IMPRESIONES DE EXPERIENCIAS CERCAMAS A LA MUERTE. Por Robert Cristophor Coppes

 

Impresiones de experiencias cercanas a la muerte

Cita de más de 100 ECMs.

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Díjose:

Impresiones de Experiencias Cercanas a la Muerte contiene testimonios poderosos y transformadores de personas de diferentes orígenes religiosos y culturales que experimentaron ECM y sus secuelas. Profundamente revelador, su perspectiva sobre el Cielo y el más allá le cambiará la vida. Una lectura imprescindible. Anita Moorjani Autor de los best–sellers del New York Times Dying to Be Me , What If This Is Heaven y Sensitive Is the New Strong .

 

Este importante libro trata sobre las maravillosas, impresionantes y universales historias compartidas por personas que tuvieron una experiencia cercana a la muerte (ECM). Al leer sobre los diferentes elementos de una ECM, te sorprenderá cómo estas experiencias cambiarán tu visión actual del mundo. Aprenderás que todo se trata de amor y compasión hacia ti mismo y hacia los demás, y que todo y todos están siempre conectados. No eres tu cuerpo, sino pura consciencia que a veces se puede experimentar durante un período de inactividad cerebral. Este maravilloso libro tiene el potencial de romper muchos tabúes sobre nuestras ideas actuales sobre la vida y la muerte, y podemos disfrutar de los beneficios de la ECM sin tener que estar a punto de morir. ¡Muy recomendable! Pim van Lommel Cardiólogo, investigador de ECM, autor de Conciencia más allá de la vida

 

Citas seleccionadas de los informes reales de más de cien experiencias cercanas a la muerte, cuidadosamente categorizadas en un amplio espectro de categorías principales por un investigador con décadas de rigurosa experiencia en el estudio de todo el campo, hacen de este libro una mina de oro para quienes buscan una comprensión más profunda de este fascinante aspecto de la experiencia humana. ¡Una lectura que vale la pena! Dr. Eben Alexander Ex neurocirujano de Harvard y autor de Proof of Heaven , The Map of Heaven y Living in a Mindful Universe .

Tabla de contenido.

Prefacio – Expresiones de gratitud – 1 Fuera del cuerpo – 2 Observaciones verídicas – 3 Fuera de este mundo – 4 Amor, Amor Incondicional – 5 La Luz – 6 La revisión de la vida – 7 Todos somos importantes – 8 ECM angustiosas – 9 Interconexión con todos y cada uno: Somos UNO – 10 ¿Por qué estamos en la Tierra? – 11 El camino de regreso – 12 Efectos secundarios – 13 Conclusión – Referencias – Índice – Acerca del autor.

Prefacio.

La portada de este libro muestra parte de la pintura "Impresión, Soleil Levant" (Impresión, Amanecer) de Claude Monet. Cuando la pintura se exhibió junto con otras pinturas en una exposición en París en 1874, las críticas fueron mixtas. Algunas fueron favorables, es decir, modernas y vanguardistas; otras fueron francamente negativas, es decir, tradicionales. En una reseña satírica posterior a esa pintura de Monet, los artistas de su género fueron llamados despectivamente "impresionistas" porque sus pinturas se consideraban inacabadas y meras impresiones o bocetos de lo que debería haber sido la pintura final. Esta crítica dio al movimiento artístico su nombre: Impresionismo. Desde entonces, el mundo ha llegado a apreciar enormemente a los impresionistas (solo basta con observar los altísimos precios de sus pinturas), porque nos damos cuenta de que no necesitamos una imagen completamente elaborada y realista para tener una impresión justa de lo que se representa o cuál es el mensaje central de la pintura. De hecho, la "impresión" puede evocar más sentimiento y significado que una mera copia realista.

De igual manera, mi propósito en este libro es dar una idea de cómo son las experiencias cercanas a la muerte (ECM) mediante numerosas citas de más de 100 personas que las han vivido en todo el mundo. Provienen de América del Norte y del Sur, Europa, Oriente Medio y Lejano Oriente, incluyendo China. Incluso hay citas de lugares tan lejanos como Nueva Zelanda. Las creencias religiosas originales de las personas que han vivido ECM en este libro son igualmente diversas, representando el hinduismo, el judaísmo, el budismo, el cristianismo, el islam y el ateísmo.

Una impresión es todo lo que puedo ofrecer porque, al final —o casi al final, en este caso—, nadie sabe exactamente cómo funciona todo. Después de todo, cuando se trata de ECM, de lo que hablamos es de un orden totalmente distinto, de una dimensión totalmente distinta. Así que mi consejo es que si alguien te dice que sabe exactamente qué es la otra vida, deberías huir rápidamente. Una impresión es, en realidad, todo lo que es posible.

Para apreciar el contenido de este libro, te sugiero que, como si apreciaras una pintura impresionista, leas las citas y sientas cómo te afectan. Siente lo que te dicen, pero siente de verdad . Deja a un lado tus ideas tradicionales. Deja ir cualquier forma en que te hayan programado tu educación o la religión, y abre tu mente a recibir la sabiduría que encuentres en estos testimonios de personas que han experimentado los primeros momentos de la muerte física. Creo que sus mensajes tocarán una verdad profunda en ti, un núcleo interior en el que puedes confiar.

Nota sobre la lectura de este libro: Siempre que se conoce el nombre de quien ha experimentado (ya sea su nombre real o un seudónimo o de otro autor), este aparece en su relato a continuación. Si un relato no incluye nombre, es porque proviene de una fuente anónima, como el repositorio de ECM de la Asociación Internacional para Estudios Cercanos a la Muerte o la Fundación para la Investigación de Experiencias Cercanas a la Muerte.

Expresiones de gratitud.

Aunque disfruté creando esta pintura impresionista de ECM, debo decir que fue un proyecto ambicioso. No lo habría podido lograr sin la ayuda y la buena voluntad de tantas otras personas.

En primer lugar, quisiera agradecer a la Asociación Internacional para Estudios Cercanos a la Muerte (IANDS; www.iands.org) y a la Fundación para la Investigación de Experiencias Cercanas a la Muerte (NDERF; www.nderf.org) por sus extensos archivos de narrativas de ECM, de los cuales extraje gran parte del material para este libro. Ambos sitios web están disponibles en línea para el público. Sus archivos y otros materiales en línea hacen que ambas organizaciones sean únicas y ofrecen un servicio vital a la humanidad, por lo que estoy muy agradecido. Otra excelente organización que proporciona materiales en línea es la belga www.Ponto3.org .

Luego están las personas con las que tuve el privilegio de hablar y entrevistar, así como las que escribieron con esmero sus experiencias en los libros que leí. Me doy cuenta de que solo pude elegir entre una pequeña selección de los muchos libros increíbles que existen.

Me gustaría agradecer a las siguientes personas:

– Jan Holden por su apoyo incondicional y su valiosa edición, y Robert y Suzanne Mays por su edición final.

– Robert Mays, Anneliese Fox y Alinaghi Ghasemiannejad (IANDS), Jody Long (NDERF) y Noëlvan Herreweghe (Ponto3) por ponerme en contacto con muchas personas con ECM,

– Marjorie Woollacott, Natalie Bonthius y Debbie James (IANDS), Mally Cox–Chapman, Liz Dale, Djamil Graham, Robert y Suzanne Mays, Maurice Oosterhof, Titus Rivas y Rudolf Smit por su apoyo,

– Nancy Evans Bush por sus valiosos comentarios y aportes cuando estaba escribiendo el Capítulo 8 sobre las ECM angustiosas, y por sus opiniones realistas y alegres, tanto solicitadas como no solicitadas,

– Chris Carson, Rachel Finch y Lee Thornton Riggs por leer previamente el manuscrito.

– a las siguientes personas con ECM por su entusiasta respuesta a mi proyecto: Kimberlee Anderson, Jane Bannister, Irina Berghout, Anna Best, Silvia Bulten–Bolk, Brigitte Buyle, Chris Carson, Christina, Anoeska Coopman, Ellyn Dye, Rachel Finch, Bill y Gayle Gladstone, Jang Jorgen Jones, Rene Jorgen, Jones Tienke Klein, Geertrui Lagae, Mirjam Leféber, Deirdre DeWitt Maltby, Kathy McDaniel, Andrew Petro, Tetty Pols–Visser, Marijke Redant, Catja de Rijk, Nancy Rynes, Kimberly Clark Sharp, Yvonne Sneeden, Yazmine Star, Yolaine Stout, Azmina Riggs, Taylor Thorn, Scott Lee Rosemary Thornton, Vu Tran, Carol Lynn Vengroff, Johan Verhage y Noël de Waele.

– A Rosemary Mitchell–Schuitevoerder por revisar el inglés en mi primera versión.

Capítulo 1. Fuera del cuerpo.

Una ECM puede ocurrirle a cualquiera: joven o mayor, rico o pobre, hombre o mujer. Las circunstancias en las que se produce una ECM son muy diversas. Muchos casos ocurren en situaciones médicamente críticas, como un paro cardíaco o después de un accidente. Pero otras ECM han ocurrido durante una crisis existencial o psicológica. Hay historias de personas que tuvieron sus ECM durante la meditación profunda o la oración. Incluso hay ejemplos en los que una ECM parece haber ocurrido sin motivo alguno; para un ejemplo, véase el caso de Rene Jorgensen a continuación. En este sentido, el término «ECM» es engañoso, ya que da la impresión de que solo puede ocurrir cuando uno está cerca de la muerte. Dado que las investigaciones han revelado que, en circunstancias físicas aparentemente idénticas, la mayoría de las personas no recuerdan nada inusual, mientras que una minoría relativamente pequeña recuerda una ECM, aún no está claro qué causa exactamente la experiencia. Considerando solo la situación extrema de un paro cardíaco, solo una minoría de quienes la han sobrevivido ha reportado una ECM. ¿A qué se debe esto?

Hay varias respuestas posibles. Suponiendo que durante una ECM el espíritu de una persona abandonó su cuerpo, el paro cardíaco podría haber sido demasiado breve, dejando muy poco tiempo para que se produjera la desconexión. Sin embargo, los investigadores no han encontrado relación entre la duración de la crisis médica y la presencia o ausencia de una ECM. También es posible que no todos recuerden su ECM, que la experiencia permanezca oculta en el inconsciente de quien la experimenta. Un buen ejemplo de esto...Esta situación es la de Stephanie Arnold. Su libro de 2015 sobre el tema, 37 Seconds , se lee como una novela apasionante.

Su historia comienza con una fuerte premonición de que moriría durante el inminente nacimiento de su hijo. Otros atribuyeron su pánico al miedo al parto.

Cuando finalmente entró en labor de parto, todo salió terriblemente mal. Tras el parto, que se realizó por cesárea, le extrajeron la placenta, lo que provocó una embolia de líquido amniótico casi mortal y muy poco frecuente. Su corazón se detuvo, pero se reanudó después de 37 segundos con compresiones torácicas firmes por parte de una de las enfermeras.

Tras estabilizarse, la mantuvieron en coma inducido durante una semana más. Luego se recuperó y empezó a buscar respuestas. Quería saber cómo se había cumplido su fuerte premonición.

Con la terapia de regresión, regresó al momento del parto y se sintió separada de su cuerpo. Estaba de pie junto a él en el quirófano, observando todo lo que sucedía. Más tarde, pudo describir correctamente todo el procedimiento, con la ubicación exacta del personal en el quirófano. Más tarde reconoció a la enfermera que le había fracturado las costillas al iniciarle las compresiones torácicas. También se sintió flotando por los pasillos del hospital, viendo cosas que luego se confirmaron.

Finalmente, se elevó y terminó en una zona blanca y brillante donde se encontró con familiares fallecidos, incluido su suegro. Él le mostró una moneda extranjera. Después de la terapia de regresión, preguntó a su familia sobre el significado de la moneda. Para su cuñado, esta moneda en manos de su difunto padre resultó tener un significado importante.

Entonces, había sido una ECM real, con evidencia clara, pero había estado oculta hasta que la revivió a través de una regresión.

Una ECM puede comenzar de varias maneras. Algunas personas perciben que su «alma», «espíritu», «esencia» o «conciencia» se van.Su cuerpo físico; otros no. Una vez fuera del cuerpo, algunos experimentan percibiendo el mundo material. Pueden flotar sobre su cuerpo o quedarse de pie observándolo. A veces no se dan cuenta de que han abandonado su cuerpo, y a veces ni siquiera se dan cuenta de que el cuerpo que yace allí es suyo. Puede parecer una locura, pero no lo es tanto si consideramos que conocemos bien nuestro reflejo en el espejo, pero fuera del cuerpo, nos vemos en 3D y desde un ángulo diferente, uno desde el que aparentemente no siempre nos reconocemos.

Algunas personas se encuentran inesperadamente en una cueva, túnel u otro tipo de pasaje y de repente llegan a un lugar completamente diferente y sobrenatural. Otras personas se saltan el pasaje por completo, pero terminan en ese entorno sobrenatural de una manera completamente distinta. Allí pueden ver hermosos colores sobrenaturales; escuchar música sobrenatural; y encontrarse con seres queridos fallecidos y otras entidades espirituales.

Los ejemplos de este capítulo muestran que abandonar el cuerpo y existir fuera de él es una experiencia muy especial y a menudo confusa.

Salir del cuerpo es fácil.

En el momento de mi muerte, salí de mi cuerpo como una tostada de la tostadora. (Thornton, 2021, p. 3)

De una habitación a otra.

Juliet Nightingale tuvo dos ECM y varias otras experiencias espiritualmente transformadoras, un término acuñado por la psiquiatra canadiense Yvonne Kason. Juliet tuvo su primera ECM cuando padecía cáncer de colon en fase terminal. Fue a mediados de la década de 1970, justo antes de que el psiquiatra Raymond Moody acuñara el término "ECM". Escribió que la transición al otro mundo es muy fácil. En su sitio web, que sigue activo, escribió:

La mejor manera de describir la transición de estar "vivo" en el plano físico y el paso al Más Allá es como pasar de una "habitación" a otra. No dejas de existir ni pierdes la consciencia; tu consciencia simplemente cambia de un punto de vista a otro. La experiencia cambia; tu perspectiva cambia; tus sentimientos cambian. Y los sentimientos que experimenté fueron profundos. Para mí, sin duda se convirtió en esa paz que sobrepasa todo entendimiento... (Nightingale, 2006–2009)

Durante años, Julieta tuvo un programa de radio, y en 2009 finalmente pasó a ese otro mundo.

En lo alto de mi cabeza.

De joven, Jane Bannister casi pierde la vida debido a la anorexia. Ella cuenta cómo abandonó su cuerpo:

Me había matado de hambre. Como todas las anoréxicas, no tenía ni idea de que estaba enferma y había estado corriendo durante semanas impulsada por la energía nerviosa en lugar de la física... Me encontré saliendo de mi cuerpo flotando por la parte superior de mi cabeza. Fue como nacer, pero entrando en otro mundo a través de la cabeza. Un poderoso ser masculino con capa y casco estaba detrás de mí, con los brazos extendidos. De sus dedos emanaba una fuerza magnética que me sacaba de mi cuerpo. Vi mi cuerpo sin vida tendido en la cama. Empecé a gritar mentalmente: "¡No quiero morir! ¡Solo tengo dieciocho años!"... Por cierto, años después, cuando se estrenó la película "La Guerra de las Galaxias", vi un póster de cine y casi me desmayo en la calle porque reconocí a Darth Vader como la figura maligna que me había sacado de mi cuerpo... Dos años después tuve otra ECM cuando me suicidé accidentalmente tomando una sobredosis como...Resultado de una ruptura amorosa. Esta vez fue una experiencia mucho más placentera. Un ángel me sacó suavemente de mi cuerpo. (Anónimo, 20 de diciembre de 2010, 16:40)

Sacado de mi cuerpo.

En su asombroso libro, "Despertar después de la vida" , René Jorgensen escribió que estaba sentado en una playa de la India con una chica japonesa cuando, de repente, abandonó su cuerpo. Tuvo una ECM muy completa sin haber estado en una situación médica crítica.

Un poder interior se reveló y luchó contra mi parte vieja. Por primera vez, mi ego luchaba por sobrevivir en un océano infinito e inexplorado... De repente, dejé de observar lo que sucedía en mi interior. Me encontré fuera de mi cuerpo, en el aire, sobre donde estábamos sentados... La sensación de ser arrancado de mi cuerpo fue abrumadoramente poderosa. Sentí una profunda explosión, como una erupción volcánica, que desgarraba mi cuerpo y disolvía la esencia de lo que una vez conocí como yo. De repente, estaba desnudo, expuesto a todo en el universo entero, pero al mismo tiempo, bañado por la luz transparente de algo tan poderoso, tan indescriptible, que todas las palabras se desvanecen y desaparecen. (Jorgensen, 2007, págs. 4–6)

El poder se drenó de mi cuerpo.

En su libro, "Nos puede pasar a todos" , Catja de Rijk escribió sobre su ECM que comenzó durante un cateterismo cardíaco. No le tenía miedo a la operación, e incluso estaba muy alegre. Pudo seguir la operación en un monitor, y todo parecía ir bien. De repente, sintió un dolor insoportable en el pecho, como nunca antes había sentido. Al mismo tiempo, sonaron varias alarmas.la sala de operaciones, y hubo pánico entre los médicos y enfermeras que la rodeaban.

También noté que la fuerza me abandonaba las piernas. Empezó en los dedos de los pies y fue subiendo hasta perder por completo la sensibilidad en las piernas. Inmediatamente después, la fuerza empezó a desaparecer de mis dedos y manos, de mis brazos y también de la parte superior del cuerpo. El dolor en el pecho desapareció y me invadió una calma increíblemente hermosa. No estaba en pánico y sentí una entrega y una paz totales. (De Rijk, 2021, p. 30)

Yo no soy mi cuerpo.

A veces, abandonar el cuerpo es pan comido, sin esfuerzo, como en el caso de Ellyn Dye. Su ECM se puede encontrar en su sitio web, y la describió de forma muy divertida y amena.

Estaba anocheciendo cuando conducía su coche, a punto de entrar en una intersección con luz verde. Otro coche estaba a punto de entrar en la intersección desde la otra dirección. De repente, el conductor giró hacia su carril. La colisión fue inevitable.

Pero de repente, sin ningún esfuerzo por mi parte, ¡estaba literalmente fuera de mi cuerpo! ¡De verdad que estaba emocionado! Miré hacia abajo y vi los dos coches chocando, y vi al hombre del otro coche bajar y caminar hacia el mío. Pensé que venía a ver si estaba bien. Metió la mano por la ventanilla abierta del lado del conductor y apagó las luces. Me pareció extraño, pero perdí el interés en lo que estaba pasando.

Más tarde, en el hospital, un policía le entregaría una multa de tráfico por conducir sin luces delanteras.

Mientras flotaba fuera de su cuerpo sobre los autos aplastados, se preguntó quién era “yo”:

¡Estar fuera de mi cuerpo fue una experiencia increíble! De repente, me di cuenta de que si "yo" flotaba sobre mi coche, mientras mi cuerpo estaba dentro, inconsciente, entonces toda mi idea y creencia de quién era "yo" era totalmente errónea. Como la mayoría de la gente en nuestra sociedad materialista, había identificado mi "yo" con mi cuerpo. Creía que "yo" era mi cuerpo, que mi cuerpo era, de hecho, quien soy, todo lo que soy. Pero de repente, supe sin lugar a dudas que estaba equivocado. "Yo" —mi consciencia, la parte de mí que puede pensar y sentir— ya no estaba en mi cuerpo, así que parecía obvio que mi cuerpo es algo que "yo" ocupo, en lugar de ser lo que "yo" soy. Y al aceptar realmente ese concepto, comprendí que "yo" era mucho más de lo que jamás había imaginado. Estar fuera de mi cuerpo se sintió como si me hubiera liberado de las fuertes ataduras que había llevado durante mucho tiempo. Me sentí totalmente libre por primera vez en mi vida... Sin un cuerpo, podía ver en todas direcciones simultáneamente, incluso sin ojos físicos. La pérdida repentina de mi cuerpo no fue una dificultad; estar EN mi cuerpo sí lo había sido, ¡y ahora era LIBRE! (Dye, 2023)

Confuso: ¿Soy yo?

Perspectiva dual.

Mientras conducía, un hombre iraní que se hace llamar Arshan se sintió mal al llegar a una intersección. Aunque dijo haber mirado a ambos lados, fue atropellado por un coche que no había visto venir. Al instante siguiente, estaba flotando sobre la intersección, donde vio un cuerpo en el suelo. Después de un rato, se reconoció. Para entonces, la gente...Se habían reunido para ayudarlo. Sabía que hablaban, pero no podía oír lo que decían. Había algo más, en cambio:

Cuando miré a estas personas, supe lo que pensaban y lo que iban a decir.

Una ambulancia acudió rápidamente al lugar y Arshan fue trasladado al hospital. Vio que los médicos intentaban salvarle la vida. Lo vio todo desde arriba, justo debajo del techo del quirófano. Notó que estaba separado de su cuerpo, pero al mismo tiempo seguía dentro de él. Esta doble sensación también la han relatado otras personas que han tenido ECM.

En su relato, Arshan intentó describir cómo era estar fuera de su cuerpo. Dijo que estaba en una forma no física, similar a la humana. Pero era muy diferente y muy agradable. Se sentía maravillosamente bien. Mencionó que la vista era su único sentido y que podía ver más de lo que había podido ver en su cuerpo físico.

Sentí que me había convertido en energía. (ECM de Arshan , 1996)

Cabina telefónica.

La infección de una mujer comenzó con dolor de garganta y fiebre alta. En un momento dado, fue hospitalizada. Su médico la visitaba dos veces al día, y durante una de estas visitas, algo salió mal.

Pero una mañana, fue diferente. Sentí una tristeza increíble y abrumadora. En ese momento, solo podía mover la cabeza. Él se quedó y me pidió que me concentrara en sus palabras... escuchar me costaba demasiado. Podía oír su voz, pero sus palabras no eran claras.Me relajé y, de repente, estaba en el techo. Fue suave y muy rápido. Ahora podía oír sus palabras con claridad y entender de qué se trataba su historia.

Ahora miro a la mujer acostada en la cama y pienso: «Oh, yo solía tener un camisón igualito a ese». Entonces me di cuenta: «Si yo estoy aquí arriba y ella está allá abajo, esto no puede ser bueno».

Su espíritu tuvo entonces la oportunidad de vagar brevemente por el hospital.

Me encontré dentro de una cabina telefónica empotrada en la pared del pasillo. Mi esposo estaba hablando por teléfono con mi mejor amiga. Le contaba lo que estaba pasando. Cuando ella respondía, yo estaba en su oficina en Carolina del Norte. Cuando él hablaba, yo estaba de vuelta en la cabina. Esto continuó por un rato, y pude notar los cambios que mi amiga había hecho en la decoración de su oficina. (Anónimo, 17 de octubre de 2019)

Yo solo soy pensamientos.

Un día, una maestra de 22 años volvía en bicicleta a casa desde su trabajo en una escuela primaria. Un coche salió de una calle lateral y debería haberla detenido, pero fue atropellada y cayó de bruces. No quería quedarse tirada en el suelo a la vista de sus alumnos. Con mucha dificultad se levantó, pero volvió a caerse.

Después de eso, todo se volvió muy confuso para ella. Recordó que estaba completamente oscuro y que oyó la sirena de una ambulancia. No supo cómo había subido a la ambulancia. El siguiente momento que recordó fue en el hospital. Ahí fue donde comenzó su ECM.

Desde un punto de observación un poco más alto, vio mucha actividad del personal del hospital alrededor de un cadáver. No se dio cuenta en ese momento.Todo lo que el cuerpo que yacía allí en la mesa, rodeado de los médicos y enfermeras, era suyo.

¿Dónde estoy? ¿Qué pasó?

Se sintió flotar, sin cuerpo. Fue muy extraño. Se dio cuenta de que no podía verse, pero que seguía pensando. Claramente estaba en algún lugar, era evidente que algo le quedaba, pero solo eran pensamientos. Dijo:

Pero yo seguía pensando, y mis emociones también estaban ahí, lo que significaba que debía estar en algún lugar.

La actividad alrededor del cuerpo que se encontraba debajo de ella continuó, pero ella se dio la vuelta y se adentró en la oscuridad, de forma natural, casi automática. (Coppes, 2020, p. 143)

Un rayo cayó sobre su paraguas.

Como describe en su asombroso libro "Cambiado en un instante" , Elizabeth Krohn se encontraba en su auto en el estacionamiento de una sinagoga de Houston, Texas. De repente, se desató una fuerte tormenta. Había planeado ir con sus dos hijos a un servicio conmemorativo. Tomó su paraguas y salió del auto. Tras caminar unos pasos, un rayo impactó su paraguas. Aunque oyó un estruendo ensordecedor y sintió un cosquilleo, no sintió dolor alguno, así que se apresuró a entrar en la sinagoga.

Sus hijos ya habían llegado al vestíbulo, pero lloraban desconsoladamente y estaban terriblemente confundidos. Había una gran consternación en la congregación, y ella no entendía bien por qué, ni podía entender por qué la gente solo prestaba atención a sus hijos y no a ella. De repente, se dio cuenta de que ya no llevaba su paraguas. Se dio la vuelta.Y a través de la ventana de la sinagoga vio su paraguas ennegrecido en el estacionamiento. Un poco más lejos, vio su cuerpo tendido en el suelo. Poco a poco, se dio cuenta de que estaba muerta.

Poco después, vio un resplandor que la invitó a acompañarla, y así lo hizo. Su extensa ECM, según ella, duró dos semanas, mientras que, en términos terrenales, recuperó la consciencia tras solo unos minutos (Krohn y Kripal, 2018, pp. 16–19).

No hay conexión con ese cuerpo.

Este relato de ECM es de Bill Gladstone, mi agente literario en Estados Unidos. Su ECM no se ha publicado en ningún sitio, pero se ofreció a compartirla conmigo para este proyecto.

Tenía 15 años y fui a ver a mi médico de cabecera para que me pusiera la vacuna contra la gripe. Esto fue en 1966, y en aquella época incluso a los niños pequeños se les ponía la vacuna. Me puso la vacuna y me dijo que volvería en dos minutos; que simplemente me sentara en la silla de la sala de reconocimiento donde me la había puesto. Me sentí un poco mareado, pero por lo demás me sentía bien. De repente, ya no estaba en mi cuerpo.

Mi siguiente recuerdo es estar en un estado de éxtasis en la esquina de la sala de reconocimiento, junto al techo. Miré hacia abajo y vi a un hombre con bata blanca haciendo ruidos fuertes. Presté más atención y conecté que el hombre de la bata blanca era un médico. Pude sentir que estaba angustiado y luego observé que estaba tratando de reanimar un cuerpo que estaba en el suelo. Me di cuenta de que el cuerpo en el suelo era el mío. No me sentí conectado con el cuerpo y no reconocí al médico como mi médico de cabecera, aunque normalmente lo haría, ya que lo conocía desde hacía muchos años. No estaba...en absoluto alarmado pero no quería que se preocupara y se dio cuenta que la preocupación del médico era el cuerpo sin vida en el suelo que no le respondía.

Bill entonces se encontró con seres amorosos, conectó con ellos, sintió un amor inmenso y adquirió consciencia de una importante sabiduría eterna (véanse los capítulos pertinentes a continuación). Entonces, para evitar que el doctor siguiera sufriendo, decidió reincorporarse a su cuerpo.

Flotando lejos.

Lo había olvidado.

Lee Thornton escribió un libro impresionante sobre su vida: " A través de la Puerta del Cielo y de regreso" . Es impresionante no solo por su ECM, sino también porque trata sobre cómo finalmente llegó a aceptar el abuso sexual que sufrió por parte de su padre.

Vivía en la India cuando estaba embarazada de su hijo. Contrajo un parásito que la debilitó gravemente. El parto no fue bien. Perdió el conocimiento y se oscureció. Entonces, su ECM comenzó de forma normal.

Flotó fuera de su cuerpo hasta el techo, desde donde pudo ver una gran consternación extendiéndose a su alrededor. Continuó flotando. Salió del hospital y se detuvo en un espacio denso, negro como el terciopelo, donde se sintió a gusto. No había nada allí, pero se sentía libre de todo dolor y miedo, envuelta en una profunda sensación de paz y tranquilidad.

No tenía cuerpo, pero tampoco dolor. El tiempo no existía. Además, se dio cuenta de que estaba pensando y, por lo tanto, de que debía seguir existiendo. Sabía que era real. Escribió que era...

Tan cierto, tan palpable y tan cierto como lo había sido mi vida en la Tierra... Estaba recordando algo que había olvidado, algo que se había borrado de mi memoria al nacer. (Thornton, 2014, págs. 94–95)

Lo que había olvidado era que ya existía antes de que comenzara su vida en la Tierra, es decir, antes de nacer en su vida actual. Había regresado a su origen, que reconoció como su verdadero hogar (Anónimo, 17 de junio de 2013).

Tragado sin esfuerzo hacia la luz.

Azmina Suleman se encontraba hospitalizada debido a lo que parecía ser una inflamación aguda del páncreas. Además, su pulmón izquierdo había colapsado, sus riñones habían fallado y había sufrido un paro respiratorio. Mientras los médicos intentaban salvarla, abandonó el cuerpo.

En su maravilloso libro, Un Pasaje a la Eternidad , escribió de forma convincente sobre el plano multidimensional al otro lado de la vida. Pero el primer paso fue abandonar su cuerpo:

Me resultaba decididamente extraño mirarme desde arriba, de esa forma soñadora y aturdida. Era como ver una película tridimensional donde me veía tumbado en la cama, flácido y sin vida como un trozo de carne. También veía a los médicos y enfermeras intentando con fervor resucitarme. Pero, por alguna razón, sentía una extraña sensación de distanciamiento de la escena. Simplemente no podía identificarme con la gravedad de la situación, no dejarme llevar emocionalmente por el drama. Al fin y al cabo, mi yo «real», o esencial, flotaba cerca del techo... Me sentía perfectamente bien, aunque un poco inestable.

Mientras me quedaba cerca del marco de la puerta, noté que esta versión más liviana y desafiante de la gravedad de mí mismo incluso llevaba la misma bata de hospital azul con su apariencia extremadamente inadecuada.¡Una cobertura que dejó mucho que desear! Sin embargo, pronto me aburrí de mi entorno y perdí el interés en la escena. Como un pájaro liberado repentinamente de su cautiverio, de repente anhelaba surcar los amplios cielos azules y explorar mis horizontes... Me encontré atravesando el techo del hospital como un cuchillo en la mantequilla...

Estaba oscuro y brumoso afuera. Apenas podía distinguir las siluetas oscuras de algunos árboles en la distancia contra lo que parecía ser un cielo sin luna. Mientras estaba allí de pie, descalzo, preguntándome qué hacer a continuación, de repente me di cuenta de una luz intensamente brillante en el cielo justo delante de mí... La luz brilló como un faro. Me sentí como una polilla alada implacablemente atraída por el resplandor brillante de una lámpara solitaria. Y solo por esa fracción de segundo, fue como si el tiempo se detuviera. Casi podía saborear la eternidad... Y antes de darme cuenta, me encontré siendo tragado sin esfuerzo por la luz que fácilmente eclipsaba a mil soles de mediodía... Una vez dentro de lo que en realidad era un estrecho túnel de luz, me envolvió de inmediato un capullo de calidez relajante... Viajaba lo que parecía ser la velocidad de la luz misma. Era como cabalgar hacia la eternidad en las alas de gasa de la luz. (Suleman, 2004, págs. 12–14)

Madreperla.

A los 13 años, este joven fue a nadar con sus amigos. No sabían que el agua estaba helada. Fue el primero en zambullirse y relató un inicio típico de la ECM:

Me dirigí al otro extremo, nadando como un loco, al darme cuenta del frío que hacía. De repente, tras unas brazadas que me entumecieron, algo pasó. El frío desapareció, y estaba nadando en una nube, y era...Fácil, tan fácil como jamás había conocido algo en mi vida, pero mucho más fácil que eso. Era como si mi cuerpo estuviera perfecto, y estaba volando, y era increíblemente fácil y muy, muy cómodo. La nube era de un blanco iridiscente, como nácar, y a medida que avanzaba se hacía cada vez más brillante. Era tan brillante y tan blanca, pero mis ojos no se sentían molestos en absoluto; era perfecta. Seguí avanzando mientras sentía que algo me atraía, y lo único que sabía era que quería ir allí. (Anónimo, 4 de marzo de 2004, 21:06)

Sin dolor, pero con total paz y serenidad.

Manos alrededor de mi cuello.

Inevitablemente, algunas ECM se asocian con violencia grave. Christina, una niña de ocho años, fue secuestrada por dos hombres. Uno de ellos la llevó a la orilla de un río para ahogarla. Ella dijo que dejó de luchar y se rindió, lo que provocó que su cuerpo quedara paralizado.

Me rodeó el cuello con las manos y me mantuvo boca arriba bajo el agua. Recuerdo ver el sol desde abajo y sentir una increíble sensación de pánico, que, en cuestión de segundos, fue reemplazada por una paz y serenidad ilimitadas. Entonces me encontré en un túnel muy estrecho de una luz blanca increíblemente brillante. Estaba boca arriba, flotando y avanzando, con los pies por delante. Recuerdo sentimientos de absoluta felicidad, y tratar de describir esta dicha con palabras no alcanzaría para describir esta experiencia... (Anónimo, 18 de noviembre de 2012)

Cristina me contó que mientras se estaba ahogando, vio a sus padres a lo lejos trabajando en el velero, como si estuviera mirando hacia abajo.Desde el cielo, sobre su cuerpo, los atacó. Incluso vio a su padre corriendo hacia ella porque escuchó sus gritos. Después de que la reanimó y ella recuperó la consciencia —no recuerda qué les sucedió a los hombres—, de inmediato se deprimió mucho, incluso tuvo pensamientos suicidas, porque regresó a este entorno terrenal después de haber estado en un lugar que llamaba "hogar".

Perfectamente fabuloso.

Yazmine Star estaba hospitalizada por un aborto espontáneo. Cuando dos enfermeras la llevaron a otro piso para realizarle más exámenes internos, comenzó su ECM.

De repente, me encontré sobre mi cuerpo, que yacía en una camilla, con una bata blanca de hospital. Miré mi cuerpo y supe que no era mi verdadero yo: era lo que había estado atrapada en mi interior, ¡y ahora era libre! ¡Ah, y qué felicidad sentí!... y las enfermeras me llamaban, una lloraba, otra decía: "¡Dios mío, la hemos perdido!". Mientras tanto, yo estaba sobre ellas pensando: "¡Qué tonto Billy, haciendo tanto alboroto!", preguntándome por qué no podían verme, ¡y luego supe que todo era fabuloso! (ECM de Yazmine S , sin fecha)

Túnel o cueva o . . .

Dejó de preocuparse.

Samieh tenía nueve años y estaba de viaje con sus padres. En pleno verano, en un coche caluroso y sin aire acondicionado, sufrió una crisis de ausencia y dejó de respirar.

Estaba en un lugar parecido a una cueva. Estaba muy oscuro. Me pareció extraño estar parado sobre la nada. Hice muchas preguntas, pero nadie respondió. Recuerdo que me preguntaba si era una prisión o algo así. Estaba muy confundido. Entonces, vi...Una luz brillante al final de este lugar. La luz era muy agradable, y dejé de preocuparme por dónde estaba o qué iba a pasar. (ECM de Samieh , sin fecha)

Me vi caer.

Rachel Finch estaba en el hospital tras haber perdido una gran cantidad de sangre durante el parto. Días después, recibió una transfusión de sangre que no pareció salir bien y se desmayó.

Tenía los ojos tan pesados que los dejé descansar y me levanté. Me quedé un momento junto a mi bebé recién nacida, esperando que me recordara, y luego me puse a viajar.

Sentí como si atravesara un túnel, pero no podía ver sus lados. Estaba oscuro, pero iluminado. No estaba solo. Sentía una presencia conmigo. Daba vueltas, hacia adelante y hacia arriba a una velocidad inimaginable. Era como el viento. Por todo mi cuerpo. Dentro de mí. A esa edad, lo comparaba con estar en una montaña rusa, esa sensación de vértigo. Era maravilloso. Me sentía tan ligero, tan libre. Al mismo tiempo, experimenté esto plenamente y me vi experimentarlo con claridad desde cierta distancia. Todavía puedo verme dando vueltas, si me concentro en el recuerdo...

Viajamos a través de la oscuridad iluminada hasta que vi un punto de luz en la distancia.

Cuando lo vi, fue como un "recuerdo". Sabía adónde me dirigía y quería llegar rápido. No recuerdo si me dirigía hacia él o si me sentía "atraído" de alguna manera, pero era una "necesidad/deseo" dentro de mí. (Anónimo, 10 de junio de 2019)

El túnel viajó con él.

Mientras trabajaba en una escalera, Caan perdió el equilibrio. Cayó de espaldas, de cabeza, y aterrizó sobre el cemento. Dijo que escuchó...

Los huesos de mi cuello crujieron con el impacto. Casi al mismo tiempo, mi mente y mi cuerpo parecieron separarse momentáneamente. (ECM de Caan S , sin fecha)

Luego, como muchos otros que han tenido ECM, viajó a gran velocidad por un túnel. Sin embargo, a diferencia de lo que han descrito otras personas que han tenido ECM, el túnel lo acompañó a la misma velocidad.

Ojo de un huracán.

Durante una tormenta, Dannion Brinkley (2008) hablaba por teléfono fijo cuando, a través de él, le cayó un rayo. Si bien es asombroso lo que experimentó cuando toda esa electricidad de alto voltaje recorrió su cuerpo hasta el suelo, en este punto es importante destacar cómo llegó a ese otro mundo. A veces, la gente dice haber atravesado un túnel. En el caso de Dannion también había un túnel, pero es fascinante cómo lo descubrió.

Dannion estaba fuera de su cuerpo, observándolo, y supo que estaba muerto. Aunque era bastante extraño, también descubrió que podía sentir la sensación de fracaso del paramédico de la ambulancia al no haber podido reanimar a su paciente. Entonces, justo encima de su cuerpo, Dannion vio que...

Se estaba formando un túnel que se abría como el ojo de un huracán y venía hacia mí. (p. 6)

Dijo que no se movió, sino que el túnel se movió. Se acercó a él con el sonido de unas campanillas y luego giró a su alrededor. Luego, como ha sucedido con tantas otras personas que han tenido una ECM, avanzó por el túnel y vio una luz que se hacía más grande a medida que se acercaba (págs. 5–7).

El aire se interrumpió

Ellen Dye (2023) describió cómo, durante su ECM,

De repente, se me ocurrió que la mayoría de las personas sobre las que había leído que habían tenido experiencias cercanas a la muerte decían haber visto una gran Luz, a menudo en forma de agujero de gusano o túnel, y me preguntaba dónde estaba. Al pensarlo, sentí, más que vi, el Túnel de Luz. Fue como si el aire mismo se viera repentinamente perturbado por una energía asombrosamente maravillosa, una sensación de amor y alegría extraordinarios. La Luz misma era brillante y acogedora, y me moví hacia ella sin esfuerzo... Sentí su latido de amor, y me llamó, me atrajo, me arrastró y me condujo... a casa.

Ellos son ustedes

Rachel Finch tuvo una ECM muy profunda que, como a tantas personas que la han vivido, le resultó muy difícil expresar con palabras, ya que la experiencia es inefable. Por ello, decidió plasmar toda su experiencia en verso en su libro Conversaciones con mi Ser Superior (Finch, 2019). Esta es la primera vez que veo una experiencia expresada de esta manera, y el resultado me parece asombrosamente hermoso e impresionante. Otro hermoso ejemplo de una ECM expresada en poesía es el de Andrew Petro (2011). Rachel también envió su ECM a los archivos de la Asociación Internacional de Estudios Cercanos a la Muerte (IANDS) (Anónimo, 10 de junio de 2019).

En el túnel tuvo la sensación de que no estaba sola: había otros presentes.

Estoy en un túnel oscuro y translúcido, un fino velo de película.

Separándome de la inmensidad y soy consciente de

otros seres.

Me pregunto quiénes son y una voz tranquila

dentro de mí murmura,

Ellos son ustedes . (Finch, 2019, p. 33)

He estado aquí cientos de veces

Mientras daba a luz a su hija, Brigitte Buyle (sf) sufrió una hemorragia y falleció. En una fantástica entrevista para Ponto3.org , contó su historia. Salió de su cuerpo y, de repente, se sentó contra la pared, mirando su cuerpo en la cama. Al mismo tiempo, estaba en otra parte:

Me encontré cerca de una escalera muy vieja en algún lugar, y pensé: "¡Ay, no!". Supe al instante que me moría, porque esa escalera, o ese camino, digamos que era una escalera, no sé, bueno, sí, una escalera. Pensé: "Ya he estado aquí cientos de veces, la he visto cientos de veces". Simplemente supe: "Ah, sí, es el camino de vuelta"... Era tan familiar, tan familiar, tan familiar, como si hubiera pasado por allí todos los días durante años, así que realmente conocía todos los detalles.

Tener una forma no física

No sé cuánto tiempo estuve inconsciente cuando me di cuenta de que había dejado mi cuerpo en el sofá y lo miraba a través del techo. No significaba más para mí que un abrigo viejo que había tirado. No había miedo ni confusión, solo una maravillosa ingravidez y libertad.

Era consciente de tener una forma que no era física, pero que se sentía perfectamente natural. Aparté mi atención de la escena de abajo, que parecía alejarse y hacerse más pequeña, y me encontré en una quietud aterciopelada y oscura. Quería atravesarla, pero no podía. Estaba bloqueado. Entonces sentí una presencia protectora, pero poderosa, y me llegaron palabras con una voz que no era una voz. No tengo forma de describirlo; la telepatía es lo más cercano que puedo llegar a ser. Me dijo: «No es tu hora. Debes regresar». No quería, aunque en ese momento lo tenía todo.Por lo que vivir. Estaba recién comprometido, comprando una casa, y mi carrera estaba despegando. (Anónimo, 20 de diciembre de 2010, 17:04)

Dos puntos de vista

En un libro fantástico, Despertares de la Luz , Nancy Rynes (2015) escribió sobre sus dos impresionantes ECM. Tuvo la primera mientras iba en bicicleta por su ciudad y fue atropellada por un todoterreno. Su segunda ECM, muy profunda, ocurrió tres días después, durante la operación de reconstrucción de su columna vertebral. Sobre su primera ECM, escribió:

En tiempo humano, esta ECM duró solo unos minutos. Al ser impactada, me di cuenta de que mi consciencia estaba en dos lugares simultáneamente. Una parte, muy asustada y con aspecto animal, estaba firmemente dentro de mi cuerpo destrozado, atascado en el eje del vehículo y arrastrado por el camión. La otra parte, una observadora muy tranquila e imparcial, flotaba frente al camión y hacia el sur, observando todo lo que se desarrollaba desde la distancia. Esta doble consciencia le parecía bastante normal a la parte observadora de mí. La observadora estaba tranquila ante todo, y recuerdo la sensación de que todo esto sucedía por una razón, de que no había nada que temer. La observadora —yo— observaba cómo los testigos se detenían... y pedían ayuda... Cuando los paramédicos comenzaron a trabajar en mi cuerpo, mis dos yoes volvieron a unirse. (ECM de Nancy R , sin fecha; Rynes, 2015, págs. 3–11)

Hermosos colores

En su maravilloso libro While I Was Out... God Came In , Deirdre DeWitt Maltby (2012) describió cómo se sintióLa llanta derecha de su auto se salió del pavimento y quedó en el arcén. Se escuchó un fuerte golpe y una explosión, tras lo cual su auto empezó a dar vueltas y fue impactado por un camión semirremolque. Dio varias vueltas de campana antes de estrellarse contra una colina. Fue trasladada a la UCI del hospital, donde comenzó su ECM.

