bandera del “más”. Esos seres insaciables siempre están buscando más poder, más reconocimiento y más pertenencias. Confían, exclusivamente, en la mente, en la capacidad de lograr a través del puro poder de la voluntad. El espíritu es ignorado, despedido; después de todo no se puede conocer, medir y analizar en una sala de juntas empresarial con tablas de datos y gráficos. Dios es el misterio más grande, y a estos tipos no les gusta el misterio.

Pero nosotros, las personas espirituales, tampoco somos santos. Una vez que descubrimos nuestra esencia gloriosa, a menudo olvidamos que también existimos en un mundo físico. Que hemos elegido estar aquí con un propósito. La mayoría de nosotros hemos abandonado la vida del lado izquierdo del cerebro, oscilando con una exuberancia desenfrenada hacia el estado de nirvana del lado derecho del cerebro. Vivimos desde nuestras almas y descontamos la importancia de nuestras mentes. Pero la Fuente creó a los seres humanos con mentes pensantes para que el Espíritu pueda tener una oportunidad cada vez mayor de aprender y crecer. Debemos aprender a usar todos los dones que nos han sido dados.

E independientemente de si estamos orientados hacia la cabeza o hacia el alma, lo más probable es que hayamos lastimado, abusado o descuidado nuestros cuerpos en algún momento de este viaje terrenal. ¡Qué diferente sería nuestro mundo si nos enseñaran que nuestros cuerpos son vasos sagrados! Tendríamos una relación diferente con la comida, el alcohol, las drogas y las medicinas. Conoceríamos nuestra sexualidad por su belleza y dicha. En cambio, negamos nuestros cuerpos y los damos por sentado. Debemos recordar que el cuerpo es el vehículo que expresa la misión de nuestra alma.

Lisa, que te presenté en el Capítulo 4, estaba abusando de su cuerpo y sintiéndose desconectada de él cuando vino a verme. Conversando con su Yo Superior, le pregunté sobre sus desafíos, y esto fue lo que dijo sobre el cuerpo humano:

Existe la idea de que el espíritu es más grande que el cuerpo... pero en esta vida, el espíritu es tan fuerte como el cuerpo. Hay amor mutuo y necesidad. Ser espiritual solo llegará hasta cierto punto, si no se puede cultivar el mismo amor y energía en su cuerpo y para su cuerpo. Ella necesita hacer cualquier cosa que sea una canalización positiva de energía a través del cuerpo… cualquier cosa que sea una práctica para reconectar la mente, el cuerpo y el espíritu juntos. El yoga es bueno. La meditación es buena. Si es una carrera, debe ser para notar cómo se siente tomar y exhalar el aire de los pulmones y no cuánta distancia se recorre. Conéctate y regocíjate en la forma en que funciona el cuerpo, sin tratar de controlarlo, sin tratar de exigirle cosas. Estas son todas las cosas que hacemos cuando nos hemos desconectado y estamos tratando de volver a llenar, y no funcionan.

Si tiendes a descuidar tu cuerpo, aquí hay algo para que pruebes. A muchos de nosotros nos gusta pensar en el cuerpo como el recipiente que contiene el espíritu. En realidad, el alma sostiene el cuerpo. El alma es la que crea cuerpo y mente; el cuerpo existe en el espíritu. Ahora, piensa en tu cuerpo a través de los ojos de tu alma. Al igual que un padre, el Creador siempre ama incondicionalmente sus creaciones. Tu espíritu ama tu cuerpo. Al contemplar la imagen de tu espíritu sosteniendo tu cuerpo en su energía con amor, tu mente se alineará con esta nueva forma de pensar. Tener esta imagen en tu mente te permitirá moldear tu relación con tu cuerpo en forma más positiva.

Has elegido nacer en un momento emocionante de la historia humana: has venido a participar en la evolución de la Unidad. Durante siglos hemos olvidado nuestra Unidad con Todo-Lo-Que-Es, y negando la trinidad Divina de mente, cuerpo y alma. La trascendencia de esta separación comienza contigo. La trascendencia de esta separación comienza contigo. Extiende la mano hacia arriba y hacia adentro. Ten una mente abierta a la ayuda de la intuición; estate siempre dispuesto a pedir ayuda a lo Invisible. No dejes tu espíritu sentado en la estantería cuando termines de leer un libro inspirador. Vive tu espíritu.

Lleva tu alma contigo a cada actividad física. Ejercítate sabiendo que estás fortaleciendo tu cuerpo para que pueda manejar las vibraciones superiores de conciencia que estás alcanzando con tu alma. Experimenta el acto sexual, hacer el amor, como una estimulante representación de fusionarse en la Unidad con Todo-Lo-Que-Es. Elige alimentos vivos con conciencia, que resuenen con tu ascensión. Come conscientemente. Elige el agua sobre cualquier otra bebida porque te purifica y te motiva a estar en comunión con Gaia.

Trae armonía a tu mente, cuerpo y espíritu, y trae equilibrio entre estos tres aspectos. Crea un nuevo trato entre los tres. En un momento de meditación, diríjase a cada uno de ellos y proponles que la vida sería mucho más alegre y fácil si los tres colaboraran y apoyaran mutuamente en lugar de competir por tu atención a través de dolores corporales o rabietas del ego. Dile a tu hermosa mente que se la valora realmente y que sus preocupaciones siempre se escucharán, que está haciendo un excelente trabajo para protegerte y mantenerte a salvo. Asegúrale que no está sola y que no necesita llevar la carga de resolver tu vida por sí sola. Cuenta con el apoyo de su más fiel y amorosa aliada: tu alma. Agradece a tu cuerpo por estar incansablemente al servicio tuyo y por saber curarse a sí mismo y mantener tu bienestar. Deja que tu mente prometa a tu cuerpo que tomará decisiones amorosas. Luego, haz que tu mente y cuerpo aseguren a tu espíritu que confían en él, que lo dejarán brillar y guiar el camino.

¿Quién está conduciendo las negociaciones?, te preguntarás. Tu alma. Es tu alma la que ve el panorama general y crea vida a través de los otros dos. Al crear este nuevo contrato entre los tres aspectos, tus tres partes sagradas, se elevarán a la Unidad.

La historia de Alberto

Alberto vino a verme con un objetivo muy específico en mente: quería entender la razón por la que tenía cáncer de próstata. Los siete años anteriores habían sido una historia de tratamientos de radioterapia, innumerables pruebas, malas noticias y, lo peor de todo, miedo, mucho miedo. Su sesión fue profunda y transformadora. Alberto recibió información sobre los desajustes energéticos y emocionales que causaron el cáncer y experimentó una sanación emocional muy poderosa. Eso en sí mismo habría sido suficiente para considerar que la sesión fue un éxito, pero algo más hizo que su experiencia fuera aún más notable.

Durante la sesión, Alberto experimentó lo que se siente ser uno con la Fuente. Su regresión comenzó cuando se percibió a sí mismo como un hombre que estaba en una cámara luminosa, dentro de una pirámide:

Se siente como un lugar religioso y sagrado. Soy humilde. Hay un pedestal en medio de la habitación que sube, hecho de piedra blanca. El pedestal parece una columna rectangular. Es muy grande. Es el núcleo de este edificio, y va hacia el techo. Parece que el techo se abre al cielo. Hay energía en la habitación. La energía se siente cálida, como la luz del sol en día de verano.

Ahora estoy en la parte superior de la columna rectangular... Estoy caminando hacia el centro de la plataforma. Miro hacia lo que supongo que es el vértice de la pirámide. Estoy levantando los brazos. Se siente... esta expansión de mí. Tengo los brazos arriba y afuera y las piernas abiertas. Estoy lleno de energía. Me siento bien. Siento que de alguna manera quiero expandirme.

Mi mente está ahora en el espacio. Me llevó al espacio, pero no creo que llevara mi cuerpo allí. Ahora estoy en la oscuridad del espacio. Veo estrellas. ¡Es increíble! Siento esta tremenda energía. Siento esta conexión, esta increíble conexión. Estoy en medio de todo. ¡Estoy conectado con todo y es increíble! Se siente vasto. Se siente inexplicablemente bien estar aquí.

La conexión es un poderoso sentimiento emocional. También se siente lógica al mismo tiempo. Es maravilloso y emocionalmente abrumador de manera positiva, y es lógicamente reconfortante porque se siente bien. Siento que quiero expandirme hacia todo y al mismo tiempo quiero absorber todo dentro de mí. ¡Es maravilloso! Es como ser una parte integral del Universo pero no una cosa en él... el Universo se siente como una parte de mí. Siento que puedo mover los dedos y vería las estrellas moverse a mi alrededor. Todo está totalmente conectado.

Alberto podía sentir su “yo individual” así como la energía mayor de Todo-Lo-Que-Es. Pero pronto quiso expandirse más hacia la Unidad y descubrió que tenía miedo. Por mucho que quisiera sentir la energía a su alrededor, tampoco quería perder su identidad. Aún así, siguió adelante:

Hay un brillo que es casi cegador. Es blanco, brillante… como un brillo blanco lechoso. Está a mi alrededor. Es brillante, nítido, limpio y puro. ¡Guau! ¡Es tan brillante, es increíble! ¡Ay dios mío! ¡Ay, cielos…! ¡Ay dios mío! Vaya … ! ¡Ay dios mío! ¡Vaya!

Soy parte de una energía que es increíble. Es un brillo blanco lechoso. Está vibrando de una manera muy sutil pero muy poderosa. No puedo contenerme más. Estoy entremezclado con esto. Es mas grande que yo. Es limpio, ¡tan limpio, tan puro! No hay nada más. Es solo esta blancura. Casi puedo percibirme en él, pero no como antes. Soy un vago contorno de ese cuerpo, pero apenas está ahí. La vibración es casi demasiado para manejarla. La vibración es un poco incómoda, pero la sensación es maravillosa. Es felicidad Es contradictorio, pero es dicha de una manera aburrida porque no pasa nada. Es una nada emocionante, maravillosa. La sensación de estar en esta luz es hermosa porque es muy limpia. No hay nada impuro… ¡no hay nada! ¡No veo nada! No hay nada que lo estropee. Es perfecto y está limpio. La limpieza es tan reconfortante y refrescante. Es tan bueno. No pasa nada. Se siente maravilloso.

Ahora estoy un poco fuera de eso. Todavía estoy con eso, pero ahora puedo sentir un poco más de distinción de mí mismo. Anteriormente seguía pensando que esta energía es Dios, pero pensé que era mi mente la que deducía eso. Ahora siento que es Dios. Y estoy ante Dios en cierto modo. Es por eso que he salido un poco de eso. Para percibirlo como Dios, tenía que salir de él. Estuve en eso antes. Yo era uno con eso. No sentía distinción con nada. Ahora estoy un poco fuera de eso, y lo percibo como esta alteridad que es mucho más grande que yo. Se siente totalmente benévolo y amoroso. Todavía me siento bien, pero nada como cuando estaba con él. El contraste es increíble. Estar fuera sigue siendo una sensación maravillosa, pero es tan lamentable en comparación con lo que se siente dentro.

Alberto estaba teniendo una experiencia directa de la Unidad de todo. Pronto me dijo que se había “desapegado” un poco, y de repente reconoció lo solitario que es estar “fuera de eso”, estar separado. Le pregunté por qué, si la Unidad es tan maravillosa, ¿la dejamos? Alberto respondió:

Cuando estaba en él no era consciente de ello. Tuve que salir de él para percibirlo. Era consciente de sentirme bien, pero se sentía como la nada. Era hermoso, pero era un estado del ser. Era un hermoso estado del ser, pero no dimensional. Una suavidad perfecta... cuando salí de él, la falta de él me impresionó por su belleza. Tenía que saber lo que se siente ser uno con esa energía y luego saber lo que se siente no tenerla, para comprender y apreciar verdaderamente lo que es. Porque en sí mismo, desde dentro no hay nada. Cuando sales de él, comienzas a comprender lo maravilloso y perfecto que es, y lo bueno que es.

¡Oh Dios! ¡Desde aquí no es nada soso! Desde fuera es precioso. Era hermoso por dentro, pero era diferente. No podía percibirlo desde dentro. Podía sentirlo, y podía sentir que era bueno. No pude percibirlo porque es Todo-Lo-Que-Es, y no es más que una luz blanca brillante y una vibración. Cuando salgo de él quiero volver a estar dentro, pero tengo mejor idea de lo que es cuando estoy fuera que cuando estoy dentro. Supongo que eso tiene sentido. Cuando estás en un edificio, no puedes tener comprensión del edificio en el que estás hasta que sales de él. Esa es la imagen que estoy recibiendo en este momento. Cuando estás en la Luz no lo sabes. No sabes lo que es. Sales de él y estás asombrado. Y luego quieres volver.

Después de completar la experiencia de Unidad, sugerí que Alberto fusionara su energía con la energía de su Yo Superior y el nivel más alto de amor, sabiduría y sanación disponible para él. Una vez que se estableció esa conexión, pregunté sobre el cáncer de próstata. Me dijeron que esta vida presente era la única encarnación que el alma de Alberto tendría en la Tierra, que él había venido aquí para asistir energéticamente a la humanidad en la expansión de la conciencia. Pero ahora que estaba limitado a los confines de un cuerpo humano, el espíritu de Alberto extrañaba mucho el sentimiento de Unidad.

Cuando era joven, había descubierto que beber simulaba la ruptura de ese límite físico, trayendo una breve experiencia de euforia. Inconscientemente, supuso que cuanto más bebiera, mayor sería la expansión de su espíritu. Por esa misma época, descubrió que el sexo proporcionaba una sensación similar de expansión. Pronto, tanto el sexo como la bebida se convirtieron en obsesiones para él. Aunque había dejado el alcohol años antes, la obsesión por el sexo había continuado en su matrimonio. Avergonzado de esta parte de sí mismo, hizo un esfuerzo subconsciente para matar la cualidad que atraía a las personas y le hace exitoso y lleno de energía (en el original se usa la palabra “mojo”). Desarrolló disfunción eréctil y, más tarde, cáncer de próstata.

Durante la sesión de Alberto, sin embargo, las capas de trauma mental y emocional causadas por la represión sexual fueron removidas de su cuerpo, su campo de energía y su conciencia. Su Yo Superior le aconsejó a Alberto que se convirtiera en una práctica diaria para conectarse con el sentimiento de interconexión que experimentó durante la regresión. Allí, explicó su Yo Superior, encontraría el verdadero sustento que necesitaba.


Ejercicio: Meditación para la Unidad

La idea de que todo es energía y que todo está interconectado puede resultarte familiar. Incluso puedes creer en ello. Pero, ¿alguna vez lo has experimentado? Hay una diferencia significativa entre entender algo intelectualmente y tener el conocimiento profundo y visceral que proviene de la experiencia directa. Si tener esta experiencia te intriga, te sugiero la siguiente meditación para conectarte con Todo-Lo-Que-Es.

Resérvate 20 minutos de tiempo de tranquilidad. Siéntate o acuéstate cómodamente. Ten tu diario cerca para escribir tu experiencia o cualquier idea o visión. Establece la intención de que explorarás libremente, sabiendo que estás a salvo. Comienza por relajar tu cuerpo. Toma algunas inspiraciones lentas. Recuérdese que conoces el camino interior. Usa tu imaginación libremente y agrega tantos detalles como desees.

Cierra los ojos e imagina la cámara brillantemente iluminada dentro de la pirámide que Alberto describió en su regresión. Imagina el pedestal rectangular elevándose en el aire. Dite que este es un portal que te permitirá trascender el tiempo y el espacio. Expresa tu intención de conectarte con el Todo a través de esta experiencia. Encuentra las escaleras que conducen a la parte superior del pedestal y súbelas con facilidad. Cuando llegues a la cima mira hacia arriba y contempla lo que hay encima de ti. Camina hacia el centro, abre las piernas en una postura poderosa y extiende los brazos hacia arriba y hacia afuera. Permite que tu conciencia se expanda y se eleve más y más.

Si las imágenes y los sentimientos comienzan a fluir en tu mente, disfrútalos. Sin esforzarte por un resultado en particular, deja que evolucionen y te infundan su magia. Si no estás seguro de lo que se supone que debes ver y experimentar, deja que tu imaginación lo guíe. Pregúntate cómo se sentiría la Unidad. Permítete pintar tantos detalles como puedas. No descartes el proceso solo porque lo estés imaginando. Por la simultaneidad del tiempo, todo lo imaginable ya existe. La imaginación es una forma lúdica de conectarse con lo que ya existe y traerlo a tu realidad. Quédate con la creación gozosa de las imágenes en tu mente. Antes de que te des cuenta, sentirás profundamente la interrelación de Todo.

Cuando te sientas listo para volver a la conciencia de vigilia, permítete orientarte, lentamente, hacia el momento presente. Toma conciencia de tu cuerpo y de tu entorno. Si te sientes conmovido, describe tu experiencia en el diario.

Conectarse a Todo-Lo-Que-Es alimentará tu espíritu con el sentimiento de ser amado incondicionalmente, apoyado y ser parte del Todo. Una vez que tengas esta experiencia, sabrás por sí mismo a qué se refería Alberto cuando dijo: “Todo está totalmente conectado”.


En este capítulo exploramos los diferentes aspectos de la noción de Unidad, el principio de que todo te refleja. Examinamos el concepto de Unidad a través de hologramas y física cuántica, y vimos que la diversidad crea Unidad. Nos sumergimos en formas de mantener una sensación de paz frente a personas y situaciones que nos provocan respuestas negativas. Esto nos llevó a tratar cómo revelar nuestras creencias limitantes y transformarlas. Ahora continuemos nuestra exploración de la conciencia y veamos qué papel juega el perdón en nuestra capacidad de fusionarnos con la Unidad.

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CAPÍTULO 6. PERDÓNATE A TI MISMO Y A LOS DEMÁS

Mi hermosa hermana Ellie, a quien adoro absolutamente, vive en Chicago y es miembro de una organización benéfica que realiza un excelente trabajo filantrópico. Quería apoyar sus actividades así que doné una sesión de regresión a una de sus subastas. Después de la subasta, Ellie me dijo que la sesión había generado entusiasmo y que debería escuchar directamente al ganador. Sabía que, fuera quien fuera, el ganador me contactaría exactamente en el momento adecuado.

Pasaron los meses. Ellie estaba embarazada de su segundo hijo y se acercaba la fecha de parto así que fui a Chicago para estar con mi familia y compartir la alegría del nacimiento de mi sobrina. El día que llegué recibí un correo electrónico de Lisa, (de quien hablé anteriormente en el libro). Dijo que era la ganadora de la subasta y estaba lista para programar su sesión. ¡Qué momento perfecto! Estaba en Chicago con horario relativamente libre así que pudimos conocernos.

Lisa era mujer hermosa, de unos 30 años, con cabello rubio y ojos azules. Representaba el equilibrio perfecto entre intelecto brillante y apertura espiritual. Se había criado en el Medio Oeste y asistido a una de las universidades más prestigiosas de los Estados Unidos de norteamérica. Comenzó su carrera en marketing, pero encontró poca satisfacción en ell, por lo que se convirtió en maestra.

En su adolescencia, cuando comenzó a tomar el aspecto más femenino, Lisa comenzó a sentirse muy incómoda en su cuerpo. Lo comparó con tener un par de jeans mojados que solo quieres quitarte. Cuando tenía 16 años la familia de Lisa salió a cenar a un restaurante especializado en fondís. Todos comieron en exceso esa noche, y cuando llegaron a casa se obligaron a vomitar para sentirse mejor. Esa noche, Lisa aprendió cómo podía tener control sobre el cuerpo que tanto odiaba, y así comenzó su increíblemente problemática relación con la comida.

Durante 15 años, las comidas habían sido momentos de gran ansiedad para Lisa. Había estado en terapia y probado muchas formas diferentes de resolver el problema, pero excepto por un breve período de tiempo, nunca se había sentido realmente sana y completa. Lisa y su esposo habían tratado de formar una familia, pero ella tuvo varios abortos espontáneos. Oír esto, no me sorprendió; ¿Cómo un cuerpo tan odiado podría crear algo tan deseado? Los problemas corporales de Lisa eran como una sombra siniestra de la que no podía escapar. Sabía que las respuestas, y la sanación, podrían proporcionarse a través de nuestra sesión. Le aconsejé que abordara la regresión con confianza y franqueza.

En la sesión, Lisa se conectó con varias almas complementarias. Anteriormente, en el libro, describí su vida como abogada de derechos civiles, donde aprendió lo importante que era tener familia y amigos a quienes amar y compartir. Pero también vio otra vida poderosa: la de banquero infeliz, a principios del siglo XX. Sirvió como una advertencia sobre lo que puede hacer la falta de perdón.

El banquero vivía en Londres. Tenía todo lo que podría desearse: dinero, familia, trabajo prestigioso, pero estaba lleno de ira. Al observar su vida antes de la muerte en la década de 1930, Lisa informó sobre cómo su cuerpo se deterioraba, pudriéndose de adentro hacia afuera debido a toda la ira que cargaba. No fue capaz de perdonar a los demás. No fue capaz de perdonarse. Simplemente se aferró a la negatividad. El peligro evidente de esta mentalidad negativa es el deterioro del cuerpo y la creación de enfermedades. Como dijo el banquero: “Es difícil respirar porque está hueco. [La ira] se quedó allí tanto tiempo que simplemente limpió todo. También me duelen los órganos por dentro. Es una destrucción muy física. Todo parece arrugado por dentro”.

Creo que Lisa se conectó con esta vida para tomar conciencia de lo que podría crear el odio hacia su cuerpo. Pero otro peligro para ella, más sutil pero igualmente dañino, era el alejarse de la cercanía de su familia debido a problemas de alimentación y creencias sobre sí misma. Al no amarse estaba creando una barrera entre el amor de su familia por ella y su capacidad para experimentarlo.

Pregunté a Lisa qué se llevó de la vida, qué aprendió de su vida de banquero. Respondió: “Lo que sin duda impacta es el poder, la intensidad y el veneno con que la ira puede dominarnos. Sin control, puede crecer y crecer, especialmente si hay un espacio negativo en la conciencia de alguien. Si hay ausencia de amor, conexión y relaciones, la ira crecerá como la mala hierba. Creo que, por muy cautelosos que tengamos que ser con la ira, podemos ser despreocupados con el amor que tenemos. De hecho, es importante compartirlo en la medida de lo posible, sobre todo allí donde falta”.

Sabias palabras. A todos nos vendría bien meditar estas palabras y aplicar su sabiduría en nuestras vidas. Sin embargo, ¿cómo arrancamos la mala hierba de la ira? ¿Cómo permitimos que nuestro amor fluya cada vez más libre y poderoso? He descubierto que la respuesta es a través del perdón.

La ira, el resentimiento y la culpa que llevamos dentro nos afectan más que las personas con las que nos enojamos. Cuando tenemos odio, amargura y pensamientos de venganza nos hacemos daño. Esos pensamientos y energías nos debilitan. Crean enfermedades en nuestro cuerpo e impiden estar completamente presentes en el momento, sentirnos poderosos y crear las vidas que queremos. El perdón es el acto de soltar esos pensamientos dañinos. Al pasar de la culpa al amor, nos liberamos. Enviar pensamientos de amor es lo más sanador que podemos hacer. Como leerás más adelante en este capítulo, perdonar es una de las herramientas más importantes del crecimiento espiritual. Despeja el camino de todo lo que no pertenece a la vía de la ascensión a la Unidad con la Fuente.

La regresión de Lisa muestra lo importante que es perdonarnos y perdonar a los demás. También enseña algo más: que nunca es demasiado tarde para perdonar.

Trabajar con nuestras almas complementarias

Debido a que el tiempo es lineal en nuestra percepción, vemos las vidas de nuestras almas complementarias como completas y terminadas. Pero, como hemos mencionado extensamente, todas las vidas creadas por nuestra Superalma están en curso, ya sea en el mismo año, misma década o con muchos siglos de diferencia.

Todas las vidas existen simultáneamente en el momento actual en el que se lee esta frase. Debido a que las vidas continúan, la historia de una de ellas nunca está “completa”. Cada momento de cada vida está abierto a la interpretación, a nuevas posibilidades, nuevas elecciones y nuevos resultados.

Cuando los clientes visitan la vida de un alma complementaria y la describen, solo visitan una de las posibles líneas argumentales, una de las probabilidades de esa vida. Para algunos, este concepto puede ser difícil de entender. Si ese es el caso, no le dediques demasiado tiempo. Por ahora, sé consciente de que tienes el poder de enviar amor, pensamientos curativos, sabiduría y diferentes perspectivas a tus almas complementarias. Tú y tus almas complementarias compartís una frecuencia de alma similar, porque sois creaciones de la misma Superalma. Por lo tanto, tienes la habilidad innata de conectarte instantáneamente con ellas. Si has experimentado una vida traumática durante una regresión es que sólo has visto un resultado de los posibles de esa vida. Puedes comunicar a tus almas complementarias que hay otras posibilidades y otros caminos a seguir. Envíales amor. Envíales luz.

Durante la regresión de Lisa, pregunté al banquero cómo podrían haber sido diferentes las cosas en su vida. Respondió: “Pensaba que podría ser diferente si pudiera accionar un interruptor, o algo así. Tengo la sensación de que eso es posible, pero no sé cómo hacerlo”. Unos días más tarde envié un correo electrónico a Lisa y la animé a enviar sentimientos de amor y esperanza a su alma complementaria cuando medite, para que sea ella quien accione el interruptor por él. No mucho después, escuché de ella lo siguiente: “¡Tu sugerencia de enviarle energía, energía positiva y curativa, en realidad activó un interruptor en mí!

Aparentemente, mi comentario le había recordado que siempre hay un potencial que puede nacer en lo que parecería ser una historia de vida completa o finalizada. Pensamos en posibilidades que esperan materializarse solo cuando reflexionamos sobre el futuro. Pero si el tiempo es simultáneo y la vida de un alma complementaria del alma se está desarrollando actualmente, entonces una nueva elección que hagas podría crear un nuevo resultado posible para esa vida, un resultado que es diferente de la versión de esa vida de la que Lisa se había dado cuenta.

“No había pensado que necesitaba ayuda”, dijo. “Estaba pensando linealmente y consideraba que sus luchas ya no continuaban. Es gracioso lo fácil que es volver a nuestro modo de: 'Solo soy yo en mi cuerpo y eso es todo de lo que tengo que preocuparme'".

Lisa decidió enviar pensamientos de aliento y apoyo a su colega banquero. Tú también puedes en cualquier momento. Considera hacerlo mientras te encuentras en momentos tranquilos de meditación, o cada vez que pienses en esa vida. Eso es exactamente lo que hizo Tala, como veremos a continuación.

La historia de Tala

A veces, el impulso de ayudar a un alma complementaria surge espontáneamente. Mi cliente Tala no había considerado la idea de que las almas complementarias del alma se ayudaran entre sí, pero en el momento en que su alma complementaria estaba en un torbellino emocional, su sabiduría innata la orientó.

Tala estaba experimentando la vida como granjero llamado Bob, cuya amada esposa estaba muriendo. Rrogó a Dios que la salvara, pero murió. El granjero se sintió amargado y traicionado por Dios, pero también se sintió de alguna manera responsable de la muerte de su esposa. Al escuchar esto, Tala comenzó a hablar directamente con su alma complementaria sobre dejar ir, sobre el amor y el perdón:

Tala dice al granjero Bob: no hiciste nada malo. Amabas tanto a tu esposa. No hiciste nada malo. Tienes que perdonarte. Perdonar a ti mismo. ¡Por favor, hazlo para mi! ¡Hazlo para ti, Bob, puedes perdonarte. Era su momento de partir. Puedes vivir. Ella vive en ti siempre. Siempre está contigo. Ella también te quiere mucho. Y ahora lo estás sintiendo. La sientes, Bob. ¡Veo que sonríes! Ahora está bien.

Después de que salir del trance, le pregunté qué la impulsó a ayudar al granjero Bob a sanar. Simplemente dijo: “Si él sana, yo estoy sana”.

Todos hemos experimentado un momento de esperanza y luz en los días más oscuros. ¿Quién sabe? Quizás tales transiciones hayan sido provocadas por un alma complementaria que encendió el interruptor en nosotros, instándonos a perdonar, apoyándonos con su amor y sanación. Sé tú ese apoyo para tus almas complementarias. Extiende amor y bondad hacia ellos. Anímalas a perdonarse a sí mismas y a perdonar a todas los demás. Nunca sabes qué nuevas posibilidades puede crear tu energía.

La importancia de perdonarnos

Todos sabemos que es importante perdonar a quienes nos han hecho mal. Para la mayoría de nosotros es un desafío perdonar, pero una vez que lo hacemos nos sentimos más ligeros y libres. Nos da tranquilidad y la capacidad de seguir adelante con nuestras vidas en lugar de seguir siendo víctimas de las personas y las circunstancias.

La primera razón por la que el perdón es un desafío es porque asumimos que debe ser difícil. Esta es una creencia cultural: “Todo el mundo sabe que es difícil perdonar, por tanto, ¿por qué sería diferente para mí?” Elegimos aferrarnos a nuestros egos heridos, a las historias tristes que contamos, porque eso es lo que todos los demás  hacen y creemos que es lo correcto. No nos beneficia, pero lo seguimos haciendo. La solución es simple: Dite que es fácil perdonar. Esta es una buena creencia así que elige mantenerla como tu verdad. Eres originario de un lugar de Unidad, un lugar donde no tienes razón para mantenerte separado de alguien. Ya está en tu esencia perdonar, porque no hay necesidad de castigar a alguna parte de ti mismo.

La segunda razón por la que nos resulta difícil perdonar es que solo nos enfocamos en el primer paso del proceso: perdonar. Nunca nos dijeron lo importante que es, también, perdonarnos. El perdón es una moneda de dos caras. Ningún perdón es completo cuando solo nos enfocamos en perdonar a los otros.