Empezó a ver una hermosa esencia amarilla que la reconfortaba. Al principio, pensó que era una nueva forma de consolar a los pacientes, pero luego notó que podía ver 360 grados en todas direcciones. Gracias a esta capacidad, se dio cuenta de que ya no estaba apegada a su cuerpo.

Esto es difícil de explicar porque he estado apegado a mi cuerpo físico toda mi vida. Sentir la capacidad de existir sin un cuerpo es bastante difícil de describir en su totalidad. No era como estar despierto dentro de un sueño; era estar consciente en otro tipo de realidad... Esta experiencia parecía fuera del tiempo... Entonces fui suavemente jalado o guiado a través de lo que percibí como miles de colores. Esta nueva aventura comenzó lentamente, un hermoso color a la vez. Cada color se volvió más vívido o intenso que el anterior, y los colores luego cambiaron mágicamente de tonos desde adentro... Los atractivos colores no eran planos, sino tridimensionales; los sonidos también parecían tridimensionales. La experiencia fue cercana a lo indescriptible, al menos en términos terrenales... los colores, la música y los pensamientos místicamente todos se volvieron uno ...

Luego estaba esa sensación de blancura “que lo abarcaba todo”:

Este blanco era totalmente puro, de un brillo cegador, pero a la vez resultaba muy acogedor. Era la pureza misma, en su forma pura y suprema. Mi alma supo de inmediato que era el centro del Universo. (págs. 42–47)

Otra persona que ha sufrido una ECM, Catja de Rijk (2021), describió de manera similar:

El túnel... tenía unos colores tan hermosos y suaves que se fundían... ¡Lo que sentí allí, nunca lo había experimentado aquí en la Tierra! (p. 31)

Pude ver a todos

En su maravilloso libro, Crossing Over & Coming Home , que contiene 21 casos reveladores de personas homosexuales que experimentaron ECM, Liz Dale (2008) escribió sobre un hombre que sufrió un accidente de bicicleta. De repente, vio su cuerpo tendido en la acera. Quedó totalmente asombrado por esta visión, pues era la primera vez que se veía a sí mismo en tres dimensiones.

Fue un shock enorme, porque normalmente solo nos vemos en un reflejo unidimensional de un espejo o en una fotografía. Pero no sentí ningún dolor. Me sentí completamente plena y libre, y pensé: «Esto es lo que realmente soy». (p. 90)

Luego, al poco tiempo, despegó. Sintió que lo alejaban de la Tierra a la velocidad de la luz.

Vi a toda la gente del planeta simultáneamente en ese instante. Vi gente en China, Suecia y Uruguay. Vi gente durmiendo y soñando. Vi gente preparando comida en sus casas y restaurantes... Vi a madres dando a luz, lo cual me resultó especialmente hermoso y conmovedor. (p. 90)

Perdiendo el apego

Anita Moorjani (2012) escribió un libro fantástico, "Morir para ser yo" , sobre su ECM, que tuvo cuando se estaba muriendo de cáncer. Describió el momento extraordinario en el que...Se le escapó del cuerpo. Sintió el profundo dolor de su esposo y su madre, quienes estaban junto a su cama. Al mismo tiempo, sintió que la sacaban de esa situación. Sintió que el apego a su familia y a todo lo demás se desvanecía. Escribió:

A medida que mis emociones se alejaban de mi entorno, comencé a notar cómo seguía expandiéndome para llenar cada espacio, hasta que no hubo separación entre mí y todo lo demás. Abarcaba —no, me convertí— en todo y en todos. (p. 64)

Dijo que fue una especie de «despertar». Se expandió mucho más allá de su cuerpo y mundo físico.

¡Mi alma finalmente se estaba dando cuenta de su verdadera magnificencia! (p. 65)

Capítulo 2. Observaciones verídicas.

Demostrar científicamente que las ECM son un primer paso real hacia la vida después de la muerte es extremadamente difícil. Esto se debe a que necesitamos pruebas que otros puedan repetir de forma independiente y que arrojen resultados iguales o similares. El problema con las ECM es que ocurren inesperadamente y no pueden repetirse en un entorno de prueba controlado.

Sin embargo, podría haber otra forma de aproximarse a la prueba de que las ECM ofrecen una visión real de lo que nos espera a los humanos después de la muerte. Una categoría de dicha evidencia se refiere a los primeros momentos de una ECM, en los que quien la experimenta se encuentra en un lugar fuera del cuerpo físico, percibiendo el mundo material. En algunos casos, quienes han tenido ECM han hecho observaciones que pudieron verificarse y corroborarse posteriormente. Las observaciones fueron verídicas . Se han publicado muchos casos de este tipo, y su número va en aumento. Se ha publicado un excelente libro en su segunda edición, que ahora incluye más de 125 de estos casos verificados: El Ser No Muere (Rivas et al., 2023).

Al considerar la relación entre la mente y el cerebro, es necesario considerar seriamente los casos verídicos. En mi opinión, estos casos, en conjunto, proporcionan una sólida evidencia de que la consciencia puede existir independientemente del cerebro. Y, por lo tanto, estos casos apuntan a cierta certeza sobre la vida después de la muerte.

El hombre con la dentadura postiza.

El caso del "hombre de la dentadura postiza" se menciona en la investigación del cardiólogo Pim van Lommel, publicada en la prestigiosa revista médica Lancet (van Lommel et al., 2001). Un hombre fue encontrado en un prado holandés sufriendo un infarto masivo. Durante el trayecto en ambulancia, se realizaron varios intentos de reanimación. En el hospital, las tres enfermeras que se encargaron de la reanimación observaron que, además de la ausencia de ritmo cardíaco y circulación sanguínea, el paciente no respiraba y no tenía consciencia perceptible. Sus rasgos eran grises y parecía presentar lividez post mortem.

Al intentar intubar al paciente con un respirador artificial, uno de los enfermeros, un hombre, descubrió que el paciente llevaba una dentadura postiza. Le quitó la prótesis y la colocó en un estante de madera del carro de paro. En 1979, los carros de paro no eran tan comunes como ahora. Este carro en particular era una modificación de un carro de cocina común. Por lo tanto, era primitivo y único. La reanimación duró aproximadamente una hora, un tiempo considerable para este procedimiento, pero finalmente fue exitosa. El enfermero se fue a casa y se tomó una semana de vacaciones.

Cuando el enfermero regresó de vacaciones, su horario consistía en atender a pacientes, entre ellos al paciente al que había ayudado a reanimar. Aunque el paciente había estado inconsciente al ingresar al hospital, durante toda la reanimación, e incluso un tiempo después de que se le restableciera el ritmo cardíaco, reconoció de inmediato al enfermero. Para asombro del enfermero, el paciente pudo decirle dónde le había puesto la dentadura postiza. El paciente dijo que había estado cerca del techo y había visto todo lo sucedido, todo el procedimiento. Podía describir la habitación, incluso el lavabo empotrado, que no habría podido ver desde donde...Estaba acostado en esa habitación. También describió el carro de emergencia, donde el equipo médico, de hecho, encontró su dentadura postiza (Coppes, 2011, págs. 46–47).

Operación Parada.

Este es el caso bien conocido de una mujer joven. (Pam Reynolds, compositora norteamericana de 35 años que vivía en la ciudad de Atlanta, en Estados Unidos), con hinchazón en uno de los principales vasos sanguíneos de su cerebro. Fue presentado en un documental de la BBC, The Day I Died, que está disponible para ver en línea (Broome, 2002). Esta hinchazón en particular puede imaginarse como una burbuja en el costado de una llanta de bicicleta defectuosa. Debido a su ubicación profunda en el cerebro y al riesgo de que, durante la cirugía cerebral típica utilizada en ese momento, la hinchazón reventara y el paciente muriera, la condición se consideró inoperable. Afortunadamente para esta mujer, justo en ese momento, se estaba desarrollando un nuevo procedimiento quirúrgico radical, conocido como paro cardíaco hipotérmico. El apodo de esta operación, "parada", es más claro que el término médico e ilustra exactamente lo que implica el procedimiento.

Se enfrió el cuerpo de la paciente a una temperatura de 60 grados Fahrenheit (unos 15 grados Celsius), se detuvo su respiración y su ritmo cardíaco, se aplanaron sus ondas cerebrales y se le drenó toda la sangre de la cabeza. Todo esto se hizo para reducir el tamaño de la hinchazón, como si se le estuviera extrayendo el aire de un neumático defectuoso. De esta manera, la burbuja desinflada se podía extirpar y retirar con mucha más facilidad. Luego, todo se invirtió: la sangre regresó a la cabeza, el cuerpo recuperó su temperatura normal y el corazón se reinició.

Durante toda la cirugía, que duró aproximadamente una hora y 25 minutos, la paciente fue monitoreada cuidadosamente. Mientras estaba completamente anestesiada, con los ojos cerrados y vendados, y los oídos tapados, sintió como si la hubieran sacado de la parte superior de la cabeza. Más tarde contó que un sonido particular la sacó. Era "una frecuencia que...Sigue adelante”, como si fuera una carretera. Ese fue el comienzo de una ECM muy profunda. En la primera parte, experimentó que su consciencia funcionaba con claridad fuera de su cuerpo y vio con precisión los detalles de los procedimientos e instrumentos quirúrgicos. Como si estuviera sentada sobre el hombro del cirujano, dijo, tuvo una visión más brillante, más enfocada y más clara de todo lo que sucedía que si lo viera con sus ojos físicos. Esperaba que las enfermeras le hubieran afeitado todo el cabello para la operación, pero no lo hicieron.

Antes de entrar al quirófano, no pudo haber visto los instrumentos que se iban a utilizar, ya que se guardaban en sus embalajes y estaban cubiertos por razones de higiene; solo se abrían en el momento de la cirugía en que se utilizarían. Sin embargo, más tarde daría una buena descripción de la sierra para huesos que se utilizó para perforar su cráneo. Dijo que parecía un cepillo de dientes eléctrico y que tenía hojas intercambiables.

Le habían tapado los oídos con altavoces que emitían clics de 100 decibelios en un oído y ruido blanco en el otro. El equipo alternaba ambos sonidos periódicamente para evitar la sordera. Al someter a la paciente a este ruido intenso de forma continua, podían detectar cuándo el cerebro no respondía ni siquiera a esta estimulación intrusiva, lo que demostraba que la paciente estaba completamente aletargada. A pesar de estar completamente anestesiada, con los oídos completamente tapados y el fuerte ruido de los altavoces, informó más tarde que escuchó la conversación entre su neurocirujano y el cardiocirujano sobre cómo las venas de un lado de su ingle eran demasiado pequeñas para conectarlas a la máquina de circulación extracorpórea que almacenaría la sangre drenada y la mantendría viable durante la cirugía. También describió el sonido de la sierra para huesos como agudo y cómo, de repente, "hizo ese ruido".

Todo esto ocurrió mientras el equipo enfriaba su cuerpo y antes de que le drenaran la sangre. El cirujano cardíaco encontró una vena utilizable y el procedimiento de parada progresó. Finalmente, bajo la atenta supervisión del equipo médico, no presentó latidos, presión arterial ni respiración, y sus ondas cerebrales se aplanaron, lo que indicaba que el cerebro se había apagado por completo. Permaneció en este estado de muerte clínica durante más de una hora mientras el cirujano extirpaba el aneurisma. En el momento en que le drenaron la sangre, "como el aceite de un coche", dijo, la sacaron del quirófano. No fue contra su voluntad, explicó más tarde; fue por voluntad propia. Atravesó un túnel donde escuchó a su abuela llamarla. Posteriormente, vio la Luz, y finalmente vio a muchas otras personas fallecidas en esa Luz, entre ellas, a su abuela. Aunque todos los espíritus eran amigables, no la dejaron ir más lejos. Tenía que regresar y, afortunadamente, eso era también lo que deseaba para sí misma, porque quería cuidar de sus hijos. Le dijeron que si se adentraba más en la Luz, ya no sería posible regresar.

Algo me sucedía físicamente. No podían devolverme este yo al cuerpo, como si hubiera ido demasiado lejos, y no podían reconectar. Así que no me dejaban ir a ningún lado ni hacer nada.

Su reingreso a su cuerpo también fue interesante. Su tío —quien ya había fallecido físicamente, pero en este ámbito estaba muy vivo— la guió de vuelta a través del túnel. Al final, vio «la cosa, mi cuerpo». No quería volver a entrar en él. Su tío la empujó suavemente hacia dentro, y se sintió «como sumergirse en una piscina de agua helada» (Coppes, 2011, pp. 47–50; Rivas et al., 2023, pp. 114–123; Sabom, 1998, pp. 37–52).

El cirujano aleteador.

El relato en primera persona de la ECM de Al Sullivan está disponible en línea (Javier, sf). Al estaba totalmente convencido de que no había perdido la razón, sino que solo estaba fuera de sí. Durante un examen en el hospital, se le obstruyó una arteria coronaria. Tuvo que ser operado de inmediato.

En el quirófano, el Dr. Takata se presentó como cirujano cardiovascular. Dijo que le extraerían venas de las piernas y de otras partes del cuerpo y le crearían cuatro o cinco derivaciones. Mientras tanto, a Al le administraron anestesia.

Estoy escuchando y escuchando. Y de repente, ya no tengo que escucharlo. Puedo ver lo que hace porque descubrí que ya no estaba allí para escuchar. Simplemente dejé mi cuerpo y observé. Puedo ver, pero estoy arriba, mirando hacia abajo a lo que solía ser yo. No era yo, porque mi verdadero yo está aquí arriba, observando. Fue entonces cuando empezaron a ponerme cosas sobre los ojos y todo tipo de cortinas y mantas a mi alrededor. Y, aun así, puedo ver al Dr. Takata y a su equipo. Y esto es otra cosa, podía ver a través de la mesa de operaciones y de mí, y podía ver qué tipo de botas llevaba puestas. En un momento, dio un paso atrás. El cirujano dio un paso atrás. Y parecía que agitaba los brazos. Y yo... ¿para qué demonios hace eso? Estaba orquestando, haz esto, haz aquello, y me parecía muy extraño lo que estaba haciendo.

Desde una perspectiva física, Al Sullivan no pudo haber visto al médico realizar la operación, con los brazos agitándose. Durante la operación, Al tenía los ojos vendados, y una gasa estéril le impediría usar sus ojos físicos para ver lo que hacía el médico. Sin embargo, esta parte de...La operación no fue la única parte que Al Sullivan pudo describir; hubo más partes que pudo relatar en detalle.

Este caso es especial porque el personal médico contactó al investigador de ECM y psiquiatra Bruce Greyson poco después de la cirugía. Lo hicieron después de que el paciente fuera llevado a la sala de postoperatorio, donde recuperó la consciencia e inmediatamente les contó al personal lo que había experimentado. Greyson investigó el caso con prontitud. En esa investigación, descubrió la explicación de los codos "aleteantes". Cuando el Dr. Takata no estaba operando, no quería contaminarse las manos, así que las apoyaba sobre la bata estéril que le cubría el pecho y usaba los codos para indicar e indicar a sus asistentes qué hacer.

El Dr. Takata reconoció posteriormente: «No puedo explicar cómo vio estas cosas bajo el sueño absoluto de la anestesia». En el relato de este caso, publicado en el libro «El yo no muere» (Rivas et al., 2023, págs. 9–11), el Dr. Takata afirmó conocer casos en los que el efecto de la anestesia desaparece durante la operación y el paciente escucha la conversación del médico. También escribió que ha tenido pacientes con este tipo de anestesia. Continuó:

Pero nunca me he encontrado con una en la que el paciente describa detalles de la operación como si hubiera presenciado el proceso. Francamente, no sé cómo se puede explicar este caso. Pero como esto realmente ocurrió, debo aceptarlo como un hecho. Creo que siempre debemos ser humildes al aceptarlo. En resumen, creo que la ciencia aún no ha revelado suficientemente la capacidad de los seres humanos. Existe en este mundo algo que la ciencia o las matemáticas no pueden captar. (Javier, sin fecha)

Abuelas fumadoras.

Se puede ver a Michaela en línea contando su historia (Garrett, B., sin fecha). En 1994, a los 17 años, fue víctima de un grave accidente automovilístico. Chocó con un camión pesado. Sus lesiones fueron tan graves que la trasladaron en helicóptero al hospital más cercano. Sufrió una lesión cerebral grave. Durante el vuelo, entró en coma y tuvo su ECM, que incluyó una revisión de vida muy detallada. También tuvo una visión anticipada de su vida futura, donde vio que tendría nietos.

En su ECM, fue amada y abrazada por «Dios o su yo superior», y la sensación fue maravillosa. Podría morir si quisiera, pero entonces no podría llevar la vida feliz que había tenido con sus nietos. Entonces le suplicó a Dios que no la dejara morir. Lloró, oró y luchó, y entonces:

De repente, sentí como si me succionaran del espacio, como si estuviera en un tubo, como si estuvieran haciendo un vacío... Lo siguiente que recuerdo es que estaba en un rincón de la habitación del hospital, mirando mi cuerpo tendido allí. (Garrett, B., sin fecha)

Su familia la rodeaba y estaban tristes. Intentó consolarlos, pero, por supuesto, no la oyeron. Dice que podía moverse libremente por el hospital y que estuvo entrando y saliendo de su cuerpo durante aproximadamente una semana y media. Esa capacidad en sí misma es bastante notable, pero lo más interesante de su historia es cuando, durante su ECM, vio a sus padres en una cafetería del hospital.

Era como un banco. Mis abuelas estaban sentadas frente a mis padres. Mi papá es fumador y dijo que iba a fumar un cigarrillo porque quería darles un respiro y salir de allí. Y es curioso, porque mi abuela, la mamá de mi mamá, que nunca había fumado ni fumaría un cigarrillo en su vida, dijo: "Yo también quiero uno. Voy a fumar uno también". Entonces mi otro...Mi abuela dijo: «Yo también». Y ninguna de mis abuelas fumaría jamás un cigarrillo. (Rivas et al. 2023, p. 53; Garrett, B., sin fecha)

Más tarde, sus padres no creyeron nada de lo que les contó sobre este episodio de deambulación en el hospital, hasta que les contó la historia de las abuelas fumadoras.

La zapatilla de tenis azul.

Durante una reanimación, una paciente salió flotando de su cuerpo hacia una repisa fuera del hospital. Allí vio una zapatilla de tenis con detalles como el color (azul oscuro), una marca de desgaste sobre el dedo meñique y el logotipo de Nike. Posteriormente, la paciente le preguntó a una trabajadora social si realmente había una zapatilla así en la repisa. La trabajadora social, Kimberly Clark Sharp, efectivamente la encontró. Desde la publicación de esta historia, los escépticos han intentado restarle importancia, pero Kimberly ha respondido a las críticas punto por punto. Conozco personalmente a Kimberly y, en mi opinión, no solo es muy afectuosa, sino también muy confiable. Lea su versión de la historia en su libro " Después de la Luz" . Allí también leerá sobre su ECM que tuvo años antes de encontrar la zapatilla de tenis, y sobre lo que descubrió al otro lado que puede cambiar su vida (Rivas et al., 2023, págs. 40–43; Sharp, 2003, págs. 7–14; Sharp, 2007).

La Gran Recesión.

Esta es una historia de mi investigación, y aunque tal vez no pueda considerarse una observación puramente verídica, aun así indica que hay algo de verdad en las ECM.

Cuando la Gran Recesión (2007–2009) estaba apenas en su primera fase, tuve una de mis entrevistas con una persona que tuvo una ECM. La crisis comenzó en agosto de 2007 y se prolongó hasta que Bear Stearns, uno de los principales bancos de inversión, se enfrentó a graves problemas. Hablé con el experto en ECM en marzo de 2008, justo después de que JP Morgan/Chase rescatara a Bear Stearns en un acuerdo negociado por la Reserva Federal. Todos suspiraban aliviados y los precios de las acciones se recuperaron rápidamente de sus pérdidas anteriores.

Mientras la gente se apresuraba a comprar acciones de nuevo, la persona que tuvo una experiencia cercana a la muerte me dijo que este episodio con Bear Stearns era solo el principio. Dijo:

Lo que está sucediendo en Estados Unidos es solo el anticipo de la verdadera crisis. Esta aún está por venir y será realmente grave.

Recibió esta información en 1986 durante su ECM, pero no la comprendió porque le llegó en una forma de comunicación elevada. El conocimiento se volvió intangible después de su experiencia. Además, no tiene conocimientos de finanzas, y solo por esa razón no pudo explicar lo que había visto. Sin embargo, la agitación que comenzó en 2007, que condujo a la tensión aterradora que precedió al rescate de Bear Sterns, le hizo comprender que ese era el período que había visto en 1986. Sus sentimientos durante la ECM coincidieron con la tensión aterradora que percibió en el mundo de marzo de 2008.

En el momento de la entrevista, no le di mucha importancia a lo que decía. Tomé mis notas y seguí con mi vida, hasta septiembre de ese año. Las dos gigantescas empresas hipotecarias, Fannie Mae y Freddie Mac, y la mayor aseguradora del mundo, AIG, se enfrentaron a crecientes problemas. Hasta ese momento, no se había creído posible la quiebra de estas tres gigantescas firmas financieras. Finalmente, el Tesoro de Estados Unidos tuvo que rescatarlas total o parcialmente nacionalizadas. A mediados de septiembre de 2008, Lehman Brothers, otro banco de inversión, quebró, lo que desencadenó el colapso gradual del sistema financiero tal como lo conocíamos desde la Segunda Guerra Mundial. Esto condujo a la nacionalización total o parcial de muchos más bancos y compañías de seguros en Europa y Estados Unidos. El colapso del sistema financiero provocó la crisis económica más grave que el mundo había experimentado desde la Gran Depresión de la década de 1930. Así que resultó que tenía razón (Coppes, 2011, pp. 144–145).

El neurocientífico.

Esta historia no es estrictamente un ejemplo de observación verídica, pero es tan especial que, aun así, quiero incluirla en este capítulo. Al igual que las historias anteriores y posteriores, contiene aspectos que se verificaron tras la experiencia.

Durante la conferencia IANDS de 2011 en Durham, Carolina del Norte, el neurocientífico Eben Alexander III habló por primera vez sobre su ECM, que posteriormente se publicó en su brillante éxito de ventas " Prueba del Cielo" (Alexander, 2012) y se resumió en su sitio web (Alexander, s.f.). Había sido miembro del profesorado de la facultad de medicina de la Universidad de Harvard y, como neurocirujano académico durante los 25 años anteriores, había tratado a numerosos pacientes en coma. Afirmó que creía saber prácticamente todo sobre el cerebro y la consciencia. Se consideraba un "materialista": alguien que cree que el cerebro determina la consciencia.

En noviembre de 2008, él mismo entró en coma debido a un caso extremadamente raro de meningitis espontánea por Eskerikia.coli . Lo que le ocurrió entonces cambió su visión materialista del mundo.

Antes de contarles su historia, es necesario que sepan que Alexander fue adoptado cuando era bebé en 1954. Porque su hijo, EbenIV, quería compilar su árbol genealógico para un proyecto escolar en 1999. Alexander, estudiante de último año, escribió al hogar infantil, del que había sido adoptado, para preguntar si había alguna información sobre su familia biológica. Al principio, le dijeron que sus padres habían estado muy enamorados, pero que cada uno había tomado su camino. Su madre no podía cuidarlo, por lo que terminó en el orfanato.

En una segunda comunicación, en febrero de 2000, le informaron que sus padres biológicos finalmente se habían casado y tenían tres hijos más. Desafortunadamente, la hija menor acababa de fallecer. También le dijeron que no era un buen momento para volver a sus vidas, ya que aún estaban de duelo por la pérdida de su hija menor, lo cual lo impactó. Sin embargo, durante los años siguientes, logró contactar con ellos.

Ocho años después, durante su coma relacionado con la meningitis, tuvo una ECM en la que experimentó una realidad más real que la terrenal que había conocido hasta entonces. Fue muy vibrante. Dijo que su consciencia se encontraba en un nivel fundamental. Se encontraba en un paisaje excepcionalmente bello, en absoluta armonía. Había cascadas, perros ladrando, música hermosa y una agradable y cálida brisa de verano.

Mientras volaba por ese maravilloso paisaje en alas de mariposa, notó a una mujer de una belleza impresionante y extraordinaria sentada a su lado. La comunicación con ella no era con palabras, pero era muy directa. Irradiaba amor incondicional.

En las etapas finales de su viaje, presenció seis rostros que sirvieron como anclas temporales verídicas, vinculando la presencia terrenal de familiares y seres queridos en la UCI con los sucesos de su ECM. El rostro final, el de un niño de diez años, fue lo que finalmente lo trajo de vuelta a este mundo. Era el rostro de su hijo, Bond, suplicándole que estuviera presente. Aunque no reconoció a Bond en ese momento, su fuerte amor, la conexión y el sentido que Eben tenía de su responsabilidad de estar allí para Bond finalmente lo trajeron de regreso a este mundo.

Y regresó. En los meses posteriores a su milagrosa recuperación, siguió preguntándose quién era la joven increíblemente hermosa y encantadora de su ECM. Tras cuatro meses de recuperación, su familia biológica decidió enviarle una foto de su hija menor, que había fallecido de adulta: su hermana. Al ver la foto, dijo que sintió como si le hubieran dado un puñetazo en el estómago, desplomándose en el suelo e incapaz de mantenerse en pie durante muchos minutos. La mujer de la foto resultó ser esa mujer de una belleza deslumbrante y amorosa de su ECM. Solo podía significar que había conocido a su hermana fallecida, ¡sin haber sabido en vida física quién era ni que había muerto!

Por lo tanto, le quedó claro que las ECM son experiencias reales, y que también representan un problema complejo para la neurociencia. Me comentó que muchos de sus colegas neurocirujanos están empezando a admitir, poco a poco, que, como la mayoría de quienes han estudiado las ECM, no saben realmente cómo explicar este fenómeno y están menos seguros de su visión materialista del mundo que antes.

Experiencia de muerte compartida.

Reunión de madre e hijo.

La novia de Scott Taylor (segunda) y su hijo de 7 años sufrieron un grave accidente automovilístico. Ella falleció, y su hijo sufrió una lesión cerebral grave y se esperaba que falleciera pronto. La familia y Scott estaban juntos en la habitación del hospital cuando el niño realizó la transición. Scott dijo que vio a su novia bajar.

Y [ella] sacó a [su hijo] de su cuerpo, y fue un reencuentro exquisito. Ese reencuentro estuvo lleno de alegría; solo puedes imaginar a una madre recibiendo a su hijo de vuelta, pero entonces ocurrió algo realmente extraordinario. Se volvieron hacia mí y me abrazaron, y luego los tres fuimos juntos a La Luz. Fue algo que jamás podría haber imaginado, porque cuando llegamos a La Luz, cuando entramos en ella, fue alegría, un amor asombroso, un estallido de reencuentro con las entidades más amorosas, con [la madre] y [su hijo].

Regresó lentamente a la habitación del hospital. Consideró inapropiado hablar con los demás sobre su experiencia de esta bilocación. Sin embargo, 15 años después, Scott entrevistó a una mujer que había tenido una ECM y que también había estado presente en esa habitación. Durante la entrevista, descubrió que, cuando el niño falleció, ella había tenido una experiencia casi idéntica a la de Scott:

Que había presenciado cómo [la madre] venía a sacar a [su hijo] de su cuerpo. Que había presenciado la misma exquisita reunión entre [la madre] y [su hijo]. Y que [la madre] y [su hijo] se habían acercado a ella y la habían llevado a la Luz.

Novia

La historia que sigue no es un ejemplo de una observación verídica, pero demuestra que otras personas han vivido experiencias de muerte compartidas como la de Scott. Se trata de la historia de un niño vietnamita, Vu Tran. A los 15 años, en 1975, justo antes del establecimiento del comunismo en Vietnam del Sur, emigró a Estados Unidos con sus padres y hermanos. Alcanzó el éxito social y creía ser dueño de su destino, que nada ni nadie podía cambiarlo.

Una noche, al regresar de unas cortas vacaciones, estaba en el auto con su prometida, ninguno de los dos llevaba puesto el cinturón de seguridad.

Recuerdo haberme girado para mirar a mi prometida y ver su sonrisa. Volví y de repente vi los faros. Fue un choque frontal terrible, y milagrosamente fui el único superviviente. Tuve una experiencia cercana a la muerte porque vi a mi prometida dirigirse hacia una luz brillante, y simplemente la seguí. Pero al entrar en esa luz brillante, se dio la vuelta y me dijo: "¡No puedes venir porque todavía tienes algo que hacer!". Después de decirlo, sentí inmediatamente una gran pesadez y me sentí dolorido, con sangre en el cuerpo. La vi apoyada en el tablero del lado del copiloto. Me estiré y la volví a sentar en la silla... Más tarde... el médico de urgencias vino a decirme que no podían hacer nada para salvar a mi prometida porque había sufrido una lesión cerebral grave. (Anónimo, 8 de julio de 2021)

Capítulo 3. Fuera de este mundo.

Las ECM son experiencias extraordinarias. Quienes las han tenido hablan de un mundo completamente diferente al que conocemos. Parece un mundo inmaterial con paisajes, colores, sonidos, apariencia y sensaciones sobrenaturales. Es más hermoso que nuestro mundo. Es más dimensional. Es un mundo donde el espacio y el tiempo son completamente diferentes. El espacio y el tiempo incluso parecen inexistentes, ni representan obstáculos como en nuestro mundo: parece que en la dimensión transmaterial podemos estar donde queramos y en el momento que elijamos. Nuestros amigos y familiares fallecidos están allí, e incluso nuestras mascotas fallecidas. Comunicarnos con ellos, con otros seres de luz o con la Luz misma es muy sencillo. Y sabemos todo lo que hay que saber porque todo el conocimiento está disponible gratuitamente.

Esto desconcierta a quienes han tenido ECM. Sin embargo, según ellos, es un mundo que realmente existe. Muchos incluso afirman que ese mundo es más real que el nuestro.

En la mayoría de las ECM, el amor juega un papel importante. No es solo amor, sino AMOR, con mayúsculas. Es amor incondicional; simplemente no hay condiciones para recibirlo. La mayoría de quienes experimentan ECM afirman que este amor es lo más importante que sienten al otro lado de la vida terrenal. Está ahí para todos nosotros, para cada uno de nosotros individualmente, sin excepciones.

El amor también parece ser lo más importante en nuestro mundo terrenal, porque nuestro mundo es, de alguna manera, parte de ese otro mundo. El otro mundo está muy cerca. Quizás podamos...Compárese con la situación en la que estamos encerrados en el baño del palacio, pero aun así estamos en él. Está a nuestro alrededor, pero no podemos verlo. Saldremos del baño (por así decirlo) y podremos ver las maravillas del resto del palacio...

Algunas personas que han tenido ECM afirman que este otro mundo no solo nos rodea, sino que se superpone al nuestro. Sin embargo, por alguna razón, no logramos verlo.

Que no podamos verlo no significa que no exista. Quienes han tenido una ECM están convencidos de que está ahí y de que regresarán a ese otro mundo después de su muerte física. Por eso, tantos no le temen a la muerte.

En este capítulo encontrarás muchas citas de personas que han tenido ECM y que muestran lo diferente que es este otro mundo. No las leas apresuradamente, como si tuvieras que tomar un tren. Hazlo lentamente. Hazlo una por una, para que puedas saborear lo extraordinario y fuera de nuestro mundo que es.

Y no piensen que estas citas son absurdas o imposibles, ni que son demasiado extremas para darnos una buena impresión de esa otra realidad. Simplemente dejen de lado lo que han aprendido durante su vida en nuestro mundo espacio–temporal de cuatro dimensiones, porque bien podría ser que este otro mundo tenga más dimensiones que el nuestro.

Nuestro mundo terrestre tiene cuatro dimensiones espacio–temporales, y es difícil imaginar un mundo con más de estas cuatro dimensiones. Incluso si solo fuera una dimensión adicional, sería algo que jamás podríamos comprender ni describir con nuestros conceptos actuales.

Hagamos un experimento basado en el libro de Edwin Abbott, Flatland , del siglo XIX . Imaginemos un mundo con una dimensión menos que el nuestro: en lugar de cuatro (largo, ancho, alto y tiempo), solo tres (sin altura).

Un mundo tridimensional sería un mundo donde viven personas planas (bidimensionales) que tienen conocimiento del tiempo.(la tercera dimensión). Si hubiera árboles, serían completamente diferentes a los nuestros, porque también serían planos.

Las personas planas pueden caminar alrededor de un árbol plano, pero, por definición, jamás podrán treparlo. Ni siquiera conocerían el concepto de trepar, porque la altura no existe en su mundo plano.

Si pisáramos este mundo plano y camináramos sobre él, las personas planas solo verían dónde ponemos los pies. Para ellas, algo aparecería de repente, desaparecería de nuevo y volvería a emerger un poco más allá. No tendrían ni idea de qué es ni podrían describirlo con exactitud. Quizás lo llamarían un fantasma que aparece y desaparece, o tal vez una aparición aleatoria en movimiento. En cualquier caso, no tendrían ni la menor idea del cuerpo entero, nuestro cuerpo, que está ligado a esa aparición en movimiento.

Ahora imaginen que uno de ellos tuviera la oportunidad única de vislumbrar nuestro mundo cuatridimensional. Quedaría completamente desconcertado y, al regresar a su mundo plano, jamás podría describir a sus compañeros planos lo que vio. ¿Cómo podría expresar que estas apariciones móviles son solo una pequeña parte, o incluso una simple huella, de un cuerpo entero adherido a él? Les diría cosas incomprensibles y crípticas a sus hermanos y hermanas, como: «El otro mundo es más real, tienes más posibilidades, puedes moverte con mayor libertad, puedes ver en todas direcciones al mismo tiempo, y aunque nosotros no podamos verlo, ese mundo nos rodea».

Eso es exactamente lo que les sucede a quienes tienen una ECM. Les cuesta encontrar las palabras adecuadas para describir su experiencia. Y fracasan, porque no las encuentran. El lenguaje se desarrolló para reflejar nuestro mundo cuatridimensional, no ese otro mundo multidimensional. En el lenguaje de este mundo, la experiencia de ese otro mundo es inefable .

Antes de leer las citas que demuestran lo extraordinario que es ese otro mundo, recuerda que no hay dos ECM iguales. Cada una es única y diferente.

Además, quienes experimentan ECM parecen tener cierto control sobre su experiencia. No se sabe con certeza por qué, pero parece que nosotros mismos condicionamos parcialmente nuestra ECM. Las imágenes que vemos surgen en parte de nuestro inconsciente personal. También podrían provenir de nuestro inconsciente colectivo.

Por ejemplo, en las culturas occidentales, las personas a veces perciben a Jesús o a Dios en la Luz, mientras que en otras culturas, desde su perspectiva religiosa, ven a su Dios, o a sus dioses, o a figuras espirituales importantes en la Luz. Algunos ejemplos son Mahoma (ECM de Halil T , sin fecha), Kalika o Kali, la diosa hindú que destruye el mal (ECM de Arvind B , sin fecha), y Durga, la diosa hindú de la creación (ECM de Neha S , sin fecha).

Todas estas diferencias no deben alarmarnos, ni significan que las ECM sean producto de la imaginación. El hecho de que nuestra consciencia pueda existir independientemente de nuestro cuerpo ya es evidente a partir de las observaciones verídicas analizadas en el capítulo anterior. Lo que debemos hacer es examinar los temas centrales que subyacen a todas estas diferencias: que existe una vida después de la muerte, que el amor incondicional es la base de todo (Capítulo 4) y que todos estamos, como mínimo, estrechamente conectados entre nosotros y con todo lo que existe (Capítulo 9).

Es grandioso y muy hermoso.

No hay palabras en nuestro idioma.

Cuando Carol Lynn Vengroff tenía 12 años, se encontraba en París. Su ECM ocurrió durante uno de los inviernos más crudos, concretamente en la noche más fría registrada en la historia de Francia, en 1963. La calefacción y la electricidad estaban apagadas, y ella estaba en la cama completamente vestida, incluyendo un abrigo y otras prendas de abrigo.Sin embargo, debido al terrible resfriado, se sumió en su ECM. Escribió un libro breve sobre su experiencia, My Ever After Chronicles (Vengroff, 2012), en el que relató toda la sabiduría que recibió y que pudo llevarse a la Tierra. Aunque es un libro corto, está lleno de mensajes inspiradores. Escribió sobre lo diferente que era el entorno en el que se encontró repentinamente. Hizo una revisión de su vida (véase el capítulo 6) y sintió una alegría inmensa.

Ella escribió sobre este lugar que: .no hay palabras en nuestro lenguaje humano que se acerquen siquiera remotamente a describir la dimensión en la que había entrado... Este era un lugar sin tiempo. No existían horas, minutos, segundos, noches, días, meses, años, siglos, eones. Sin embargo, había un orden, un sistema en todo lo que ocurría... Todos mis sentidos se amplificaron y agudizaron de una manera indescriptible que nunca había experimentado en la Tierra. Me sentí real. Me sentí más vivo, más de lo que jamás podría recordar. (Vengroff, 2012, págs. 14–16)

Beethoven y Rembrandt.

Una de las mejores médiums que conozco es Anoeska Coopman, de Ámsterdam. Su don mediúmnico se ha visto potenciado por su viaje a la «sede central», como ella llama al lugar donde se encontraba durante su ECM. Actualmente escribe un libro sobre su «viaje» y el camino espiritual que recorre. En un extracto de su libro, habla de lo difícil que es expresar con palabras estas experiencias abrumadoras, pero también de la importancia de ver más allá de las diferencias entre las ECM y concentrarse en los mensajes comunes:

Cientos de miles de personas han tenido una Experiencia Cercana a la Muerte (o como yo la llamo, una Experiencia de Muerte), una experiencia físicay una experiencia emocionalmente profunda para quienes la han vivido. Estas experiencias suelen diferir en detalles, pero (con algunas excepciones) hablan esencialmente de lo mismo. Todos experimentamos libertad, sabiduría, amor y unidad. Mi explicación de las diferencias en las ECM es la siguiente: tras regresar al cuerpo, cada cerebro intenta dar cuerpo a la experiencia. Para ello, el cerebro encuentra las imágenes que mejor se ajustan a su memoria. Intenta comprender y traducir algo sobrenatural a la realidad. Cada persona, y por lo tanto cada recuerdo, tiene un "archivo" diferente de imágenes en su fantasía. Y cada intento de expresar esa experiencia con palabras (que implica el vocabulario individual de cada uno) genera diferencias. Toda experiencia sobrenatural es, por lo tanto, traducida por un cuerpo terrenal. Eso es imposible. Además, como no hay palabras terrenales ni imágenes comparables, es como tocar a Beethoven en un cubo, pintar un Rembrandt en un adoquín con tizas de dos colores... Por lo tanto, cada traducción será diferente. Si cinco intérpretes traducen un poema en una lengua extranjera, aparecerán cinco versiones diferentes. Las cinco son ligeramente diferentes, pero todas comparten los mismos elementos esenciales.

Centro de todos los lugares.

Después de sobrevivir a un asalto casi fatal, esta persona dijo que era casi imposible expresar la experiencia con palabras por la sencilla razón de que no hay suficientes palabras y conceptos adecuados en nuestro lenguaje humano para hacerlo:

Estaba en un lugar que no es ningún lugar. Era el centro de todos los lugares, fuera del universo conocido (o de nuestra comprensión del mismo) y abarcando todo el universo. (Anónimo, 25 de marzo de 2004, 21:14)

Otras personas que han tenido ECM han dicho algo similar:

Apenas había vislumbrado los reinos ilimitados que se extienden más allá de los límites finitos del mundo que habitamos. (Thornton, 2014, p. 98)

La experiencia fue más real, más vívida y más dimensional que vivirla. (Anónimo, 18 de abril de 2009)

La Tierra es una ilusión creada por la Luz. La realidad no existe en la Tierra. La realidad solo existe dentro de la Luz. (Petro, 2014, ubicaciones 574, 610)

Me sentí más libre y más vivo que nunca. (Moorjani, 2012, p. 66)

El cielo era tan hermoso. Era como si todos los colores de la tierra fueran blanco y negro, pero en el cielo vibran. (Dale, 2008, p. 33)

Quiero tener un CD de ello.

Un hombre que entrevisté, que quiso permanecer anónimo y usó el seudónimo Noël de Waele, describió su ECM de esta manera:

Estaba en un gran campo de luz blanca. Era indescriptible. Estaba allí solo con mi consciencia, pues no tenía cuerpo. Sin embargo, era muy real. La luz que vi allí es mi divinidad.

También había música maravillosa. El eco de la música resonó en mi corazón. Era una especie de música de arpa, muy delicada y frágil. Inmediatamente pensé: «Quiero tenerla en CD». (Coppes, 2021/2022, p. 24)

Superpuesto.

Sentado encima de mi guardián.

Una niña pequeña, de tan solo tres años, sufrió una convulsión febril. La experiencia la ha marcado para siempre, pues parecía estar en dos mundos a la vez.

Estaba consciente en todo momento tanto del mundo "real" como del plano que habitaban los seres de luz. De hecho, ambos mundos parecían superponerse. A veces veía a mis padres en la habitación con el sacerdote, y él se sentaba en la silla justo encima de uno de mis guardianes. (Anónimo, 19 de julio de 2013)

Flotando sobre el mundo real.

Cuando era joven, Jane Bannister abandonó su cuerpo a través de la cabeza y lo comparó con nacer en otro mundo.

Me di cuenta de otro mundo, superpuesto al mundo físico. Había un límite de parque flotando a pocos metros sobre el césped real.

Ella continuó explicando:Salí flotando de mi cuerpo anoréxico moribundo y pude ver el borde de césped frente a la residencia universitaria donde estaba mi cama. A pocos metros sobre el césped flotaba otra extensión, sobre la cual se encontraban varias figuras con capas y capuchas grises. Hablaban de mí y de si se me debía permitir vivir o no. Era como si ambas escenas [es decir, la otra extensión de césped y las figuras encapuchadas] fueran ligeramente translúcidas; podía verlas a la vez, casi en color, y sin embargo con la transparencia justa para ver la universidad.Terrenos a través del césped donde se encontraban las figuras. (Anónimo, 20 de diciembre de 2010, 16:40)

¿Tiempo?

Todo el tiempo existe a la vez. (Taylor, 2001, p. 140)

No se hizo a tiempo; fue entre tiempos. (Taylor, 2001, pág. 73)

Estaba viendo cómo se desarrollaba la eternidad. (Sharp, 2003, p. 25)

Me di cuenta de que el Tiempo ya no se me presentaba como en mi cuerpo. Era como si me hubieran proyectado a un instante, o como si me hubieran arrastrado a través del tiempo, primero hacia atrás y luego hacia adelante, para resentir. (Anónimo [Rachel Finch], 10 de junio de 2019)

A partir de ahora, cualquier concepto de tiempo ya no funciona como allí. El tiempo no existe. (Anónimo, 14 de mayo de 2018)

Muchas versiones de la Tierra.

...no existe el tiempo lineal en el Más Allá. Todo se experimenta siempre en el ahora, incluyendo el pasado y el futuro... Yo era parte del universo. Podía ver la Tierra a mi derecha, pero había muchas versiones de ella. Todas se sucedían, formando un círculo, y se encontraban en diversas etapas de evolución. No había principio ni fin del tiempo y ellas (las Tierras) parecían simplemente etapas separadas de un mismo proceso. Yo era parte de las estrellas y, aunque no tenía cuerpo físico, me sentía más real que nunca. (Anónimo [Juliet Nightingale], 5 de febrero de 2002, 13:18)

De repente.