Después de la vida como banquera, Lisa experimentó la de una adolescente llamada Kelly. Era la década de 1950, Kelly era una hermosa y “femenina” joven de 16 años con un novio llamado Jim. Trágicamente, su vida terminó demasiado pronto. Lisa vio a Kelly en la parte trasera del auto de Jim una noche en la que planeaban ir al autocine. En cambio, fueron al bosque a tener sexo por primera vez. Demasiado tarde, Kelly decidió que no quería seguir adelante y entró en pánico. Jim trató de calmarla pero ella pensó que quería forzarla. En su intento de calmarla, accidentalmente le rompió el cuello y murió.

En estado de pánico, Jim contactó al hermano de Kelly para pedir ayuda. Su hermano ayudó a Jim a enterrar el cuerpo de Kelly y mintió a los padres sobre lo que había sucedido. Nunca encontraron los restos de Kelly.

Lisa me dijo que se veía a sí misma como Kelly, ahora un espíritu incorpóreo, parada en la cocina familiar escuchando una conversación entre su hermano y sus padres. Presenciaba con incredulidad las mentiras que su hermano tejía sobre su muerte y la aparente aceptación de sus padres. Cuando escuchó suficiente, salió de la casa.

Sin embargo, sucedió algo interesante cuando cruzó el umbral de la casa. En ese momento, el espíritu de Kelly decidió perdonar a Jim, a su hermano y a sus padres. Lisa experimentó una sensación inmediata de estar más liviana. Más tarde, cuando hablé con el Yo Superior de Lisa, le pedí que contara más sobre lo que había sucedido en ese momento de perdón:

Yo superior de Lisa: A nivel espiritual, el perdón es inmediato.

Dobromira: ¿Por qué es inmediato? ¿Qué lo hace inmediato?

Yo Superior de Lisa: El Espíritu no tiene el propósito de castigar una parte de sí mismo. Y todos somos parte el uno del otro.

Cuando escuché esto me llené de júbilo. ¡Sinceramente, sentí como si un coro de ángeles estuviera cantando una melodía celestial en mi mente! El Espíritu no tiene el propósito de castigar una parte de sí mismo porque todos somos parte los unos de los otros. Por eso el perdón es instantáneo en el más allá. Un millón de pensamientos se agolparon en mi mente. Uno era un sentimiento de gratitud, por haberme ofrecido una comprensión tan profunda y esclarecedora. Otro fue el deseo de decir a la gente que es realmente importante que dejemos de lastimarnos y comencemos a perdonar.

El yo superior de Lisa continuó:

Yo Superior de Lisa: Cuando perdonas algo, se acaba por completo. Perdonar verdaderamente algo es cosa muy difícil, humana y racional. Puedes decir que perdonas a alguien pero parece que la tendencia humana es conservar una parte de [no perdonar] de alguna manera, para enseñarnos algo, para ser más cautelosos. Se dice: "Sí, te perdono, pero obtendrás lo tuyo al final" es el tipo de pensamiento. Es una tendencia muy humana. Pero cuando realmente perdonamos significa que se acabó. Lo perdonas. Has dejado de llevar algo que ya no necesitas tener contigo.

Parece algo muy simple de saber, pero en realidad es algo extraordinariamente difícil de practicar. Esa puede ser la razón por la que muchas personas oran para ser lo suficientemente fuertes para perdonar en un nivel espiritual, porque ahí es donde es más fácil hacerlo. No es que te olvides de que algo ha pasado alguna vez. Simplemente ya no llevas contigo el valor de esa cosa. Sí, algo pasó, y es parte de tu pasado. Pero perdonas a alguien, y por lo tanto no tiene un valor de “bueno” o “malo”. Está perdonado Algo sucedió, y se acabó.

Dobromira: ¿Entonces se vuelve neutral?

Yo Superior de Lisa: Sí. Y hay una gran cantidad de conexión que estás practicando. Una vez más, no se trata de verlo como una persona contra otra persona. Uno contra otro crea separación. Perdonar es realmente la pura práctica de estar conectado.

Lo que dijo el yo superior de Lisa es una clave muy importante para comprender por qué el perdón es tan poderoso. El perdón nos permite dejar ir la amargura, la ira y la culpa que nos mantienen separados. Permite conectarnos los unos con los otros. Una vez que nuestra mente comprende por qué el perdón total es tan importante, podemos dejar ir más fácilmente, y sin reservas. El perdón es verdaderamente el camino hacia la Unidad.

Lisa me dijo que cuando Kelly salía de esa escena, sintió que su energía, su espíritu, se movía a “otro nivel”. Le pedí a su Yo Superior que contara sobre eso:

Yo superior de Lisa: Por eso, cuando pasamos de una vida a otra, o incluso de un momento a otro, nuestro espíritu transporta emociones con él. El espíritu puro es la conexión con este amor más grande, sin nada más. Estas otras cosas [emocionales] son pesadez. Es sentir malestar en el estómago. Es vacío, soledad, sensación de desconexión. Cuanta más energía podamos soltar, más alto se moverá el Espíritu. Se acerca a [la Unidad], lo que desde una perspectiva humana parece malo. No queremos desprendernos de la persona que somos. Pero dejar ir todas [esas emociones negativas] es lo que te hace ser más feliz, más pleno, más conectado con todo. Al perdonar, dejas por completo esas energías negativas.

Si Kelly hubiera dejado esa vida aferrándose a la energía de la reivindicación -al odio, a la sensación de que no parecía justo-, esas energías tendrían que equilibrarse en otra vida. La imagen que tengo es la de un tarro lleno de canicas blancas. Podrías llevarte algunas negras, que representarían lo negativo. Cuando empiezas tu vida, no es del todo obvio de dónde vienen las canicas negras o por qué las retienes, pero están ahí. Y quizá con el tiempo, con la práctica, a través de cosas como esta sesión, puedas descifrarlas, darles sentido, saber de dónde vienen y soltarlas.

Dobromira: Si Lisa puede perdonar, ¿disminuirán las posibilidades de que necesite volver a conectar con esas almas en una vida futura para trabajar el perdón?

El Yo Superior de Lisa: Sí. Pero no es tan sencillo. Vuelvo a la imagen de las canicas blancas. ¿Con cuántas canicas negras llegaste a esa vida? ¿Cuántas había cuando te fuiste? Si generaste mucha positividad en esa vida, es más fácil dejar ir cualquier negatividad persistente, [en este caso] perdonar. Porque, al final, no se puede fingir. Es un momento muy honrado cuando te vas. La energía de esa vida no puede mentir sobre nada. No puede engañarse a sí misma.

El yo superior de Lisa enfatizó lo importante que era para Lisa perdonarse. Una parte de ella en realidad culpaba a su cuerpo por la forma en que había muerto como Kelly. Si no hubiera sido tan atractiva y deseable es posible que Jim no la hubiera asesinado. Así que necesitaba perdonarse a sí misma, y a su cuerpo, de la vida como Kelly. Además, Lisa necesitaba perdonarse por todas las pequeñas cosas que había guardado dentro de ella en esta vida. El Yo Superior dijo que Lisa almacenó la negatividad que tiene contra sí misma en una especie de "montón" en su interior. Ese cúmulo creó pesadez emocional y energética en Lisa.

El Yo Superior señaló un punto muy relevante: hay dos aspectos igualmente importantes en la lección del perdón. El primero es perdonar a quienes percibimos que nos han hecho daño. El segundo es perdonarnos. Las dos partes juntas permiten la liberación completa de los apegos y el regreso al amor y a la Unidad. El Yo Superior señaló que Lisa era excelente para perdonar a otras personas, ya que no guardaba rencor. Pero le aconsejó que también debía perdonarse a sí misma. Es fundamental que, en el camino de la sanación, también nos liberemos de cualquier culpa que tengamos. (El ejercicio que se encuentra en el apartado El proceso del perdón detallará cómo hacerlo).

Pedí al Yo Superior que contara más sobre la necesidad de Lisa de perdonarse a sí misma:

Yo superior de Lisa: Cuando los espíritus dejan las vidas [que experimentaron], se llevan con ellos parte de la energía emocional de esas vidas. Si bien Kelly pudo perdonar a Jim, a su hermano y a sus padres, la forma en que lo hizo fue para hacerse responsable. El trato era algo así como: "Los perdonaré y asumiré la culpa". Ella no tenía que hacer ese trato, pero es lo que sucedió en ese momento. Sintió, de alguna manera, que su cuerpo había tenido la culpa [por ser atractiva y hermosa]. Esa es la forma en la que su espíritu le dio sentido a la situación, y así fue como pudo perdonar a todos los demás tan rápido. Esos sentimientos se trasladaron a esta vida.

En el transcurso de nuestro trabajo, Lisa cortó la conexión energética con la experiencia de Kelly. Perdonarse a sí misma le permitió explorar la relación con su cuerpo. Una vez que Lisa reconoció conscientemente que la muerte de Kelly se había traducido en miedo a tener un cuerpo deseable estaba lista para elegir de otra manera. Ella creó un nuevo trato para su cuerpo, mente y espíritu. Esta nueva forma de ser le ha permitido cambiar a una realidad en la que vive desde un lugar de alegría y aprecio por su cuerpo.

Suicidio y perdón

El suicidio es un tema que surge con frecuencia, tanto en mis sesiones de regresión como en las personas que conozco cuando escuchan lo que hago. Cuando estamos considerando el perdón es importante discutir las consecuencias espirituales de quitarse la vida.

Nunca he pensado en suicidarme. Por suerte para mí, solo he oído historias de personas que han intentado quitarse la vida; no conozco a nadie que lo haya hecho. Sin embargo, las estadísticas muestran claramente que el suicidio es una vía de escape que muchos tienen en cuenta: la Encuesta Nacional sobre Uso de Drogas y Salud, de 2008 reveló que había 8.3 millones de adultos en los Estados Unidos que tuvieron pensamientos serios de suicidio en aquel año. Otros 2,3 millones habían hecho planes para suicidarse y 1,1 millones lo habían intentado. La Organización Mundial de la Salud afirma que, en algunos países, el suicidio se encuentra entre las tres principales causas de muerte entre las personas de 15 a 44 años de edad. Se estima que a nivel mundial hay entre 10 y 20 millones de intentos de suicidio cada año.

Es desgarrador leer estos números. La vida es un devenir sagrado, y al vivir permitimos que Todo-Lo-Que-Es se expanda y se conozca a sí mismo a través de la perspectiva única de nuestras vidas. Aquellos que contemplen el suicidio lo hacen porque no son capaces de ver su propio valor a los ojos del Creador. Estamos sumidos en dudas, miedos, inseguridades y la abrumadora sensación de que no hay otra opción. Y, sin embargo, ese mismo acto, la misma capacidad de poner fin a la existencia física, prueba que tenemos el control total. Controlamos no solo nuestros cuerpos sino también cómo creamos y experimentamos la vida.

Se podría argumentar que cada uno tiene derecho a suicidarse. Después de todo, ¿no es el concepto de libre albedrío un principio básico de la existencia? Sí, lo es. Somos libres de elegir vivir o morir. Sin embargo, hay una distinción muy importante entre morir, porque el tiempo de uno en el plano terrenal ha llegado a su fin, y elegir deliberadamente quitarse la vida por desesperación.

Un alma asume una nueva encarnación porque busca crear, aprender y experimentar ciertas lecciones. El alma se enriquece con las perspectivas y experiencias únicas que crea durante su tiempo en la Tierra. Mientras está en forma física, el Yo Superior de la persona sabe muy bien cuándo se han logrado los objetivos del alma. En el mismo momento en que se aprenden estas lecciones, el alma está lista para regresar a un estado de ser no físico. Incluso el acto de morir representa una oportunidad para aprender.

Lo que la mayoría de los suicidas no ven es que la muerte no es más que una transformación, una transición de un estado del ser a otro. En el momento en que el espíritu deja el cuerpo físico, vuelve a ser ilimitado. Recuerda por qué elegiste las circunstancias de esta vida y ve, claramente, lo importante que era enfrentar esos desafíos en lugar de huir. Entiende que al alejarte de la realidad física, no has cumplido con las elecciones que hiciste antes de encarnar. Como resultado, el alma suele reencarnar, casi inmediatamente, en una situación similar a aquella de la que escapó.

Cuando las emociones difíciles nos atormentan la verdadera respuesta es liberar esas emociones, perdonarnos y perdonar a los demás. La sesión que tuve con una cliente llamada Tamara ejemplifica por qué es importante sanar emocionalmente a través del perdón.

Tamara era mujer muy atractiva que se comportaba con gracia y elegancia. Creció en Los Ángeles como hija de inmigrantes y su familia tuvo algunas dificultades. En su adolescencia descubrió lo fácil que era mitigar el dolor de sus miedos, problemas e inseguridades, con drogas y alcohol. Su vida comenzó a girar en torno a la fiesta y el rock and roll, y antes de darse cuenta habían pasado algunas décadas. Con una actitud muy práctica me dijo que era drogadicta. Mencionó la heroína, la marihuana y la metadona, pero dijo que eran cosas del pasado.

Unos meses antes de venir a verme su vida había cambiado drásticamente. Se había mudado a otra ciudad, lejos de familia y amigos. Las drogas y el alcohol ya no le atraían. Se estaba abriendo a conocerse y perdonar. Estaba entusiasmada con su crecimiento y había programado una sesión conmigo porque quería dar sentido a todo.

Durante la regresión, Tamara experimentó una vida en la que era un joven que decía abiertamente su verdad. Era valiente y no le importaba lo que pensaran los demás. Como resultado de sus creencias fue condenado a cadena perpetua. La prisión era una cueva oscura y húmeda, y no podía imaginar pasar el resto de su vida en ese lugar. Para escapar, usó las cadenas que rodeaban sus brazos para estrangularse.

Cuando hablé con el Yo Superior de Tamara, le hice algunas preguntas sobre el suicidio:

Dobromira: ¿Qué le sucede a la gente cuando se suicida?

El Yo Superior de Tamara: Tienen que volver y vivir en el “infierno”, y no suicidarse, para continuar con la vida. Tienen que pasar por sus problemas, sus retos. Tienen que aprender. Tienes que aprender. Tienes que pasar por eso. Tienes que pasar a través de ello. Tienes que aprender todo. Y tienes que dejarlo ir. Y ese es todo el asunto.

Dobromira: ¿Serían similares esos problemas a los de la vida en la que la persona se suicidó, o serían diferentes?

Yo superior de Tamara: Serán diferentes [en la superficie], pero la semilla estará allí. El mismo problema se presentará en una forma diferente. Es sólo que la lección tiene que ser aprendida. Y esa lección no fue aprendida.

Pregunté al Yo Superior por qué había revivido esa vida en particular, y respondió: “Escapar no es la respuesta. No puedes escapar. No puedes pensar que puedes escapar de tu destino, de lo que te toca vivir. Te seguirá hasta que lo resuelvas.

Luego pedí consejo sobre cómo Tamara podría perdonarse, perdonar a los demás, y seguir adelante con su vida. “Mirándolo”, fue la respuesta. “Al sentirlo. Al vivirlo. Al resolverlo. Y luego dejarlo ir. Eso es lo que tú haces. Esos son los pasos”.

El Yo Superior reconoció que aprender la lección de no escapar, sino vivir su verdad, no había sido fácil para Tamara. Sin embargo, era alentador que ahora estuviera en el camino correcto.

Vivimos en un Universo benévolo. Nuestro Creador es la esencia del amor puro e incondicional. Nos ama tanto, a cada uno de nosotros, que en su amor nos permite olvidar cuánto somos amados. En su amor por nosotros nos permite experimentarnos como olvidados, descuidados y menos que perfectos si elegimos conocernos de esa manera. Pero siempre somos amados y apoyados, sepámoslo o no.

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Si es cierto que somos atemporales y tenemos toda la eternidad para reencarnar en tantas vidas como necesitemos hasta dominar nuestras lecciones a satisfacción, entonces la pregunta es: ¿Por qué suicidarse? Sabiendo que terminar con tu vida en realidad no terminará con tu sufrimiento, estando garantizado casi al cien por cien que elegirás presentarse a circunstancias similares a las que trataste de evitar, tendría más sentido enfrentar esos desafíos lo mejor que puedas ahora mismo.

En los momentos más oscuros, cuando nada más parece ayudar, anímate y pronuncia este tu mantra: "No siempre será igual". Esto es lo que mi padre, Manol Pasliev, solía decirme para animarme cuando las cosas no pintaban bien. Fue muy sabio dándome esperanza al recordarme que el cambio es lo único permanente en la vida.

El alma es eterna. Incluso si el suicidio es algo que nunca consideraste, te pido que compartas estas ideas con amigos y familiares. Juntos podemos disipar la oscuridad del tabú y traer luz a los millones de personas que necesitan escuchar que el suicidio no es la respuesta. Pero el poder de esta lección va más allá del cambio directo en el pensamiento sobre el suicidio. Nos permite sentirnos poderosos en todos los aspectos de la vida.

La verdadera clave para transformar cualquier situación desagradable en la que te encuentres es perdonar. El perdón permite comprender que no eres víctima; no eres una persona que no tiene poder sobre tu vida. Permítete conocer tu magnificencia. Sabes que eres muy, muy poderoso en este momento, incluso si te enfrentas a circunstancias que no te gustan tienes el poder de cambiar tu vida sin dañarte, ni dañar a los demás.

Un enfoque ilustrado del perdón

Cuando ocurre algo perturbador, es natural querer expresar el dolor. Te animo a hacer todo lo que puedas para mejorar la situación y curar del dolor, desde tomar medidas para detener el mal, hasta buscar ayuda profesional, o compartir y expresar tus sentimientos de manera que lo libere. Pero también sugiero algo que quizás no hayas considerado: separar la acción de la persona que la llevó a cabo. Condena la acción pero no condenes a la persona que te causó daño. Porque cuando condenas a la persona, contribuyes a la experiencia de la separación. Recuerda lo que dijo el Yo Superior de Lisa: “El Espíritu no tiene el propósito de castigar a una parte de sí mismo. Y todos somos parte el uno del otro”. El perdón es una herramienta de limpieza que te permite regresar a la Unidad, y a tu lugar de paz interior.

Libera el dolor, corrige cualquier error que puedas, pero no busques pelear o atacar a la persona. En lugar de eso, trata de entender su motivación. Sabes que, en el fondo, cualquier mala acción se deriva de un sentimiento de impotencia, de incapacidad de crear lo que deseamos sin lastimarnos ni lastimar a los demás. La persona que te hizo daño también es un alma que está aquí, en la Tierra, para aprender. Busca en ti para ver lo pequeña y asustada que está ese alma, y cómo ella también se aferra a historias llenas de falta de perdón. Comprende lo que la motivó, no para excusarla por lo que hizo, sino para poder sentir compasión por ella.

Una vez que encuentras compasión, la persona que te hizo daño ya no el monstruo grande y aterrador con quien luchar. Es un niño pequeño y asustado que no sabe cuán poderoso es. Una vez que sientes compasión por alguien, estás a solo un centímetro de perdonarla por completo y luego, simplemente, dejarlo ir. Perdona no porque la otra persona merezca ser perdonada sino porque tú mereces estar en paz. Perdona porque te amas más que amas la necesidad de estar “bien”.

Ahora me gustaría compartir tres frases cortas de mi maestra Dolores Cannon. El poder de estas palabras, cuando se expresan con intención, es inmenso:

Te perdono. Te libero. Te dejo ir.

Para perdonarte a ti mismo, puedes agregar otra parte: me perdono. Así, el mantra se convierte en:

Me perdono. Te perdono. Te libero. Te dejo ir.

 

Memoriza estas palabras. Hazlas tu oración y utilízalas todos los días, en cada situación. Si surge algo perturbador, no dejes que eso se quede dentro de ti atrayendo más y más de las mismas experiencias. Instantáneamente pronuncia este pequeño mantra y elige soltar y dejar ir en el momento.

Otra oración que amo, por su poder para cambiar universos energéticos, me la dio Tabaash, un maestro espiritual que canaliza Blair Styra. Uso esta oración con los clientes que necesitan perdonarse y perdonar a los demás. Si el tema en el que estás trabajando es el perdón, escribe esta oración en papel y llévala contigo. De vez en cuando sáquela y léala. Incluso el simple hecho de ver la oración cuando abres el papel, sabiendo que siempre está contigo, te anclará en tu realidad preferida.

Esta es la oración especial de Tabaash:

 

Desde el Señor Dios de mi ser

vacío mente, cuerpo y espíritu de todo lo que me limita,

de todo a lo que estoy apegado, que no me sirve,

de todo aquello a lo que soy adicto, que no me beneficia.

Pido perdón a todas las personas a las que he hecho daño en mi vida,

en cualquier vida, de cualquier manera.

Perdono a todos los que me han hecho daño en mi vida,

en cualquier vida, de cualquier manera.

Y me perdono por todas las formas en las que me he lastimado,

por todas las veces que no presté atención en mi vida,

en cualquier vida, de cualquier manera.

Y ahora elijo estar en paz siempre,

de todas las maneras

Que así sea


Ejercicio: El proceso del perdón

Este ejercicio es útil cuando hay alguien en tu vida que sientes que te ha hecho daño. El primer paso es explorar otras conexiones de vida que hayas tenido con esta persona, para tratar de entender de dónde procedían sus motivaciones. Una vez que comprendes el tapiz que has tejido con esta persona a lo largo de las diferentes vidas, es mucho más fácil extender el perdón.

La primera parte de este proceso requiere que usted mismo retroceda. Para hacerlo, puede usar el modelo de regresión que se incluye en el Apéndice A. Puedes grabarte leyendo el guión y luego reproducirlo, o puedes hacer que un amigo cercano y de confianza sea tu regresionista y lea el guión por ti. También puedes optar por utilizar la grabación de regresión guiada que forma parte de mi conjunto de CD, Sanación a través de la regresión a vidas pasadas... y más allá (consulta la sección Recursos adicionales).

Cuando estés listo para explorar tus vidas pasadas, tómate al menos 40 minutos de tiempo ininterrumpido. Ten tu diario a mano para que puedas reflexionar y compartir después. Antes de comenzar, establece la intención de explorar una vida que te ayude a comprender el desafío que tienes.

Reproduce la grabación y confía en que se te presentará, exactamente, lo que necesitas. Si la regresión trae a colación una experiencia catártica, permítete tiempo para integrar lo que se revele. Si brotan lágrimas, permite la expresión de esa emoción. Después de la regresión, es posible que desees escribir o tomarte tiempo para reflexionar, bañarse o beber un poco de agua. Escucha tu intuición y sé amable contigo. Puedes optar por hacer la regresión, y el siguiente paso del proceso, como se describe a continuación en el mismo día o en días diferentes. Cualquiera que sea la opción que elijas, confía en tu guía interior.

A continuación, crea un entorno para que puedas continuar con este importante trabajo. Es posible que desees encender una vela, quemar un poco de incienso, reproducir música suave o sostener tu cristal favorito. Siéntate en un lugar cómodo y tranquilo. Date al menos 20 minutos. Asegúrate de tener las dos oraciones dadas anteriormente en este capítulo: el mantra del perdón y la oración especial de Tabaash. Tómate tu tiempo mientras sientes y observa cada paso de este proceso.

Primero, cierra los ojos e imagina que el amor incondicional de la Fuente está entrando poderosamente por la parte superior de tu cabeza. Limpia tu mente y tus patrones de pensamiento de la necesidad de aferrarte a viejas historias. Siente este amor Divino recorriendo todo tu cuerpo, liberando los recuerdos almacenados en las células del cuerpo y limpiando tu campo energético. A través de tu imaginación, concentra ese amor incondicional de la Fuente alrededor de tu corazón. Siente cómo infunde, como penetra el corazón. Siente cómo lo sana. Di en voz alta: “Me perdono. Te perdono, ______." En el espacio en blanco, inserta el nombre del perdonado. Dilo con intención. Puedes elegir decirlo unas cuantas veces más hasta que sientas, profundamente, dentro del corazón, que te has perdonado.

Ahora, imagina a la persona que quieres perdonar parada frente a ti. Siente cómo el poderoso rayo de luz y amor Divino se extiende desde tu corazón y se conecta con el de él. Si hay algo que te gustaría decirle para cerrar la ocasión, di las palabras. Expresa tu compasión en voz alta. Agradécele por llevarte a un lugar mejor en tu vida, por enseñarte lo fuerte que eres. Luego, respira hondo y di en voz alta:

Te perdono. Te libero. Te dejo ir.

Pronuncia cada palabra con intención. Repítelas varias veces si lo deseas.

Ahora, vea a esta persona siendo absorbida por la Luz, desapareciendo en la Luz. Toma una respiración profunda y siente la claridad y la expansión que se ha creado dentro de ti.

Para completar este proceso, recita lentamente, en voz alta, la oración especial de Tabaash. A medida que pronuncias cada palabra, dila en serio. Cuando hayas terminado, toma una respiración profunda y sabiendo que es así. Este es tu nuevo estado de ser: más libre y más claro.


El perdón es libertad

Mientras escribía este capítulo tuve una sesión con una mujer llamada María. Se vio rodeada por su grupo de almas y, por primera vez en su vida, sintió cuán profundamente pertenecía. Las lágrimas rodaron por sus mejillas al ver cuánto la amaban. El grupo de almas de María le dijo que su único propósito en la vida es ser ella misma, irradiar amor a quienes la rodean. Desafortunadamente, su falta de voluntad para perdonar se interponía en el camino de María para que brillara intensamente y le impedía deshacerse de su exceso de peso. La necesidad de perdonar le fue transmitida con gran énfasis.

El grupo de almas dijo: “Tú sabes cómo perdonar. Cuando perdonas liberas la luz dentro de ti. Al aferrarte a [los errores del pasado], bloqueas tu creatividad. Bloqueas tus habilidades y conocimientos. Cuando perdones, abrirás la luz para todos los demás”.

“Una vez que perdones, todas las barreras y bloqueos se liberarán. El perdón cambia la vibración. Las vibraciones más altas abren espacio y posibilidades. La ira y el odio son energías grises y densas. El perdón libera. Limpia Cuando perdonas, cambias tu energía y brillas. Además, cambias tus relaciones con las personas. Te vuelves libre para seguir adelante. Ya no estás apegado a las personas y las circunstancias. Si aún no los has perdonado, los arrastras como cadenas a tu alrededor. Cuando perdonas, se abre espacio y nuevas oportunidades porque pasas a una nueva dimensión, y te liberas como si volaras en globos, como en la película Up! (Esta es una película animada sobre un hombre que convierte su casa en una aeronave levantada del suelo por miles de globos de helio).

Mis sesiones anteriores con Lisa también me dieron una comprensión más profunda de por qué el perdón es tan importante. La experiencia de Lisa como Kelly me reveló que el perdón es una de las prácticas espirituales más importantes que tenemos. No estar dispuesto a perdonar nos impide ser uno con Todo-Lo-Que-Es y ascender en el crecimiento de nuestra alma. El perdón es una herramienta de limpieza en nuestro camino hacia la Unidad. Crea una sensación de profunda paz y libera nuestra creatividad, permitiendo el mayor potencial en nuestras vidas.

Una de las nuevas posibilidades que aparecen cuando nos liberamos de la ira, la culpa y el odio es la oportunidad de jugar con el tiempo. El conocimiento de que la existencia es simultánea trae consigo algunas implicaciones muy interesantes sobre lo que es posible en la vida. Exploraremos estos temas en el capítulo siguiente. Esta información abrirá puertas a nuevas dimensiones en tu mente; es como si te encontraras en un mundo de maravillas y comenzaras a relacionarse con todo de manera nueva.

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CAPÍTULO 7. PUEDES JUGAR CON EL TIEMPO

Tú y yo procesamos los sucesos de nuestras vidas en términos de tiempo lineal. Pensamos en las cosas que sucedieron ayer, hace un mes o hace un año como “el pasado”. Hacemos planes de vacaciones y programamos citas para momentos específicos en “el futuro”. Esto es lógico. Todos sabemos que el tiempo se desarrolla como una progresión que va del pasado al futuro, ¿verdad? Esta es una de las pocas cosas en las que toda la humanidad puede estar de acuerdo. Entonces, si todos creemos que el tiempo fluye progresivamente, y asumimos que esto es un hecho indiscutible, ¿cómo es posible que el tiempo también sea simultáneo?

Los físicos nos dicen que el pasado, el presente y el futuro son el mismo momento. Alberto Einstein apoyó la simultaneidad de la existencia y rechazó la separación que experimentamos de un momento a otro. Cuando un amigo cercano suyo, Michele Besso, falleció, Einstein escribió esto en una carta a la familia de Besso: “Ahora se ha ido de este extraño mundo un poco antes que yo. Eso no significa nada. Las personas como nosotros, que creemos en la física, sabemos que la distinción entre pasado, presente y futuro es solo una ilusión obstinadamente persistente”.

Las palabras de Einstein nos alientan a entender que los sucesos pasados ​​no se han ido y perdido para siempre en el éter, sino que existen y suceden en el momento presente. Del mismo modo, todos los sucesos futuros ya están aquí también. Lo que experimentamos como un flujo de tiempo objetivo es simplemente un espejismo. La Fuente no experimenta el tiempo; sin embargo nosotros, en el plano terrenal, lo experimentamos como muy estructurado y rígido en su desarrollo. ¿Cómo conciliamos las dos experiencias?

El tiempo no necesita ser existente o inexistente. Aunque desde la perspectiva de la Tierra parece exclusivo, la naturaleza del tiempo es en realidad inclusiva. El tiempo es simultáneo y lineal. Existe no sólo en el tiempo, sino también en el no tiempo. Además, existe en el espacio entre los dos, donde la existencia del tiempo varía, dependiendo de cómo lo mires. El punto de vista desde el que observas los sucesos determina cómo percibes el flujo de esos sucesos en el tiempo.

El tiempo es una construcción que nuestra conciencia colectiva ha acordado: es una de las reglas del juego aquí en la Tierra. Sirve como herramienta de creación, porque ayuda a definir los límites de nuestro patio de recreo. Simultáneamente, cada uno de nosotros crea tiempo en nuestra conciencia. Al hacer esto, reforzamos el convenio colectivo del tiempo. Dicho esto, todos nos quedamos sin tiempo en alguna ocasión. Decimos: "El tiempo vuela cuando te diviertes". Tales experiencias confirman que el tiempo es un filtro que imponemos a nuestra conciencia.

Cuando jugamos con un niño, leemos un libro agradable o tenemos una gran conversación con un amigo, la construcción del tiempo parece desvanecerse. En esos casos existimos completamente en el momento presente, enfocados en la alegría y la realización del ahora. Estamos tan concentrados en lo que nos hace sentir bien que creamos poco o nada de tiempo. Luego, una vez realizada esa actividad, miramos el reloj y decimos: “¡Dobromira qué hora es!”. En ese momento volvemos rápidamente a la comprensión colectiva del tiempo.

Tiempo y Creación

Tan rígido y limitante como es el tiempo, también tiene un gran propósito. Nos permite experimentar el proceso de creación. Piensa en todos esos casos en los que el deseo de tu corazón demora en llegar a ti. ¡Qué frustrante y desalentador es eso! Por supuesto, sería fabuloso poder cumplir todos los deseos en un instante, ¿verdad?

En aquellas dimensiones de la existencia donde el tiempo no es un factor, la creación es instantánea. Te puedo asegurar que tu alma ha creado universos en un instante. En esas dimensiones entre vidas, cuando estamos en forma espiritual, simplemente podemos pensar en algo y lo tenemos. Pero en esta dimensión terrenal, la creación instantánea requiere un verdadero maestro. Se necesita un maestro para combinar hábilmente las piezas de visión, deseo, guía, acción y entrega en una sola creación. Te invito a reflexionar realmente sobre la importancia de estas palabras. Elegiste encarnar en un lugar con grandes restricciones, siendo el espacio y el tiempo solo dos de ellas. También es un lugar lleno de potencial para la negatividad palpable. Sin embargo, viniste aquí porque conocías tus fortalezas y tus habilidades. Eres un verdadero alquimista que, a través de la fuerza del amor, encuentra el camino alrededor de cualquier limitación. Date un guiño de reconocimiento. Lo estás haciendo absolutamente genial.

Una vez que reconocemos cuán verdaderamente poderosos somos, el proceso de creación se convierte en un viaje placentero. El espacio y el tiempo son regalos que hay que atesorar. En el espacio y el tiempo entre el deseo y la manifestación, te conviertes en el sueño. Te conviertes en la realidad que soñaste. Te conviertes en una coincidencia vibratoria con tu deseo a través de cada encuentro en tu vida. A través de cada interacción con cada persona, a través de la experiencia de cada suceso, te aclaras constantemente lo que prefieres y eliges manifestar. Te vuelves más tú mismo, y ese es el propósito de tu existencia.

En la dimensión de tu alma, todo el pasado, el presente y el futuro se mezclan en un ahora atemporal. En ese nivel, la conciencia experimenta todas sus diferentes creaciones en el mismo momento, cada una desde una perspectiva diferente. Tu alma no está sujeta al espacio y al tiempo. El espacio y el tiempo existen dentro de la conciencia que los crea.

Has decidido proyectarte en este momento particular de la Tierra debido a los emocionantes cambios que están ocurriendo. La gente está despertando a través del estudio de ideas metafísicas y la exploración de su conciencia. Ya no buscamos la Luz en casos esporádicos, singulares, como pequeñas luciérnagas parpadeando en la noche. Millones y millones de nosotros exploramos abiertamente nuestra espiritualidad. Se está produciendo un cambio dimensional en nuestra conciencia colectiva. Vinimos a la vida en la Tierra en este mismo momento para participar y ayudar en esta exuberancia creativa.

Nuestra comprensión newtoniana del tiempo y el espacio, que dice que el tiempo y el espacio son aspectos independientes de la realidad objetiva, ha servido para reforzar la noción de separación durante siglos. Pero estos son otros tiempos. Nos estamos moviendo hacia una realidad de mayor armonía, amor y bienestar, donde operamos desde un reconocimiento consciente de nuestra conexión aquí, en la Tierra. Estamos eligiendo salir de las viejas limitaciones y expandirnos más, buscando intencionalmente comprender y nutrir nuestra relación con la Fuente. Por eso es importante darnos una nueva interpretación de nuestra experiencia del tiempo en la Tierra, para que podamos borrar más fácilmente las fronteras mentales de nuestra separación. Cuando nos sintonizamos con la Unidad de todo, naturalmente permitimos que la rigidez del tiempo se suavice. El tiempo se vuelve como la arcilla: podemos estirarlo, comprimirlo, moldearlo,

Un cambio en el pensamiento

Hasta este momento del viaje humano, el tiempo ha sido una regla del juego de la separación. Ha ayudado a mejorar nuestra experiencia de separación de Todo-Lo-Que-Es. Al imponer el filtro de la linealidad en nuestra conciencia, nos hemos alejado de la naturaleza simultánea e instantánea de la Fuente. Este enfoque basado en la separación para crear la realidad es un enfoque válido; al imponernos el tiempo hemos aumentado enormemente las formas en las que la Fuente se conoce a sí misma. Pero como ocurre con todas las cosas, el crecimiento se produce a través de cambios de perspectiva.

Estamos comenzando a reconocer un fuerte anhelo dentro de nosotros, un anhelo de crecimiento, expansión y conexión. Queremos experimentar el sentimiento de ser amados y apoyados incondicionalmente. Anhelamos volver al Uno y conocerlo como si fuera la primera vez. Para hacer esto, mientras aún estamos en nuestros cuerpos físicos, debemos dejar atrás los patrones de pensamiento tradicionales sobre el tiempo y el espacio. El tiempo no es un hecho, así que míralo como la herramienta que es. Sabes que se origina dentro de tu conciencia; como tal, tu eres su maestro. Comienza a cuestionar todas tus creencias sobre el tiempo. Permite que los bordes nítidos y claramente definidos del "tiempo" se suavicen.

Este simple, pero muy profundo cambio de pensamiento, puede marcar una gran diferencia. Saber que puedes jugar con el tiempo te empoderará, permitiéndote conocerte como el creador que eres. Cuando aceptes esta nueva definición del tiempo, tu vida se volverá mágica. Los límites de lo que es posible se expandirán. Cuando hagas esto, comenzarás a experimentar la Unidad de Todo-Lo-Que-Es y la existencia simultánea de todas las cosas.

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Hay algo tan emocionante y maravilloso en los momentos en que los sucesos, causalmente no relacionados, se unen perfectamente en el tiempo. Las sincronicidades son una representación de la naturaleza holográfica del Universo, donde todo es lo mismo, experimentado desde diferentes puntos de vista por diferentes aspectos de Todo-Lo-Que-Es. Las sincronicidades son nuestro recordatorio de que todas las cosas existen, se desarrollan y se manifiestan en el mismo momento de tiempo. Cuanto más vivimos en el momento presente, más frecuente se vuelve nuestra experiencia de sincronicidad.

Recientemente volé de Nueva York a San Diego para reunirme con algunos amigos. En la mañana de mi llegada mis amigos conducían desde Los Ángeles. No tenía ni idea de a qué hora llegarían allí; sólo dijimos que nos encontraríamos en el hotel. Cuando mi avión se estacionó en la puerta de desembarco les envié un mensaje de texto diciéndoles que había aterrizado y preguntándoles si habían llegado. Diez minutos después, mientras me dirigía a la salida del aeropuerto, sonó mi teléfono.

“Tomé el teléfono para llamarte y vi tu mensaje”, dijo mi amigo. "¿Ya estás en un taxi?"

"No. Voy en camino a tomar uno”.

“Lo creas o no estamos a un par de minutos del aeropuerto. Podemos pasar a por ti”.

Tales sincronicidades se han convertido en el sello distintivo de mi vida. Estoy segura de que tienes más de unas pocas buenas historias de momentos en los que la vida juntó las piezas del rompecabezas sin esfuerzo para ti. Es asombroso pensar cuán brillante es la fuerza organizadora del Universo. Solo en este simple ejemplo había tantas partes que tenían que unirse al unísono. Mis amigos tuvieron que irse de Los Ángeles en el momento justo; el tráfico en la autopista tenía que ser el correcto; mi vuelo tenía que salir de Nueva York sin retrasos; mis amigos tenían que estar a pocos minutos del aeropuerto; y llamarme antes de que tomara un taxi. Si hubiera planeado que estos sucesos coincidieran dudo que lo hubiera hecho tan bien. ¡Qué orquestación tan fascinante requirió este pequeño suceso!

Cada momento de nuestras vidas está tan brillantemente orquestado. Todo existe en este momento, ahora, para apoyarte y mejorar la persona que eres. Conoce que todo el Universo está conspirando para darte exactamente lo que necesitas en el momento en que lo necesitas. Todo lo que tienes que hacer es confiar y prestar atención. Confía en que lo que necesitas estará allí en el momento perfecto. Además, escucha tu intuición y mantente alerta para que puedas reconocer la información, la ayuda y las respuestas, cuando se te presenten.

Tiempo perfecto

Una forma de jugar con el tiempo es dejar de enfocarse en el "tiempo" basado en el reloj y colocarlo en el concepto de "tiempo". Comienza reconsiderando la creencia de que las cosas deben suceder en un momento dado. En el gran esquema de las cosas, el momento de cualquier suceso siempre es perfecto, independientemente de si coincide o no con tus expectativas.

Llegar “a tiempo” solía ser muy importante para mí. De hecho, solía enorgullecerme de ser puntual. Pensé que la puntualidad demostraba que yo era persona seria y confiable. También que llegar a tiempo a las reuniones expresaba el respeto que tenía por la persona con la que me reunía. No hace falta decir que solía irritarme cuando la gente llegaba tarde a nuestras citas. En aquellos días yo también solía usar un reloj. De hecho, tuve bastantes de ellos. Algunos eran de ocasión y otros elegantes; los usaba como joyas.

Entonces algo sucedió. No estoy muy segura de lo que fue pero, de repente, me convertí en exactamente lo contrario. ¡En el tipo de persona que no me gustaba antes! Llegaba tarde a todas las reuniones y acontecimientos. Ya no usaba reloj. (Francamente, no tengo idea de adónde fueron a parar todos mis queridos relojes). Afortunadamente, cada vez que me reunía con amigos o familiares tenía la excusa conveniente (y verdadera) de que llegaba tarde a causa del trabajo. Aunque nadie me regañaba por llegar tarde vivía con ansiedad casi permanente. Siempre tenía prisa y me sentía culpable por hacer que otros me esperaran.

Antes, llegar a tiempo creaba rigidez y ansiedades. Me impedía experimentar plenamente el placer de cada momento porque tenía que ser muy consciente del tiempo. Sin embargo, estar estresada porque llegué tarde y fuera de tiempo tampoco era buen lugar para estar. Sabía que tenía que haber una tercera vía, una que me permitiera relajarme en la alegría de cada momento y llegar a tiempo a todas las reuniones.

Tan pronto como pedí ayuda a mi Ser Superior con esto, mi comprensión del tiempo comenzó a expandirse. Reconocí que el tiempo no es algo fuera de mí con lo que deba medirme. Yo soy el que crea el tiempo en mi conciencia. Por lo tanto, puedo manipularlo. Debido a que mi creación del tiempo está naturalmente sincronizada con la creación del tiempo de todos los demás, sabía que tenía un reloj interno en el que podía confiar. Debido a que el mecanismo del tiempo ya estaba en su lugar dentro de mí, todo lo que tenía que hacer era dirigirlo de manera diferente.

Coloqué mi intención en tener un tiempo exacto. Elegí salirme del tiempo y caer en el momento oportuno. Creé un mantra: mi sincronización siempre es perfecta. Mi tiempo siempre es correcto. Empecé a repetirme esta afirmación. Mientras elegí afirmar la verdad de ello, el mundo confirmaba su validez dondequiera que mirara.

Ahora experimento cada momento al máximo. En las ocasiones en que llego tarde a las reuniones mi sincronización sigue siendo perfecta. ¡A menudo la otra persona también se retrasa! Eso es exactamente lo que sucedió en una tarde reciente. Iba a tener una reunión importante que esperaba con emoción y un poco de ansiedad. Solo pude programar una hora para la cita, por lo que no tenía tiempo de sobra para llegar al lugar de la reunión. Siendo mi yo maravilloso, me tomé todo el tiempo del mundo para prepararme. Cuando salí de casa, miré el reloj de mi teléfono móvil y con horror reconocí que llegaría al menos 30 minutos tarde. Aumenté frenéticamente mi ritmo mientras caminaba hacia la estación de metro.

Un segundo después sonó mi teléfono, y era la persona con la que tenía que reunirme. Me dijo que llegaba tarde y que tardaría aproximadamente 30 minutos en llegar. Después de colgar, disminuí el ritmo. Con alivio y un poco de descaro me recordé: “¡Ves, Mira! Mi sincronización siempre es perfecta. Mi momento siempre es el correcto”.

Al día siguiente tuve otra oportunidad de crear magia en torno a la idea del tiempo. Iba de camino a otra reunión y, por supuesto, llegaba tarde. La reunión comenzó a las 9 de la mañana y yo iba a estar allí a las 9 y cuarto, como muy pronto. Nuevamente, era una reunión importante y quería llegar a tiempo.

Cuando salí de mi edificio y me dirigí a la estación de metro, me recordé que yo creo mi realidad. Me dije a mí misma que soy capaz de comprimir el tiempo y usar mucho menos para viajar de lo que normalmente se necesitaría para llegar al lugar de reunión. En lugar de llegar 15 minutos tarde, que era la trayectoria en la que me encontraba, decidí que quería llegar 15 minutos antes. Eso significaba que tenía que acomodar 30 minutos adicionales que no tenía físicamente. Simple y claramente me dirigí a mí misma para estar allí a las 9 menos cuarto. Me recordé que no hay causalidad ni continuidad entre momentos separados y distintos del "ahora".

Mientras viajaba a mi destino, evité mirar los relojes de mi alrededor. De esa forma no podía confirmar si mi plan estaba funcionando y no tenía que lidiar con ninguna posible duda. Pero cuando llegué, miré mi teléfono y listo: eran las 9 menos cuarto. En ese momento sentí la dulce sensación de triunfo y éxito.


Ejercicio: Tómate tu tiempo.

Este ejercicio es diferente a los otros. Está destinado a brindar tu experiencia única, en lugar de someterte a un proceso. En lugar de darte pasos, quiero implicar tu intuición y tu guía interna.

Comienza por preguntarte en qué áreas de tu vida te gustaría mejorar la sincronización. A continuación usa mi pequeño mantra, Mi sincronización siempre es perfecta. Mi tiempo siempre es correcto. Repítelo una y otra vez. La clave para experimentar tu habilidad de manipular el tiempo es confiar en ti mismo. Una vez que te hayas dirigido a ti mismo para tener el tiempo perfecto, así será. Luego observa cómo tu nueva creencia acerca de tu tiempo se convierte en la fuerza organizadora de tu vida. Al mismo tiempo, esto asegurará que seas puntual y que tengas tiempo para todo lo que necesites.

Viajar, como se ejemplifica en historias anteriores de este capítulo, es una manera fácil de comenzar a experimentar con la manipulación del tiempo.

También quiero animarte a que dejes de llevar reloj. Para aquellos que están profundamente apegados a sus relojes y para quienes tal idea raya en la locura, intenten pasar un día sin reloj. Te dará la oportunidad de familiarizarte con tu tiempo interior y de abrirte a confiar en él. No tienes que preocuparte por saber qué hora es. Tu teléfono móvil no te dejará olvidar, y si lo hace, hay muchos extraños que, con gusto, te dirán la hora si les preguntas. La recompensa por no tener reloj en la muñeca es la experiencia de la liberación. Te liberarás de los confines de la rigidez y permitirás que tu yo natural siga sus instintos para fluir fácilmente con la energía de tu Fuente eterna.

Debido a que el tiempo es un aspecto de todas nuestras experiencias, puedes aplicar la idea de tener un momento excelente para cualquier cosa que te proponga lograr. Podría ser tan pequeño como presentarte en tu cafetería favorita y descubrir que no hay fila, o asar el pavo de Acción de Gracias sin cronómetro. Podrías aplicar este principio a la compra y venta de acciones en los momentos precisos que te asegurarían recibir la mayor ganancia. Las decisiones importantes, como el lanzamiento de un nuevo producto o la venta de la empresa familiar, también se beneficiarán de la intención de lograr el momento perfecto.

Acércate a la manipulación del tiempo con el juego y la curiosidad de un niño. Es una forma divertida de conocerte a ti mismo como el poderoso creador que eres.


El poder del presente

Si Einstein tiene razón en que la distinción entre pasado, presente y futuro es solo una ilusión obstinadamente presente, ¿por qué nuestros sentidos no lo confirman? La respuesta está en la forma en que hemos sido educados para procesar el mundo. Nos han condicionado a pensar en consecuencia desde que éramos bebés. Si pasa más de unos minutos con un niño que está comenzando a explorar el mundo, escucharás a sus padres decir: “No hagas eso, porque”, una y otra vez. Las consecuencias siempre son claras: si haces esto, resultará algo definitivo. Se nos da un marco de pensamiento de causa y efecto. Entonces, desde el momento en que comenzamos a aprender el idioma y a existir en el mundo, se nos enseña a organizar la información de manera lineal. Vemos cómo un suceso fluye hacia el siguiente. La creencia en causa y efecto se expande a medida que crecemos y nos involucramos más con el mundo. Se vuelve natural para nosotros pensar que lo que fue, crea lo que es.

Ahora que, como adulto, tienes la capacidad de elegir conscientemente cómo ves el mundo te invito a deshacerte de la cadena de causalidad. Considera esto: El pasado no crea el presente. El presente crea el pasado y el futuro.

El presente es el único momento en el que tienes el poder de manifestar. Como dice Seth, “El presente es el punto de poder”. No estás a merced de desafortunados sucesos pasados ​​que no se pueden cambiar. No hay conexión entre los momentos. Todos los momentos de tu pasado y todos los momentos de tu futuro existen simultáneamente en el presente. Cuando miras hacia atrás, tu mente, según lo dirigido por tus creencias, analiza los sucesos y elige aquellos que se ajustan al resultado que busca afirmar. Cómo te sientes actualmente cambia los matices, los detalles y las lecciones de las historias de tu vida. Cada lectura diferente de un suceso es una realidad diferente.

Ninguna historia de tu pasado está grabada en piedra. Estás reorganizando constantemente tu pasado en función de tu interpretación actual del mismo. Decimos que los recuerdos cambian y se desvanecen. De lo que no nos damos cuenta es de que cada recuerdo, como pensamiento que tenemos ahora, es nuestra interpretación de un pasado posible. De manera similar, cada pensamiento que tienes en el presente altera tu camino a través de los futuros posibles que vas a experimentar.

Pero, ¿cómo es posible que el presente no sea efecto del pasado? Al fin y al cabo, todo el mundo sabe que si ponemos la mano sobre una estufa caliente nos quemaremos. ¿No es así? En verdad, experimentamos tener nuestra mano en una estufa caliente en el momento del "ahora". El próximo momento del “ahora” que experimentemos dependerá de nuestro condicionamiento. Dada la realidad de nuestra mano en la estufa caliente, pueden seguir otras dos realidades. Una es la realidad en la que nos quemamos. En la segunda realidad, no nos quemamos. Es nuestro conjunto de creencias, pensamientos y sentimientos, tal como existen en el momento, lo que decide instantáneamente qué realidad experimentamos como nuestro futuro. Podemos elegir entre cualquiera de las dos posibilidades, pero la elección nunca es consciente. Ocurre casi instantáneamente.

En el momento de la elección, simplemente estamos cambiando a una realidad que está más estrechamente alineada con las creencias y expectativas que ya tenemos. Sin embargo, cuando cambiamos nuestros pensamientos generales sobre lo que es posible en las diferentes áreas de nuestras vidas, las cosas cambian. La próxima vez que se nos presente una selección de diferentes realidades posibles, nos orientaremos naturalmente hacia una nueva posibilidad, una que esté alineada con nuestro nuevo conjunto de creencias y expectativas.

La estufa caliente es un ejemplo de elección inconsciente entre distintas realidades; Ahora dirija su atención a los momentos de la vida en los que toma decisiones conscientes sobre su realidad. Ahí es donde puedes comenzar a practicar rompiendo la expectativa de causalidad entre sucesos.

Debido a que la causa de un suceso y su resultado final existen en el mismo momento, puedes crear tu realidad eligiendo cualquiera como punto de partida. Puedes empezar con la causa, sabiendo que te llevará a un cierto efecto. Por ejemplo, puedes trabajar duro y saber que tus esfuerzos te llevarán a obtener un ascenso, lo que resultará en los mayores ingresos que desea. O puedes comenzar con el resultado y luego dibujar para ti razones que refuercen el resultado. Por ejemplo, las personas dicen que van a ser felices solo cuando algo cambie en su vida, como conseguir el trabajo que quieren o atraer a la pareja con la que sueñan. Cambiar a la realidad deseada ocurrirá mucho más rápido si ya viven desde el lugar del resultado final, sintiendo dentro de cada fibra de su ser que son felices en este momento.

No necesitas permiso, o un conjunto particular de sucesos pasados, para ser la versión más alta de ti mismo que puedas imaginar en este momento. Cuando rompes la necesidad de causalidad, te conviertes en la vibración del efecto que deseas; no se requieren pasos intermedios. Si puedes imaginarlo, lo eres. El suceder y el devenir existen simultáneamente, uno al lado del otro. Recuérdate a ti mismo a menudo que el momento presente es el momento de tu verdadero poder. Cuando sepas, realmente sepas, esto, comenzarás a reclamar poderosamente el futuro de tu mayor bien. Cambiarás a través de las realidades muy rápidamente, dirigiéndote conscientemente en el camino de tu devenir.

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Si no existe un futuro predeterminado, ¿cómo es posible que los psíquicos hagan predicciones? La respuesta está en el presente. Todo el tiempo, al igual que todo el espacio, existe en el momento presente. Por lo tanto, lo que los psíquicos sienten es el momento presente. Ellos leen las energías existentes en este momento. Detrás de cada pregunta, cada sueño y cada problema hay un cierto conjunto de creencias, intenciones, esperanzas y acciones que se han construido a lo largo del tiempo. Esa energía es lo que le dice a un psíquico qué realidades son posibles para ti.

La mayoría de las personas se acercan a hablar con un psíquico creyendo que solo hay un futuro ya determinado. De hecho, son muchos los futuros posibles que existen, dependiendo de la energía que se haya ido acumulando. Las personas somos criaturas de hábitos. Por lo tanto, a menos que tomemos una decisión intencionada y actuemos en una nueva dirección, llegaremos al destino al que nos dirigimos. A veces, hablar con un psíquico y escuchar algo que no es de nuestro agrado es la forma en que inconscientemente nos guiamos a una nueva dirección. Una sola elección puede abrir un nuevo campo de posibilidades que antes eran remoto o improbable.

Considera hablar con un psíquico como una exploración de posibilidades. Cuando ves al psíquico como una persona que puede sentir tus problemas y tu vibración, retienes tu poder. Cuando adoptas ese enfoque, no tienes que esperar y ver, con la esperanza de que el psíquico tenga razón o no. Entiendes que estás escuchando el consejo de alguien, pero aun así debes tomar tus decisiones sobre cómo quieres que sea tu vida.

Una nueva perspectiva sobre la paciencia

¿Cuántas veces te han dicho que tengas paciencia, o escuchado que “la paciencia es una virtud”? A menudo escuchamos estos sentimientos cuando no obtenemos lo que queremos.

Creemos que es noble y admirable perseverar ante la decepción o el retraso. Se nos anima a no expresar sentimientos negativos de molestia e ira. Observamos el doloroso paso del tiempo deseando, esperando y rezando que las cosas cambien rápido a mejor. Y cuando mostramos o reconocemos cuán impacientes nos sentimos, nos infligimos aún más dolor al juzgarnos como impacientes. ¡La creencia en la paciencia nos ha creado tanta agonía y sufrimiento innecesarios!

Me gustaría compartir una nueva perspectiva, una que sea liberadora en lugar de crítica. Te invito a renunciar a la paciencia y, en su lugar, buscar vivir en el momento presente. Cuando vives en el ahora puedes confiar en que las cosas son como deben ser. Esto no implica que te resignes y dejes de soñar con un futuro mejor sino que permites que las cosas sean como son sin rebelarte contra ellas. Sabes que cada situación está ahí para servirte. Eres poderoso creador, y ningún momento de tu tiempo en la Tierra se ha producido por casualidad. Atraes cada situación, incluso las condiciones que no te gustan, porque te ayudan a crecer y expandir tu comprensión. Usa este tipo de razonamiento para hacer las paces con el lugar, con el momento en el que te encuentras.

Como dicen Lucile y Jean-Pierre Garnier-Malet en su libro Change Your Future Through Time Openings, “Un pájaro migratorio sabe que vivir mejor consiste en disfrutar el presente y al mismo tiempo anticipar un futuro mejor en otro continente”.

Puedes preguntar: "¿Qué pasa con el cambio que deseo?" Las cosas cambiarán. Siempre lo hacen. Como dijo el filósofo griego Heráclito: “El cambio es la única constante”. Me encanta esta cita porque transmite que nada en la vida es permanente excepto el cambio. Si las cosas cambian para peor o para mejor depende de ti. Es tu interpretación de los sucesos lo que les da una coloración positiva o negativa. Debido a que está garantizado que todos los sucesos cambiarán, tu única tarea es elegir cómo juzgas el valor de las nuevas circunstancias, ya sea que las etiquetes como "buenas" o como "malas". Pero si regresas a la confianza de que todo ocurre con el único propósito de beneficiarte, esta es una elección fácil de hacer.

Sabiendo que todo es como debe ser, y que el cambio es inevitable, todo lo que te queda es el momento presente. Puedes elegir aprovecharlo al máximo. Vale la pena vivir y disfrutar tu vida, incluso cuando las cosas no son ideales. Cuando te enfocas en cuánto tiempo ha tomado, y sigue tomando, que las cosas cambien te vuelves más consciente del paso del tiempo. Esa conciencia te da la impresión de que el tiempo se prolonga sin fin y, por lo tanto, crea la experiencia de más tiempo. Cuando decides sumergirte en el momento y divertirte, dejas de experimentar el paso del tiempo de la misma manera.

Anteriormente, cuando te recordabas constantemente que las cosas tenían que cambiar y te preguntabas por qué el cambio tardaba tanto en llegar, experimentabas más el paso del tiempo. Es la experiencia del período de tiempo, aparentemente insoportable e interminable, lo que crea el problema de la impaciencia. Piensa en todas las veces que te has parado junto al microondas mirando el dial, contando los segundos hasta que la comida se calienta. ¡Los últimos segundos siempre parecen ser los más largos! Se siente como si cada uno durara una eternidad.

Pon fin a todos los problemas de impaciencia simplemente viviendo el momento. Cuando estés completamente presente, despierto y consciente, verás que tienes todas las razones para maravillarte con la vida y asombrarte de ella, incluidas las partes desordenadas. En cualquier momento, haz lo que le proporcione la mayor cantidad de placer y tendrás la garantía de experimentar la aceleración del tiempo. Como resultado, el cambio tendrá lugar más rápido.

La primera vez que volví conscientemente mi atención hacia el placer y experimenté que el tiempo se aceleraba estaba esperando un taxi. Acababa de regresar a casa de un agotador viaje de un día a Asheville, en Carolina del Norte. Para regresar a Nueva York primero tuve que volar a través de Charlotte, Carolina del Norte, donde tuve una larga escala. El vuelo a Nueva York estaba lleno y yo tenía un asiento del medio. Los caballeros a ambos lados de mí entablaron una conversación animada, uniéndose por su irritación compartida por los precios de los peajes del puente y los buenos tomates. Se puede imaginar que cuando el avión aterrizó en el aeropuerto de La Guardia, bien pasada la medianoche, yo estaba más que motivada para llegar a casa.

Pero cuando llegué a la parada de taxis la fila era enorme. Parecía como si todos los que estaban en ese vuelo guardaran fila para tomar un taxi. Debido a que era tarde, ya entrada la noche, los coches llegaban para recoger pasajeros cada 5 o 10 minutos. Mientras esperaba, repasé todas las razones por las que esto no debería pasarme. Estaba cansada del viaje, tuve que despertarme muy temprano y tenía por delante un día estresante en la oficina, con un gran negocio a punto de cerrar.

Cuantos me rodeaban en la fila se movían con impaciencia de un lado a otro. Muchos expresaban abiertamente lo desagradable de la situación. Sabiendo que estar de mal humor no me llevaría a casa antes, elegí pensar diferente. Recordé que todas las personas a mi alrededor eran parte de mi experiencia y que puedo elegir mi realidad. También sabía que, para comprimir la experiencia del tiempo necesitaba ocupar la mente con algo que captara mi atención por completo. Tenía un libro que me interesaba, así que lo saqué y comencé a leer optando por ignorar a todas las personas disgustadas que me rodeaban.

Apenas terminé una página del libro cuando levanté la vista y, para mi sorpresa, solo había una persona delante de mí y ya caminaba hacia su taxi. Mi taxi estaba justo detrás del suyo. Quedé sorprendida.

“¿Qué pasó con las 50 personas que estaban delante de mí?” Antes de comenzar a leer parecía que me llevaría al menos una hora llegar al frente de la fila. Soy lectora rápida así que leer una página no me toma mucho tiempo. Todo se sentía muy surrealista. Había creado una experiencia en la que la espera de la fila de clientes duraba breves minutos en lugar de la hora que había calculado previamente. Tal vez una flota de autos descendió en muy poco tiempo y se llevó a todos los que estaban delante de mí, y estoy de acuerdo con esa explicación. Lo que espero que saques de esta historia, y lo apliques a tu vida, es el reconocimiento de que, de hecho, es posible manipular tu experiencia del tiempo.