Algo más que podría ser difícil de comprender es que ¡el tiempo no existe! Tu vida transcurre a la vez, lo que significa que tu pasado, presente y futuro son una sola burbuja. Es nuestro cerebro (filtro) el que hace que este supuesto tiempo sea lineal. ¿Eh? Ya sé... ¡qué extraño! Eso podría plantear preguntas sobre el "libre albedrío". ¿Lo tenemos? Sí y no. Solo porque tu vida está predeterminada, no sabes cuál será el resultado. Las cosas pueden cambiar en un instante. ¡Recuérdalo siempre! Lo sabía todo sobre el universo... ¿por qué, cómo y cuál es el sentido de todo esto? ¡Estuve allí tanto tiempo que era difícil no saberlo todo! Al regresar, no recordaba mucha de la información que había recibido. Supuse que era intencional. (Anónimo, 23 de septiembre de 2016)

Bloqueado de mí

No había tiempo en este lugar. Cada momento de la historia, del presente y del futuro, se desplegaba ante mí como un suceso monumental que comenzaba con la creación del universo y terminaba... bueno, eso desde entonces me ha sido tan negado que me duele intentar recordarlo. (Anónimo, 25 de marzo de 2004, 21:14)

Visión de su vida futura.

Tras un accidente automovilístico, Geertrui Lagae tuvo una ECM muy completa. En una entrevista con Ponto3.org , comentó que vio cosas que sucederían en su vida futura y que, efectivamente, sucedieron:

Era más real que la vida misma. Sí, y también las realidades que vi allí, que no pude ver aquí. Allí vi más realidades que habían sucedido aquí en la Tierra o...Aún no habían sucedido. Sucedieron más tarde en mi vida. Por lo tanto, es más real, más factual. (Lagae, sin fecha)

Coche o avión.

De niña, durante la Segunda Guerra Mundial, Tienke Klein estuvo prisionera en un campo de concentración japonés en la entonces colonia de las Indias Orientales Neerlandesas. Durante el régimen inhumanamente duro del campo de concentración, tuvo su primera ECM, y posteriormente una segunda. Ha escrito un conmovedor libro en holandés sobre sus experiencias, De Kiem , que puede traducirse como Esencia . En su libro, utilizó una hermosa analogía para describir su experiencia del tiempo. En mi traducción del siguiente pasaje, se refirió a dos ciudades de los Países Bajos ubicadas a unos 18 kilómetros de distancia:

La idea del tiempo lineal se ha roto definitivamente... Es un poco como la diferencia entre conducir un coche o estar sentado en un avión. Conduciendo un coche nunca puedo ver Haarlem y Ámsterdam al mismo tiempo, pero sí puedo al mirar por la ventanilla de un avión. (Klein, 2006, p. 246)

Puedo estar donde quiera estar.

Dividido en dos pedazos.

Mohammad fue llevado al hospital tras un grave accidente de coche, y allí "murió". Después de un buen rato, comprendió que debía estar muerto. En ese momento pensó en su madre y de inmediato se dio cuenta de que estaba con ella. Aunque el hospital estaba lejos de la ciudad donde vivía su madre, podía ver ambos lugares al mismo tiempo. Podía ver cómo los médicos lo atendían en el quirófano y a su madre preparando la cena. Dijo:

Fue como si me hubiera dividido en dos partes, ambas con la misma consciencia. (ECM de Mohammad Z, sin fecha)

También pensó en sus amigos y familiares, y ocurrió lo mismo. Pudo concentrar su atención en dónde estaban sin perder de vista el quirófano con los médicos ni la cocina con su madre. Finalmente, dejó la Tierra tal como la conocemos y llegó a un entorno maravilloso y luminoso donde todo era perfecto. Como muchas personas que han tenido una ECM, sintió que este era su hogar. Dijo:

Mi presencia en la Tierra parecía una deportación a una isla extraña y aislada, desagradable e incompatible [con el maravilloso y luminoso entorno]. Donde me encontraba ahora, no había pasado ni futuro, ni cerca ni lejos, ni arriba ni abajo, ni oscuridad ni luz, y todo lo relativo había perdido su significado. (Mohammad Z ECM , sin fecha)

Allí vio otras almas, algunas más avanzadas que él, y otras menos. Sin embargo, esta diferencia no le causó ansiedad.

Se comprendió claramente que cada uno de nosotros está donde debe estar según su capacidad y crecimiento. (Mohammad Z ECM , sin fecha)

En el avión junto con él.

Como describió Anita Moorjani (2012) en su impactante libro “Morir para ser yo” , tenía cáncer y se moría en el hospital. Su esposo y su madre estaban sentados junto a su cama, esperando su último momento en la Tierra. Solo faltaba una persona: su hermano. Estaba en un avión, camino a Anita, con una sola esperanza: llegar a tiempo para verla.Viva. Sin embargo, se encontraba en coma profundo, con sus órganos colapsando, al borde de la muerte; la condición en la que tuvo su ECM. Durante su ECM, Anita notó que podía estar donde quisiera, porque al darse cuenta de que su hermano no estaba en el hospital, estaba con él en el avión. Allí lo vio sentado con cara de preocupación y comprendió que iba camino a verla. (Moorjani, 2012, p. 64)

Madre en la estación de tren.

En 1969, un médico homeópata indio sufrió un ataque agudo de disentería y perdió una cantidad considerable de sangre. De repente, abandonó su cuerpo y pudo verlo debajo. En ese estado, era consciente al instante de todo lo que pensaba.

En ese estado extracorpóreo, podía cumplir todos mis deseos como si fuera omnipotente y omnisciente. Pensé en mi madre y la vi corriendo frenéticamente por el andén de una estación de tren a cientos de kilómetros de distancia. (ECM de un médico de la India , sin fecha)

La madre confirmó más tarde que después de enterarse de la terrible situación en la que se encontraba su hijo, había estado tratando desesperadamente de comprar un billete de tren a la ciudad donde estaba siendo tratado.

Fue a su lugar de trabajo.

Halil caminaba hacia la escuela para recoger a su hija cuando, de repente, sufrió un infarto. Se desplomó en el suelo. Alguien logró llamar rápidamente a una ambulancia, y desde apenas un poco más arriba pudo ver todo lo que sucedía. Vio cómo los paramédicos lo subían a la ambulancia y los escuchó hablar sobre sus posibilidades de supervivencia. Estaban bastante seguros de que estaba perdido. Sin embargo, él mismo se sentía perfectamente bien, sin dolor alguno.

De repente pensó en su esposa y su hija y en lo preocupadas que estarían cuando escucharan que había tenido un ataque cardíaco.

Sabía que el trabajo de mi esposa no estaba lejos, así que fui a su lugar de trabajo. Fui a su oficina, pero no estaba. Vi que la pantalla de su computadora estaba encendida y que había estado mirando una página de bienes raíces en Estambul con apartamentos y casas en venta. (Halil T NDE , sin fecha)

Entonces, su atención cambió. Se dio cuenta de que había podido ir a la oficina de su esposa y sintió curiosidad por saber si podría ir a otros lugares. Decidió volar hacia arriba. Funcionó. Después de un rato, vio todo el pueblo donde vivía, y luego la costa y toda Turquía. No se detuvo allí. Pudo ver los países vecinos, ¡y finalmente el mundo entero!

Entonces todo se volvió negro y empezó a tener miedo.

Yo... grité: "¡Hola!". No obtuve respuesta. Entonces, invoqué a un poder superior y, de repente, vi una luz inmensa. Pude flotar hacia esa luz... que creo que pudo haber sido Mahoma... Al entrar, me di cuenta de que me estaba absorbiendo un vórtice. Entonces, me encontré en una cueva o un túnel. (ECM de Halil T , sin fecha)

Al final del túnel o cueva, vio una puerta con "ornamentación islámica típica". Antes de ser arrastrado de vuelta a la Tierra, tuvo una ECM completa. Hizo una revisión de su vida, vio a familiares fallecidos y habló sobre la importancia de que su hija mantuviera su fe. En un momento sintió que las cosas estaban cambiando. No podía moverse con la misma facilidad que antes. Parecía haber aumentado de peso, y finalmente comprendió que no era así.Se le permitió entrar a una mezquita, a la que sus familiares fallecidos sí podían acceder. De repente, volvió a su cuerpo.

Le llevó un tiempo asimilar su experiencia y contárselo a su esposa. Cuando le contó que había visitado su oficina y había visto la página de bienes raíces de Estambul en la pantalla de su computadora, ella confirmó que acababan de ofrecerle un trabajo en Estambul.

Está convencido de que la experiencia fue real. Dijo:

La experiencia fue inolvidable y vívida... La experiencia fue definitivamente real. Fue 100 % real, y nada puede hacerme cambiar de opinión. (ECM de Halil T , sin fecha)

Familiares fallecidos.

Tras ver una luz tenue, este sujeto se acercó. Cuanto más se acercaba, más brillante se volvía la luz y más fuerte la atracción. Como tantos otros sujetos, comentó que sintió una gran alegría y paz. Entonces vio a otros seres de luz, iguales a él. Y finalmente:

Estaba rodeado de mis familiares fallecidos. Sentí una gran alegría y alivio al verlos. (ECM de Arshan , 1996)

Comunicación fácil y completa.

Telepatía..

Muchas personas que han tenido una ECM conversan durante su experiencia. Esta conversación puede ser con familiares fallecidos, con seres de luz o con la Luz. En todos los casos, la comunicación se describe como particularmente fácil, a diferencia de lo que ocurre en la Tierra, donde las palabras pueden ser un obstáculo. Allí, en el otro lado de la vida, el significado de un mensaje siempre es perfectamente claro. Esto se debe a que no hay palabras.Se utiliza. Es un intercambio directo de pensamientos. Quienes experimentan una ECM suelen usar el término «telepatía» para describir la comunicación.

Hablamos telepáticamente; no hacía falta decir palabras. Escuché las palabras en mi mente. (Anónimo, 17 de abril de 2013)

. . . Y superposición.

Tras asistir al funeral de un buen amigo, un hombre con una depresión severa causada por una aparente deriva perpetua "de un trabajo y una situación de vida a otra, sin dinero (ni vida)", tomó una sobredosis de pastillas y alcohol. La combinación le provocó un desmayo, tras lo cual comenzó su ECM. Mientras se dirigía hacia la Luz, sintió de repente la presencia de su amigo recién fallecido. Entonces comprendió que él mismo debía estar muerto. Sobre la conversación con este amigo, dijo:

Nuestra comunicación era telepática y se solapaba, así que las respuestas ya existían antes de que se formulara la pregunta. Era como si nuestros espíritus estuvieran tan entrelazados que fuéramos uno solo... Parecía capaz de abordar un número ilimitado de pensamientos y sentimientos simultáneamente. (Dale, 2008, p. 99)

El mismo amigo también le aconsejó a quien experimenta una ECM que siempre esté atento y abierto a todos los mensajes que le llegan. La razón es que, incluso cuando nuestro espíritu está "atrapado" en nuestro cuerpo terrenal, es capaz de captar este tipo de comunicación.

De alguna manera, sabía que esto implicaba que debía fomentar y valorar el tiempo que pasaba a solas para ser más sensible y receptivo a la información que me llegaba. Esta información, en última instancia, enriquecería y mejoraría mi vida en todos los sentidos. (Dale, 2008, p. 102)

El amigo fallecido también discutió el concepto junguiano de “coincidencia significativa” —sincronicidad— con la persona que tuvo la ECM y que este no es un concepto vacío.

No lo suficientemente rico.

La cirujana ortopédica Mary Neal (2012) escribió un libro asombroso, " To Heaven and Back" , con su conmovedora historia sobre sus vacaciones en kayak en Chile, donde sufrió un accidente y se ahogó. Luego tuvo su ECM. En su libro, dejó muy claro que el mundo al otro lado es completamente diferente al nuestro.

Según quienes han tenido ECM, el otro lado es tan extenso, tan completo y abarcador que resulta muy difícil expresarlo con palabras. Neal lo explicó así:

Nuestro vocabulario simplemente no es lo suficientemente rico como para describir la experiencia de una manera comprensible. (p. 73)

Ella se encontró con seres espirituales que conocía y lo describió de esta manera:

Su presencia absorbió todos mis sentidos, como si pudiera verlos, oírlos, sentirlos, olerlos y saborearlos todos a la vez. (p. 69)

La comunicación es siempre muy eficiente:

No hablábamos... pero nos comunicábamos con facilidad y de forma muy pura. Comunicábamos simultáneamente nuestros pensamientos y emociones, y nos entendíamos perfectamente aunque no usáramos el lenguaje. (págs. 69–70)

Ella dijo que lo que experimentó en su ECM fue mucho más completo que lo que experimentamos todos los días aquí en la Tierra:

Me siento como si estuviera tratando de describir una experiencia tridimensional mientras vivo en un mundo bidimensional. (p. 71)

Curiosamente, en ese otro mundo estuvo acompañada de compañeros espirituales y vio hermosos edificios y grandes salones luminosos mientras que, al mismo tiempo, también vio su cuerpo físico tendido en la orilla del río después de haber sido rescatada por sus compañeros kayakistas:

Mientras disfrutaba de la belleza y me regocijaba con mis compañeros, vislumbré la escena en la orilla del río. (p. 72)

Tras su rescate, ocurrieron muchos sucesos extraordinarios y misteriosos antes de que finalmente regresara a Estados Unidos. Aunque estos sucesos no formaron parte de su ECM, aun así constituyen una lectura interesante.

Todo el conocimiento está fácilmente disponible

Entérate de todo.

Siento que aquí estamos limitados, y allá, todo era mucho más claro; había un conocimiento instantáneo de todo. Las sensaciones eran mucho más intensas, y mi consciencia podía ir a cualquier parte en un instante. (Anónimo, 14 de mayo de 2018)

Todas las preguntas respondidas.

Sentí como si todas las preguntas que siempre quise hacer recibieran respuesta simultáneamente. No era como si supiera una respuesta específica, sino como si simplemente supiera todo lo que había que saber. También tuve la sensación de que, al recibir este conocimiento de los seres de luz,A su vez, les compartí todas las experiencias únicas que había acumulado durante mi vida en la Tierra. Ellos me dieron lo que tenían, y yo les di lo que yo podía aportar. Fue muy grato realizar este intercambio. Me sentí completamente libre y contento. (Anónimo, 11 de noviembre de 2003, 16:39)

Todo el conocimiento estaba allí.

A René Jorgensen lo habían sacado de su cuerpo y en su libro describió su verdadera naturaleza:

Lo que experimenté fue mi verdadera naturaleza como consciencia absoluta e ilimitada. En este estado no había nada que no supiera: todo el conocimiento estaba ahí. (Jorgensen, 2007, p. 6)

Lo entendí todo.

En su libro sobre su ECM, Deirdre DeWitt Maltby escribió cómo de repente comprendió

La complejidad de la vida, de la Fuente, de Dios. Mi alma sentía que ahora me fundía al unísono con el universo. Estaba en la palma de la fuerza que me creó, ¡estaba experimentando la Fuente!...

Entonces pude ver la eternidad, ver el universo entero. El pasado, el presente y el futuro eran uno solo. Podía sentir la esencia de cada alma que había existido o existiría. Estaba a un millón de kilómetros de cualquier hogar terrenal que hubiera conocido. ¡ Y sin embargo, este era mi hogar !

Ella entendió que todo el conocimiento está ahí para que cada uno de nosotros lo comprenda en el mismo grado.

Lo entendí todo . Estaba conectado con todo , mientras mi yo permanecía completamente intacto. (Maltby, 2012, págs. 48–49)

Se respondió al instante.

Tras darse cuenta de que un rayo la había alcanzado mortalmente, Elizabeth Krohn (Krohn & Kripal, 2018) vio una hermosa luz que debía seguir. Inexplicablemente, llegó a un hermoso jardín en un entorno celestial. Comprendió de inmediato que el tiempo seguía un patrón diferente. No era lineal, como siempre le había parecido. Dijo:

Estaban sucediendo cosas en mi campo de visión y nuevas capacidades estaban despertando dentro de mí, pero todo estaba ocurriendo al mismo tiempo, todo a la vez. (p. 23)

Allí mantuvo largas conversaciones con alguien que le hablaba con la voz de su querido abuelo, incluso con acento francés. Sin embargo, afirma que no cree que fuera su abuelo, sino que fue Dios quien usó la voz de su abuelo para tranquilizarla. No quería mirar a la persona sentada a su lado en ese hermoso jardín celestial, porque sabía que sería demasiado abrumador. Pensó que bastaba con sentir la presencia del amor incondicional que emanaba de esa persona.

Las conversaciones con esa persona le brindaron una visión amplia, por ejemplo, de su vida privada y del funcionamiento del tiempo. Su descripción de cómo recibió esas respuestas recuerda a las de otras personas que han tenido ECM:

Mis preguntas fueron respondidas al instante. Tan pronto como pude formularlas, recibí las respuestas. (p. 28)

Tenía la sensación de que su estancia en ese hermoso jardín había durado dos semanas, mientras que en la Tierra había estado inconsciente.Solo por unos minutos. Lo especial de la conversación de dos semanas en ese jardín fue que, en cuanto llegaban las respuestas, el tiempo parecía volver a ser lineal. Ella comentó sobre este fenómeno:

He llegado a comprender que esto ocurrió no porque el tiempo se volviera lineal durante dos semanas, sino porque no tenía otra forma de “decodificar” la información que recibía en el Jardín aquí en este mundo. (p. 29)

Química y física.

En plena noche, Mohammad conducía hacia su ciudad natal, Isfahán, Irán, cuando chocó frontalmente con otro coche. Resultó gravemente herido. Afortunadamente, minutos después, un autobús de pasajeros pasó por allí y lo trasladó a un hospital cercano. Allí, médicos y enfermeras comenzaron a atenderlo de inmediato. Al principio, permaneció consciente. Su mente pasaba constantemente del dolor y la ira por su situación a la joven que había entrado previamente en la habitación.

En un momento dado, detectó un cambio. Su ira y su dolor desaparecieron. En cambio, experimentó una profunda sensación de tranquilidad. También notó que todo cambió. Su percepción de las cosas cambió. Cuando miraba un objeto, podía comprenderlo todo:

Incluso pude comprender la composición química de los objetos que observaba y todas sus propiedades físicas y matemáticas. (Mohammad Z ECM , sin fecha)

Su percepción de la joven enfermera también era diferente. Podía verla en 360 grados, como si la hubiera absorbido por completo. También podía sumergirse en sus pensamientos. Ella se sentía triste por sus graves heridas. Quería consolarla:

Intenté tocar el hombro de la joven para llamar su atención, pero mi mano simplemente atravesó su cuerpo sin ninguna resistencia. (Mohammad Z ECM , sin fecha)

Similar al informe de Mohammad, otra persona que tuvo una ECM informó:

Lo entendí todo. La creación, el propósito, el amor. La física, los números, la existencia. (Anónimo [Rachel Finch], 10 de junio de 2019)

Está justo en nuestra cara.

Como resultado de la ruptura de un embarazo ectópico, una joven tuvo una ECM completa en la que lo comprendió todo. Comprendió que todo era, en realidad, muy simple. Tan simple que le impactó no haberlo comprendido mientras estuvo en la Tierra. Se dio cuenta de que, mientras estuvo en la Tierra, lo había olvidado todo.

Mientras esperaba, recordé lo que había olvidado, que era todo. Me asombró la simplicidad del porqué, qué, quién, dónde… todo. Lo sabía todo. Recuerdo haber pensado que es tan extraño que no recordemos nada de eso en el otro lado. Es tan evidente, pero no podemos verlo mientras vivimos en forma humana. En ese preciso instante lo comparé con una hormiga que jamás podría percibir a un humano en su totalidad, su complejidad o su integridad, pero estamos ahí para ser vistos si tan solo la hormiga tuviera la capacidad. (Anónimo, 18 de abril de 2009)

Cuando le dijeron que tenía que regresar a la Tierra, supo que no podría llevarse consigo nada de ese conocimiento. Por lo tanto, cómo es realmente y cuán simple es, sigue siendo un misterio para...Ella. De nuevo es como una pequeña hormiga que no puede ver la realidad que es tan evidente.

Nuestra carne es como un televisor.

Esta ECM proviene de una mujer china (ECM de Chen M , sin fecha; ECM de Xue–Mei C , sin fecha) que fue miembro activo del partido comunista. Su ECM ocurrió en un hospital debido a su alergia a la penicilina que recibía por vía intravenosa. Su ECM comenzó de la forma habitual, viajando a una velocidad descontrolada a través de un túnel. Estaba asustada y gritaba frenéticamente. Finalmente, salió del túnel y llegó a un mundo luminoso, cálido y puro.

Comprendió que su cuerpo estaba separado de su consciencia. También supo que no era un sueño. Lo que dijo sobre ese otro mundo es:

Tu mente (alma) existe y piensa de forma evidente, pero estás separado del mundo físico sin posibilidad de comunicación con él. Es como una puerta de cristal que te separa del mundo; puedes ver todo lo del mundo físico, pero quienes están al otro lado no pueden percibir tu existencia. (ECM de Xue–Mei C , sin fecha)

También dijo: «Sentí que coexistían varias dimensiones diferentes» y «Existía en varias dimensiones». Sobre la consciencia, afirmó que sigue existiendo incluso cuando nuestro cuerpo muere. Comparó nuestro cuerpo físico con un televisor:

Nuestra carne es como un televisor, y nuestra consciencia es la señal. La señal sigue existiendo incluso cuando el televisor se estropea. La consciencia de los seres humanos es una especie de energía y nunca disminuirá. (ECM de Chen M , sin fecha)

Esta última afirmación es comparable a una teoría que el reconocido investigador holandés de ECM, Pim van Lommel (2011), propuso en su libro " Conciencia más allá de la vida" : El cuerpo y el cerebro pueden compararse con un receptor de radio o televisión que recibe señales del programa real que se emite en un estudio. La orquesta o la banda no está en la radio ni en la televisión; está en el estudio. La orquesta o la banda seguirá existiendo incluso si la radio o la televisión fallan.

Damos forma a nuestra experiencia.

Paisaje sobrenatural.

En su impresionante libro sobre su ECM, Despertares de la Luz , Nancy Rynes (2015) describió ambas ECM. La primera ocurrió cuando fue atropellada por una camioneta; la segunda, tres días después, durante la operación de reconstrucción de su columna vertebral. Escribió:

La belleza y la paz absoluta del lugar desafían las palabras. Me sentí completamente tranquila, amada y plena. También sentí una profunda sensación de amor que lo impregnaba todo. Era un amor inmenso, como si la estructura de este lugar estuviera hecha de amor. El amor estaba en todas partes porque no había ningún lugar donde no hubiera amor. No puedo explicarlo mejor. (Nancy R. ECM , sin fecha)

Ella continuó diciendo: El paisaje seguía asombrándome. Los colores vibraban en armonía con diferentes emociones. Los árboles no eran necesariamente verdes ni el cielo siempre azul. Rebosaban de energía interior y colores que irradiaban amor, gratitud y alegría. A veces, los árboles se abrían y veía montañas bajas y distantes brillando en el horizonte.La niebla cubría sus flancos, y como todo lo demás, también parecían irradiar una profunda energía interna... El Espíritu quería que me sintiera seguro y cómodo allí, así que estaba rodeado de un paisaje que me resultaría familiar. De alguna manera, mis pensamientos y sentimientos individuales ayudaron a moldear lo que veía y cómo lo experimentaba... Parecía como si este lugar fuera, en parte, una experiencia participativa. (Rynes, 2015, p. 31)

Entorno tipo parque.

Ellyn Dye describió cómo pudo cambiar el entorno en el que se encontraba:

Me di cuenta de que buscaba una sensación de "lugar", porque empezaba a resultar desconcertante simplemente seguir flotando en la nada, ¡aunque esa nada se sentía como un abrazo gigante de amor y alegría incondicionales! En cuanto tuve ese pensamiento, todo brilló y cambió, y me encontré contemplando un paisaje parecido a un parque. Era como si una mano gigante con muchos pinceles se moviera por el lienzo, pintando la escena con la hierba más verde que jamás haya visto, las flores y árboles más grandes, hermosos y vibrantes, colinas ondulantes con senderos y cielos azules con pájaros en lo alto. Los colores eran más brillantes, profundos y vibrantes que cualquier otro que hubiera visto. Olía a rosas, a sol y a frescura. Los árboles, los pájaros, las flores y la hierba también estaban vivos y conscientes. (Dye, 2023)

Muchas figuras religiosas.

En su libro "Un Pasaje a la Eternidad", Azmina Suleman (2004) describió con detalle su asombrosa ECM. En cierto momento, describió haber conocido a muchas figuras religiosas importantes:

Entonces, desde ese solitario rayo de luz, vi a varios Mensajeros de Dios manifestarse y presentarse ante mí en toda su brillante gloria... Los individuos de este grupo parecían totalmente inmersos y envueltos en luz. Parecían proyectarse desde un único rayo de luz, en lugar de una serie de luces separadas y distintas, lo que sugiere un menor grado de separación de esa única Fuente de luz, Dios. (pág. 60)

Aunque Azmina es musulmana, las figuras religiosas que vio no solo pertenecían a su religión, el islam, sino también a otras cuatro religiones importantes. A algunas no las conocía, y solo después de su experiencia descubrió quiénes eran. Vio al profeta Noé, a Moisés, a Jesucristo, a Buda, al dios Vishnu y a su avatar Krishna, al profeta Mahoma y al dios Alí, y a la Virgen María, o Bibi Miriam, como se la conoce en el islam.

Reconocí que, en efecto, me encontraba ante la verdadera grandeza. Sentí cómo todos los Mensajeros iluminados de Dios que me habían precedido eran, en realidad, diferentes manifestaciones de la misma Luz... Comprendí que eran, de hecho, algunos de los maestros más venerados de nuestra época. Habían aportado a la gente una comprensión básica del bien y del mal, junto con una comprensión de la ética y la moral, según la comprensión de su época. También habían ayudado a elevar la conciencia del Dios único entre todos los pueblos de la tierra, y a través de diferentes dialectos habían traído una clara comprensión del reino eterno de Dios. (págs. 62–63)

Es común que en las ECM se vean personalidades religiosas importantes, pero por lo general quienes las experimentan solo ven a las personalidades religiosas.de su religión. Esta ECM es única en el sentido de que quien la experimentó pudo ver figuras religiosas de no menos de cinco religiones principales.

Yo soy el original.

El suicidio inesperado y repentino del esposo de Rosemary Thornton le había dado un vuelco a su vida. Afectó gravemente su salud y, en dos años, le diagnosticaron cáncer. En una ocasión, mientras estaba hospitalizada, un procedimiento médico menor salió mal y se desangró, dejando su cuerpo sin latidos durante más de 10 minutos. En su libro de 2022, Rosemary relató lo que experimentó durante su ECM.

Se encontró en una oscuridad reconfortante y perfecta. Era lo que ella describió como una oscuridad reconfortante y aterciopelada, con una "paz perfecta multiplicada por un millón", como dijo en una de sus entrevistas, y se sintió de maravilla. Se dio cuenta de que no tenía latidos y, por lo tanto, debía estar muerta. La situación la intrigó. Incluso tuvo que reírse. Entonces sintió un ser espiritual inmenso junto a ella o un poco detrás. Era "inmenso, poderoso, gentil y tierno". Giró la cabeza hacia la izquierda y miró hacia arriba, lo cual le pareció gracioso porque se dio cuenta de que, al estar muerta, no tenía cabeza.

Ella preguntó: "¿Y tú quién eres?". La respuesta fue inmediata: "Tú eres la imagen y semejanza, yo soy el Original" (p. 16). Esta respuesta la asombró, pues había estudiado la Biblia toda su vida, y en particular el texto de Génesis 1:26, que era uno de sus versículos favoritos. Y aquí estaba esta presencia que usaba ese mismo texto: que Dios creó al ser humano a su imagen.

Capítulo 4. Amor, amor incondicional.

Sin duda, el aspecto más importante de las ECM es el amor. Pero permítanme decirles que la interconexión más profunda con todo y con todos reside en el otro aspecto principal; hablaremos más sobre ello en el capítulo 9.

El amor experimentado en la mayoría de las ECM es absolutamente abrumador y transforma profundamente a la persona que lo experimenta. Un aspecto fundamental de ese amor es su incondicionalidad. Esta cualidad se afirma una y otra vez en casi todas las ECM, por lo que debe ser esencial.

Intenta comprender lo que significa el amor incondicional. Es un amor que existe sin condiciones previas. Está disponible libremente y no necesitas hacer nada en particular para recibirlo. No hay código de vestimenta: no tienes que vestir de negro, naranja ni de ningún otro color; no hay necesidad de pañuelos, turbantes ni otros adornos. No necesitas llevar el pelo con un estilo particular. Puedes ser calvo o llevar mechones laterales. Puedes tener barba. No tienes que abstenerte de comer ciertos alimentos; no hay restricciones dietéticas. Se aceptan camarones, al igual que la carne de cerdo o res, y si eliges limitarte a comer solo vegetariano o vegano, también está bien. No hay obligación de rezar cinco veces en una dirección específica, ni de ir a la iglesia, la mezquita o el templo. Incluso está bien si no rezas en absoluto.

Este amor incondicional no se niega, incluso si admites haber causado daño a otros o haber cometido actos terribles. Simplemente no hay condiciones para recibir este amor.Puedes ser quien eres; ser quien eres basta. Este amor es verdaderamente incondicional.

Tenga en cuenta que no solo el amor en el otro lado de la vida es primordial, sino también el amor en nuestro lado de la vida. La importancia de dar amor en este mundo se puede comprender a partir de análisis de vida (Capítulo 6) y de nuestro propósito en la Tierra (Capítulo 10).

1%, mil veces, exponencialmente.

Si sumara todo el amor que recibí a lo largo de mi vida juntos, aún sería menos del 1 % de lo que sentí allí. (Coppes, 2011, p. 36)

Más fuerte que cualquier cosa

A René Jorgensen lo sacaron de su cuerpo. En su libro, describe esta sensación como "abrumadoramente poderosa". Se bañó en "la luz transparente de algo tan poderoso, tan indescriptible, que todas las palabras se desvanecen y desaparecen". Luego dio la siguiente descripción:

Era amor. Me fundí con un sentimiento de amor cien o mil veces más fuerte que cualquier cosa que haya sentido en esta dimensión: "¡Esto es la verdad, esto es lo que es!". En ese instante conocí el universo: "¡Esto es quien soy, esto es todo lo que hay!". Fue como si hubiera regresado a casa, a mi ser, a la naturaleza última de la realidad, al amor. Todo era amor. Al consumir todo el amor acumulado de todas las estrellas del universo, estallé en asombro: "¡Guau! ¡No lo sabía!" (Jorgensen, 2007, p. 6).

No hay mejor amor.

Tras abandonar su cuerpo, Dannion Brinkley corrió por el túnel hacia una Luz. Cuanto más se acercaba, más amor sentía.Describió este amor como algo que abarcaba «todos los significados del mundo. Era como ver a una amante, una madre y una mejor amiga, multiplicadas por mil» (Brinkley, 1994, p. 8).

Luego conoció a un Ser de Luz y dijo sobre el encuentro que “nadie podría amarme mejor, nadie podría tener más empatía, simpatía, estímulo y compasión sin prejuicios por mí que este Ser” (Brinkley, 1994, p. 8).

Indescriptible.

La única emoción humana que pude sentir fue amor puro, implacable e incondicional. Toma el amor incondicional de una madre por su hijo y multiplícalo mil veces, luego multiplícalo exponencialmente. El resultado de tu ecuación sería como un grano de arena a todas las playas del mundo. Así también es la comparación entre el amor que experimentamos en la tierra y lo que sentí durante mi experiencia. Este amor es tan fuerte que palabras como "amor" hacen que la descripción parezca obscena. Fue el sentimiento más poderoso y cautivador. Pero era mucho más. (Anónimo, 11 de mayo de 2011)

Las palabras no son suficientes.

El amor más puro que existe.

Rachel Finch (Anónima, 10 de junio de 2019) vio un puntito de luz a lo lejos y sintió la necesidad de ir hacia él. Dijo que el deseo de ir era como "recordar". Una vez que lo alcanzó y se adentró en él, tuvo una sensación maravillosa que describió así:

Fue una sensación increíble que jamás podré describir. Fue una paz inmediata. Una paz absoluta, plena, que me invadió por completo. No había dolor, ni miedo, ni vergüenza. Me sentí completamente aceptado. Totalmente completo y amado. Un amor incomprensible.Amado en mi totalidad. Amado con un amor que no he sentido aquí. Amado con el amor más puro que puede existir.

Más tarde, cuando llegó el momento de regresar a la Tierra, pidió un momento más para experimentar esa maravillosa sensación.

... Me fue concedido. Absorbí todo el amor que pude en mi ser. Fue glorioso. Me sentí puro, ligero, completo, amado, amado y amado. En ese momento, lo comprendí todo: la creación, el propósito, el amor. La física, los números, la existencia. Estaba completamente en armonía con toda la existencia.

Un susurro.

Deirdre DeWitt Maltby (2012) escribió lo sorprendida que estaba por la grandeza y perfección de lo que describió como amor incondicional:

El hecho más asombroso fue que en el centro de este sentimiento, conocimiento y comprensión había un gran Amor . Mayor, más brillante que el calor de un millón de soles era la magnitud de su ser: ¡asombroso!...

Veía la belleza de mi alma; veía la belleza de todas las almas humanas. Perdí la noción de mí mismo como alguien sin amor o menos que perfecto...

También comprendí que este amor supremo que se me otorgaba venía sin juicios de ningún tipo. No importaba lo que hubiera hecho, dicho o vivido en este mundo. Seguía siendo digno de este amor indescriptible. El amor es el regalo del Creador para mí. Me di cuenta de que nosotros, como seres humanos que estamos tan lejos de la luz de la perfección, aún somos amados... (p. 51)

Este reino más allá no es más que... AMOR. Incluso la palabra amor es apenas un susurro de lo que sea que describa lo que realmente existe. No había ira, ni odio, ni críticas. No había ninguna de esas otras emociones que usamos en conflicto en esta tierra. No existen en el amor . (p. 60)

Una astilla.

La sensación de amor era indescriptible. Me consumía. Es como si la cantidad de amor que podemos experimentar en estos cuerpos mortales solo pudiera contener una pequeña parte de lo que sentimos allí. (Anónimo, 28 de enero de 2021)

A diferencia de cualquier otra cosa.

En mi entrevista inédita con Bill Gladstone sobre su ECM, él me dijo:

Sentí una dicha única. Me sentí bañada por la luz y rodeada de un profundo amor incondicional.

El nivel de amor incondicional era indescriptible. Era una experiencia de amor incomparable, incluso más profunda que el amor que recuerdo de mi madre, quien me cuidó de bebé.

La mejor langosta.

Un estudiante de posgrado que tuvo una ECM debido a un trastorno del ritmo cardíaco trató de explicar en términos muy animados cuán increíblemente grande era el amor que sentía en el otro lado.

La mejor manera de describirlo es tomar el mejor filete, la mejor langosta, la vista más espectacular, la mejor bebida y el sexo más exquisito con la pareja más exquisita. En otras palabras, tomar lo mejor que hayas sentido, hecho, estado, como sea, de cualquier manera, y...Tómalos todos y tíralos a la vez, y es solo una pequeña fracción de lo deliciosa que es la sensación. (Anónimo, 30 de enero de 2006)

Sin prejuicios.

Sin discriminación.

Durante su ECM, cuando Anita Moorjani (2012) se separó de su entorno y de las personas que amaba, se sintió rodeada de un amor incondicional. Este la envolvió con fuerza. Ella afirma que el término «amor incondicional» es insuficiente para transmitir el verdadero sentimiento, en parte porque se ha usado en exceso, perdiendo así su significado. Dijo que nunca antes había conocido un amor incondicional tan puro:

Sin reservas ni prejuicios… era totalmente indiscriminado, como si no tuviera que hacer nada para merecerlo ni necesitara demostrar mi valía para ganarlo (p. 66).

Más tarde, afirmó que ese mismo amor incondicional no solo está fuera de nosotros, sino también dentro de nosotros. Esto se debe a que somos parte del Todo, de la unidad que lo es todo y a la que todos pertenecemos (véase el capítulo 9). Lo llamó su mayor revelación:

Somos puro amor, cada uno de nosotros. ¿Cómo no serlo si provenimos del Todo y regresamos a él? Sabía que comprender esto significaba no temer nunca quiénes somos. Por lo tanto, ser amor y ser nuestro verdadero ser es una misma cosa. Si todos somos Uno, todas las facetas del mismo Todo, que es amor incondicional, entonces, por supuesto, ¡quiénes somos es amor! (p. 76)

Por eso está convencida de que sabe cuál es nuestro propósito en la Tierra: “ser nosotros mismos, vivir nuestra verdad y ser el amor que somos”.

Lo que ella quiere decir con "ser nosotros mismos" es que debemos ser nuestra verdadera naturaleza. Nuestra verdadera naturaleza es nuestra esencia, el Amor, el Amor Incondicional que reside en cada uno de nosotros, sin excepción. Cuando comprendió esto, le dijeron:

¡Ahora que conoces la verdad de quién eres realmente, regresa y vive tu vida sin miedo! (p. 76)

Abrumador.

Sandra Rogers (1995) intentó quitarse la vida con una pistola, disparándose en el corazón. Lo hizo porque ya no soportaba la vida. La odiaba. En la revisión de su vida durante su ECM, revivió todo el dolor una vez más. Fue una larga y triste lista de sucesos, y solo puedo asombrarme y asombrarme de lo que una persona puede soportar. Tuvo una infancia difícil con padres que discutían constantemente. Tras el divorcio de sus padres, ella y su madre vivieron en la pobreza, con un período que incluyó la amenaza constante de reubicación. Tuvo relaciones problemáticas con hombres, y a los 25 años ya se había casado y divorciado tres veces. Ser violada era un tema recurrente en su vida. Había sido hospitalizada muchas veces por sobredosis de drogas. Y, por favor, tengan en cuenta que no he mencionado la mitad de los traumas que sufrió.

La bala no le alcanzó el corazón, y entonces tuvo su ECM. En ella, conoció una «Luz brillante, maravillosamente cálida y amorosa». Ella y la Luz analizaron su vida juntos. Dijo:

Me di cuenta, mientras revivía cada uno de estos sucesos terriblemente dolorosos en mi vida, que la Luz, que estaba conmigo mientras observaba, sintió todo mi dolor y tristeza y nunca me juzgó.No me comprendió, sino que me amó. El amor que sentí de la Luz fue abrumador, y nunca quise abandonarla. (p. 70)

Se le dio la opción de quedarse con la Luz o regresar a la Tierra. Si decidía quedarse, tendría que regresar más tarde, al mundo físico, y experimentar de nuevo todo lo que la llevó al punto de suicidarse (p. 11). Sin embargo, si decidía regresar, podría seguir aprendiendo las lecciones de su vida actual. Se le permitiría llevarse parte del conocimiento adquirido durante su ECM, pero no todo. Eligió esta última opción, y gracias a ella sobrevivió milagrosamente a su intento de suicidio.

Escribió un hermoso libro sobre su experiencia, "Lecciones de la Luz" (1995). En él, la describe brevemente. La parte más importante del libro trata sobre las interesantes perspectivas que recibió durante su ECM, por ejemplo, sobre la ira, el odio, el amor, el libre albedrío, Dios, la religión y el pecado.

Sólo amor.

Todo consiste en amor.

Un niño de 14 años había sufrido acoso escolar durante siete años. Esta fue también la circunstancia de su ECM. Mientras asistía a un campamento organizado por su iglesia, volvió a sufrir acoso y sufrió graves lesiones en la cabeza. Al perder el conocimiento, comenzó su ECM. Fue una ECM profunda con una revisión interactiva de su vida, en la que pudo sentir todo desde la perspectiva de quienes lo habían rodeado (véase el capítulo 6 sobre revisiones de vida).

Durante su experiencia sintió la presencia de otras almas, tuvo conversaciones no verbales con ellas, hizo un recorridoA través del universo, vio los colores más vívidos y escuchó la música más maravillosa. Dijo:

Sentí una conexión con todo, con todo a la vez. No había sensación de separación, ninguna división entre aquí y allá, entre mí y los demás seres... Sentí el consuelo y el amor abrumador de quienes me rodeaban. El amor era de lo que estaba hecho todo, de lo que provenía y a lo que regresaba. Un amor incondicional, que lo abarcaba todo. Me envolvía como una manta cálida en un día frío, y solo quería permanecer dentro de ese amor por el resto de la eternidad. (Anónimo, 14 de julio de 2018)

La esencia.

Otra persona que tuvo una ECM declaró: Aprendí que lo que la gente considera Dios es la energía del amor, que une al universo, a toda la vida, a toda la física. La energía del amor es la esencia de la vida. (Anónimo, 20 de diciembre de 2010, 16:33)

Sólo hay amor.

En su libro, Carol Lynn Vengroff (2012) escribió lo que había entendido en su ECM sobre el amor:

La fuerza más poderosa del universo es el amor. Como emoción sagrada de Dios, el amor lo trasciende todo. Es nuestro verdadero estado de ser. Solo existe el amor. (p. 37)

El amor que dimos.

Lo más importante es siempre buscar el conocimiento y amarnos los unos a los otros. Eso es lo más grande de todo. Lo único que podemos llevarnos es el amor que hemos dado. (Cox–Chapman, 1995, p. 58)

Lema fuerte.

Juliet Nightingale (2006–2009), mencionada en el capítulo 1, tuvo dos ECM y varias otras experiencias espiritualmente transformadoras. Tras sus ECM, tenía un lema firme en el que creía sólidamente:

“Sólo el amor prevalece”.

Capítulo 5. La luz.

La Luz: Quienes han tenido experiencias cercanas a la muerte dicen que es abrumadora. Impresionante. Confortante. Es puro amor, pura paz, pura perfección. Es brillante. Es como el sol, pero mucho más brillante, y no daña la vista. Es indulgente. Es irresistible. Te atrae como un imán. Entrar en esa Luz es como volver a casa. Te ama incondicionalmente. Te acepta por completo.

Esto es un mero resumen de algo inefable e indescriptible.

Gigantesco.

Esta luz estaba viva.

Tres niños de 8, 9 y 10 años salieron a caminar por un río en Brasil. Su padre les había dicho que no se metieran en el agua, pero en un momento dado intentaron cruzarlo. Los tres fueron arrastrados por la rápida corriente y se ahogaron. Uno de los niños contó su historia: un hermoso ángel lo llevó a una luz brillante. Lo describió así:

Era miles de veces más brillante que el sol, y aun así no me dolían los ojos. De alguna manera, sabía que estaba en casa. Esta luz en sí misma transmitía una auténtica sensación de amor, como si estuviera viva. Sentí este amor en mi ser (es muy difícil de explicar). (Anónimo, 29 de agosto de 2008)

No sabe cómo los tres regresaron a tierra, pero recuerda a un hermoso hombre de piel oscura. Está seguro de que era el ángel que conoció durante su ECM. Solo después de muchas décadas les preguntó a sus hermanos qué había sucedido. Para su gran sorpresa, contaron una historia similar: se ahogaron y fueron rescatados por un ángel.

Energía imparable.

Una de las entrevistas de Ponto3.org es con Geertrui Lagae (sf). Intentó responder a la pregunta de qué es la Luz, pero le resultó difícil expresarlo con palabras. Entonces decidió decir que no se puede describir como un sentimiento o una emoción, sino como una sensación.

Eso es tan profundo, tan hermoso, tan... [le cuesta encontrar las palabras adecuadas] Es una unidad, es todo amor. Sí, también es... energía, es un tipo de energía que se siente. Y es... no puedes decir: «Voy a detener esa energía, voy a hacer algo con esa energía que la detenga», eso no existe allí. Perdurará, permanecerá.

Luminoso y dorado.

La Luz brillaba más que cientos de soles, pero no me dolía la vista. Nunca había visto nada tan luminoso ni tan dorado como esta Luz, y enseguida comprendí que estaba compuesta enteramente de amor, dirigida a mí... Aunque nunca había visto a Dios, reconocí esta luz como la Luz de Dios. Pero incluso la palabra «Dios» me parecía demasiado pequeña para describir la magnificencia de esa presencia. Estaba con mi Creador, en santa comunicación con esa presencia. La Luz se dirigía a mí y a través de mí; me rodeaba y me penetraba. (Sharp, 2003, p. 25)

Todo lo abarca.