Cuando te enfocas en el momento presente y te involucras en algo apasionante, creas menos conciencia del paso del tiempo. De esa manera creas menos tiempo, porque el tiempo no es un absoluto. El cambio que buscas experimentar ocurre más rápido. ¿Y quién necesita paciencia cuando te estás divirtiendo y el tiempo vuela?

La semilla está plantada

Espero que ya se haya plantado en tu mente la semilla del conocimiento de que el pasado, presente y futuro existen en el momento presente. Como dijo Jesús: “El reino de Dios es como si un hombre esparciera semilla sobre la tierra, y durmiera y se levantare de noche y de día y la semilla brotara y creciera sin saber cómo” (Marcos 4, 26–27).

Tu comprensión de la simultaneidad del tiempo y sus implicaciones para tu vida se desarrollará al ritmo que te sea apropiado. Al igual que una piedra arrojada a un estanque, las vibraciones de este conocimiento crearán ondas en tu conciencia. Esta información afectará y alterará todos los aspectos de tu vida a cualquier ritmo, y de la manera que mejor te convenga.

Ahora exploremos una semilla diferente que me gustaría plantar en de ti: cómo cambiar las creencias sobre la salud nos permite cambiar a una realidad de bienestar.

 

CAPÍTULO 8. PUEDES SANAR TU CUERPO

Me encanta la historia de la experiencia cercana a la muerte, (ECM), de mi querida amiga Anita Moorjani. Se cuenta en su fascinante libro, Morir para ser Yo, que te animo a leer. La ECM de Anita nos enseña, poderosamente, que tenemos la capacidad de elegir la dirección de nuestra vida, así como las realidades paralelas que corresponden a esa elección.

Tas cuatro años de vivir con linfoma de Hodgkin, el cuerpo de Anita comenzaba a morir por insuficiencia orgánica y solo le quedaban 36 horas de vida. Estaba entrando y saliendo de la conciencia, y sintió que su espíritu abandonaba el cuerpo. En estado desencarnado, se sintió rodeada de un amor profundo e incondicional. También experimentó una claridad total: sabía por qué tenía la enfermedad, qué papeles desempeñaban los miembros de su familia, y por qué estaba encarnada.

En ese momento, Anita comprendió el inmenso potencial de cada ser humano para crear vida. Se le dio la opción de continuar en el reino no físico, permitiendo que su cuerpo muriera, o regresar a la vida y enseñar a sus semejantes lo magníficos que somos y que tenemos el poder de crear el cielo en la Tierra. A Anita le preocupaba que si volvía a su cuerpo físico continuaría enferma. En respuesta, se le mostró que su decisión de vivir o morir determinaría su realidad. Si elegía vivir, su cuerpo sanaría muy rápido. Si elegía morir, su cuerpo moriría por fallo orgánica. Así lo ha descrito Anita:

Me hicieron entender que como se habían realizado pruebas para las funciones de mis órganos (y los resultados aún no estaban disponibles), si elegía la vida los resultados mostrarían que mis órganos funcionaban normalmente. Si elegía la muerte los resultados mostrarían el fallo orgánico como causa de la muerte, debido al cáncer. ¡Podía elegir cambiar el resultado de las pruebas!

El tiempo parece tener un significado completamente diferente en ese lado. Lo que sentí fue que todas las posibilidades existen simultáneamente, solo depende de cuál elijas. Algo así como estar en un ascensor, donde que pasa por todos los pisos de un edificio pero puedes elegir en cual bajar. Por tanto, si existen todas las posibilidades futuras para poder elegir, entonces se asume que también existen todos los escenarios pasados. Dependiendo de qué posibilidad futura elijas se determinará qué pasado viene automáticamente con él. (Yo elegí la vida, por lo que afectó al pasado, eligiendo el resultado de prueba apropiado para la función del órgano)... Cuando se me presentó la elección, tuve la visión de mi informe de laboratorio, que decía, en el encabezado: Diagnóstico: insuficiencia orgánica. Luego en el cuerpo del informe: Muerte por fallo orgánica causada por el linfoma de Hodgkin. Cuando vi el informe después de regresar, la hoja de papel parecía casi idéntica y el encabezado coincidía palabra por palabra: Diagnóstico: insuficiencia orgánica; sin embargo, el cuerpo decía: No hay prueba de fallo orgánico. De hecho, se me puso la piel de gallina al ver ese informe, sabiendo lo que podría haber leído...

Descubrí que dado que me di cuenta de quién era realmente, y entendí la magnificencia de mi verdadero yo, si elegía volver a la vida mi cuerpo sanaría rápidamente, ¡no en meses o semanas, sino en días! ¡Sabía que los médicos no encontrarían ni rastro de cáncer si decidía regresar a mi cuerpo! … Entendí que mi cuerpo es solo un reflejo de mi estado interno. Si mi ser interior fuera consciente de su grandeza y conexión con Todo-Lo-Que-Es, mi cuerpo pronto lo reflejaría y sanaría rápidamente.

Las creencias de Anita sobre la vida y quién es ella se transformaron tan drásticamente a través de su experiencia en el Otro Lado que cada célula de su cuerpo reflejó rápidamente la nueva comprensión. Tenía tumores del tamaño de limones en todo el cuerpo cuando ingresó en el hospital. A los pocos días de salir del coma, los tumores se habían reducido al menos en un 70 por ciento. Y cinco semanas después de llegar al hospital fue dada de alta porque no había prueba de cáncer en su cuerpo. Una semana después, Anita celebró su cumpleaños y su nueva vida yendo a cenar a su restaurante favorito con su familia.

La curación instantánea de Juan

La rápida recuperación de Anita Moorjani se produjo después de que se conectara con el amor de Todo-Lo-Que-Es y entendiera que ella es ese mismo amor. ¡Así de rápida e instantánea puede ser la curación física! No es necesario que cada uno de nosotros muera para volver a la vida sanado. Las sesiones de regresión que dirijo proporcionan el ambiente para que tenga lugar la curación del cuerpo. Juan es un buen ejemplo de esto.

Hablando con su Yo Superior pregunté si John tenía algún órgano que necesitara sanar. La respuesta fue que estaba saludable en este momento, pero que tenía “muchas decisiones que tomar”. El Yo Superior dijo que John haría todo lo que tuviera que hacer en esta vida para aprender y enseñar la lección de comprensión que había venido a aprender y enseñar, incluso enfermar por ello.

Escuchar esto me afirmó que la enfermedad nunca la causa malos genes o mala suerte, y nunca es aleatoria. La enfermedad es simplemente la oportunidad de crecer. Cuando un alma elige que el cuerpo experimente angustia, lo hace para aprender a través del desafío. Cuando el ego está desconectado, cuando ignoramos las señales, los indicios, los susurros de nuestra alma para cumplir su plan, el Yo Superior puede verse obligado a orquestar una enfermedad o un accidente para transmitir el mensaje. Los desafíos nos hacen buscar respuestas. Nos hacen buscar las razones para  poner la vida en perspectiva y, con suerte, aprender las lecciones a las que nos hemos estado resistiendo. La enfermedad es una forma difícil de aprender, pero a menudo una medida drástica es el único camino que queda si estamos demasiado ocupados dando vueltas en la mente para abrirnos a la guía y la dirección,

Continuando la conversación con el Yo Superior de John, me dijeron que su único problema físico se refería a sus ojos. Pregunté si sería posible curarlos ya mismo y la respuesta fue, sí. Después de la sesión, descubrí que John tenía un problema conocido en el ojo izquierdo. Si bien su ojo derecho estaba bien se había dejado la lente de contacto del izquierdo demasiado tiempo y el ojo presentaba algunos daños. Pedí que se curara, y el Yo Superior de John respondió que sí.

La conversación que tuvimos el Yo Superior y yo sobre el tema de la salud de John duró casi un par de minutos. Después de la sesión John me envió este correo electrónico:

Solo quería ponerte al día. Después de la sesión fui al oftalmólogo y mis ojos estaban más o menos como siempre, aunque no se encontró ninguna herida. Volví ayer para un pequeño chequeo… A pesar de mi resistencia a dejar los lentes de contacto, ¿creerías que mis ojos realmente han mejorado? Cuando me dio los resultados recordé la parte de sanación de nuestra sesión. ¡Gracias!

Tu cuerpo sabe cómo curarse y restaurarse, solo necesitas proporcionarle el entorno adecuado para que lo haga. Creo que John ya tenía la convicción de que la curación instantánea era posible y que un puede curarse por medios no convencionales. Debido a que su sesión fue tan profunda, simplemente aceptó que su ojo había sanado de la herida. Ten en cuenta que ni siquiera trabajamos para mejorar su vista: el Yo Superior solo trabajó para eliminar el daño causado por sus lentes de contacto. Sin embargo, debido a que John aceptó que su ojo había sanado, el poder de esa nueva creencia trascendió la dolencia específica y mejoró el bienestar general de sus ojos.


Ejercicio: ¿Crees en la curación instantánea?

¿Crees que puedes ser sanado? Más importante aún, ¿crees que puedes sanar instantáneamente? Las respuestas a estas dos preguntas, especialmente la segunda, son fundamentales para la curación misma. Cualquiera que sea el tipo de curación, ya sea una sesión conmigo, el trabajo de curanderos o de médicos capacitados en medicina occidental, cualquier modalidad de curación que sea es, simplemente, una herramienta. La modalidad de curación proporciona el entorno adecuado para tu regreso a la buena salud. Sin embargo, la curación en sí surge de las convicciones que tiene una persona. Por lo tanto, si trascendemos nuestras creencias sobre lo que es posible para el cuerpo, entonces el camino hacia el bienestar está presente.

Si estás buscando una curación física, te recomiendo que comiences por cambiar tus actitudes sobre la capacidad de tu cuerpo para curarse y la rapidez con que puedes hacerlo. Vuelve al proceso descrito en "Cómo descubrir tus creencias limitantes y transformarlas" en el Capítulo 5. Concéntrate en el ejercicio, específicamente en lo que crees sobre tu salud y sobre la capacidad de tu cuerpo para sanar. Ese proceso te ayudará a cambiar a una realidad de perfecta salud.


La historia de Ariel

Ariel hizo arreglos para encontrarse conmigo en su camino de regreso a casa de un viaje de negocios. Estaba en Chicago, en un período de dos semanas, y realizaba una o dos sesiones al día. Al igual que con todos los clientes que vienen a verme, cuando Ariel entró a consulta supe que nuestro tiempo traería milagros: solo era cuestión de permitir que el proceso se desarrollara.

Mientras configuraba mi ordenador para grabar la sesión, Ariel comenzó a relajarse en la cama. Antes de cerrar los ojos, dijo: “Sé que me sanarás”. La declaración de alguna manera no le pareció correcta, por lo que se corrigió y dijo: "Me curaré con tu ayuda". Sonreí y dije: “Muy bien”, y comencé a guiarla hacia la regresión.

Sin embargo, en lugar de experimentar otra vida, Ariel comenzó a describirme otra dimensión. Ella lo describió de esta manera:

Ariel: No es el momento. No es físico. Todo el mundo tiene túnicas blancas. Hay miles y miles de seres con apariencia humana. Estoy al frente de ellos. Hay un par de otros... es como si estuviera en un panel, un comité asesor. Hay tal vez cinco de nosotros en el frente. Todo el mundo nos mira en busca de liderazgo o dirección.

Resulta que el alma de Ariel era una orientadora del lado espiritual. Era parte de un panel de cinco miembros que daba consejos a otros seres. Los miembros del panel pudieron escuchar los pensamientos de cada individuo en el grupo y los discutieron antes de sugerir la mejor solución. Ariel describió el proceso de la siguiente manera:

Ariel: Estamos haciendo 60 entidades diferentes a la vez. El panel discute opciones y soluciones, para muchas entidades diferentes al mismo tiempo, a través del pensamiento, del sentimiento, de la vibración. Puedo sentir las diferentes intenciones y ver las experiencias de vida detrás de los pensamientos de muchas entidades diferentes al mismo tiempo. Las discusiones son entre nosotros cinco, y las respuestas se devuelven a los individuos y se alejan flotando.

Con el tiempo se hizo evidente que las entidades que veía ante ella eran guías espirituales que buscaban consejo para las almas de humanos que vivían en la Tierra. El área de especialización de este panel era la de recuperación del dolor físico. Ariel me hizo saber que había otros paneles en los alrededores, cada uno dando consejos sobre un área diferente de la vida.

Trabajar en este panel era la pasión del alma de Ariel. Estaba en él porque ella misma se había recuperado del dolor físico durante sus encarnaciones humanas. Le encantaba enseñar sin expectativas. Como alma se sentía muy atraída por la Tierra, como si fuera su proyecto, su pasantía. Se vio a sí misma como una estudiante. Le pedí que fuera al momento en que comenzó sus estudios y se vio parada frente a un panel de cinco guías. Pronto vio a estos guías fusionarse en un solo ser que se presentó como un hombre. Con eso, comencé a plantear las preguntas que Ariel y yo habíamos discutido antes de que comenzara la regresión.

Hablamos sobre la relación con sus padres y su carrera, y le dieron explicaciones e instrucciones específicas. También abordamos sus relaciones íntimas. Pero ante todo, le pedí que liberara el dolor que cargaba con sus relaciones pasadas, así como la necesidad de complacer a los demás y cualquier patrón negativo de relación. Este fue nuestro intercambio:

Ariel: Dice que ya estoy trabajando en eso, porque ya he visto cómo se ve ahora y sé lo poco atractivo que es. Él dice: “Ahora elige liberarlo”. Le digo: "Elijo expulsarlo".

Dobromira: Siente la intención, porque ese es realmente el momento de liberarlo y dejarlo ir.

Ariel: Está diciendo: “Muy bien”. Ahora dice: “Acepta la emoción”. Y digo, "¿Cómo?" Él dice: “En lugar de huir de él, date la vuelta y abrázalo con un abrazo de oso. Imagínalo." Así que estoy revisando las capas: posesión, celos, inseguridad. Vienen de patrones que he visto. Todo viene del miedo. Así que acepto el miedo y digo: “No tengo miedo. Te amo por lo que me enseñas. Y ahora puedes irte”.

Al comienzo de la sesión, Ariel había compartido que tenía una enfermedad de transmisión sexual que quería curar. Ella no la nombró, y yo no pregunté. Sin embargo, la etiqueta no importaba porque el Espíritu sabía lo que necesitaba ser sanado. Trabajamos en algunos otros asuntos antes de pedir que trabajáramos en sanar el cuerpo y restaurarlo a una salud perfecta:

Ariel: Está diciendo que la sangre necesita ser limpiada. Veo todas las venas. Dice que necesito tener una dieta de limpieza y no tener relaciones sexuales con nadie con quien ya las haya tenido.

Dobromira: Tengo la sensación de que esto es la eliminación de la Enfermedad de Trasmisión Sexual, ¿no es así?

Ariel: Creo que sí… ya soltaron, (eliminaron), la toxina. Él solo dijo: "¿Alguna otra pregunta?"

Dobromira: Por favor, pregúntale sobre la curación que acaba de ocurrir. ¿Se curó la ETS?

Ariel: Él dice: “Dale un poco de tiempo, pero ya no está”.

Hubo espacios de silencio durante los cuales Ariel observaba y sentía el trabajo que realizaban sus guías. La grabación indicó que esto tomó poco más de cuatro minutos.

Dos días después de la sesión, Ariel me envió este correo electrónico:

Quería contarte un poco más que no dije mientras me curaban. En su mayoría, solo sentí energía y hormigueo en las partes en las que se estaba trabajando, y me dijeron lo que hacían. En un punto, y este es el único punto en el que vi a alguien haciendo algo, el ser lo vi como un extraterrestre.

Además, a la mañana siguiente, cuando estaba en la ducha, se me dijo que me bañara. Casi nunca me baño. Tras escucharlo me preparé y vertí el contenido de la botella de champú en el agua para hacer muchas burbujas tal y como se me pidió. Inmediatamente, después de acostarme en la bañera, volví rápidamente al lugar donde estaba cuando estuve contigo el día anterior. Le pregunté que por qué tenía que aparecer como hombre y me dijo que era lo mejor para mí. Le pregunté por qué se ve igual todo el tiempo, y se transformó en un anciano de aspecto asiático y dijo: “¿Qué tal así? ¿Está es mejor?" “S”, contesté, y me reí. Cuándo había terminado y podía enjuagarme, me dijo que era necesario realizar una limpieza adicional. Al levantarme con las burbujas encima me dijo: «¿No sientes el mismo hormigueo que la energía?». Por supuesto que sí. Ese día sentí más curación y me han dicho que aún tardará un poco.

No fue una sorpresa que la curación de Ariel continuara después de nuestra sesión. Tal suele ser el caso. La transformación que se pone en marcha es total. Comienza en un nivel emocional y de energía durante la sesión. Los días siguientes, las estructuras neurológicas y celulares del cuerpo reflejan esos cambios. La sanación creada por los guías de Ariel fue instantánea, pero debido a la naturaleza de la materia física, a veces puede ser necesario un poco más de tiempo para que el trabajo se experimente plenamente en el cuerpo.

Aproximadamente dos meses después, Ariel me envió un correo electrónico nuevamente. Esta vez, tenía buenas noticias: “Fui al médico hace dos semanas y me hicieron una prueba [de Enfermedad de Transmisión Sexual], y hoy descubrí que todas las pruebas fueron negativas: estoy curada. ¡Muchas gracias por el regalo que me diste, y das a los demás!”

Esta noticia me hizo muy feliz. Me encanta saber de mis clientes después de la sesión y saber cómo han cambiado sus vidas. Le devolví el correo electrónico y le pregunté si podía incluir la historia de su curación en este libro. Su respuesta fue muy amable e informativa sobre por qué su cuerpo fue sanado de la ETS. Ella escribió:

Sí, sería maravilloso si pudieras compartir mi historia en tu libro. Espero que ayude a otros también. Sin embargo, creo que el mío podría ser un caso bastante raro porque yo creía profundamente. Pero sé de todo corazón que cualquiera puede sanar su cuerpo físico de cualquier cosa, o mejor aún, evitar que la enfermedad comience en su cuerpo. El cuerpo está profundamente conectado con la mente y nuestro espíritu/alma tiene la capacidad de curar a ambos.

Tuve que seguir instrucciones adicionales y también me llevaron a leer y comprender otras cosas que afectan nuestro cuerpo y la curación, como la nutrición, el ejercicio, la meditación, el perdón y el amor.

La enfermedad era el herpes. Se puede tratar médicamente y controlar con medicamentos pero no se puede curar. Conseguí la enfermedad de mi ex marido. Creo lo que ha dicho Louise Hay, que las enfermedades aparecerán en tu cuerpo donde yace la falta de perdón. Para mí, la amargura que tenía contra los hombres del pasado de mi vida, creo, ayudó a manifestar la incapacidad de mi cuerpo para protegerse contra la enfermedad. Ahora he perdonado y les he agradecido a todos en mi mente por contribuir a que yo sea la persona que soy ahora. Ahora sé que todos estaban en su viaje y simplemente se cruzaron con el mío.

Me encanta, como dice Ariel, que fue sanada porque creyó. Ella creía que su alma podía curar su cuerpo. Creía que la sesión podría ayudarla a sanar. Y durante la sesión me dijo que esperaba y tenía la intención de curarse a través de nuestro trabajo. Ariel humildemente dijo que el suyo podría ser un caso bastante raro porque ella ya creía profundamente que se curaría. En realidad, todos los que han experimentado una curación lo hicieron porque creían que el cuerpo trascendería las condiciones dadas.

Hay encarnaciones donde el alma elige experimentar la vida en un cuerpo que nace con defectos, o con una mente que no funciona como la de los demás. Esta elección se hace para que el alma pueda crear usando las habilidades y oportunidades que permanecen sin obstáculos por la situación. Es posible que estas personas no puedan curar la afección del cuerpo, pero tienen la oportunidad de sanar emocionalmente, de cambiar su creencia de que son deficientes o anormales. Una vez que entendamos por qué se eligió la enfermedad, y de qué manera nuestra alma buscó beneficiarse de la experiencia, el potencial para una vida muy enriquecedora y satisfactoria puede nutrirse hasta fructificar.

Recientemente, tuve una regresión a vidas pasadas con un joven que comenzó a desarrollar distrofia muscular cuando era un niño pequeño. Está paralizado y necesita el cuidado constante de su familia. Revivió una vida en la que vio cómo los miembros de su familia actual, cada uno a su manera, habían ayudado en su ejecución (es decir, ayudaron a que lo mataran), por motivos políticos. En esta vida, a su familia se le estaba dando la oportunidad de equilibrar esa experiencia de vidas pasadas cuidándolo. Al elegir una encarnación con una enfermedad tan debilitante, su alma está aprendiendo lo que es no tener movilidad. Está aprendiendo a crear una vida satisfactoria a través de su creatividad, la agudeza de su mente y la fuerza de su capacidad para comunicarse.

Todas las enfermedades comienzan en un nivel emocional. Nuestros cuerpos no están indefensos a merced de virus misteriosos o rasgos genéticos. Nuestros cuerpos no son más que compañeros complacientes en nuestro viaje por la vida. En el caso de Ariel, se permitió que la ETS entrara en su cuerpo porque reflejaba sus emociones no resueltas hacia sus exparejas. Ariel sabía que una curación que superaba con creces el pronóstico de los médicos sería posible. Después de nuestra sesión, ancló el trabajo comiendo de manera diferente, haciendo ejercicio y cambiando sus pensamientos hacia el perdón, la gratitud y el amor.

Te invito a ver cualquier enfermedad como un mensajero, apuntando hacia un problema emocional que aún no has abordado. Me sorprende continuamente lo inteligentes y, a veces, muy literales que son nuestros cuerpos para manifestar representaciones físicas de desafíos emocionales. En mis sesiones, preguntaré qué problemas no resueltos están causando molestias físicas. Una vez que se resuelve el problema emocional, las células nunca dejan de reflejar el nuevo estado del ser.

La próxima vez que experimentes dolores o tengas un accidente, pregunta a tu cuerpo qué mensaje te envía. En momentos de meditación, pide a tu Ser Superior que te revele lo que necesitas soltar y lo que necesitas aprender. El libro de Louise Hay “Puedes sanar tu vida” me ha parecido una buena guía rápida que siempre me indica la dirección correcta.

Cuando te des cuenta del cuadro completo y de cómo te sirve la incomodidad, da las gracias a tu cuerpo. Dile que la información ha sido entregada y que ahora puede comenzar a sanar. Luego, haz que tu mente y tu espíritu trabajen al unísono para aliviar el desequilibrio emocional. La curación física pronto seguirá.


Ejercicio: sanar a través de la regresión

Si tienes una situación física que buscas liberar, te animo a explorarla a través de la regresión. Puede usar la transcripción en el Apéndice A o usar la regresión guiada en mi juego de CD, Sanación a través de la regresión de vidas pasadas... y más allá. Puedes comunicarte conmigo para una sesión personal, unirte a un taller donde guío a los participantes a través de regresiones o encontrar a un profesional de tu localidad o país. Independientemente de cómo procedas, sabe que ya estás alineado con el poder ofrecido a través de esta herramienta para la curación.

Reserva al menos 40 minutos de tiempo de tranquilidad. Si tienes mascotas en casa asegúrate de que no estén en la habitación. Antes de comenzar la regresión crea la intención general de que estás abierto a explorar una vida que te ayudará en tu sanación. Pídele a tu Ser Superior que te lleve a una vida que te ayude a comprender tus desafíos de salud. Luego simplemente reproduce la grabación y confía en el proceso. Después de salir de la regresión permítete procesar la experiencia de la manera que te parezca más adecuada. Escribe un diario, toma un baño, sal a caminar, bebe un vaso de agua o simplemente siéntate en silencio, reflexionando sobre tu vida. Luego, trae los conocimientos a tu vida cotidiana y confía en la capacidad de tu cuerpo para sanar.


Hemos abordado cómo sanar el cuerpo de los síntomas físicos utilizando el conocimiento de que todas las realidades posibles están actualmente disponibles para elegir la realidad que deseamos. Ahora me gustaría cambiar nuestras exploraciones de la conciencia para compartir algunas historias de regresión que nos enseñan cuán amados somos por la Fuente, lo que nos ayudará a sanar nuestras emociones con respecto a nuestro valor y merecimiento.

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CAPÍTULO 9. TIENES DERECHO A AMARTE

 La idea del amor, amarte y amar a los demás, fue el tema esencial de la vida que revivió el Dr. Wayne Dyer durante su regresión conmigo. Aquí solo ofrezco la esencia de la historia ya que el texto completo aparece en el libro de Wayne Deseos Cumplidos.

Wayne se viviendo en un desierto, un joven cuyo padre había sido asesinado. Terminó dejando la vida con su tribu árabe y trabajando en un barco que lo llevó a una nueva tierra. Allí se enamoró de una mujer y pronto se casaron. Más tarde tomó un trabajo en un barco emocionado por viajar y descubrir nuevos territorios. Como dijo Wayne durante la regresión, “Se habla de islas y personas que viven en ellas, por todo el mar. Y eso me emociona. Y me voy, y la dejo. Ella está embarazada. Pero me voy de todos modos. Simplemente suena tan tentador encontrar algo que nadie haya visto antes. Es como una gran aventura”.

Después de mucho tiempo en el mar, la tripulación descubrió una isla. Los habitantes eran amistosos, pero el capitán y sus hombres fueron crueles y viciosos con ellos porque eran diferentes. Como el hombre que era en esa vida, Wayne intentó detener la violencia pero no pudo. El barco zarpó de regreso y él regresó a casa con la noticia de que su esposa había muerto y nadie sabía nada sobre el hijo que había dado a luz. Esto lo hizo sentir muy triste y culpable; a medida que pasaba el tiempo, la tristeza se quedó con él. Estaba preocupado por toda la violencia, todos los asesinatos, la falta de amor y cómo las personas se enfocaban en sobrevivir quitándose y lastimándose unos a otros. Sabía que había una forma diferente de vivir y de ser, gracias a los mensajes que había recibido mientras estaba en una cueva.

Wayne describió cómo se vio a sí mismo en esta cueva, en la que una luz brillante entraba por el techo. Mientras estaba sentado en la luz, fue iluminado por la conciencia de las verdades eternas, y todas tenían que ver con el amor. Una de estas verdades era: “Si lo compartes, lo multiplicas. Si lo atesoras, lo pierdes”.

Wayne se sintió obligado a compartir estas ideas con la gente, pero sabía que no lo escucharían. Él dijo: “Esta verdad es tan clara, tan clara. Solo hay que amarse el uno al otro. Ámate a ti mismo. Ámense los unos a los otros”. Luego, vio cómo su hijo perdido en esa vida había llegado a él, y cómo trataba de compartir estas verdades con el niño:

Wayne: Le digo que recuerde estas cosas. Que son grandes verdades. Que cuando compartes, multiplicas. Cuando acumulas, pierdes. Cuando haces menos a otras personas, obtienes más. Que al ser humilde, gentil y suave, obtienes mucho más. Te lo estoy diciendo. Te acercas tanto a Dios. Esa luz es Dios viniendo por allí. Esa luz es Dios. Es tan brillante. Puedo verlo. Aquí viene de nuevo. Comienza aquí, y va así. Simplemente nadas en él. Simplemente te bañas en esta luz. Es todo tan fácil. Sólo diles que esto es fácil. No es difícil. Es natural. Es normal. Es de lo que vienes. Es lo que eres. Descubre lo que eres, y sé eso. No descubras lo que no eres y trata de ser eso. Es solo otra verdad. Una de esas simples, simples verdades. Se quien eres en lugar de quien no eres.

Y no puedes ser otra cosa que lo que eres de todos modos. Es una ilusión. Si tratas de ser algo que no eres, no puedes ser nada de lo que no eres. No eres odio, no estás matando. Eso no es lo que eres. Se quien eres. Todas esas otras cosas no son quién eres... solo sé quién eres.

Mi hijo parece perplejo. Cree que soy un viejo loco. Soy un viejo loco. Todos a mi alrededor... el único que entendió esto fue, oh Dios mío, esa hermosa mujer. La conocí por tan poco tiempo. Y luego la dejé. Ella sabía esto. Ella esperó. Ella no murió de algo en su pecho. Fue asesinada.

Mi hijo me acaba de decir eso. A ella también la mataron mientras yo no estaba. Todo lo que amas pierdes cuando pierdes el amor. Todo lo que amas lo pierdes cuando pierdes el amor. Tan sencillo. Fue asesinada, violada. Mi hijo quiere saber lo que siento por el violador.

“¿Cómo te sientes, papá, acerca de las personas que mataron a la mujer que amas?”

Y la luz está ahí. Y puedes entrar o puedes rodearla. Cuando entras, solo hay amor, y si trato de dar la vuelta, está oscuro. Y me dan ganas de matar a esos hijos de puta.

Cuando entro en la luz, amo a los violadores. Cuando pierdes el amor, eso es todo. Cuando pierdes el amor, pierdes quién eres porque quién eres es amor. Y todo el resto del tiempo deambulas en la oscuridad tratando de evitar la luz, que simplemente te llama, te atrae hacia ella. Quiere estar en eso tanto. Es demasiado brillante. Te ciega con su brillo.

Realmente puedes amar a las personas que matan a la mujer que amas. Supongo... supongo que puedo porque eso es lo que soy. Cuando amas, simplemente no hay lugar para nada más. Si amas, simplemente no existe tal cosa como el no amor. Es todo lo que tienes para regalar. Es cuando dejas el centro de atención, cuando dejas la luz que entra en esta cueva... la ves entrar así, y luego están todos estos lugares oscuros a su alrededor.

Y quieres que vaya a los lugares oscuros. Pero no puedo. Porque yo soy igual que esa luz. Eso es lo que soy. Y me entristece, pero me parece que para eso estoy aquí.

Él me dice que ella me amaba tanto. Esperó y esperó y esperó, y yo la defraudé. Porque tenía que buscar mi aventura. Tenía que encontrar los nuevos lugares. Y todo el tiempo no tuve que ir a ninguna parte.

Dice que no puede hacerlo. Y le digo: "Simplemente no estás listo, pero también es lo que eres".

Y me levanté y caminé hacia esa luz. Puedo verlo ahora. Y yo también lo dejé... desconcertado. Y entré en esa luz, y me dejé flotar en ella. Lo miré, “Hijo mío, muévete unos centímetros hacia la luz. Está a solo unos centímetros de distancia. Simplemente deslízate y estarás en la luz. Aquí está la luz y tú estás aquí. Solo muévete aquí. Solo tienes que moverte hasta aquí.

¿Sabes lo que dijo? Vete a la mierda, viejo loco. Voy a atrapar a esos muchachos”.

Como Wayne aprendió tan conmovedoramente, siempre tenemos la opción de alinearnos con la Luz y estar en la esencia vibratoria del amor.

La historia de Serena

Después de la profunda regresión que llevé a cabo con Wayne, me dijo: “Conozco a alguien más a quien le encantaría verte”. Estaba pensando en su hija Serena. Me reuní con Serena y descubrí que su regresión revela lo amados y deseados que somos por Todo-Lo-Que-Es. Nos enseña que antes de nuestra existencia había un desequilibrio, un vacío en Todo-Lo-Que-Es que solo podía llenarse con una energía específica. Nuestras almas fueron creadas para encarnar esa energía en particular. Desde el momento en que se percibió la necesidad de cada uno de nosotros, incluso antes de que naciera nuestra alma, hemos sido queridos, atesorados y amados.

Una vez que comenzó la regresión, Serena describió un lugar con arena y pirámides. Era un portal entre dimensiones. Todos los que vinieron a la Tierra, almas recién creadas, almas ya existentes y guías espirituales, primero tuvieron que pasar por este plano. Todo lo que iba a desarrollarse en la Tierra ya era conocido en esta dimensión y estaba representado en imágenes en las paredes interiores de las pirámides. Pedí a Serena que describiera el lugar con más detalle, y esto dijo:

 

Serena: Es este gran desierto de arena que es muy pacífico. No hay aire ni viento. Es como la Tierra pero no igual. Está por encima de la Tierra. [Bueno, en realidad] No está encima porque la Tierra no está por debajo. Es solo otro espacio…. Aquí soy un pastor. No de animales sino de personas. Yo los guío. Por eso soy importante [porque] soy alguien que los guía.

Dobromira: ¿Guías solo a las almas nuevas o también a otros seres que entran?

Serena: Guío a todos.

Dobromira: Describe cómo ves y sientes eso.

Serena: Se siente realmente amoroso. No hay juicio hacia los nuevos seres porque vienen perfectos. Vienen en paz. No tienen una sola célula mala en ellos. Se siente como un honor. Incluso las personas que veo que causarán dolor, o algo más adelante, todo está bien para mí. Realmente amo a todos.

Dobromira: ¿Cómo ves esta información? ¿Es algo que recibes o algo que miras en la pared y ves?

Serena: Es un sentimiento que tengo. Puedo ver sus almas. Solo sé que tienen dentro de ellos un camino en el que están... que algunos de ellos causarán daño y dolor. Está bien porque siguen siendo perfectos a pesar de que van a hacer eso. Son más valientes. Ellos eligieron eso. Y no es fácil.

Dobromira: ¿No es fácil causar daño y dolor?

Serena: Son personas muy importantes.

Dobromira: Dime más, por favor

Serena: Todo el que viene a la Tierra pasa primero por aquí... Todo el mundo tiene una combinación de todos los colores que forman su alma. La combinación de todos es un poco diferente. Algunas de estas personas tienen un poco más de oscuridad. No quiere decir que sean malos. Simplemente significa que tiene que haber luz y oscuridad. Tiene que haber un equilibrio. Para las personas que tienen más oscuridad [el color] es casi como azul marino porque no es del todo negro. Realmente las amo. Firmaron [un contrato de vida] para asumir mucho. Dios los creó para ser maestros, pero ellos no saben que son maestros. La energía de los profesores es más amarilla. No son maestros como Jesús, quien es un maestro que enseña al planeta. [Estas almas más oscuras] Son maestros que enseñan a partir de sus acciones. Aprendes de ellas a no ser esa energía. Es importante que todos las amen. La razón por la que hago este trabajo es porque Dios sabe que las amo. Para mí, no puedo juzgarlas solo porque tienen colores más oscuros.

Dobromira: ¿Cómo entra un alma en el cuerpo de un ser físico?

Serena: Eso no pasa aquí. Es el plano anterior a la Tierra. Pero hay otro plano.

Dobromira: ¿Cómo ocurre esa transición de tu plano al terrestre?

Serena: Sucede lentamente. Se siente como si mi plano es en donde puedes estar. Tu alma puede volver a llenarse de colores y energías que necesita para tu viaje. En el siguiente plano, tu misión se vuelve más clara. En el mío solo tienes energías. En el siguiente plano se vuelve más claro cuál será tu único propósito. Hay muchos más planos por los que pasas.

Pero tus colores pueden cambiar en tu vida mientras estás encarnado. Tus colores pueden cambiar porque puedes elegir cambiarlos.

El plano que Serena estaba viendo era un lugar por el que pasaban las almas en su camino hacia la encarnación. En ese plano las almas obtienen sus colores, y las diferentes combinaciones de ellos que dan a cada alma su singularidad.

Uno de los portales a través de los cuales llegaban las almas a su plano era específicamente para almas recién creadas, y le pregunté si podía atravesar ese portal para ver cómo se crean las nuevas almas. La descripción que me dio me recuerda la descripción que dio Alberto sobre cómo es la energía de Dios: un brillo blanco lechoso muy sutil pero muy poderoso:

 

Serena: Cuando entras en el portal blanco en lugar de bajar en mi plano, subes. Estás al principio de todo.

Dobromira: ¿Qué hay a tu alrededor?

Serena: Blanca. Todo es blanco. No se siente vacío. Es la fuente de todo. Todo está ahí. Todo lo que quieres está ahí, pero no está ahí.

Cada vez que se crea un alma nueva, que ya no es tan común porque la Tierra está más completa… cuando se crean almas nuevas es porque hay necesidad de eso. Existe la necesidad de un nuevo tipo de energía que no se haya creado antes. Esa es la única razón por la que se crea un alma nueva. Esas almas nuevas son como huevitos, muy frágiles. Todo es muy nuevo para ellos. Toda la experiencia es muy nueva. Entonces, cuando pasan por todos estos planos y luego van a la Tierra, nada les resulta familiar. Nada es un recuerdo. Por eso estas almas nuevas, a veces, tienen que entrar suavemente. Todo puede les puede ser muy grande y abrumador.

Dobromira: ¿Cómo se conoce la necesidad de un alma nueva?

Serena: Porque se abre una brecha en un sistema de energía que no se puede equilibrar con los guías, y ellos lo saben. Es como si Dios lo supiera. Es como si la energía colectiva lo supiera. Es como tu cuerpo. Tu cuerpo es tu mundo. Todo funciona en conjunto para mantener el equilibrio. Pero a veces tienes antojo de algo como la sal. No sabes por qué, pero el resto de ti sí. Lo necesita para algo. El alma nueva que entra se necesita para algo. Realmente no sé qué porque no soy el creador.

Dobromira: Este lugar donde se crean estas nuevas almas... ¿es este el único lugar para la Tierra y todas las demás dimensiones, o todas las dimensiones tienen sus lugares para la creación?

Serena: Todas las dimensiones tienen sus lugares de creación. Y hay tantas dimensiones. A veces las dimensiones se fusionan y hay aún más lugares de creación. Hay tantos seres diferentes por ahí que todavía no conocemos. Dios lo sabe, pero nosotros como personas, no.

Dobromira: ¿Cuál es la composición de estas nuevas almas? ¿Cómo se hacen? ¿Puedes ver el proceso y describírmelo?

Serena: Todavía no tienen una forma física. No sé cuándo lo harán... eso es más adelante. Es sólo este lugar blanco. Es esta energía la que simplemente está flotando. Es como si las células comenzaran a juntarse porque hay un tirón magnético muy abajo para esta energía. La Tierra ya sabe lo que necesita. Es una especie de envío de intención de crearlo, y queda creado. Todas las energías correctas deben unirse. Y luego esta blancura que está en blanco pasa por este portal blanco y llega a donde yo suelo estar, que es donde las almas obtienen colores. Los colores constituirán la mayor parte de su composición. Y luego va y se le crea un propósito. Todo esto ya está establecido por la cosa que lo necesitaba. Entonces baja por una línea, y entonces nace.

Quedé realmente asombrada por esta revelación. Después de la sesión con Serena, sentí como si me hubieran despertado suavemente. Era como si la chispa de la divinidad se hubiera vuelto a encender en mí, recordándome mi verdadera naturaleza. Comenzó como un susurro en la quietud de mi mente: “Todo-Lo-Que-Es sintió un vacío que solo podía completarse por mi presencia, única. No soy casualidad soy deseada por Dios, quien me creó porque el Uno me considera una parte importante del Universo”.

Lágrimas de asombro llenaron mis ojos cuando sentí lo amada que soy por la Fuente. No se podía negar la poderosa energía de esta luz de amor. Se apoderó de mí. La chispa de este entendimiento creció más y más con el paso de cada día. Con el tiempo, ha cambiado suavemente la forma en que me veo, y veo mi valor como persona.

El propósito del alma

Ariel, cuya historia de curación compartí en el capítulo anterior, también experimentó el poderoso conocimiento de que su ser fue creado por el Espíritu que buscaba crear y experimentar a través de ella.

Cuando Ariel se paró frente a su panel de cinco guías, reconoció que su presencia tenía un gran significado para ella. Describió esta conciencia de la siguiente manera:

 

Ariel: Son más que un maestro, son casi como un padre. Son más ilustrados. Confío en ellos. Tengo amor por ellos, y ellos tienen amor por mí. Pero no sé de dónde son. Simplemente es así. Estoy tratando de averiguar cómo se me asignaron.

Dobromira: Simplemente pregúntales. Ellos te lo dirán.

Ariel: Ellos me crearon. Soy casi como su hija. Ellos me manifestaron. Les pregunté  por qué. Contestaron: "Porque nos apetecía".

Dobromira: ¿Por qué se crean las almas?

Ariel: Dijeron que hay un espacio infinito para llenar y nunca se llenará. Vaya … ! ¡Vaya! Pensaba que las almas se crearon todas al mismo tiempo. No. Diciendo que todavía se están creando almas. Dicen que estoy atascada en el tiempo.

Dobromira: Pídeles que te expliquen.

Ariel: El tiempo es una ilusión, por supuesto, pero... el tiempo fue creado por entidades espirituales que participan en la realidad física con el propósito de restringir, de limitar. La realidad física tiene que aprender a no tener límites. Soy un pedazo de algo. Todo de mí no es esto. Soy un pedazo de ellos.

Dobromira: Pídeles que te expliquen sobre eso de que eres parte de ellos.

Ariel: Me manifestaron, [me crearon], para aprender compasión.

Tu alma se crea para cumplir un propósito. Esta idea, compartida tanto por Serena como por Ariel, tiene el poder de tomar nuestro condicionamiento negativo más antiguo y convertirlo en polvo. Sin embargo, a la mayoría de nosotros nunca se nos enseña que Dios pidió nuestra existencia. Y que, porque Dios lo pidió por nosotros, merecemos ser, existir. A la mayoría de nosotros se nos cría para creer que necesitamos probar nuestro valor y dar ciertos pasos para merecer la gracia de Dios. Nuestra misma existencia es la prueba de cuán dignos somos para el Universo. No existiríamos si no fuéramos deseados y amados incondicionalmente, incluso antes de que ser creados.

La siguiente historia es un ejemplo de cómo esta suposición limitante puede desaparecer tan pronto como descubrimos que ya somos amados por la Fuente.

*****

Estaba sentada en la playa, esperando que se pusiera el sol. Mientras contemplaba la belleza natural que me rodeaba, noté a un joven cerca con una cámara. Estaba tomando foto tras foto del arcoíris que bailaba en el cielo. Me di cuenta de que compartíamos cierto asombro ante la belleza de la naturaleza, así que decidí entablar una conversación. Muy rápidamente nos sumergimos en temas profundos y significativos.

Sam, que así se llamaba, compartió que estaba en una encrucijada. Sentía que su antigua vida había terminado y, sin embargo, no se había decidido por un nuevo camino. Unos días antes había escrito tres objetivos que tenía. Aunque nos acabábamos de conocer, dijo que se sentía cómodo compartiéndolos conmigo.

Su primer objetivo era ser dueño de una casa. Cuando escuché esto, asentí con comprensión: era un deseo válido.

Su segundo objetivo era “hacer algo grandioso o importante. Alcanzar verdaderamente la grandeza y ser capaz de reconocer esa cualidad en mí mismo.” Asentí de nuevo. ¡Qué gol más admirable! Cada uno de nosotros sabe que hay algo grande dentro de nosotros; lo sentimos muy dentro. Nos regaña en los momentos tranquilos y silenciosos de nuestro día, recordándonos una promesa que nos hicimos hace mucho tiempo.

Este sentido es nuestra esencia tratando de expresarse. Es el poder de la Fuente reflejado en nosotros; es la llama inextinguible que busca crecer y expresarse plenamente en el mundo. Es nuestra grandeza. Hace que cada uno de nosotros busquemos nuestro propósito y nos mantiene inquietos hasta que expresamos nuestros dones únicos de manera significativa y satisfactoria, formas que permiten que el Dios dentro de nosotros se expanda y se reconozca verdaderamente a sí mismo como grandeza.

Hasta aquí apoyaba totalmente las metas de Sam. Así fue, hasta que llegamos al número tres. El tercer objetivo de Sam era "ganar el privilegio de merecer el respeto de todos y de cada uno". Esta vez me dio cosa.

No necesitamos ganar algo para merecer. Ya nos lo merecemos todo. Pero soy consciente de que sin contexto estas palabras no tendrían sentido. Así que decidí contar a Sam lo que me había enseñado la regresión de Serena.

Describí su sesión con el mayor detalle posible. Cuando terminé la historia Sam me miró a los ojos y dijo: "¡Oh, guau!" Siguió mirándome pero me di cuenta de que ya no me veía. Sabía que estaba conmovido. Pude ver las capas de creencias cambiando poderosamente, como las placas tectónicas de la Tierra formando una nueva topografía en su mente.

En ese momento el sol se estaba poniendo y la majestuosa belleza de los tonos rojos y naranjas nos envolvió a ambos. En el silencio del momento ambos nos reconectamos con la verdad de quiénes somos y cuánto merecemos.

Varios meses después, contacté a Sam. Le conté sobre el libro que estaba escribiendo y le pregunté si podía incluir la historia de nuestra conversación. Él accedió amablemente. Me envió un mensaje de texto con sus objetivos originales. También agregó un comentario.

“Los objetivos 2 y 3 son más o menos iguales”, escribió. “Pero recuerdo que me convenciste de la verdad de que todos ya merecen respeto solo por estar aquí, en la Tierra”.

Una sensación de exaltación recorrió mi cuerpo. ¡Él me escuchó! Y no sólo me escuchó, sino que también me creyó.

Dar plena expresión a nuestra grandeza es derecho otorgado por Dios. Cada uno de nosotros ya cuenta con todo el amor, apoyo y admiración de Todo-Lo-Que-Es en el camino de nuestra expansión. Es solo nuestra creencia de que necesitamos “ganarnos” el privilegio de merecer lo que nos impide conocer y expresar, plenamente, la grandeza de quienes ya somos.

¿Quién expulsó a quién?

El poder divino está eternamente presente en nosotros. Es la semilla que se planta en nuestro centro en el momento de nuestra creación. Sin embargo, una vez que nacemos en la Tierra, nos olvidamos de nuestra naturaleza Divina, tal como lo hizo Sam. Confiamos solo en nuestros cinco sentidos y nos sentimos solos y alejados de la Fuente. Sentimos que debemos trabajar duro para probarnos, para poder merecer la gracia de Dios. Buscamos reconectarnos con el sentimiento de felicidad que nuestra alma recuerda para superar el sentimiento de separación. Esa percepción de separación, la creencia de que nuestro objetivo está fuera de nosotros, se ha representada durante mucho tiempo en la fábula de la expulsión de Adán y Eva del Jardín del Edén.

La Cábal es el estudio judaico de los grandes misterios de lo Divino. Su texto fundamental es el Sefer ha-Zohar, comúnmente llamado Zohar, que significa “el Libro del Resplandor” o “del Esplendor”. El Zohar es el relato de las aventuras de rabinos que vagan por las colinas de Galilea, entremezcladas con enseñanzas a través de sus conversaciones sobre el significado oculto de la Torá.

En una interpretación radicalmente diferente de la historia del Jardín del Edén, el Zohar sugiere que en lugar de que Dios expulsara a Adán del Jardín, Adán en realidad expulsó a Dios al divorciarse de la forma femenina divina de Dios, la Shekinah.

La Cábala enseña que Dios es igualmente masculino y femenino, pero depende de los seres humanos hacer que Dios sea completo al manifestar una realidad de Dios en la Tierra que honre tanto sus aspectos masculinos como femeninos. Según la Cábala, el pecado de Adán fue que buscó solo el vínculo físico con Shekinah. Al hacerlo, separó a Shekinah de las otras nueve emanaciones, o sefirot, del Espíritu e interrumpió la unidad del Universo. Como resultado, Adán expulsó a Dios del Jardín del Edén.

Como explica el erudito en Cábala, Daniel Matt, en una entrevista para el San Francisco Chronicle, “Creo que lo que el Zohar significa es que todavía estamos en el jardín pero, simplemente, no nos damos cuenta porque hemos perdido el contacto con la dimensión espiritual de la vida. Por eso viene el desafío de restablecer nuestra relación con Dios, de redescubrir cierta intimidad con la dimensión espiritual de la vida”.

El Zohar nos enseña que continuamos residiendo en el Jardín del Edén, incluso ahora. Desafortunadamente no lo reconocemos porque nos hemos separado de Dios. Para experimentarnos viviendo en el paraíso del amor Divino, necesitamos reconectarnos, restablecer nuestra relación con el Infinito. Para sentir la presencia de la Fuente, no necesitamos buscar algo fuera de nosotros. La fuente experimentó la necesidad de nosotros y nos creó. Al sintonizarnos y apreciarnos como una magnífica creación de Dios, que contiene tanto su aspecto masculino como el femenino, reafirmamos nuestro origen. Al apreciar la belleza de lo que Dios ha creado en nosotros, apreciamos nuestra Fuente. Porque en verdad, somos de lo que venimos. Somos Dios Al conocer nuestro resplandor Divino, conocemos a Dios.

La historia de Damián

Damián estaba acostado en el sofá de mi oficina, en estado de trance profundo. Acababa de revivir una vida que le había provocado muchas emociones. Le pedí que se alejara de esas escenas y permitiera que emergieran imágenes de la próxima vida. Lo que comenzó a describir me sorprendió:

 

Damián: Es una flor anaranjada; floreció con un tallo muy verde y muy delgado. Casi no sé cómo se sostiene la flor con un tallo tan pequeño. Y soy yo Y está respirando. Casi que se expande y contrae.

Dobromira: ¿Dijiste que la flor eres tú?

Damián: Sí.

Dobromira: ¿Cómo se siente ser la flor?

Damián: Se siente increíble. Abro y cierro. Tengo el control total de cuándo abro y cierro. ¡Decir ah! ¡Y soy expansiva! Y soy interesante. Soy detallista. Estoy en un jardín

Dobromira: Háblame de tu entorno.

Damián: Nadie es como yo. Nadie. Hay algunas otras flores pequeñas, pero yo soy la más libre, la más expresiva. Siento que esta confianza viene de estar en esta flor. Tengo una parte superior muy amplia e impresionante. ¡Pero un tallo tan delgado! Y este tallo de alguna manera me sostiene. Nunca puedo irme ni moverme de allí, y eso está bien.

Dobromira: ¿Alguna vez te has preguntado cómo sería poder moverte e irte?

Damián: Ni siquiera me importa. ¿Por qué querría dejar esto? Tengo todo lo que necesito. Me gusta tener esta esencia, esta energía y esta poderosa belleza, que [las otras flores] ven.

Dobromira: ¿Cómo llegaste a ser esa flor, esa hermosa flor, con una esencia tan hermosa y poderosa?

Damián: No me acuerdo. No recuerdo el proceso para llegar allí. Es casi como si ya estuviera allí. Así que ni siquiera sé si crecí.

Dobromira: ¿Sientes que siempre estuviste ahí?

Damián: Sí. Ya sabes, eso es exactamente. Se siente eterno.

Dobromira: ¿Cómo te sientes acerca del sol?

Damián: Eso es lo que adoro. Siento que el sol me ha hecho así de hermosa. Porque cuando veo el sol me abro. Casi como si el sol me estuviera llamando a abrirme. Y luego me voy.

Dobromira: ¿Qué quieres decir con eso?

Damián: Subo hacia el sol y voy dejando la flor. Lo que sea que soy ha dejado esa flor. Y no sé por qué, y quiero volver. Pero no creo que ese sea el plan. ¡Eso fue increíble! Ahora lo sé... ¡guau! Ahora me doy cuenta de que yo no era esa flor. Pero yo también era esa flor.

Dobromira: Cuéntame más sobre esta realización.

Damian: Estoy subiendo en espiral. Es como si hubiera llegado a un punto de éxtasis más allá de la flor y eso era necesario. Y ahora subo en espiral hacia el sol. Y veo que me voy de la flor. Y ahí es cuando me doy cuenta de que yo no era la flor. Quiero decir, yo era la flor, pero no era la flor.

 

Mientras Damián se acercaba, comprendió que él también era el Espíritu que se conocía a sí mismo como la flor. No había separación entre el alma y su expresión en lo físico. El alma que creó la flor se maravilló de su creación, y la flor, como representación física, vio su belleza en la energía de su Fuente. La flor nos muestra lo natural que es reconocer lo bueno y loable de nosotros. La flor vivió como nos enseña Rumi: “¡Brilla como si todo el universo fuera tuyo!”

En ese momento de amar y expresar plenamente su belleza, la flor estaba cumpliendo el propósito de su existencia. La flor no dudó de si merecía ser tan hermosa o si se le permitía disfrutar de su perfección. La flor simplemente disfrutó de lo que era y le dio plena expresión.

Permítete ser como la flor. Dite a ti mismo en voz alta: “Merezco existir. Soy hermoso y me amo”. ¿Cómo te hace sentir decir estas palabras? Si te causa incredulidad o incomodidad, te animo a que te deshagas de todos tus sentimientos de inquietud. Mira tu esencia Divina y atesórala, porque es la luz de Dios que reside en ti. Practica lo que la Biblia nos enseña: “Por lo demás, hermanos, Todo-Lo-Que-Es verdadero, todo lo noble, lo justo, lo puro, lo amable, lo admirable, si algo es excelente o digno de alabanza, en tales cosas pensad” (Filipenses 4:8).

Piensa en las grandes cualidades y atributos que tienes. Actúa de manera que refleje tu magnificencia. Habla amorosamente de la hermosa persona que eres. Enamórate de ti mismo. Cuídate suavemente como un jardinero que cultiva una rosa única. Recuérdate a ti mismo que la Fuente te atesora por la persona que eres hoy. Tu combinación única de energías no es una coincidencia: fue pedida. Tú perteneces a este mundo. Perteneces a la energía siempre expansiva de Dios. Eres una parte importante y valiosa de Todo-Lo-Que-Es.

Mereces existir. Te mereces el amor incondicional que la Fuente tiene por ti. Todo-Lo-Que-Es experimentó una profunda necesidad que sólo tu alma podría satisfacer. Tómate esto en serio y llénate del poder rompedor de paradigmas del amor que te creó.

La comprensión de que cada uno de nosotros fue pedido por toda la existencia, por Dios, tiene implicaciones profundas. Esta semilla de la verdad tiene un poder enorme. Tiene el potencial de despertar a todos y cada uno de nosotros del letargo de la negación y el olvido de nuestra esencia. Si tuviera que escribir el código por el que vivirían las generaciones futuras, las primeras oraciones dirían lo siguiente:

Regocíjate en tu existencia, querido. Todo-Lo-Que-Es te creó porque desea conocerse a través de la combinación única de energías que tú eres y la perspectiva única que brindas. Ya te lo mereces. Eres amado incondicionalmente y enormemente valorado por lo que eres. Estás apoyado en cada paso de tu gloriosa expansión. Ámate como Dios te ama. Ahora ve y vive la vida, atesorándote de la manera en que la Fuente te atesora, expresando plenamente tu belleza Divina y sabiendo para siempre la verdad de quién eres.


Ejercicio: Ámate todos los días

Te animo a crear una práctica diaria de conexión con la Fuente y con su naturaleza Divina. Reserva 20 minutos de tiempo ininterrumpido, ya sea al principio o al final del día. Haz que sea tu momento para abrirte a amarte y confiar en ti. Toma conciencia de tu respiración. A medida que disminuya la velocidad de la respiración, comienza diciendo la palabra amor en tu mente. Siente la energía del amor surgir dentro de ti mientras la evocas con este canto. Confía en tu intuición, y en el momento en que te sientas bien, comienza a decir en tu mente, soy amor. Y cuando te sientas bien otra vez, cambia eso a Me amo. Siente la energía del amor moviéndose a través de tu cuerpo. Deja que te abrace. Deja que te asegure lo amado y apoyado que eres. Recuerda, el único objetivo de esta meditación es calmarte y sentir la cálida energía del amor de Dios por ti, y tu amor por ti mismo. Cuando salgas de la meditación, permite que la energía, pacífica y nutritiva del amor, fluya en tu vida diaria.

Para aquel que prefieren meditar con una grabación guiada, ofrezco la meditación que he creado y escucho todos los días. Se centra en las ideas de amor propio y confianza. Descarga esta grabación de forma gratuita desde mi sitio web: www.mirakelley.com/meditation-download.

Será mi mayor alegría apoyarte en la afirmación de tu valor y merecimiento a través de esta meditación. Te ayudará a despertar a tu hermosa esencia, abrazar el amor incondicional que la Fuente tiene por ti y reconocer que, realmente, mereces expresarte al máximo.


Si retuvieras alguna de las muchas ideas compartidas en este libro, espero que sea la del conocimiento que te mereces, el que la Fuente te apoya y ama incondicionalmente. Cuando la permitas entrar [en ti], esta comprensión profunda transformará tu vida como lo ha hecho con la mía. Me ha permitido sumergirme, por completo, en la singularidad de lo que soy, y expresarlo para que pueda crear una vida con significado y satisfacción. En el capítulo que sigue compartiré contigo cómo cambió mi vida una vez que comencé a reconocer y confiar en que la luz de Dios mismo brilla a través de mí.

*****

CAPÍTULO 10. CONFÍA EN TI Y SIGUE TU ILUSIÓN

 

Como entidad individualizada el alma es libre de crear experiencias para crecer en su conciencia. Al hacerlo cumple su propósito, que es crecer y aprender más sobre sí misma. A través de eso, tu alma ayuda a Todo-Lo-Que-Es a saber más sobre sí mismo.

Cuando un alma se prepara para la encarnación física el plan que crea suele ser muy general. A veces se pueden agregar detalles específicos pero en su mayor parte el alma simplemente elige uno o dos temas que explorar. Estos temas son más como grandes trazos de intención que guiones pormenorizados. Se eligen para beneficiar a la Superalma, a todas las demás almas complementarias del alma, al grupo familiar del alma y, en última instancia, a Todo-Lo-Que-Es.

Podríamos decir que el tema de uno es su destino. Sin embargo, ahí es donde termina cualquier noción de predeterminación. La verdadera fuerza que opera una vez que encarnamos es el libre albedrío: la capacidad de elegir. Lo que a una persona le parece destino es un asunto elegido libremente por su alma. Una vez que se selecciona un tema para una encarnación esa persona es libre de explorarlo de la forma que elija. Tomemos, por ejemplo, el caso de la abundancia. El alma puede elegir nacer en una familia pobre, de clase media o rica. A partir de ahí la persona es libre de elegir cómo vivir su relación con el dinero. Piensa en todos los millonarios hechos a sí mismos, todos esos herederos que han derrochado fortunas y las innumerables personas que luchan de sueldo en sueldo. Otro ejemplo es el tema del amor.

El tema de la vida actual de John es la comprensión, pero su Yo Superior dijo que no estaba predeterminado cómo exploraría John esa materia. Me dijeron que hasta ahora le estaba yendo bien pero que, con el tiempo, podría optar por enfermar físicamente para aprender a comprender. En otras palabras, constantemente se realizan elecciones y ajustes durante el progreso de una vida. En una parte de mi conversación con el Yo Superior me dijeron que John tiene otras almas complementarias que han explorado los temas de la vida y la muerte, a menudo muriendo en una guerra.

Debido a que la comprensión equilibrada es el enfoque del Alma Suprema, varios fragmentos del alma explorarán el mismo tema, cada uno a su manera. Aquí es donde encaja el concepto de karma. Karma, como se analiza más adelante, es simplemente el deseo del Alma Suprema de conocer la misma materia a través de diferentes puntos de vista. Por lo tanto, alguien que ha asesinado en una vida puede tener almas complementaria en una vida diferente que aconseje a los asesinos, evite que suceda un asesinato, se convierta ella misma en víctima o nazca como padre de la víctima de la almas complementaria. En cada caso, el alma tiene la oportunidad de explorar la solución de conflictos a través del amor. Las variaciones son ilimitadas y el alma es libre de elegir cómo conocerse a sí misma, de manera única, a través de ese tema.

El verdadero significado del karma

El Karma es una representación del deseo del alma por tener equilibrio en sus experiencias. Representa la búsqueda del alma para aprender desde diferentes perspectivas. Cada alma crece en comprensión al experimentar la existencia desde diferentes puntos de vista. Estas diferentes perspectivas podrían vivirse a lo largo de una vida, con persona que va de pobre a rica, por ejemplo. O podría suceder a lo largo de muchas vidas, como persona que experimenta el tema de la abundancia en sus diferentes variaciones.