Elizabeth Krohn (Krohn & Kripal, 2018) está segura de que, en su ECM, la impresionante belleza que presenció y la forma en que se formó estaban ahí porque estaban hechas a su medida. Dijo que era «su» paraíso:

Me rodeaba y me inundaba un sentimiento indescriptible de amor incondicional. El amor lo abarcaba todo y me abrazaba en todos los sentidos: en los aromas palpables que flotaban en el aire a mi alrededor como adornos; en el suave murmullo del arroyo cercano; en la cadencia de la hermosa música etérea que me rodeaba; en el festín floral visual que tenía ante mí; y en la profunda y reconfortante certeza de estar a salvo, protegida y amada incondicionalmente por Dios mismo...

Fue un regalo, hecho a mi medida, de un ser superior que me amaba incondicionalmente. (págs. 25–26)

Fuente de energía gigantesca.

Para aliviar sus dolores de cabeza, una joven tomó demasiadas pastillas y de repente se encontró volando hacia la Luz. Una vez en la Luz, comprendió que también es una especie de entidad. Tenía la sensación de que esta entidad no era humana, sino que, más bien, "adquiría un ligero parecido con un humano" para tranquilizarla. Describió a esta entidad como

Un padre, un dios, un hermano, un amigo, un maestro y, sobre todo, una entidad suprema que me cuidaba por completo, pero que a la vez parecía muy estricto conmigo, como si fuera un niño al que acababa de pillar huyendo con un tarro de galletas. (Anónimo, 17 de abril de 2006)

También dijo que el poder de esta entidad era tan enorme que la llamó “una fuente de energía gigantesca” y creía que era “Dios mismo”.

En mi y alrededor de mi.

Me absorbió.

Rachel Finch informó que en su ECM:

Sentí que estaba en casa. Sentí que conocía este lugar, este espacio, este ser. Era luz. Llenaba cada espacio de mi visión de 360 grados. No tenía forma que pudiera recordar, lo que durante mucho tiempo me dejó con otras preguntas, pero era hermoso y no me cegaba en absoluto.

Fue como si me "fusionara" con la luz. Me absorbió, yo la absorbí, nos convertimos en Uno, completamente. En esos momentos, aprendí mucho. Sobre nuestra existencia como humanos, sobre nuestro planeta y lo que como especie necesitamos para resolver sus problemas, la sanación que nuestro planeta y nosotros como personas necesitamos.

Me comunicaba con la luz y experimentaba estar dentro de ella y ser Uno con ella. (Anónimo, 10 de junio de 2019)

Me convertí en parte de ello.

En algún momento me encontré con otros, y estábamos en este vacío oscuro. Imagina que estás deambulando por una habitación grande y oscura y te encuentras con otras personas en el camino, y todos trabajamos juntos tratando de averiguar qué sucedió y por qué estamos aquí... Había una luz, a cierta distancia, y más tarde me encontré formando parte de ella, pero deseaba mucho encontrar una manera de traer a los demás conmigo mientras me alejaba de ellos... En la luz había un poderoso sentimiento de amor. Había vuelto a casa y era apreciado aquí. Era algo tan fuerte... un sentimiento de amor y aceptación completa hacia mí, en mí, a través de mí. Había vuelto a casa... Deseaba mucho regresar y traer a los demás aquí. Yo...Ojalá pudieras sentir esto... Puedo sentirlo de nuevo mientras escribo esto, ¡puro AMOR! (Anónimo, 14 de mayo de 2018)

A nuestro alrededor.

Quienes experimentan una ECM suelen decir que la Luz, en realidad, siempre está a nuestro alrededor. Aunque no la podamos ver, siempre está en todas partes. Esta persona la describió y luego hizo una maravillosa comparación para transmitir su normalidad:

La Luz es todo conocimiento oculto revelado, toda herida sanada, todos los anhelos satisfechos, y una reserva inagotable de amor, paciencia, humor, ternura, poder y comprensión... Como la presión de quince libras por pulgada cuadrada que la atmósfera ejerce sobre nosotros a nivel del mar, su presencia es tan común y constante que ya no podemos "verla". Se "oculta a simple vista". (Anónimo, 25 de abril de 2015)

Sé amable contigo mismo.

En su relato sobre su contacto con la Luz, Lee Thornton (2014) la describió “como la esencia del amor divino” (p. 97).

Su contacto con la Luz no fue superficial. Al contrario, incluso se fusionó completamente con ella. Esta fusión es algo que mencionan muchas otras personas que han tenido ECM. Lee lo expresó así:

Era como una membrana invisible y permeable por la que la Luz pasaba y fluía, transformándome en la Luz misma. Parecía poseer un espíritu universal que era la conciencia y la fuerza creadora de la vida humana... Ya no me sentía separado, sino envuelto por un sentimiento de amor incondicional... La Luz estaba dentro y alrededor de mí. (p. 98)

Recordó su infancia, donde aprendió sobre la existencia del «pecado original». También pensó en sus pecados y esperaba el castigo. Pero la Luz no la juzgó. Cuando se asombró por esto, la Luz dijo:

Hijo mío, no debes tomarte las cosas tan en serio. Solo formas parte de una cadena evolutiva, en la que toda la vida evoluciona en diferentes etapas de desarrollo. Eres solo un ser humano. No necesitas juzgarte con tanta dureza. Sé amable contigo mismo. (págs. 98–99)

Derritiéndose en ello.

Jang Jaswal (sf), de India, siempre se había considerado el centro de atención, pero durante su ECM se le mostró lo insignificante que era considerando el panorama general. Entonces, la Luz brilló sobre él.

Esa fue la mejor experiencia de mi vida. La Luz era de un color blanco dorado. Era más como... ah... Trabajé en metalurgia, y era como cuando el oro fundido emite una especie de luz. Es una luz blanca amarillenta. Era ese tipo de luz. No era calor ni calor lo que emanaba de la Luz. Era muy relajante, muy calma. Cuando la Luz caía sobre mí, lo maravilloso que me sucedió fue que mi mente dejó de divagar por completo. Estaba tranquilo, en paz. Y no tenía ningún pensamiento en mi mente. Ni buenos ni malos, nada. Simplemente estaba tranquilo y en paz conmigo mismo. Poco después, una vez que la turbulencia cesó en mi mente, después de eso, toda mi existencia comenzó a desvanecerse. Fue como fundirse con la Luz. Y en ese momento recibí esta comunicación, diciéndome que no es tu momento. Es hora de que regreses.

Brilló a través de mí.

Algo salió mal durante el cateterismo cardíaco de Catja de Rijk (2021), y sintió que la fuerza la abandonaba. Una enorme calma la invadió. Entonces, su ECM comenzó con un túnel colorido. Al final, vio una luz blanca brillante y muy hermosa. Ella comentó al respecto:

Me atrajo, yo también quería ir. La luz blanca me inundó [y me tranquilizó] como el agua de una ducha. Tan intensa, tan envolvente, que todavía me cuesta expresarla con palabras. La sensación es mucho más grande que todo el amor que he experimentado en mi vida. Lo que también me pareció tan especial fue que no tuve dificultad para mirar la luz blanca y brillante. Mientras tanto, me pongo gafas de sol cuando el sol brilla demasiado... Mientras escribo esto, las lágrimas vuelven a correr por mis mejillas. (p. 31)

Pieza holográfica.

En 1955, unos días antes de su graduación de la preparatoria, mientras asistía a un picnic con sus compañeros, Andy Petro fue a nadar en las aguas heladas de un lago y se ahogó. Se hundió hasta el fondo y, al entrar en pánico, escuchó una voz que le decía que se soltara. Al hacerlo, todo cambió. El dolor desapareció y sintió un apacible silencio. La negrura del lago se transformó repentinamente en la luz de "mil soles en explosión".

Escribió dos libros esclarecedores sobre su experiencia (Petro, 2011, 2014). En el primero, narró su historia combinando prosa y poesía —proesía, como él la llama—. En el segundo, intentó plasmar su inefable experiencia en palabras tridimensionales. Intentó contar cómo se sentía estar vivo en la Luz, lo que le brindó perspectivas muy interesantes. Algunas de las cosas impactantes que dijo sobre la Luz:

La pieza más pequeña de la Luz, el componente fundamental de todo lo que existe, es una cuerda vibrante de energía. Y cada cuerda vibrante de energía está compuesta, creada a partir de, la fuente del universo del amor incondicional. El amor incondicional es todo lo que existe. No hay nada que no sea amor incondicional. ¡El amor incondicional lo es! (Petro, 2014, ubicación 192–196)

Cuando estaba en la Luz, era consciente de la existencia de dos yoes: un yo tridimensional, ligado a la Tierra (Andy–Tierra), y un yo multidimensional y holográfico de la Luz (Andy–Luz). Soy una misma entidad, existiendo en dos universos diferentes: uno limitado y el otro ilimitado. (Petro, 2014, ubicación 66)

Sabía que era una pieza holográfica completa de la Luz, y que no había jerarquía entre Light–Andy y la Luz. (Petro, 2014, ubicación 406)

Vivir en la Luz es estar en un lugar feliz. La Luz está impregnada de alegría, risa y humor... La Luz no es un reino serio, sombrío ni estoico. La Luz está libre de miedo, separación, juicio, condenación y terror. (Petro, 2014, ubicación 487–491)

Capítulo 6. La revisión de la vida.

Durante sus ECM, algunas personas hacen una revisión de vida, y esto ocurre con frecuencia en presencia de la Luz. Esta revisión se presenta de muchas maneras. Algunos ven su vida como una película a cámara rápida. Otros ven destellos o imágenes. Algunos sienten que son recuerdos de sucesos. La sensación general se describe como "este eres tú". Los detalles más pequeños son perfectamente claros.

El repaso de vida es un repaso. Quienes han tenido una ECM afirman que recordaron su lugar en el gran esquema universal y el propósito que tenían en la Tierra, o mejor dicho, el que aún tienen, considerando que todas las personas que han tenido una ECM han regresado para continuar sus vidas terrenales.

La revisión de vida también refrescó la memoria de quienes la experimentaron de otra manera. Les permitió ser conscientes de prácticamente todos los sucesos de sus vidas y del efecto que tuvieron en los demás. Esta consciencia se manifestó de una manera muy interesante: Recordaban estos sucesos no solo como ellos mismos, sino también como las otras personas involucradas. En otras palabras, veían sus vidas tanto desde su punto de vista como desde el de los demás. Por ejemplo, cuando hacían algo bueno por alguien, sentían realmente su felicidad. No era una experiencia de " ser la otra persona", sino de " ser realmente la otra persona". De igual manera, cuando dañaban a alguien, sentían su dolor como si fuera esa otra persona.

Una vez, una mujer compartió sus dulces con una amiga del colegio. Fue justo después de la Segunda Guerra Mundial en los Países Bajos, y los dulces...En aquel entonces era un lujo poco común. Durante su repaso de vida, sintió la gratitud y la felicidad de su amiga. Siendo su amiga, sintió la emoción que sentía al ser considerada digna de recibir ese dulce. Le sorprendió que la inmensa felicidad no se detuviera con ella, sino que se extendiera a todos con quienes interactuara posteriormente, como a su madre y, para su asombro, incluso más allá. De una forma muy extraña, sintió que su amable gesto se extendía aún más, a lugares que jamás habría imaginado. Este gesto tuvo un gran impacto en el mundo porque incrementó la energía positiva que lo rodeaba.

Sin embargo, esta víctima de una ECM también descubrió que un acto negativo reduce la energía del mundo. Otra de sus amigas del colegio tenía piojos y le pidió ayuda. Ella le ofreció matar algunos. Lo lamentable fue que no lo hizo discretamente. En cambio, armó un gran escándalo. Al hablar en voz alta sobre los piojos, expuso a su amiga. Durante su revisión de vida, pudo sentir la magnitud de la vergüenza de su amiga. Podía sentir el dolor y el sufrimiento de esta humillación, como si fuera ella misma. Pero peor que este doloroso sentimiento era la conciencia de que había desaprovechado la oportunidad de aportar energía positiva al mundo.

Tuvo la oportunidad de brindar amor y calidez, pero no la aprovechó al máximo. Tras reflexionar sobre su vida, comprendió que el objetivo —la muerte de los piojos— no era importante en absoluto. En cambio, lo importante era cómo lo lograra. Había elegido armar un gran revuelo, pero también podría haber optado por trabajar en silencio. En ese caso, además de los piojos muertos, habría habido algo más: habría consolado a su amiga y le habría hecho sentir apreciada, incluso con los pequeños monstruos arrastrándose por su cabello. Desperdiciar esa maravillosa oportunidad fue una lástima terrible.

Revivir el suceso en su revisión de vida no parecía ser una cuestión de si estaba bien o mal, sino más bien, de tomar plena consciencia de lo sucedido. Pudo alcanzar este alto nivel de consciencia porque sintió una profunda empatía, también hacia sí misma. No hubo castigo, aunque quizá la sensación de desperdiciar una buena oportunidad fuera, en sí misma, una especie de castigo. Pero la palabra «castigo» sigue sin ser correcta; quienes han tenido una ECM la describen como una especie de profundo arrepentimiento, que les resulta sumamente doloroso (Coppes, 2011, pp. 37–39).

Cada pequeño detalle estaba allí.

Lo cubrió todo.

Mi análisis de vida fue, bueno, extenso, así que no puedo entrar en detalles aquí. Sin embargo, ocurrió en menos de un segundo y vi que TODO lo que hice, dije, escribí, pensé... era vergonzoso. (Anónimo, 30 de enero de 2006)

Todas las partes de mi vida.

Tuve un instante de repaso de mi vida. Lo sentí más espacial que secuencial. La mejor manera de describirlo es así: siempre he sido una persona bastante desordenada. Mi repaso de vida tomó la forma de una gran habitación desorganizada, y en ese instante, pude ver cómo todas las partes de mi vida estaban conectadas entre sí. Pude ver y sentir cómo había lastimado a personas que me importaban por mi despreocupación. (Anónimo, 19 de abril de 2020)

Claro, real y vivo.

Mientras estaba en la mesa de operaciones en una ciudad iraní, Arshan tuvo su ECM (ECM de Arshan , 1996). Se encontró con familiares fallecidos.y después de estar rodeado por la Luz comenzó a tener su revisión de vida.

Mi vida y todos sus acontecimientos comenzaron a reproducirse en mi mente, pero eran muy claros, reales y vivos. Era como una presentación de diapositivas, pero experimenté de nuevo todas las emociones de estos acontecimientos. Todo se mostraba en orden cronológico.

Mencionó que toda la representación, con toda su vida expuesta ante él, duró solo unos minutos. Al terminar, evaluó su vida y lo que había hecho. Su conclusión fue:

Sentí que, en general, fui relativamente amable con la gente.

Cada elección que hacemos tiene sus repercusiones.

Opciones y elecciones.

Una mujer presentía que iba a sufrir un infarto y fue trasladada a un hospital. Pero de allí la derivaron a otro hospital, y algo salió mal en la ambulancia. Sintió cómo estaba tanto dentro como fuera de la ambulancia. Entonces comenzó su ECM, que incluyó una revisión de su vida.

No le gustaba mucho repasarlo, pero sabía que no tenía otra opción. Era un repaso completo, desde el primer momento de su vida hasta el último, allí mismo en la ambulancia. Sin embargo, no todo se revisó en detalle. Solo ciertos sucesos se examinaron con más detenimiento. Esos fueron los momentos en los que había sido cruel, como en la escuela, cuando hirió los sentimientos de otra chica:

Cuando revisé ese suceso, sentí su dolor, sabiendo que Dios también lo sentía, y supe que tenía una oportunidad deTomé una mejor decisión, pero elegí al grupo de chicas por encima de mi alma. Eso me abrió las puertas. Vi cómo me había dañado con malas decisiones que no me había dado cuenta de que eran decisiones reales (en ese momento).

Una gran revelación para ella fue que todos tenemos todo tipo de opciones y elecciones, pero la que elegimos para servir a nuestro mayor bien es también la que servirá a todas las almas para su mayor bien.

Esta fue una oportunidad para experimentar a Dios desde una perspectiva completamente nueva, y de eso se trata: de perspectiva. (Anónimo, 30 de abril de 2013)

Sentí las repercusiones.

Vi mi llegada al mundo, un recuerdo de infancia tras otro, tan distintos y claros como si cada uno estuviera sucediendo realmente. Había un médico con un espejo redondo sujeto a la cabeza con una banda. Yo saltaba en mi cuna. La mayoría de las cosas eran agradables de ver, algunas me avergonzaban muchísimo. De hecho, la repulsión y la culpa me arrebataron cualquier sentimiento positivo, haciéndome sentir profundamente arrepentido por ciertas cosas que había dicho o hecho. No solo había visto lo que había hecho, sino que sentía y conocía las repercusiones de mis actos. Sentía la herida o el dolor de quienes sufrieron por mi comportamiento egoísta o inapropiado. (Anónimo, 18 de abril de 2009)

Lo que te hago a ti, me lo hago a mí mismo.

Ido en contra de mi verdadera naturaleza.

Después de que René Jorgensen (2007) se fusionara con la Luz y comprendiera que él mismo es, de hecho, puro amor, se le hizo una revisión de su vida. En su libro, la describió como llegar a...Comprender el amor. También empezó a comprender qué era "no amor". Se dio cuenta de que a lo largo de su vida había vivido en contra de su naturaleza, que era el amor puro. En su repaso, vio a las personas a las que había lastimado durante su tiempo en la Tierra. Vio cómo lastimó a su madre al gritarle con ira. Vio a una novia a la que había engañado y a la que no le importó sus sentimientos. También vio cosas que había olvidado, como cómo se había burlado de una niña en el patio de la escuela de tal manera que la afectó toda su vida.

Sería menos extrovertida y menos capaz de amarse a sí misma de adulta. Sentí el profundo impacto que esto tendría en su familia y sus seres queridos. (p. 7)

Se horrorizó porque vio cómo había ido en contra de la verdadera naturaleza de la existencia, que es el amor infinito, provocando todo ese dolor que vio en su reseña de vida:

La esencia y el propósito de la vida eran el amor, pero yo había actuado en contra del amor y, por lo tanto, en contra de mi naturaleza. Era como si me hubiera estado haciendo todo esto a mí misma: al herir a otros, me había hecho daño a mí misma. Todos estamos conectados, todos somos uno. Desde lo más profundo de mi corazón, clamé: "¿Cómo podría hacer otra cosa que no fuera amar?" (p. 7)

Entonces vio todo el dolor y el sufrimiento del mundo, toda la gente pobre y la gente que vive en la miseria, todos los conflictos y guerras.

Vivimos en un mundo con tanta agonía, todo contrario a la naturaleza del amor. ¿Cómo podríamos aceptar todo esto? ¿Cómo podríamos vivir como lo hacemos, sin ver la tristeza, sin sentir el dolor? (p. 7)

Decidió cambiar su estilo de vida y se dedicó a ayudar a personas atormentadas. Entonces, la situación volvió a la sensación de amor y luz, y vio un adelanto de su futuro:

Me vi amando a quienes me rodeaban, compadeciéndome de los demás y dedicando mi vida a ayudar al mundo. Al final de mi vida, me vi entrando en esta luz para regresar a mi lugar de origen... (p. 7)

Efecto dominó.

En su libro, Carol Lynn Vengroff (2012) escribió sobre su revisión de vida, que fue “clarísima” y “asombrosamente detallada” sobre todo lo que había “sentido, visto, tocado, olido, saboreado, oído, percibido y hecho” (p. 13).

Lo que me asombró fue que, simultáneamente, experimenté la revisión de mi vida desde la perspectiva de todos y todo aquello con lo que había tenido contacto... Fui testigo no solo de cómo mis acciones y hechos, sino también de cómo mis pensamientos y sentimientos tenían un efecto dominó universal. ¡Estaba asombrado!

Mientras revivía mi vida humana , me di cuenta de que mis acciones no eran evaluadas por nadie más que yo. No era juzgado por un poder superior. Yo era el único juez y jurado. (págs. 13–14)

Dijo también que Dios siempre había estado con ella en cada momento de su vida que acababa de revivir en su revisión de vida.

El receptor.

Tras ser alcanzado por un rayo, Dannion Brinkley (2008) falleció. Mientras era trasladado de urgencia en ambulancia, revisó su vida. Quedó consternado por lo que vio. Todas las facetas de su...Sus acciones egoístas y sin amor estaban presentes en todos sus horripilantes detalles, y en su libro se llamó a sí mismo una persona “desagradable” y “verdaderamente inútil”.

Por ejemplo, revivió las innumerables peleas a puñetazos, no solo como él mismo, sino también como su compañero de lucha, o lo que él llama "el receptor". También sintió lo que les sucedió a las personas que asesinó como parte de su trabajo para una agencia secreta del gobierno estadounidense; y, de nuevo, no solo como él mismo, sino también como el ejecutado, como el "receptor". Sobre su revisión de vida, dijo que la "profundidad de la emoción" que revivió fue "asombrosa", no solo por sus emociones, sino también por las emociones de las personas que conoció en su vida y a quienes les causó dolor.

Hay más que decir sobre esto, porque sus emociones no se limitaban a él mismo ni a los directamente involucrados. También sentía las emociones de los familiares e hijos de las personas que había asesinado. Eran las personas indirectamente involucradas, las personas de segundo orden. Eran personas que nunca había conocido o que ni siquiera sabía que existían. Dijo:

Reviví todas mis matanzas... Me vi a mí mismo matándolas, y luego sentí sus horribles resultados. (p. 16)

Finalmente, las emociones que sintió no fueron solo las de los humanos, sino también las de los animales. Dio dos ejemplos: uno de una cabra a la que había ayudado y el otro de su perro al que había reprendido con rudeza (págs. 13–14).

Años después, cuando tuvo su segunda ECM, tuvo una segunda revisión de vida. De nuevo, revivió los malos momentos, pero después de su primera ECM, su vida cambió por completo. Por lo tanto, su segunda revisión de vida también consistió en muchos momentos maravillosos en los que actuó con compasión hacia otras personas. Por ejemplo, sintió la alegría con las personas de los hospicios donde...se había ofrecido como voluntario y mucha alegría provenía de sus muchas acciones pequeñas y aparentemente insignificantes.

Humillación.

Estaba en un gran teatro, con escenario y cortinas de terciopelo a ambos lados. No había nadie más. Estaba sentado en medio de la fila... y entonces una de mis primeras amigas de la infancia salió al escenario. Me miró y me dijo que le encantaban los juegos que jugábamos y todas las risas que nos hacíamos. Entonces me tocó a mí contarle que siempre me divertía tanto, pero que me entristeció que se mudaran. Nos quedamos allí hasta que intercambiamos amor y admiración.

Más tarde, salió un niño mayor. Era el monitor del autobús. Me dijo que lo había humillado. Le hice caso. Solía intimidar a mi hermano. Así que un día tomé su mochila y la puse al lado de la casa, donde estaba la parada del autobús. Todos los niños estaban jugando. Cuando llegó el autobús, los niños formaron fila y subieron. Cuando fue su turno, no pudo encontrar su mochila. Les dijo a los niños: "Qué raro". Apretaron los seguros de las ventanas y bajaron las ventanillas. Les susurré a los demás dónde estaba su mochila, y se lo dijeron. Pronto estaba caminando hacia el autobús y los niños se burlaban de él.

Tuve que entrar en su cuerpo y mirar a los niños asomados a las ventanas y sentir la humillación como él. Él tuvo que entrar en el mío y comprender mi experiencia. Tuve que enviarle cariño y le dije que lo sentía profundamente. Él me envió su amor y su bondad. Al terminar este intercambio, ambos nos sentimos comprendidos y amados. No puedo explicar la profundidad de la sanación. Hubo muchos más intercambios. (Anónimo, 17 de octubre de 2019)

Humillante.

En cierto momento, estaba en esta vida y ciertas partes de ella se estaban desarrollando para mí, solo que yo revivía esos momentos con total claridad, tanto desde mi perspectiva como desde la de cualquier otra persona involucrada. Eran mis palabras, mis pensamientos, mis acciones, una y otra vez, pero desde todos los puntos de vista imaginables al mismo tiempo. Fue una experiencia muy humilde, y es algo que intento tener presente hoy en día en mi trato con los demás. Aunque, cuando lo pienso, es muy difícil dejar el ego a un lado y hacer lo correcto, y tengo la sensación de que la próxima revisión de mi vida será igual de humilde, o incluso más difícil. Siento que aquí estamos limitados, y allá, las cosas eran mucho más claras; simplemente había un conocimiento instantáneo de todo. (Anónimo, 14 de mayo de 2018)

Rodeado de innumerables pantallas de cine

Andy Petro, quien se ahogó durante un picnic con su clase de preparatoria, revivió su vida de una manera muy especial. Se sintió como si estuviera suspendido en el centro de un estadio deportivo o centro de convenciones colosal y esférico.

Estaba completamente rodeado de innumerables pantallas, como si fueran de cine: arriba, abajo, adelante, atrás, izquierda y derecha. En estas pantallas se mostraban sucesos de todas mis vidas, tanto aquí en la Tierra como en otros mundos. Estaba experimentando mi revisión de vida. Vi, sentí, saboreé, olí y escuché cada experiencia. Al revivirlas, reviví cada suceso tal como fue cuando ocurrió... Pude ver y revivir todos mis sentimientos, pero lo más importante, sentí los pensamientos y sentimientos de todos aquellos con quienes interactué a lo largo de mi revisión de vida. (Ubicaciones 335–339 y 343)

Sentí el dolor dentro de mí.

Durante su ECM, un hombre iraní (Mohammad Z ECM , sin fecha) conoció a un ser muy espiritual. Al principio, Mohammad pensó que debía ser un profeta importante, pero después de un tiempo se convenció de que este ser era mucho más que eso. Al parecer, era su guía, quien había estado a su lado toda su vida. Se dio cuenta de que todos tenemos un guía.

En presencia de este guía, vio una revisión de su vida. Fue muy completa y comenzó desde el principio, en su nacimiento.

Dijo que antes de entrar al cuerpo de su madre, sintió que estaba

presente en todo el universo, pero de alguna manera una parte de mí se alejó de esta totalidad para trasladarse al mundo físico y al cuerpo de mi madre.

Él no sólo era el universo entero, sino que sentía una profunda interconexión con todo y con todos, algo que también han dicho muchas otras personas que han tenido ECM.

En su relato, mencionó dos sucesos de su vida que lo impactaron profundamente. Ambos sucedieron cuando era niño. El primero fue cuando iba a buscar agua. El cubo de agua resultó ser demasiado pesado para él. Decidió vaciarlo parcialmente cerca de un árbol que parecía tener sed. Dijo:

Recibí tantos aplausos y alegría por este simple acto... Fue como si todos los espíritus del Universo se llenaran de alegría...

Lo importante de este acto fue que lo había hecho “puramente de corazón”.

El segundo suceso fue menos inspirador. Fue cuando golpeó a un niño de su edad. Vio las consecuencias de esta paliza.El niño, que estaba completamente infeliz e irradiaba negatividad por todas partes, se sintió afectado por su dolor. Incluso los animales más pequeños, como las moscas, se sintieron afectados. Mencionó que incluso las piedras por donde caminaba sentían la negatividad. De hecho, se extendió por todo el mundo y el universo.

Lo interesante es que vio que incluso los objetos inertes, como las piedras al borde de la calle, se vieron afectados. Esto afectó no solo a los padres del niño, sino también al niño a lo largo de su vida. Fue como un efecto dominó. Su experiencia indicó que todos irradiamos energía, y que esta viaja más lejos de lo que creemos, como las ondas en un estanque donde hemos lanzado una piedra.

También dijo que, en su interior, podía sentir el dolor que le había causado al niño. Es decir, podía sentir lo que le había hecho como si él mismo fuera ese niño.

Incluso los animales: conejillo de indias.

Durante su ECM muy profunda, Rachel Finch (Anónimo, 10 de junio de 2019) hizo una revisión de su vida.

Una "película", por decirlo de alguna manera, empezó a proyectarse. Era enorme, en blanco y negro. Como si estuviera mirando una pantalla gigante que lo abarcaba todo, dondequiera que me volviera. La "película" era mi vida desde el nacimiento hasta la muerte, cada minuto, cada acontecimiento que había vivido. La vi y la reviví.

En su vida hubo sucesos terribles que había bloqueado por completo de su memoria. Sin embargo, durante su ECM, estaban presentes, altos y claros. No obstante, notó que en esos momentos difíciles no había estado sola. Su guía siempre estuvo con ella.

Fui testigo... del abuso sexual que sufrí y reprimí cuando era niña, así como de experiencias extracorporales.Tuve experiencias en ese momento y por la noche, mientras estaba acostado en mi cama. Me vi volando fuera del cuerpo y recordé. Fue en ese momento que también vi y recordé a un guía que me había acompañado durante mi crecimiento.

Entonces comprendió que podía sentir lo que sentían los demás como si fuera ella. Curiosamente, no eran solo sentimientos humanos, sino también los de un conejillo de indias.

Mientras observaba y reexperimentaba cada momento, descubrí que ahora era capaz de experimentar cada suceso a través de las emociones de todos los presentes en cada momento.

Observé mis errores y aprendí de cada revival. Me vi de niña, mordida por un conejillo de indias y, en estado de shock, casi lanzo el animal al sofá. Sentí vergüenza en ese momento. Porque sentía el miedo del conejillo de indias. Nadie me condenó. Solo me preguntaron qué había aprendido. Me sentí reconfortada en ese momento. Me consolaron y me tranquilizaron. Había aprendido tanto. El gran impacto que mis acciones, aparentemente pequeñas, tuvieron a gran escala. Cómo mis decisiones y mi comportamiento repercutieron en las vidas de innumerables personas. Cómo el amor que demostré se extendió como un reguero de pólvora. Cómo la forma en que maltraté a otros los hirió y afectó profundamente, y también cómo ese dolor, miedo y confusión impactarían también en las vidas de otros. En el "tiempo" que pasé reviviendo, desarrollé una profunda gratitud por muchas cosas. La experiencia de la vida, por ejemplo. Las personas y los corazones que habían tocado mi alma de maneras hermosas y la fragilidad del ser humano.

Nadie te juzga excepto tú.

La verdad sobre la mesa.

Mally Cox–Chapman (1995) basó su libro "El Caso del Cielo" en unas 50 entrevistas con personas que han tenido ECM. Con su permiso, he incluido tres citas de su libro.

Este sujeto de ECM intentó suicidarse inhalando grandes bocanadas de agua del mar. Atravesó un túnel y vio luz al final. Fue juzgado por seis jueces y se le hizo una revisión de su vida. Dijo:

Lo único que importaba era llegar a la verdad. Cada pensamiento, palabra y acción que has tenido cuenta. Lo digo en serio. Me sentí responsable y perdonado. El juicio parece ser en parte obrado por ti mismo. Y el perdón, es decir, lo que entiendo como la presencia de Dios, es luz total y amor total. No hay animosidad allí. En presencia de esos jueces, desnudé mi alma por completo. Y cuando estuve satisfecho y ellos también de que se hubiera dicho la verdad, entonces coincidimos. (págs. 77–78)

El juez eres tú.

Como instructor de natación en un campamento de Boy Scouts, un niño de 14 años tuvo inicialmente una ECM angustiosa, que afortunadamente se convirtió en una feliz (véase el capítulo 8). Vio su vida repasarse en presencia de lo que creía que era un "ángel". Al terminar, le dijo al ángel que esperaba no ser juzgado con demasiada severidad. El ángel le respondió que su vida es evaluada por el juez más poderoso. El niño preguntó cuándo sucedería eso. La respuesta fue:

Eso ya pasó. El juez eres tú. (Anónimo, 4 de marzo de 2004, 20:58)

Recibí un agradecimiento.

Durante su ECM, Brigitte Buyle (sf) primero recorrió una vieja escalera y luego un túnel, hasta llegar a una puerta que se abrió. Detrás de ella, mucha gente la esperaba. La bienvenida fue abrumadora. Sin embargo, frente a toda esa gente, pudo ver su vida repasada, con todo lo que contenía. Se sintió avergonzada:

¡Para todos los espectadores! ¿Te lo imaginas?

Al terminar, se sorprendió. ¿La razón? Todos los espectadores le estaban agradecidos por todas las experiencias que había tenido en la Tierra.

Y lo que recibí fue un agradecimiento por todo lo que había pasado, por todas mis experiencias. Todo. Todo fue aceptado, todo admitido, como si estuviera regalando perlas, incluso las cosas malas, todo. Sabes, eso fue, sí, es indescriptible. Es indescriptible. Y luego recibí mucho cariño de ellos, todo está bien y gracias, y somos muy felices.

Las pequeñas cosas también cuentan: todo es cuestión de amor.

Las pequeñas cosas tienen un gran impacto.

Irina era maestra de primaria. Mientras volvía a casa en bicicleta, fue atropellada. Durante su ECM, se le mostró un repaso de su vida. Eran escenas de su infancia. Vio a una niña con la que su madre le había dicho que jugara, pero no tenía ganas. Ella y la niña discutieron, e Irina corrió a casa para alejarse de ella. Pero la niña la siguió y le dijo a su madre que habían discutido. Su madre obligó a Irina a disculparse. Ella lo hizo a regañadientes, yMantuvo los dedos cruzados tras la espalda para que su amiga pudiera verlos. Durante su ECM, vio el doloroso efecto que esto tuvo en la niña.

Luego vio otras escenas de su infancia: imágenes en las que veía lo que les había hecho a los demás. Siempre eran imágenes negativas, nunca positivas, aunque, por supuesto, también había habido acontecimientos positivos en su vida. Y siempre la misma sensación: «Mira lo que les has hecho a los demás». Siempre eran pequeñas cosas que no había considerado en ese momento, pero comprendió que eran precisamente esas pequeñas cosas las que podían tener un gran impacto en los demás. La cuestión no era qué había hecho específicamente, sino que las pequeñas cosas importan y que uno debe ser más consciente de ellas en la vida.

Las imágenes no cesaban. Una y otra vez: «Le dolió», y continuamente tenía esa sensación de que las pequeñas cosas importan. Captó el mensaje. Quería salir de allí. Seguía confundida. «Ahora sé de qué se trata», pensó, y de repente su repaso de vida se detuvo.

Es como si tú mismo participaras en el asunto. Como si pudieras decidir por ti mismo lo que sucede. (Coppes, 2020, p. 144)

Ella continuó: Había una sensación de aceptación. Todo lo que hacía era aceptado. Todo estaba permitido. Todo estaba bien. Había una sensación de amor incondicional. Simplemente lo sientes. Desde dentro. Una sensación de volver a casa. Fue la sensación que tuve cuando tuve a mi primera hija. Mi hija puede hacer cualquier cosa, pero siempre la amaré. Así era la sensación... (p. 144)

Ahora mismo.

En mi entrevista inédita con Gayle Gladstone, ella me dijo que tuvo su ECM mientras se ahogaba en las profundas olas del océano de Kauai.

Miré la playa y vi a mi hija de diecinueve años en la orilla, muy, muy pequeña y a lo lejos. No pude entrar. Me entregué. Sentí una gran paz. Fue una sensación tan hermosa. Pensé: "¡Guau! He hecho cosas increíbles. He ayudado a otros y me he mantenido fiel a mi misión en la vida: ayudar a los demás con bondad amorosa".

Recuerdo una sensación de emoción al partir. Me permití entrar en la muerte y abandoné voluntariamente mi cuerpo físico. En ese momento, una luz brillante brilló en mi presencia, cambiando mi consciencia y alterando mi conocimiento.

Me encontré en un teatro enorme, sentado solo en medio de la fila central. Me sentí muy importante. Recuerdo haber pensado: «Estoy seco y esto no es el océano. Este es un lugar importante. Presta atención».

Este fue un repaso de mi vida. Estaba en la pantalla de cine. Me gustaban los logros que veía y estaba lista para conocer a mi creador... pensando que había vivido una buena vida y que podía perdonarme los errores que había cometido al vivir y amar. Estaba contenta. Mi corazón se sentía humilde y mis observaciones parecían conservar la inocencia de un niño.

Gayle se sentía satisfecha con la vida y su desempeño. Pero entonces su análisis de vida cambió. Se le mostraron los momentos aparentemente insignificantes de su vida en los que pudo haber marcado la diferencia en la vida de alguien más, no por hacer algo grande, sino simplemente por prestar atención a un transeúnte desconocido.Diciendo o haciendo algo agradable, o simplemente sonriendo. Dijo que el presente es demasiado importante como para ignorarlo. Hay tanto que uno puede hacer en el presente, en el ahora. No desperdicies las oportunidades en cualquier momento para crear amor.

De repente, la película se aceleró. Estaba viendo todos esos cortos de mí en vida. Recuerdo que me pregunté: ¿qué era esto? Era yo cruzando la calle... yo en la caja... yo con otros niños... etc.

¡Guau! Esta aceleración de actividades sin importancia en mi revisión de vida me asombró y me hizo reflexionar. Aunque me sentía bastante bien con mi vida, mi comportamiento inconsciente y la falta de oportunidades que permitía revelaron cómo todo a mi alrededor es una orquestación del universo para ayudar a los demás, contribuir a la evolución colectiva, elevar su vibración, para que yo sepa que yo también puedo ayudar. Fue impactante verlo. Había subestimado por completo el aquí y ahora. Había permitido que mi mente me alejara del presente. No estaba prestando atención... soñando despierto e ignorando mi vida física.

Una vez que entendí que el presente contenía tantos momentos de amor, necesidad y comunicación, el carrete continuó... todo esto sucedió rápidamente.

Al reconocer mi distracción y falta de atención en el presente, vi lo que sucedió o podría haberse evitado si hubiera estado prestando atención... dando y siendo amado. Había un hombre enojado al que ignoré o no noté. Lo que me mostraron fue que se fue a casa y golpeó a su esposa... Un acto de intercambio amable o un gesto de asentimiento habría calmado la ira y evitado el incidente. Otra cosa... si simplemente le hubiera dedicado una sonrisa sincera, la joven no se habría suicidado. Todo lo que se necesitaba era un intercambio amoroso y amable para estabilizarla y ayudarla a volver a la normalidad. Hubo violaciones, acoso y odio que...Podría haberse evitado si tan solo hubiera prestado atención a la energía y las necesidades de quienes me rodeaban. Reconocí que al unir la mente con el corazón, podemos activar una respuesta automática de compasión hacia toda la energía que nos rodea. De esta manera, podemos compartir el único Amor Divino que somos. Comprendí cómo nuestra intención crea sin esfuerzo un campo vibratorio que se extiende a quienes nos rodean.

¿Has amado a otros?

En su libro Return From Tomorrow , el médico George G. Ritchie (1978/2004) proporcionó uno de los primeros relatos publicados de una ECM. Tuvo su ECM durante un episodio de neumonía lobar doble. Escribió sobre su visita al infierno (véase el capítulo 8), pero también sobre haber tenido una revisión detallada de su vida. Dijo que

Todo lo que me había sucedido estaba simplemente allí, a la vista de todos, contemporáneo y actual, aparentemente ocurriendo en ese momento. (págs. 49–50)

Se vio a sí mismo como un bebé prematuro, con bajo peso, hospitalizado, apenas sobreviviendo; como un niño pequeño jugando con su hermana, apenas unos años mayor; como un adolescente mudándose a una nueva casa; y como un Scout Águila. Vio a su padre presentándole a su madrastra, cómo se negaba a amarla. Sus exámenes, su ingreso a la universidad y cientos de miles de escenas más.

Luego estaba esta pregunta: "¿Qué hiciste con tu vida?". Era una pregunta sobre valores, no sobre hechos. Se trataba de lo que había hecho con su tiempo asignado, que era tan valioso.

Para encontrar una respuesta, pensó en convertirse en un Scout Águila. Estaba orgulloso de ello, pero comprendió que solo era algo que le daba mayor estima. Y entonces...Recordó cómo se consideraba mejor que los niños que no iban a la iglesia. Pensó en lo poco que había logrado porque aún era demasiado joven para haber logrado nada. Pensó en el dinero del seguro que le correspondía al cumplir 70 años. Y entonces la Presencia a su lado empezó a reír con una risa santa, sin burla. George comprendió que se estaba juzgando a sí mismo, mientras que la Presencia a su lado no lo condenaba en lo más mínimo. La pregunta de qué has hecho con tu vida estaba implícita. George comprendió que estaba relacionada con el amor:

¿Cuánto has amado con tu vida? ¿Has amado a los demás como yo te amo? ¿Totalmente? ¿Incondicionalmente? (p. 54)

Lo que haces por amor.

Un niño de ocho años se ahogó en un río brasileño. Durante su ECM, hizo un repaso de su vida. Se preguntó qué tan malas podían ser las acciones de un niño de ocho años. Entonces vio cómo había rayado el coche del vecino con una llave. Sintió la consternación de ese hombre y asumió que sería castigado por ello. Pero el ángel que lo acompañaba se rió y dijo:

No te preocupes, eso fue solo una lección. Lo que importa son las cosas que haces por amor. (Anónimo, 29 de agosto de 2008)

Capítulo 7. Todos son importantes.

Una de las primeras cosas que descubrí al profundizar en las ECM fue que todos somos igualmente importantes. Las personas sin hogar en nuestras calles o los refugiados en nuestros países ricos no son menos importantes que los gerentes de empresas, los líderes religiosos, los reyes, los emperadores o los presidentes de nuestros países. La Luz no hace distinción, porque todos venimos de la Luz y todos la llevamos dentro. Además, todos tenemos una tarea importante en la vida. Y lo más importante, el amor incondicional al otro lado de la vida está ahí para cada uno de nosotros. No hay excepción; de lo contrario, no sería incondicional.

No estaríamos en la Tierra si no tuviéramos un propósito.

Mi propósito.

Vi que tenía un propósito y que todos los seres tienen un propósito. (ECM de Yazmine S , sin fecha)

Dios depende de nosotros.

Sentí que todo estaba bien, como debía ser. Todo tenía un propósito... Escuché que Dios dependía de nosotros para trabajar en la Tierra. (Corcoran, 1996, pág. 35; Dale, págs. 10–11)

Yo quería hacer mi parte.

Supe al instante cómo y por qué quería impactar al mundo. Qué papel quería desempeñar al aportar al mundo. Aportar mi granito de arena. Dejar huella. Y las verdaderas motivaciones tras ellas. Cómo podía. Y por qué solo yo podía, de la manera en que podía. Por qué esas cosas son únicas para mí. Y no por ninguna de las razones que podría haber imaginado. Me di cuenta de que dentro de mí hay razones, emociones y motivaciones que nunca antes me había reconocido. (Anónimo, 28 de noviembre de 2003, 10:36 a. m.)

No desperdicies tu vida.

Yolaine Stout (sf) fue criada como católica, pero en la adolescencia se volvió atea. La razón fue que las monjas de su escuela no podían explicarle por qué los niños de África que no conocían a Jesús tenían que ir al purgatorio o incluso al infierno.

Se casó con un austriaco y se fue a vivir a Austria, donde trabajó como profesora de inglés. Sin embargo, no fue un matrimonio feliz. Sufrió una grave depresión, lo que la agotó enormemente. La gota que colmó el vaso fue que se determinó que no podía quedar embarazada. Pensó: "¿Para qué seguir viviendo si no puedo ser feliz?".

No quería suicidarse, porque parecía muy malo para sus padres, pero aun así quería morir, preferiblemente sin dolor. Había tomado clases de entrenamiento autógeno en la Universidad de Innsbruck, donde aprendió a controlar su cuerpo. Pensaba que así podría ralentizar su ritmo cardíaco y, con el tiempo, detenerlo.

Todas las noches hacía los ejercicios. A veces se encontraba en una especie de vacío donde ya no sentía su cuerpo. Eso no le bastaba, pues aún podía pensar y, por lo tanto, no estaba muerta.

Una noche, sin embargo, funcionó. De repente, se hizo muy clara su habitación.

Parecía como si mil focos hubieran entrado de repente en la habitación. Todo estaba iluminado y nítido. Soy muy miope y necesito gafas para ver bien, pero entonces pude ver el pasillo, el estampado de la colcha, y miré por la ventana y el cielo era azul. Pensé que acababa de entrar en una nueva dimensión. Me levanté para explorar y, mientras lo hacía, oí a gente hablando en 360 grados. Me di cuenta de que lo que oía eran los sueños de todos en ese edificio...