No hay juicio en el karma; no es punitivo. No se te impone desde el exterior; es simplemente el deseo del Alma Suprema de tener equilibrio en su aprendizaje. Si tu alma siente la necesidad de equilibrar sus energías en base a experiencias ya sea en la misma vida o en otra, encontrará la forma más adecuada de lograr ese equilibrio. El resultado es lo que se llama karma. Cada acción crea un resultado. Cuando experimentas el efecto resultante, puedes valorarlo y decidir si ese es el resultado que prefieres. Si es así, te has enterado de una preferencia que tenías. Si, por el contrario, el efecto no te agrada, simplemente debes tomar la decisión de actuar de manera diferente la próxima vez.

Lamentablemente, hemos aplicado el significado de “juicio” al término karma. Esto nos da otra forma de entendimiento menor, el jugar a ser víctima. Es irónico, porque solo tú tienes el poder de liberarte de los efectos del karma. El concepto tópico del karma, como pago de viejas deudas, es falso. Equilibrar las energías negativas y las experiencias que has creado no significa que necesites experimentar la negatividad. Puedes optar por tener un reconocimiento consciente de tu deseo de equilibrar tu vida, y luego puedes tomar acciones positivas que te permitirán equilibrar la situación tal como es. Debes saber que eres libre de elegir quién eres. Con cada elección dirige tu experiencia. Estás creciendo y expandiéndote, con cada paso que das, en la dirección que prefieras. Eres libre de ser quien quieras ser, y de experimentar la vida como esa persona.

Somos los únicos que juzgamos lo bien que lo hacemos en nuestras encarnaciones. No hay nadie "allá arriba" que lleve la cuenta. Vivimos para nuestra satisfacción. Asumimos una vida porque estamos ansiosos por ser más, experimentar más y crear más. Es nuestra alegría estar al servicio a través de la existencia de nuestras vidas.

El propósito de los temas

Una vez que nos damos cuenta de nuestros temas somos libres de continuar trabajando dentro de los parámetros de esa lección, o concluirlos. Aunque los asuntos o temas se eligen antes de nacer podemos completarlos en la mitad de la vida y luego el alma elegirá un nuevo tema para explorar. Es posible terminar una cuestión en lugar de trabajarla en otras vidas. Hemos elegido nacer en un momento en el que se explora, como tema común, la expansión de la conciencia colectiva. Por lo tanto, nuestro tema individual opera dentro de la cuestión colectiva, a saber, el cambio de conciencia que todos hemos acordado.

Te invito a colocar esta nueva idea en el fondo de la mente. La próxima vez que se presente tu desafío familiar en la vida, recuerda que tu lección viene con un botón de detonación incorporado. Todo lo que tienes que hacer es explorar diferentes enfoques para vivir ese asunto. Cuando encuentras la actitud mental que te hace sentir en armonía con toda la vida, incluso cuando tu tema todavía acecha en los rincones de tu mente, puedes estar seguro de que estás sentado directamente encima de ese botón. En el momento que elijas (y te aseguro que el momento llega inevitablemente una vez que estés listo), pondrás fin a la vieja cuestión. Seguirá una sensación de plenitud y una clara comprensión. Pero no importa cuán agradable sea la vista desde la cima que has conquistado, el explorador que hay en ti soñará con nuevos paisajes. Ahí es cuando elegirás un nuevo tema, a nivel del alma, a través del cual explorar la creación. Y la vida continuará sin problemas.


Ejercicio: Identifica tus temas

Para hacer este proceso, reserva de 15 a 20 minutos de tiempo en silencio. Ten cerca tu diario o una hoja de papel en la que puedas escribir. Haz una respiración profunda y suelta el aire lentamente. Ahora piensa en los patrones recurrentes en tu vida. ¿En qué áreas estás teniendo desafíos repetidos? Algunas de las lecciones comunes que exploramos tienen que ver con la abundancia, las relaciones y el poder. ¿Alguno de esas materias resuena en ti? Cuando contemplas seguir tus sueños, ¿qué miedos surgen? Cuando estás haciendo lo que amas, lo que es fácil para ti, en lo que eres particularmente bueno, ¿qué obstáculos se interponen en el camino? Anota todo lo que surja.

Un ejemplo de mi vida fue mi miedo a hablar en público. Me emocionaba compartir lo que estaba aprendiendo con los demás, pero una parte de mí tenía miedo de que la gente me viera. Tuve que superar este miedo y liberarme del tema de la impotencia como parte de convertirme en quien soy hoy.

Cuando haya terminado de escribir todo lo que se te ocurra, para responder las preguntas anteriores, lee todas las respuestas y busca el hilo común. Busca la esencia en el centro de todas esas respuestas. Ese es tu tema, tu asunto.

En los momentos y días que siguen, te recomiendo que trabajes en el proceso llamado “Cómo descubrir tus creencias limitantes, y transformarlas” del Capítulo 5. En esencia, tu tema es una idea neutral, es simplemente un campo de estudio para el alma. Son las creencias que has atribuido lo que lo ha convertido en un desafío. Al reemplazar las creencias negativas con suposiciones de apoyo, podrás redefinir tu tema y hacer que se convierta en una experiencia positiva para, finalmente, liberarlo por completo.


La discusión de temas es un lugar apropiado para abordar la idea de los errores. No importa lo difícil que sea perdonarnos, es importante entender que no hay fracasos en la vida. Cada punto de vista proporciona aprendizaje y crecimiento. Toda experiencia es beneficiosa para la expansión del alma. Por lo tanto, todo está bien. Realmente así es.

Puede que no prefieras ciertas situaciones en tu vida, pero eso no significa que debas pensar en ellas en términos negativos. No te devalúes, ni devalúes tus experiencias. Todo lo que creas es valioso para tu alma. Todo es apreciado y respetado. Date cuenta de que las experiencias que ya no te gustan te han servido para saber cómo no quieres conocerte.

No puedes cambiar aquello contra lo luchas. El cambio llega cuando amas, aceptas y aprecias la totalidad de ti mismo. Ninguna guerra, interna o externa, ha traído jamás una paz permanente. Sólo el amor y el perdón pueden traer paz. Ya no necesitas involucrarte en batallar contigo mismo. Haz las paces contigo abrazando incondicionalmente la bondad que eres. Lleva las situaciones que te hacen sentir vergüenza a tu corazón. Neutraliza la carga negativa infundiéndoles tu amor. Perdónate y ámate por lo que has aprendido. Si haces esto, podrás trascender sin esfuerzo lo que luchaste antes. Podrás transformar cualquier situación. Podrás moldear tu vida en la dirección de tus sueños, incluso mientras continúas explorando tus temas.

Abraza el poder interior

Solo es posible salir de una situación una vez que reconoces conscientemente que estás creando tu experiencia de vida. No eres víctima de nada ni de nadie; eres un poderoso creador. Nuestra cultura nos enseña que las cosas siempre serán injustas debido a ese misterioso suceso llamado “suerte en la vida”. Pero debemos reconocer que la norma cultural no necesita ser nuestra experiencia. Creamos la experiencia y la realidad.

Hasta este punto, tu experiencia de vida puede haberse basado en las creencias de quienes te rodean, creencias que has absorbido inconscientemente o que has dado por sentadas. Pero esos son solo pensamientos que suenan en tu mente como un disco rayado que reproduce la misma melodía una y otra vez.

Desde una perspectiva neurológica los pensamientos que tienes sobre ti y tu vida no son más que pulsos eléctricos que viajan por tu cerebro a lo largo de vías celulares. Estos pulsos y vías, tu cuerpo los ha creado para transferir y asimilar información. Debido a que has estado pensando los mismos pensamientos una y otra vez, estas estructuras biológicas están muy bien asentadas. Para la mayoría de nosotros se han convertido en la forma predeterminada de pensar sobre temas o asuntos particulares. Por eso puede parecer que un pensamiento más positivo no parezca cierto al principio pues contradice tu sistema neuronal establecido. A pesar de ese sentimiento, quédate con los pensamientos más positivos. Cada nuevo pensamiento cambia tu cerebro conectándolo de manera diferente, cambia tu perspectiva. Cada nuevo pensamiento crea una nueva realidad.

Has diseñado hábilmente cada aspecto de tu vida. Ahora que conoces tus temas, eres libre de elegir probar otra cosa. El mundo no necesita cambiar para que empieces a sentirte mejor con tu vida. En cambio, enfócate en transformar tu mundo interior. Confía en que, con el tiempo, el exterior reflejará los cambios que suceden en de ti.

Toma conciencia de tus creencias. Comienza a examinarlas y permite que pensamientos nuevos y de mayor apoyo reemplacen a los antiguos. Tienes ese poder. Tienes el poder de cambiar. Eres el amo de tu universo. Hay un sentido muy profundo de empoderamiento, y un sentimiento de pertenencia, cuando este punto de vista se convierte en tu visión de la vida.

La mayoría de nosotros creamos “por defecto”, es decir, no sabemos que estamos creando, por lo que no podemos tomar decisiones conscientes sobre lo que creamos. Incluso la creación "predeterminada" es una experiencia valiosa. Nos enseña que hay algo más que preferiríamos. Somos libres en este momento para reclamar, elegir y convertirnos, en nuestros pensamientos, en nuestros hechos y acciones, en la persona que queremos ser.

Una vez más, el verdadero poder existe en el momento presente, donde creamos pasado y futuro y lo que elegimos ser. Es sólo en el momento presente donde podemos experimentar la vida. Como hemos explorado en este libro, la evolución consecutiva de sucesos que consideramos como “tiempo” no es más que una ilusión, una construcción conveniente. Nuestra mente pensante, nuestro ego, que está tan intensamente centrado en la existencia física la utiliza como herramienta organizadora.

Los recuerdos también se crean en el momento presente. Los recuerdos no son más que pensamientos que estás pensando en el ahora. Los recuerdos que eliges experimentar, y la forma en que eliges experimentar esos sucesos "anteriores", están determinados por las percepciones presentes que tienes en tu mente, y las creencias actuales que tienes sobre quién eres. Las cosas que te rodean, (relaciones, objetos, acontecimientos, etcétera), no son más que sucesos neutrales. Nada en la vida tiene un valor asignado. Es tu interpretación, que se basa en tus creencias, lo que da significado a las circunstancias.

Tú eres el que tiene el poder de asignar valores subjetivos a las cosas en función de tu pensamiento. Por ejemplo, una foto de un bistec hará que algunos saliven y anhelen un delicioso trozo de carne. Otros, quizás los que crean en el veganismo, encontrarán la foto repulsiva pues representará todo aquello a lo que se oponen. Son los valores del observador dan a una misma foto la etiqueta de “bueno” o “malo”.

De manera similar, las circunstancias de tu vida son sucesos neutrales. Eres tú quien ha proporcionado las etiquetas de "bueno" y "malo". Pregúntate: "¿Cómo me benefició experimentar ciertos sucesos negativos en mi vida?" Cada situación es una oportunidad para aprender, ¡incluso si la lección es que no quieres volver a aprender sobre ti mismo de esa manera! Sabiendo que cada situación es neutral, puedes tomar una decisión para notar los beneficios que has obtenido de cada experiencia y luego decidir la nueva forma en que eliges contar tu historia. Enfatiza los beneficios que has experimentado y las ventajas que obtuviste. Al adoptar este enfoque, interpretando todo como algo positivo ya no te sentirás marginado ni te auto compadecerás. Después de todo, ningún ganador es una víctima.

Eres el narrador de tu vida. ¿Cómo te gustaría que se contara tu historia?


Ejercicio: Cómo romper los lazos de limitaciones anteriores

Me gustaría presentar un poderoso proceso que permite una rápida transformación. Te ayudará a romper fácilmente los lazos de las anteriores limitaciones. Este ejercicio es muy útil, no solo para aquellos que se encuentran en un lugar desafiante, sino también para aquellos que buscan transformar sus creencias sobre cualquier aspecto de la vida, incluida la autoestima, el dinero o las relaciones personales. Puedes hacer este ejercicio con un terapeuta o con un amigo de confianza. Puedes leer el texto en una grabadora para que puedas reproducirlo por ti mismo. O simplemente puedes leer las instrucciones y guiarte a través del proceso mientras te encuentras en un estado de meditación. Permite que tu intuición determine la mejor manera de hacer este ejercicio y usa la imaginación libremente. Asegúrate de darte al menos 20 minutos de tiempo ininterrumpido para completarlo.

Adopta una posición cómoda y cierra los ojos. Después de hacer algunas respiraciones lentas, profundas y relajantes, imagina que eres un bebé en el vientre de tu madre. Mírate como la creación perfecta que eres. Siente lo cálido y seguro que es estar en el vientre de tu madre. Siente tu esencia Divina y sabe que eres nutrido, amado y siempre asistido. Tienes todo lo que necesitas. Luego, permite que tu imaginación to lleve a través del nacimiento, de la forma en que deseas que haya sido tu nacimiento. Siente cómo sería tomar tu primera bocanada de aire. Imagina cómo se sentiría ser recibido en este mundo con gran alegría, amor y emoción.

Usa la imaginación para ver cómo sería tener la infancia que te gustaría haber tenido. Sé el niño que se convierte en el adulto que te gustaría ser ahora. No censures tu imaginación con restricciones sobre cómo fue realmente, o cualquier otra limitación. Pinta todo en tu cabeza con la mejor luz posible.

¿Cómo te tratarían tus padres? ¿Te gustaría que algún suceso se hubiera desarrollado de manera diferente? ¿Hay sucesos que habrían tenido que ocurrir, o aquellos que nunca tendrían que haber sucedido? ¿Qué verdades te comunicarían tus padres y maestros? ¿Te gustaría que tu familia tuviera más o menos dinero, o vivir en diferente lugar? ¿A dónde irías a la escuela? ¿Te gustaría tener amigos diferentes?

Imagínate cómo se enseñaría a este nuevo niño, a ese nuevo tú, sobre su valor y autoestima. ¿Qué tipo de creencias te gustaría que este niño tuviera sobre el amor, las relaciones personales, el dinero, el trabajo y todo lo demás? Dale al niño esas nuevas ideas y formas de ser. Este niño confía en ti y absorbe lo que le enseñas como verdad absoluta. Siente cómo estas nuevas formas de conocerte quedan impresas de manera permanente en las estructuras energéticas y celulares de ese hermoso niño.

Ve a este niño crecer y convertirse en adulto. Ve a este adulto como la versión ideal de ti. ¿Qué quieres ser de mayor? ¿Cómo es tu vida más plena y feliz? ¿Qué tiene de diferente esta versión de ti? ¿Cómo vive la vida esta versión?

A continuación, imagina que la versión ideal de ti, y de quién eres hoy, se atraen la una a la otra. Siente cómo tu ideal se fusiona con tu yo actual, siente cómo los dos se vuelven uno. Siente como sentirías ser ese nuevo yo ideal. Siente elevarse tu vibración. Deléitate con esta energía sabiendo que esto es lo que eres ahora. Esta es una nueva realidad y este es el nuevo tú. Comprométete a vivir como la nueva versión de ti mismo.

Dentro de ti contienes ese niño. Has cambiado a una realidad [nueva] en la que tienes [como pasado a] este niño. Sabe, que ahora has reestructurado la idea de tu infancia. Ahora eres libre de hablar y actuar como la versión adulta de ese niño. Sabe, que no hay nada de tu pasado que te detenga. Elige tu pasado preferido. El pasado se crea en el presente. Creas un nuevo presente, creas la vida de tu yo ideal al crear un nuevo pasado. Elige un pasado que apoye tu presente ideal, uno en el que vivas tus sueños.

Al hacer este ejercicio entrarás en un estado alterado de ondas cerebrales, un estado de hipnosis. Al igual que mis clientes, saldrás del estado de trance sintiéndote diferente, como si fueras una persona diferente. Te sentirás más ligero. Te sentirás más optimista, como si tuvieras menos peso sobre los hombros y más espacio para respirar. A través de este proceso te darás permiso para convertirte en tu mayor potencial: el verdadero tú, el más creativo, expresivo y alegre. Quédate con este sentimiento. Permite que se codifique en cada célula de tu cuerpo como tu nueva vibración. Confía en él, actúa en consecuencia y desde este lugar de energía construye sobre él la vida que le gustaría tener.

Si aparece en la cabeza el pensamiento, ¡Pero no es real!, recuerda todo lo que has aprendido en este libro sobre tus posibles yoes y otras realidades paralelas. Recuerda que eres el narrador de tu vida y que lo “real” es una experiencia muy subjetiva. Hay muchas versiones diferentes de cada realidad posible, y cada una es "real" para quienes la experimentan. No te animo a tejer una red de mentiras que contar a tus amigos; yo te animo a cambiar tu energía, tu alineación, tus actitudes, y creencias. Te animo a que te liberes y experimentes la vida de la manera que te plazca. El hecho de que algo no haya ocurrido en la vida que conoces y recuerdas no significa que no puedas obtener valor de ello. Solo necesitas experimentarte a ti mismo de manera diferente. Puedes cambiar a una realidad paralela donde eres esa persona. El único permiso que necesitas para vivir una vida plena es el tuyo. Date ese permiso. El cambio es así de fácil.


Milagro tras milagro

Ahora me gustaría volver a la historia que usé para abrir este libro: la historia de cómo pasé de ser abogada corporativa a servir a las personas en su crecimiento y expansión espiritual. Es una historia de cómo rompí los lazos de las limitaciones anteriores y aprendí que tengo alas y puedo volar. La continuación de la historia es el mejor ejemplo posible que puedo darte sobre la mayor lección que he aprendido: confiar en mí misma y seguir mi entusiasmo lo mejor que pueda en cada momento.

Tras experimentar la curación milagrosa de mi problema temporomandibular a través de la regresión a vidas pasadas, renové mi entusiasmo por la regresión. Leí todos los libros que pude encontrar sobre vidas pasadas y experiencias cercanas a la muerte. En mi esfuerzo por transmitir a las personas lo poderoso que es este trabajo, regalé innumerables copias de lo que había sido mi comienzo en todo esto el libro, “A través del tiempo hacia la curación”, de Brian Weiss. Mi pasión estaba encendiendo chispas en muchos corazones. A pesar de mi exigente horario de trabajo, asistí a todos los seminarios sobre vidas pasadas que pude. Hice retroceder a todos los miembros de la familia y, sobre todo, a mi amada pareja. Incluso le enseñé a mi compañero cómo hacerme retroceder y, a menudo, le pedí que lo hiciera. Como mencioné anteriormente en el libro, John fue el primer extraño con el que tuve una sesión. La experiencia positiva que creamos juntos me dio la confianza y el deseo de exponerme aún más, abriéndome a ver clientes cada vez que podía.

Al mismo tiempo trabajaba para liberarme de las creencias limitantes sobre el dinero. Reconocí los miedos, ya que siempre estaban allí, mirándome. En mi mente, no parecía posible que sanadores o curanderos se ganaran la vida. Lo que me mantenía en la profesión legal eran las creencias de mis padres sobre el dinero. Usando lo que estaba aprendiendo a través de la regresión, comencé a ver que mis padres habían tomado, a su vez, las creencias de sus familias y cultura. Una vez que comencé a desentrañar las creencias, me di cuenta de que eran suposiciones que ni siquiera me pertenecían. Permití que surgieran todos los pensamientos y temores. Neutralicé las cargas emocionales meditando usando Técnicas de Liberación Emocional, también conocidas como “tapping” o golpeteo, en inglés), y realicé los ejercicios que se ofrecen en este libro. Luego redefiní cada emoción de acuerdo a lo que quería. Sabía que mi persona tenía todo el derecho a elegir cómo quería ver el mundo y la vida. Una vez que se aclaró mi energía en torno al dinero, fue como si se me abriera un mundo completamente nuevo de posibilidades.

Cada vez más, me permitía convertirme en la persona que sabía que era. Debido a que confié en la regresión y me dediqué tanto como pude, más y más oportunidades comenzaron a presentárseme.

Una de esas oportunidades fue una invitación que vino del Brian Weiss. Brian y su hija, Amy, estaban escribiendo un nuevo libro que detallaba las historias que la gente tenía como resultado de asistir a sus talleres, leer sus libros, escuchar sus audios o usar la regresión. Todos los antiguos alumnos de Brian recibieron un correo electrónico invitando a contribuir al libro. Presenté tres historias: dos de mis regresiones y una de un cliente. Aunque Brian y Amy recibieron cientos de historias de regresión, mis tres se seleccionaron y se publicaron en el libro Los milagros ocurren. Estoy verdaderamente agradecida a Brian y Amy por el reconocimiento y por la oportunidad de compartir las lecciones que aprendimos tanto mi cliente como yo.

Y luego hubo un momento en el que me di cuenta de que me había expandido tanto que ya no podía intentar encajar en mis viejas formas de ser. Llegó después de que dirigí una sesión para el doctor Wayne Dyer.

Varios meses antes había hablado con una amiga que me dijo que Wayne estaba liderando un grupo de personas en una gira por Europa, llamada "Experimentando lo milagroso". Mi intuición reverberó ante la palabra milagroso. Sabía que Wayne tenía leucemia y, de algún modo, en el fondo sabía que estaba preparado para un milagro: el de la curación. Compartí esta intuición con mi amiga, quien sabía que las sesiones de regresión que facilito tienen un componente sanador muy poderoso. Le dije que pensaba que Wayne podría beneficiarse si trabajábamos juntos, y ella me animó a acercarme y ofrecerle una sesión de regresión.

Podría haber descartado fácilmente la sugerencia. De hecho, inicialmente lo hice. Para empezar, no tenía ni idea de cómo ponerme en contacto con Wayne y no sabía si estaría interesado en trabajar conmigo. Imaginé que tenía muchos sanadores hábiles a su alrededor. Sin embargo, la sensación de que necesitaba hablar con él persistió y se volvió más convincente con el tiempo. Finalmente superé mi resistencia al recordarme que me encanta estar al servicio de los demás. Me dije a mí misma que si estoy destinada a ser una herramienta en las manos de Dios, entonces debo permitir que se desarrolle cualquier milagro que sea necesario. Varios días después, tras bastante investigación, encontré la dirección de Wayne y le escribí una carta.

Cuando Wayne me llamó aproximadamente un mes después, me había olvidado por completo de la carta. Hablamos brevemente de la posibilidad de hacer una regresión y estábamos a punto de colgar cuando interrumpí la despedida de Wayne. Antes de que supiera lo que estaba diciendo, me escuché diciéndole que había una historia de la experiencia cercana a la muerte (ECM) de una mujer que quería enviarle.

¿Por qué dje eso? Pensé. Pero había aprendido a apreciar y permitir mi espontaneidad, así que simplemente seguí con ella. Sin momento de pausa, Wayne me dio un número donde podía enviarle por fax lo que tenía en mente. No me preguntó qué quería enviar. Como me había dicho durante la conversación, Dios encuentra muchas maneras diferentes de hablarnos.

Mirando hacia atrás, estoy muy agradecido de que él confiara en sí mismo al contactarme, y confiara en mí para enviarle la historia de la ECM de Anita Moorjani, relato que había llegado a mi bandeja de entrada del correo electrónico justo el día anterior. Pertenezco a una lista de personas que se envían correos sobre temas espirituales, y una de las historias compartidas ese día fue un enlace a lo que Anita había escrito sobre su ECM. El extracto que se incluyó en el correo hablaba de la explicación de Anita de cómo todas las posibilidades existen simultáneamente. (Si desea volver a leer el extracto localícelo en este libro).

Es interesante pensar cómo el Espíritu supo llamar mi atención. Debido a mi regresión con John, la idea del tiempo simultáneo me interesó mucho. Sin embargo, las discusiones sobre la existencia de la vida después de la muerte no son novedosas para mí, por lo que si el extracto simplemente hubiera sonado como "una historia ECM interesante", lo más probable es que lo hubiera saltado. En cambio, me di cuenta de que cualquier cosa que Anita hubiera escrito valdría la pena.

Cuando mi impresora emitió 21 páginas, sentí una sensación de alegría, ¡mucho para leer! Sabía que me esperaba un regalo especial. Tomé un bolígrafo que me gusta mucho y me senté, lista para subrayar las gemas de sabiduría que sabía que encontraría.

Leer la historia de Anita me hizo sentir una sensación mágica de que me había encerrado en la verdadera vibración de mi espíritu. Sentí que me había encontrado con una magnífica parte de mí misma. A través de la regresión, yo como Anita, había llegado a saber que todas las dolencias físicas comienzan en un nivel energético. Incluso antes de leer su historia creía que el cuerpo era capaz de curarse instantáneamente por si mismo si se eliminaba la densa película de negatividad.

Y por supuesto, la historia de Anita hablaba de otro tema que me es muy querido: la simultaneidad de la existencia. Debido a que todos los sucesos se desarrollan simultáneamente en el tiempo, y todas las posibilidades existen en el mismo momento, podemos entrelazar las realidades y crear y experimentar lo que está más en armonía con nuestro mayor bien. Me encantó todo sobre la experiencia ECM de Anita y la información que compartió.

Sin embargo, en el momento en que Wayne y yo colgamos, esa pregunta volvió a surgir: ¿Por qué me siento tan obligada a compartir la historia de Anita con él? La única explicación que se me ocurrió fue que describía perfectamente lo que creía y lo que podía ofrecerle. Al enviarle la historia de Anita le estaba diciendo: “Sé que puedes curarte de la leucemia instantáneamente. Esa posibilidad existe, y puedo ayudarte a crear esa realidad”. Me hubiera llevado una conversación mucho más larga decir todo lo que Anita había puesto en palabras de manera tan simple y elocuente a través de su historia.

Ahora veo una segunda explicación a mi arrebato espontáneo: entiendo que soy parte de un proceso que buscaba llevar las inspiradoras palabras de Anita a todo el planeta. A Wayne le encantó tanto la historia de Anita que se la envió a su editor, Hay House, y los animó a encontrar a la autora y publicar su libro, ¡lo cual hicieron! Siguiendo y compartiendo mi entusiasmo serví a Todo-Lo-Que-Es y, a su vez, Todo-Lo-Que-Es me sirvió a mí. ¡Esto es la Unidad en acción!

El momento en que me llegó la historia de Anita fue absolutamente sincrónico. Si hubiera sido antes del día en que lo hizo no habría estado al frente de mis pensamientos y no la habría compartido con Wayne. Si hubiera llegado más tarde de ese día, lo más probable es que Anita y sus profundas palabras no hubieran recibido el enorme reconocimiento que están recibiendo ahora. La sincronicidad de esta unión nos recuerda, mágicamente, que todo sucede a la vez, en el mismo momento atemporal. Y por eso, llega en el momento en que necesitamos que nos sirva mejor para apoyarnos.

Unos meses y varias conversaciones después, Wayne y yo acordamos tener una regresión, así que volé a Maui para reunirme con él. Mi confianza en que Wayne sanaría iba más allá de la oración o la esperanza: era un conocimiento profundo y absoluto. Y, de hecho, la sesión de Wayne fue profundamente poderosa en su sanación.

Volví al correo electrónico que me trajo la historia de Anita para averiguar quién era el remitente. Se llamaba Ozgian Zulchefil, un ingeniero que vive en Bucarest, Rumania, y no lo conocía antes de contactarlo. Compartí con él las impresionantes sincronicidades que habían ocurrido, de las que él fue parte. Se alegró de que me hubiera tomado el tiempo para contárselo, aunque no recordaba dónde había encontrado la historia de la ECM de Anita. Dijo que esto sirvió como una confirmación de que constantemente nos afectamos unos a otros por lo que hacemos y decimos, incluso si no somos conscientes de ello. Por lo tanto, concluyó, es “importante tener una muy buena actitud positiva para cada momento de tu vida, incluso si no ves razón para ello”. No pude evitar sonreír.

Algún tiempo después, recibí otro correo electrónico a través de la misma lista que mencioné sugiriéndome que viera una inspiradora entrevista con una mujer llamada Anita Moorjani que se había curado milagrosamente de cáncer después de una ECM. Una gran oleada de emoción me atravesó al recordar cómo Wayne y yo permitimos que las poderosas palabras de amor de Anita animaran a millones de personas. Recibir ese último correo electrónico confirmó que el círculo se había completado energéticamente y que Wayne y yo habíamos cumplido nuestra tarea. Al mismo tiempo, las palabras de Anita nos ayudaron a crear la curación de Wayne.

*****

Después de mi sesión con Wayne, regresé a Nueva York con el corazón lleno de gratitud. Estaba agradecido de haber ayudado a Wayne a curar la leucemia y haberle ayudado a liberar las causas emocionales de la misma. Estaba agradecida de que al comunicarme con él le hubiera ayudado a llevar la profunda historia de Anita a una audiencia más amplia. También estaba agradecida por la oportunidad que Wayne y el Universo me hubieran dado de ser quien yo sabía que era en mi corazón: un terapeuta de regresiones.

Cuando entré a mi apartamento mi pareja me saludó y empezó a preguntar por el viaje, pero de repente se interrumpió. Me dijo lo diferente que me veía y que sentía mi energía. Era lo cierto. Había cambiado a una nueva realidad, había cambiado a una Dobromira diferente.

Sabía que había llegado el momento de vivir como la persona que realmente era. Era ahora o nunca. Rápidamente decidí dejar mi carrera de derecho y dedicarme al trabajo que me daba tanta satisfacción. Y como para hacerme saber que estaba en el camino correcto, el Universo me entregó un valioso regalo: Wayne me llamó para decirme que incluiría la transcripción de nuestra sesión en su libro, “Deseos cumplidos”.

Milagro tras milagro descendían sobre mí. Desde entonces, mi trabajo de regresión se ha convertido en mi vida. Y mi vida se ha convertido en una mágica explosión de sincronicidades apoyándome en el camino.

Como para animarme nuevamente, el Universo me entregó recientemente otro regalo más. Apenas unos días antes de enviar el manuscrito de este libro a mi editor, recibí una noticia maravillosa: estaba previsto que Brian Weiss apareciera en el programa “Super Soul Sunday” de Oprah Winfrey. Y para familiarizar a la audiencia con el gran libro de Brian, “Suceden los milagros”, él y Oprah decidieron compartir la historia completa de una de mis vidas pasadas. De todas las historias contadas en ese libro eligieron la de la doctora rusa y su amado soldado estadounidense. La noticia me dejó eufóricA. Estaba más que agradecido de que mi primera experiencia de regresión se presentara en el sitio web de Oprah.

Sentí como si no estuviera haciendo nada y sin embargo yo estaba haciendo todo. Ninguna cantidad de pensamiento, planificación o esperanza podría haberme dado la oportunidad de enviar historias para su publicación en el libro de Brian y Amy, que de Wayne incluyera la transcripción de nuestra sesión de regresión en su libro o haber llevado la historia de mi primera regresión al sitio web de Opra. Lo único que tenía a mi favor era que estaba alineada con la energía de mi mayor bien. Me alinié con la energía del servicio a través de la mayor expresión de lo que soy. Mi energía estaba alineada con la energía de estas personas, y los resultados que buscaban crear.

Alinearme no implicaba trabajo. Simplemente me permití seguir lo que me parecía interesante y emocionante. No profundicé en el fascinante mundo de la regresión porque tenía la meta de algún día publicar mi trabajo en los libros de autores tan destacados como Wayne Dyer o Brian Weiss. Tomé los pasos que tomé simplemente porque pensar, leer y hablar sobre la regresión eran las cosas más intrigantes y satisfactorias del mundo para mí. No comencé con un plan para hacer una carrera de eso. Si hubiera estado pensando racionalmente, nunca habría gastado tanto tiempo y dinero en algo tan alejado de mi carrera como abogada, algo que solo me dio sensación de satisfacción interior. Pero ahí radica la explicación de por qué mi vida ha sido agraciada con tales milagros.

Dejar ir la duda y el miedo

Bashar, una entidad canalizada por Darryl Anka, enseña que la emoción es la traducción física de la vibración que tu alma ha elegido crear en la vida. Las cosas que provocan esos sentimientos en nosotros son las cosas que más se parecen a nosotros. Nos reflejan en nuestra más alta representación. La alegría nos señala hacia lo que sea que podamos lograr con menos esfuerzo. En cualquier momento dado, Bashar dice que debemos aprovechar cualquier oportunidad que nos emocione más. Cuando actuamos en lo que ofrece los niveles más altos de alegría y emoción, estamos diciendo que tenemos la fe para ser y actuar como nuestro verdadero yo.

Debido a que siempre nos apoyamos en lo que somos, todo lo que nos emociona expande el alma con alegría y sin esfuerzo. Dicho esto, la expansión no es factible a menos que enfrentemos e integremos cualquier temor que surja en torno a nuestras pasiones. Crecer no significa evitar miedos o hacer como si no existieran. La luz no expulsa la oscuridad, la luz penetra la oscuridad, infundiéndola con brillo. Crecer significa traer tus miedos dentro de ti, ver las creencias que los hacen parecer tan potentes y luego infundirlos con nueva luz y comprensión.

En nuestro mayor temor es donde reside nuestro mayor potencial. Bashar dice que sentimos miedo porque la energía del verdadero yo está siendo filtrada a través de creencias limitantes. Cuando esas creencias se examinan, liberan y reemplazan con creencias de apoyo, somos capaces de expandirnos más y más hacia nuestro ser más grande. Así, el miedo es simplemente un mensajero que amablemente nos dice que hemos asumido pensamientos que no nos pertenecen. Si dejamos ir esos miedos, experimentaremos la vida en éxtasis.

Para mí, el mundo de la regresión siempre ha sido muy intrigante. Desde ese primer libro que leí cuando pequeña, ha sido fuente de gran curiosidad y alegría. Después de la curación milagrosa de mi mandíbula, di rienda suelta a mi pasión. Parecía completamente inofensivo al principio. Era simplemente algo que ocupaba mi tiempo libre, me dio una nueva forma de ver el mundo y generó conversaciones fascinantes. Como todo lo relacionado con el tema de la regresión era tan gratificante, me permití seguir eligiendo las oportunidades cada vez mayores que se presentaban. La energía estaba construyendo y formando una vida completamente nueva.

Mientras tanto, en mi carrera profesional de abogado representaba a empresas cuyos valores se negociaban en bolsas de valores. Mi trabajo estaba muy ligado a los acontecimientos de Wall Street. Como resultado, la crisis financiera que sacudió al mundo en el año 2008 también se sintió en mi mundo aparentemente aislado. La noticia de que montones y montones de abogados perdían sus trabajos todos los días creó pánico en el corazón de todos, incluido el mío. Se sentía como si el mundo se acabara. La tensión del ambiente llevó a la pregunta obvia: “Si pierdo el trabajo y no puedo conseguir otro como abogada, ¿qué voy a hacer?”.

Recuerdo estar sentada en mi escritorio en el trabajo un día, mirando la pared frente a mí, teniendo una sensación de urgencia. Necesitaba un plan, algo a lo que recurrir. Rápidamente hice un balance de todas mis habilidades y capacidades. Debido al estrés que sentía, el examen que realicé tenía la brutal honradez y claridad del Día del Juicio Final. wisto

La única habilidad que tenía para ofrecer al mundo era mi habilidad para hacer retroceder a las personas, catalizando la curación y la transformación. Creo que, en mi desesperada necesidad de orientación, había creado un canal abierto hacia mi Ser Superior y pude escuchar la respuesta muy claramente. En ese momento, la regresión se actualizó en mi mente de un mero pasatiempo a algo que realmente podía hacer para ganarme la vida. La regresión ya era el canal a través del cual me sentía más como mi verdadero yo. Me hizo sentir vivo y exuberantemente feliz. Estaba completamente presente y me sentía más conectado con la Fuente. Estaba accediendo y siendo mi verdadero yo: la perspectiva de sentirme realizado y tener un trabajo significativo parecía muy atractivo, pero el placer duró solo un segundo. Un momento después me asfixiaba la garra mortal de la ansiedad. El reconocimiento de que podía hacer regresiones para ganarme la vida desencadenó ataques masivos de miedo.

Mis temores eran todos sobre el dinero. Simplemente no creía que fuera posible que el trabajo de curación pagara las facturas. Afortunadamente, tenía el tiempo de mi lado. Pude quedarme en mi trabajo durante tres años más, lo que me dio tiempo para superar las creencias negativas que alimentaban mis miedos. Recuerda, tu transformación será tan rápida como tú lo permitas. Tardé tanto porque este ritmo me sirvió; me hizo sentir seguro. Fui muy honesto y minucioso al examinar mis creencias. Seguí los principios que he compartido en este libro para liberar todos mis pensamientos limitantes. Rastreé muchos de esos pensamientos hasta mi infancia, y me di cuenta de que había sido hipnotizado en una comprensión de la realidad que mis padres me habían transmitido a mí y a ellos de sus padres.

Decidí honrar mis creencias en lugar de luchar contra ellas. Si las invalidara, invalidaría todo lo que soy y todo lo que he creado sobre la base de esas creencias. Al aceptar su validez, pude transformarlas gradualmente en lo que prefería conocer como mi nueva verdad.

Mi Ser Superior y mi mente pensante estaban involucrados en un baile bien coreografiado. Mi mente le decía a mi Yo Superior: “Confío en que en la regresión me estás mostrando algo que podría hacerme sentir satisfecha cada día. Pero estoy asustada. Tengo tantas obligaciones financieras que cubrir”. Mi Ser Superior respondió: “Te quiero mucho. Quiero lo mejor para ti, así que te mantendré empleada y te daré todo el tiempo que necesites para trabajar a través del pensamiento limitado. Puedes confiar en mi. Te mantendré segura. No permitiré que te lastimes”. A lo que mi mente pensante dijo: “Gracias. Haré el trabajo, pero por favor dame señales de que estoy en el camino correcto”.

Lenta y diligentemente trabajé a través de mis miedos. Simultáneamente, me permití salir cada vez más y darme a conocer como regresionista. Mi Yo Superior, fiel a su promesa, me ofreció señales en el camino que me alegraron y alentaron.

Al actuar sobre mi entusiasmo, reafirmé mi compromiso conmigo, mi Ser Superior y el Universo. Estaba entrando en mi yo más grande, más feliz y realizado. Poniendo a tierra la energía en acción. Completando el circuito, y por eso la Fuente me daba más y más oportunidades. Actuaba en mi entusiasmo, y mi dicha me mostraba que la regresión podía apoyarme. Cuanto más me apoyaba la regresión más confiaba en ella y más fácil era tomar acciones más grandes que afirmaran esa alegría. Poco a poco dejé ir la idea de que mi supervivencia dependía de la abogacía. La luz estaba penetrando lenta, pero seguro, la oscuridad, envolviéndola en brillo.

*****

No necesitamos aprender a confiar; tenemos que aprender a no dudar. Como dice Bashar, la duda es confiar al 100 por 1000 en una creencia que no está alineada con nuestro verdadero ser. Por ejemplo, si no tienes trabajo y dudas de que alguna vez encontrarás uno bien pagado, estás poniendo toda tu confianza en la creencia de la escasez, la creencia de que no es suficiente.

Si experimentamos dudas es porque confiamos en algo que no está alineado con quienes somos. Nuestras almas pueden crear y experimentar la realidad física debido al intenso enfoque y la confianza que depositan en un conjunto particular de circunstancias. A través del trabajo de regresión he aprendido que para tener una encarnación física necesitamos estar en un estado de confianza total. Se necesita mucha confianza para permitir que se olvide gran parte de nuestra verdadera naturaleza y poder y colocarnos en un estado de tal limitación aquí, en la Tierra. Ya tenemos dentro de nosotros la capacidad de confiar plena y completamente en lo Divino en la estancia de cada encarnación. Por lo tanto, según Bashar, siempre confiamos. Si ya tenemos construido en nosotros el mecanismo de la confianza, entonces todo lo que tenemos que hacer es dirigirlo para experimentar la realidad que deseamos.

Aprender acerca de esta perspectiva sobre la confianza me dio sensación de alivio. No necesitaba aprender a confiar. No había obstáculo que superar. Ya sabía confiar; de hecho, confiaba en todo momento. Lo que necesitaba entender era por qué confiaba en pensamientos de escasez, específicamente, la creencia de que no recibiría apoyo financiero para un trabajo que reflejara completamente mi pasión. Y la respuesta fue clara: el mal que conocía daba menos miedo que el mal que imaginaba.

El estrés de mi trabajo, sus largas horas, la expectativa de estar disponible para mis clientes en cualquier momento, sin importar la hora del día o de la noche, los plazos absurdamente ajustados, el agotamiento y la falta de una vida personal, todo eso esto vino como el mal que ya conocía. Me sentía cómoda con eso. Sabía cómo manejarlo. La idea de que el trabajo de regresión no podría mantenerme financieramente era un mal mucho más aterrador. Una vez que vi eso la pregunta fue, ¿cómo puedo en lo que quiero confiar? Me di cuenta de que era simplemente una cuestión de reenfocar.

Nos hipnotizamos para creer ciertas cosas. Elegimos un punto de vista —o se nos proporciona— y lo damos por sentado, sin cuestionarlo. Mientras tanto, excluimos todos los puntos de vista opuestos. Esto es tan automático que no nos detenemos a reflexionar sobre los diferentes pasos. Decidí que ya sabía cómo hipnotizarme para creer en una suposición con exclusión de todas las demás posibilidades. Funcionó tan perfectamente que simplemente tuve que seguir los mismos pasos conscientemente, pero esta vez enfoqué mi concentración en las cosas en las que prefería creer. La diferencia era sutil: simplemente estaba consciente y despierta. Pero los resultados fueron profundos.

Liberé las creencias limitantes sobre la regresión como profesión o trabajo viable. También me permití expandir mi comprensión sobre el apoyo. Elegí realmente internalizar que debido a que Dios me había creado, y la regresión era el foco de mi pasión, el Universo quería ver esta alegría expresada al máximo en cada momento. Sabía que la Fuente me amaba incondicionalmente y que me apoyaría en cualquier forma en que quisiera conocerme a mí misma. Me había apoyado cuando creía que podía ganar dinero solo como abogada. ¿Por qué no haría lo mismo si redefiniera mis preferencias?

Ahora quería cambiar la definición de quién era yo. Confié en que en su amor incondicional y adoración hacia mí, Todo-lo-que-Es también apoyaría esa creación. Eso es el amor incondicional: amor y ayuda sin restricciones ni condiciones. Elegí redefinir lo que significaba la abundancia. Elegí ver que soy abundante no solo en dinero sino también en la apertura de oportunidades, amigos, posibilidades, corazones y mentes.

Elegí confiar en la expansión de mi ser, confiar en la dirección en la que estaba creciendo. Elegí confiar en que recibiría apoyo por lo que soy, confiar en que soy amada por lo que soy. Elegí confiar en que el Universo me estaba apoyando con su abundancia infinita en cada pensamiento, en cada idea, en cada deseo y en cada plan que tenía. Decidí confiar en que este apoyo era y es siempre adecuado y siempre correcto. Creé un pequeño mantra para mí: confío en mí misma. Confío en mi vida. Confío en Todo-Lo-Que-Es.

Se convirtió en mi conjuro sagrado y estoy feliz de compartirlo contigo. Te invito a escribirlo en notas adhesivas y colocarlas en el espejo de tu baño, en tu refrigerador o en tu ordenador del trabajo. Memoriza este mantra y hazlo tuyo. La confianza está realmente en el centro de todo.

Mi enfoque era firme y claro. A medida que pasaba el tiempo, los milagros comenzaron a desarrollarse a mi alrededor. Las oportunidades se organizaban de formas que ni siquiera podría haber imaginado. Sentí como si una corriente me llevara y, simplemente, estaba sentada en un bote y maravillada con el paisaje. Estaba confiando y viviendo la sabiduría del Tao Te Ching, que dice: “El Tao no hace nada, pero no deja nada sin hacer”.


Ejercicio: Cómo encontrar tu propósito

“¿Cuál es el propósito de mi vida?”

 

Esta es la pregunta que escucho más a menudo de mis clientes. Es muy raro que uno que entre a mi oficina tenga completamente clara su misión en la vida. Hay una buena razón por la cual esta pregunta es primordial: va a la esencia de quiénes somos. Traducir la creatividad en acción es expresar nuestra esencia, la razón por la que fuimos creados antes de nada. ¿Recuerdas la vida de Serena, donde describió cómo y por qué se crean las almas? La Fuente te creó porque tu combinación única de energías satisface una necesidad, un vacío que se experimentó en toda la existencia antes de que llegaras. Fuiste creado con el propósito de ser tu combinación única de colores.

Cuando somos niños, a menudo nos preguntan: "¿Qué vas a ser cuando seas mayor?" Creemos que necesitamos tener una carrera que dure toda la vida, un único título o meta que nos defina. Y cuando no lo vemos, nos confundimos. Comenzamos un juego frenético de “¿Es esta mi carrera? ¿Cuál es mi propósito? No sé cuál es mi propósito. Buscamos la respuesta externamente, en lugar de internamente.

Sin embargo, la respuesta es tan simple. Tu único propósito en la vida es ser tú mismo. Por eso fuiste creado: para ser tú mismo plena y completamente en cada momento. A menudo, esta respuesta sorprende a la gente. "¡Seguramente no puede ser tan simple!" ellos dicen. Esperan que su “propósito de vida” sea algo grande, grandioso, digno de su tiempo. En verdad, las mayores misiones se cumplen paso a paso. Una gran vida se vive momento a momento. ¿Y qué podría ser más digno de tu tiempo que ser tú mismo, plena y completamente, en cada momento?

La expresión de este simple propósito de vida será diferente para cada uno de nosotros, porque cada uno de nosotros es diferente. Para descubrir cuál es la expresión de tu propósito de vida, te ofrezco un proceso. Por favor reserva por lo menos 20 minutos de tiempo de silencio. Házte las siguientes preguntas y anote las respuestas en tu diario:

·                     ¿Qué es lo que más disfrutas hacer?

·                     ¿Qué te resulta más fácil?

·                     En qué eres bueno?

·                     ¿Por qué te alaba la gente?

·                     ¿Qué te hace sentir que el tiempo pasa volando?

·                     ¿En qué te pierdes?

Conocer la respuesta a estas preguntas es el primer paso para conocer su propósito. Te da la idea general.

El segundo paso es preguntarse cómo puedes anclar estas habilidades en la realidad física. Pregúntate: "¿Cómo puedo servir a los demás a través de mis habilidades, a través de lo que me da alegría?" Medita sobre esta pregunta y anota las respuestas que te lleguen. Cuando confíes en tus impulsos y honres tus emociones, se te conducirá a la acción. No esperes que estas acciones sean “grandes”, pueden serlo, o no. No necesitas saber cómo estas acciones crearán una carrera o un trabajo. Cada paso revelará la respuesta poco a poco. Paso a paso se creará un camino. Todo lo que importa es que ancles tus energías creativas en la realidad física actuando. Observa lo que escribiste como modelo a seguir en los días, meses y años venideros.

El tercer y último paso es actuar en tu alegría. La clave para vivir una vida con propósito es preguntarse, en cada momento, "De todas las opciones que tengo disponibles en este momento, ¿cuál me daría la mayor alegría, emoción y mayor satisfacción?" Luego, elige esa acción. Es realmente así de simple. Por favor, toma esta pregunta en serio; vivir de ello. Deja que mi historia de cómo seguí mi camino te anime e inspire. Nunca planeé que mi vida fuera como es ahora, simplemente seguí lo que me pareció emocionante paso a paso. Suelta ese pensamiento de, “no sé cuál es mi propósito”. Incluso si solo estás dando los primeros pasos para convertirte en quien eres, haz de esta tu nueva afirmación: “Estoy viviendo a propósito. En cada momento elijo ser yo mismo y actúo en mi entusiasmo”.

Nuestro propósito es ser quienes somos y actuar de acuerdo con lo que nos emociona mientras servimos a los demás. Por eso, cada vez que surja esta conversación, comparte lo que sabes ahora. Recuerda a los quienes te rodean que al no ser ellos mismos están robando a la existencia la razón por la que fueron creados. Enseña a los jóvenes, y anima a los adultos, a ser cada vez más ellos mismos en cada momento. Pero lo más importante, vive tu pasión. Vive tu emoción. Porque al ser fiel a ti mismo estás dando permiso a quienes te rodean para que también vivan su propósito.

¿Te imaginas qué mundo tan diferente sería si todos y cada uno de nosotros honrara a Dios y a nosotros mismo simplemente siendo quienes somos en todo momento?


EPÍLOGO. UNA VIDA DE GLORIOSA EXPANSIÓN

 

Hoy sigo confiando en la sincronicidad para que me guíe a donde necesito ir. Mi historia de ninguna manera está completa. Pero siempre me alegra el corazón cuando las personas se me acercan y dicen cuán inspirados están por mi viaje, cómo he permitido que mi camino me lleve de la ley a la regresión a vidas pasadas. Si mi historia resuena contigo, entonces ha sido orquestada divinamente para que leas estas palabras. Tú también estás en un lugar donde buscas crear una vida de expansión gloriosa. Estoy aquí para servir de ejemplo, para asegurarte que cada uno de nosotros puede ser apoyado en hacer lo que más te guste. Si entras completamente en tu poder, experimentarás una vida de propósito y realización que quizás nunca pensaste que fuera posible.

Permite que las lecciones compartidas en este libro se filtren profundamente en tu conciencia. Piénsalas y luego aplícalas en tu vida. Haz los ejercicios. Retrocede y ve los sucesos del pasado a través de las nuevas perspectivas que se presentan aquí. Juega con el tiempo. Permite sincronicidades, milagros y magia. Perdona a ti y a los demás. Y sobre todo, amor. Todos somos muy buenos amando a los demás, pero es hora de poner igual enfoque en amarnos. Porque cuando nuestra copa está llena tenemos mucho más amor, amor genuino e incondicional, para ofrecer a los demás.

Mantén este libro contigo. Llévalo incluso cuando hayas terminado de leerlo, ya que su energía servirá como fuerte recordatorio de la verdadera dirección de tu alma. Comparte las historias y lecciones con otros. Se como yo y regala este libro a todos los espíritus afines. A través de tu pasión puedes encender chispas en los corazones y mentes de los demás. Enseñando, entenderás aún más. Confía en ti mismo, confía en tu vida y confía en el Universo. Sobre todo, date cuenta de que eres amado y apreciado tal como eres. La fuente sabía lo que hacía cuando te creó. La fuente no hace cosas sin sentido.

Me he permitido crecer en mi verdadero yo, así que sé que tú también puedes hacerlo. Has atraído mi historia como ejemplo porque tienes dentro de ti esa misma vibración. Si no tuvieras el potencial de tu Ser Superior, y si no estuvieras buscando expresarte, no serías capaz de percibir la expresión de ese potencial en los demás. Por eso, te animo a que confíes en tu expansión. Confía en la dirección en la que te está empujando tu entusiasmo.

He creado una herramienta para ayudarte en tu desarrollo. Se llama The Trust Meditation y se centra en las ideas de amor propio y confianza. Descargue esta grabación, de forma gratuita, desde mi sitio web: www.mirakelley.com/meditation-download. Esta meditación te permitirá liberarte sin esfuerzo de tus creencias limitantes e interiorizar lo merecedor, amado y apoyado que eres. Te guiará a confiar en lo que prefieras y a alinearte y crear tu mejor vida hasta el momento.

El Apéndice A de este libro proporciona una transcripción que puedes usar para retroceder. Puedes pedir a un amigo de confianza que te la lea o hacer una grabación de tu voz leyendo el guión. Si lo prefieres, también puede usar la regresión guiada que forma parte de mi conjunto de CD, Sanación a través de la regresión a vidas pasadas... y más allá. No importa qué camino elijas, la regresión te llevará al fascinante mundo de las experiencias que transforman mágicamente la vida de las personas. Podrás volver a visitar otras vidas que has vivido. Te permitirá liberar traumas emocionales y físicos, y te ayudará a recibir orientación de tu Yo Superior. Después de escuchar una vez, cada vez que la vuelvas a escuchar irás más y más profundo. La profundidad de tu trance será cada vez más profunda y el potencial de tus exploraciones será mayor. Por lo tanto, utilízala tan a menudo como su intuición te indique.

Me encantaría conocer tus experiencias, así que envíame un correo electrónico: info@mirakelley.com y comparte tus historias conmigo. Estoy verdaderamente bendecida por estar haciendo algo que me permite comunicarme con el Espíritu todos los días. Me encanta estar a la vanguardia de la expansión de nuestra conciencia y poder conectarme profundamente con las personas, ayudarlas con la curación emocional y física y ayudar a transformarse en su mejor yo. Justo el otro día, una hermosa mujer vino desde Suiza para verme. “Ahora sé por qué amas tanto lo que haces”, dijo después de completar la sesión. Acababa de salir del trance y su rostro tenía esa mirada amorosa y relajada con la que todos mis clientes se despiertan.

Te envío océanos de amor y te agradezco por permitirme llevarte en este viaje de aventura, transformación y sanación a través de la regresión a vidas pasadas.

En Luz, Amor y Unidad,
Dobromira Kelley

 

APÉNDICE A. Transcripción de regresión a vidas pasadas

 

Lo que sigue es una herramienta que puedes usar para crear tu experiencia de regresión. Puedes grabarte leyendo la transcripción y reproducirla para ti mismo, o puedes pedir a un amigo de confianza que la lea por ti. Decidas lo que decidas la clave está en leer la transcripción despacio, con una voz amable y suave. Asegúrate de permitir una pausa entre los párrafos. Si se necesita una pausa más larga, lo indico entre paréntesis, al final del párrafo. Si eres experto en tecnología puedes agregar música relajante que disfrutes como fondo a la grabación de tu voz. De lo contrario, puedes reproducir la música en un dispositivo separado. Sin embargo, la música no es un requisito, es simplemente una oportunidad para que disfrutes aún más del proceso.

Haz la regresión acostado o sentado en una silla cómoda. Te sugiero que hagas la regresión en un momento del día en el que estés fresco y relajado, en lugar de antes de acostarse cuando estés cansado y es probable que te quede dormido. (Para obtener más información sobre lo que puedes esperar durante tu experiencia, consulta el Apéndice B). Lo que es más importante, confía en ti mismo y en que se te dará, exactamente, lo que necesites en tu beneficio.

La regresión durará aproximadamente 30 minutos. Luego, tómate suficiente tiempo para procesar lo que has experimentado. Escribe en un diario lo que surja, incluidos sentimientos, pensamientos, imágenes y realizaciones. También puedes optar por meditar o salir a caminar para reflexionar sobre la vida con la que te conectaste.

 

Aquí está la transcripción de la regresión:

Permite que tus ojos se cierren suavemente.

Haz una respiración profunda y déjala salir lentamente.

Permítete comenzar a relajarte.

Permítete comenzar a flotar.

A medida que haces la siguiente respiración, observa, siente o imagina la luz Divina de la Fuente que te rodea.

Observa o siente o imagina cómo esa luz blanca comienza a hundirse lentamente en tus pies.

Esta hermosa luz blanca calienta y relaja los músculos de tus pies.

Siente esta luz abriéndose camino desde los pies hasta tus piernas.

Siente la luz calentándote. Siente tus pies y piernas relajarse.

La luz calma y relaja los músculos de las pantorrillas, relaja las rodillas.

Siente la luz moviéndose hacia arriba relajando huesos y músculos de tus piernas.

Observa la energía moviéndose a través de los músculos de la cadera, los huesos de la cadera, continuando hacia arriba, suave y fácilmente.

Permite que la luz relaje los músculos del abdomen. Siéntela cómo calma y relaja tu estómago.

Siente o ve la luz subiendo lenta y suavemente por tu pecho, permitiendo que la respiración sea profunda y uniforme.

Con la próxima inspiración, siente lo ligero, abierto y expandido que está tu pecho.

Cada vez estás más relajado.

Ahora siente, ve o imagina la luz blanca que rodea tu corazón, observa esa luz infundiendo tu corazón.

Siente cómo se purifica la energía del corazón.

Y ahora, con cada próximo latido, tu corazón esparce por tus er ese sentimiento de tranquilidad y paz. Esa luz blanca, Divina, difunde el sentimiento de tranquilidad y paz a través de las arterias, a través de cada vena, a todos los órganos, todos los tejidos, a todas y cada una de las células de tu cuerpo.

Y te sientes cada vez más profundamente relajado.

Observa o siente la luz moviéndose hasta la punta de tus dedos. Calma y relaja los músculos de las manos. Permitiendo que tus manos descansen fácilmente.

Siente la luz blanca subir por tus codos, hasta tus hombros.

Observa, o imagina, la luz blanca moverse desde tus caderas hasta tu espalda, calmando y relajando los músculos de la espalda baja, subiendo suavemente por la columna vertebral.

Solo por este momento, por este instante, puedes dejar de lado todos los problemas del mundo que llevas a hombros. Hay suficiente tiempo para ellos más tarde.

Siente cómo se relajan los músculos de tus hombros y cómo se libera toda la tensión acumulada allí.

Ahora, la luz que sube por tus brazos, se mezcla con la luz blanca que sube por tu pecho y espalda.

Y te sientes más y más profundamente relajado.

Siente y ve la luz blanca subiendo por tu cuello, calmando y relajando los músculos de cuello y garganta.

Siente la luz blanca moverse hacia la cabeza y la cara.

Permítete relajar la mandíbula. Permite que tus labios se relajen. Permite que la lengua se relaje.

Siente todos los músculos de la cabeza relajarse. Se relajan los músculos de la cara, de la piel, de los párpados, del cuero cabelludo. Incluso las orejas se relajan.

Permita que sus ojos se relajen.

Siente la luz blanca hundiéndose suavemente en tu cerebro.

En su imaginación, vea ahora el símbolo del infinito, el número 8 inclinado de lado.

Ahora imagina y dibuja con tu mente el movimiento de la luz sobre tu cerebro, que viaja alrededor de los hemisferios trazando el símbolo del infinito, ese ocho de luz que se forma por el movimiento de la luz a través de los hemisferios cerebrales.

La luz va y viene, va y viene, va y viene de un lado cerebro al otro del cerebro.

Al hacer esto, permites que las dos mitades del cerebro se armonicen, permites que cuerpo y mente se sincronicen, y permites que la mente se sincronice con tu Ser Superior.

Siente la mente, tu mentalidad, tus pensamientos que comienzan a relajarse.

Todos tus miedos, todas tus preocupaciones, todas tus dudas se van relajando. Todo se mezcla y se funde en la relajación de tu cuerpo. Te sientes en paz y tranquilo, y profundamente relajado.

Entre las dos mitades del cerebro hay una pequeña glándula llamada glándula pineal. La glándula pineal nos permite conectarnos con otra dimensión, con otras frecuencias, con otras vidas.

Imagina ahora a la luz blanca, masajeado suavemente la glándula pineal para que produzca la sustancia llamada DMT. Esa sustancia, el dimetiltriptamina, se produce de manera natural y fácil para ayudarnos en las exploraciones que estamos haciendo hoy.

Siente, ve o imagina, la luz blanca que te rodea y te sitúa en un capullo de luz blanca, una burbuja de luz blanca.

Estás protegido. Estás seguro. Lo sientes, y lo sabes. [pausa larga]

Ahora estás abierto. Ahora estás relajado. Ahora estás dispuesto a ser equilibrado. Ahora estás dispuesto a ser sanado. Ahora estás dispuesto a ser transformado. Ahora estás dispuesto a ser amado incondicionalmente.

En tu mente, ahora, invita a los ángeles a venir y unirse con nosotros y a apoyarnos con su amor, su luz y energía sanadora. [pausa larga]

Mientras permaneces en el capullo de luz blanca, siente, ve o imagina cuatro ángeles uniéndose a ti. Cualquier forma o disposición en los que los imagines o veas será perfecto.

Mira cómo los ángeles se acomodan a tu alrededor. Uno está en tu cabeza. Otro está a tus pies. Y uno a cada lado de tu cuerpo.