Pasé de querer morirme a... ¡guau! Es otra dimensión. ¡Qué emocionante!

Entonces, esta otra luz me envolvió... Todo desapareció. Era como si no tuviera cuerpo... había una separación y una sensación de identidad en ello. Pero se sentía como un baño caliente de amor. Amor puro e incondicional. Todas mis preocupaciones, todo mi estrés se habían ido. Era pura felicidad. Todo era luz. No veía nada ni a nadie, pero era mi hogar. Quería quedarme allí para siempre. ¡Dios mío, esto es amor!

Poco a poco se disipó, se fue, y me encontré en mi habitación, en un estado de asombro asombroso. Seguía iluminada. Me giré lentamente hacia un lado y vi túnicas blancas junto a mi cama. Levanté la vista. ¡Madre mía! Ese es Jesús. Me miraba con sus intensos ojos azules. Nunca había visto a nadie con ojos tan azules. Y me dijo una sola frase. No movió los labios. Oí su voz en mi cabeza, o dondequiera que la oyera.

“No desperdicies tu vida pensando que no eres amado”.

Y cuando dijo las palabras “tu vida”… era palpable lo preciosa que era mi vida, y no sólo loLo valiosa que era mi vida, pero también lo valiosa que era la vida de todos. Incluyendo a ese niño en África.

Como Yolaine era profesora de inglés, analizaba esa frase una y otra vez. Decía que la palabra "desperdiciar" implicaba que hay vida que desperdiciar. Significaba que todos tenemos un propósito en la vida. Una misión. Hay una razón preciosa para estar aquí, sea cual sea.

Comprendí que era responsable de mi felicidad; que estar deprimido era "desperdiciar" mi vida. Tenía que descubrirlo. Empecé a buscar mi propósito en la vida y cómo superar la depresión. Tenía una opción. Siempre hay opciones.

En su hermosa presentación, Yolaine habló sobre su depresión, la cual no desapareció inmediatamente después de su experiencia. Es muy interesante escuchar cómo empezó a ver las cosas de otra manera y cómo, como resultado, finalmente superó la depresión y logró vivir una vida plena.

Un plan para mi vida.

Un niño iba en bicicleta y fue atropellado. Lo llevaron de urgencia al hospital y, desde arriba, presenció la cirugía necesaria para mantenerlo con vida. Luego, salió del quirófano y se encontró rodeado de oscuridad y de nada, pero completamente envuelto en la paz y el amor de la presencia de Dios.

Tuvo que regresar de nuevo, pero convencido de algo muy importante:

Lo más significativo que me llevo de esta experiencia es la convicción de que Dios existe, me ama y tiene un propósito y un plan para mi vida. (Anónimo, 20 de diciembre de 2010, 16:48)

Ya lo sabemos todo.

En mi entrevista con un hombre con el seudónimo Noël de Waele, este reveló que su ECM ocurrió mientras atravesaba una profunda crisis psicológica (Coppes, 2021/2022). Los problemas matrimoniales habían afectado gravemente su vida y su salud. Le aterraba que le arrebataran a su hijo Maurice, de 12 años. Durante su ECM, recibió no solo el aliento de su difunta hermana para empezar a vivir su vida, sino también el mensaje de que Maurice se quedaría con él. Continuó recordando otras verdades de su ECM, como que todas las personas importan. Todos. Sin excepción. Dijo:

No estarías aquí en la Tierra si no fueras importante. Porque todos estamos conectados. Esto no solo se aplica a las personas, sino a todo ser vivo en la Tierra: los animales y la naturaleza en su conjunto. Todos tenemos una misión: ser felices y hacer felices a los demás. Necesitamos crear un mundo en el que todos podamos vivir. Un mundo que podamos compartir. Los mensajes de ECM tienen el potencial de elevar la conciencia del mundo. (p. 25)

También consideró que el mundo está atravesando un momento difícil.

Es un desastre. Pero si no bajas, no puedes ascender. Lo he experimentado yo mismo. Lo mismo se aplica al mundo. Se necesita una llamada de atención antes de que la gente se dé cuenta de que necesitamos cambiar, no solo a nivel personal, sino también a nivel global. (p. 25)

Noël dijo que las cualidades más importantes de las personas son las que él llama "cualidades del corazón". Mencionó algunas: el amor, la compasión, la amistad, la paz y la alegría.

Si puedes vivir con el corazón, es maravilloso para ti y para los demás. Además del amor, el perdón es la cualidad más hermosa del corazón. Si eres puro, puedes perdonar a tu peor enemigo. (p. 25)

Cuando le pregunté cómo podíamos hacer esto, me dijo:

No tenemos que aprender nada, porque ya lo sabemos. Todo está en ti. Es con lo que naces. (p. 25)

Somos divinos.

Parte de la luz.

Me di cuenta de que era parte de la Luz, de Dios en general, como un grano de arena en la playa. Era un grano que es Dios, pero Dios mismo era toda la playa. (Cox–Chapman, 1995, p. 80)

Pequeños dioses.

Todos somos hijos de Dios y, por lo tanto, también somos pequeños dioses. Solo debemos recordar nuestra divinidad. (Burton, 2002/2003, p. 14)

Dios fluye a través de nosotros.

Dios no es algo externo a nosotros. Lejos y desconocido. Él fluye a través de nosotros como la Presencia Eterna. (Klein, 2006, p. 105)

Fragmento de la Fuerza de Dios.

Tras una hemorragia durante el parto, una mujer (Anónimo, 17 de febrero de 2017) tuvo su primera ECM, seguida inmediatamente de una segunda cuando le administraron una transfusión de sangre demasiado fría. Durante su primera ECM,Se lanzó al espacio y vio la Tierra desde una gran distancia. Le encantó y sintió una enorme conexión con nuestro planeta. A esto le siguió una revisión de su vida, un túnel y un encuentro con su difunto padre, entre otros. Comprendió que el libre albedrío es un enorme privilegio.

Nosotros decidimos, y eso tiene un poder tremendo.

Durante su segunda ECM, tuvo un extenso intercambio de información con un grupo de lo que ella llamaba «maestros». Aunque podía preguntar cualquier cosa, no pudo llevarse consigo gran parte de la información.

Ambas ECM cambiaron enormemente su actitud ante la vida. Comprendió que estamos aquí por voluntad propia para cumplir con nuestra tarea. Lo expresó así:

[La ECM] me brindó una experiencia directa de mi vida eterna y me demostró que estoy aquí por elección propia, para cumplir el propósito de mi alma, que soy un fragmento individual y único de la Fuerza Divina, y que jamás volveré a ser visto en todos los mundos bajo esta forma. Por lo tanto, soy valioso, sumamente valioso. No importa lo que haga; solo se me pide que sea el amor que yo, y solo yo, llevo en esta Tierra ahora que tanto me necesitan.

Tengo un guía.

Tras un grave accidente automovilístico, Mohammad (Mohammad Z ECM , sf) se sintió fuera de sí . Era tan importante como para tener un guía que lo había acompañado toda su vida.

Finalmente, lo noté. Era una figura asombrosa, divina y humana, que irradiaba mucho amor y luz.

La persona que experimentó una ECM sintió entonces un amor total por esa figura divina y humana, y recibió a cambio un amor incondicional.

Al principio pensé que debía ser un profeta o una figura religiosa, pero luego pensé que estaba incluso por encima de todo eso. Me di cuenta de que siempre ha estado conmigo, siempre. Ha sido mi guía.

Y luego concluyó que cada uno tiene un guía, lo que implica que aparentemente cada uno es lo suficientemente importante como para tener uno.

Ser gay está bien.

Liz Dale (2008) escribió un libro significativo con una recopilación de 21 historias de ECM de la comunidad gay. Este magnífico libro muestra que las personas gay también tienen ECM felices, en las que también son acogidas por la Luz. Demuestra que ser gay no es un problema en absoluto para el mundo de la Luz. Aportó más evidencia de este tipo en su nuevo libro, coescrito con Kevin Williams (2022).

En su recopilación de historias de ECM, dos de particular importancia destacan en este capítulo. La primera historia trata sobre Andre, técnico de sonido e iluminación y músico de rock & roll. Su ECM se asoció con una ruptura del apéndice. Durante su revisión de vida, escuchó las palabras: «Todos los seres humanos son buenos». También comprendió que todas las personas están conectadas, y que siempre lo hemos estado y siempre lo estaremos. Luego, una vez más, su vida fue revisada:

Esta vez pude ver que todas mis dudas se centraban en mi valor para Dios, ya que era gay. Fue entonces cuando me armé de valor para preguntarles a estos seres algo que presentía que esperaban que les preguntara. Pregunté: "¿ Es...?" ¿Está bien ser gay? Y se rieron y dijeron: " ¿Quién crees que creó a los gays? ". Recuerdo que nos reímos durante lo que parecieron mil años. (p. 32)

En la segunda historia, el sujeto tuvo una comunicación telepática con un buen amigo fallecido pocos días antes. Este amigo se había vuelto influyente y parecía saber del distanciamiento del sujeto con su familia y amigos. Esto se debía a que el sujeto tenía muy baja autoestima debido a su desaprobación de su orientación sexual. Dijo:

[Mi buen amigo] me indicó con gran énfasis que siempre debía celebrar y honrar abiertamente mi sexualidad como un don precioso de Dios. Esta fue una revelación sorprendente para mí, especialmente después de una vida de secretismo, miedo y culpa. (págs. 101–102)

Además de las ECM del libro de Liz Dale, se pueden encontrar otras ECM en las que la persona que las experimenta descubre que, en el otro lado de la vida, no hay ningún resentimiento hacia las personas homosexuales. Un caso de este tipo (ECM de Kerry B , sin fecha) es el de una mujer que sufrió una reacción alérgica. Sintió que se le cerraba la garganta y no podía respirar.

Su esposa rogó a los paramédicos de la ambulancia, que estaban justo afuera de su apartamento, que entraran a ayudarla. Mientras tanto, la mujer con la reacción alérgica estaba teniendo su ECM. Dijo:

Fui succionado por el aire por una fuerza poderosa, pero a la vez suave y amorosa. Era como si estuviera en un ascensor cósmico.

Su rápido viaje fue frenado por sus abuelos, quienes surgieron inesperadamente del vacío para pedirle perdón. Ahora comprendían que ser gay no es fácil, sobre todo si creciste en el estricto Cinturón Bíblico del sur de Estados Unidos, un territorio estrictamente religioso. El sujeto que tuvo una ECM había vivido con un miedo terrible durante años y había sido víctima de crímenes de odio, entre otras cosas.

Le hizo bien que sus abuelos reconocieran todo eso, pero ella quería continuar su viaje a alta velocidad, porque a lo lejos vio la Luz que la atrajo.

Al llegar, vio con asombro que era Dios. Recibió una revisión de su vida, que incluía sus sentimientos lésbicos. Se preguntó cómo podría estar con Dios, pues siempre le habían enseñado que Dios arroja a los homosexuales al infierno, pues son una abominación. Con absoluta humildad, preguntó:

Soy gay ¿aun me amarás?

En respuesta, fue acogida en un amoroso abrazo divino y llevada a través del universo en un feliz vuelo. Entonces Dios reafirmó con humor y acento sureño:

Eres mi hijo. Te amo. Te amo. Te amo.

Y entonces, "¡Vayan por ellos!", como si Dios fuera un entrenador que devolvía a una jugadora al campo. Poco después, estaba de vuelta en su cuerpo. Las enfermeras habían logrado traerla de vuelta.

 

Capítulo 8. ECM angustiosas.

Al comienzo de este capítulo, es fundamental aclarar un par de cosas, ambas conclusiones derivadas de investigaciones. En primer lugar, es erróneo pensar que las experiencias de miedo solo les ocurren a las personas "malas" y las experiencias celestiales solo a las personas "buenas". En segundo lugar, los términos "bueno" y "malo" no se aplican al otro lado de la vida. Estos términos pertenecen a nuestra Tierra y fueron creados por los humanos para evaluar a los demás o a sí mismos.

Existe mucha información sobre las ECM placenteras, pero mucha menos sobre las ECM angustiosas. Bruce Greyson y Nancy Evans Bush tardaron nueve años en reunir a 50 personas para un estudio de casos angustiosos. Analizaron sus datos y observaron tres tipos distintos de experiencias. Estos tres tipos todavía se utilizan para clasificar las ECM angustiosas.

1. El primer tipo consiste en experiencias casi idénticas a las felices, pero en lugar de tener sentimientos maravillosos, quienes experimentan ECM experimentan todo como algo terriblemente fuera de control.

2. El segundo tipo consiste en experiencias en las que los que experimentan ECM tienen la sensación de estar solos en un vacío oscuro y eterno donde son hiperconscientes de estar eternamente aislados.

3. El tercer tipo consiste en experiencias en las que quienes experimentan ECM se encuentran en un entorno absolutamente desagradable o incluso infernal (Greyson y Bush, 1992).

Me gustaría recomendar varios libros que arrojan luz sobre las ECM angustiosas. Se trata de "Blessing in Disguise" (Bendición disfrazada), de la médica de familia Barbara Rommer (2000), y dos libros de Nancy Evans Bush: " Dancing Past the Dark" (2012) y "Reckoning" (2021). Rommer sugirió un cuarto tipo de experiencia angustiosa en la que la revisión de la vida causa gran angustia a quien la padece. No obstante, Bush incluyó en su primera categoría estas ECM, por lo demás placenteras, con una revisión de la vida cargada de culpa.

Rommer (2000) entrevistó a más de 300 personas que experimentaron ECM, de las cuales un subconjunto no revelado consistió en ECM angustiosas. Lo interesante del libro de Rommer es que sugirió que las experiencias angustiosas pueden ser beneficiosas para quienes las experimentaron, permitiéndoles expandir su consciencia y abrirse a verdades superiores. Citó cambios en creencias, comportamientos y valores que han mejorado la vida de quienes las experimentaron. También mencionó los dones psíquicos y espirituales que estas personas obtuvieron de su experiencia (véase también el capítulo 12 sobre las secuelas). Por eso, denominó estas experiencias como bendiciones disfrazadas. Sin embargo, estos cambios también se observan entre quienes tuvieron experiencias felices, y la pregunta aún persiste: ¿por qué la experiencia tuvo que ser angustiosa?

Otro comentario importante en el libro de Rommer (2000) es que una persona "mezquina" no necesariamente tiene que tener una experiencia aterradora o infernal, ni una persona gentil y amable necesariamente tendría una feliz; Bush (2012, 2021) llegó a una conclusión similar. Rommer afirmó que todos podrían tener una ECM angustiante. También creía que la programación negativa durante la infancia, o una mentalidad angustiada o incluso temerosa justo antes de la experiencia, puede contribuir a que una ECM sea angustiante. También creía que quien la sufre determina inconscientemente las imágenes que se producen en las ECM angustiantes. M. K. McDaniel (2020) llegó a la misma conclusión basándose en su ECM angustiante (véase más adelante en este capítulo).Estoy de acuerdo con Rommer y McDaniel y creo que, hasta cierto punto, el contenido de una ECM está hecho a medida de quien la experimenta (véase también el Capítulo 3).

En comparación, Bush (2012, 2021) optó por atenerse únicamente a los hechos que encontró en su extenso estudio sobre las ECM angustiosas. Me gustaría compartir cinco de ellos aquí.

La gran mayoría de las ECM reportadas son placenteras o mejores, pero hasta una de cada cinco puede producir uno de los tres tipos de ECM angustiosas, con intensa soledad, pánico, desesperación, culpa o incluso puro terror.

• Al igual que ocurre con las ECM placenteras, las angustiantes pueden afectar a personas de todos los ámbitos de la vida.

• Las ECM no son estáticas y pueden cambiar “de desagradables a placenteras o, con menos frecuencia, al revés”.

• Las experiencias angustiosas se sienten tan reales como las felices.

• Y, en mi opinión, el hecho más importante, uno que Rommer también concluyó: no hay evidencia de que las experiencias angustiosas le sucedan sólo a “malas personas”.

El concepto de "malas personas" es complejo, ya que está influenciado, por ejemplo, por la moral o la religión vigentes. Tendemos a pensar que las "malas personas" son aquellas que tienen convicciones inapropiadas o muestran un comportamiento inaceptable, como el asesinato o el suicidio. Pero incluso las "malas personas" pueden tener ECM felices. Dannion Brinkley (2008) es un ejemplo de lo que muchos llamarían una persona "mala". Mató personas, pero aun así tuvo una ECM feliz. Vea su historia más adelante en este capítulo, donde también puede encontrar más información sobre las visiones pacíficas y reconfortantes en el lecho de muerte de los presos de la Penitenciaría Estatal de Angola, Luisiana. Estos casos sirven como una indicación adicional de que las personas "malas" pueden tener experiencias felices al morir. En otras partes de este libro hay citas de ECM felices de personas que intentaron suicidarse. Por el contrario,Hay ejemplos de personas “buenas” que tuvieron una experiencia angustiosa, por ejemplo, el chico de 14 años (Anónimo, 2004, 4 de marzo, 20:58) y M. K. McDaniel (2020), como se analiza a continuación.

Algo que he aprendido de las personas que han tenido ECM es que las nociones de "bueno" y "malo" son términos terrenales que carecen de significado en el más allá. Por lo tanto, debe haber otra razón por la que ocurren las ECM angustiosas.

Los chicos “malos” se sienten felices.

Aldeas todas destruidas.

En su asombroso libro, Salvados por la Luz , Dannion Brinkley (2008) describió su revisión de vida (véase también el capítulo 6). La describió como

... nada agradable. Desde el principio hasta el final, me enfrenté a la repugnante realidad de que había sido una persona desagradable, egocéntrica y mezquina. (p. 9)

Resumió lo que consideraba desagradable. En su infancia, se vio torturando a otros niños, robándoles sus bicicletas, haciéndoles la vida imposible y participando en innumerables peleas. Más adelante, se vio involucrado en una agencia gubernamental donde ejecutó a personas en el extranjero consideradas enemigas del gobierno estadounidense. Junto con otros, hizo estallar un hotel con 50 personas dentro, con el único objetivo de matar a un solo funcionario. También añadió:

Mientras estaba en acción, había visto mujeres y niños asesinados, pueblos enteros destruidos, sin ninguna razón o por razones equivocadas. (p. 16)

Durante la revisión de vida en su ECM, sintió el dolor que había infligido a otros y vio la verdad sobre sí mismo: que no le importaba lo que sintieran los demás. Se consideraba una persona verdaderamente inútil (p. 19).

Sin embargo, aparte de la revisión de vida, que fue absolutamente terrible, su ECM fue maravillosa, en la que conoció a un Ser de Luz que lo inundó con una abundancia de Amor.

Al contemplar al Ser de Luz, sentí como si me tocara. Desde ese contacto, sentí un amor y una alegría que solo se pueden comparar con la compasión sin prejuicios que un abuelo siente por su nieto. (págs. 24–25)

Esta ECM muestra que las personas “malas” pueden tener ECM maravillosas.

Visiones placenteras en el lecho de muerte para delincuentes.

Un estudio muy interesante de Marilyn A. Mendoza (sf) se centró en las visiones en el lecho de muerte de prisioneros con cadena perpetua.

La Penitenciaría Estatal de Angola, Luisiana, es una prisión de alta seguridad en Estados Unidos para delincuentes peligrosos que a menudo cumplen cadena perpetua sin posibilidad de liberación. En otras palabras, estos presos no son precisamente "niños mimados". Muchos los describen como "personas malas": asesinos, violadores, narcotraficantes y ladrones armados.

Una cadena perpetua generalmente implica prisión hasta la muerte, y como ocurre fuera de la prisión, estos convictos frecuentemente fallecen de enfermedades terminales. Por lo tanto, existe un hospicio en la prisión que, curiosamente, está dirigido por los reclusos.

Las entrevistas con estos empleados del hospicio mostraron que, a lo largo de los años, 26 de los 29 empleados habían presenciado a pacientes que habían experimentado visiones en el lecho de muerte. Solo uno de esos muchos casos fue claramente angustiante. Todos los demás casos...había sido agradable, en el que los convictos moribundos habían visto ángeles, hermosos jardines y puertas, la Luz y parientes fallecidos que estaban listos para recibirlos y acompañarlos en su transición de esta vida a la siguiente.

Mendoza (sf) concluyó que las visiones placenteras en el lecho de muerte eran tan comunes entre estos criminales graves como entre el resto de la población estadounidense. Descubrió que el 98% de las visiones en el lecho de muerte en su estudio fueron pacíficas y reconfortantes. Una vez más, vemos que las personas "malas" pueden tener experiencias hermosas. Por supuesto, las visiones en el lecho de muerte no son ECM; a diferencia de quienes las experimentan, quienes las experimentan suelen permanecer conscientes, no suelen reportar haber abandonado sus cuerpos y proceden a morir. Sin embargo, las visiones en el lecho de muerte están estrechamente relacionadas con las ECM; ambas experiencias comparten muchas imágenes similares de entidades y entornos espirituales y suelen ser profundamente placenteras, independientemente de las acciones terrenales de quien las experimenta.

La gente buena recibe el infierno.

Un adolescente de 14 años atacado por entidades malignas

En el capítulo 1 describí el caso de un niño que estaba en el dentista cuando todo salió mal. Luego tuvo una experiencia placentera en el vacío. A continuación, se presenta un ejemplo de una persona con una ECM angustiosa en el vacío.

Este niño de 14 años (Anónimo, 4 de marzo de 2004, 20:58) trabajaba como instructor de natación en un campamento de Boy Scouts. Durante una clase de natación, uno de los scouts más jóvenes sufrió un ataque de pánico. El joven instructor saltó al agua para salvarlo, al principio con éxito, ya que el joven scout se dejó arrastrar por el agua hasta la orilla. Pero de repente, el scout sufrió otro ataque de pánico, revolviéndose violentamente, lo que le provocó un fuerte golpe en la cabeza al instructor, quien perdió el conocimiento.

Está negro. Absolutamente negro. No veo nada. No hay nada. Me esfuerzo por ver algo, cualquier cosa. No me gusta. Tengo miedo. Siento que estoy en un universo desprovisto de todo. Es vasto e infinito, total y absolutamente vacío. No hay nadie más, nada más. Estoy solo. No hay persona, ni vida, ni muerte, ni amor, ni odio, ni salvación. Solo hay un vasto vacío excepto... para mí. La soledad abruma mis sentidos. Agradecería cualquier cosa. Por favor. Por favor. No puedo quedarme aquí.

Entonces, de repente, vio algo. Escuchó atentamente y observó la oscuridad. Se preguntó si su mente lo engañaba. Entonces oyó una risa, pero no supo si le gustaba el sonido. Era más como si alguien se riera de él. Entonces vio un pequeño punto de luz que parecía acercarse a medida que la risa se hacía más fuerte.

No puede ser... es una calavera y se ríe. No es una buena risa. Es siniestra... Habla y me dice que estoy allí para siempre, con él. Empiezo a oír a otros hablar. Se acercan con voces conspirativas que son malvadas y amenazantes... Tengo miedo. Siento su presencia, rodeándome. Estas son criaturas de la oscuridad... ¡Ay! Algo me arañó y me muerde como si me probaran. Entonces, se sueltan sobre mí arañando, arañando y mordiendo. Siento como si me estuvieran arrancando la piel. Dios, por favor ayúdame. Los ataques continúan. Entonces recuerdo que un anciano párroco me dijo que el mal no puede permanecer en la presencia de Dios. Clamo: Señor, Jesucristo, ayúdame por favor. Ayúdame. Los ataques disminuyen y pronto se detienen por completo. Las entidades oscuras del mal se escabullen en la oscuridad. Estoy solo de nuevo en el vacío negro, pero me siento aliviado.

Todo terminó bien porque se acercaba otra mota de luz. Al principio, temió que la calavera y esas otras entidades malignas hubieran regresado, pero eran burbujas multicolores. Y había una en la que vio a un ángel guardián.

Pasó muchos años reflexionando sobre su angustiosa ECM, preguntándose una y otra vez por qué un niño de 14 años tendría una experiencia que implicara un encuentro con criaturas tan malvadas. Dijo:

Después de todo, ¿qué tan mala puede ser la vida de un chico de catorce años como para merecer ese trato?

Concluyó que era porque aún no había llegado su hora y, por lo tanto, nadie de su familia o amigos, ya fallecidos, podía saber que debían darle la bienvenida. Pensaba que esto lo convertía en presa fácil de las "entidades del lado oscuro".

Una mujer común y corriente en el infierno.

M. K. McDaniel (2020) escribió un extenso libro sobre su angustiosa ECM: "Misfit in Hell to Heaven Expat" . Creo que fue muy valiente al escribir este fascinante libro. Al incluir una descripción de su vida antes y después de su ECM, su historia demuestra que es una mujer común y corriente; ciertamente, no alguien de quien se esperaría una ECM angustiosa.

Estaba conectada a un respirador artificial tras una insuficiencia pulmonar y, de repente, se encontró en un entorno infernal. Lo describió como «escenas de destrucción épica», «figuras oscuras que se movían como cangrejos entre las ruinas humeantes, silbando como serpientes» y «humanos en ruinas, meros huesos cubiertos de harapos» (págs. 313–314).

Estaba decidida a salir de allí y gritó que no se rendiría. Describió varias escenas aterradoras. En una, fue ridiculizada sin piedad; en otra, presenció abortos realizados de forma industrial.Atacada por una turba que le dijo que tenían sida, y que ahora ella también lo tenía. Finalmente, se encontró formando parte de un grupo de mujeres miserables que estaban a punto de ser prostituidas.

Le preguntó a la líder del grupo, la "Señora", si no era un día muy triste. La Señora respondió que era Navidad en la Tierra, que siempre era la época más triste del infierno. Esta respuesta inspiró a McDaniel a cantar un villancico religioso, y las demás mujeres comenzaron a cantar con ella. Esto enfureció a la Señora, pero McDaniel cerró los ojos y continuó cantando. Justo cuando iba a decir la palabra "Jesús" en la canción, se encontró repentinamente en un lugar donde "se inundó de una abundancia de amor, paz y alegría" (págs. 328, 331).

Ella llegó al cielo.

Más tarde, tras regresar a la Tierra y a su cuerpo, luchó con lo que había experimentado. Ciertamente, no habían sido alucinaciones, porque su experiencia había sido más real que la vida misma.

Tras reflexionar durante mucho tiempo sobre lo que había vivido y, en cierto sentido, afrontar su angustiosa experiencia, comenzó a comprender que los diversos componentes de su experiencia se relacionaban con sus miedos y experiencias dolorosas. Mientras intentaba asimilar su experiencia traumática, le preguntó a Dios qué debía hacer para evitar el infierno, y con el paso de los meses escuchó varias palabras que, juntas, formaron la frase que ahora lleva como mantra: «Sé amorosa, amable, misericordiosa, indulgente, alentadora, agradecida, sin prejuicios y útil» (p. 461–463).

Sin castigo.

En la cultura occidental tendemos a ver las ECM angustiosas como castigos, pero hay mucha evidencia que contradice esta idea.Suposición. Ya he dado algunos ejemplos. La evidencia demuestra que las ECM placenteras pueden ocurrir a personas consideradas "malas" y que las ECM angustiosas pueden ocurrir a personas "buenas". Por eso debemos alejarnos de una explicación basada en la culpa y el castigo y buscar una explicación diferente.

En sus libros, Nancy Evans Bush (2012, 2021) sugirió que las experiencias angustiosas pueden surgir del inconsciente colectivo. Este término, acuñado por el psiquiatra austriaco C. G. Jung, se refiere a la mente inconsciente, poblada por una multitud de instintos y arquetipos. Durante sus ECM, las personas podrían verse confrontadas con algunas de las desagradables imágenes arquetípicas (humanas universales) que surgen de este acervo colectivo. Sufren entonces una ECM completamente angustiosa, o pueden tener una ECM feliz, pero presenciar escenas angustiosas en las que no participan.

Las imágenes angustiosas de este conjunto colectivo de instintos y arquetipos podrían surgir porque quien las experimenta ya tiene sentimientos de culpa o indignidad, o quizás debido a su crianza, a una formación religiosa que enfatizaba el pecado y el castigo, o al miedo que activa imágenes angustiosas del inconsciente colectivo. Y quizás las imágenes angustiosas surjan de forma aleatoria.

Del mismo modo, en las ECM felices, las imágenes también podrían provenir del mismo fondo inconsciente colectivo de instintos y arquetipos. Esta idea no resulta tan extraña considerando que el contenido de las historias de ECM difiere enormemente. La razón podría ser que, hasta cierto punto, nuestra consciencia recupera imágenes familiares y, por lo tanto, colorea la ECM, o al menos la parte inicial. La coloración puede tomar varias direcciones: feliz, aterradora o una combinación de ambas. Aunque las ECM aparentemente se desarrollan fuera del control de quien las experimenta, a veces parecen tener cierto grado de influencia sobre sus experiencias, como se ilustró con algunos ejemplos.En el capítulo 3. Por lo tanto, aunque quienes experimentan pueden, a veces, acceder sin darse cuenta, a aspectos angustiosos del inconsciente colectivo, también pueden tener la capacidad de cambiar sus circunstancias angustiosas. Esto puede ocurrir especialmente si su intención se dirige a lo benévolo y amoroso.

Por lo tanto, en mi opinión, necesitamos analizar las imágenes de las ECM, tanto placenteras como angustiosas, y llegar a la esencia. ¿Y cuál es la naturaleza de esa esencia? La evidencia de las ECM indica un amor incondicional (véase el capítulo 4) y una profunda interconexión (véase el capítulo 9).

En cualquier caso, debemos dejar de ver la ECM angustiante como un castigo por un mal comportamiento. En palabras de Nancy Evans Bush (2021), las ECM angustiantes deberían entenderse más bien como «pasos de desarrollo que se deben superar en el camino hacia el crecimiento personal» (p. 117).

Necesitamos intentar comprender el origen de las imágenes angustiosas. Quizás la pregunta debería ser: "¿Qué causó estas imágenes?". Por supuesto, esta pregunta se aplica igualmente a las ECM felices. Desde esta perspectiva, las ECM felices también se considerarían como los mismos pasos de desarrollo necesarios para el crecimiento personal. Citando a Bush (2016):

Ninguna experiencia cercana a la muerte ni ninguna otra experiencia espiritual está completa hasta que se integra, se incorpora de forma significativa a la vida y la comprensión de su portador. (Ubicación 1497)

Este proceso de integración es arduo. Tener una ECM no es fácil, tanto en las ECM placenteras como en las angustiantes. Pero, especialmente, quien la ha experimentado debe confrontarla e intentar descubrir el origen de las imágenes angustiantes y cómo usarlas para crecer espiritualmente.

En cualquier caso, el mensaje aquí es alejarse de la explicación de la culpa y el castigo, porque cada vez hay más evidencia que indica que esta explicación, muy humana y moralista, es incorrecta.

Lejos de ser agradable.

Reseña de Una vida dolorosa.

René Jorgensen (2007) realizó una revisión de vida (véase también el capítulo 6 sobre revisiones de vida) y la encontró extremadamente angustiante. Por lo tanto, podría clasificarse como una experiencia de Tipo 1 (véase la explicación en la introducción de este capítulo). Vio lo que había hecho a otros a lo largo de su vida en la Tierra. Además, también vio toda la agonía, todo el dolor y el sufrimiento del mundo, a todas las personas que viven en la pobreza y la miseria, y todos los conflictos y guerras. Escribió:

Esto fue demasiado para mí. Mi corazón no podía contener todo el dolor del mundo. En una sensación extremadamente intensa, sentí que mi corazón se partía en dos, y el dolor era tan fuerte que no podía soportarlo. (pág. 7)

Intento de suicidio.

La primera vez que este hombre tuvo una ECM, fue una experiencia parcial. Ocurrió en el contexto de un accidente de motocicleta. Consultó a médicos que intentaban mantenerlo con vida. No vio ninguna luz, pero se sintió en paz, y luego perdió el miedo a la muerte. Más adelante en su vida, tuvo muchos problemas familiares, incluyendo su divorcio y, consecuentemente, la pérdida de su familia. Esto le afectó enormemente. Una noche, mientras bebía, empezó a pensar en todo lo sucedido.

En un momento de su contemplación, cogió un arma y se disparó en la cabeza.

Desde entonces, recibí la visita de una señora; aún no sé quién era. No era de la vida real. Me dijo que no debía estar allí, que lo que había hecho estaba muy mal y que lo iba a arreglar... Luego pasé las dos semanas siguientes en una especie de pesadilla, viviendo con cosas horribles. A diferencia de la primera vez que morí, me dijo que si alguna vez volvía a quitarme la vida, esto es con lo que tendría que vivir por la eternidad. (Anónimo, 30 de marzo de 2004, 21:55)

Es importante añadir que, si bien la angustiosa experiencia de este hombre parecía estar asociada a su intento de suicidio, las investigaciones han demostrado que, en general, quienes intentan suicidarse tienen la misma probabilidad de reportar ECM felices que quienes fallecen por causas naturales o accidentales. Y si bien las investigaciones indican que quienes experimentan ECM por suicidio tienen menos probabilidades que el público general de volver a intentarlo, lo hacen no por miedo, sino porque, en sus ECM, aprendieron que su vida —y toda vida— tiene sentido y propósito; que si buscan escapar de las dificultades de la vida mediante el suicidio, simplemente regresarán en otra vida y retomarán su camino donde lo dejaron; y que las dificultades no se deben evitar mediante el suicidio, sino que se deben superar como oportunidades para el desarrollo espiritual. Algunos de estos principios se ilustran en el siguiente caso.

Matrimonio infeliz y alcohol.

Otro hombre (ECM por suicidio , sin fecha), sumido en el alcoholismo y tras un matrimonio infeliz, intentó suicidarse. Atravesó un túnel a toda velocidad, al final del cual vio una luz. Al mismo tiempo, al mirar atrás, vio su cuerpo desmayado en el suelo de la cocina. Esto le hizo preguntarse si aquello era la muerte.

"¡No!", respondió alguien de algún lugar. Me impactó ver a un ser de increíble belleza, que irradiaba gran amor, compasión y calidez... Me di cuenta de que este increíble ser de luz me leía los pensamientos. "¡No!", repitió. "La muerte no es así. Ven, te lo mostraré". Recordé haber flotado con él hasta una especie de pozo que contenía una escena muy deprimente: un paisaje desprovisto de belleza, desprovisto de vida, donde la gente se arrastraba con la cabeza gacha y los hombros encorvados hacia adelante, con aire deprimido y resignado. Mantenían la cabeza gacha, miraban a sus pies y deambulaban sin rumbo, chocando de vez en cuando, pero seguían adelante. Me horrorizaba la idea de ser arrojado junto a estas almas perdidas y confundidas, pero la voz pareció comprender mi terror y lo alivió con las siguientes palabras: «Este es un infierno que tú mismo creaste. Tendrás que regresar a la Tierra eventualmente y experimentar una nueva vida, enfrentando las mismas dificultades que enfrentaste en esta vida. Permanecerás con estas almas perdidas y confundidas hasta entonces. El suicidio no es una escapatoria».

Se le ofreció una visión panorámica de su vida. Vio varios desenlaces. En el primero, sus hijos sufrirían por su muerte. En el segundo, sobrevivió, pero siguió bebiendo, lo que también afectaría negativamente a sus hijos, quienes también se convertirían en alcohólicos. En el tercer desenlace, dejó de beber y comenzó a actuar como un padre responsable. No sería fácil, pero sus hijos tendrían vidas felices, ocupadas y productivas. Se le permitió retomar su vida.

Escribió que eligió el camino difícil, que no sólo terminaría en un divorcio sino que también pondría fin a su bebida.hábitos. Desde entonces, sus hijos se han convertido en individuos felices, ocupados y productivos.

Una salida.

Adicto al crimen y la violencia.

Las citas de la siguiente ECM provienen de una persona (Anónimo, 10 de julio de 2012) que escribió que, desde los ocho años, fue adicto a sustancias. Desde los 16, necesitó más dinero para satisfacer su necesidad de alcohol y drogas. A esto le siguieron la delincuencia y la violencia, incluyendo más de 30 robos a bancos y varias temporadas en prisión. Escribió que, aunque no era "el ejemplo perfecto de un viaje al cielo", "Dios me perdonó". Un día, tras un consumo excesivo de alcohol, sufrió una hemorragia interna en el hígado y tuvo su ECM.

Mientras mi cuerpo estaba inconsciente, mi espíritu fue enviado al infierno. Fue peor de lo que jamás hubiera imaginado. Además de la incomodidad extrema, no podía pasar un momento sin que alguien me golpeara y me gruñera. Había cajas de arcilla oscura, llenas de calor, del tamaño de un viejo televisor de 27 pulgadas, y las estaban moviendo. Estaba lleno de gente y no se podían distinguir las caras. No podía distinguir si eran blancos, afroamericanos o asiáticos. Simplemente estaban allí. En ese momento comencé a gritarle a Dios que me perdonara. Los gruñidos se hicieron más fuertes, y le pedí al Señor que me permitiera arrepentirme si quería quedarme allí. En ese momento brilló una luz, y me sentí atraído hacia ella.

Estaba en el hospital en el momento de su angustiosa ECM y, dentro de las 24 horas siguientes a su experiencia, se sometió a una cirugía durante la cual tuvo otra crisis médica y una segunda ECM:

Pero esta vez, al morir, una luz gloriosa brillaba, no intensa, sino que casi envolvía mi alma. Ascendía lentamente y nunca me había sentido tan en paz. Simplemente seguía agradeciendo a Dios y alabándolo mientras ascendía. Esto no era un sueño.

Frases que suenan eclesiásticas.

Otra persona valiente que escribió sobre su angustiosa ECM es Howard Storm (2005). En su extraordinario libro sobre este tema, Mi Descenso a la Muerte , describió su angustiosa ECM, a la que llamó su caída al infierno.

En un hospital de París, casi muere por una perforación gástrica. Tras abandonar su cuerpo, se sintió muy confundido. Intentó comunicarse con su esposa, que estaba sentada junto a su cama, pero, por supuesto, ella no lo oyó. Estaba desconcertado. Voces aparentemente amigables lo alejaron de la cama. Debido a la realidad de la experiencia, y a su ateo convencido, no pensó en la posibilidad de estar en el más allá; más bien, pensó que estaba alucinando debido a su enfermedad. Después de un tiempo, las voces se volvieron antagónicas y autoritarias. Una sensación de temor creció en él. Entonces, de repente, se dio cuenta de que estaba en completa oscuridad y comenzaron los insultos. Luego, lo empujaron en la oscuridad. La situación se volvió cada vez más agravante. Empezó a defenderse. Empezaron a morderlo y desgarrarlo, y parecían divertirse mucho.

Estaban jugando conmigo como un gato juega con un ratón. (p. 17)

Describió a las criaturas como “alguna vez humanas”. Dijo que podrían considerarse como: “Las peores personas imaginables, despojadas de todo impulso de compasión. Algunas de ellas parecían capaces de decir a los demás qué hacer, pero no tenía la sensación de que hubiera organización en el caos. No parecían controladas ni dirigidas por alguien. Simplemente, eran una turba de seres totalmente impulsados por una crueldad desenfrenada. (p. 17)”

Explicó en su libro que como no quería recordar y revivir todo el profundo tormento que experimentó, la descripción de su calvario no está completa.

De hecho, mucho de lo ocurrido fue demasiado espantoso y perturbador para recordarlo. He pasado años intentando suprimirlo. Después de la experiencia, cada vez que recordaba esos detalles, me traumatizaba. (p. 18)

También dijo que la experiencia fue mucho peor que cualquier pesadilla, porque parecía más real que estar despierto. Era hiperreal.

Mientras sus torturadores lo rodeaban, oyó una voz, parecida a la suya, que le decía que debía rezarle a Dios. Al principio, pensó que era una idea estúpida, pero tras oír la voz varias veces más, lo intentó. Murmuró algunas frases que parecían de iglesia, e incluso el verso del Juramento a la Bandera de los Estados Unidos que hacía referencia a Dios. Esto enfureció a los demonios, pero aun así se retiraron.

Como recitaba las frases sin sinceridad, la retirada de las horripilantes criaturas era todo lo que podía hacer. Aunque sentía que seguían cerca, estaba solo. Tras reflexionar un rato sobre su miserable situación y su vida egoísta, de la que empezaba a arrepentirse, hizo un esfuerzo genuino por orar. Le rezó a Jesús, porque era la primera persona que le venía a la mente. Al fin y al cabo, antes de convertirse en un ateo convencido, había sido criado como cristiano. Entonces, a lo lejos, en la oscuridad, vio un puntito de luz que se acercaba rápidamente. Cuando estuvo cerca, vio que era el indicado.Había estado llamando a Jesús, quien finalmente lo sacó de su miserable posición y lo llevó a la Luz.

Una segunda capa de seres de luz.

Este relato proviene de una de las ECM más antiguas y mejor documentadas, descrita en el libro Return From Tomorrow . En 1943, durante la Segunda Guerra Mundial, George G. Ritchie (2004) era soldado. Comenzó su entrenamiento en Texas, donde posteriormente estuvo expuesto a tormentas de polvo, fuertes lluvias y una temperatura de –12 °C (10 °F). Empezó a sentir dolor de garganta y pronto desarrolló fiebre que llegó a los 39 °C (102 °F). A los pocos días, la fiebre llegó a los 41 °C (106,5 °F). Posteriormente, se le diagnosticó neumonía lobular doble.

Su ECM comenzó cuando creyó despertar. No había nadie a su alrededor. Salió al pasillo. Vio acercarse a un sargento e intentó llamar su atención. El sargento siguió caminando como si no hubiera visto a Ritchie, y este tuvo que apartarse de un salto.

Entonces todo se volvió aún más extraño. En cuestión de días, Ritchie debía presentarse a estudiar en la Facultad de Medicina de Virginia para convertirse en médico registrado en el Programa de Entrenamiento Especializado del Ejército. Ansiaba ir allí desesperadamente, así que salió corriendo. Sin darse cuenta, se encontró "volando" hacia el este a unos 150 metros de altura. Quedó completamente sorprendido por su altísima velocidad y por poder alcanzarla por sí solo sin estar en un avión.

Encontró el camino de regreso a su cuerpo, pero estaba confundido por la separación entre su ser pensante y su parte física. Entonces comenzó a ver la Luz, cuyo brillo aumentó. Parecía provenir de la nada, pero brillaba en todas partes a la vez. Era como un millón de lámparas, y entonces vio que no era una luz, sino un hombre. Una certeza asombrosa lo invadió al oír: «Estás en la presencia del Hijo de Dios». Supo de inmediato que este hombre lo amaba incondicionalmente. Hizo un análisis de vida muy detallado (véase el capítulo 6).

Jesús lo llevó a un recorrido por situaciones y entornos infernales. Al principio, a Ritchie le mostraron personas que ya habían muerto, pero que parecían no aceptarlo. Se sentía un poco como el sargento que no había visto a Ritchie en el pasillo, solo que estas personas parecían estar atrapadas en una situación autoinfligida. Uno seguía con ansias de cigarrillos, otros con ansias de alcohol, mientras que otro aún quería ejercer influencia sobre las personas que había dejado atrás después de su muerte. Ritchie recordó de repente una frase de la Biblia: "¡No os hagáis tesoros en la tierra! ¡Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón!".

En segundo lugar, Ritchie vio a personas que, según él, se habían suicidado. Parecían estar encadenados a las consecuencias de su acto. Algunos suplicaban perdón, pero, por supuesto, sus seres queridos no podían oírlos ni verlos porque estaban muertos.

Finalmente, lo llevaron a un lugar donde no había personas vivas. Allí presenció una escena espantosa. La llanura estaba repleta, incluso abarrotada, de hordas de seres fantasmales desencarnados. Observó con atención si había personas vivas entre las hordas, pero no vio a ninguna.

Todas estas miles de personas aparentemente no eran más sustanciales que yo. Y eran los seres más frustrados, más enojados y más miserables que jamás había visto... por todas partes, la gente estaba enfrascada en lo que parecían peleas a muerte, retorciéndose, golpeándose, arañándose... Y entonces noté que aparentemente nadie salía herido... Y los pensamientos que se comunicaban con más frecuencia tenían que ver con el conocimiento, las habilidades o la formación superior del pensador. (págs. 63–64)

Entonces comprendió que no era mejor que esos fantasmas, porque tenía pensamientos similares de superioridad:

Éste era yo, mi tono de voz: el justo, el premiado, el feligrés. (p. 65)

Ritchie también notó que aquí no había condenación por parte de quien estaba a su lado. Sintió que tampoco era su deseo ver a ninguno de los otros desafortunados en su estado de desdicha. Se preguntó cómo era posible que los difuntos no pudieran ver el increíble resplandor de la Luz de Jesús. Pero entonces recordó que cuando desesperadamente deseaba ir a la Facultad de Medicina de Virginia, tampoco pudo ver a Jesús. Estaba demasiado preocupado por su deseo. Entonces se preguntó: «Quizás no fue Jesús quien los abandonó, sino ellos quienes huyeron de la Luz que apareció en su oscuridad».

Entonces se dio cuenta de que había una segunda capa sobre el aterrador plano que veía. Seres de luz flotaban sobre toda aquella lucha.

Lo único que vi con claridad fue que ninguno de estos seres que discutían en la llanura había sido abandonado. (p. 66)

Los seres de luz habían estado allí todo el tiempo, tal como habían estado allí con el difunto que había visto anteriormente. Dijo que había...

Los había estado viendo todo el tiempo, sin jamás registrar conscientemente el hecho, como si Jesús pudiera mostrarme en cualquier momento solo lo que yo estuviera listo para ver. (p. 67)

Ritchie concluyó que somos nosotros quienes, a través del apetito físico, la preocupación terrenal y el egocentrismo, creamos la separación que nos ciega y no podemos ver la Luz.

No quiero estar allí.

Una tarde de verano, siendo niña, Marijke Redant (sf) salió en bicicleta. Iba a toda velocidad, pero de repente los frenos se bloquearon y volcó. Tras golpearse la cabeza contra el asfalto, la luz se apagó. De repente, se encontró en un vacío oscuro, aterrador. Decidió que no estaba sola allí.

Había una entidad allí tan morbosa, tan asesina, tan aterradora, que se me pasó por la cabeza que no quería estar aquí. Y en el momento en que piensas en esa otra dimensión: «No quiero estar allí», sigues adelante. Abandonas ese espacio donde estás.

Luego volvió a haber luz y el resto de su experiencia fue maravillosa.

Otras visiones del infierno.

Criaturas en una sala de espera.

Al pasar por esa zona oscura, fue como si el ser de luz que me acompañaba despertara a estas criaturas. Parecía que habían estado dormidas. También podría ser que estuvieran en una especie de sala de espera. Al vernos, corrieron hacia mí. Al principio me asusté, pero el ser de luz que me sostenía de la mano me dijo que no tuviera miedo y que mirara. De hecho, se acercaron, muy cerca, pero no pudieron tocarme. Sabía que si querían, podrían venir con nosotros y estar en la luz. Pero no quisieron. O tal vez aún no estaban listos. (Coppes, 2011, p. 120)

Cielo multidimensional.

Me di cuenta de que el «cielo» no era una masa homogénea de existencia, sino un plano multidimensional de existencias estratificadas... (Suleman, 2004, p. 27)

Sin embargo, era plenamente consciente de que el «infierno» era sin duda un estado mental que existía para muchos. Existía principalmente para quienes no creían en un poder superior a ellos ni se sentían personalmente responsables de sus actos. (p. 28)

Al mirar hacia abajo, a la izquierda, vi varios grupos de individuos ensimismados, completamente absortos en su mundo cuatridimensional de formas de pensamiento creadas. Parecían completamente ajenos a mi existencia y a la existencia de un reino superior de realidad aparte del suyo. Estaban atrapados en su pequeño mundo y cielo, creados por ellos mismos, atascados en sus rígidas creencias sobre la "realidad" y completamente inconscientes de la realidad mayor que existía fuera de sus esferas de existencia. Desde mi perspectiva, simplemente estaban dando vueltas en círculos, persiguiendo incesantemente sus ilusiones de fama, poder, grandeza y gloria, y los ideales utópicos de su "paraíso" autoconstruido. (p. 33)

Libre para elegir.

Aunque Deirdre DeWitt Maltby (2012) tuvo una ECM maravillosa, en su libro escribió algo interesante sobre la diferencia entre la luz y la oscuridad:

Quizás exista algún tipo de juicio divino, pero no me lo mostraron. Solo me hicieron consciente de que cada persona es libre de elegir dónde quiere estar su yo interior. Seguimos siendo amados pase lo que pase.Pero la existencia que viviremos reflejará el nivel de luz y comprensión que elijamos desarrollar en nuestra vida terrenal. Podemos elegir vivir en un punto intermedio entre la brillante luz de la comprensión total y la oscuridad absoluta de la ignorancia, con todas las capas inexplicables que se interponen. (págs. 51–52)

No hay purgatorio ni infierno.

Las citas finales de este capítulo me parecen muy interesantes. Son de Chris Carson y son muy relevantes para las ECM angustiosas. Están tomadas del libro When Ego Dies (Corcoran, 1996, pp. 33–38). La historia también se puede encontrar en el libro de Liz Dale (2008, p. 11) sobre las ECM de 21 personas homosexuales.

A los 26 años, Chris Carson estaba muy involucrado con el alcohol. Una noche, mientras conducía, pensó en su vida, en la mala relación con su padre, en ser gay y en su mayor valor muerto que vivo. Se convenció de lo inútil que era su vida. Entonces se dio cuenta de que su seguro de vida valía más que su vida. Sollozando en el asiento del conductor, vio una barrera de hormigón en la autopista y decidió girar el volante y estrellarse contra ella lo más rápido posible.

Después de la colisión quedó oscuro por un rato, pero luego terminó en un túnel oscuro.

Entonces me rodeó una luz tan intensa que podía sentirla. No podía mirarla, simplemente me invadió. Sentí un enorme amor y bienestar, una paz, por así decirlo. Tenía una sensación de omnisciencia, de saberlo todo. Sentía que todo estaba bien, como debía ser. Todo tenía un propósito... Había una comprensión absoluta, un amor absoluto, una paz absoluta. (Corcoran, 1996, p. 35)

Aunque no era católico, recibió una explicación del infierno y el purgatorio. Los dos relatos de la experiencia de Carson en los dos libros mencionados contienen una contradicción: en un caso, una referencia al «cielo», en el otro, al «purgatorio». Así que le pregunté cuál era la correcta, y respondió claramente: «Ni purgatorio ni infierno». Por lo tanto, la cita correcta es:

Escuché que realmente no hay purgatorio ni infierno. Quienes se van demasiado pronto [es decir, se suicidan, como el suyo] o lastiman a otros pueden (¿deben?) observar el efecto que sus acciones tienen en los demás... Observar los resultados puede ser doloroso, lo entendí, pero no lo entendí como algo obligatorio. Simplemente lo entendí: no hay purgatorio ni infierno. Los buenos también pueden observar. (Corcoran, 1996, p. 35)

Comprendió que tenía planes para su vida, los cuales había afectado con su suicidio. Tenía que regresar porque tenía mucho que hacer. Dijo que partió de ese otro mundo al oír las palabras: «Muéstrales el camino». (Corcoran, 1996, p. 36)

En medio de una cirugía de mandíbula, se despertó y sobresaltó a los médicos. Habló sobre su condición:

Mi cara parecía un Frankenstein, dividida entre el labio y la barbilla hasta las orejas, con cortes y heridas por todas partes. Pero estaba en paz. (Corcoran, 1996, p. 36)

Se pueden encontrar mensajes similares en otras ECM, por ejemplo: Me mostraron que no existe el infierno. Todos nos vamos a casa. (Anónimo, 21 de julio de 2012)

Concentraos en el Amor, en la Luz.

Al final de este capítulo, con algunas impresiones sobre las ECM angustiosas, tres conclusiones parecen justificadas. La primera es alejarse de la explicación de que las ECM angustiosas se relacionan con la culpa y el castigo, ya que existe creciente evidencia de que esta explicación es incorrecta.

La segunda es que parecemos tener cierto control sobre nuestra experiencia después de la muerte. Durante sus ECM, algunas personas tenían la capacidad de ir adonde querían o de moldear el entorno en el que se encontraban. Un ejemplo es George Ritchie (véase más arriba), quien ansiaba desesperadamente ir a Virginia, donde tenía una cita, y se encontró volando con mucha prisa, pero sin avión. Se pueden encontrar otros ejemplos en el capítulo 3, donde Nancy Rynes y Ellyn Dye parecieron poder ejercer cierta influencia sobre su entorno.

En particular, en algunas de las ECM angustiosas, la situación mejoró después de que quien la experimentó pidió a Dios, rezó o cantó un villancico religioso. Esto implica que, si uno se encuentra en una situación angustiosa después de la muerte, podría superarla concentrándose en el amor, en el Dios de su religión o en la Luz.

La tercera conclusión es tener siempre presente la implicación más importante de las ECM, como se explicó en el capítulo 4: la noción del amor incondicional para todos y cada uno de nosotros. Incondicional significa sin condiciones: sin importar lo que hayamos hecho en nuestras vidas ni la situación que hayamos creado. El amor incondicional existe para todos, ¡sin excepción! Si hubiera excepciones, el amor no sería incondicional.

Los lectores que creen que las ECM son, en realidad, un primer paso hacia la otra vida pueden confiar en que, con el tiempo, todo saldrá bien para todos. Y, por si fuera poco, el siguiente capítulo respalda la conclusión de que todos somos UNO y UNO con la Luz. Si somos UNO, ¿cómo podría una parte de esa Unidad quedar en apuros?

Capítulo 9. Interconexión con todos y cada uno: Somos UNO.

Sin duda, la característica más importante de las ECM es el enorme e incondicional amor que sienten quienes las experimentan. En el capítulo 4, también afirmé que otra característica fundamental es la profunda interconexión entre todo y todos, que quienes las experimentan han relatado. Un resumen de varios aspectos especiales de las ECM parece indicar este fenómeno de interconexión.

Muchas personas que han tenido ECM han reportado que, en sus ECM, todo el conocimiento estaba disponible libremente, incluyendo respuestas instantáneas a cualquier pregunta que hicieran. Describieron la comunicación con la Luz o los seres de luz como telepática, es decir, directa e instantánea, de mente a mente. Durante sus ECM, el tiempo no fue un obstáculo, y parecía que todo el tiempo ocurría al mismo tiempo. No encontraron barreras físicas, pudieron moverse sin dificultad y pudieron observar cualquier cosa instantáneamente desde todos los ángulos y de diversas maneras. Muchos de quienes experimentaron ECM reportaron sentirse parte de una enorme energía y consciencia. Y, en mi opinión, el aspecto más sorprendente de las ECM es que, durante sus revisiones de vida, sintieron lo que otra persona sintió, como esa misma persona.

Todos estos aspectos parecen implicar que todo está profundamente integrado. Implican que, al llegar al otro lado de la vida, todo el conocimiento es nuestro, todo el tiempo es nuestro y todos los lugares son nuestros. Podemos identificarnos plenamente con las personas que hemos conocido.en la vida y experimentan sus sentimientos como si fueran ellos mismos. Incluso podemos tener este contacto intenso y directo con personas que vivieron mucho antes de nuestra época (véase el ejemplo de Miguel Ángel citado más adelante en este capítulo). Y nuestro vínculo con la Luz y los seres de luz es tan fuerte y directo que, cuando nos comunicamos con ellos, parece como si estuvieran en nuestra mente y conectados directamente.

¿No deberíamos, entonces, concluir que estamos, al menos, muy estrechamente y amorosamente conectados con todo y con cada cosa? De hecho, muchas personas que han tenido ECM hablan de una profunda conexión entre todos y cada uno. Y muchas van más allá. Han concluido que somos uno con los demás y con todo lo demás. Esta unidad y comunión incluye no solo a los humanos, los animales, los árboles, los planetas, las estrellas y galaxias enteras, sino también al mundo de la Luz y a la Luz misma. Todo es UNO.

Vea a continuación las citas que apuntan en esta dirección. Primero, las citas indican que formamos parte de una energía unificada, que estamos fuertemente interconectados y conectados con nuestra fuente o la Luz. Por lo tanto, sería bueno para nosotros alinearnos con la Luz. Luego, las citas transmiten no solo que estamos interconectados, sino que realmente somos el uno al otro. Luego, hay citas que expresan que todos formamos parte de un todo mayor. Y, finalmente, hay citas que nos llevan un paso más allá al afirmar que cada uno de nosotros es, en parte, Dios.

Comprendo que este último punto puede ser un paso demasiado grande para algunos lectores, pero debo ser fiel a las citas de quienes experimentaron. Omitir estas declaraciones y sus implicaciones para todos nosotros haría que mi pintura impresionista de las ECM quedara incompleta e inacabada.

Todo está conectado.

Al igual que la Ley de Conservación de la Energía.

Todo lo que hago influye en todo. Nada se pierde. Es una especie de ley de conservación de la energía. Eso...Por eso no deberíamos hacerles a los demás lo que no queremos para nosotros. Además, lo que enviamos, lo atraeremos. También debemos ser conscientes de nuestros pensamientos, porque creamos con ellos. (Coppes, 2011, p. 165)

Efecto dominó.

Una persona que intentó suicidarse describió el efecto de su intento de la siguiente manera: Mi mente se volvió profundamente consciente del dolor y el sufrimiento derivados de mi decisión de autodestruirme. Comprendí que mis acciones eran como piedras arrojadas a un estanque. Se extendieron en ondas, recorriendo toda la superficie de la tierra, afectándola y cambiándola para siempre. (Futrell, 2003, p. 9)

Interconectado.

Sentí una profunda interconexión y unidad con todo el universo. Ya no temía a la muerte porque era evidente que era ilusoria. (Anónimo, 19 de abril de 2020)

Parte de la misma fuente.

Tras una cirugía, una mujer sufrió una infección y tuvo que regresar al hospital. Al llegar, todo salió mal. Mientras su cuerpo se apagaba, sintió que lo abandonaba.

Miré mis brazos y mi cuerpo inmateriales. Vi la silueta de una forma llena de luz blanca y dorada que irradiaba más allá de las tenues líneas. Como si fuera una estrella que brillaba intensamente en el Cielo. La luz era fluida, iridiscente y se conectaba fácilmente con los ángeles cercanos o a mi lado.Me conecté con las estrellas y la inmensidad del Universo. Formé parte de todo lo existente al mismo tiempo... Vi a las personas conectadas; todas parte de la misma Fuente, pero viviendo experiencias diferentes. Comprendí cuánto de nuestra experiencia se basa en la elección; incluso cuando decidimos morir. Cada experiencia tiene un propósito y nos ayuda en nuestro camino para cumplir lo que vinimos a hacer. No hay correcto o incorrecto, bueno o malo. Son solo nuestras percepciones las que lo hacen de una manera u otra. No existe una única religión verdadera ni un único camino al cielo. Lo que nos habla al corazón individualmente es el camino correcto para nosotros. Todos los caminos conducen de vuelta a la Fuente. (Anónimo, 17 de abril de 2013)

Siempre permaneces conectado con el Todo.

Eres una parte de todo. Una parte del todo. Siempre permaneces conectado a él. Esa parte regresa a ese todo cuando mueres... Pero a veces pienso en qué sucede cuando cruzo esa puerta. Porque no sé si cruzaré esa puerta siendo yo mismo o solo será mi esencia. (Coppes, 2020, p. 145)

Estamos conectados: todos somos uno.

Durante su ECM, René Jorgensen (2007) sintió claramente que todos estamos interconectados y que, de hecho, somos Uno (ver capítulo sobre revisiones de vida):

La esencia y el propósito de la vida eran el amor, pero yo había actuado en contra del amor y, por lo tanto, de mi naturaleza. Era como si me hubiera estado haciendo todo esto a mí mismo: al herir a otros, me había hecho daño a mí mismo. Estamos conectados; todos somos uno. (p. 7)

Alinearos con la Luz.

En su libro, Lee Thornton (2014) escribió que la experiencia la llevó a creer que:

La Luz de la divinidad existe dentro de todos nosotros, y toda discordia surge de un sentimiento de separación de la Luz, y a medida que alineamos nuestras mentes y corazones con ella [la Luz], podemos experimentar sus cualidades en forma de paz, amor, alegría, compasión y bienestar. (p. 181)

Yo soy tú, tú eres yo.

Yo soy el otro y el otro soy yo.

Durante la anestesia previa a su operación, Tetty Pols–Visser (Pols–Visser & Oosterhof, 2010) se sintió mareada. Todo empezó a dar vueltas y una profunda oscuridad la absorbió. Entonces se encontró de pie bajo una luz radiante.

Siento la Luz fluyendo a través de mí, y entonces me invade una sensación que trasciende cualquier otra. Es Amor. Siento el Amor que emana de él, y una paz y tranquilidad infinitas descienden en mí. Me siento completamente perfecto, completamente uno con la Luz y el Amor, y sé que es Dios. Estoy en Dios y Dios está en mí. Somos Uno. Unidad perfecta. Ya no estoy solo. Ya no anhelo nada más. Así que, aquí está. Aquí es donde debo estar. En casa. Por fin estoy en casa. (págs. 74–75)

Después, cuando le contó a su marido lo sucedido, dijo: Recuerdo. Soy la Luz. Soy el Amor. Soy la Vida. (pág. 80)

Más adelante en su libro concluyó: Así como ya no soy un completo desconocido para mí mismo, los demás ya no lo son para mí. Soy el otro y el otro soy yo. Me reconozco en el otro y sé que somos Uno, que cada uno, con su apariencia, a su manera única, expresa un aspecto del Uno. Veo a cada uno en su verdadera forma. Somos hijos de Dios. Dios ha puesto todo de sí mismo en nosotros. Llevamos lo divino en nuestro interior. Esa es nuestra esencia, nuestro verdadero ser. Amor. (págs. 83–84)

Me convertí en ese otro.

Kimberly Clark Sharp (2003) yacía en el pavimento sin aliento ni pulso. Los bomberos intentaban reanimarla. En un momento dado, vio a un hombre inclinarse sobre ella para practicarle respiración boca a boca. Gracias a su tacto, pudo recuperar su cuerpo. Pero también la hizo observar y experimentar lo que les sucedía a ella y a aquel completo desconocido. Por un instante, fue esa otra persona.

Me di cuenta de que lo conocía todo emocionalmente. Podía sentir su nerviosismo e incluso su incomodidad al realizar este servicio íntimo y humano frente a una multitud boquiabierta. Pero fue su compasión, su amor por mí, una completa desconocida, lo que me guió de vuelta a mi cuerpo. (p. 27)

Me convertí en Miguel Ángel.

En su libro, Liz Dale (2008) escribió sobre un hombre que tuvo una ECM en la que conoció a un amigo que había fallecido pocos días antes (véase también el capítulo 3, Fuera de este mundo). Ese amigo, Richard, le enseñó al hombre que tuvo una ECM cómo experimentar y aplicar las cualidades fluidas y no lineales del tiempo a ese extraordinario otro mundo en el que se encontraban. Richard demostró esta habilidad al hacer que el sujeto de la ECM se remontara a la época de Miguel Ángel:

De alguna manera, él conocía mi gran pasión por el artista Miguel Ángel. De repente, para mi asombro, me transporté al tiempo y lugar donde Miguel Ángel pintaba la Capilla Sixtina. Por un instante fugaz, me convertí en Miguel Ángel. La experiencia fue asombrosa, indescriptible. (págs. 100–101)

Otra persona que tuvo una ECM en el libro de Liz Dale dijo: Sabía en mi espíritu que cada persona estaba conectada con todas las demás, que éramos, y yo, parte de los árboles, plantas, flores y océanos vivos. Sabía que todo estaba y está unido en este universo. (p. 119)

Me fusioné con Jesús.

La ECM de Yvonne Sneeden (sf) ocurrió cuando su cuerpo se estaba apagando debido a una angustia emocional extrema, la medicación que tomaba y su deseo de simplemente dejar de vivir. Fue transportada a un lugar que llamó cielo, donde conoció a Jesús, quien la envolvió en su amor. Mientras caminaban por un paisaje magnífico, conversaron. Cuando comprendió que tenía que volver a la vida física, dijo que estaba demasiado cansada y que no podía soportar a tanta gente malvada, egoísta y desleal en la Tierra.

Él le dijo que amaba a toda la humanidad y que quería mostrarle cuánto.

Él tomó mi “corazón” o mi ser, mi identidad, la energía que soy yo, y se fusionó con ella, la mezcló con la suya.Corazón, y por un instante fuimos Uno. Exploté en la Luz misma. Podía sentir todos sus sentimientos de amor; era alucinante: olas de amor, de energía, millones de emociones relacionadas con el amor, luz, poder, amor. Estaba en la presencia del Todo y me fundí con una conciencia tan indivisible que me convertí en él. Era Jesús, igual que Yvonne, sintiendo cada átomo de esta poderosa e ilimitada explosión de amor, por falta de mejores palabras. Se detuvo de repente y, sin una palabra, solo sabiendo, comprendí que mi tiempo con él en el Cielo estaba llegando a su fin y que era hora de regresar a la Tierra.

Ella dijo que el amor del cielo la ha mantenido viva con una alegría completamente renovada por su vida terrenal.

Todo es uno.

Muchos siendo uno y uno siendo muchos.

El todo era el conocimiento colectivo de todos. Comprendí que no había un individuo, solo uno, pero cada experiencia era individual conformando el todo. Este concepto de UNO es tan extraño a cualquier descripción que pueda dar, parece no haber manera de describirlo... Muchos siendo uno y uno siendo muchos, ambos existiendo simultáneamente en el mismo tiempo y espacio. Las experiencias colectivas son conocimiento omnisciente. Todo lo que se ha dicho, escuchado y experimentado. Estas gotas de colores contenían cada experiencia hasta el recuerdo de cada división celular, cada pensamiento. Todas las experiencias eran conocidas a la vez por la consciencia colectiva que era la corriente. Cualquier experiencia podía ser conocida como si fuera una experiencia en primera persona que sucedía en el momento en que sucedió originalmente... Se me mostró una larga lista de experiencias en otros reinos de realidades y en otros mundos. Tiempo después, me di cuenta de que era la revisión de mis vidas pasadas, de todas las existencias de las que había formado parte... Me hicieron saber que existían infinitos reinos de existencia y que todos formaban parte del Uno, la Fuente. (Anónimo, 19 de junio de 2006)

Uno con todos.

Rachel Finch (2019) escribió su ECM en verso porque no podía expresarla de otra manera. Sentía que estaba en armonía con todo.

En este espacio conozco cada estrella por su nombre, Guardo todos los recuerdos jamás creados y Estoy en lo alto, mirando debajo de mí, además de mí y Todo lo que veo es todo. (pág. 46)

Me convertí en todo y en todos.

En mi opinión, lo más especial del hermoso libro de Anita Moorjani (2012) es que habla con tanta claridad sobre la unidad de todos y de todo. Para ella, esa sensación de unidad comenzó justo después de dejar su cuerpo, lo cual describí en el primer capítulo (Fuera del Cuerpo), pero como lo expresó con tanta claridad, lo repito aquí:

A medida que mis emociones se alejaban de mi entorno, comencé a notar cómo seguía expandiéndome para llenar cada espacio, hasta que no hubo separación entre mí y todo lo demás. Abarcaba —no, me convertí— en todo y en todos. (p. 64).

A medida que su ECM avanzaba, se encontró en el avión que su hermano tomaba (véase el capítulo 3, " Fuera de este mundo "), y vio cuánto deseaba llegar al hospital a tiempo para verla antes de que falleciera. Pero a medida que su ECM avanzaba, esa sensación de unidad se acentuó y sus vínculos disminuyeron.

A medida que continuaba sumergiéndome más profundamente en el otro reino, expandiéndome hacia afuera, convirtiéndome en todos y en todo, sentí que todos mis apegos emocionales a mis seres queridos y a mi entorno se desvanecían lentamente. (p. 65).

Escribió que sentía que todos estamos conectados. Lo llamó la "unificación entrelazada" que lo abarca todo: cada ser humano, cada animal, cada planta, incluso mares y montañas; básicamente, el universo entero. Todo es Uno. Dijo: Me di cuenta de que el universo entero está vivo y lleno de conciencia, abarcando toda la vida y la naturaleza. (p. 70).

También conoció a su padre, fallecido años atrás. Tuvieron una conversación profunda, y ella escribió que no solo lo comprendía, sino que se convertía en él. No había diferencia ni separación entre ella y su padre (p. 73).

Tras su ECM, ya no veía la dualidad en el mundo en el que ella y todos crecimos. Expresó que no hay «yo» ni «tú». No hay «perpetrador» ni «víctima». Somos todos ellos a la vez. Somos Uno (p. 109).

No hay amigo ni enemigo.

Durante la Segunda Guerra Mundial, de los 3 a los 6 años, Tienke Klein (2006) estuvo internada con 3.000 mujeres y niños holandeses en un campo de concentración japonés en Java, en la entonces colonia de las Indias Orientales Neerlandesas. El alojamiento era un cuartel ruinoso con capacidad para 450 soldados. La vieja bomba no proporcionaba suficiente agua, y los baños consistían en una pequeña plataforma con un agujero, encaramada sobre un arroyo seco. Muchas mujeres y niños murieron de enfermedades tropicales y de hambre. En un momento dado, se desató el cólera. Como consecuencia, a los 4 años, Tienke sufrió un paro cardíaco. Al instante, se encontró en un espacio oscuro y tranquilo donde solo había amor. Su madre, enfermera, la reanimó con agua salada e inyecciones de cardiol.

Entonces Tienke regresó al infierno del campo. Dos días después, aún totalmente débil, tuvo que permanecer de pie durante horas durante el pase de lista diario bajo el abrasador sol tropical. Corría el riesgo de desmayarse y era consciente del peligro de ser severamente castigada por los «japoneses», como llamaba repetidamente a los soldados japoneses, por interrumpir el pase de lista. Escribió:

En el momento en que me zumban los oídos y siento que el suelo se derrumba bajo mis pies, oigo una voz. Está dentro de mí, pero la oigo alto y claro: «No hay amigos ni enemigos, eso es un juego de adultos tonto, no es la Verdad».

¡Así fue allí! Y así es aquí ahora. Una fuerza y una calma enormes me invaden. El peligro ha pasado.

He cambiado para siempre. El campamento ya no define mi horizonte. Aunque de niño ya no tengo ningún recuerdo de la vida fuera del campamento. Ha llegado a mí un espacio que ya nadie puede arrebatármelo.

He vuelto a casa, donde ya no había hogar. Este se ha convertido en el centro de mi vida. Este amor incondicional, que se eleva muy por encima del odio y la guerra. (p. 19).

Ser Uno con el TODO.

Juliet Nightingale (Anónimo, 5 de febrero de 2002, 13:18) describió este aspecto de su ECM:

Ahora era plenamente consciente de la Presencia divina, del Creador y de los guías espirituales a mi alrededor. Experimenté una profunda comprensión de nunca estar solo y de estar siempre en comunión con el Espíritu y otros seres en este reino asombroso y magnífico. El aspecto más profundo de la ECM, para mí, fue sentirme completamente envuelto en el Amor divino y, además, ¡estar totalmente libre de miedo! No había duda de que el Amor estaba en todas partes, de que estaba completamente protegido y a salvo, y de que todo saldría como debía. Nunca me sentí "aislado" ni solo. Esta fue una oportunidad especial para experimentar la unidad con el TODO, jamás separado ni perdido. Sabía, con total certeza, que todo evolucionaba exactamente como debía, y que el destino final de todo ser vivo es regresar a la Fuente, la Luz... Amor Puro.

Somos el Uno Completo.

Yazmine Star (ECM de Yazmine S , sin fecha). relató su ECM de esta manera:

Volaba por la Dorada: una Dorada pura, serena y encantadora. ¡Guau! Me atrapó esta serenidad por muchísimo tiempo; no podía hacer nada más que estar con Ella y Ella conmigo. Estaba dentro de mí. Era yo. Estaba en y con todos y con todo. Siempre había estado en y con todo. Era y es Verdad, Amor, Compasión, Alegría y Todo. Esta Dorada albergaba toda la información. Era la Mente Única. Contenía...Creación de todo lo creado. Sentí y experimenté todo lo que ha sido y será. Todo ocurre simultáneamente. No hay pasado ni futuro. Simplemente, ES.

Vi que no estamos separados; somos el Uno completo. Vi que debemos tener todo el coraje posible para lograr esta fabulosa unidad. Es altamente posible...

Sentí y experimenté toda la creación como una experiencia omnipresente, sin tiempo en ningún nivel. Vi que es tan simple que no se puede expresar.

Todo es todo, todo es uno.

Recordé que tenía una hija, y antes de poder defender mi derecho a regresar, mi pensamiento me dijo que no me permitirían quedarme. Me emocioné al regresar y pensé en cuánto deseaba recordar el conocimiento [que había adquirido durante su ECM] para poder explicárselo a otros, aliviar el miedo a la muerte e inspirar bondad. Pensé que tal vez podría engañarlos. Pensaría en palabras que describieran perfectamente el conocimiento en su forma más simple, y luego recordaría las palabras. Luego asociaría las palabras y recordaría el conocimiento. Se me ocurrieron las palabras perfectas: Todo es Todo, Todo es Uno. Estaba tan feliz con mi elección de palabras. Sabía que lo recordaría. (Anónimo, 18 de abril de 2009)

Lugar de Unidad.

En su libro, Azmina Suleman (2004) escribió que vio diferentes dimensiones. Describió la cuarta dimensión como la dimensión inmediatamente adyacente a nuestro mundo físico tridimensional de la materia. Dijo que es la dimensión de nuestros pensamientos, principalmente nuestras nociones de separación. Cuando podemos ver a través de las "ilusiones" de separación, podemos avanzar y alcanzar ese lugar supremo de 'Unidad'” (págs. 58–59)

Parte de una fuerza vital más grande.

Un hombre musulmán (ECM de Caan S , sin fecha) se cayó de una escalera y aterrizó de cabeza sobre una superficie de cemento. En su ECM:

Me dio la impresión de que todos formamos parte de un panorama mucho mayor que Dios (Alá) tiene reservado para todos nosotros. Uno de los primeros versículos del Corán, el primer capítulo, afirma que Dios es el Señor de todos los mundos...

Continuó diciendo: Creo firmemente que Dios ha dado al hombre muchos caminos para llegar a él, y nadie tiene el monopolio del Cielo... todo viaja en una sola banda de regreso a Dios. La vida existe en formas y lugares que desconocemos, pero aun así debemos respetarla, porque sus orígenes son todos los mismos. Nosotros, la humanidad, formamos parte de una fuerza vital mayor, construida sobre una gran masa de amor y conocimiento, todo con un solo propósito: alabar al Creador.

El enigma de la vida.

En su ECM, un médico homeópata indio (ECM de un médico indio, sin fecha) comprendió que, si quería, podía regresar a su cuerpo. Pero tenía que darse prisa. Al parecer, si esperaba demasiado, el camino de regreso se bloquearía. Otros pacientes con ECM también han descrito el riesgo de no poder regresar. En este caso, sin embargo, el hombre ansiaba desesperadamente encontrar una respuesta al enigma de la vida antes de regresar a su cuerpo. Encontró la respuesta en una imagen maravillosa:

Tuve una hermosa visión de estrellas rugiendo a mi alrededor. En el centro de todo ese tumulto había una luz resplandeciente. Cada estrella parecía ser un diminuto centro de consciencia. Se fusionaba y emergía de la consciencia central según lo deseaba esa VOLUNTAD cósmica que brillaba como un sol inmenso.

La imagen implica que todos provenimos de la misma fuente, que todos regresamos a ella y que juntos formamos la conciencia central. En otras palabras: somos uno.

Somos parte de Dios.

Una entrevista con Dios.

Brooke Jones (2021, 2023) tuvo su ECM tras una sobredosis de drogas y se encontró hablando nada menos que con Dios mismo, quien la recibió en su puerta. (Aunque se refería a Dios como "Él" y "Él", Dios le aseguró que no tiene género). Al principio, le preguntó si podía llegar a un acuerdo con él, pero Dios, en broma, rechazó la oferta. Al parecer, no se puede negociar con Dios ni llegar a un acuerdo. Por lo tanto, como periodista, le pidió al menos tener una charla. Él accedió, permitiéndole entrevistarlo y hacerle numerosas preguntas.

Sus respuestas resultaron ser de gran humor. Más tarde, dijo que Dios se puso a su altura y se presentó de una manera que no era amenazante, sino cálida y amorosa. Basándose en todas sus preguntas y respuestas, Jones (2021) escribió un libro muy humorístico, " ¿Por qué hay monos?" (Y otras preguntas para Dios) .

Ella no vio a Dios, solo lo oyó, y lo oyó de una manera que no podía describir, pero era como si la voz de Dios estuviera dentro de ella. Por lo tanto, la primera pregunta fue sobre su apariencia y cómo llamarlo. La respuesta...Era que Él es un ser espiritual sin género y que el nombre que los humanos le dan no lo define. Luego planteó la pregunta sobre los monos y la evolución que dio origen al título de su libro. Otras preguntas fueron, por ejemplo, sobre la responsabilidad de Dios por los actos crueles cometidos por las personas, a menudo en nombre de la religión. La respuesta fue que las personas tienen su responsabilidad y que existe el libre albedrío. Dios dijo:

El destino es una de las invenciones más ingeniosas del hombre. Es una herramienta que le permite liberarse de la responsabilidad de sus actos. (p. 80).

Respecto a la religión, Dios dijo que es un concepto creado por el hombre:

Es una colección de ritos y rituales, dogmas y edictos, todos inventados por los hombres para controlar a otros hombres. No tiene nada que ver conmigo. (pág. 50)

También aseguró que responde a todas las oraciones, sin importar la religión. ¿Por qué? «Porque solo existo Yo».

Jones preguntó adónde va nuestra energía después de morir, y la respuesta fue: «Se funde con la energía del universo, como un hilo que se funde en un tapiz» (p. 67). Luego preguntó qué es el alma. La respuesta fue que es una combinación de esa energía y la Esencia Espiritual, que forma parte de Él. «De hecho, es el cordón (por así decirlo) que nos conecta con Él... En nosotros hay una parte de Él, y Él vive para siempre» (p. 67).

Ocho minutos terrenales resultaron en muchas preguntas interesantes y respuestas alegres. En el epílogo, explicó por qué la entrevista con Dios fue real sin lugar a dudas y no fue causada por las alucinaciones de una mente moribunda. Esta fantástica evidencia la convierte en una lectura maravillosa que recomiendo ampliamente.

La palabra “Dios” es demasiado pequeña.

Después de que Brigitte Buyle (sf) tuvo su revisión de vida, en la que aceptó todo lo que había hecho, sintió el amor de todos aquellos seres de luz que la acompañaron en su revisión. En un video en línea, relató:

Devolví ese amor y me convertí en ese amor. Me convertí solo en amor y ya no había diferencia, no había distinción, todo era uno, pero todo era amor. Y debo ser honesto, tanto las personas como los animales y todo, todo era amor. No hay nada sin amor. Es muy extraño. En última instancia, lo que vemos es amor materializado, pero no nos damos cuenta...

Tu identidad no desaparece, sino que se disuelve. Así que, para quienes están muy apegados a cómo son, a quiénes son y a su estatus, esto es realmente amenazante, creo, porque se disuelven...

Nuestra palabra Dios es demasiado pequeña. Aunque la agrandes, sigue siendo demasiado pequeña. ¡Es... todo! Es todos, pero también todo. Qué extraño... Somos tú y yo, y el gato [el video muestra a su gato intentando llamar su atención], ¡es todo!

Somos UNO con Dios.

Un hombre judío, (ECM de Shalom G , sin fecha) tuvo dos ECM. La segunda fue bastante completa, con una revisión de su vida y un encuentro con familiares fallecidos. Se encontró con un ser muy especial y le preguntó si era Jesús. El ser respondió que tenía muchos nombres y que quien tuvo la ECM podía llamarlo "Hermano Mayor". Cuando el hombre decidió regresar a la Tierra, se le pidió que instruyera a otros sobre lo siguiente:

Dios no se puede encasillar ni etiquetar. Dios no es solo una religión, sino TODAS las religiones. No estamos separados.personas en este planeta, pero [todos] somos Sus hijos, conectados por el Espíritu de DIOS en nuestro interior. Y, por último, pero no menos importante, para tener fe en DIOS, debemos tener fe en nosotros mismos, ¡porque somos UNO con el GRAN HOMBRE!

Ya no existo como entidad separada.

El libro de Barbara Rommer (2000) sobre ECM angustiosas incluye una maravillosa historia de una mujer nativa americana llamada Sadhana, que estudiaba en la India. Para mí, esta historia lo dice todo.

Sadhana tuvo su ECM después de beber agua contaminada. Se elevó a la Luz y trascendió el tiempo y, finalmente, el espacio. Trascendió la posibilidad de tener cuerpo, tras lo cual solo tuvo consciencia. Dijo:

¡Desprenderse del cuerpo da una libertad increíble!... A medida que te elevas, llegas a una dicha inmensa, no alegría, sino dicha. Luego vas más allá, incluso más allá de la experiencia, y descubres que es una libertad no tener emociones, ni experiencias. Si sigues yendo hacia la Luz, y odio usar la palabra "yo" de nuevo [porque ella considera que el "yo" se ha disuelto], pero llegué hasta la Divinidad. Vaya, ni siquiera es la palabra correcta, pero en fin, llegué al lugar donde ya no existo como una entidad separada. Es como una gota en el océano. Estás totalmente disuelto. No hay conciencia separada. Hay una inmensidad, y estás disuelto en cualquier palabra que usemos para la Divinidad. (p. 137).

Yo soy la luz de Dios.

Analicé mi vida y varios sucesos y me di cuenta de que todos somos uno con el Universo, así que cuando lastimaba a alguien, en realidad me lastimaba a mí mismo y, aún más, lastimaba a todas las almas del Universo. Me di cuenta de que yo era...Luz blanca pura... No existe el bien ni el mal, como dijo Dios: «El cielo no es una comunidad cerrada; está abierto a todos». El don divino de la verdad y el amor (la bondad sobre la duda) me ayudó a dejar de dudar de mí mismo; llegué a saber que soy la luz de Dios. (Anónimo, 30 de abril de 2013)

Como un grano de arena en la playa.

Una de las 50 personas que experimentaron ECM entrevistadas en el libro de Mally Cox–Chapman (1995) dijo:

De repente, estaba allí. En una especie de zona gris, con luz sobre mí. Entonces me di cuenta de dónde estaba, vi la Tierra. Comprendí que estaba con Dios tal como lo imaginaba, omnisciente y omnipotente; eso era. Pero al mismo tiempo, me di cuenta de que era parte de la Luz, de Dios en general, como un grano de arena en la playa. Era un grano que era un Dios, pero Dios mismo era toda la playa. (p. 80)

Uno con la fuerza de Dios.

En su libro, Deirdre DeWitt Maltby, (2012), escribió sobre este aspecto de su ECM:

En ese momento, me estaba dando cuenta de mi potencial ilimitado como ser humano... Tenía la capacidad de crear una belleza ilimitada en pensamientos, palabras y acciones. Vi el potencial máximo de todos los seres humanos, pero cuán limitados estamos, básicamente por nuestros pensamientos y acciones limitados. Me dejé llevar, y al soltarlo, fue como si mi Ser , como ser humano supremo, emergiera. Descubrí que entonces era cocreador con Dios. No estaba ni cerca de la magnitud de Dios, pero era uno con esa fuerza. (págs. 55–56)

Dios está en todo y nos une a todos.

Carol Lynn Vengroff (2012) escribió cómo se sentía completamente unida con todo y con cada cosa. Se sentía unida como una sola. Ella llamó a esto la «realización de Dios» (págs. 29–30).

¡También entendí cómo Dios estaba en todo y nos unía a todos! (p. 14)

Era plenamente consciente de que ya no era solo yo. Formaba parte de un vínculo amoroso sin límites, en una relación perfecta que trascendía el tiempo y la forma. (p. 23)

Todo lo que es.

Al describir su ECM, Ellen Dye (2023) dijo:

¡Era como estar en el Corazón de Dios, totalmente abrazado por puro amor incondicional y alegría!... De repente, supe que estaba de vuelta en Dios, donde realmente pertenezco, donde todos realmente pertenecemos. Comprendí, o recordé, que Dios no es una persona ni una personalidad, aunque a los humanos les guste representarlo como tal... El Dios que experimentaba es Todo Lo Que Es... Dios ES Todo, incluyendo a cada uno de nosotros. Dios es la Fuerza Creativa de todos los Universos, un gigantesco océano de AMOR, del cual se crea toda la materia. Y yo era una pequeña gota de ese océano, que una vez estuvo separado y finalmente estaba de vuelta donde pertenecía.

Todos juntos somos Dios.

Un sujeto anónimo que tuvo una ECM (30 de junio de 2018) informó:

Podía ver puntos de luz (estrellas) a lo lejos, pero estaba en un abrazo cálido y seguro, lleno de conocimiento completo, de alegría/éxtasis total, y era uno con todo. Era la consciencia misma, de vuelta a mi hogar. Mi alma, y la de todos, eran una. Somos Dios, todos nosotros. Todo lo sabemos, todo lo vemos. Pasé de una profunda separación a una profunda inclusión en un instante. De repente comprendí ese viejo dicho de que la vida no es más que un sueño. Esa profunda negrura espacial era el mundo real; este mundo humano es solo un estado onírico. Sí, todos somos soñadores en el mismo sueño.

Uno con la luz.

Rachel Finch relató la siguiente descripción de su ECM:

Fue como si me "fusionara" con la luz. Me absorbió, yo la absorbí, nos convertimos en Uno, completamente... Me comunicaba con la luz, además de experimentar estar dentro de ella y ser Uno con ella. (Anónimo, 10 de junio de 2019)

Sin jerarquía.

En su libro, Andy Petro (2014) escribió extensamente sobre cómo se sentía al estar en la Luz (véase también el capítulo 5). Era una «pieza holográfica de la Luz». No había jerarquía, ni juicio, ni separación. Escribió:

No soy ni mayor ni menor que la Luz. De alguna manera incomprensible en la Tierra, yo también soy la Luz. Por mucho que recuerde mi experiencia con la Luz, siempre recuerdo que en ella no existe jerarquía; solo existe unidad. (Ubicaciones 406–410)

Andy también hizo una revisión de vida (ver Capítulo 6), y dijo que era un ejemplo perfecto de cómo se siente la "Unidad" en la Luz, porque podía ver y revivir todos los pensamientos y sentimientos de todos aquellos con quienes interactuaba. Esto le permitió verse a sí mismo a través de los ojos y sentimientos de los demás.

Una joven que experimentó una ECM se hizo eco del sentimiento de Andy:

Se sentía que todos estaban conectados y eran uno con Dios y con los demás. (Anónimo, 28 de enero de 2021)

...como lo hizo Rachel Finch:

Estaba completamente en unidad con toda la existencia. (Anónimo, 10 de junio de 2019)

...y Carol Vengroff:

Mi esencia misma estaba total, completa y absolutamente en paz. ¡Me había disuelto en el YO SOY! [En la Biblia judía, Dios, o mejor dicho, JHWH, se refiere a sí mismo como «Yo Soy» o «Yo Soy quien Soy»]. (2012, p. 30)

La separación trae sufrimiento.

Durante su ECM, que tuvo tras un intento de suicidio, Sandra Rogers (1995) comprendió que todos estamos estrechamente conectados. Todo lo que hacemos impacta la totalidad de la existencia. Consideró fundamental que entendiéramos esto. Dijo que nuestra sensación de separación nos hace herirnos mutuamente:

Se me mostró que el sentimiento de separación traía sufrimiento al mundo. (p. 56).