Siente cómo su energía se conecta suavemente con la tuya, y cómo levantan, lenta y fácilmente, la burbuja de luz blanca en la que te encuentras.

Permítete relajarte en sus brazos. Permítete flotar, sintiéndote seguro y protegido.

Los ángeles te elevan más y más alto, más y más alto.

Los ángeles pueden llevarte a través del tiempo y el espacio, en cualquier dirección del tiempo y del espacio.

Ahora pido a los ángeles que se muevan y te lleven, a través del tiempo y el espacio, a otro tiempo, a otro lugar donde hay algo importante que debes aprender y comprender, algo que te ayudará de la mejor manera.

Los ángeles te llevan.

A la deriva y flotando, te mueves a la deriva y flotas a través del tiempo y el espacio.

Te sientes protegido y seguro, cómodo y relajado.

Los ángeles conocen el camino. Te llevan a un lugar y tiempo donde hay algo importante que debes aprender y comprender.

A la deriva y flotando, te mueves a la deriva y flotas a través del tiempo y el espacio.

Ahora, los ángeles se van deteniendo. Están llevando hacia abajo la burbuja de luz blanca en la que estás, te desplazas hacia abajo, desciendes hacia la superficie.

La burbuja de luz está ahora en la superficie.

Voy a contar del 3 al 1, y cuando llegue al 1, estarás del otro lado de la burbuja.

3 … muévete a través de la luz blanca;

2 … te mueves a través de la luz;

1 … estas al otro lado ahora.

Estás en otro lugar, estás en otro tiempo.

Mira a tu alrededor.

Pon en ello todos tus sentidos.

¿Cuáles son las primeras cosas que ves a tu alrededor?

¿Cuáles son los primeros sentimientos o impresiones que tienes?

Mira hacia abajo, a tus pies. ¿Tienes algo en los pies?

Mira tus piernas y tu torso. ¿Usas alguna ropa? Si tienes ropa puesta, ¿cómo es? [pausa larga]

Estira las manos frente a ti y míralas. ¿Estás sosteniendo algo? [pausa larga]

¿Tienes alguna decoración en alguna parte de su cuerpo?

¿Eres hombre o mujer?

¿Cuantos años tienes?

¿Cómo te ves?

¿Es de día o de noche?

¿Hay otros contigo? [pausa larga]

Explora los sucesos importantes en esa vida. [pausa larga]

Si algo te hace sentir incómodo elévate por encima de la escena y sigue observando desde arriba. Puedes continuar observando desde la distancia sabiendo que estás seguro y protegido. [pausa larga]

Puedes retroceder y avanzar en el tiempo para aprender más y permitir que la historia de la vida se desarrolle por completo. [pausa larga]

¿Reconoces a alguna de las personas como personas que ahora conoces? [pausa larga]

Ahora ve al último día de tu vida y experimenta cómo tu espíritu deja el cuerpo sin dolor ni lucha. [pausa larga]

¿Qué lecciones aprendiste en esta vida? [pausa larga]

¿Cómo se relaciona esta experiencia con tu vida actual? [pausa larga]

¿Qué es importante saber sobre tu vida actual? [pausa larga]

Aléjate de estas escenas ahora. Aléjate. Flota.

Permítete alejarte de esas escenas.

Tu Ser Superior, tus guías y tus ángeles te seguirán proporcionando información en tus sueños y en tus momentos de vigilia en forma de intuición, señales y pensamientos inspiradores. Tus sueños serán más vívidos durante las próximas noches y los recordarás con más claridad que nunca.

Ahora es el momento de volver a tu vida actual. Recordarás todo lo vivido con mucha claridad. Cada vez que escuches esta grabación, y hagas una regresión, siempre recibirás orientación, curación y ayuda de tus ángeles. Y siempre será una experiencia muy transformadora, sanadora y placentera.

Ahora contaré del 5 al 1. A la cuenta de 1, estarás despierto y descansado y te sentirás maravilloso.

5 … comienzas a subir.

4 … oriéntate al momento presente y al tiempo presente;

3 … empieza a despertar. Ahora; te sientes descansado y renovado.

2 … puedes estirar los brazos y las piernas;

1 … abre los ojos. Estás completamente despierto y te sientes maravilloso: amado, descansado y renovado.

*********

APÉNDICE B. Preguntas frecuentes sobre la regresión a vidas pasadas

 Aquí me gustaría responder algunas de las preguntas más frecuentes que recibo sobre el tema de la regresión a vidas pasadas y las sesiones que ofrezco.

P. ¿Puedo quedarme estancado en una vida pasada?

R. Después de escucharme describir cómo será nuestra sesión, las personas a menudo preguntan si podrían quedarse atrapados en otra vida y nunca regresar. Les aseguro que están absolutamente a salvo. La regresión se experimenta de la misma manera que experimentas un recuerdo, ya sea un momento de tu infancia o lo que cenaste anoche. Cuando te enfocas en un momento en particular, las imágenes, pensamientos, sentimientos y detalles que lo componen aparecerán en tu mente. Pero de la misma manera que no puedes quedarte atrapado en un recuerdo, tampoco puedes quedarte atrapado en una vida pasada.

P. ¿Qué pasa si experimento algo aterrador?

R. La gente a menudo se pregunta: ¿Qué pasa si experimento algo aterrador y me trastorna aún más de lo que ya estoy? Aseguro a mis clientes que la regresión no es como ir al cine a ver una película de terror: ¡no se hace con el propósito de asustarlo! Las regresiones se realizan con la intención de sanar, de revelar lo que servirá en su beneficio. Incluso si experimentas algo emocional, no te parecerá aterrador. Por ejemplo, para algunos puede parecer molesto escucharme hablar de mi vida como el esclavo con collar de metal alrededor de mi cuello. Puedes esperar no experimentar ese tipo de horror. Sin embargo, para mí, no había nada aterrador en esa vida. Había muchas emociones: tristeza, ira y ríos de lágrimas. Pero esos eran catárticos y curativos. Las vidas donde hubo desafíos son las tuyas ya las viviste. Ya son parte de tu vibración energética. No te parecerán extrañas ni perturbadoras cuando las revivas, porque son tuyas. Subconscientemente, ya estás familiarizado con ellas; ya estás conectado a ellas.

También quiero asegurar que tu Ser Superior, los ángeles y los guías te cuidan y no darán experiencias que no puedas manejar. Un ejemplo de eso es mi primera regresión de niña, cuando vi la vida del espía ruso. Cuando revisé esa vida como adulto, vi detalles que no habían aparecido la primera vez que la vi. Estos fueron detalles que fueron dolorosos y podrían haber afectado mi psique de niña. Pero fui guiada y protegida: me dieron sólo lo que podía manejar. Simplemente pido a mis clientes que sepan que están guiados y protegidos, y que confíen, que confíen tanto en ellos mismos como en la Fuente.

P. ¿Seré hipnotizado?

R. Esta pregunta a menudo está relacionada con el miedo a ser controlado, forzado a hacer algo en contra de nuestra voluntad a través de la manipulación mental. La regresión usa hipnosis, pero es muy, muy diferente de la percepción común que tenemos de ella. La mayoría de la gente ha visto la “hipnosis” realizada en el escenario, con el propósito de entretener, es un mero espectáculo. La hipnosis escénica se basa en un contrato tácito que se acuerda cuando los voluntarios del público suben al escenario. El hipnotizador aparece esperando que sus órdenes sean tomadas y obedecidas. La persona que elige ser el conejillo de indias del espectáculo acepta que seguirá las instrucciones recibidas. Esto es muy importante de entender, porque no puedes ser controlado a menos que estés de acuerdo con ello.

Aseguro a mis clientes que mantendrán el control total durante nuestra sesión. Si algo se siente incómodo o se vuelve emocional, siempre pueden abrir los ojos, levantarse y alejarse. Si surge tal impulso, mi preferencia es que los clientes se queden en la experiencia y me la transmitan, para que yo pueda guiarlos. Pero la elección es del cliente. Durante una regresión, cada uno de nosotros siempre tiene el control total.

La hipnosis comienza con sentirse seguro, permitiéndose relajarse y centrando tu atención en las imágenes y emociones que surgen de tu interior. En realidad, no es más que un estado alterado de ondas cerebrales, un estado de profunda relajación y creatividad. Estos son estados cerebrales típicos para todos nosotros, por lo que la mayoría de mis clientes ni siquiera se dan cuenta de que están siendo "hipnotizados". Déjame explicarte cómo funciona.

En la conciencia de vigilia normal, tu cerebro opera en ondas cerebrales beta. Cuando comienzas a relajarse, tu cerebro pasa fácilmente de un estado de ondas beta a un estado de ondas alfa. Con mi guía, los clientes avanzan aún más, del estado alfa al theta. Theta es el estado de estar consciente pero somnoliento. Todo el mundo experimenta este estado cada noche antes de quedarse dormido y de nuevo por la mañana antes de despertarse. Theta es el estado fronterizo entre la conciencia y la inconsciencia. Es un estado en el que se produce un profundo aprendizaje, sanación y crecimiento.

Sin embargo, en lugar de profundizar en theta, los cerebros de algunos clientes se mueven de alfa al estado de ondas gamma, operando a una frecuencia aún más alta que beta. En este estado, tienes un elevado sentido de percepción y conciencia, y experimentas la Unidad con todo, una sensación de dicha y la comprensión innata de la naturaleza de la existencia.

Durante nuestro tiempo juntos, con mi guía, los clientes permanecen en un estado theta o gamma, lo que permite que se lleve a cabo nuestro poderoso trabajo. Este es un estado con el que cuerpo y mente de la persona están muy familiarizados; para ellos, se siente natural y fácil. Debido a que estos son estados familiares, y debido a que el cerebro cambia sin problemas entre estados, las personas asumen que no les sucede nada, que no están siendo hipnotizadas.

Otra razón por la que las personas pueden no reconocer que están siendo hipnotizadas es la de que asumen que la hipnosis significa que estarán inconscientes. De hecho, muchas de las personas que veo creen que para que la regresión a vidas pasadas funcione no deben ser conscientes. Se imaginan que tendré una sesión con una parte inconsciente de ellos, de modo que cuando se despierten no tengan recuerdos de lo que sucedió. Ahora bien, a decir verdad, esto ha sucedido pero es extremadamente raro. Con la mayoría de los clientes, la mente consciente está presente durante toda la experiencia. Los clientes saben que están acostados en el sofá y yo estoy sentada en una silla cercana. Simultáneamente, están permitiendo que todo tipo de experiencias surjan en su cabeza y me las están diciendo.

Creo que hay una muy buena razón por la cual las personas están conscientes durante sus regresiones. Los tiempos han cambiado. Las creencias religiosas rígidas no tienen la misma fortaleza en la vida de las personas que tenían hace siglos. Cada vez más personas se sienten cómodas con su conexión con Dios y con su capacidad de ser guiadas directamente por lo Divino. Debido a que las restricciones religiosas no son tan limitantes para nosotros, creemos que es posible tener una conexión directa y una experiencia de la Fuente y nuestra divinidad. Por lo tanto, no hay razón para que una parte de nosotros oculte lo que aprendemos sobre nosotros mismos y de otras partes de nuestra personalidad. No solo podemos manejar nuestro aprendizaje, sino que también buscamos conscientemente ese tipo de comprensión. Perseguimos nuestra iluminación. Consumimos información y tomamos acciones que nos permiten convertirnos en un todo, para integrar todas las partes de nosotros mismos. No hay necesidad de que la mente suprima lo que ha revivido a través de una regresión. La mente se convierte en parte del proceso. Al ser testigo de todo, la mente es libre de procesarlo todo y encontrar las formas más beneficiosas de aplicar la información.

Sin embargo, debido a que los clientes están conscientes durante toda la sesión, es muy fácil para la mente juzgar y detener la experiencia. Los clientes tienen el control total; pueden decir fácilmente: "Esto no tiene sentido" o, "No es así como he leído sobre esa época en los libros de historia".

Por esta razón, pido a mis clientes que suspendan sus juicios y simplemente permitan que la mente se intrigue y se divierta con lo que aparece. Tendrán todo el tiempo del mundo después de nuestra sesión para analizar y dar sentido a lo que han visto.

P. ¿Cómo me conecto realmente con mis vidas pasadas?

R. Una vez que respondo todas las preguntas que tienen mis clientes, comenzamos la parte experiencial de la sesión. El proceso de regresión en sí es muy simple y suave. Tengo clientes que se acuestan en la posición más cómoda posible. Comienzo guiándolos hacia un profundo estado de relajación. Al cerrar los ojos y sintonizarse con el interior, naturalmente disminuyen los niveles de entrada de sus cinco sentidos: vista, olfato, tacto, gusto y oído. Al relajar el cuerpo, pueden concentrarse en el interior, excluyendo otros datos.

Los estados alterados de ondas cerebrales mencionados anteriormente permiten que nuestra conciencia se expanda. Así es como somos capaces de sintonizarnos con otras vidas que hemos vivido. La información, la guía y la curación que brindan otras vidas siempre están presentes y disponibles para que nos conectemos. Con mi guía, los clientes fusionan su conciencia con esas otras vidas.

Los clientes pueden identificar intuitivamente quiénes son y las imágenes, sonidos y olores comienzan a fluir. Les pido que confíen en las primeras impresiones, pensamientos y sentimientos que les lleguen. También pido que no juzguen nada, aunque no tenga sentido. Todo está Divinamente orquestado. Las cosas siempre encajan perfectamente y tienen sentido al final de la regresión.

P. ¿Es solo imaginación lo que veo?

R. La gente a menudo se pregunta: ¿Qué pasa si solo estoy imaginando mis otras vidas? A lo que respondo: no hay problema. Muchas veces la imaginación es el puente que nos lleva a la historia de una vida pasada.

Recientemente, hice una sesión con una mujer llamada Debbie. Tras guiarla hacia la relajación, le pregunté qué sintió, vio o experimentó, y respondió:

“Nada,”.

“Si tuvieras que imaginar algo, ¿qué sería?”, le pregunté.

"Una cueva." ¡Qué interesante elección! Es poco probable que tu o yo hubiéramos imaginado una cueva, si alguien nos hiciera esa pregunta.

“Si tuvieras que imaginar algo más, ¿qué sería?” Le pregunté. "Gente en la cueva", dijo. ¡Esto fue aún más interesante! Describió a la gente no como neandertales, como se podría pensar, sino como una tribu de nativos americanos. Estaban en la cueva refugiándose de una tormenta. Mientras decía esto, Debbie se emocionó mucho. Comenzó a buscar frenéticamente a su hijo entre la gente, pero él no estaba allí. Sabía que él todavía estaba ahí fuera y temía haberlo perdido.

La vida comenzó con un momento de imaginación, pero rápidamente se convirtió en algo personal y muy significativo para Debbie. Cuando vino a verme consideraba separarse de su esposo, pero estaba paralizada por un miedo irracional de perder la custodia de su pequeño hijo. Este momento de permitir que su imaginación corriera libre permitió que se conociera la conexión con la vida pasada. Entendió que lo que parecía un miedo irracional en realidad tenía su raíz en una vida anterior o paralela.

La imaginación no significa que te estás conectando con algo irreal. En el reino del Espíritu, el pasado, el presente y el futuro existen simultáneamente. Todas las cosas que alguna vez han existido y existirán están presentes en el mismo momento del "ahora". Tú y yo somos incapaces de imaginar lo que no existe. Si lo intentas, solo podrás pensar en una representación física de la inexistencia. Suelo imaginar la inexistencia como un vacío negro separado por un muro de todo lo que existe. Esa imagen, en sí misma, es existencia. Por lo tanto, cualquier cosa que podamos imaginar ya existe de una forma u otra, en una dimensión de existencia u otra. Imaginar es el acto de conectarse con la información disponible.

La imaginación se utiliza activamente como método psicoterapéutico. Carl Jung y muchos otros psicólogos han teorizado que las imágenes de nuestras fantasías pueden provenir de traumas emocionales más profundos y conflictos no resueltos de nuestro pasado. Los psicoterapeutas a menudo ayudan a sus clientes usando la imaginación para procesar sus emociones negativas reprimidas y encontrar soluciones a sus desafíos. Incluso si lo que se ve durante una regresión es "imaginado", los psicólogos aún encontrarían valor en ello porque las visiones provienen de la mente subconsciente de la persona. El subconsciente sabe cómo curarnos. Por lo tanto, incluso si las imágenes experimentadas durante una regresión son imaginativas, todavía tienen un valor terapéutico tremendo.

Animo a los clientes a imaginar libremente, sabiendo que están permitiendo que la energía fluya y que el Ser Superior los guíe hacia una vida que sirva para su mayor bien. Después de unos momentos de imaginación, la historia siempre, — siempre—, cambia, y el cliente pasa a vivir experiencias emocionales y curativas vívidas. Como tal, los primeros momentos de imaginación son simplemente una herramienta que da permiso al cliente para permitir que la información fluya.

P. ¿Qué pasará durante mi regresión?

R. Cada sesión es única. Cada uno refleja las circunstancias y necesidades particulares de la persona que sufre la regresión. Algunas personas experimentan una vida desde el nacimiento hasta la muerte, lo que consideraríamos como una vida humana "normal". Otros clientes se experimentan a sí mismos como diferentes formas de vida, como dinosaurios, monos, flores y ranas. En otras vidas, las personas son entidades que viven en otros planetas o en naves espaciales. Y luego están esas experiencias místicas donde las personas se encuentran con sus ángeles o guías, ven cómo se crean las almas o experimentan cómo es la Fuente primordial de todo.

Además, la forma en que las personas experimentan la regresión es muy diferente. Algunos ven películas fluyendo en sus mentes, ricas en detalles. Cuando ocurren estas sesiones, pienso en broma: ¡Necesitamos toda una vida para volver a visitar esta! Luego están las experiencias en las que una persona ve un breve destello de una imagen que se combina con emociones y una sensación de saber cuál es la historia. Para otros, las regresiones son enteramente una experiencia emocional, donde las historias se conocen a través de los sentimientos. Y, por supuesto, están las sesiones en las que los clientes escuchan o “tocan” cosas y me las describen.

En otras palabras, no existe una manera “correcta” de revisar vidas pasadas o futuras. Ya sea que esté trabajando conmigo o solo con una regresión grabada, le aseguro que no importa cómo le surjan las experiencias, lo está haciendo todo bien. Solo confía y permite.

P. ¿Qué es el “Yo Superior”?

R. Después de que las personas conecten con tantas vidas como sea necesario, y todavía estén en estado de trance profundo, les pido que se conecten con su Ser Superior. Así es como me gusta referirme a esa parte más grande, más sabia e incondicionalmente amorosa de nuestra alma. Para mí, el Yo Superior tiene el esquema de nuestro mayor potencial. Representa la mayor manifestación posible de ciertos temas y metas que el alma quisiera explorar en una vida. Es el mayor logro posible que nuestra alma quisiera encarnar.

Cada uno de nosotros tiene un Yo Superior. Nuestro Yo Superior es parte de nosotros, es la vibración de nuestro verdadero yo. Cuando hablo con el Yo Superior de un cliente, el cliente se conecta con la frecuencia del Yo Superior y accede a su claridad de comprensión. Al hacerlo, el cliente se convierte en esa vibración. Esta es una de las razones por las que mis sesiones de regresión son tan transformadoras y profundas.

Durante mi conversación con el Yo Superior, busco respuestas a las preguntas que la persona y yo discutimos antes de que comenzara nuestra sesión. También pido que el Yo Superior sane cualquier síntoma físico que experimente la persona y sus causas emocionales. Al igual que al volver a visitar las otras vidas, no hay una sola forma de experimentar la conexión con el Yo Superior. La experiencia de cada persona es única. Siempre animo a la gente a confiar y dejar que se hable lo que venga. Desde ese lugar de conciencia expandida, algunos clientes simplemente saben las respuestas y me las dan. Otros sienten como si una energía los rodeara y están extrayendo las respuestas de esta energía. Aún otros informan que es como si alguien más estuviera hablando a través de ellos. Ninguno de estos es más beneficioso que los demás. Cada uno de nosotros tiene una forma diferente de acceder a la guía de nuestro Ser Superior.

Cuando el trabajo está hecho, saco a la persona del trance. Para él o ella, con frecuencia parece que el trance duró solo unos breves instantes. Pero, de hecho, por lo general han pasado horas. La percepción del tiempo del cliente está distorsionada porque en niveles tan profundos de trance la persona se conecta con otras dimensiones de la existencia y se separa de seguir el ritmo del tiempo de esta realidad.

P. ¿Qué ve el regresionista durante la sesión?

R. Cuando la gente viene a mi oficina, sé que van a tener una experiencia. Sin embargo, nunca sé qué experiencia tendrán! Al principio, cuando comparten sobre su vida, soy como un lienzo en blanco. Simplemente escucho, hago preguntas y tomo notas. Al suspender todo juicio y simplemente comprender, permito que nuestras energías se mezclen. Una vez que la regresión está en marcha, algo inusual sucede dentro de mí. Con frecuencia puedo ver las imágenes y escuchar información sobre lo que los clientes están experimentando, a menudo viendo la totalidad de la vida que están describiendo antes de que las imágenes lleguen a ellos. Esto me permite ser un regresionista aún mejor, porque no los estoy guiando a ciegas. Cada vez que sucede, sirve como un recordatorio de que todos somos uno, que todos estamos conectados a la misma corriente universal de información. También me dice que, debido a que no hay pasado ni futuro, en una línea de tiempo paralela la sesión ya sucedió.

Es como si estuviera mezclando mi conciencia con la del cliente, y juntos viajáramos a través del tiempo y el espacio. Debido a que todos somos parte de la misma conciencia primaria, en el momento en que salimos de la intensa asociación con un solo aspecto del Todo, es decir, nuestro cuerpo y personalidad, y ponemos nuestra atención en algo fuera de nosotros, inmediatamente nos convertimos en eso.. Por lo tanto, cuando percibo lo que experimentan los clientes, mi conciencia puede fusionarse con la de ellos en la conciencia del Uno y viajar con ellos a otros lugares y otros tiempos.

P. ¿Tiene algún otro consejo para cuando haga una regresión?

R. Hay un par de cosas más que me gustaría sugerir. Si tiene mascotas en la casa, déjelas en otra habitación detrás de una puerta cerrada. Las mascotas se sienten naturalmente atraídas por la energía calmante, así que a medida que la regresión progrese y comiences a relajarte, querrán ser parte de ella. En lugar de que te asusten e interrumpan la experiencia, cierra la puerta. Esto asegura que no será interrumpido.

Lo segundo que me gustaría sugerir es que prestes atención a tus sueños en los días que siguen a la regresión. Las personas a menudo se conectan con otras vidas en sus sueños. Este es particularmente el caso después de que las personas han buscado conscientemente conectarse con sus almas complementarias. Antes de ir a la cama, hágase esta simple sugerencia: recordaré mis sueños cuando me despierte por la mañana. Luego, por la mañana, tan pronto como te des cuenta de que estás despierto, sigue acostado en la cama con los ojos cerrados y repasa tus sueños. Cuanto más practiques esto, más fácil se volverá.

Recientemente hice una entrevista en un programa de radio y, en preparación para nuestra conversación, el presentador había escuchado la regresión guiada en mi conjunto de CD. Cuando comenzó la regresión, experimentó algo inesperado que la sobresaltó. Salió de la visión y la detuvo. Esa noche se despertó de un sueño que estaba conectado con la visión de la regresión y le dio información muy específica sobre cómo proceder con su trabajo creativo y el propósito de su vida.

Me encanta esta historia porque es un gran ejemplo de cómo, cuando nos abrimos conscientemente a la orientación, la información que necesitamos siempre encuentra el camino hacia nosotros.

 

RECURSOS ADICIONALES

 Puede descargar mi meditación guiada gratuita de 20 minutos centrada en el amor y la confianza llamada The Trust Meditation en: www.mirakelley.com/meditation-download.

Si prefiere que lo guíe hacia una regresión a vidas pasadas, obtenga una copia de mi conjunto de CD, Sanación a través de la regresión a vidas pasadas... y más allá. Tiene una regresión guiada a vidas pasadas y una meditación guiada. Puede descargarlo u obtener una copia física en: www.MiraKelley.com o www.HayHouse.com.

Si desea tener una sesión de regresión personal conmigo, envíeme un correo electrónico: info@mirakelley.com.

Si desea unirse a mí para un taller de regresión a vidas pasadas o un retiro, visite www.MiraKelley.com/events.

Puede leer acerca de mi profunda regresión a vidas pasadas con el Dr. Wayne W. Dyer en su libro Wishes Fulfilled.

En Miracles Happen de Brian Weiss y Amy Weiss, puede leer tres historias de regresión que he contribuido: dos y la historia de un cliente.

Únase a una comunidad de Facebook de personas de ideas afines donde puede aprender más sobre la regresión a vidas pasadas, compartir sus vidas pasadas y compartir sus reacciones a este libro. El nombre del grupo es Past-Life Regression, y puedes encontrarlo en: www.facebook.com/groups/PastLifeRegression.

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EXPRESIONES DE GRATITUD

 

A mis profesores de física, Brian L. Weiss y Dolores Cannon: Gracias por crear el camino que ahora camino. Admiro y aprecio mucho su trabajo pionero. Gracias por despertarme a mi verdadero ser y por enseñarme las herramientas para ayudar a otros en su transformación y sanación.

A mis maestros no físicos, Seth y Bashar, y sus almas complementarias humanas, Jane Roberts y Darryl Anka: Su energía siempre ha estado ahí para guiarme, y sus palabras siempre han estado ahí para despertarme al recuerdo de mi verdadera esencia. Gracias.

A John: Ahora que miro hacia atrás, veo que nuestra memorable sesión fue orquestada por Dios. Estaba destinado a servir a un propósito mucho más grande de lo que podríamos haber imaginado. Ni tú ni yo sabíamos que cuando nos conocimos, nuestra sesión se convertiría en algo tan importante para los dos y para el mundo. Para mí fue la semilla que se convirtió en el ímpetu para escribir este libro. Para usted se convirtió en la forma de recordar su camino y de cumplir su propósito de enseñar a la gente a comprender, algo que está logrando al compartir este libro. Estoy muy agradecido por tu amistad, John. Gracias un millón de veces por los regalos que trajiste a mi vida.

A todos mis clientes cuyas historias he compartido aquí: conocerlos y poder presenciar los magníficos espíritus que son ha sido una preciada bendición. Sé que sus historias tocarán los corazones de quienes lean este libro, tal como lo hicieron con la mía. Gracias por ayudarme en la creación de este libro y permitirme ver la Fuente manifestándose a través de los maravillosos seres que cada uno de ustedes es.

A Evan Kelley: Gracias por permitirme regresarte todas estas innumerables veces. Su amor y apoyo por mi interés en la regresión me ha permitido crecer hasta convertirme en la persona que soy hoy. Siempre creíste en mí, incluso cuando no podía ver. Gracias por estar ahí para mi.

Para el Dr. Wayne W. Dyer: Gracias por confiar en su guía interna y permitir que la regresión a vidas pasadas y yo entremos en su vida para ayudar a transformarla. Las palabras no pueden expresar lo agradecido que estoy por su amor y ávido apoyo. Gracias por creer en mí y en mi trabajo. ¡Gracias! ¡Gracias! ¡Gracias!

A Reid Tracy: Gracias por su visión de mi libro y por su apoyo a mi trabajo. Sabías el valor de este libro antes de que yo pudiera siquiera atreverme a soñar.

A Shannon Littrell: ¡No podría pedir un editor mejor! Gracias por todo lo que ha hecho por mí, tanto en este libro como en mi juego de CD, Sanación a través de la regresión a vidas pasadas... y más allá.

A Kelly Notaras: Me encanta cómo, cuando se pronuncia, mi apellido suena como tu nombre de pila. Donde yo termino tú empiezas. Gracias por combinar sus comentarios y aportes reflexivos sobre el manuscrito tan perfectamente con mi voz para crear juntos un libro que creo que ayudará a muchas personas.

A Tamra Edgar: Gracias por toda su ayuda, amor y apoyo. Nuestras energías y nuestra visión están tan perfectamente alineadas que estoy seguro de que hemos estado juntos en otras vidas trabajando codo con codo.

A Liliana Angelova Paslieva: Tengo la suerte de tenerte, la mujer más increíble, como mi madre. Tienes una capacidad infinita para el amor y la paciencia. Tu espíritu es alegre y amable. Me enseñas desinterés y devoción. Siempre has estado muy interesado en todo sobre mí: todo lo que tengo que decir, cada amigo, cada relación, cada elección de escuela o carrera, cada giro y vuelta en mi vida, y ahora los descubrimientos de mi trabajo de regresión. Siempre has creído en mí y me has animado a tener fe en mí mismo. Siempre han sido mis "ojos creyentes", apoyando completamente mis sueños y ofreciendo palabras de sabiduría cuando las necesito. Nadie puede hacer las cosas bien como tú. Sabes cómo animarme a ser una mejor persona y a celebrar las cosas buenas de mí. Eres mi mejor amigo, mi inspiración y mi compañero en el camino espiritual. Tu energía Divina siempre me nutre y me nutre. Mame, permíteme expresarte mi gratitud por todo lo que eres y todo lo que has hecho por mí al dedicarte este libro.

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SOBRE EL AUTOR 

Dobromira Kelley creció en Bulgaria, donde a la edad de 13 años tuvo una poderosa experiencia de regresión. Con gran coraje y confianza en su corazón, Dobromira siguió su intuición y vino a los Estados Unidos para ir a la universidad. Después de graduarse en la facultad de derecho ejerció como abogada corporativa y de valores en una gran firma de la ciudad de Nueva York. Una enfermedad física dolorosa la llevó a redescubrir la sanación física y emocional instantánea disponible a través de la regresión, y ahora ayuda a las personas a transformar sus vidas de esta manera. Las historias de las sesiones de Dobromira están incluidas en Wishes Fulfilled por el Dr. Wayne W. Dyer y Miracles Happen por Brian L. Weiss; también han aparecido en Oprah.com.

Sitio Web: Www.mirakelley.com

 

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