Su visión es interesante porque vincula el sentimiento de separación con el pecado:

Los pecados son acciones o inacciones que te hacen daño a ti y a los demás... Vi que el sentimiento de separación nos hace hacernos daño unos a otros porque no nos damos cuenta de que cuando solo miramos nuestro interés, sin considerar el efecto sobre los demás: en realidad estamos ejerciendo una conducta autodestructiva sin darnos cuenta conscientemente. (p. 56)

Dicho de otro modo, cuando alguien hiere a otros, sin saberlo, se hiere a sí mismo, y eso se debe a que no hay separación entre ellos. También dijo que «nuestra alma es parte del cuerpo de Dios» y «así como el átomo más pequeño de tu cuerpo físico es parte de ti, tú eres parte de Dios» (p. 24).

Estos testimonios apuntan a la conclusión de que para ser más felices y mejorar, necesitamos ser más conscientes de que no hay separación entre nosotros y los demás y que todos somos parte de la Luz.

Capítulo 10. ¿Por qué estamos en la Tierra?

¿Por qué estamos en la Tierra? Es una pregunta interesante, y en este capítulo he recopilado algunas respuestas extraordinarias que han recibido quienes han tenido una ECM. A veces se la preguntaron explícitamente, pero otras veces la respuesta llegó como un extra no solicitado en su ECM.

Muchas personas que han tenido una ECM han regresado con la comprensión de que el propósito de la vida humana es volverse más amorosos y adquirir conocimiento. Pero fue una revelación para mí que muchas personas que han tenido una ECM también hayan dicho que ya somos perfectos y, por lo tanto, no tenemos que aprender nada. Desde el principio, todos somos puro amor, pura paz y pura perfección, porque nos originamos de la Luz. Somos parte de ella. Ya la tenemos en nosotros. Sin embargo, ese amor, paz y perfección divinos aún deben expresarse aquí en la Tierra, y esa expresión resulta ser muy difícil. Esto se debe a todas las limitaciones que existen, como la naturaleza (por ejemplo, los talentos, las capacidades o los defectos con los que nacemos); la crianza (por ejemplo, haber nacido en un entorno pobre o en una familia disfuncional); y las dimensiones limitantes diarias del tiempo y el espacio.

Desde su perspectiva, no tenemos que aprender nada aquí en la Tierra. El propósito de la vida es expresar ese amor puro, esa paz y esa perfección. En otras palabras, el objetivo de la vida no es un contrato para aprender algo, sino el viaje mismo.

Así que la vida se trata de vivir experiencias. Tener experiencias es importante, y alcanzan su máximo esplendor cuando podemos demostrar el amor perfecto o el amor divino que todos llevamos dentro.

Durante una conferencia de IANDS, hablé sobre el propósito de la vida con algunas personas que han tenido una ECM. En cierto momento, una de ellas lo expresó así: «Dios se aburrió. Dios se ha ido al cine». Querían decir que la existencia humana es una forma de «ir al cine» para Dios: tener una experiencia emocionante intentando expresar el amor divino en un entorno muy limitado. Esta idea también se refleja en la sencilla receta para la vida que recibió una persona que tuvo una ECM (ver más abajo). La receta está al alcance de todos. Era muy sencilla y constaba de cuatro puntos: vivir la vida, simplemente ser, recibir amor y dar amor. Solo los dos últimos puntos requieren esfuerzo.

Acuerdo prenatal.

Acordamos regresar.

Algunas personas que han tenido una ECM afirman que, en su experiencia, aprendieron que, antes de nacer en esta vida física, la eligieron esencialmente para experimentar y aprender ciertas cosas que contribuirían a su desarrollo espiritual. Nancy Rynes describió este proceso con elocuencia en una entrevista disponible en línea (Chene, s.f.). Explicó cómo, al principio de su ECM:

Una figura se me acercó desde un lugar apartado. Parecía surgir de la nada... me dio un gran abrazo de bienvenida, lleno de amor. Y me dijo que sería mi maestra, que me ayudaría a aprender lo necesario para continuar mi vida en la Tierra y convertirla en una de la que me sentiría orgulloso.

Y me obsesioné con eso. Dije: "Espera un momento; ¿me vas a enviar de vuelta allí? No quiero volver". Y ella dijo: "Bueno, ya aceptaste volver". Y le dije: "No lo recuerdo. No lo acepté ahora. No recuerdo haber aceptado volver ahí”. Dijo: “Bueno, acordaste hacer eso antes de nacer”. Pero mi yo humano, Nancy, la atea que acababa de ser, nunca había oído hablar de [los acuerdos prenatales]. Así que la cuestioné. Le dije: “Bueno, no recuerdo haber acordado nada antes de nacer”.

Entonces, en el aire frente a mí, es muy extraño cómo sucedió esto, pero en el aire frente a mí, ella me mostró el momento antes de que yo naciera, cuando estaba aceptando algunas de las cosas que quería hacer y experimentar mientras estuviera en esta vida de Nancy...

La maestra luego le mostró a Nancy algunas circunstancias específicas de su vida física.

Y tan pronto como vi esto, prácticamente en el aire frente a mí, todos los recuerdos volvieron a inundarme. Recuerdo estar en presencia de todos mis maestros espirituales. Y supongo que dirías que "la presencia de lo Divino" también estaba allí, y acepté estas cosas. No es como un contrato, como si si lo rompieras te demandaran o algo así. Pero es una especie de guía sobre cómo quieres vivir tu vida. Así que, si no haces cosas, está bien; simplemente, en algún momento, tienes que hacerlas. Sabes, eso es lo que quieres aprender; en algún momento, tendrás que aprenderlo, ya sea en esta vida o de alguna otra manera. Así que vi todo eso y me di cuenta: "Bueno, vale, supongo que tengo que volver porque acepté volver".

Disfruta el juego.

Experimenta y disfruta la vida.

Durante cuatro días de enfermedad crítica en el hospital, Kimberlee Anderson dejó su cuerpo, conoció a sus ángeles y recibió de ellos respuestas a algunas de sus preguntas más esenciales, entre ellas: Nuestro propósito aquí es descubrir el amor incondicional dentro de nosotros y luego ofrecerlo a los demás. Todos estamos en este camino. Lo que nos diferencia es el camino que tomamos, la experiencia que elegimos y cuánto hemos aprendido sobre el amor. Ningún camino es mejor ni más importante que otro. Todo se reduce a lo que te llega al corazón y te hace sentir como en casa. Estamos aquí para explorar, experimentar y encontrar alegría en el proceso de vivir una existencia terrenal. Nuestra evolución y ascensión como seres espirituales ocurre orgánicamente cuando estamos listos para recibirla. Todos estamos en constante crecimiento, evolución y cambio. Pero esto no es algo que debamos forzar ni para lo que necesitemos ciertas habilidades. Todos somos seres espirituales viviendo la experiencia humana.

Tras regresar a su cuerpo, se recuperó milagrosamente. Su vida cambió por completo. Quería vivirla al máximo. Ya no le importaban nimiedades, como los atascos o que alguien se adelantara en la fila. Su lema se convirtió en:

Si no voy a recordar esto dentro de cinco años, no voy a pensar más en ello hoy. (Anónimo, 17 de abril de 2013)

Patio de juegos.

Cuando Christina tenía ocho años, fue secuestrada por dos hombres, durante los cuales sobrevivió a un casi ahogamiento. Su ECM la marcó para siempre. Dijo que probablemente piensa en su experiencia una vez por hora, si no con más frecuencia. También dijo:

No fue hasta hace unos años que acepté estar aquí. Incluso intenté suicidarme tres veces de joven para regresar. Sigo prefiriendo no estar aquí, pero sé que no tengo opción. Sé que tengo un propósito, como si tuviera una misión. Es ayudar a los demás... no tener miedo a lo desconocido; y ayudarlos a ver la luz en sí mismos. Aprendí cuatro lecciones de mi ECM: 1) amar, 2) ser amado, 3) simplemente ser, y 4) experimentar la vida. ¡La Tierra es nuestro patio de recreo! ¡Diviértanse! (Anónimo, 18 de noviembre de 2012)

Cuando hablé de este tema con Christina, me dijo que los cuatro puntos eran lecciones muy claras que recibió y que debían ser retomadas como mensaje. Provenían del único ser con el que habló durante su ECM, a quien llama "mi Padre" y considera Dios. Los cuatro puntos se presentaron como si fueran una receta para la vida aquí en la Tierra. La última parte —sobre la Tierra como nuestro patio de recreo— fue su expresión de lo que pensaba en ese momento, y añadió que no es divertido estar solo en el patio de recreo. La idea es que no solo experimentemos la vida, sino que también intentemos disfrutarla al máximo.

Entretenimiento.

Un paciente que experimentó una ECM abandonó su cuerpo gravemente enfermo y relató que:

Con un ángel al frente y dos a los lados, ascendimos por las nubes. Luego, comenzamos a movernos horizontalmente, más rápido que un avión, y no necesitaban alas para volar. Pensé: "¿No debería la fricción causarme dolor por la presión del viento?". El ángel al frente habló sin usar la boca. Afirmó: "Aquí no hay fricción". Le pregunté, mentalmente, ¿por qué la gravedad no me hace caer? Respondió: "Aquí no hay gravedad". Recordé haber aprendido que la temperatura en las nubes es extremadamente fría.Y pensé: "¿Por qué no tengo frío?", me respondió. Empecé a pensar en mi trabajo y la universidad, y el ángel me dijo: "¡Aquí no hay estrés!". Le pregunté: "¿Por qué no hablamos con la boca?". Respondió: "En la Tierra, hablar con la boca reseca la garganta". Entonces le dije: "Me alegra que hables inglés, ¿cuántos idiomas hablas?". Respondió: "Todos". Le dije que quería preguntarle otras cosas. Le pregunté por el sentido de la vida. Me respondió: "Para el entretenimiento del reino espiritual". (Anónimo, 3 de enero de 2012)

Ya perfecto.

Ni bueno ni malo.

Después de un accidente automovilístico, esta persona que tuvo una ECM abandonó su cuerpo y, durante su ECM, aprendió: Nosotros, (aquí en la Tierra), tenemos un papel que desempeñar. Elegimos nuestras vidas incluso antes de nacer... ya sea que elegimos una buena o una mala vida... no importa, porque no hay nada bueno ni malo... es simplemente el papel que elegimos... y todas las vidas que vivimos son esenciales para nuestra evolución y desarrollo. Por eso tenemos memoria. APRENDEMOS Y CRECEMOS porque tenemos diferentes estilos de vida, creencias, opiniones, etc. Perdón por decirlo, ¡pero incluso el mal —la muerte, la destrucción, la enfermedad— es esencial! Piénsenlo: si todo fuera SIEMPRE bueno y nos saliera como queríamos, si todas las relaciones fueran buenas y todos consiguieran lo que quieren, con los años se volvería bastante aburrido y estancado. Sé que suena maravilloso, pero no nos dejaría crecer mucho, ¿verdad? (Anónimo, 23 de septiembre de 2016)

Expresar nuestra divinidad.

Lee Thornton describió su conclusión después de sus encuentros con la Luz tanto durante como después de su ECM: Llegué a ver la Luz como la maestra compasiva que reside en cada uno de nosotros, como nuestro yo superior. Parece querer que experimentemos su alegría y sabiduría, y ayudarnos a expandirnos; a superar los límites y obstáculos que nos impiden alcanzar la felicidad y la libertad que somos capaces de experimentar. Llegué a creer que la divinidad de esta Luz reside en cada individuo y a su alrededor, y que el propósito de nuestra vida es encontrar y expresar esa divinidad que existe, no en un mundo lejano, sino aquí mismo, dentro de cada uno de nosotros. (Anónimo, 17 de junio de 2013)

Empapado de amor incondicional.

Una esposa y madre se encontraba gravemente enferma con infección pulmonar y sinusal, además de fiebre alta de 40 °C. En el hospital tuvo su ECM. Tras recuperarse, comentó: Hoy gozo de perfecta salud en mi cuerpo físico, pero sé que quien realmente soy ya está en un estado de completa perfección, impregnado de amor incondicional. (Anónimo, 1 de septiembre de 2012)

Vive el Cielo en la Tierra.

Mientras moría de cáncer, Anita Moorjani tuvo una ECM, durante la cual dijo:La cantidad de amor que sentí fue abrumadora, y desde esta perspectiva conocí mi poderosa naturaleza y vi las increíbles posibilidades que los humanos somos capaces de alcanzar durante la vida física. Descubrí que mi propósito...Ahora sería vivir el paraíso en la tierra usando esta nueva comprensión y también compartir este conocimiento con otras personas. (Anónimo, 26 de abril de 2007)

Ser feliz.

Yazmine Star informó que durante su ECM:Me avergonzaba no haber comprendido lo imperativo que es ser increíblemente feliz en esta vida, sin importar las circunstancias. El dolor, el miedo: ¡sin importar nada! Todos nuestros conflictos materiales, tanto físicos como mentales, carecen de importancia en el estado de libertad suprema y consciencia dichosa al que todos regresaremos. Sentía que había sido infiel a la Gran Presencia, que es como una Madre divinamente amorosa, y a quien había decepcionado. Era mi juez. Sin embargo, al mismo tiempo, era este amor. Vi cómo toda la Humanidad ha caminado con la mirada baja hacia la Tierra, sin abrirse de par en par a la belleza de la única presencia amorosa de la paz dorada. Esta paz es aquella en la que verdaderamente vivimos, pero que no vemos...

Vi cómo, al elevarnos, todos podíamos ascender juntos a la verdadera alegría como una familia amorosa de seres, más allá de la vida humana en la mundanidad. Vi cómo hay un nivel de miedo tan arraigado en algunos que es difícil de ver, y sin embargo, ellos también pueden encontrar un camino hacia la paz. Vi cómo las cosas cambiarán, aunque solo después de un sufrimiento inmenso, y, sin embargo, también vi que es posible acabar con el sufrimiento. (ECM de Yazmine S , sin fecha)

¿Libre albedrío?

Varias personas que han tenido ECM me han asegurado que cada persona tiene una tarea, un propósito, en la Tierra. Una incluso dijo que no estarías aquí si no tuvieras una tarea. Sin embargo, muchas personas que han tenido ECM también afirman que no se requiere libre albedrío para realizar esa tarea: el universo esNos guía. Todos tenemos una brújula interna, y no seguirla es una pérdida de tiempo y energía. La brújula nos ayuda a cumplir nuestras tareas porque estamos destinados a alcanzar nuestra meta. Solo tenemos que estar alineados y en sintonía con la Luz, y todo saldrá bien. Durante una entrevista con Anna Best, una experta en ECM, se emocionó cuando le pregunté repetidamente sobre el libre albedrío. Dijo:

En esa otra dimensión, el libre albedrío no importa. Es importante aquí porque está relacionado con [los humanos], con el ego [humano], pero quiero seguir la corriente universal. No quiero que mi libre albedrío esté en desacuerdo con el universo. No quiero que obstaculice mi realización. (Coppes, 2011, p. 80)

Sin embargo, enfatizó explícitamente que su actitud no tenía nada que ver con falta de voluntad. Dijo que sentarse en una silla, esperando que el universo la impulsara, no era lo que quería decir. Para ella, el libre albedrío significaba no anteponer su ego. En su ECM, tuvo que soltar su ego, y eso fue lo que sintió que era correcto. Aquí, en la Tierra, también intenta soltar.

Por Dios.

Dios nos usa para experimentarlo a Él mismo

Tetty Pols–Visser compartió esta conclusión después de su ECM: [Dios] quiere experimentarse a sí mismo y lo hace a través de nosotros. A través de nosotros, Dios puede verse a sí mismo y tomar conciencia de sí mismo. Así, todos somos aspectos de Él... He sentido y sé que somos Uno y que todos somos parte de ese Uno. Mi pregunta frecuente: ¿Dónde está Dios? ha sido respondida. Dios es todo y está en todos. Pero esa sensación a veces parece irreal, lejana. Tal como me siento ahora [de vuelta en la Tierra], apenas puedo reconocer a Dios en ello. (Pols–Visser, T., y Oosterhof, M., 2010, págs. 118–119)

Sólo experiencias.

Cuando Ellyn Dye (2023) vio todas las cosas que había pensado, sentido y hecho “en cada vida que he tenido en la Tierra y en todos los demás planetas”, también vio las cosas horribles que le habían hecho y las cosas horribles que ella les había hecho a otros.

Y aun así, estos seres maravillosos me amaron profundamente, no a pesar de todo, sino POR todo lo que había hecho, por todo lo que me habían hecho, y por todo lo que soy. No hubo juicio alguno, porque todas esas experiencias fueron solo eso: experiencias. Fueron parte del crecimiento de mi alma, porque un alma crece a través de la experiencia. Y así como yo tenía experiencias, Dios y Todo Lo Que Es las tenía a través de mí.

Todo esto forma parte del Plan Divino: todas estas pequeñas gotas del Océano Divino se separan del resto del Océano y se van a vivir todo tipo de experiencias, todas las posibles. Y como todos estamos conectados, al tener una experiencia, todos los demás y todo el Océano Divino también la tienen.

Me ayudaron a comprender profundamente que todo está bien y que todo marcha según el Plan Divino. Y me dijeron que los humanos en el planeta Tierra se acercan rápidamente a un gran cambio de conciencia, cuando todos los velos se levantarán, nos quitaremos las máscaras y recordaremos Quiénes Somos, como los juerguistas en una fiesta de disfraces, que se quitan las máscaras a medianoche... ¡y aquí estamos, a las 23:59 en el planeta Tierra!

Amar.

Practica el amor.

En su libro, Despertares de la Luz , y su presentación en el sitio web de NDERF, Nancy Rynes escribió que estamos en la Tierra para amar: Estas experiencias me han abierto el corazón a todas las personas, todas las religiones y todas las creencias de una manera que jamás hubiera creído posible. Compartiré un poco de lo primero que ella [el espíritu que acompañó a Nancy] me enseñó. Estamos aquí principalmente para amar: para practicar el amor, para mostrar amor, para experimentar el amor. El odio no es el lenguaje del Espíritu, ni tampoco lo es el miedo. El amor sí lo es. Es un amor sin condiciones ni ataduras. Es simplemente amor en todas sus formas. (ECM de Nancy R , sin fecha)

En su libro escribió sobre las lecciones que aprendió de su Guía que la acompañó en su caminata por “el Otro Lado, también conocido como el Cielo”:

No estamos en la Tierra simplemente para aprender, sino para amar. Estamos en la Tierra para amar a todos y a todo. Estamos destinados a encontrar y experimentar la alegría de sentir y expresar amor a los demás. Es a través de los actos de amor y compasión que nos acercamos a nuestro centro espiritual y a Dios...

Resulta que el amor es una de las principales razones de estar en la Tierra. Así como el amor conforma la estructura del Cielo, también existe como una corriente subyacente en nuestro mundo... El amor espiritual no significa amar solo a las personas de nuestra familia, ni simplemente amar a quienes concordamos, sino amar a todos y a todo . Ese es el Gran Amor, y no siempre es fácil para los humanos vivir así... Dios.No solo nos pide que amemos a otras personas, sino a toda la creación. Las montañas, el aire, la lluvia, los árboles, los animales y las estrellas están todos conectados espiritualmente... Sí, es nuestra elección practicar el amor de una forma u otra todos los días... Al elegir amar tan expansivamente como podamos, probablemente necesitaremos aprender a dejar atrás las heridas del pasado y a ver más allá de la superficie, directo al corazón de las personas o situaciones... Mi Guía insistió en que hagamos todo lo posible por extender el amor a todos y a todo en la Tierra: a ti, a tu cónyuge o pareja, a tus amigos, a tus hermanos, al vecino antipático de la calle, al político con el que no estás de acuerdo, a esas personas del otro lado del mar que tu país invadió el año pasado, a las personas con un color de piel un poco diferente al tuyo, a los que adoran de una manera ligeramente diferente a la tuya, a los fanáticos del equipo contrario e incluso a los animales. Todos son parte de Dios y Dios los ama a todos. Al extender amor a todos y a todo, amando toda la creación, amamos, por lo tanto, todo el Espíritu. No solo partes del Espíritu, como la mayoría de nosotros ahora. Todo el Espíritu. (Rynes, 2015, págs. 49–52)

Como muchas personas que han tenido una ECM, Rynes ha aprendido mucho de su experiencia. Su libro está lleno de perspectivas maravillosas y sabias que recibió durante su incursión en el otro lado de la vida o que extrajo posteriormente al reflexionar sobre su experiencia. Al final del libro, resumió parte de esta sabiduría. Una de las cosas que dijo es que la vida no debe ser solo seriedad. Su consejo es disfrutar de la vida también y:

Escucha el llamado de tu corazón, pues en él reside la clave de la felicidad y la plenitud. Es una de las maneras en que Dios te habla directamente. (Rynes, 2015, p. 220)

El mismo viaje.

En el libro de Liz Dale (2008), una persona gay que tuvo una ECM dijo: Estamos aquí en la tierra para celebrar la vida, amarnos y ayudarnos mutuamente, y aprovechar y utilizar todos los dones y talentos que nuestro Creador nos ha otorgado, es decir, para cumplir nuestra misión en la tierra dentro del plan divino. El amor incondicional aplicado a diario es la forma en que nos ayuda a evolucionar y a influir en la vida de los demás. Dar y recibir están fusionados. Cada uno tiene su camino, pero todos estamos en el mismo viaje: «conformándonos a la semejanza del Creador, día a día...» y, finalmente, «regresando a casa». (págs. 59–60)

Aprender, amar.

Kimberly Clark Sharp (2003) resumió las conclusiones esenciales de su ECM:

Estaba aprendiendo las respuestas a las preguntas eternas de la vida, preguntas tan antiguas que las consideramos clichés. "¿Por qué estamos aquí?" Para aprender. "¿Cuál es el propósito de nuestra vida?" Para amar. (p. 26)

Sé el amor que somos.

La mayor revelación que Anita Moorjani (2012) recibió durante su ECM fue que los humanos somos amor. Sin excepción, el amor puro reside en cada persona. Puede que no siempre se exprese con facilidad ni eficacia, pero ahí está. En el capítulo 4 sobre el Amor Incondicional, se citan sus opiniones, incluyendo lo que ella considera la razón de nuestra existencia en la Tierra: Si todos somos Uno, todas las facetas del mismo Todo, que es el amor incondicional, entonces, por supuesto, ¡ lo que somos es amor ![Nuestro propósito es] ser nosotros mismos, vivir nuestra verdad y ser el amor que somos. (p. 76)

Ayudarnos unos a otros.

Un estudiante de posgrado, cuya ECM ocurrió en el contexto de una insuficiencia cardíaca, informó: Mi repaso de vida fue, bueno, largo, así que no puedo entrar en detalles aquí. Sin embargo, ocurrió en menos de un segundo y vi todo lo que hice, dije, escribí, pensé... vergonzoso. Nosotros [él y un guía espiritual a quien llamaba el "Hombre"] charlamos un rato, y luego me preguntó: "¿Hay algo que quieras saber?". Le dije: "Sí, la pregunta de siempre: ¿Por qué estamos aquí en la Tierra?". El "Hombre" respondió: "Solo están aquí en la Tierra por una razón. Solo están aquí para ayudarse mutuamente", casi con toda seguridad insinuando que estamos aquí temporalmente, para cumplir esa función. Supongo que para algún propósito superior que se conocerá en el futuro (después de la muerte). (Anónimo, 30 de enero de 2006)

El amor se manifiesta

Una mujer sufrió una hemorragia durante el parto y tuvo dos ECM. Durante ellas, recibió información sobre el sentido de la vida. Se trataba de manifestar amor: Aprendí que es verdaderamente maravilloso estar en forma espiritual, estar en mi cuerpo de luz, ilimitado, omnisciente, libre de trabas. Pero solo en nuestros cuerpos humanos podemos abrazar a un bebé recién nacido, caminar por la playa al amanecer, hacer el amor, oler una rosa o saborear una fresa. Es aquí, en nuestros cuerpos, donde se manifiestan las lecciones del amor. Es en esta maravillosa aventura humana que realmente incrementamos la Conciencia Divina, como cocreadores...Siempre que elegimos el Amor… sabiendo, por supuesto, que existe el Libre Albedrío… hay regocijo en el Cielo. Cada vez que respiro hondo, conscientemente, recuerdo y renuevo mi espíritu, mi conexión con el Espíritu y el privilegio de estar vivo. (Anónimo, 17 de febrero de 2017)

Eleva la energía, la vibración.

Elevar la vibración.

Carol Lynn Vengroff (2012) escribió un libro breve pero maravilloso sobre su ECM. En él, nos anima a seguir viviendo, porque uno de los muchos mensajes de su ECM fue que: Cada uno de nosotros está aquí por una razón. Cada uno tiene un don que compartir, un talento creativo, una contribución que hacer, la oportunidad de elevar la vibración de los demás y de nuestro planeta... Todo es perfecto, cada aspecto de nuestra vida... cada incidente, aparente coincidencia, suceso, encuentro y decisión. Cada momento forma parte de un plan perfecto, parte de nuestro viaje, y al final obtenemos todas las respuestas. (p. 73)

Crear un mundo mejor.

Cuando Bill Gladstone se desmayó brevemente tras vacunarse contra la gripe, tuvo la oportunidad de conectar con seres de Luz que lo acompañaron en un viaje. En mi entrevista inédita, describió lo que aprendió:

Siempre he sentido que mi existencia en la Tierra es para traer alegría y consciencia a mí mismo y a los demás. Mi intuición me dice que estamos aquí para ayudar a los seres humanos a ser más conscientes, más amables y más amorosos consigo mismos y...Otros. La ECM incrementó esta sensación interna de conocimiento que tuve desde pequeño. Siempre he sido consciente, a un nivel más profundo, de que la vida es eterna y de que todos tenemos un propósito. Incluso, o quizás especialmente, aquellos a quienes descartamos o con quienes no estamos de acuerdo tienen un propósito. Da igual que nos centremos en una persona sin hogar sin poder o en las personas más ricas y poderosas del planeta. Todos estamos conectados a un patrón divino e intrincado de vida y evolución que nunca termina. La vida es mágica y no hay límites a lo que la conciencia humana puede crear y apoyar. Como seres humanos, tenemos la oportunidad de aprender tanto a nivel micro como macro. Somos humanos y cometeremos errores, pero somos humanos y podemos aprender de ellos. Compasión. Bondad. Fe. Alegría. Amor. Estos son los atributos que debemos desarrollar y apreciar, y al hacerlo contribuimos a crear un mundo mejor tanto en el presente como en el futuro.

Cada momento es una oportunidad.

En mi entrevista inédita con Gayle Gladstone, ella describió cómo, cuando casi se ahoga en Kauai y tuvo su ECM, comprendió que cada momento aparentemente insignificante de la vida terrenal importa. En cada momento hay una oportunidad para irradiar Luz, la Luz que está dentro de cada uno. Todos tenemos el poder interior de marcar la diferencia y fomentar el amor en el mundo.

La vida no se trata solo de hacer el bien y vivir bien. También se trata de estar presente y ayudar a que la energía se eleve en cada momento. Quien soy sí marca la diferencia. La bondad amorosa y la comunicación clara, ya sea con una palabra amable, una sonrisa, un contacto visual cariñoso o una mano amiga silenciosa, tengo el poder de calmar las tormentas de inquietud con solo mi...Corazón intencionado. Tengo el poder de conectar con el otro estando presente con mis pensamientos, palabras y acciones. Puedo aprovechar la bondad y compartirla estando aquí y ahora.

Cuando se dio cuenta de esta verdad, quiso regresar a la Tierra para poner en práctica los conocimientos recién adquiridos.

Decidí volver. Quería ser esa persona. Quería intentarlo. Sabía en mi interior que había muchísimas posibilidades por aprovechar.

Así es como intenta vivir ahora: Somos Seres de Luz. Tenemos la responsabilidad de aceptar al Ser interior que puede aprovechar el poder de ayudar y sanar en todo momento.

Camino con cada paso. Me comunico con la naturaleza y ella responde de maneras extraordinarias. Mi relación con la vida es una alianza. Mis habilidades se potencian mucho más. Sé que hay un Universo que me apoya a mí y a mis intenciones. Mi meta diaria es honrar, aprender y escuchar todo lo que me rodea. Presto atención y acepto que soy parte de un mar infinito de potencial. Existe esta asombrosa Conciencia que todo lo sabe y evoluciona constantemente con una Alteza indescriptible y un Amor insondable. Agradezco a esta Conciencia cada día y me esfuerzo por ser digno de mi vida.

Elección de emociones.

Silvia Bulten–Bolk era una cantante y artista con una energía radiante, pero su cuerpo no cooperaba (Coppes, 2011, pp. 75–76). A los 33 años, tuvo que someterse a una cirugía abdominal mayor. Después de la operación, fue trasladada a...UCI donde estuvo en coma. Allí tuvo su ECM. Entró en una habitación oscura donde sintió los brazos protectores de su padre, ya fallecido. Eso fue un gran consuelo para ella. Literalmente escuchó el mensaje: «Tu padre está aquí para consolarte y confiar». Sobre esa situación, dijo:

Durante todo ese tiempo fui consciente de que no miraba con los ojos, ni oía con los oídos, ni hablaba con la boca, ni olía con la nariz. El cuerpo era irrelevante, no lo necesitaba allí para nada. Estaba en un espacio, o mejor dicho, en un estado, en lo profundo de mi mente. Olía a flores, me sentía cálido y seguro allí; sí, sentía que había vuelto a casa.

Le dieron la opción de quedarse o regresar. Mientras tanto, la oscuridad se hizo más brillante, y pudo ver una larga fila de personas, incluyendo tíos, tías y almas conocidas y desconocidas. Se dio cuenta de que desde los 11 años había estado cansada por todo el dolor y la tristeza causados por las limitaciones de su cuerpo. Quedarse "aquí arriba" le parecía muy atractivo, pero pensó en su gran amor, Robert. Entonces escuchó:

Puedes elegir porque tu viaje, tu película, no tiene por qué estar terminada todavía.

Ella decidió quedarse con su gran amor. Han pasado 22 años; por lo tanto, tiene 55. Dijo: Mi vida no es nada fácil porque mi cuerpo es mi mayor lección. Una y otra vez, me plantea desafíos en forma de enfermedades y deficiencias [por ejemplo, la operación durante la cual tuvo su ECM la dejó con una colostomía].

Lo que esta ECM me proporcionó es una confianza inagotable en el "espíritu pensante" y la convicción de que no somos este cuerpo, sino un "espíritu pensante" ligado a la fuente primordial que llamamos Dios. Me hizo consciente de que, en lugar de elegir el miedo (todas nuestras emociones negativas), en cualquier momento podemos elegir pensamientos de Amor, que es Dios y que somos nosotros. Me convenció de que siempre podemos elegir. No tanto en lo que nos sucede, sino en la respuesta que elegimos. Eso me permite manejar todo en esta vida que considero un sueño [es decir: la realidad material es un sueño, la otra realidad es real].

Su mensaje es que existen alternativas, aunque parezca que no tenemos opción. Por ejemplo, podemos dejarnos llevar por nuestra infelicidad y sentirnos terriblemente tristes por cosas que no podemos cambiar, como un cuerpo enfermo. Pero también podemos elegir una emoción diferente. El objetivo es, entonces, elegir una emoción que exprese amor.

Capítulo 11. El camino de regreso.

En sus ECM, quienes las experimentan se sumergen en una realidad alternativa. Tras una experiencia tan alucinante, regresar al cuerpo y a la vida terrenal no es tarea fácil. A veces, quienes experimentan ECM se quedan impactados al saber que deben regresar. A menudo, no quieren regresar, pero la compulsión es tan fuerte que deben ceder. No hay alternativa. A veces, sus familiares en la Tierra interrumpen su maravillosa experiencia y los llaman para que regresen. Pero, en ocasiones, se les da una opción: quedarse aquí o regresar. No se entiende por qué algunos pacientes tienen la opción y otros no.

En cuanto al regreso: A menudo ocurre tan rápido que quienes han tenido una ECM no tienen palabras para describirlo. Sin embargo, en muchos casos, ocurre algo interesante. Por ejemplo, se oye un ruido fuerte, como un timbre o un silbido. Con frecuencia se informa que todo se siente mucho más pesado, hasta que quedan completamente sujetos a la gravedad terrestre.

Y luego está el cuerpo al que deben regresar: su cuerpo, en el que ya han vivido durante tantos años. Ese cuerpo suele sentirse frío, sucio y demasiado pequeño. Y una vez dentro, se siente como una prisión. Volver a encerrarse en el cuerpo no es tarea fácil.

Debes regresar.

Decisión difícil.

Para muchas personas que han tenido una ECM, tener que regresar a sus cuerpos físicos es una perspectiva aterradora. Rachel Finch se sintió así. Al final de su ECM, le preguntaron si quería regresar a la Tierra.

La verdad absoluta de mi alma es que me sentí completamente insultado ante esta sugerencia. Me horroricé ante la idea y, en voz alta, respondí: "¡No!". Hubo una pausa, y me sentí un poco confundido, preguntándome por qué me pedían esto. De nuevo, la misma pregunta se repetía en mi interior: "¿Quieres volver?". De nuevo, dije: "No".

Hubo otra pausa y entonces me mostraron al bebé que acababa de parir, acostado en la cuna junto a mi cuerpo. Me mostraron mucho más allá del tiempo. Diversos resultados que dependían únicamente de si regresaba o no a mi cuerpo. Habría innumerables vidas que serían tocadas por este Amor si regresaba, y muchas que no lo sabrían si no lo hacía. Recuerdo haber dado lo que solo puede describirse como un profundo suspiro del alma. Un suspiro de comprensión. Una comprensión.

Inmediatamente después de ver esto, y con la visión de mi hija recién nacida en mi mente y su posible futuro si me quedaba, dije: «Sí». (Anónimo, 10 de junio de 2019)

Llorando incontrolablemente.

En medio de una feliz ECM, uno de los tres ángeles dijo de repente: “Tenemos que regresar”. Dije: “¡No! ¡Esto es genial y quiero sentirme así para siempre!”. Le supliqué: “No tengo hijos ni estoy casada. ¡Nadie allá abajo me necesita!”. Dije: “El cerebro que tengo ahí abajo es…Herida. No quiero volver a ese cuerpo. Me gustaría quedarme aquí”. Me dijeron: “Serás sanada”. De repente, estaba en casa de mi madre y la vi en el sofá llorando desconsoladamente, algo que nunca antes había visto. En menos de un segundo, nos transportaron a casa de mi mejor amiga, a 16 kilómetros de distancia, y la vi temblar y llorar desconsoladamente, algo que nunca antes había presenciado. Al parecer, era una visión del futuro si me hubieran permitido quedarme, y estarían de luto por mi muerte. Así que le dije al ángel: “Vale, vale, volveré”. Al instante, volví a mi cuerpo. (Anónimo, 3 de enero de 2012)

Puedes regresar.

Yo tomé mi decisión.

Anita Moorjani (2012) escribió un libro brillante sobre su ECM, que recomiendo encarecidamente. También registró su experiencia en los archivos de IANDS. Allí resumió un punto de su ECM que también había descrito en su libro. Me resulta alucinante, ya que aprendió que su intención dictaría lo que sucedería en el mundo material. Normalmente pensamos que, una vez realizadas las pruebas, sus resultados ya están determinados y solo esperan ser analizados y revelados. Anita aprendió que, en cambio, sus resultados pueden cambiar, dependiendo de una causalidad más profunda: las intenciones.

Sabía que estaba a la deriva, entre dos mundos, pero cada vez que me adentraba en el otro, veía más y más escenas... Entonces vi cómo el propósito de mi esposo estaba ligado al mío y cómo habíamos decidido venir y experimentar esta vida juntos. Si yo moría, probablemente él también moriría poco después.

Me lo hicieron entender durante las pruebas de función orgánica. Los resultados aún no estaban disponibles. Si elegía la vida, los resultados mostrarían que mis órganos funcionaban con normalidad. Si elegía la muerte, los resultados mostrarían que la causa de la muerte fue un fallo orgánico debido al cáncer. Pude cambiar el resultado de las pruebas por decisión propia. Tomé mi decisión. Al despertar, en un estado de gran confusión, no podía distinguir en ese momento de qué lado del velo estaba. Los médicos entraron corriendo a la habitación con una gran sonrisa y le dijeron a mi familia: «Buenas noticias, tenemos los resultados y sus órganos funcionan. No lo podemos creer. Su cuerpo realmente parecía haberse apagado». (Anónimo, 26 de abril de 2007)

Llamado por muchos nombres.

Durante toda su ECM un hombre judío sintió una persona muy especial: “Mi corazón lo reconoció antes que mis ojos. Inmediatamente me acerqué a él y le pregunté: "¿Eres el Ser llamado JESÚS?". Con una cálida y suave sensación de amor y risa, me respondió: "Me llaman por muchos nombres, pero debido a tus antecedentes puedes llamarme HERMANO MAYOR, y yo te llamaré Mi Pequeño Príncipe de la Paz". Luego me indicó que podía quedarme con él o regresar a la Tierra. Sin embargo, si no regresaba, muchas personas perderían sus conexiones para poder cumplir sus misiones y propósitos en la vida”. (ECM de Shalom G , sin fecha)

Regresando.

Cada vez más pesado.

Un hombre iraní fue atropellado por un coche y trasladado al hospital en ambulancia. Una vez en el edificio, descubrió que mientras su cuerpo estaba siendo trasladado por los pasillos hacia la UCI, su forma corporal transparente podía atravesar las paredes sin esfuerzo.

Era como si al acercarme a una pared, esta desapareciera. No podía sentir nada físico ni ninguna barrera.

Mientras flotaba justo debajo del techo, vio a los médicos y enfermeras trabajando en su cuerpo. Intentaban reanimarlo: tubos en la garganta, masaje cardíaco, inyecciones, descargas eléctricas. Al principio no parecía funcionar; no sentía nada. Sin embargo, poco a poco, sintió que su peso aumentaba. Sintió una atracción hacia ese cuerpo que veía en la mesa. Finalmente, funcionó.

Al entrar en mi cuerpo, oí un silbido y sentí que estaba en un espacio abierto y oscuro, como un embudo, y que entraba en mi cuerpo desde la cabeza. Después de entrar, sentí un dolor intenso. Creo que estuve inconsciente durante 15 o 20 minutos. (ECM de Arshan , 1996)

Peso en mi pecho.

Tras un recorrido por situaciones infernales, George Ritchie (2004) atravesó un enorme vacío que parecía prometedor. Entonces vio una ciudad celestial a lo lejos, hecha de la misma luz que la "Presencia" que lo acompañaba. Se acercaba a ella a toda velocidad. Había figuras que parecían desprenderse de la ciudad y se acercaban a él a la velocidad de la luz. Sin embargo, de repente sintió que lo atraían a una velocidad aún mayor. Las paredes se cerraban a su alrededor, estrechas y cuadradas, y reconoció que eran las paredes de la habitación donde yacía su cuerpo. Vio ese "bulto", su cuerpo, y suplicó que no lo dejaran allí.

Sentí que perdía la consciencia. Mi mente empezó a nublarse... Me ardía la garganta y el peso en el pecho me aplastaba. (p. 74)

Luego abrió los ojos y se encontró nuevamente dentro de su cuerpo.

Cayendo a través de los niveles de conciencia.

Nicholas tuvo su ECM tras un accidente en el gimnasio. Se encontró en un vacío infinito y oscuro donde podía moverse con libertad. Se sentía bien. Sus problemas habían desaparecido. Lo llamó el "plano superior de conciencia" y revisó su vida. De repente, vio una luz que salía de lo que parecía una puerta.

Al acercarme a la puerta iluminada, una voz masculina atronadora resonó en la oscuridad y me dijo: «Nicholas, no es tu momento». Inmediatamente sentí como si me elevaran y me lanzaran hacia atrás. Literalmente, sentí que caía a través de cada nivel de conciencia hasta llegar a este plano donde existía mi cuerpo humano.

De repente, abrí los ojos y vi que estaba en una cama de hospital. Empecé a llorar desconsoladamente. (Anónimo, 20 de junio de 2012)

Siempre estamos aquí para ti.

Yolaine Stout (sf) tuvo una ECM en la que conoció a Jesús, quien le dijo que no desperdiciara su vida pensando que no la amaban. Luego, él desapareció lentamente y la habitación volvió a quedar a oscuras. Quiso moverse, pero resultó que ya no estaba en su cuerpo. Eso la impactó. Entonces, su cuerpo la atrajo de vuelta. Fue como si la empujaran de vuelta a su cuerpo.

Fue extremadamente desagradable. Allí fuera me sentía ligero, pero luego tuve que meterme en ese cuerpo húmedo, denso y frío.

Lo comparó con caer de nuevo en un charco de lodo frío que te absorbe. Fue un shock para ella. Intentó volver a esa luz, y en un breve instante, cuando regresó un poco, fue como si dijera: «Siempre estamos aquí para ti. Siempre está aquí. No te preocupes».

Mamá estaba gritando mi nombre.

Una mujer china, sin saberlo, usó palillos que habían sido usados con pescado, al cual era alérgica. Sufrió una reacción que le impidió respirar. En el hospital:

Esa doctora de mediana edad dijo: «La estamos perdiendo. Que venga su familia». Cuando mi madre entró en la sala de pacientes, saltó a la cama abrazándome, meciéndose y gritando mi nombre. Toda la habitación se llenó de su voz, capaz de derribar el techo, y los médicos y las enfermeras se hicieron a un lado.

Mientras tanto, ella estaba teniendo una ECM maravillosa, que de repente se detuvo:Empecé a caer y grité a gritos: "¡No quiero volver! ¡No quiero volver! ¡No quiero volver!". Pero fue completamente inútil. La velocidad del descenso era la misma que la del ascenso... Personalmente, experimenté que mi alma se había rendido y había abandonado mi cuerpo, pero gracias a la férrea voluntad de mamá, mi alma volvió a la carne y yo por fin regresé con vida. El enérgico descenso se debió a la perseverante determinación de mamá... Si no hubiera sido por su insistencia desesperada al gritar mi nombre, probablemente me habría quedado en ese otro reino. (ECM de Chenguan , sin fecha)

¡Despertad!

Tetty Pols–Visser, (Pols–Visser & Oosterhof, 2010), describió así su ECM: “Sé que estoy a las puertas y que el cielo se extiende ante mí. Frente a mí veo un camino que conduce a una gran puerta, bañada por una radiante luz dorada·. (p. 76).  Una figura masculina que vestía una larga capa marrón y una gran capucha que le ocultaba el rostro le hizo señas para que se acercara a la puerta.

Y aunque no puedo ver la expresión de su rostro ni de sus ojos, todo su ser irradia amor y confianza. Me siento segura en su presencia. Me siento reconocida. (p. 76).

Sabía que si se acercaba a la puerta, las puertas se le abrirían y podría entrar al cielo. Sabía también que ella podría estar con Dios. Ansiaba entrar. Sin embargo, de repente, a lo lejos, oyó una voz que gritaba su nombre.

Esa voz no es de la Luz. Siento que quiere alejarme de ella. Todo mi ser se resiste. (p. 76).

Sin embargo, la Luz la estaba alejando. Luchó porque había planeado quedarse. La voz se acercó. Era la voz de su esposo, Koos.

Quiere retenerme, pero ¿cómo puede hacerme esto para llamarme de vuelta? Allí nunca sentiré lo que siento aquí. No quiero oír a Koos, no quiero volver. Pero no puedo resistir la voz que me llama: «Tetty, Tetty, despierta».Arriba. Lentamente siento que me alejan de la Luz. La Luz en mí se extingue. El cielo se oculta a mi vista como si una mano invisible lo cubriera con un velo oscuro. Lo que queda es vacío y oscuridad. Empiezo a llorar. (p. 76)

Para calmar al doctor.

En su entrevista inédita conmigo, Bill Gladstone describió cómo, apoyado en el techo, observaba al médico que intentaba reanimar su cuerpo sin vida. Se encontró con seres amorosos que lo escoltaron y se lo llevaron. Aún podía oír los gritos angustiados del médico.

Me sentí bañada por seres amorosos con los que estaba conectada. No reconocí a estos seres que crearon una especie de burbuja de luz a mi alrededor. Me acompañaban en un viaje y sentí su amor y consuelo. Solo la distracción de los gritos del médico, intentando llamar la atención del cuerpo sin vida en el suelo, me impidió continuar el viaje con estos seres de luz. La preocupación del médico era el cuerpo sin vida en el suelo que no le respondía. No sentía ninguna emoción por lo que estaba ocurriendo, pero comprendí que el cuerpo sin vida era mi cuerpo, y tomé la decisión de volver a entrar en él para que el médico se calmara. Sentía que el médico era importante y quería evitar que sufriera. No pensaba en la muerte ni tenía miedo de ningún tipo.

No encaja.

Abrazando.

El regreso suele ser tan rápido que quienes experimentan una ECM no tienen tiempo de experimentarlo plenamente. Pero hay excepciones. Especialmente cuando el regreso al cuerpo parece difícil. Tras ser alcanzada por un rayo y tener su ECM, la sensación de Elizabeth Krohn de sí misma, de su ser, se expandió tanto que tuvo que ser retornada a su cuerpo con fuerza y esfuerzo. El compañero que conoció durante su ECM le dijo que solo podía ayudarla a regresar a su cuerpo abrazándola muy fuerte, «tan fuerte que sentía como si me aplastaran los huesos» (Krohn y Kripal, 2018, p. 32).

Gran Expansión.

Otra persona que tuvo una ECM describió el proceso de reencarnación de manera similar:

Así que tuve que volver a meter mi enorme cuerpo en ese pequeño cuerpo que, para entonces, estaba a medio camino de ese coche destrozado. No cabía muy bien. Me llevó seis meses sentirme cómoda. (Anónimo, 23 de septiembre de 2016)

Estacionamiento en paralelo.

A pesar de su resistencia, Kimberly Clark Sharp (2003) regresó a su cuerpo. En su libro, escribió que no se le da muy bien estacionar en paralelo y que siempre termina a metros de la acera. Asimismo, se perdió por varios metros de entrar en su cuerpo y pudo verse de lado. Se asombró al ver su cuerpo, por primera vez, desde un ángulo que nunca antes había visto.

Miré mi cuerpo, el cuerpo que tan bien conocía, y me sorprendió mi desapego. Lo que constituía el yo que conocía como yo ya no estaba allí. Mi esencia, mi consciencia, mis recuerdos, mi personalidad estaban fuera, no dentro, de esa persona de carne y hueso. (págs. 26–27)

Entonces vio a un hombre intentando resucitarla. Se inclinó sobre ella para «poner su boca en la mía». Gracias a su tacto, pudo entrar de nuevo en su cuerpo. Pero su tacto le hizo observar y experimentar tanto lo que le sucedía a ella como al completo desconocido. “Me di cuenta de que lo conocía todo emocionalmente. Podía sentir su nerviosismo e incluso su incomodidad al realizar este servicio íntimo y humano frente a una multitud boquiabierta. Pero fue su compasión, su amor por mí, una completa desconocida, lo que me guió de vuelta a mi cuerpo”. (p. 27)

Tanta pesadez.

A Carol Lynn Vengroff (2012) se le reveló que no podía permanecer en el maravilloso entorno de su ECM. Fue enviada en una misión a la Tierra, “y esa misión quedó grabada en mi corazón”. Cuando llegó el momento de regresar se preguntó cómo sería posible.

Me preguntaba cómo iban a condensar y encajar mi ser de luz de alegría, amor y satisfacción expandido por el cosmos, que ahora era yo, de nuevo en esa diminuta y microscópica mota de partícula que era mi cuerpo humano de doce años, acostado en una cama en algún lugar. En lo que pareció un instante, fui catapultada, succionada y arrastrada hacia mi cuerpo, y jalada por una abrumadora fuerza magnética y gravitacional. De repente, me sentí abrumada por una pesadez tal que estaba segura de que me asfixiaría y paralizaría. Mi espíritu, mi esencia y mi cuerpo físico volvieron a unirse. (págs. 43–44).

Lata de Coca–Cola.

Ellyn Dye (2023) se negó a regresar a su cuerpo, y unos "Seres amorosos" le dijeron que su decisión estaba bien: era su decisión. Lo último que recordaba era que le habían dicho que le mostrarían lo que podía lograr si decidía regresar.

Al instante siguiente, despertó en urgencias. Conmocionada, supo que, de alguna manera, había cambiado de opinión y había aceptado volver a su cuerpo, pero no recordaba por qué. Exclamó en voz alta: "¿Por qué estoy aquí?". Una enfermera cercana no entendió lo que quería decir y le dijo que estaba en el hospital por un accidente de coche.

Ellyn no sufrió lesiones graves por la colisión. No entendía cómo había vuelto a su cuerpo. Dijo:¡No podía comprender cómo ese Ser gigante y expansivo que YO SOY se había vuelto a meter en este pequeño cuerpo, como si intentara meter un elefante en una lata de Coca–Cola!

Prisión.

Estructura sólida.

Tienke Klein (2006) describió su regreso de su ECM: Fue muy doloroso, tanto mental como físicamente. Mientras descendía cada vez más, el amor se fue desvaneciendo y fue reemplazado por más estructuras, hasta que, ¡de golpe!, volví a caer en mi cuerpo. Y eso, por supuesto, es una estructura sólida. (Klein, 2008)

Regreso abrupto.

Lee Thornton (2014) se sintió muy lejos de la Tierra durante su ECM. En su libro escribió que se sentía como si hubiera aterrizado en otra galaxia, muy lejos de nuestra Vía Láctea. Su viaje extracorpóreo a ese lugar parecía haber sido gradual: desde el techo del hospital hacia la atmósfera, atravesando la cual se encontraba en un cielo negro y estrellado desde donde podía ver la Tierra, y pasando por muchas estrellas hasta un enorme vacío oscuro. En comparación, su viaje de regreso fue muy corto y abrupto:

Lo siguiente que supe fue que estaba de vuelta en mi cuerpo. A diferencia del largo viaje al más allá, mi regreso a la tierra fue abrupto, como la conmoción del nacimiento. (págs. 99–100)

Tras regresar a su cuerpo, se sintió extremadamente restrictivo, sobre todo comparado con la enorme libertad que había experimentado justo antes. Se sentía como una «prisionera que regresa a su celda» (p. 100).

Atrapado en carne en mal estado.

Esta niña había estado enferma con fiebre y perdió el conocimiento. Regresó a la Tierra debido a la angustia que su condición había causado a su familia. Una vez que decidió entrar en su cuerpo, se sintió horrible:

Me sentía fatal: pesada, dolorida, con frío y extremadamente triste. Me sentía como atrapada en un gran trozo de carne en mal estado. Podía ver por las cuencas de los ojos como si llevara una máscara y me sentía físicamente agobiada por mi cuerpo y separada de él. Era plenamente consciente de ser una entidad separada del cuerpo que habitaba. (Anónimo, 19 de julio de 2013)

Monumento a la Paciencia.

Esta persona que tuvo una ECM (Anónimo, 17 de abril de 2006) quedó impresionada por la magnificencia, el poder y la grandeza de la Luz. Dijo que la Luz no era humana, sino que, más bien, "tomó un tono suave".Parecía un humano para tranquilizarla. También dijo que esta Luz era una especie de "guardiana" y le había informado que no podía quedarse. Con gran paciencia, la Luz le repitió repetidamente que debía regresar. No mostró ira ni frustración. Dijo:

Era un monumento a la paciencia. Era un pilar de amor. Pero era estricto conmigo al negarme a quedarme allí, como un padre que obliga a su hijo a ir el primer día de clases a pesar de sus rabietas y llantos.

Una vez que aceptó su destino de regresar a su cuerpo, las cosas sucedieron increíblemente rápido:

Sentí literalmente cómo me desplomaba en mi cuerpo y recuerdo haber visto mi cuerpo en la cama justo antes de volver a caer. Estaba tan eufórica y encantada con mi experiencia, y a la vez tan enojada por estar de vuelta en este plano de existencia restringido, limitado y difícil.

Mencionó que se irrita y frustra fácilmente por tener que volver a vivir en un cuerpo. Llama a su cuerpo «una prisión (triste, pero cierto)».

Precio pequeño.

Esta persona que tuvo una ECM describió el regreso al cuerpo como: Sorprendente y revelador a la vez. Al reincorporarme a mi cuerpo, me di cuenta de que es muy incómodo "vivir" en un cuerpo. Un efecto secundario de este tipo de vida. Inmediatamente sentí una especie de dolor. Como si me encerraran en un caparazón diminuto. No era doloroso, pero sí perceptible. Y, sin duda, me causaba dolor.Pero, inmediatamente después de sentir el dolor y superar la conmoción que lo acompañó, me di cuenta de que es simplemente una parte aceptable, aunque incómoda, de esta existencia. Y te dice, de una forma extraña, que todos los dolores y las penas de la vida no son nada comparados con la inmensa e inimaginable alegría y calidez que puedes obtener de ella. Que esos dolores y penas son un pequeño precio a pagar. Que, al final, vale la pena.

Entonces, recordando a Nancy Rynes, cuyo extracto de ECM abre el Capítulo 10, esta persona que tuvo una ECM concluyó que debemos confiar en que, antes de nacer, habíamos decidido que queríamos este tipo de vida, incluso si no podemos recordar por qué la elegimos (Anónimo, 28 de noviembre de 2003, 10:36 a. m.).

Capítulo 12. Efectos secundarios.

Para la mayoría de las personas que han tenido una ECM, la experiencia es profunda, y prácticamente todos experimentan un cambio; en muchos casos, una transformación completa. Para casi todos, existe una clara diferencia entre la vida antes y después de la ECM. También pueden pasar años antes de que la persona haya integrado plenamente la experiencia en su vida. No se debe solo a que en la Tierra no puedan encontrar la libertad y el amor incondicional que experimentaron en ese otro mundo . Es más que eso: comprenden que el dinero, el poder y el estatus no son importantes; que mucho más importante es su contacto con otras personas, animales y la naturaleza. Después de todo, han visto y sentido que todos estamos estrechamente conectados; de hecho, somos uno con toda la existencia.

A veces, la sensación de separación de ese otro mundo es tan fuerte que ya no quieren estar en la Tierra. La separación duele. Duele mucho. De hecho, sienten una profunda nostalgia.

Los cambios en las personas que han tenido una ECM no solo las afectan a ellas mismas, sino también a sus seres queridos y a otras personas cercanas. A menudo, otras personas dejan de reconocerlas y, como resultado, las amistades cambian, las afiliaciones a organizaciones cambian, las carreras profesionales toman un rumbo completamente diferente y los matrimonios terminan.

Las secuelas de las ECM son diversas, pero tenga en cuenta que no todas las personas que las experimentan las presentan todas. Algunas ya se han mencionado, como la disminución del interés propio y mayor deseo de servir a los demás y a la naturaleza. También se ha mencionado la depresión.

Quizás el efecto secundario más frecuente e importante es que quienes han tenido una ECM generalmente pierden el miedo a la muerte. También es sorprendente que se vuelvan mucho más sensibles. El sonido y la luz pueden resultar abrumadores, lo que lleva a algunos a evitar las grandes multitudes. Es posible que necesiten menos medicación para obtener el mismo efecto. Las cualidades psíquicas y mediúmnicas de quienes han tenido una ECM también suelen aumentar. Esto se debe a que la puerta al otro lado de la vida no se ha cerrado del todo. Aunque la grieta no es lo suficientemente grande como para regresar a ese hermoso lugar, sí lo es para mantener el contacto con él. A veces, esta conexión aumenta su potencial de sanación. Este capítulo ofrece algunos ejemplos extraordinarios de autocuración.

También es sorprendente que quienes experimentan ECM generalmente se vuelvan menos religiosos, pero mucho más espirituales. Y luego hay algunas secuelas muy extrañas, como interferencias con dispositivos y electrodomésticos.

Sin miedo a la muerte.

Otra dimensión.

El otro efecto muy importante de la ECM fue que cambió mi perspectiva sobre la muerte y el más allá, eliminando mi miedo a lo desconocido sobre lo que sucede después de morir. Me convenció de que la vida no deja de existir cuando el cuerpo muere; de que tenemos un alma conectada a una consciencia superior que continúa viviendo en forma espiritual en otra dimensión, un reino donde existe una inteligencia superior de amor incondicional. (Anónimo [Lee Thornton], 17 de junio de 2013)

Más tolerancia.

Desde esa experiencia, mi mente y mi alma son más importantes para mí que mi cuerpo. Algunos dicen que tengo un efecto sanador en ellos. Ahora siento que me llevo mejor con la gente y soy más tolerante con ellos. Puedo comprender mejor sus sentimientos y lo que les sucede. Esta experiencia ha cambiado mi vida y mi forma de pensar. Ya no le temo a la muerte, como ya experimenté una vez. (ECM de Arshan , 1996)

La naturaleza y otras personas.

Mucho más complejo.

Como resultado de mi experiencia, mi comprensión de la naturaleza del universo ha cambiado por completo. Ahora tengo claro que el mundo físico que experimentamos forma parte de algo mucho más complejo, con facetas que nunca antes habría creído posibles. Me interesé mucho más por estar en la naturaleza y por hablar y conectar con otras personas. (Anónimo, 19 de abril de 2020)

Las emociones de las personas.

Desde entonces, siento una mayor consciencia de las emociones de los demás, o siento con mayor intensidad el impacto de sus sentimientos. (Anónimo, 17 de abril de 2006)

Los animales me siguen a casa.

Esta persona que tuvo una ECM infantil (Anónimo, 19 de julio de 2013) informó que tiene "relaciones muy únicas y cercanas con los animales". También dijo que en una ocasión "le pidieron que saliera del zoológico porque todos los animales con los que me cruzaba se acercaron a pararse frente a mí en sus recintos. Muchos“Se presionaron contra los barrotes o el vidrio y trataron de tocarme”.

Las personas que han tenido una ECM suelen reportar que se sienten atraídas por ellas sin ningún motivo en particular, e incluso desconocidos se acercan a ellas. Ese fue el caso de esta persona que tuvo una ECM en su infancia:

Personas y animales incluso me han seguido a casa sin ninguna razón aparente, salvo para estar conmigo. Me he acostumbrado a este comportamiento y ya no lo cuestiono. Además, parece que tengo mucha mano para las plantas, y plantas que los floristas han declarado muertas cobran vida para mí. Simplemente parece que sé intuitivamente qué hacer. (Anónimo, 19 de julio de 2013)

El AHORA.

En mi entrevista inédita con Johan Verhage, me contó que tuvo su ECM mientras luchaba contra una neumonía grave. Estaba en cama en casa cuando, en un momento dado, dejó de respirar. Quedó en shock, pero no entró en pánico. Se hundió silenciosamente en la inconsciencia. De repente, sintió que su alma y su energía se desprendían de su cuerpo, e inmediatamente después se encontró en un túnel con una luz brillante de color azul blanquecino al final, que lo atrajo con fuerza. Dijo que emanaba un amor y una serenidad que no conocemos en la Tierra.

A lo lejos, vi dos sombras de pie frente a la luz. Al acercarme, vi que eran mis abuelos fallecidos. Feliz de verme, mi abuela me extendió los brazos con una sonrisa dichosa, como si me dijera: «Ven aquí». Pero justo antes del reencuentro mi abuelo saltó frente a mí y, con una mirada severa y penetrante, el brazo extendido y un dedo meneando, me señaló hacia atrás. No hubo palabras, [pero el mensaje fue claro]: “¡Retrocedan, aún no han terminado y aún tienen cosas que resolver en la Tierra!”

La ECM de Johan tuvo pocos componentes, como una experiencia extracorpórea, una sensación de felicidad, un túnel y familiares fallecidos. Entre los componentes ausentes se encontraban una conversación sustancial, una revisión de su vida y visiones del mundo más allá del túnel. Sin embargo, esta ECM tuvo un gran impacto en Johan. Una ECM no tiene que ser profunda para dejar una huella profunda, duradera e incluso transformadora en quien la experimenta.

Johan dijo que mucho ha cambiado en su vida y que se siente como si hubiera "nacido de nuevo". Ve el mundo con otros ojos. Por ejemplo, las cosas materiales le dan menos importancia; intenta ser más cariñoso y tratar a todos con más respeto. Ha empezado a vivir más desde sus sentimientos que desde su mente. Vive en el "AHORA", escrito con mayúsculas.

Descubrió que las personas desinteresadas en la espiritualidad no lo comprenden bien. Al mismo tiempo, descubrió que, gracias a su enorme crecimiento interior, ha conocido a personas completamente diferentes con las que conecta de una forma que no habría tenido antes de su ECM.

Deprimido.

Deseo de estar en casa.

Regresar a su cuerpo después de una ECM y adaptarse a una vida sin el amor total de la Luz es extremadamente difícil para muchas personas que han tenido una ECM. Algunas incluso consideran que el suicidio les permite regresar, como fue el caso de Rachel Finch. Pero, afortunadamente tanto para ellas como para nosotros, logran superar este período tan difícil.

Mi espíritu tardó más en recuperarse que mi cuerpo, aunque eso en sí mismo fue mucho tiempo. Estuve muy deprimida durante muchos años y a menudo lidiaba con pensamientos suicidas porque el deseo de estar en casa era tan grande. Estuve confundida durante mucho tiempo. Tenía miedo. Estar en un cuerpo me resultaba doloroso, restrictivo y limitante. Todavía me siento muy incómoda con ello; sin embargo, he aprendido a amar y agradecer mi vida y mi aliento. Nunca he olvidado un solo momento de [mi experiencia] y dudo que lo haga alguna vez. Me llevó tiempo, pero permití que me transformara de la manera más hermosa, y cada día intento vivir y amar como fui amada en esos momentos tan sagrados. (Anónimo, 10 de junio de 2019)

Rachel describió en verso el dolor que sintió al procesar su regreso a la Tierra:

El tiempo que paso recuperándose es deforme. Soy un cordero en forma de león. Estoy enjaulado como una supernova. Soy una niebla, corpórea y encadenada, lista para despojarse de esta piel y de cada capa que se despega y vuelve a su estado original. sin saberlo. (Finch, 2019, pág. 78)

Cada hora, o incluso más.

Christina, que sobrevivió a un secuestro y estuvo a punto de ahogarse cuando tenía ocho años, sufrió varias secuelas de una ECM. Inmediatamente después de ser reanimada por su padre, se sintió profundamente deprimida, casi con ganas de suicidarse. Esto se debió a que regresaba a la Tierra desde un lugar que consideraba su hogar. Me contó que todavía piensa en su ECM a diario, a menudo varias veces al día. Otras secuelas incluyen habilidades que adquirió, como la telepatía, la visión de auras y la capacidad de sanar a las personas. (Anónimo, 18 de noviembre de 2012).

Habilidades psíquicas y mediúmnicas.

Ver espíritus.

Christina no es la única que ha adquirido habilidades psíquicas tras su ECM. Jane Bannister también reportó dicha capacidad, aunque en su caso fue temporal: Esta experiencia me dejó una extraña capacidad psíquica, y durante unos seis meses fui clarividente casi constantemente y vi guías espirituales. Era como si la barrera entre ambos mundos se hubiera abierto en lugar de cerrarse. (Anónimo, 20 de diciembre de 2010, 16:40)

Accidente en una carretera.

Tras su ECM (2021), Catja de Rijk descubrió que había cambiado más que solo su visión del mundo, sus amistades y la naturaleza. Descubrió que ella también se había vuelto psíquica. Podía ver cosas que otras personas no podían ver. En su libro, ofreció varios ejemplos.

Un domingo, presentía que ese día habría un accidente de coche en una autopista específica del centro de los Países Bajos. Cuando el accidente ocurrió, la impactó profundamente por dos razones.

Por supuesto, la primera razón fue que se trató de un accidente muy grave con tres víctimas mortales, incluyendo la muerte de un conocido actor holandés. La segunda razón fue que le proporcionó una clara evidencia de que poseía habilidades psíquicas y podía ver el futuro.

Más tarde, hubo otros ejemplos de “ver” el futuro, incluido el ataque terrorista en Bruselas en marzo de 2016. Afortunadamente, no solo podía ver este tipo de sucesos graves, sino que también podía brindar información personal útil, como decirle a alguien exactamente dónde, en un gran cobertizo lleno de chatarra, podría encontrar las escrituras de propiedad de un pequeño avión (págs. 109–122).

Accidente aéreo en el río Hudson.

Algunas secuelas notables se describen en el libro de Elizabeth Krohn y Jeffrey Kripal (2018, pp. 83–93), Changed in a Flash . Tras ser alcanzada por un rayo, Elizabeth tuvo una ECM extensa. En la vida terrenal, solo había estado inconsciente unos minutos, pero sentía que había permanecido en ese otro mundo durante dos semanas.

Algunas de las secuelas sobre las que escribió las experimentan muchas personas que han tenido una ECM. Por ejemplo, experimentó interferencias eléctricas, en las que equipos eléctricos como relojes, teléfonos celulares y computadoras fallan cerca de la persona, especialmente cuando se encuentra bajo tensión emocional. Pero aún más sorprendentes fueron los sueños predictivos que experimentaba con regularidad.

Muchos de ellos están bien documentados. Al principio, no era así. Descubrió que nadie le creía cuando tenía sueños predictivos, porque no se podía determinar con precisión la hora del sueño. Por lo tanto, inmediatamente después de un sueño predictivo, se escribía un correo electrónico describiendo todos los detalles. Al enviarlo, se le marcaba la hora automáticamente, lo que le demostraba que ya conocía los hechos de antemano.

En su libro, dio algunos ejemplos. En enero de 2009, se envió un correo electrónico con información sobre un accidente aéreo en el río Hudson, Nueva York, en el que vio a todos los pasajeros de pie sobre las alas del avión.En el correo electrónico se decía que habían pasado más de 7 horas antes de que un avión de United Airlines volara a través de una bandada de gansos y tuviera que hacer un aterrizaje de emergencia en el río.

También describió cómo, en marzo de 2011, vio un terremoto en Japón y un tsunami que destruyó la planta nuclear de Fukushima.

Lo especial de estos sueños predictivos es que aparentemente ha conservado la capacidad que le brindó la ECM para ver a través del tiempo. Al parecer, la puerta al otro lado sigue entreabierta, y Elizabeth puede seguir mirando por la grieta. Aunque otras personas que han tenido ECM también han reportado este efecto secundario de poder ver a través del tiempo hacia el futuro, el caso de Elizabeth, que involucró sueños predictivos muy específicos, fue nuevo para mí.

Puntos sensibles.

Otra persona que experimentó una ECM y reportó secuelas psíquicas fue Dannion Brinkley (2008, pp. 117–132), quien, al igual que Elizabeth Krohn, tuvo su ECM tras ser alcanzado por un rayo. Tras su ECM, descubrió que podía leer la mente de las personas. Y más tarde descubrió que, al tocar a las personas, podía ver lo que él llama una "película casera" con imágenes de su situación familiar. Podía presenciar discusiones entre familiares o colegas, o ver el sufrimiento experimentado por la persona que había tocado. A veces, al recoger un objeto perteneciente a otra persona, veía sus circunstancias vitales o la historia del objeto en sí.

Entre los ejemplos que proporcionó en su libro se encontraba la lectura de mentes. Durante una reunión de negocios con noruegos, entendió lo que hablaban en su idioma, aunque no hablaba noruego. Un ejemplo de una "película casera" fue cuando cerró un trato con un hombre que le compró un auto. En el momento en que cerraron el trato y se dieron la mano, le mostraron a Dannion la casa del comprador. Situación: Sus hijos le obligaban a vender su casa y darles el dinero.

Este tipo de secuelas psíquicas, esta capacidad psíquica, no se limita a las personas alcanzadas por un rayo. Les sucede a muchas personas que han tenido ECM en mayor o menor medida.

Cuando quienes han tenido una ECM no controlan esta capacidad psíquica, este rasgo les resulta bastante molesto. De hecho, Dannion lo confesó al admitir que le han dado acceso a «los puntos más sensibles de una persona, las áreas de su vida que están más ocultas a la vista del público» (p. 128).

Aunque a veces considera su don como una carga, la conclusión de su historia debe ser que también le ha permitido ayudar a muchas personas. Esto también se aplica a las muchas otras personas que han tenido una ECM con dones similares.

Burbujas amarillas.

Holden, Foster y Kinsey (2014) han investigado las llamadas experiencias mediúmnicas espontáneas , en las que, tras una ECM, la persona que la ha experimentado experimenta psíquicamente la visita inesperada de una persona fallecida que le pide que transmita un mensaje a otra persona viva. Los autores descubrieron que al menos algunas personas que nunca habían tenido tales visitas antes de su ECM sí las tuvieron posteriormente. En su artículo, presentaron varios ejemplos interesantes.

En un ejemplo, una persona que tuvo una ECM estaba hablando por teléfono con su hermana, cuyo esposo había fallecido (ECM de Romona B). De repente, su campo de visión se volvió amarillo, "como si alguien pusiera una hoja amarilla delante de mis ojos", y luego volvió a los colores normales, pero se llenó de burbujas. Esto sucedió una y otra vez, y entonces escuchó una voz que repetía: "Dile, dile". La voz era tan fuerte que finalmente cedió y le contó a su hermana lo que veía: burbujas amarillas. La hermana reaccionó con gran alegría, porque "burbujas amarillas" era el secreto de su difunto esposo y el suyo.Contraseña. Antes de su fallecimiento, habían hecho un pacto: como prueba de una vida después de la muerte, quien muriera primero encontraría la manera de transmitir la contraseña a su pareja sobreviviente.

Autosanación.

Redirigir el flujo sanguíneo.

Algunas personas que han tenido una ECM tienen la capacidad de sanar a otros o a sí mismas. Una persona que tuvo una ECM (Anónimo, 25 de marzo de 2004, 21:14) tenía tres costillas rotas y contusiones en los riñones, el bazo y el hígado. Tenía una hemorragia interna, y los médicos no estaban seguros de dónde. Dijo que iba a sanarse conscientemente. Podía sentir exactamente qué le pasaba en el cuerpo y dónde.

Pude redirigir el flujo sanguíneo y los nutrientes a las zonas que lo necesitaban y alejarlos de las que sangraban. Pude regenerar mi carne y mis huesos. Cuando me hicieron una tomografía computarizada, los técnicos me hicieron otra porque los resultados eran muy extraños. No había daño cerebral alguno, lo cual se consideraba imposible dada la gravedad de mis lesiones y el tiempo que mi cerebro había estado sin oxígeno mientras estaba clínicamente muerto.

Se despertó en medio de la noche y se dio cuenta de que su médico estaba sentado en una silla en su habitación. Se sorprendió y pensó que el médico estaba allí, mostrando preocupación. Por eso le dijo que estaba bien y que haría mejor en atender a alguien que lo necesitaba más. El médico respondió:

Lo sé, pero lo que te está pasando es increíble. Deberías estar muerto. No puedo darle la espalda a un milagro. Dios me está dando la oportunidad de presenciar esto, yNo puedo irme. Más tarde me enteré de que su hija había tenido un accidente de coche y tenía lesiones similares. Había estado cuestionando a Dios y creía que lo que me estaba sucediendo ante sus ojos era la respuesta de Dios: que seguía aquí.

¿Quién cuidaría de mi hijo?

Noël de Waele se encontraba en una situación particularmente difícil (Coppes, 2021/2022). Su matrimonio estaba prácticamente destruido. Su esposa se ausentaba con frecuencia, a veces durante días y semanas, sin que nadie supiera dónde estaba. En una ocasión, se llevó el coche junto con los ahorros para la educación de su hijo Maurice. Además, sufría fuertes cambios de humor, probablemente debido a un trastorno límite de la personalidad. En consecuencia, se encontraba en constante tensión y, a pesar de estar prácticamente solo al cuidado de su hijo de 12 años, le aterrorizaba que su esposa o sus suegros intentaran obtener la custodia de Maurice y se lo llevaran.

Años de estrés le pasaron factura. Llegó a un punto en que su salud se deterioró tanto que cada mañana le costaba mucho moverse y levantarse de la cama. Parecía un anciano en lugar de un padre joven.

Fue al médico, quien le hizo un análisis de sangre a Noël. Unos días después, el médico fue a su casa con los resultados. Los valores de sangre eran tan bajos que dijo: «Me sorprende que sigas vivo». Quería llamar a una ambulancia de inmediato y hospitalizar a Noël de inmediato. Pero Noël se resistió con fuerza: «¿Quién cuidará de mi hijo entonces?».

El médico le recetó un medicamento y dijo que si Noël no mejoraba después del fin de semana, tendría que ir al hospital.

Debido a su crisis psicológica y física, ese fin de semana Noël tuvo su ECM. En ella, se encontró con su difunta hermana, quien le dijo que no podía quedarse porque tenía una tarea que hacer. También le dijo que todo iría bien y que no se preocupara, porque Maurice se quedaría con él.

Cuando volvió en sí, estaba inmensamente feliz. Sintió que debía cambiar, y eso le dio un impulso. Mientras aún estaba en cama, sintió que mejoraba. Y cuando intentó levantarse, notó que no había problema alguno. Se sintió renovado. Había recuperado la energía. Fue gracias al mensaje tranquilizador y a su tarea. No sabía realmente cuál era, pero sin duda tenía una. Eso también le dio la energía para continuar.

Aunque no había tocado la medicina, después del fin de semana llamó al médico y le dijo que no necesitaba hacer nada más porque la medicina había hecho efecto. Sabía que el mensaje de su hermana era cierto y que estaba mejor. Y, efectivamente, no le arrebataron a su hijo.

Los médicos realizaron pruebas una y otra vez.

Después de que Anita Moorjani (2012) hablara con su padre fallecido durante su ECM, llegó a una frontera. Su padre le dijo que si la cruzaba, no podría regresar a la Tierra. Vio las consecuencias de su decisión si lo hacía, como una profunda tristeza en su familia.

Comprendió que cualquiera de las dos decisiones estaba bien. Podía cruzar la frontera o regresar. Comprendió que, si regresaba, su cuerpo pronto se recuperaría del cáncer, porque se adaptaría a su estado interior, modificado por la ECM.

Decidió regresar. A partir de ese momento, su cuerpo se curó milagrosamente y rápidamente. En dos días pudo comer sola, en tres días los tumores se habían reducido considerablemente y, a los cinco días, pudo salir de la UCI.

Durante una presentación para IANDS (Moorjani, nd), dijo que los médicos estaban tan sorprendidos que realizaron pruebas una y otra vez.Una y otra vez, porque no creían lo que veían. Era como si estuvieran haciéndose pruebas con la esperanza de encontrar cáncer en alguna parte.

Sanando a otros.

Mientras que algunas personas que han tenido una ECM informan haber sido sanadas durante su ECM, muchas han desarrollado la capacidad de sanar a otros después de su ECM. Tomemos el ejemplo de Anna Best, con quien realicé una entrevista inédita. El primer cambio importante que notó después de su ECM fue que ya no le temía a la muerte. Su sentido de Dios también se volvió universal; dijo que «los muros de la iglesia empezaron a oprimirme».

También dijo que su sensibilidad innata se fortaleció cada vez más. Sin embargo, relató: «Como no sabía qué hacer con ella, me ocupé de todo tipo de asuntos terrenales. La crianza de los hijos también me exigía mucho tiempo y atención».

Sin embargo, no podía seguir negando su creciente sensibilidad. Tras muchos problemas de salud, las personas adecuadas se cruzaron en su camino; personas que la animaron a dejar de negar su conexión abierta con el más allá. Se formó como sanadora psíquica y desde entonces ha tratado a muchas personas con éxito. Sobre esta capacidad, dijo:

Al tratar a las personas experimento que, al conectar con ellas, me encuentro en un nivel de consciencia diferente. Me conecto con la Luz y entonces estoy en ella. La Luz Cósmica y Divina, que envuelve y protege a todos, y ayuda a las personas a liberarse de emociones limitantes y bloqueos para sanar a nivel del alma, me ayuda a realizar mi trabajo. Me siento afortunada de saberme rodeada de esta Luz Divina y sanadora, y de experimentar que en esta Tierra estoy conectada en amor con todos los seres vivos y con todo lo que crece y florece.

Electricidad.

Microonda.

Los sueños predictivos de Elizabeth Krohn (Krohn y Kripal, 2018), se describen justo arriba, pero sus otras secuelas son igual de notables. Al igual que otras personas que han tenido ECM con secuelas electromagnéticas, Elizabeth no puede usar relojes de pilas, ya que las pilas se agotan casi al instante y los relojes se paran. A veces se queman las luces cuando pasa, y los tapones para los oídos del iPhone siempre le resultan muy dolorosos. También detesta el microondas (p. 98).

Las farolas se apagan.

Una de las personas que tuvo una ECM en el libro de Liz Dale (2008) informó: “Al salir del hospital, cada sonido era insoportablemente fuerte. La luz del día, incluso cuando estaba nublado, era cegadora y me dolía los ojos. Incluso ahora, años después, no soporto las luces brillantes en casa, en los supermercados ni en las tiendas. No pude hablar durante más de dos semanas después de salir del hospital. Tenía grandes dificultades para caminar, escribir, comer y dormir. No soportaba la televisión, la violencia, la radio ni las películas. Sentía constantemente cariño y amor. A veces, siento como si una descarga o un rayo me atravesara en un instante. Durante más de dos años, cada vez que usaba un reloj, dejaba de funcionar... Si pasaba bajo una farola, se apagaba. Los niños me rogaban que corriera de un extremo a otro de la calle; sabían que si lo hacía, cada farola se apagaría al pasar por debajo de ellas. Si me acercaba a una computadora, se estropeaba o dejaba de funcionar. Todo y todos se volvieron preciosos para mí. Todo miedo me abandonó”. (págs. 119–120).

Menos religioso, más espiritual.

No es el punto final.

Tras su experiencia, aunque algunas personas que han tenido una ECM siguen involucradas o incluso se involucran más en la religión organizada, la mayoría se aleja de la religión en la que crecieron. A veces se interesan por lo que dicen otras religiones sin comprometerse con ninguna. Su visión de la religión se amplía. De hecho, se puede decir que, tras su experiencia, suelen volverse menos religiosos, pero más espirituales. Este fue el caso de un niño de 14 años que tuvo su ECM durante su experiencia de casi ahogamiento en un campamento de Boy Scouts. Había sido criado como católico y asistía a una escuela donde preparaban a niños para ser sacerdotes.

La religión, cualquier religión, ya no me importaba. Ya no veía la iglesia como el fin, sino como un vehículo que algunos usan para llegar a su fin. (Anónimo, 4 de marzo de 2004, 20:58)

No hay monopolio en el cielo.

Un musulmán que tuvo una ECM dijo que Dios ha dado al hombre muchos caminos para llegar a él, y nadie tiene el monopolio del Cielo. También dijo que_ He cambiado poco a poco a lo largo de los años desde mi ECM. Soy más despreocupado, indulgente y humilde, y me encanta la diversidad. ECM de Caan S , sin fecha)

Talentos excepcionales.

Rockero, no amante del piano.

Tras su experiencia, algunas personas que han tenido una ECM desarrollan nuevas habilidades, como desarrollar habilidades artísticas o adquirir destreza con las plantas. Sin embargo, también existen informes de talentos excepcionales.

Tony Cicoria (sf), cirujano ortopédico y amante de las motocicletas, estaba un día al aire libre hablando por teléfono con su madre cuando le cayó un rayo. En su ECM, se encontró con una luz brillante y maravillosa y sintió una paz absoluta. Cuando empezó a disfrutar de su situación, de repente regresó, aún no en su cuerpo, pero casi. Notó que alguien le practicaba RCP, es decir, reanimación cardiopulmonar, y le pidió que parara aunque, por supuesto, la persona que se la hacía no pudo oírlo. Le suplicó a Dios o a quienquiera que estuviera al otro lado que lo dejara quedarse. Pero sobrevivió.

Aunque nunca en su vida se había interesado por la música de piano (siempre había sido más rockero que amante del piano), varias semanas después de su ECM sintió un deseo urgente de escuchar piano clásico. Cedió al impulso y compró algunas grabaciones de piano. Luego, por pura coincidencia (o algunos dirían sincronicidad), una de sus niñeras necesitaba un lugar para guardar un piano. Eso realmente lo motivó. Compró algunos libros sobre cómo tocar el piano, y tocar se convirtió en una obsesión. Luego tomó lecciones y practicó durante muchas horas (a veces seis horas al día) y se volvió muy bueno en eso. Finalmente, comenzó a escribir música para piano y ahora ha escrito e interpretado varias obras importantes, como su “Sonata del Relámpago” . Cree que esta música es la razón por la que se le permitió regresar a la vida terrenal. (Cicoria, sin fecha).

Teoría cuántica.

Con 33 años, Tom Sawyer era mecánico y estaba debajo de su camioneta trabajando para repararla. Cuando el vehículo se cayó del gato elevador le aplastó el pecho, sacándole todo el aire de los pulmones. Tuvo su ECM sintiéndose completamente despierto, sin noción del tiempo y viajando a la velocidad de la luz a través de un túnel hacia el infinito. La luz que encontró era más perfecta que cualquier cosa que hubiera conocido antes. Esta Luz de amor incondicional le transmitió mensajes importantes a Tom. Contenía todo el conocimiento, y comprendió que cualquier pregunta que hiciera recibiría respuesta instantánea. Así que se hizo muchas preguntas. Hizo una revisión completa de su vida, en la que experimentó todo desde la perspectiva de todas las personas con las que había interactuado. Aprendió que el infierno no existía y que el Dios que experimentó era un Dios verdaderamente amoroso. Tuvo la opción de quedarse y ser parte de la Luz o regresar a su vida terrenal. Comprendió que si se quedaba, «dejaría de funcionar con normalidad, dejaría de ser yo mismo, sería una parte integral de la Luz. Sería luz» (Sawyer, sin fecha).

Aunque su ECM fue interesante en sí misma, posteriormente descubrió que había retenido fragmentos de información. Tenía presentes a físicos importantes: Max Planck, Niels Bohr y Albert Einstein. Empezó a interesarse mucho por la física y escribió sus pensamientos. Cuando encontró un libro sobre Max Planck, el creador de la teoría cuántica, encontró algunas de las ecuaciones que él mismo había escrito previamente.

Otros efectos secundarios.

Problemas de matemáticas.

Era pleno verano, en un coche caluroso y sin aire acondicionado. Una niña de nueve años viajaba con sus padres cuando sufrió un ataque y dejó de respirar. Entonces se encontró en un lugar parecido a una cueva. No estaba de pie, sino flotando. Era muy incómodo y la joven se sintió confundida, asustada y muy preocupada. Todo terminó bien cuando vio una luz brillante. Tuvo que regresar a su cuerpo.

Después de unos meses empezó a percibir sonidos y voces en su cabeza. Dijo: “No sé quién era, pero me ayudaba con mis problemas de matemáticas en la escuela. Los sonidos no me dejaban dormir por la noche. Tenía mucho miedo, y nadie me creía. Rogué a la voz que dejara de hablar, y lo hizo. Ahora me arrepiento, pero ya es demasiado tarde”. (ECM de Samieh , sin fecha)

Patio.

Además de relatar su curación milagrosa, Noël de Waele describió otros efectos posteriores: “Ya no soporto las multitudes, los gritos ni la excesiva cantidad de gente a mi alrededor. Por ejemplo, nunca paso por delante de un patio de recreo. Mi criterio también ha cambiado. Observo y ya no juzgo, porque sé que siempre hay una razón por la que la gente hace lo que hace”. (Coppes, 2021/2022, p. 25).

Capítulo 13. Conclusión.

Espero que todas las citas les hayan dado una buena impresión de las ECM. Mi intención era que fueran como pinceladas en una pintura impresionista. Les dejo la libertad de crear su imagen y disfrutarla. Y realmente espero que lo hagan, porque, basándome en todas las citas, he creado para mí una imagen maravillosa de nuestro mundo y de nuestra vida después de la muerte, y disfruto viéndola.

¿Qué significan las citas para mí? En esencia, la conclusión preliminar a la que llegué después de tantos años de reunirme con personas que han tenido ECM, leer sobre sus experiencias y estudiarlas, es breve:

Hay un número cada vez mayor de estas experiencias extraordinarias, y la mayoría han tenido un profundo impacto en quienes las han vivido. Por lo tanto, debe haber algo en ellas. No pueden simplemente ignorarse.

Lo notable es que un subconjunto de estas ECM consiste en las llamadas observaciones verídicas. Son observaciones que quienes han tenido ECM realizaron y que posteriormente fueron verificadas de forma independiente; observaciones que solo podrían haber hecho si su consciencia estuviera realmente fuera de sus cuerpos. Al igual que el número de ECM, el de estas observaciones verídicas está creciendo rápidamente. Parecen proporcionar evidencia circunstancial de que nuestra consciencia puede existir separada de nuestro cuerpo. Si tal es el caso, entonces podemos concluir que las ECM no solo son extraordinarias sino también reales y, de ser así, entonces la humanidad necesita prestar atención a sus importantes mensajes. En mi opinión, hay dos.

El primero es que el Amor es lo más importante que existe, y que el Amor Incondicional nos espera cuando nuestro cuerpo muera y nuestra consciencia se libere. Ese Amor Incondicional parece tomar la forma de la Luz que se menciona tan a menudo en las ECM. Este Amor y esta Luz son incondicionales, y están ahí para todos. Sin excepciones, ni una sola: de lo contrario no sería incondicional.

El segundo mensaje es que estamos profundamente interconectados entre nosotros, con los animales, con la naturaleza y, de hecho, con todo lo que existe, incluso con rocas y piedras. Sin embargo, si analizamos con más detalle lo que dicen muchas personas que han tenido ECM, la conclusión podría ser más radical que esta simple interconexión. Probablemente debería ser que, vistos desde otra dimensión, todos somos UNO. El amor es lo que parece unirnos, y el amor y la luz más puros y perfectos es lo que todos llevamos dentro: el Amor y la Luz divinos. Lo que necesitamos hacer es expresar esta divinidad que reside en cada uno de nosotros.

Creo que si suficientes personas fueran conscientes de que todo está profundamente conectado y de que el amor es lo más importante, la humanidad podría realmente dar el siguiente paso. Una especie de paraíso en la Tierra estaría entonces a nuestro alcance.

Parece apropiado que le dé la última palabra de esta obra impresionista a un ECM: La sensación abrumadora que recibí fueron mensajes de alegría y euforia de que todo estaría bien para todos en el mundo. (Anónimo, 19 de abril de 2020)

 

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Acerca del autor

Robert Christopher Coppes tiene doctorado en economía y trabajó durante muchos años en la Universidad de Groningen (Países Bajos) y en el sector bancario. Bob ocupó un puesto comercial en un banco francés y posteriormente un puesto de supervisión en el Banco Central Holandés. Recientemente se jubiló para dedicarse a escribir y dar conferencias.

Su convicción de que las experiencias cercanas a la muerte son verdaderas experiencias espirituales se remonta a 1979, cuando leyó el libro de Raymond Moody de 1975,  Life After Life . En 2006, escribió un libro que se publicó solo en los Países Bajos en el que comparó las esencias de las ECM con las de cinco religiones del mundo. Este libro se tradujo al inglés y se publicó en los EE. UU. en 2013 como The Essence of Religions. Su primer libro en los  Estados Unidos de Norteamérica, titulado Messages From the Light, se publicó en 2011. También se tradujo al holandés y al alemán. El mensaje que obtuvo de sus numerosas entrevistas con personas que experimentaron ECM es que la crisis financiera de 2008 fue consecuencia del enfoque de las personas en el interés propio a corto plazo. Sería más beneficioso si cambiáramos nuestro enfoque hacia "nuestro interés" a largo plazo.

Además, visite sus sitios web (www.bobcoppes.com o www.nde–unconditionallove.com)